Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 13

Capitulo 3: Cena En La Ciudad Del Castillo

Parte 2

Pronto el tiempo pasó volando de nuevo mientras tachamos constantemente nuestras tareas. Ya habíamos planeado nuestro procedimiento operativo con anticipación, por lo que no hubo problemas en ese frente.

Las chicas que estaban conmigo habían pasado mucho tiempo los últimos días entrenando para hacer estos nuevos platos, y no pude ver ningún problema en absoluto con su desempeño.

No hace falta decir que Reina y Sheera Ruu no tenían problemas, ya que se especializaban en manejar la estufa, pero Rimee Ruu también estaba mostrando una habilidad asombrosa. Sé que dicen que te vuelves bueno en lo que te gusta hacer, pero tengo la sensación de que las habilidades culinarias de la niña habían crecido hasta casi el mismo nivel que las de su madre.

Ahora que lo pienso, todos los chefs que he visto en la ciudad del castillo han sido hombres.

Por lo que puedo recordar, en mi viejo mundo también trabajaban abrumadoramente más hombres que mujeres como chefs profesionales.

Parte de la razón fue que cocinar requería más energía de la que cabría esperar. Cuando cortaba ingredientes y los calentaba sobre una llama, y luego tenía que hacer lo suficiente para más de una docena de personas, definitivamente podría llamarse una batalla de resistencia.

Pero las mujeres del borde del bosque parecían tener una resistencia sin fondo, y era evidente lo apasionadas que estaban las chicas presentes por la cocina. Y tenían un gran paladar además de eso, así que no podía pensar en mejores aliados para tener a mi lado.

Aun así… ¿Cuánto más hábiles son ellos que la gente de la ciudad postal, me pregunto?

No había nadie que se llamara a sí mismo chef en la ciudad postal. Los dueños de las posadas y sus esposas simplemente vieron la comida que servían como nada más que una extensión de su cocina casera.

Sin embargo, lo mismo era cierto para Reina Ruu y para todos. Solo les había dado a las mujeres del borde del bosque solo un poco de instrucción en el transcurso de los últimos meses, pero antes de eso, en general, probablemente habían prestado aún menos atención al manejo de la estufa que la gente de la ciudad postal.

Y, sin embargo, ahora creía que su cocina fácilmente se impondría. Si nada más, al menos tenían la misma poderosa ventaja que yo: carne de giba.

En realidad, Nail y Naudis habían logrado preparar platos bastante exitosos con carne de giba. Y tenían sus propias ventajas en forma de semillas de chitt y aceite de tau, ambos ingredientes importados. Gracias a eso, actualmente estaban prosperando.

Pero últimamente, la leche karon y la grasa láctea habían comenzado a circular por toda la ciudad postal. Y ahora que Cyclaeus había caído, los ingredientes que había estado comprando podrían incluso comenzar a desbordar a la ciudad postal también después de extenderse por toda la ciudad del castillo.

Por supuesto, los ingredientes demasiado caros estarían fuera de discusión, pero parecía que sería razonable esperar poder comprar cosas en el mismo rango de precios que, por ejemplo, el aceite tau. Y si eso sucediera, seguramente conduciría a una mejora en la oferta gastronómica de la ciudad postal.

Cuando llegara ese momento, ¿hasta dónde los llevarían las habilidades de Reina y Sheera Ruu? Ciertamente no se quedarían muy cortos, pero ¿podrían mantenerse en la cima? No pude evitar esperar que se esforzaran al máximo para hacerlo.

“¡Ah, eso es un sonido de campana!” Rimee Ruu proclamó emocionada mientras picaba la carne de giba. “¡Que magnifico! Sonó cuatro veces, ¿eso significa que es la cuarta hora?”

“Si. Así que supongo que eso significa que nos queda la mitad de nuestro tiempo programado”.

La cena comenzaría cuando el sol se pusiera durante la sexta hora. Eso significaba que nos quedaban un poco más de dos horas. Y, afortunadamente, todo seguía avanzando sin problemas.

Sin embargo, pronto nos interrumpió otro golpe en la puerta de la cocina.

“Asuta, Kamyua Yoshu está pidiendo verte”, gritó Ai Fa, solo para que el rostro alargado y estrecho del hombre distante se asomara a la habitación.

“Hola, Asuta. Lamento molestarlo mientras trabaja, pero tengo algunas cosas que me gustaría informar. ¿Está todo bien?”

“Sí, no me importa. Por favor, pasa”.

“Ah, no. He estado corriendo por todas partes, así que estoy cubierto de suciedad y polvo. No quiero ensuciar tu cocina, así que, ¿podrías salir un rato?”

“Está bien, ya voy”.

Después de limpiarme la mano con un paño, seguí adelante y caminé por su camino.

Kamyua Yoshu sacó la cabeza hacia atrás y yo salí justo detrás de él. En el pasillo encontré a los dos soldados vigilando, los cuatro cazadores que nos protegían, Kamyua Yoshu… y un joven más que reconocí.

“Ah, tú eres…”

“Sí. Sir Welhide de la casa ducal de Banarm. Me encontré con él cuando me detuve en el castillo, así que lo traje rápidamente tan pronto como pude”.

El rostro pálido y de aspecto noble del joven de cabello negro tenía una expresión fastidiosa mientras asentía en silencio.

Realmente no tenía idea de lo alto que era él como el sexto en la fila para heredar una casa ducal en algún otro territorio, pero ciertamente no quería cometer ningún error por descuido, así que seguí adelante e hice una reverencia a lo que parecía un ángulo lo suficientemente adecuado.

Kamyua Yoshu continuó: “Aunque ha pasado medio mes desde esa reunión, aparentemente Ciluel sigue fingiendo ignorancia. Realmente no parece que podamos llegar a un acuerdo sin un juicio formal”.

“Oh ya veo.”

“Y en cuanto a Cyclaeus, no tiene mucha fuerza para hablar, y ciertamente tampoco parece estar intentando hacerlo. Si las cosas siguen así y Cyclaeus sucumbe a su enfermedad y exhala su último aliento, nos dejará en una situación realmente problemática”.

“Correcto. Los principales jefes de clan también están preocupados por eso. ¿Entonces realmente necesitamos el testimonio de Cyclaeus para poder emitir un juicio adecuado sobre Ciluel?”

“Sí, ya que parece bastante probable que si  Cyclaeus muere, Ciluel intentará imponerle todos los crímenes a su hermano muerto. Gracias al ataque que intentó llevar a cabo en la reunión, no podrá escapar de todos sus crímenes de esa manera, pero también queremos juzgar por completo sus delitos pasados”.

“No sería capaz de enfrentarme a mi padre si la verdad estuviera enterrada en las sombras por tal razón…” susurró Welhide, con una mirada intensa en su rostro. “¿Fue Cyclaeus o Ciluel quien causó la muerte de mi padre? Si no podemos al menos determinar eso, entonces seré yo el que muera en un ataque de indignación”.

“Correcto. El chico a mi cuidado, Leito, está en la misma posición que tú, así que ciertamente puedo entender esa forma de pensar”, asintió Kamyua Yoshu, tratando de poner una expresión tan seria como podía con su rostro usualmente distante. “Así que de todos modos, aunque estoy seguro de que tienes tus propios sentimientos fuertes al respecto, realmente me gustaría que  lo dieras todo para hacer algo que  pueda satisfacer a Cyclaeus, Asuta. No importa cuánto intentemos apelar a su corazón y su mente, no puedo imaginarnos nunca reformándolo”.

“No sé si intentar atraerlo, pero ahora que he decidido cocinar, quiero preparar la mejor comida que pueda”.

“Sí, cuento contigo. Y la comida de Cyclaeus se entregará después de la cena con los principales jefes de clan, ¿verdad?”

“Sí. Tengo que asistir a la fiesta, así que tengo que esperar a que termine”.

El mayor problema era la cuestión de si Cyclaeus tendría o no la fuerza necesaria para comer mi comida en su estado debilitado.

Pero todo lo que podía hacer era realizar el trabajo que tenía delante. Era cierto que mis sentimientos sobre todo esto eran complicados, pero a pesar de todo, seguí adelante y le hice una reverencia a Kamyua Yoshu.

“Bueno, entonces, volveré al trabajo. Disculpe.”

“¡Ah, espera un momento! ¡Todavía hay una cosa más que debemos discutir!”

“¿Eh? ¿Qué es?”

“Umm…” Kamyua Yoshu murmuró, su cuerpo alto y larguirucho se retorcía de una manera que era bastante diferente a él. Probablemente no hacía falta decirlo, pero no se veía lindo en lo más mínimo. “La cosa es que sé que es de mala educación preguntar, pero… bueno, ¿sería posible para mí también tener algo de tu comida?”

“¿Mmm? ¿Te refieres a la comida que estamos preparando para todos los que están de guardia y de cocina?”

“Si. Alguien en mi posición nunca podría esperar participar en la cena, después de todo. Y entonces me preguntaba si podrías concederme solo un poco de la comida que estás preparando para todos los demás… ¿Es demasiado pedir después de todo?”

“No, trajimos mucha carne de giba, así que mientras no tengamos ningún desliz repentino, podemos preparar todo lo que necesitemos”.

Tan pronto como dije eso, los ojos de Kamyua Yoshu comenzaron a brillar.

Si traicionara sus expectativas ahora, ¿cuán triste sería su cara? Estuve un poco tentado a averiguarlo, pero nunca iría y haría algo tan malo.

“Muy bien, seguiremos adelante y lo prepararemos. Sin embargo, la cena para los chefs tiene que esperar hasta después de la fiesta, así que comprenda que será bastante tarde”.

“¡Por supuesto! ¡Gracias! ¡Te debo una, Asuta!”

“¿La carne de giba es realmente tan deliciosa…?” Welhide preguntó con curiosidad. “Mis disculpas si esta declaración le molesta, pero he oído decir que la carne de giba no es algo que la mayoría pueda comer. Obviamente, los rumores sobre cómo te hará crecer cuernos y cosas por el estilo son simples cuentos populares, pero aun así, Genos está aún mejor que Banarm, ¿no es así?”

“Sí, seguro que lo es. El duque Genos me ha invitado a algunas cenas realmente inusuales, pero es un shock escucharlo ir con platos de giba… Ah, pero nada más se compara con la cocina de Asuta”.

“Ah, eh, por favor no se exceda en aumentar sus expectativas de esa manera…”

“¡Está bien! La delicia de su cocina llega a cualquiera que la coma, sin importar su estado. ¡Noble o plebeyo, no existe una sola persona viva que pueda negar tu habilidad!”

Di un profundo, profundo suspiro.

Y la boca de Welhide todavía estaba abierta con una mirada sospechosa… De hecho, era como si su expresión se hubiera congelado en su lugar por alguna razón.

“Um, Asuta, lamento mucho interrumpir tu conversación, pero hay una pequeña cosa que me gustaría preguntarte…” una voz gritó tímidamente desde atrás. Volviéndome para mirar, encontré a Reina Ruu asomando a la mitad de la puerta. “Abrí una botella nueva de vino de frutas, pero está muy amargo y no parece utilizable. ¿Podríamos cambiarlo por otro vino de frutas?”

“Ah, no, eso está hecho de mamaria al igual que el vino de frutas, pero en realidad es algo que se llama vinagre. Sin embargo, creo que debería quedar algo de vino de frutas normal en los estantes”.

“¡Oh ya veo! Lamento haber llegado a una conclusión allí…”

“No tienes nada de qué disculparte. Sin embargo, sería bueno si pudiéramos comenzar a manipular el vinagre de mamaria en el borde del bosque y también en la ciudad postal” respondí mientras volvía lentamente la mirada. Los ojos de Welhide seguían abiertos de par en par por la sorpresa y, naturalmente, miraban directamente a Reina Ruu.

La segunda hija de Ruu también se dio cuenta de eso y preguntó con una sonrisa preocupada: “Um, ¿pasa algo?” Y al igual que Roy había hecho antes, Welhide negó vigorosamente con la cabeza en respuesta.

Umm… Si estoy viendo lo que creo que estoy viendo, ¿la gente de la ciudad del castillo y Banarm no tienen un prejuicio tan fuerte contra la gente del borde del bosque, ya que no están tan íntimamente familiarizados con cómo aterrador son giba?

Sin saber nada de los pensamientos que corren por mi cabeza, Kamyua Yoshu luego proclamó alegremente: “¡Ahora bien! Me siento mal por interferir con tu trabajo, así que supongo que ya es hora de que nos vayamos. El segundo hijo de la casa de Daleim llegará pronto, así que ¿por qué no sigo adelante y se lo presento, Lord Welhide?”

“A-Ah, sí… Por favor, hazlo”.

En eso, Kamyua Yoshu y Welhide se fueron.

Con la cabeza inclinada, Reina Ruu regresó a la cocina, y después de vigilar todo el intercambio, Rau Lea acarició su estrecha barbilla y dijo: “Hmm… Bueno, es difícil ignorar cómo puede ser un poco infantil a veces, pero supongo que Reina Ruu definitivamente es bastante guapa. Sin embargo, las bellezas delgadas como Ai Fa aquí son más de mi tipo”.

“¿De qué estás balbuceando, de repente…?” Ai Fa cuestionó, lanzando a Rau Lea una mirada aterradora.

“Quiero decir, solo estoy expresando mis verdaderos sentimientos. Te lo dije antes, ¿no? Que si no fueras un cazador, definitivamente te querría como novia”.

“De nuevo, ¿qué estás—?”

“Te lo digo, me refiero a tu apariencia, como mujer. Estamos en la edad en la que ya es hora de que nos tomemos en serio el casarnos, ¿verdad, Darmu Ruu?”

Darmu Ruu parecía tener un aura de irritación a su alrededor como llamas negras girando mientras cerraba los ojos en silencio. Y luego, silenciosamente gritó: “Asuta del clan Fa”.

“¿Sí? ¡¿Qué es?!”

“Si ha terminado aquí, vuelva al trabajo…”

“Bien, entendido…”

Darmu Ruu había llegado a un punto en el que se había retirado y declaró que ya no criticaría la forma de vida de Ai Fa. Por supuesto, Rau Lea no tuvo la culpa, ya que no sabía nada de eso, pero aun así fue un intercambio bastante estresante.

Ahora que lo pienso, recuerdo haber escuchado que los hombres de Ratsu y Gaaz también le han propuesto matrimonio a Ai Fa.

¿Eran universales ese tipo de preocupaciones que ocurrieron entre hombres y mujeres, sin importar en qué mundo estuvieras?

En cualquier caso, de alguna manera me las arreglé para volver a encarrilarme, concentrándome una vez más en mi trabajo.

***

A partir de ahí, las horas pasaron, y cuando comenzamos a necesitar la luz de las velas en las paredes, habíamos logrado terminar seis platos diferentes.

Con solo la carne y los platos de fuwano, er, poitan, queríamos servirlos bien y calientes, por lo que actualmente estaban crudos encima de la estación de trabajo.

“Podemos comer una vez que Papa Donda y todos hayan terminado con la cena, ¿verdad? Uf, me muero de hambre”, se quejó Rimee Ruu.

“En ese caso, deberías haber robado algunos bocadillos aquí y allá.

¿Debería freír solo un poco de edad tatsuta para ti?”

“¡No! ¡Voy a esperar y dejar que la emoción se acumule para más tarde!”

Mientras manteníamos esa conversación, hubo otro golpe en la puerta. Esta vez, la que apareció fue Chiffon Chel.

“Las campanas de la sexta hora sonarán en breve… Sir Asuta, ¿podría hacer que se mueva al comedor…?”

“Entendido. ¿Está bien traer el aperitivo en este momento?”

“Sí… Los de servicio lo llevarán…”

Tras esa declaración, dos de los pajes vestidos con uniformes amarillos entraron a la cocina. Había visto las páginas con frecuencia alrededor de la mansión, pero estos chicos parecían ser parte de una alineación diferente.

Colocaron el plato grande con el aperitivo y los platos de madera para repartirlo encima de un elegante carrito con ruedas. Luego colocaron una tapa en forma de cuenco sobre el plato, como una campana o una especie de cubierta antipolvo, ocultando la comida de la vista.

“Ah, cierto, ¿no es necesario que lo pruebes en busca de veneno?”

“Yo no… La costumbre de probar el veneno solo fue implementada por el anterior señor de esta casa, me han dicho…”

“Ya veo. Así que fue así, ¿eh?”

Kamyua Yoshu había dicho algo sobre la muerte del padre de Cyclaeus por veneno. Aunque todavía no se había aclarado la verdad del asunto, probablemente esa era la razón por la que había implementado esa práctica.

Todavía no sabemos lo suficiente sobre los nobles de este mundo.

Cyclaeus era un hombre malvado que se burlaba de la gente del borde del bosque, llamándolos bárbaros.

Eso pareció afectar aún más a Ciluel.

En cuanto a Lefreya, a su sentido de la ética parecía faltarle algunas piezas.

Pero Polarth se sentía como un tipo alegre y despreocupado. Y Melfried era todo lo contrario, severo hasta el extremo.

Ese viejo oficial legal, Zylus, provenía de una sucursal de la casa Saturas y, bueno, parecía solemne y digno de confianza.

Welhide parecía un joven realmente serio.

Y finalmente estaba Marstein, a quien todavía  no podía precisar por completo.

Aun así, solo había pasado muy poco tiempo con alguno de esos nobles, no solo con Marstein. ¿Exactamente qué tipo de institución era la aristocracia del Reino Occidental de Selva? ¿Y eran compatibles con la gente del borde del bosque? La cena de hoy sería una prueba de fuego para esas preguntas.

“Asuta, por favor cuídate,” gritó Reina Ruu. “Sí, lo mismo para todos ustedes”.

Con eso, salí de la cocina junto a los pajes. Darmu Ruu y Rau Lea se quedaron atrás, mientras que Ai Fa y Ludo Ruu los siguieron como guardias.

Bajo la guía de Chiffon Chel, caminamos por el laberinto de pasillos. Y, como era de esperar, lo que apareció ante nosotros al final de todo fue un imponente conjunto de puertas dobles.

Esta era la habitación a la que Lefreya me había convocado en días pasados. En ese entonces, no solo habían estado presentes Lefreya y Diel, sino más tarde también Polarth y Ai Fa… cuando finalmente fui liberado de mis cinco días de encarcelamiento.

“¡Hemos traído al chef del borde del bosque, Sir Asuta del clan Fa!” uno de los pajes anunció con voz de soprano.

Cuando los soldados abrieron las puertas, el salón de la cena apareció a la vista, completo con los nobles de Genos y los principales jefes de clan del borde del bosque sentados allí.

“Ah, Asuta del clan Fa. Mis disculpas por molestarte tanto hoy,” gritó alegremente una voz masculina. Venía de Marstein, sentado a la cabecera de la enorme mesa. Y junto a él se sentó Welhide, quien estuvo aquí como testigo de este evento.

El candelabro que emitía una luz blanca deslumbrante, las estatuas de piedra mitad humano mitad bestia que custodiaban las cuatro esquinas de la habitación, el tapiz de terciopelo que cubría las paredes de ladrillo y la alfombra púrpura oscura de apiladas largas… Todo era como yo lo recordaba. Y aunque había mucho espacio de sobra en la enorme mesa en ese entonces, hoy estaba lleno de invitados.

En el lado derecho estaba el grupo del borde del bosque: Donda Ruu, Gulaf Zaza, Dari Sauti, Gazraan Rutim y los jefes de los clanes Beim y Fou.

A la izquierda estaban los nobles de Genos: Lefreya, el hombre de mediana edad que aparentemente era su nuevo tutor, Melfried, Polarth y un joven delgado que aparentemente era el representante de la casa de Saturas.

Realmente era un grupo distinguido de trece. Además de eso, a ambos lados de Marstein y Welhide había dos guardias ducales vestidos de blanco y una joven asistente.

Y a lo largo de la pared del lado noble, Timalo estaba erguido, acompañado por dos páginas tal como yo había estado. Naturalmente, no estaba ocultando su boca de ninguna manera en este momento. En cambio, simplemente tenía una expresión educada y serena.

“Asuta del clan Fa, deberías esperar allí junto a los líderes del clan. Una vez que suene la campana de la sexta hora, comenzará la cena”.

“Bien”, asentí con la cabeza mientras me movía a la posición como me dijeron. Mientras tanto, Ai Fa y Ludo Ruu permanecieron frente a las puertas ahora cerradas, sus miradas penetrantes escaneando la habitación.

Parecía que todos en el grupo del borde del bosque habían entregado sus espadas, lo que significaba que los únicos armados en este lugar eran los cuatro soldados en la cabecera de la mesa, así como Ai Fa y Ludo Ruu.

Por supuesto, la antecámara probablemente estaba llena de guardias ducales en espera, pero considerando las capacidades que poseen los cazadores del borde del bosque, seguramente podrían tomar el control de la habitación en cualquier momento. Y así, esta configuración de guardia demasiado laxa fue sin duda una muestra de la confianza de Marstein.

“Creo que esta es la primera vez que se conocen, Asuta del clan Fa. Este es el hombre que será el tutor de Lady Lefreya a partir de ahora, Torst, y el primer hijo del Conde Saturas, Leeheim”.

Me costaba recordar tantos nombres arrojados uno tras otro, pero de todos modos les hice una reverencia a cada uno.

Torst era un hombre pequeño con una cara maltrecha como la de un cerdito que se encaminaba hacia sus años de crepúsculo, mientras que Leeheim era un joven delgado con cabello castaño oscuro aceitoso.

El primero vestía un vestido blanco lechoso muy similar al de Polarth, mientras que el segundo vestía un traje con cuello estilo Jagar muy parecido a Marstein. Parecía que a los nobles les gustaba llevar atuendos al estilo de Jagar.

Sin embargo, lo que llamó mi atención aún más fue Lefreya.

Su cabello castaño toscamente cortado había sido peinado en un adorable bob corto, pero cualquier expresión había sido borrada de su rostro.

Había una tiara sobre su cabeza y su pequeño cuerpo estaba vestido con un vestido blanco cubierto de volantes y cintas. Su piel parecía completamente intacta por el sol, y en general tenía una linda apariencia como una muñeca francesa… Pero por la misma razón, realmente se sentía como un objeto delicado, sin mostrar ningún signo de emoción humana.

Por supuesto, considerando su posición actual, no podía ser exactamente arrogante. Pero aun así, ella realmente estaba actuando completamente diferente a su pequeño yo tirano habitual.

“Bueno, entonces, ¿qué tal si les doy a todos un pequeño saludo antes de que comience la cena?” Propuso Marstein en su tono relajado habitual.

Su largo cabello castaño oscuro estaba atado holgadamente detrás de su cuello, y el cuello de su capa blanca formal también estaba suelto.

Tenía un rostro muy juvenil, y sus ojos leonados tenían un brillo brillante pero firme, mientras que debajo de su bigote cuidadosamente recortado lucía una sonrisa alegre. Al menos, realmente no parecía tener el mismo corte que su hijo Melfried.

“Como ya he anunciado, esta cena es un evento destinado a fomentar la buena voluntad y reforzar los lazos entre nuestra tierra de Genos y la gente del borde del bosque. Hasta ahora, el antiguo jefe de la casa de Turan, Cyclaeus, ha estado a cargo de dicha mediación. Sin embargo, se sospecha que conspiró junto con el líder del clan que gobernó antes que el anterior y trajo calamidades al reino occidental. Y nos parece que es un asunto grave y sin precedentes”.

Ninguno de los principales jefes de clan o nobles intervino ni una sola palabra.

Incluso Lefreya simplemente miró en silencio a la distancia.

“Como quien gobierna sobre Genos, debo expiar estos crímenes junto con la gente del borde del bosque. Y para ello, creo que es necesario unirnos y comprendernos. Como parte de nuestros esfuerzos, Lady Lefreya se ha convertido oficialmente en la próxima condesa Turan, mientras que Torst se ha convertido en su guardián. Y también anunciaré aquí y ahora que mi primer hijo Melfried, jefe de la guardia ducal, ha sido designado para actuar como mediador con la gente del borde del bosque”.

Jadeé silenciosamente.

Ya sabíamos sobre Lefreya y su tutor, pero esta era la primera vez que escuchaba sobre la nueva publicación de Melfried.

Sin embargo, era cierto que Marstein no podía haber elegido a nadie más cercano a él para el papel.

“Eso es todo de mi parte. He reservado tiempo para una reunión después de la cena para discutir todos los detalles problemáticos, así que por ahora disfrutemos de la comida preparada amablemente por Timalo y Asuta del clan Fa y profundicemos la amistad entre nosotros”.

Marstein miró lentamente a todos los presentes.

Nadie parecía estar mostrando ninguna emoción real en respuesta, Lefreya fue la principal entre ellos. Sin embargo, sí espié a Polarth lanzando miradas tímidas a los cazadores, y junto a él Leeheim estaba un poco malhumorado mirando hacia abajo.

Quizás eso se debió a la diferencia de poder entre las casas de los condes y los duques, ya que no parecían ser capaces de actuar con tanta determinación como el joven Welhide.

Aun así, esto seguro que es una vista loca.

A la derecha estaban los fuertes, intrépidos y francos cazadores de piel oscura del borde del bosque, vestidos con sus capas de giba y rebosantes de la energía de las bestias salvajes.

Y a la izquierda estaban los nobles sofisticados y refinados de la ciudad de piedra, vestidos con vestidos blancos que recuerdan a personajes del mito griego, o uniformes con cuello en lo que yo habría llamado un estilo occidental en mi viejo mundo.

Los dos lados de la enorme mesa parecían provenir de mundos completamente diferentes mientras estaban sentados uno frente al otro.

Hasta ahora, los nobles y la gente del borde del bosque esencialmente no tenían interacción alguna. ¿Cuánto de la brecha entre ellos que había estado creciendo durante ochenta años podría llenarse esta noche…? No tenía absolutamente ninguna forma de saberlo en este momento.

Pero en cualquier caso, desde su posición en el medio, solo Marstein dio una sonrisa serena y un asentimiento satisfecho.

Fue entonces cuando una campana sonó solemnemente desde alguna parte.

“Ahora es la sexta hora. Entonces, ¿qué tal si comenzamos esta cena…?”

***

“Este es el aperitivo que he preparado”, dijo Timalo, presentando su plato primero.

Cuando quitó la tapa de la gran olla de metal, un aroma verdaderamente complejo comenzó a fluir por toda la habitación.

“Es huevo de totos aderezado con salsa de nueces ramanpa”.

Esta fue la primera vez que escuché sobre nueces ramanpa. Y aunque había afirmado que solo usaría ingredientes también disponibles en nuestra cocina, no tenía forma de saber cuáles eran.

De todos modos, las páginas siguieron adelante y empezaron a repartir el plato sobre platos de barro. Desde la distancia, todo lo que pude distinguir fue lo que parecía ser un chapuzón reluciente y ligeramente amarillento.

El jefe del clan Fou estaba sentado más abajo en el lado del borde del bosque, lo que lo colocó justo a mi lado, y cuando me entregaron su plato, robé una mirada. Y efectivamente, parecía ser un plato aderezado con salsa.

El color amarillento provenía de la yema de huevo, mientras que el brillo parecía provenir de algún tipo de aceite. Y dado que la clara de un huevo de toto en realidad no adquiría un color blanco cuando se calentaba, se había convertido en un baño translúcido, que brillaba a la luz de la araña.

Mezclado dentro de esa salsa translúcida, pude ver una serie de nenon con forma de zanahoria, chatchi con forma de patata y otras verduras similares cortadas en cubos pequeños. Y en una cantidad abrumadoramente mayor había una ración colmada de lo que parecían nueces finamente picadas.

“Las nueces ramanpa se ahumaban con hierbas pepetto y las diversas verduras se encurtían en aceite reten. Amasándolos junto con el huevo de totos, obtienes este plato”.

“Este es ciertamente un aperitivo elaborado para empezar”, proclamó Marstein divertido, y Timalo le devolvió la sonrisa.

Entonces, la mirada del duque se volvió lentamente hacia mí. “Sir Asuta, continúe con sus preparativos”.

“Bien, entonces…”

Sin embargo, la mía no es nada elaborada, pensé mientras levantaba la tapa del plato.

Encima del plato de madera algo grande y profundo había una bonita pila de gigo cortado en rodajas rectangulares. Cuando separé eso, coloqué una salsa de kiki seca hecha con un poco de aceite tau y caldo de sopa encima. Esa fue la totalidad de los preparativos necesarios para mi aperitivo.

Fui con esto porque me pareció un aperitivo adecuado, pero ¿es demasiado simple?