Isekai Mahou wa Okureteru (NL)

Volumen 3

Capitulo 2: La Diosa Es Súper Estricta Con Ella

Parte 3

Habiendo recibido repentinamente una invitación de Hadorious, Reiji siguió al mensajero que estaba esperando frente a la posada y fue escoltado hasta la finca del duque. Y ahora, con una expresión bastante rígida en su rostro, se paró frente a la habitación privada de Hadorious.

Reiji podía escuchar el sonido de un instrumento musical. Probablemente era un artista tocando música en algún lugar de la mansión. Resonó a través de las paredes y el aire, y la melodía suavemente amortiguada calmó su corazón con su dulzura. Al escucharlo, Reiji una vez más se preparó para su audiencia con el dueño de la habitación frente a él.

Antes de dejar la posada, Titania le había advertido que tuviera cuidado, y Mizuki había expresado su preocupación. La otra parte era Hadorious, después de todo. También habían dicho que Reiji no tenía que responder a la invitación del duque, pero Reiji tenía sus propios pensamientos sobre el asunto.

De hecho, sabía que había algún motivo oculto detrás de esta reunión. Tal como dijo Titania, era un hombre en el que no se podía confiar plenamente.

No tenía pruebas reales para pensar que el duque estaba tramando algo, pero tenía una premonición inquebrantable de ello.

De ahora en adelante, era muy probable que se enfrentara a Hadorious muchas veces. Por lo tanto, Reiji no podía simplemente decir que no quería conocerlo. Después de todo, sería mejor para él probar la disposición del hombre llamado Lucas de Hadorious en una etapa anterior que en una posterior.

Y con ese fin, Reiji una vez más reforzó su determinación y llamó a la puerta. Siguiendo la voz de Hadorious preguntando quién llamaba, Reiji se identificó. El duque le dijo secamente que entrara.

Reiji se anunció cortésmente a sí mismo mientras abría la puerta, y un espacio como un salón lujosamente distribuido se extendía ante sus ojos. Dando un paso hacia el interior de la habitación, ofreció un breve saludo y luego comenzó un intercambio profesional con Hadorious, quien estaba elegantemente sentado en el sofá.

“Héroe-dono, ¿no te vas a sentar?”

“En mi país, es costumbre que un invitado tome asiento solo después de que el dueño de la habitación lo anime, así que dudo un poco en hacerlo por mi propia cuenta”.

Reiji respondió con un tono ligeramente agudo, y realmente no podía decir si tenía una mente Hadorious o no. El duque luego ofreció un poco de admiración por sus modales.

“Vaya… El país del que Héroe-dono es de etiqueta de honores bastante considerablemente, ya veo. Entonces, ¿debo animarte también en este sentido?”

Siguiendo la mirada de Hadorious, Reiji vio un vaso encima de la mesa con líquido de un tinte similar a su propio cabello rojizo.

“¿Esto es vino?”

“Sí, endulzado. El sabor no es malo”. Aun así…

“Agradezco la consideración, pero…”

“¿Héroe-dono no bebe vino?”

“En el país del que soy, está prohibido para las personas de mi edad que aún no han alcanzado la edad adulta tomar alcohol… Cualquier cosa que contenga licores o vino, así que tendré que abstenerme aquí”.

Reiji dio una respuesta taciturna, pero Hadorious tomó un sorbo del vaso y lo interrogó más.

“Hmph, entonces, ¿por qué existe ese tipo de ley?”

“Hasta que los humanos superen los veinte años de edad, su capacidad para digerir vino y licores es bastante baja. Este tipo de bebidas tienen un efecto negativo en el propio organismo, especialmente en aquellos que aún no han alcanzado la edad adulta, por lo que está prohibido por el país”.

Mientras lo explicaba, Hadorious desvió la mirada hacia el contenido del vaso.

“Incluso esta bebida que llamamos la sangre de la Diosa, ¿eh? Además, que esté prohibido por la ley… Esa es una decisión bastante estricta, pero… No, ¿es para esforzarse por formar a personas con talento?”

Hadorious murmuró con admiración a nadie en particular, y parecía como si hubiera olvidado por completo que Reiji estaba allí. ¿Estaba tan absorto en sus pensamientos? Al ver que Hadorious no se movía en lo más mínimo, Reiji le hizo una pregunta franca.

“Entonces, ¿por qué me llamaste aquí hoy?”

“No es nada importante. Solo quería hablar un poco con el héroe, eso es todo”.

“Sin embargo, esta no es la atmósfera de una conversación agradable”.

“Hmph, discúlpame por eso.”

¿Qué excusa había? Fue un descarado. Desde que Reiji entró en la habitación, el interior se llenó hasta el borde con una estática atmosférica hormigueante. Y cuando Reiji lo señaló con frialdad, como diciendo que estaba probando a Reiji, Hadorious le dio una sonrisa condescendiente y una breve disculpa que no se sintió en lo más mínimo sincera.

Reiji podía sentir un exceso de compostura en las probabilidades y finales de todas las acciones de Hadorious. Era una fuerza a tener en cuenta.

Era como si estuviera diciendo que personalmente creía que no había razón para tratar a Reiji, el héroe, de una manera especial. Su simple mirada ocultaba una mirada, y después de examinar cada acción que Reiji hacía, entrecerró los ojos como si se compadeciera del contenido de su vaso y le hizo una pregunta a Reiji.

“Héroe-dono, ¿por qué asumiste la subyugación del Señor Demonio?”

“Para salvar a la gente de este mundo, pero ¿Qué hay con ello?”

La respuesta que dio Reiji fue la misma que le había dicho a Almadious en la sala de audiencias. Eso no había cambiado. Sin embargo, en cuanto a Hadorious…

“Los que estás tratando de salvar son personas que no tienen ninguna relación contigo, ¿no es así? Gente a la que no te beneficiarías salvar. Pero aun así, ¿estás diciendo que tienes la intención de hacer exactamente eso?”

“¿A qué se refiere exactamente, su excelencia?”

“Nada mayor. Me preguntaba cuál es la fuente de la noble forma de pensar de Héroe-dono”.

“…?”

¿Qué estaba buscando este hombre dentro de Reiji al preguntarle eso? Su pregunta era incomprensible, y Reiji fue incapaz de adivinar el significado detrás de la casi compasiva mirada que le apuntaba.

Si hubiera sido la mirada aguda y ambiciosa de un halcón, entonces habría sido evidente que estaba buscando una debilidad en Reiji. Pero no, Hadorious estaba hablando de ideales y metas. ¿Cuál era el significado de que él se entrometiera en la forma de pensar de Reiji?

Mientras Reiji lo miraba con una mirada perpleja, Hadorious de repente dejó escapar una risa seca como si pensara que su propia pregunta no había sido interesante.

“Pues bien. Déjame preguntarte una vez más: ¿de qué tipo de lugar es el mundo del que proviene el héroe?”

“¿Por ‘de qué tipo’ te refieres a…?”

“Déjame ver… Compáralo con este mundo, por ejemplo. Eso es lo que me gustaría escuchar”.

¿Estuvo bien comparar los dos mundos así? Reiji recordó haber tenido una conversación similar en el castillo real con Almadious y los demás, pero…

“En comparación con este mundo, la tecnología en nuestro mundo ha avanzado mucho más. Este mundo puede tener magia, pero en nuestro mundo, se podría decir que la tecnología se ha desarrollado más allá del punto en que tal cosa es innecesaria”.

“Avance, desarrollo… ¿Eso es todo? Lo que dijiste antes sobre el vino…¿es también para esos fines?”

“Si.”

Reiji respondió honestamente, y cuando lo hizo, Hadorious de repente se puso de pie y miró hacia la ventana. Hizo una pausa por un momento y luego habló de nuevo mientras miraba hacia afuera.

“Héroe-dono, ¿qué piensas de este mundo?”

“Si lo comparara con nuestro mundo, no tendría fin, pero creo que este es un buen mundo”.

“Un buen mundo, ¿lo es…?”

Lo que salió de la boca de Hadorious fue un murmullo de alguna manera desalentado. Reiji no estaba seguro de qué razón tenía para hacer esa pregunta y qué estaba pensando, pero Hadorious solo continuó en su línea de preguntas.

“Héroe-dono, ¿qué hay fuera de esta ventana?”

¿Era esto para instarlo a que echara un vistazo? Reiji se acercó un poco más y miró la vista desde el tercer piso. Podía ver las calles y la ciudad haciendo sus actividades diarias.

La escena envuelta por el crepúsculo, pudo ver que las lámparas escasamente dispuestas en la ciudad de Kurant comenzaban a parpadear, junto con las casas y las personas que iluminaban. En la distancia, también pudo ver las brillantes lámparas azules y verdes características del distrito recreativo.

“¿Qué pasa con eso?”

“Este mundo que ves no ha cambiado en absoluto en los últimos cientos de años. Todos duermen y se despiertan a una hora determinada, hacen su trabajo, encuentran el amor, tienen hijos y luego mueren. Ese ciclo continúa cuando no hay deseo de desarrollo, e incluso cuando los países surgen y bajan del conflicto y la diplomacia, la conciencia fundamental de la gente sigue siendo la misma. Están detenidos, nunca para avanzar”.

Pero eso fue todo un preámbulo. Hadorious luego hizo una fría declaración. “Este siempre ha sido el jardín en miniatura de la Diosa”.

¿Fue una declaración de tristeza? ¿Dolor? Sin duda, era cierto que el desarrollo de la civilización y la cultura en el mundo era responsabilidad de las personas que vivían allí. Puede ser algo que todos y todos desean, pero forzar su desarrollo también estuvo mal. Al menos, eso es lo que pensó Reiji.

“Para ustedes que vienen de un mundo desarrollado, ¿todavía creen que es algo bueno?”

“Si la gente puede caminar en paz, ¿no es esa su propia forma de vida? Los cambios irracionales también generan conflictos, e incluso en nuestro mundo, el conflicto entre seres humanos es inextinguible”.

“…”

Hadorious guardó silencio. El mismo Reiji se puso a pensar, y Hadorious finalmente habló una vez más.

“Aunque es repentino, me gustaría que vayas al Imperio desde aquí”.

“¿Qué…?”

“El Imperio, principalmente Su Alteza Imperial Graziella, ha estado haciendo movimientos audaces. Me gustaría que mantuvieras eso bajo control y que residieras en el Imperio por un breve período”.

Hadorious dio a conocer su deseo en términos inequívocos. La forma en que habló no dejó lugar para el consentimiento o el rechazo. Fue una declaración definitiva sin tener en cuenta cómo se sentía Reiji.

“¿Es esa demanda algo que tengo que escuchar pase lo que pase, me pregunto?”

“Por supuesto.”

“Sin embargo, no tengo la obligación de hacerlo. Lo más importante que debo manejar es la subyugación del Señor Demonio Nakshatra”.

“Ciertamente que sí. Sin embargo, Héroe-dono, déjame preguntarte algo…¿Por casualidad viniste corriendo porque Gregory habló?”

En el momento en que terminó de disparar esas palabras, la intensidad de la atmósfera que llenaba la habitación cambió con un chasquido audible. Por supuesto, eso se debió a que las propias emociones de Reiji se dispararon.

“¿Es eso una amenaza?”

“Hmph. Si quieres pensarlo de esa manera, no me importa. Sin embargo, no es como si Gregory hubiera violado las regulaciones militares ni nada. Naturalmente, no hay forma de juzgarlo en consecuencia. Por lo tanto, sus sospechas no son más que eso”.

“¡Tch! ¿De verdad vas a decir algo así después de usar a mi amigo como señuelo?”

“Eso no fue más que dejar a un lado a unos pocos para salvar a muchos. No es nada importante. Puedes esperar las noticias de tu buen amigo. Nuestras investigaciones están progresando, después de todo. Esté vivo o no, eventualmente lo rastrearemos. Sin embargo, todavía no hay informes”.

Con eso, Hadorious se burló como si dijera que el asunto no era más que una bagatela sin valor.

“Aunque dudo que esté vivo”.

“Cómo te atreves a decir eso tan descaradamente…”

La ira de Reiji había sobrepasado su punto de ebullición, e incluso con toda la extensión de eso dirigido a él, Hadorious respondió sin rodeos.

“¿Qué? Todo lo que hice fue hablar de la posibilidad”.

“¿No sientes al menos alguna culpa hacia Suimei?”

“Si dijera que sí, ¿te sentirías satisfecho?”

“¡Tch!”

No podía perdonar esa pregunta sarcástica. Apretando su mandíbula con tanta fuerza que sus dientes crujieron, Reiji miró a Hadorious mientras soltaba su ira. No había olvidado su lugar y era muy consciente de que estaba siendo grosero. Era solo que su ira venció a eso. Pero incluso entonces, Hadorious habló con un aire de él como si no le importara en absoluto.

“Suimei Yakagi, ¿verdad? Simplemente tuvo mala suerte. Es simplemente vergonzoso que te enojes tanto conmigo por eso”.

“¡Tu bas—!”

Reiji no pudo dejar de lanzar su ira a través de su mirada y la canalizó en su puño. Se acercó desde donde lo mantenían bajo control y soltó un golpe. Pensó brevemente en qué tipo de preocupaciones tendría si golpeaba a Hadorious, pero no había nada que lo detuviera ahora. El golpe de Reiji, sin embargo, fue detenido por Hadorious con una sola mano.

“¿Qué…?”

“Hmph…”

Como si esto fuera aburrido, Hadorious volvió su mirada hacia Reiji.

Este hombre…

Reiji no estaba usando toda su fuerza.

Pero aun así, en este estado en el que su poder se elevó explosivamente por la protección divina del héroe convocado, fue inesperado que su golpe rápido como un rayo se bloqueara por completo  sin que el oponente ni siquiera parpadeara.

Reiji agitó violentamente su puño capturado a un lado y saltó hacia atrás. Y con una expresión como si hubiera llegado a algún tipo de conclusión, Hadorious una vez más miró hacia la ventana.

“Veo que todavía necesitas diligencia. A este ritmo, el Señor Demonio está lejos de tu alcance. Probablemente sea necesario que acumule todo tipo de experiencia y se vuelva más fuerte. Por cierto, sobre el asunto del Imperio…”

Reiji no tuvo otra opción en el asunto. Si no iba, Hadorious estaba insinuando que algo le pasaría a Gregory.

“…Me iré. Así que no pongas una mano sobre Gregory o su familia. Además, sobre Suimei…”

“Les prometo que pondremos nuestro esfuerzo en la búsqueda. Por lo que parece, tu amigo podría valer algo después de todo”.

“Eres…”

¿Sigues diciendo tonterías como esa?

Aunque eso era lo que Reiji quería decir, sabía que su brazo estaba siendo torcido y no había nada que pudiera hacer al respecto. Era frustrante, pero girar sobre sus talones y salir silenciosamente de la habitación era lo máximo que podía hacer para oponerse a Hadorious. Y justo cuando agarró el pomo de la puerta…

“Héroe-dono, hay una cosa que debo decirte.”

“… ¿Qué es?”

“A partir de ahora, es probable que te enfrentes a muchos enemigos, ya sean humanos o de otras razas”.

¿Por qué estaba diciendo eso? No podría ser…

“¿Estás tratando de decir que lo que le pregunté a Rajas fue una tontería?”

“No, eso fue sinceramente un alivio”.

“¿Qué…?”

La respuesta de Hadorious estuvo completamente fuera del rango de las expectativas de Reiji. Pensó que estaba a punto de recibir un consejo sincero en forma de regaños sobre preguntarle a un demonio por qué luchaba.

“Héroe-dono, este es un lugar diferente del mundo del que vienes. Es bueno pensar por ti mismo sobre lo que hay aquí y tener eso reflejado en tus acciones. Sin embargo, cuando se trata de luchar contra los demonios, no hay bien ni mal”.

“¿Qué quieres decir?”

“Significa que son simplemente ese tipo de ser. No atacan a los humanos ni a las otras razas por nada parecido a una razón. Su misma existencia es cumplir el propósito de una existencia más grandiosa, llevar a la ruina a toda la humanidad”.

“¿El propósito de una existencia más grandiosa? Que es…”

“No es necesario que lo sepas como eres ahora. Por lo tanto, la pregunta que hiciste no tiene sentido”.

Y con eso, Hadorious puso fin a lo que dijo. ¿Era una advertencia, o estaba reprendiendo a Reiji? Reiji no pudo decirlo al final.

“… ¿Ya terminaste?”

“Veamos, entonces una cosa más”.

¿Qué intención tenía él de acumular más palabras aquí? Mientras miraba por la ventana, lanzó una pregunta más mientras su expresión no se podía ver.

“Héroe-dono, al final de esta pelea, después de que todo haya terminado, ¿qué deseas?”

“Nada en realidad. No necesito nada”.

“Estado, honor, riquezas, mujeres… Podrías tener todos tus deseos satisfechos al contenido de tu corazón, ¿sabes?”

“Deja la mierda. No sé qué tipo de intenciones tienes al preguntarme eso, pero no pelearé por ninguna razón como esa”.

“Ya veo. Entonces ese es el final de mis preguntas. Hasta que partas hacia el Imperio, aunque será por un corto tiempo, descansa un poco”.

Sin mostrar ninguna cortesía a Hadorious, quien todavía estaba mirando hacia la ventana, Reiji salió de la habitación y se dirigió de regreso a la posada.

“El héroe convocado, ¿no es así…?”

Hadorious observó a Reiji caminar por la calle desde la ventana con una mirada algo triste, y luego miró hacia el cielo. Al contemplar la melancólica extensión ennegrecida por el crepúsculo, Hadorious le hizo una pregunta al héroe que ya no estaba presente.

“Héroe Reiji, ¿qué piensas realmente de este mundo? ¿De verdad puedes decir que es bueno? ¿Este mundo donde, debido a la Diosa, todo progreso se ha detenido? Este mundo podrido sin futuro…”

***

La biblioteca… simplemente no estaba allí.

En la capital imperial de Filas Philia, había un ejército permanente controlado escrupulosamente que solo se movía bajo el mando del emperador. Se consideró el apogeo del arte militar, tanto dentro como fuera del Imperio.

Por lo general, escuchar que una metrópoli tenía un gran ejército en pie hacía que el lugar pareciera bastante grosero, pero ese no era el caso de Filas Philia.

Era una ciudad refinada y académica también conocida por sus académicos. Incluso se jactaba de tener una gran biblioteca superior a las otras naciones.

Se dice que tiene una colección de libros que se remontan a la fundación de la nación, lo que lo convierte en el lugar ideal para investigar un poco.

Suimei preguntó al respecto antes de salir de su casa… Pero no importa cuánto buscó en la ciudad, no pudo encontrar ningún edificio como ese. A este paso, bien podría haberse dicho que nunca lo haría.

“¿Eh…?”

No era como si Suimei no tuviera sentido de la orientación. Era cierto que se había perdido en el Castillo Real Camellia de Astel una vez, pero esto era diferente.

El diseño de la ciudad conocida como Filas Philia fue difícil de descifrar. Las carreteras principales no eran un problema, pero una vez que llegó a las calles laterales que se ramificaban, no importaba qué tan lejos o adónde caminara, no había nada más que casas residenciales.

Y gracias a la disposición laberíntica de las calles, siempre acabaría en algún lugar extraño donde no le quedaba más remedio que dar la vuelta. Era un laberinto difícil de escapar.

De repente se detuvo, Suimei miró a su alrededor. A su lado había un distrito recreativo que parecía durar una eternidad. Y delante de él había una casa residencial construida en su mayoría con ladrillos rojos vivos.

¿Qué iba a hacer? A este ritmo, nunca podría recopilar información sobre la invocación del héroe.

Finalmente había arreglado su lugar y estaba listo para analizar el círculo de invocación, pero ahora tenía esta situación con la que lidiar. Justo cuando estaba a punto de dejar de lado su extraño sentido de orgullo y usar la magia para hacer algo al respecto…

“Estás en el camino. Amablemente… hazte a un lado ya”.

Esa voz familiar y encantadora. Esas pausas características y extravagantes.

El tono plano incapaz de ocultar las espinas de irritación en sus palabras. Al escucharlo, Suimei se dio la vuelta de inmediato. Detrás de él estaba una chica con coletas de color violeta rojizo y un parche en el ojo con un elaborado adorno.

Llevaba un excéntrico atuendo gótico de Lolita a pesar de ser un mundo diferente. Tal como pensaba, ella era alguien a quien recordaba. O más bien, alguien a quien no había forma de que pudiera olvidar.

De hecho, esta era sin duda la chica del puesto de control, Liliana Zandyke. Sin embargo, parecía que esta vez no estaba sola. Frente a ella había dos hombres con túnicas de color marrón rojizo con capuchas. Por lo que Suimei podía ver y oír, no parecían tener una conversación amistosa. Los dos hombres en túnica hablaron con Liliana como si estuvieran amonestando a un niño irracional.

“Todo lo que tienes que hacer es transmitirle a ese padre tuyo lo que te acabamos de decir”.

“Te estás… poniendo molesto. No estoy… en posición de intervenir… en lo que respecta a los asuntos del coronel”.

“Seguramente puedes manejarlo de alguna manera. Solo estoy tratando de expresar mi deseo de que él sea obediente”.

“Por favor. No me hagas… repetirme. ”

El hombre de la túnica estaba haciendo cortésmente algún tipo de petición. Liliana estaba tratando todo el asunto como si fuera absurdo, pero el hombre no mostró signos de retroceder. Fue entonces cuando entró el segundo hombre vestido.

“Aunque te lo preguntamos con tanta seriedad, ¿estás diciendo que no escucharás?”

“Así es. Es por eso—”

“Parece que no tenemos otra opción entonces. Tendremos que cambiar de opinión… a la fuerza”.

Los dos hombres en túnicas manifestaron maná a su alrededor, recitaron amenazas de cliché y sacaron bastones del largo de sus brazos. En respuesta, sin una pizca de miedo o sorpresa, Liliana simplemente entrecerró su único ojo hacia ellos.

“Sabiendo que soy… uno de los Doce de élite… ¿todavía te atreverías… a probar algo como esto?”

“¡Ha! ¿El arma humana del Imperio? ¡Esos son solo rumores exagerados! Al final, eres una maldita mocosa!”

“Si no escuchas nuestra solicitud, entonces no hay otra manera. En el mejor de los casos, te aferrarás a tu padre llorando”.

Suimei no conocía las circunstancias, pero parecía que los problemas estaban a punto de estallar frente a él. Hablando francamente, parecía que los adultos inútiles se metían con una niña. Aunque considerando la posición de Liliana en el ejército, esa no era una evaluación del todo justa.

Pero ella es solo una niña…

Después de ver tanto, dejaría un mal sabor de boca en la boca de Suimei si se marchaba. No tenía ninguna obligación de echarle una mano, pero tampoco tenía motivos para mirar hacia otro lado. Caminando hacia ellos conspicuamente, Suimei llamó al grupo con voz apática.

“Aaah, lamento entrometerme mientras estás en medio de las cosas aquí”.

“¿Qué demonios pasa contigo?”

“Tú eres…”

Los tres se volvieron hacia Suimei todos a la vez. Cada uno tenía una expresión diferente. Hubo la mueca retorcida de un matón, una mirada perdida de perplejidad y una mirada sorprendida de reconocimiento.

“Molestar a una niña en este tipo de lugar… Ustedes seguramente tienen un buen pasatiempo allí”.

“¿Qué demonios? ¡No tienes nada que ver con esto! ¡Fuera!”

“No puedo hacer eso exactamente. Yo simplemente estoy presente en esta escena de tu pequeña obra, ¿ves?”

“¿Y qué ‘escena’ es esa?”

“Me parece que los adultos se están metiendo con un niño”.

“Tómalo como quieras, pero ¿te atreverás a interferir incluso después de ver estas túnicas?”

“¿Qué? ¿Hay algo especial en tu fea túnica? ”

El más educado de los dos hombres había dicho que, como Suimei, debería sentirse intimidado por la forma en que estaban vestidos, pero Suimei no entendió el significado que tuviera. Mientras respondía a la jactanciosa pregunta del hombre con burla,  su tono cortés cambió a irritación en un instante.

“Tú, campesino que no sabe nada de la túnica especial otorgada solo a los miembros de alto rango del gremio…”

Mientras echaba humo, Liliana llamó a Suimei con voz cautelosa. “¿Qué… estás planeando?”

“¿Hmm? Estaba pasando y me enteré de que algo extraño estaba pasando, eso es todo”.

“Así que… ¿te entrometiste? Esto no tiene… absolutamente nada… que ver contigo”.

Y así, Liliana lo despreció. Ella lo trataba como una molestia entrometida, pero parecía claro que simplemente no lo quería involucrado. Esto llamó la atención del hombre rudo con túnica.

“¿Qué? ¿Es alguien que conoces?”

“No, no es—”

“Sí, nos conocimos no hace mucho y nos hemos acercado bastante”.

“¡¿Que estas—?!”

Liliana se enojó con la mentira desvergonzada y descarada de Suimei. Sin dejarla ver, juguetonamente le sacó la lengua. Probablemente había tenido la intención de sacarlo de la situación como un espectador no involucrado, pero Suimei ya había tomado una decisión. Estaba completamente decidido a intervenir.

“Ya veo, así que no estás relacionado en absoluto…”

“Entonces supongo que también tendremos que usar un poco de fuerza contigo”.

Con eso, los dos hombres comenzaron a acumular maná nuevamente.

El educado sacó su bastón en lo que Suimei asumió era una postura de batalla. Mientras se quejaba abatido de que las calles de la capital imperial podían haber sido más peligrosas de lo que pensaba, Suimei apartó la mirada de sus dos oponentes. Pudo ver a Liliana enfocar su atención en él con exasperación.

“¿Eres estúpido? Si hubieras… fingido no conocerme… te habrían tratado como si no estuvieras involucrado. En realidad, no estás involucrado… Verdaderamente estúpido”.

“¿Estúpido? Eso es malo, ¿sabes? Si abandonara a una niña y siguiera mi camino, mis sueños me perseguirían, y eso no me interesa. Pero tengo que preguntar… ¿Qué está pasando aquí?”

“No tiene… nada que ver contigo… en lo más mínimo. Quédate a un lado. Estos son maestros de alto rango… del Gremio de Magos del Imperio”.

“Sí, pasaré, gracias”.

Y como Suimei rechazó la orden de Liliana… “¿Crees que tienes tiempo para charlar?”

Con una sonrisa desdeñosa, el hombre rudo con túnica tejió un hechizo. Su mana que manaba se desvaneció como si lo llamaran en alguna parte, y las partes del hechizo se unieron rápidamente. Con la invocación de los Elementos rápidamente completada, lo que siguió fue el canto.

“¡Oh fuego! ¡Red Blaze!”

El cántico fue tan breve que esencialmente solo fueron las palabras clave. Un momento después, las columnas de fuego tomaron forma, y cuando el hombre rudo bajó los brazos, las llamas coincidieron con sus movimientos.

Con eso, parecía que el moldeado de las llamas se había completado, y las llamas, que habían tomado la forma de espadas, se balancearon hacia Liliana. Atacaba desde su lado derecho. Para Liliana, que llevaba un parche en el ojo, ese era su punto ciego.

Sin embargo, Liliana esquivó la primera espada por un pequeño margen. En cambio, se clavó en el suelo, arrojando fragmentos de llamas en varias direcciones. Esta secuencia de atacar y esquivar se repitió varias veces, y el área se llenó de brasas y olor a quemado. Quizás después de haber sido rozado por una espada de fuego, parte del atuendo de Liliana estaba chamuscado.

“Heh, no estás a la altura de tu nombre en absoluto, arma humana. Parece que te tengo huyendo. Haha, como pensaba, todos tus putos logros son solo mentiras, ¿no es así?”

“Los cuentos de valor en el campo de batalla son solo cuentos al final. El hecho de que un niño como tu haya jugado un papel activo en el campo de batalla probablemente no sea más que un cuento inventado por el coronel Rogue para elevar su propia posición”.

Aparentemente, tomando el hecho de que ella no respondió como un signo de debilidad, los hombres lanzaron palabras desdeñosas y acusaciones a Liliana. Al escucharlo, la presencia de Liliana vaciló por un solo instante y luego se volvió oscura y peligrosa. Pero los hombres no parecieron darse cuenta. Luego los llamó con tono molesto.

“Ponerte tan engreído… por apuntar a mi punto ciego… y solo… poder rozarme…”

Con esas palabras, los hombres finalmente sintieron la presión proveniente de Liliana. ¿Era eso lo que pretendía? Suimei había estado en el lado receptor de esa presión antes, pero esto no era tan serio como lo había sido en el punto de control.

¿Estaba planeando tomar la delantera aquí empacando el área con su maná? En una pelea entre magos, el rango en el que uno podía controlar su maná era un gran problema.

Si uno podía controlar su maná lo suficiente, era posible obstruir la activación de la magia del oponente, después de todo.

“De este tipo de mierda…”

El hombre grosero finalmente logró pronunciar una sola maldición. Haciendo una mueca de dolor, el hombre educado a su lado comenzó a cantar un hechizo.

“Urgh… ¡No me subestimes! Oh viento, tu eres—”

Magia de viento. Era probable que estuviera ignorando por completo a Suimei, el transeúnte, y apuntando a Liliana. Con esa predicción, Suimei reunió maná en su dedo índice y manipuló los fenómenos en su entorno.

“Ese fuego de allí… Lo tomaré prestado por un rato”.

Hablando de manera casual como si estuviera pidiendo prestada una goma de borrar a un compañero de clase, Suimei reunió las llamas sobrantes que se habían esparcido por el área en el centro del círculo de magia que convocó frente a su dedo. A pesar de que las llamas no eran obra de Suimei, rápidamente se reunieron ante él como si fuera su maestro y convergieron en una pronunciada bola roja de fuego.

“Qué… ¡Ah! ¡M-Mi llama!”

El corazón del hombre rudo se hundió ante este repentino e impactante desarrollo. Mirando a Suimei, exigió una explicación en un tono de sorpresa.

“¡¿Q-Qué demonios hiciste?!”

“No te preocupes. Como dije, solo los estoy tomando prestados”.

“No hay forma de que puedas…”

¿Hacer eso un poco de mierda?

Mientras adivinaba lo que el hombre del tono crudo estaba a punto de decir, Suimei puso los ojos en blanco.

“Ustedes… no importa qué, niegan los misterios justo ante sus putos ojos. ¿No debería tomar al menos medio segundo para pensar en ello primero?”

“¡¿De qué diablos estás balbuceando?! ¡Dime qué diablos hiciste!”

“Por última vez, maldita sea, te dije que los tomaré prestados. Sin embargo, diluye el hechizo o pon un poco más de control. Si no lo hace, habrá demasiado desperdicio y tendrá un efecto de mierda”.

Cuando Suimei escupió esas palabras, el hombre cortés una vez más comenzó a tejer su hechizo interrumpido.

“Oh viento, tú eres—”

“Volar.”

Antes de que pudiera terminar, Suimei disparó las llamas reunidas para mantenerlo bajo control. No fue una sorpresa que el viento del cortés hombre fuera como una suave brisa ante el rugiente fuego de Suimei. El aire fue absorbido por las llamas cargadas mágicamente, consumiendo el hechizo de viento por completo.

Cuando lo hizo, Suimei tomó acción sin un momento de pausa. Juntando el dedo medio y el pulgar, los usó como sustituto de las miras de hierro de un arma de fuego, y miró a través de ellos el brazo del cortés hombre. Con un chasquido, sonó un boom emocionante.

El bastón del hombre quedó hecho añicos por la explosión. Y con su brazo lanzado hacia atrás, estaba completamente abierto.

“Él desa—”

En el momento en que Suimei desapareció, el hombre gritó sorprendido. Suimei, que solo se había transformado en vapor, se acercó a él en un abrir y cerrar de ojos y se manifestó en una postura lista para darle un golpe a su plexo solar.

La mano que extendió ya se había puesto los guantes de la discordia. Y cuando vertió maná en él, el efecto del objeto mágico se activó. Su oponente lo sintió.

Las señales del haz de nervios ubicado en lo profundo del cuerpo, el plexo nervioso, se mezclaron, enviando gritos de dolor a través de todos y cada uno de sus nervios.

Pero el hombre mismo no hizo ningún ruido. No tuvo tiempo. Se derrumbó casi instantáneamente por el impacto y cayó al suelo, con los ojos abiertos y todo.

Suimei luego miró hacia arriba para ver al hombre rudo, aparentemente aplastado por un maná abrumador, colapsado frente a Liliana y echando espuma por la boca. Verificando que todo estaba en orden, Liliana tenía una sola cosa que decir.

“Vamos a… cambiar de ubicación”.

***

Dejando a los hombres donde estaban, Suimei y Liliana se alejaron como si no hubieran tenido nada que ver con lo que acababa de suceder. Al llegar a un lugar un poco alejado del distrito de la clase alta, los dos se detuvieron donde los ladrillos de la carretera se habían vuelto grises. Liliana se quitó el polvo de la falda y habló con voz espinosa, como si no quisiera siquiera hacer eso.

“En serio… Esta es la definición… de intromisión no deseada”. Ignorando sus palabras irritadas, Suimei comenzó a interrogarla. “Entonces, ¿quiénes eran esos tipos?”

“No tiene… nada que ver… contigo.”

“Cierto.”

Después de que se le negara rotundamente una respuesta, Suimei estaba dispuesto a dejarla allí.

“Y… ¿qué estabas haciendo allí… exactamente?”

“Te dije que estaba de paso. Si recuerdo bien… Liliana, ¿verdad?”

“No recuerdo… nombrarme. ¿Por qué… sabes mi nombre?”

“¿Hmm? Eso es porque… ”

“Ya veo… eres una de esas personas… que la policía militar… ha estado acorralando mucho últimamente… un acosador despreciable… Entonces debes haber estado aquí hoy para…”

“No, maldita sea. Lo escuché de ese empleado en el puesto de control. ¿Por qué soy un acosador de repente?”

“Lo sé. Fue solo… una pequeña broma. No hay forma… de que puedas acecharme”.

“Tu pequeña…”

Hablando en un tono plano y seguro, cerró los ojos. Al ver a Liliana actuar naturalmente tan fría con una expresión distante en su rostro, los hombros de Suimei cayeron como si estuviera cansado. Era difícil saber cuándo estaba bromeando.

Cuando Suimei dejó escapar un suspiro de preocupación por la actitud de Liliana, se produjo un cambio repentino en el área. El maná en sus alrededores brotó, y algo como un hormigueo veneno o ácido llenó el aire. Era diferente de la presión que había desatado antes, y más como la que había usado en el punto de control.

“Ya es hora… de que me contestes. ¿Qué has… venido a hacer aquí?”

Liliana cuestionó a Suimei mientras entrecerraba su ojo somnoliento. El telón de fondo del paisaje urbano de repente pareció como si estuviera en una neblina de calor para Suimei. Era como si estuvieran parados sobre asfalto ardiente. Y cuando no respondió, el maná de Liliana se hinchó aún más, desdibujando por completo su entorno.

Fue un interrogatorio que utilizó la intimidación para obligarlo a hablar. Pero Suimei mostró una sonrisa intrépida como si eso solo lo irritara. Él se encogió de hombros y le respondió en un tono frívolo.

“¿Qué es eso? ¿Los extranjeros no pueden salir a caminar? Pasé por todos los canales adecuados para vivir en este país, ¿sabes?”

“Estamos muy cerca… del distrito de clase alta. Si merodeas… sin ningún asunto aquí… por supuesto que pareces sospechoso… Ahora respóndeme”.

“Sin embargo, esos tipos ahora parecían mucho más sospechosos que yo”.

A Liliana ya no le importaba lo que Suimei hiciera o no quisiera decirle. Si recordaba bien, ella era un segundo teniente. Como soldado, este tipo de interrogatorio probablemente formaba parte de sus deberes habituales. Suimei no estaba convencido en gran medida por todo esto, pero decidió capitular por ahora. Realmente no tenía la necesidad de ser obstinado al respecto, por lo que en un cambio completo de su actitud previamente frívola, le respondió con sinceridad.

“Estoy buscando la biblioteca. Ese grande por el que este lugar es tan famoso”.

“La… ¿Biblioteca de la Universidad Imperial?”

“Hay algo que quiero investigar. Mira, debería estar aquí…”

Suimei le mostró a Liliana el mapa dibujado a mano que había recibido de Jillbert.

“¿Por qué estás actuando… como si fueras a hacer que te lo explique? No actúes… tan familiar”.

“No es gran cosa, ¿verdad? Sólo dime. Te compraré algunos dulces si lo haces”.

“No gracias. Por favor, no me trates… como a un niño. Además… tu mapa está mal”.

“Eh…”

A pesar de sonar como si ella no tuviera la intención de ayudarlo, ella le señaló eso. Parecía que ella era al menos un poco agradable por debajo de todo. Pero, ¿qué tenía de malo? Suimei frunció el ceño y Liliana miró el mapa una vez más.

“Sí… está bastante mal”.

“… Esa maldita loli delincuente legal. Joder mintiéndome… ”

El jefe de la sala del distrito en el que vivía Suimei era Jillbert Griga. Parecía llevarse bien con Lefille. Siempre que tenía tiempo, iba a su casa a jugar con ella, aunque siempre era bastante grosera con Suimei.

Pero cuando él mencionó que iría a la biblioteca hoy, ella se ofreció a dibujarle un mapa y se puso a trabajar con entusiasmo. Parecía que este pequeño truco era lo que realmente había estado haciendo. Jillbert se mostró bastante franca y directa, pero después de abrir la tapa y mirar dentro, parecía que estaba un poco retorcida.

“Cuatro de las calles… están equivocadas”.

“¿Seriamente?”

Después de que Liliana le informó de eso, Suimei solo pudo suspirar y maldecir a Jillbert en su cabeza.

“Umm, entonceeeeeeees, ¿cómo llego desde aquí?”

“Como dije… no—”

“Okay, okay. Le pondré tres dulces más. Eso debería bastar, ¿verdad?”

“¿Por qué estás… tratando de tentarme… con dulces?”

“¿No te gustan los dulces? ¿Los juguetes o algo serían mejor?”

“L-Lo dices en serio…”

Al darse cuenta de que Suimei no la escuchaba en absoluto, Liliana comenzó a temblar ligeramente. Quizás sentir su ira fue inútil, sin embargo, dejó escapar un suspiro deliberadamente fuerte como si anunciara la victoria de Suimei al torcer su brazo.

“Bien… te guiaré… así que sígueme”.

“Lo siento por eso. Sin embargo, te compraré algunos dulces, así que tómatelo como una disculpa”.

“No quiero ninguno. Y cuando hayamos terminado aquí… aléjate de mí… inmediatamente”.

***

Desde allí, Suimei siguió a Liliana por el camino. Ella miraba detrás de ella de vez en cuando, y charlaba con él mientras caminaban. Ella era una chica con una actitud cortante y un aire peligroso sobre ella, pero…

“De una forma u otra, ella es amable, ¿eh?”

“¿Dijiste algo?”

“Nop, nada… Entonces, Liliana, ¿qué estabas haciendo en ese lugar? No fue como si hubieras ido allí a buscar pelea, ¿verdad?”

“Patrullar.”

Mientras lo guiaba a la biblioteca, aunque él no podía decir si estaba feliz de hacerlo o no, Suimei aprovechó la oportunidad para interrogarla. Ella dio una respuesta concisa, que Suimei inmediatamente cuestionó.

“Te apasiona bastante el trabajo, ¿eh? ¿Pero no es eso algo trabajo de la policía militar?”

“Estoy sorprendido… lo sabes. Ese es… ciertamente el caso. Sin embargo… últimamente ha habido un incidente… provocando un escándalo en la capital imperial… así que están escasos de personal”.

“Ah, si mal no recuerdo, algo sobre las personas que terminan en coma, ¿verdad?”

“Así es. Si no quieres involucrarte también… asegúrate de no caminar solo… en ese tipo de lugar”.

Cuando dijo eso, Suimei trató de descartar una teoría que había inventado en el acto.

“Lo que significa que… los incidentes han estado sucediendo en el distrito de clase alta, ¿eh?”

“…”

“¿Qué? ¿No me vas a contestar?”

Ella no lo hizo. Ella guardó silencio y siguió caminando. ¿Tenía alguna razón para estar preocupada por este tema? A pesar de que se había estado volviendo para mirarlo con frecuencia hasta ahora, dejó de hacerlo y solo miró hacia adelante. Seguramente sus conjeturas al azar no habían dado en el clavo… ¿verdad?

Mientras Suimei se preguntaba qué tan malo era apuñalar una diana en la oscuridad de esa manera frente a alguien que sabía sobre la investigación y tratando de pensar en formas de suavizarla, Liliana le lanzó una bola curva.

“… Tengo algo que quiero preguntar”.

“¿Qué es?”

“¿No me… tienes miedo?”

Ella tenía la cabeza vuelta ligeramente hacia él ahora, y lo estaba mirando con su mirada característica.

“¿Eh? Ah… ¿No realmente? Pero, ¿por qué preguntas sobre eso de repente?”

“Tú… sigues iniciando conversaciones conmigo… a pesar de que te amenacé. Otras personas… simplemente se congelarían de miedo… o, como la gente de antes, se defenderían. Entonces… ¿por qué es eso?”

“Como si me pusiera nervioso por un poco de presión como esa. Además, eres más joven que yo, ¿verdad? Como el infierno, me avergonzaría así”.

Si alguien estaba dotado de un gran maná, su capacidad para dominar un área era igualmente poderosa. Y cuando un mago domina un área, todo dentro de ella se convierte en un objetivo.