Isekai Mahou wa Okureteru (NL)

Volumen 7

Capitulo 1: En La Residencia Yakagi

Parte 3

Pero quería evitar explicar que podía usar hechizos mucho más fuertes que eso, dejándola un poco pérdida en cuanto a cómo responder a Reiji. Murmuraba y se demoraba con una expresión hosca, pero Io Kuzami pareció captar su debate interno.

“Esa magia mía es poderosa, ¿sabes? Si lo desea, ¿le gustaría probar y ver?”

“No, no es que dudo del poder del hechizo…”

A pesar de la pequeña provocación, Felmenia no mostró signos de morder el anzuelo. Ella todavía estaba perdida. Suimei respondió por ella.

“Déjalo. Por ahora.”

“¿Qué? Qué aburrido.”

Io Kuzami dio una respuesta insatisfecha a las palabras agravadas de Suimei, pero retrocedió en silencio por el momento. Si había que creer en su confianza en sí misma, su magia era bastante poderosa. Si lo que había poseído a Mizuki era un espíritu conectado a este mundo como sospechaba Suimei, su conexión con los Elementos estaría en un nivel que superaba a cualquier humano. Solo eso fortalecería su magia de manera significativa. Entonces, incluso si Felmenia usara el mismo tipo de hechizo, no se compararía con el de Io Kuzami.

Mientras Io Kuzami seguía haciendo pucheros, Liliana entró en la sala de estar. Después de mirar por la puerta, se acercó a Suimei y los demás. Al ver su adorable comportamiento, las mujeres en la habitación sonreían ampliamente. Pero en lugar de sentarse con todos, por alguna razón Liliana se dirigió hacia Io Kuzami.

“¿Has terminado de retozar con los gatos? ¿Mmm?”

Io Kuzami sonaba como si estuviera jugando con un niño, pero Liliana no le respondió. Simplemente se volvió hacia Suimei con una mirada amarga en su rostro.

“¿Es Mizuki… todavía ridícula?”

“Como puedes ver por ti misma”.

“Llamarme ridícula es bastante impertinente de tu parte. Soy perfectamente normal, ¿sabes?”

Io Kuzami frunció el ceño al ser tan ignorado, mientras Liliana seguía haciendo una mueca amarga.

“Creo que no. Siento que… algo malo… te ha poseído”.

“No cooperativo” sería más exacto que “malo”, pero eso fue un argumento menor. A diferencia de Reiji y Titania, Liliana podía sentir algo sobre Io Kuzami. La chica tocada por el poder malicioso de la oscuridad probablemente sintió algo amenazador. Eso es lo que sospechaba Suimei.

Io Kuzami hizo una mueca cuando Liliana se inclinó y escrutó su rostro. Y luego…

“Ahora… toma esto”.

“¡¿Bwuh?!”

Como si lo estuviera esperando, Liliana tiró de ambas mejillas de Io Kuzami. Al ver esto, todos se quedaron con los ojos muy abiertos. Suimei no tenía idea de lo que estaba haciendo. No, con las mejillas de Io Kuzami en sus manos, era bastante obvio lo que estaba haciendo. Liliana empujaba y tiraba de la cara de Io Kuzami como si fuera arcilla en sus manos.

“¡Ugh! ¡¿Qué… diablos… estás… haciendo?!”

“Trae de vuelta a Mizuki. No, deja a Mizuki… y no vuelvas nunca”.

“¡Oye! ¡Lily!”

Liliana aplastó y remodeló el rostro de Io Kuzami mientras trataba de expulsarla físicamente. Incapaz de permitir que esto continuara, Lefille se interpuso entre ellas con nerviosismo. Cuando Liliana estaba deprimida, Mizuki había hecho mucho para animarla y cuidarla. Probablemente por eso estaba tratando de hacer lo que podía por ella ahora. Sentía que le debía tanto.

Finalmente, Lefille logró apartar a Liliana de Io Kuzami. Pero eso no pareció disuadirla. Ella empujó un dedo hacia Io Kuzami con un chasquido. Parecía que estaba planeando usar su Astral  Shooter para darle una buena descarga. Al ver esto, Suimei intervino.

“Liliana, deja de hacer eso”.

“¿Por qué? Si algo… ha poseído a Mizuki… ¿no lo sacará esto?”

“No, probablemente sea inútil. Ríndete”.

“Bien… lo entiendo.”

Al escuchar sus palabras, Liliana bajó el brazo con desaliento. Mientras tanto, Reiji y Titania simplemente parecían no tener idea de lo que estaba pasando.

Astral Shooter era la técnica que Suimei le había enseñado a Liliana para extender su propio cuerpo astral para atacar el de un oponente. Manifestó un efecto físico al hacer uso de la conexión entre el cuerpo físico y astral. El cuerpo astral se refería al caparazón que envolvía espiritualmente a un ser. En pocas palabras, era el pegamento que unía las cosas conocidas como alma y conciencia. Y dado que la conciencia era parte del cuerpo astral, los ataques astrales no fueron tan efectivos contra objetivos que se habían desmayado o dormido.

Y actualmente, Mizuki tampoco estaba consciente, lo que significa que estaba en un estado en el que un ataque astral no la alcanzaría. Pero el cuerpo astral de la cosa que poseía a Mizuki estaba conectado a su cuerpo en este momento, por lo que aún debería afectar a Io Kuzami.

El objetivo de Liliana probablemente usaría su Astral Shooter para tomar una acción decisiva contra él y, si las circunstancias lo permitían, sacarlo e instar a la mente de Mizuki a despertar. Poco sabía ella que era efectivamente imposible  despertar  a  alguien  de  una  experiencia  extracorporal.

Sin embargo, debido a que el propietario de la capa externa de la conciencia no era el alma, el cuerpo astral y el cuerpo físico no estaban tan firmemente conectados que sería imposible quitar algo que se había adherido en el lugar equivocado.

Un método tan prepotente sería apropiado para el exorcismo, que probablemente era el enfoque que había adoptado Liliana. Pero incluso si lo hacía y tenía éxito, solo purgaría en lugar de borrar la cosa que poseía a Mizuki.

Y sin nada para defender a Mizuki, simplemente podría poseerla de nuevo. Si Suimei al menos supiera su nombre real, podría atarlo y obstruir cualquier intento de recuperación, pero…

A pesar de haber sido pellizcada sin piedad por Liliana, Io Kuzami por alguna razón tenía una expresión de satisfacción en su rostro.

“Oh chica con el ojo parchado, tienes un lado bastante violento y peligroso,

¿no es así? De hecho, esas prendas también son de mi agrado. Te haré mi discípulo”.

“Yo declino.”

“Por supuesto. Ahora que te has convertido en mi discípulo, necesitas tu propio nombre en clave de oscuridad… Empezaremos con uno temporal. Tú eres el emisario negro que oculta el mal de ojo del rey dragón, así que ‘Drogón Eyes Black Lolita’ servirá”.

“¿Es esto un juego de palabras ahora…?”

“Realmente es como el nombre de un juego de palabras…”

“Ella no… me está escuchando…”

Como si no hubiera escuchado la negativa de Liliana en absoluto, Io Kuzami estaba avanzando constantemente con los preparativos (?) Para hacer de Liliana su discípula. Aquellos que observaban su comportamiento jactancioso estaban divididos entre la exasperación y el agotamiento. Por supuesto, esa había sido en gran parte la reacción a Io Kuzami desde el principio.

Sin embargo, el caos en la residencia Yakagi estaba lejos de terminar. Inmediatamente después de que un disturbio se calmó, otro surgió en el frente.

“… ¿Mmm?”

Suimei notó la abrupta irregularidad y frunció el ceño dubitativo. “Suimei-dono, ¿pasa algo?”

“Tenemos un invitado. Además de eso… ¡Oye, solo están entrando a la casa como les plazca!”

La residencia Yakagi en el Imperio era la misma que la residencia Yakagi en Japón en que estaba protegida por una barrera de magia sensorial y de monitoreo. Por eso, siempre que había intrusos o visitantes, esa información se transmitía directamente a la mente de Suimei.

“¿Quién es, Suimei-dono?”

“¡Espe— es esa mujer peligrosa!”

“¡¿Q-Qué?!”

Al escuchar las siniestras palabras de Suimei, Lefille fue quien gritó en voz alta. Parecía haber adivinado quién era solo por esa descripción. Después de todo, solo había una persona de la que Suimei hablaba de esa manera. Cuando Lefille comenzó a entrar en pánico, Liliana la observó con el ceño fruncido.

“Qué pasa… ¿Lefille?”

“¡Esta es la peor situación posible! ¡¿Hay algún lugar donde pueda esconderme?! ”

“¿Necesitas… un escondite? Si es así… hay por todas partes. Como allí… por ejemplo”.

Liliana miró hacia un escritorio colocado en la esquina de la sala de estar con una colcha encima. Ciertamente, considerando su estatura actual, Lefille podría esconderse debajo de ella. Sería bastante estrecho y desagradable, pero los tiempos desesperados exigen medidas desesperadas.

Resignándose, Lefille, presa del pánico, se transformó en un vendaval rojo y saltó a la clandestinidad. En un abrir y cerrar de ojos, la metieron debajo del escritorio, pero su larga cola de caballo roja todavía sobresalía.

Fue un caso un tanto cómico de esconder la cabeza, pero dejar el trasero al descubierto. De hecho, se la delató perfectamente tal como estaba, pero nadie se atrevió a decírselo.

“Suimei, cuando dijiste ‘esa mujer peligrosa’, ¿te refieres a Su Alteza Imperial Graziella?” preguntó Titania, su expresión traicionando su mandíbula apretada.

“Sí. Ahora que lo pienso, tú también la odias, ¿no? ¿Debería rechazarla?”

“¡Échala a patadas! ¡Haz que se vaya!” gritó el escritorio desde la esquina.

Ignorando la conmoción no solicitada, Suimei miró a Titania con una expresión preocupada.

“No, está bien. Personalmente, soy bastante reacia, pero haz lo que creas conveniente”.

En otras palabras, Titania estaba bien al dejarla entrar. Si había venido aquí, después de todo, probablemente era por algún tipo de negocio. Pero incluso sabiendo eso, Titania no pudo evitar el gran suspiro que escapó de sus labios. Todavía no se llevaban bien.

Suimei luego miró a Reiji, quien también asintió. No tuvo objeciones. Y en poco tiempo, se abrió la puerta de la sala de estar. La que apareció en la puerta, como todos esperaban, fue la Princesa Imperial Graziella Filas Rieseld.

Sin una sola escolta, vendría sola. Quizás eso se debió a su inquebrantable presunción, pero a pesar de que estaba dentro de la capital imperial, la residencia Yakagi debería haber sido un territorio hostil para ella. Sin embargo, ella no parecía estar en guardia en lo más mínimo. De hecho, lo primero que salió de su boca fue algo que sonó muchísimo como una disculpa.

“Lo siento, llego tarde. Los informes realmente se habían acumulado”.

Su anuncio de tardanza hizo que pareciera que había sido su intención venir aquí todo el tiempo. Y antes, nada menos. Todos la vieron con expresión de desconcierto, pero Graziella miraba hacia la esquina de la sala de estar. En la cola de caballo que sobresale del escritorio, específicamente. No había necesidad de preguntar el motivo de su mirada escéptica.

“… Por cierto, ¿qué es eso?”

Al escuchar la pregunta de Graziella, la cola de caballo de Lefille saltó del susto. Lefille no pudo ver a nadie desde su escondite, por lo que aún no estaba segura de que la hubieran descubierto… aunque la atmósfera en la habitación probablemente lo delató. Tal vez incapaz de soportar más el incómodo silencio, salió de debajo del escritorio.

“Hmph… Así que me viste.”

Lefille había aceptado más o menos su destino, pero estaba actuando como si nada y tratando de esconder su vergonzoso fracaso debajo de la alfombra. Ella estaba tratando de actuar con calma, pero simplemente no estaba funcionando con su apariencia. Mientras tanto, cuando Graziella vio (la ahora diminuta) Lefille, su mirada se volvió aún más escrutadora.

“¿Quién es esa? Me parece familiar”.

“¿Qué? Oh, um… yo soy, um… ”

Parecía que aún no la habían descubierto, después de todo. Aferrándose a esa esperanza, hizo un último intento desesperado por engañar a Graziella, pero fue demasiado lenta en el proceso. Reiji y Titania fueron mucho más rápidos.

“Es Lefille-san.”

“Es la Doncella de los Espíritus del Santuario”.

“¡NOOOOOOOO! ¡No puedes decírselo!”

No tenían malas intenciones; simplemente decían la verdad. Pero fue una sentencia de muerte para Lefille. Después de que ella gritó, la habitación se hundió en el silencio.

“¿La Doncella de los Espíritus del Santuario? ¿Esta pequeña niña?”

Cuando Graziella pidió confirmación, Lefille asintió una vez. Era bastante difícil de creer que una persona pudiera encogerse, pero tal vez porque Graziella estaba familiarizada con Lefille, no podía reírse del parecido. Mientras tanto, Lefille fue repentinamente presa de una extraña idea.

“¡H-Hmph! ¿Quieres pelear? Si lo hace, ¡aceptaré con mucho gusto su desafío! ¡Todavía puedo usar el poder de los espíritus de esta forma esta vez! Así que si vas a venir a por mí, ¡entonces ven!”

Lefille comenzó a hacer shadowboxing, lanzando sus pequeños golpes en dirección a Graziella. Sus movimientos fueron impresionantemente rápidos, pero eso solo aumentó la extrañeza de la situación.

Graziella quedó completamente perplejo. Eventualmente, después de lograr asimilarlo todo, o tal vez simplemente llegar a su punto de ruptura…