Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 5

Capitulo 3: El Sexto Y El Séptimo Día: Una Mensajera Corrupta

Parte 5

Ya veo. Por lo tanto, no se trataba solo de productos de su tierra natal, sino también de especialidades locales que adquirieron de los pueblos y ciudades en el camino que vendieron. Gracias a eso, continúan haciendo negocios continuamente.

“La carne de Giba es rara. Estoy seguro de que venderá lotes en otras ciudades. Me gustaría, más desigual.”

“Ya veo… ¿Exactamente cuánto pensabas que querías?”

Los ojos de Shumiral se dispararon un poco hacia abajo mientras lo reflexionaba.

“… Si es posible, me gustaría 60 monedas blancas”.

60 monedas blancas… Según algunos cálculos aproximados en mi cabeza, eso significaba alrededor de 40 kilos.

Aun así, Ruu y Rutim tenían mucho exceso de carne incluso ahora, así que eso no sería un problema en absoluto.

“En ese caso, ¿qué tal si lo preparo todo justo antes de que The Silver Vase deje Genos? Si lo preparo justo antes de vendértelo, deberías obtener medio año completo con él”.

Los ojos de Shumiral se entrecerraron y parecía muy feliz.

“Ese método es de gran ayuda. Gracias.”

“¡De ningún modo! ¡Soy yo quien debería agradecerte! Además de pasar por un refrigerio todos los días, también me trajiste esta maravillosa propuesta”.

“Nuestro florero de plata, y tú, han formado un muy buen vínculo. Doy las gracias al dios oriental, Sym.”

Con eso, la mirada de Shumiral se movió a mi lado.

Mientras tanto, Vina Ruu miraba fijamente la carretera y fingía ignorancia. “… Asuta, te llamó, Vina Ruu. ¿Ese es tu nombre?”

“¿Qué desea…?” Vina Ruu respondió mientras miraba a Shumiral y parecía que le resultaba un gran dolor.

Shumiral sacudió la cabeza, su rostro permaneció completamente inexpresivo.

“No, solo pensé que era un nombre hermoso. Pues bien, discúlpeme…” dijo Shumiral, luego levantó su capucha nuevamente y se fue.

Vina Ruu cruzó altivamente sus brazos y yo suspiré un poco.

“Hmm, parecía un poco dolido, de alguna manera… Aun así, se está convirtiendo en una persona importante en mi vida”.

“Eso puede ser así para ti, pero no lo es para mí. Te dije que simplemente no me gustan las personas cuyas emociones no puedo leer, ¿no…?”

“¿Es eso así? Sin embargo, siento que es un poco vergonzoso tratarlo como a alguien tan esquemático como Kamyua Yoshu”.

“Sí, él es completamente diferente, pero todavía encuentro personas como tú que no pueden ocultar sus emociones para ser mucho más encantadoras…”

Mientras tuvimos esa conversación, Vina Ruu lanzó una mirada preocupada detrás de nosotros.

Como siempre, Ai Fa todavía descansaba a la sombra de un árbol a unos cinco metros de distancia.

Ella realmente no parecía tener ninguna energía en este momento.

“Por eso tengo dificultades para tratar con personas que esconden sus corazones como Ai Fa…”

“Hmm…  ¿Pero  no  te  hace  realmente  feliz  cuando  una  persona  así ocasionalmente deja escapar sus serias emociones?”

“¿Es por eso que encuentras a una mujer como Ai Fa tan encantadora…?”

“E-Eso no es lo que quise decir”.

Si bien disfrutamos de ese intercambio pacífico, el número de personas que pasaban aumentó constantemente.

Justo cuando pensaba que la mitad posterior de nuestra pelea estaba comenzando, vi dos caras familiares que se acercaban.

“¡Asuta, dos por favor!”

“¿Puedo conseguir dos, Asuta?”

Eran Tara y Yumi, y habían ordenado en perfecta sincronización.

La joven de piel marrón amarillenta y la niña de piel blanca marfil se miraron fijamente, con una diferencia de altura de aproximadamente dos cabezas entre ellas.

“¡Ah! ¡Eres ese chico de  entonces!” Yumi gritó, y Tara solo  parecía sorprendida.

“¿Cuándo significa ‘de entonces’?”

“Ah, ¿entonces no te acuerdas? Bueno, lo que sea… Aun así, pareces muy amigable con Asuta.”

“¡Si! ¡Le debo mi vida!”

Eso fue definitivamente una exageración, pero al pensar en eso, conocí a Tara durante ese tiempo con Doddo Suun y Yumi cuando Mida Suun apareció de repente. Mientras reflexionaba sobre cuán extraño podría ser el destino, puse el brasero en su lugar y comencé a saltear aria.

“Hmm, seguro que tienes algunas habilidades, para obtener incluso un hijo de sangre pura de Genos como cliente. Y luego incluso vendiste hamburguesas de giba a algunos viejos borrachos antes, ¿no?”

Ese segundo ‘usted’ se refería naturalmente a Vina Ruu.

Al escuchar eso, Vina Ruu se encogió de hombros con gracia.

“Sinceramente, creo que es un gran problema. Quiero decir, tus puestos están hasta aquí, pero estás ganando más que nadie, ¿verdad? E incluso hay una buena cantidad de gente del oeste que viene ahora también,

¿verdad?”

“Sí, afortunadamente. Dos de tus amigos estuvieron aquí hace un momento e hicieron una compra.”

“Jeje. Eso es porque he estado corriendo la voz por todas partes. Apuesto a que un montón de jóvenes han oído hablar de tu reputación y ya se han detenido, ¿no?” Yumi se jactó orgullosamente.

“¡También le dije a muchos de mis amigos!” Tara intervino en voz alta. Inmediatamente después, sin embargo, parecía abatida.

“Pero todos dijeron que tenían miedo de Giba y que no vendrían… Y que sus mamás y papás los regañarían si lo hicieran…”

“No hay ayuda para eso. Las personas que han vivido en Genos durante mucho tiempo probablemente no tengan interés en comer giba. Me imagino que la única forma de lidiar con eso es darle tiempo, ¿no?” Dije, tratando de consolar a Tara mientras la carne de giba se cocinaba.

“¡Oye, ella también es cliente, ¿no?! Eso no es justo, solo actúo cortés conmigo”.

“¿Huh? Bueno, hay que tener en cuenta la diferencia de edad… Ah, y conocí a Tara antes de abrir la tienda. ¿Verdad, Tara?”

“¡Si!” Tara respondió, luciendo feliz nuevamente mientras daba un gran asentimiento.

“Grr, todavía no estoy contenta con eso…” Yumi se quejó con una mirada de descontento sobre ella. “Por cierto… ¿Cuántos días has estado ejecutando este puesto por ahora?”

“¿Eh? El vecino ha estado abierto durante siete días, mientras que han sido tres para este”.

“Ya veo. Bueno, entonces, ¿qué planeas hacer a continuación? No solo planeas cerrar la tienda después de diez días, ¿verdad?”

Mientras pensaba que estaba segura de cómo funcionaban los puestos, le respondí: “No lo estoy”, asintiendo. “En este punto, estaba pensando que me gustaría seguir haciendo negocios todo el tiempo que pueda”.

“Bueno, entonces, ¿qué tal si firmas tu próximo contrato con nuestro lugar?”

“¿Huh?”

“Verás, mi familia en realidad dirige una posada llamada El Viento del Oeste, y también estamos involucrados en la gestión de los puestos. Y mi viejo puede ser un verdadero testarudo, pero mi madre ya sabe lo deliciosa que es la carne de giba. Estoy seguro de que lo trataremos como un socio comercial normal”.

Esta fue seriamente una propuesta inesperada.

“El veterano que dirige La Cola de Kimyuus tiene algún tipo de rencor contra la gente del borde del bosque y te trata mal, ¿no? Y probablemente quieras  seguir  haciendo  negocios  en circunstancias  más  agradables, ¿verdad?”

“E-Espera un segundo, por favor. ¿Milano Mas, el dueño de La Cola de Kimyuus, tiene rencor contra la gente del borde del bosque?”

“Sí, aunque realmente no conozco los detalles. Creo que un miembro del borde del bosque mató a su familiar o amigo o algo… Pero al final no hubo ninguna prueba, por lo que todo quedó sin resolver”.

Había un brillo ligeramente turbulento en los ojos de Yumi.

“Incidentes como ese suceden mucho, por lo que nadie confía en la gente del borde del bosque. Quiero decir, si no hubiera visto ese intercambio entre tú y ese monstruo, probablemente nunca me habría acercado tanto… Pero como dijiste, eso es algo que tomará algo de tiempo”.

“Correcto… Así es como se siente”.

Seguí adelante y preparé los cuatro myamuu giba, conteniendo un suspiro todo el tiempo.

“Con respecto al contrato, me gustaría hablar primero con Milano Mas. Pero personalmente no siento la necesidad de distanciarme de él ni nada, así que me gustaría respetar sus sentimientos aquí. ¿Está eso bien?”

“Sí, por supuesto. Solo adelante y manéjalo como quieras. Mientras todavía pueda comer su deliciosa cocina, entonces no tengo problemas”, dijo Yumi, una vez más luciendo una sonrisa inocente mientras aceptaba su myamuu giba.

Tara dejó escapar un emocionado, “¡Yay!” también. Luego, cuando salió corriendo hacia el puesto de myamuu giba, los ojos de Yumi se abrieron de par en par.

“¿Huh? ¿Estás planeando comprar aún más? ”

“¡Si! ¡Los myamuu giba son para los hombres de las tiendas de telas y macetas! ¡Pero mi papá y yo comemos hamburguesas de giba!”

“Hmm… Seguro que eres un gran trabajador, considerando lo pequeño que eres”.

Después de decir eso, Yumi pareció esperar a que Tara terminara sus compras por alguna razón, luego se dirigieron hacia el sur juntas.

Sus pieles eran de diferentes tonos y, sin embargo, todavía parecían hermanas. Mientras los despedía a los dos, pensé en la parte posterior de mi mente que solo quedaban tres días en mis primeros diez días.

Inicialmente pensé que estaría muy satisfecho si pudiera vender entre 20 y 30 comidas al día, pero había ido tan bien que terminamos agregando un segundo carro y vendiendo casi 150 al día.

Habíamos evitado la amenaza del clan Suun por el momento, así que por ahora, solo necesitaba concentrarme en la tienda.

Faltaban siete días para la reunión de jefes del clan. Si esta tienda siguió obteniendo resultados hasta entonces, entonces eso debería hacer que sea más fácil mostrar la posibilidad de un futuro brillante para el borde del bosque en la reunión.

No dejaré que las cosas salgan como quiere el clan Suun, pase lo que pase.

Con ese pensamiento firmemente en mi corazón, saqué la bolsa de cuero llena de carne de giba.

***

Al final de ese día, habíamos vendido 145 comidas en total.

Si nos hubiéramos quedado alrededor de media hora más o menos, probablemente podríamos haber vendido los cinco restantes. Pero no pude aclarar mi acuerdo con el clan Ruu, así que cuando estaba a medio camino entre el momento en que el sol alcanzó su punto máximo y el atardecer, comenzamos a prepararnos para regresar.

Por cierto, terminamos vendiendo solo 800 gramos de cecina. Eso solo equivalía a 12 monedas rojas en ganancias, pero solo necesitaba sal y carne para hacer. Y así, incluso sin el acuerdo con The Silver Vase, todavía tenía el potencial de ser una adición significativa a nuestro arsenal.

Pero, en cualquier caso, nuestro día hábil terminó sin incidentes.

Quería hablar con Milano Mas sobre mi próximo contrato, pero estaba escondido en la cocina mientras que el único en el escritorio era su hija, que estaba aterrorizada por la gente del borde del bosque. Y así, decidí posponer eso hasta más tarde.

Kamyua Yoshu tampoco estaba cerca, así que para ayer y hoy, solo había visto a su aprendiz, Leito. De alguna manera, sentía que mi relación con él se estaba debilitando justo cuando estaba viendo más y más del clan Suun.

¿Nos estaba evitando a propósito, tomando en serio las palabras de Donda Ruu? ¿Quizás tenía alguna otra razón en mente? ¿O tal vez fue solo por el destino? No era un dios, así que ni siquiera podía comenzar a adivinar.

Bueno, supongo que es mejor que él metiendo indiscriminadamente su nariz en mis asuntos.

Cuando surgió este pensamiento, mientras mi trío, Ai Fa y Vina Ruu comenzaban a regresar, calmó la mayoría de mis preocupaciones sobre él.

Para empezar, tuvimos que pasar por la casa del Fa para tomar lo que necesitábamos. Lo que eso significaba era: todos los ingredientes que dormían en nuestra despensa, productos cotidianos como ropa, piedras de afilar y correas de cuero, además del dinero que habíamos ganado hasta ahora.

En este punto, ya habíamos ganado más de 60 monedas blancas. Una vez que finalmente lleguemos a 100 monedas blancas, podremos cambiar eso por una plata. Pero hasta entonces, tendríamos que guardar las monedas que teníamos o caminar con ellas.

“Nos despedimos de esta casa durante siete días…” murmuró Ai Fa sin emoción mientras miraba la despensa ahora vacía.

Esta era la segunda vez que estaba fuera de casa durante un período prolongado de tiempo, pero, naturalmente, sería una experiencia nueva para Ai Fa.

Nos metimos todo lo posible en la olla, y luego, lo que no encajaba, Ai Fa arrastró el tablero de arrastre. Y con eso, sintiendo un poco como si estuviéramos mudando casas, nos dirigimos al asentamiento Ruu.

“¡Ah, bienvenido a casa!”

Después de entregar nuestras cuchillas, nos dirigimos hacia la cocina, donde encontramos a Rimee y Reina Ruu preparando la cena.

“Ehehe. Realmente estás viviendo en el asentamiento de Ruu, ¿verdad?” Rimee Ruu dijo con una sonrisa dirigida a mí y a Ai Fa. No había tenido muchas oportunidades de escuchar lo que estaba sucediendo ayer.

“Si. Contaremos con su amabilidad durante los siete días hasta la reunión del jefe del clan. ¿Estás haciendo hamburguesas esta noche…?”

“¡Sip! ¡Las dos nos hemos vuelto muy buenos para hacerlos! Son realmente sabrosos, ¡así que esperen con ansias!”

La sonrisa de Rimee Ruu era tan brillante que no pude evitar sonreír sin siquiera pensar.

Después de un poco de vacilación, Reina Ruu también levantó la vista del aria en cubitos y también sonrió.

“Bienvenido a la casa Ruu. ¿Trabajarás aquí también, Asuta?”

“Si. Tomaré prestado uno de tus rincones para eso”, respondí mientras extendía una gran cantidad de carne, verduras y vino de frutas encima de mi estación de trabajo.

Mi plan inicial había sido comenzar a comprar carne del clan Ruu hoy, pero teniendo en cuenta las circunstancias, usaría primero la carne de la casa del Fa.