Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 13

Capitulo 3: Cena En La Ciudad Del Castillo

Parte 3

Después de cortar el gigo con forma de ñame en rodajas rectangulares, lo adorné con una salsa hecha con el kiki seco al estilo ciruela. Luego mezclé el aceite tau y el caldo de sopa para reemplazar el dashi, la salsa de soja, el mirin y la mezcla de azúcar.

“Ese parece ser un plato bastante simple”, dijo Marstein, lo que hizo que Timalo me disparara una sonrisa. “Pero yo diría que es un plato maravilloso para mostrar los estilos de vida honestos y sencillos de la gente del borde del bosque”.

“Ah gracias.”

No tenía idea de cuánto necesitaba humillarme en un evento tan formal, así que finalmente mantuve mis palabras al mínimo. Aun así, me sentí más que un poco incómodo, considerando que el plato fue preparado al estilo del Restaurante Tsurumi en lugar del borde del bosque.

Ñame con dip de ciruela en escabeche… A nuestros clientes que bebían mucho les encantó, y también a mi viejo, pero ¿cómo lo recibirán aquí?

Mientras repartíamos nuestros platos para los invitados, los asistentes llenaron sus copas con vino de frutas. E incluso ante las miradas intimidantes de los cazadores, las mujeres se mantuvieron corteses e inexpresivas. Ciertamente parecían tener más agallas que Polarth o el joven señor de la casa de Saturas.

En cualquier caso, para cuando se llenaron las tazas de todos, mi plato y el de Timalo habían terminado por completo.

“Bueno, entonces comamos.”

Aparentemente, el lado noble no tenía ningún ritual previo a la comida. Y así, mientras los cazadores del borde del bosque recitaban sus palabras de gratitud, el otro lado agarró sus cucharas de metal.

“Ah, qué sabor tan maravilloso”, elogió Marstein mientras comenzaba con el aperitivo de Timalo. “El sabor del ramanpa es realmente magnífico. Su naturaleza aromática se combina exquisitamente con los huevos de totos”.

“Me siento honrado de saber que es de su gusto”, respondió Timalo con una sonrisa de satisfacción.

Casi todos los nobles parecían empezar con el plato de Timalo.

La única excepción fue Lefreya, quien agarró el plato con mi comida y dijo en voz baja: “Asuta del clan Fa. Este plato parece de alguna manera resbaladizo, como si se fuera a resbalar de las cucharas de todos”.

“Ah, mis disculpas. Creo que sería más fácil comer con cucharas de madera que con cucharas de metal, o tal vez con brochetas de metal bifurcadas”, respondí, pensando que necesitaba observar mi tono considerando las circunstancias actuales.

“Ya veo”, murmuró Lefreya en voz baja, tomando una cuchara de madera de encima de la mesa. Incluso cuando llevó mi comida a sus labios que eran del color de las flores de cerezo en ciernes, su expresión aún no cambió.

“Hmm… Esta es la primera vez que como gigo que no se ha calentado. ¿Es esto lo que se acostumbra en el borde del bosque? ¿O viene de tu tierra natal, Asuta…?” Preguntó Marstein con una sonrisa.

“Es un plato de mi país de origen”, respondí.

“Ya veo”, dijo Marstein mientras tomaba un bocado del gigo y secaba la salsa de kiki. “Este es ciertamente un sabor novedoso. La acidez del kiki seco borra la terrosidad del gigo, por lo que no es difícil bajar en lo más mínimo. De hecho, diría que es bastante agradable”.

“Me siento honrado…”

Mientras tanto, la gente del borde del bosque seguía masticando silenciosamente mi plato. Tenían poco interés en cocinar que no usara carne de giba para empezar, por lo que sus reacciones fueron, como era de esperar, moderadas.

Sin embargo, escuché al jefe del clan Fou, que estaba sentado más cerca de mí, susurrar: “¿Así es como sabe el gigo crudo…? En el clan Fou, solo lo usamos para mezclarnos con poitan. Qué sabor tan misterioso…”

“Oh, ¿es de tu agrado?”

“Bueno, ciertamente no puedo decir que no me guste. Aunque en realidad, parece hacerme sentir aún más hambriento de alguna manera…”

“Correcto. En realidad, ese es el propósito principal de este plato”.

No estaba familiarizado con la preparación de platos completos, así que lo único que se me ocurrió para un aperitivo fue que despertaría el apetito. Había elegido este plato para mover el estómago y aumentar las expectativas de lo que vendría después, pero ¿cómo estaba funcionando? Al menos por ahora, lamentablemente no tuve a nadie más dando impresiones concretas.

Pero en cualquier caso, las páginas se habían ido con los carros mientras tanto, sin duda para ir a buscar los platos de sopa  que vendrían a continuación.

“Hmm, este es un sabor peculiar”, dijo repentinamente Dari Sauti en voz bastante alta. Cuando me volví para mirar, vi que sostenía un plato con el aperitivo de Timalo.

“Sir Dari Sauti, ¿no es de su agrado?” Marstein preguntó con calma, solo para que el jefe del clan líder se rascara la cabeza con sus gruesos dedos.

“No sé nada de eso, es solo… Simplemente encuentro esta textura viscosa más que un poco desagradable”.

Eso ciertamente fue franco. Sin embargo, Timalo le lanzó una sonrisa perfectamente tranquila.

“Esa es sin duda la sensación que se agrega al amasar el aceite reten en la salsa. Podría ser un poco difícil acostumbrarse si es la primera vez que lo come”.

“Mmm. El plato de Asuta también es viscoso, pero esto es un poco… Hrmm, ¿podría traerme un poco de vino de frutas también?”

Mientras tanto, Donda Ruu y Gulaf Zaza habían terminado rápidamente ambos aperitivos y estaban bebiendo vino de frutas. Las copas de plata no eran más grandes que una taza pequeña, por lo que para los líderes de los clanes principales, solo equivalían a un trago. Parecía que debía ser bastante irritante para ellos, tener que esperar a que un asistente lo llenara de nuevo cada vez.

Aun así, mientras no ocurriera nada demasiado insoportable, el plan para hoy era acatar las costumbres de la ciudad del castillo.

Esa fue la decisión a la que había llegado el grupo del borde del bosque, para que pudieran ver lo que pensaban y sentían los nobles, así como cómo los tratarían las élites de la ciudad del castillo.

“Sí, también estoy bastante cautivado por la cocina de Sir Asuta”, intervino Polarth, con una sonrisa verdaderamente despreocupada en su encantador rostro redondo. “El plato de Sir Timalo es bastante elaborado, y ciertamente espero con ansias ver qué servirá de aquí en adelante, pero el de Sir Asuta me deja en un estado en el que mi estómago me molesta, rogando por el próximo bocado. Yo diría que ambos son maravillosos aperitivos”.

“Gracias”, Timalo y yo dijimos al unísono.

Personalmente, me sentí aliviado al escuchar que esa impresión coincidía perfectamente con lo que estaba buscando, pero Timalo tenía una mirada seriamente disgustada en sus ojos. Debe haber estado pensando algo como: “No vayas a juntar mi comida con un plato tan crudo”.

De todos modos, en cuanto todos dejaron las cucharas y recuperaron el aliento, aparecieron los siguientes platos: las sopas.

“¡Ah, qué olor tan encantador!” Dijo Polarth, con la nariz crispada. Se refería al aroma de la grasa de la leche que emanaba de la olla de Timalo.

Roy hizo lo mismo, entonces, ¿es costumbre en la ciudad del castillo usar mucha grasa de leche en las sopas?

Cuando Timalo quitó la tapa, aún más de ese dulce aroma llenó la habitación.

“Este plato de sopa se preparó con grasa de leche karon y tres variedades de hierbas”.

Una de esas hierbas parecía ser la misma que usaba Yang en la ciudad postal, ya que había un aroma a canela que acompañaba el olor de la grasa de la leche.

“Mi plato de sopa estaba hecho con carne de giba y aceite de tau”.

Yo había optado por el enfoque sencillo de una sopa de giba preparada con aceite tau. Para hacer un banquete lujoso, usé carne de muslo y costilla de giba, aria, chatchi, gigo, nenon y pula para los ingredientes.

Y esta fue una versión que implicó incluso más esfuerzo de lo habitual, por lo que de todos los presentes, solo Donda Ruu la había probado antes, cuando la estábamos probando en el asentamiento de Ruu.

Sin embargo, más que nada, la palabra ‘giba’ había provocado que la tensión se extendiera por el aire, como si dijera: “¿Así que finalmente es el momento?”

Lefreya y Melfried permanecieron inexpresivos, pero entre ellos Torst dio un profundo suspiro, Polarth desviaba la mirada y Leeheim fruncía abiertamente el ceño.

Hace ochenta años, los giba eran vistos como un símbolo de calamidad, e incluso ahora, eran vistos como algo que solo comían los bárbaros del borde del bosque.

Incluso si hubieran escuchado los susurros de que la carne de giba se había convertido en un tema de discusión en la ciudad postal, eso no sería ningún consuelo para estos residentes de la ciudad castillo.

Algunos parecían haberse resignado a sí mismos como mártires que expiaban los crímenes de Cyclaeus, mientras que el resto aparentemente no pudo ocultar su indignación, preguntándose claramente por qué tenían que sufrir tal destino.

En medio de todo eso, los platos se distribuyeron silenciosamente. Como era de esperar, los nobles comenzaron con el plato de Timalo, mientras que la gente del borde del bosque fue primero con el mío.

“Ah, esto también está muy bien hecho. La dulzura de la grasa de la leche sin duda es prominente”, afirmó Marstein, tomando nuevamente la iniciativa a la hora de repartir elogios. “¿Y qué es exactamente esta carne blanda? No parece ser piel de kimyuus…”

“Ese es el estómago de karon”.

“Ooh, estómago de karon, ¿verdad? Que inusual.”

Terminé dejando escapar un silencioso suspiro de admiración en mi cabeza también. Así que también cocinaron con órganos en Genos, ¿eh? Ciertamente esperaba con ansias la idea de averiguar qué tipo de ingrediente era el estómago de karon y experimentar con él después de esta cena.

“¡¿Qué es esto?!” Dari Sauti de repente gritó maravillado. Parecía que había probado el pequeño truco que le había añadido.

“Eso es lo que se conoce como wonton. Para hacerlo, se cubre la carne molida de giba con pasta de fuwano y luego se hierve”.

Gracias a la competencia entre Reina Ruu y yo, el sabor de la sopa giba preparada con aceite de tau se había perfeccionado más o menos. Sin embargo, pensé que todavía había algo de margen de maniobra para jugar, y así fue como llegué a la idea de los wontons.

No había nada complicado en hacerlos, ya que el método era tal como le había explicado a Dari Sauti.

Después de agregar agua a la harina de fuwano, la extendió y luego la envolvió alrededor de carne molida con sabor a sal, hojas de pico y aceite de tau. Luego solo tenías que sellarlos como gyoza y dejarlos cocinar junto con la sopa, y eso era todo.

El delicioso sabor de la carne molida de giba se había sellado correctamente en la masa de fuwano hervida que se movía y sentí que habían resultado bastante bien. Al menos cuando las probamos en la cocina de Ruu, todas las mujeres les dieron críticas muy favorables.

“¡Hrmm, esto es delicioso! Es sabroso y de alguna manera hace que el interior de mi boca se sienta agradable. ¿No estás de acuerdo, Gazraan Rutim?”

“Sí, realmente está delicioso”.

Gazraan Rutim estaba mucho más tranquilo de lo habitual hoy. Supuse que con toda probabilidad estaría ocupado observando en silencio a los nobles.

En cuanto a los nobles en cuestión, el primero en hacer acopio de valor y agarrar su cuchara fue Polarth. Su ya redondo cuerpo se encorvó en una forma aún más redonda mientras miraba fijamente dentro del plato. Luego levantó lentamente la cuchara, tímidamente se la llevó a la boca… y su expresión estalló de sorpresa.

“Oh, Dios…”, pronunció Polarth, inquieto, recogiendo sopa y sorbiéndola, una y otra vez. Y cuando sorbió un wonton blanco, gritó con alegría: “¡Delicioso! ¡¿Así que esto es carne de giba?! Sir Asuta, ¡esto es increíblemente sabroso! ¡Sí, este sabor es realmente igual a la pechuga de karon!”

“Gracias. Me siento honrado de escuchar eso”.

En eso escuché una extraña especie de risa, y cuando me volví para mirar, encontré que el rostro de Timalo se volvía con una sonrisa forzada. ¿Había dejado escapar un poco de risa desdeñosa?

Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que esa leve sonrisa se congelara de repente en su lugar.

“Sí, esto es ciertamente sabroso”, coincidió Marstein. “Ya veo. Había oído que la cocina giba se había ganado una gran reputación en la ciudad postal, y ahora puedo entender por qué”.

“Sí, definitivamente es delicioso”, dijo Welhide a su lado con un gran asentimiento. “Sir Asuta del clan Fa, realmente lamento el comentario grosero que hice antes. Parece que las historias de que la carne de giba es dura y huele mal en realidad eran solo rumores”.

“Ah, realmente me siento honrado de escucharte decir eso”, respondí, la tensión finalmente desapareció de mis hombros.

Fue entonces cuando Lefreya gritó: “Asuta, este plato es bastante sabroso”.

“Gracias. Er, um, gracias”.

En ese momento, noté que Torst y Leeheim también sorbían apasionadamente la sopa. Me había preocupado que el poderoso aroma del plato de Timalo lo abrumara por completo, pero ahora vi que esos temores eran infundados.

Mientras tanto, ninguna de las personas del borde del bosque que habían probado ese plato de sopa de grasa de leche había mostrado ninguna reacción positiva.

Este también es viscoso. ¿La gente de la ciudad del castillo disfruta de la cocina viscosa?

“Creo que esa es la textura de la grasa de la leche karon… ¿Quizás a la gente del límite del bosque no le gustan los aceites?”

“Hmm, pero no tengo ningún problema en comer mucha grasa de giba”, gruñó Dari Sauti mientras se llevaba la cuchara de madera a la boca.

Los jefes de los clanes Fou y Beim tenían expresiones que recordaban un poco a los monjes ascetas. ¿La cocina de Timalo era realmente tan inapropiada para sus gustos, considerando que la gente del borde del bosque solía sorber estofado de poitan con ese sabor y textura atroces?

Bueno, también probé el sabor de un plato con mucha grasa láctea y hierbas que había preparado Roy. No tuve ningún problema especial con eso, pero pude ver que la gente del borde del bosque no aceptaba un sabor tan complejo.

Luego, cuando todos lograron terminar sus sopas de una forma u otra, se llevaron los siguientes platos. Timalo era un plato fuwano, mientras que el mío estaba hecho con poitan.

“Mi plato es un gyama horneado con sombrero de leche en polvo”.

“Este plato se llama okonomiyaki, elaborado con poitan”.

Nunca antes había oído hablar de un sombrero horneado, pero a simple vista parecía algo como un gratinado o un pastel. Estaba encima de un gran plato de arcilla y estaba cubierto de leche en polvo bien dorada como una tapa.

Sí, este era un plato que necesitaba el tipo de horno que solo está presente en la ciudad del castillo, y la apariencia y el aroma seguramente eran tentadores.

Luego, estaba mi okonomiyaki. Como no teníamos la costumbre de comer cada plato uno por uno en casa o en el asentamiento en el borde del bosque, realmente terminé dejándome la cabeza sobre cómo preparar el poitan, y esta fue la solución a la que llegué.

Mezclé la carne de costilla de tino y giba en rodajas gruesas con gigo rallado y poitan disuelto en agua, luego lo asé a la parrilla. Para darle sabor, usé una salsa pseudo-Worcestershire hecha con aceite de tau, así como mayonesa estilo Genos hecha de huevo kimyuus, vinagre de mamaria y aceite reten.

Aun así, no pude encontrar ningún sustituto para las rodajas de bonito seco o las algas verdes secas, por lo que me sentí un poco escaso. Como último recurso, seguí adelante y lavé la sal de un poco de maru en escabeche y los asé en seco para colocarlos encima.

Maru era una especie de criatura con caparazón como un pequeño camarón o krill que usaba Nail para hacer chitt en escabeche.

A pesar de que había mucha agua alrededor, por alguna razón, Genos no vio prácticamente ninguna distribución de pescado o mariscos. Entonces, decidí usar un poco de maru para acentuar el plato, como un poco de marisco valioso.

Por cierto, me dijeron que debía quedarme en el comedor excepto cuando se trataba de terminar el plato principal, así que fue el grupo de Reina Ruu quien realmente asó esto. Habían tenido mucha práctica por adelantado para hoy, por lo que, naturalmente, no hubo problemas con el resultado.

El maru podría no haber sido un sustituto adecuado del bonito, pero pensé que ayudaría a mitigar lo que faltaba al menos un poco. Y además, yo era el único que sabía cómo era el okonomiyaki adecuado para empezar, así que no había ninguna razón para que nadie más sintiera que algo estaba fuera de lugar.

“¿Cómo deberíamos dividir estos?” preguntó una de las páginas, mirando preocupado a las seis formas redondas que estaban sentadas frente a él.

“Los cortaré, así que entregue una rebanada a cada persona”.

Con eso corté los seis okonomiyaki en cuatro partes cada uno, haciendo veinticuatro rebanadas en total. Lefreya probablemente estaría bien con uno, mientras que podía ver que Donda Ruu o Gulaf Zaza necesitaban tres o cuatro.

“Qué plato verdaderamente inusual. Supongo que eso es justo lo que uno debería esperar de un visitante del extranjero”.

Por un tiempo, Timalo se las había arreglado para contenerse, pero una leve sonrisa se deslizó mientras se servía su propio plato. Y mientras miraba, fui, ¿Hmm? en mi cabeza.

Cuando se rompió esa fragante tapa de leche en polvo, lo que se derramó fue una sustancia pegajosa que se parecía a la avena. ¿Había picado finamente fuwano horneado y lo había empapado en leche de karon o algo para hacerlo? De todos modos, olí una rica mezcla de leche y leche en polvo.

Y mientras tomaba una bocanada más profunda, más allá de eso, también percibí el fuerte olor a hierbas. Mirando de cerca, noté hierbas largas y delgadas como hojas de color marrón claro esparcidas aquí y allá por todas partes.

No eran semillas de chitt, pero parecía que se estaban utilizando para agregar un sabor fuerte al plato. La idea de esa agudeza junto con la dulzura de la leche y la leche en polvo me pareció un poco incompatible.

¿Va a volver a ser impopular entre la gente del borde del bosque?

Aun así, todo lo que podía hacer ahora era preocuparme por mi propio plato.

“Ah, el horneado de sombreros es uno de mis favoritos”, dijo Polarth con entusiasmo mientras se repartían los platos. Aparentemente, esa mezcla de productos lácteos dulces y hierbas étnicas era popular aquí en Genos.

Y luego, hubo un extraño sonido de “guh”.

El jefe del clan Beim aparentemente había mordido al okonomiyaki, y ahora estaba poniendo una cara realmente preocupada. Al ver eso, el jefe del clan Fou preguntó en voz baja: “¿Qué pasa?” mientras luchaba por romper un poco del mismo plato con su cuchara de madera.

“No es nada…”

“¿Este plato fue de tu agrado, jefe de clan de los Beim?”

“No dije una sola palabra por el estilo…”

“¿Qué pasa con eso? Objetar el negocio de Asuta y encontrar su cocina deliciosa son asuntos separados, ¿no es así?”

El jefe del clan Beim asistió a reuniones como ésta para representar a los clanes que se oponían a que hiciéramos negocios en la ciudad postal. Pero en este momento, incluso con una mirada amarga en su rostro, rápidamente terminó con el okonomiyaki.

Polarth estaba sentado frente a él, por lo que debió haber escuchado la conversación que acababan de tener. Y así, dejó a un lado el plato de horneado de sombrero y cortó un poco de okonomiyaki con una cuchara de plata mientras lucía una mirada de gran curiosidad.

Y luego, explotó con otro estallido de, “¡Delicioso! Esto realmente es sabroso. ¡Es tan bueno como ese plato de sopa de hace un momento! Sir Asuta, esto se hizo usando poitan en lugar de fuwano, ¿correcto?”

“Sí. Este plato es más adecuado para poitan, así que eso es lo que elegí”.

“¡Esto es realmente increíblemente delicioso! Si puedes hacer un plato tan bueno con poitan, ¿por qué no venderlo en la ciudad postal?”

“Este plato es difícil de comer con las manos, por lo que no es adecuado para un puesto de bocadillos. Sin embargo, he pensado en ofrecerlo en las posadas si es posible”, respondí, luego decidí agregar un poco más de explicación. “Además de eso, no puedo hacer el condimento que agregué encima sin retener aceite y vinagre de mamaria. Eso hace que venderlo en la ciudad postal sea un poco problemático”.

Si no solo me faltaran las rodajas de bonito seco y las algas verdes secas, sino también la mayonesa, sería un plato demasiado triste. Pero si pudiera conseguir fácilmente aceite de reten y vinagre de mamaria, no tendría ninguna razón para no intentar venderlos en la ciudad postal.

El plato también había sido un gran éxito entre el clan Ruu. Todo lo que involucró fue mezclar los ingredientes en la masa de poitan, pero todos acordaron felizmente durante la prueba de sabor que estaba delicioso de una manera completamente diferente en comparación con asar a la parrilla cada componente por separado. Y la que más le gustó el plato fue Sati Lea Ruu, a quien le encantaba el poitan horneado para empezar.

“Ya veo. Aun así, este aceite de tau también tiene un sabor inusual. Tiene un grosor inusual y una acidez diferente a la del vinagre de mamaria”.

“Eso es de la tarapa. Herví un poco de tarapa y aria y las mezclé con el aceite de tau. Y el grosor se debe a que le agregué harina de fuwano”.

“¡Ooh, estoy impresionado! ¿Qué piensa, Sir Leeheim…? ¡Esto es lo que Sir Asuta puede hacer usando poitan!” Preguntó Polarth, todavía muy alterado mientras se volvía hacia Leeheim, que fruncía el ceño.

“Incluso dejando a un lado el asunto del poitan, todo ha sido perfectamente delicioso. ¿Este plato fue realmente hecho usando giba, Asuta del clan Fa?”

“Sí. Este plato usa carne de pecho de giba, mientras que el anterior usa carne de pecho y muslo”.

“Aun así, lo que no puedo evitar encontrar la mayor sorpresa de todas es cómo usa poitan en lugar de fuwano…” el hombre mayor Torst sentado junto a Lefreya suspiró. “Si puedes hacer platos como este usando poitan, entonces la gente de la ciudad postal ya no volverá a mirar a Fuwano… Duque Genos, acabo de hacerme cargo de la casa de Turan y tengo la intención de dar mi todo para restaurarlo a su lugar apropiado, pero a este ritmo, su fortuna bien puede agotarse antes de que termine el año”.

“No hay necesidad de estar lleno de tanto dolor. Solo necesita disolver los diversos acuerdos comerciales que Cyclaeus hizo en todas partes, uno por uno. El simple hecho de dejar de comprar imprudentemente una gran cantidad de ingredientes debería hacer que se recupere una buena parte de la fortuna, ¿verdad?”

“Pero cancelar esos acuerdos comerciales requerirá una increíble cantidad de tiempo y esfuerzo. Después de todo, el anterior jefe de la casa hizo un gran número de ellos incluso con personas de Sym y Jagar. Y si los cancelamos únicamente por nuestra propia conveniencia, no solo la casa de Turan sino la propia Genos podrían perder la confianza de ambas naciones”.

“Así que te prestaré toda  la ayuda que pueda.  Si distribuimos esos ingredientes a restaurantes que no tienen vínculos con la casa de Turan, tal vez incluso a los de la ciudad postal, entonces los ingredientes que se entregan no tendrán que desperdiciarse. Hasta ahora, Cyclaeus monopolizaba dichos ingredientes, por lo que dicha distribución había sido sellada. ¿No se imagina que un gran número de personas se alegraría de saber que podían comprar todo lo que quisieran de ingredientes que hasta ahora eran difíciles de conseguir?” Marstein respondió con calma, mojándose los labios con vino de frutas. “Pero, bueno, por ahora olvidemos todas esas cosas raras y simplemente disfrutemos de la comida. Asuta del clan Fa, todos tus platos han sido exquisitos. Realmente es asombroso que puedas cocinar cosas así a una edad tan temprana”.

“Me siento muy honrado por tan inmerecido elogio…”

Mientras ofrecía esa respuesta, no pude evitar pensar en cómo se sentía Lefreya. Cada vez que se mencionaba el nombre de Cyclaeus, podía sentir que me ponía ansioso.

Y, sin embargo, Lefreya siguió comiendo el okonomiyaki, inexpresivo como una especie de muñeca.

“Asuta del clan Fa, ¿queda más de tu plato?” Donda Ruu de repente gritó desde muy lejos.

“Sí. Todavía quedan once rebanadas”.

“Dame tres. Esta pequeña porción me hizo sentir más hambriento”.

“Ah, ¿podría conseguir uno más también?” Polarth intervino, saltando a bordo. “Este sigue siendo solo el tercer plato, así que quiero dejar suficiente espacio en mi estómago, ¡pero no puedo soportarlo! Aah, si hubiera sabido que la carne de giba era tan sabrosa, ¡ciertamente habría comprado algo de lo que vendes en la ciudad postal! ¡Espero que esos rufianes sean capturados lo antes posible para que pueda reanudar su negocio, Sir Asuta!”

Después de eso, todos los miembros del grupo desde el borde del bosque pidieron segundos junto con Welhide y Leeheim, que rápidamente se encargaron de los extras.

Mientras tanto, solo Marstein y Polarth pidieron otra porción del plato de Timalo, lo que resultó en un buen sobrante. Aunque el chef parecía haber recuperado finalmente la compostura, su sonrisa ahora se estaba congelando de nuevo.

“No es nuestra costumbre dejar comida sobrante, pero aun así…” el jefe del clan Fou susurró tan bajo que solo yo podía escucharlo. “Fue todo lo que pude hacer para forzar la porción de este plato que me sirvieron. Por alguna razón, mi pecho se siente pesado… Si los nobles no se lo hubieran comido también, pensaría que me han envenenado”.

“Ya veo…”

Fue una avalancha de productos lácteos en forma de grasa láctea, leche en polvo y leche karon, que aparentemente fue un duro golpe para la gente del borde del bosque. Lo grabé firmemente en el fondo de mi mente para prestar atención a eso cuando les estaba preparando la cena.

“Los platos de Timalo y Asuta fueron maravillosos. Ciertamente estoy ansioso por ver lo que viene después”, dijo Marstein con ligereza mientras miraba a la multitud de invitados y todas las diferentes emociones que mostraban ahora.