SSS Class Suicide Hunter

Volumen 1

Capítulo 54: El Obsesionado Rey Final (Parte 2)

“Haaaa…”. El suspiro de la Bruja estaba cargado de ansiedad. “No te pongas a decir cosas a lo loco. La mayoría de los errores se pueden cubrir, pero si dices tonterías ni siquiera yo voy a poder detener a la prensa”

“No hay nadie más gentil que yo. Ya me conoces. Soy el profeta, ¿vale? Sé cuál es la respuesta más ejemplar”.

“¿De verdad puedo fiarme de ti?”

“Sip, por supuesto”.

Le quité el micrófono a la Bruja. Ella parecía estar preocupada por mí, y esa preocupación se reflejaba en sus ojos hasta el último instante, pero era cierto que lo tenía bajo control. Contaba con un [Método Secreto].

“¿Hola? Probando…”, dije suavemente para calentar mi voz. Mis palabras resonaron a través de la plaza desde los altavoces. “Hola a todos. Soy el cazador que recientemente ha obtenido el apodo de Rey de la Muerte. Me alegro de conoceros a todos”.

*Flash, flash*

Los flashes se prolongaron como una ola a punto de romper contra la costa. Sin embargo, yo estaba considerablemente calmado. Quizá la experiencia del día anterior, cuando me vi rodeado por una muchedumbre, había servido hasta cierto punto como inmunización contra ello. Estaba más relajado de lo que esperaba y recibí de frente el ‘bautismo’ de fotografías.

“Tu nombre es… don John Evans, ¿verdad?”.

“Sí, eso es”

El joven reportero me miró directamente a los ojos. En los suyos  ardía el espíritu periodístico. Parecía que su intensa mirada no se perdería ni un solo movimiento por mi parte, y expresaba que, sin duda alguna, revelaría mi verdadera identidad.

Era una mirada bastante incómoda.

“Bueno…”, dije, enfrentando mis ojos con los suyos. Ante aquella mirada, en mi mente había una única idea. “… en mi opinión, es una corriente de preocupación motivada por mis debilidades”.

Ten la lección bien aprendida. ¡El objetivo era ser alguien completamente opuesto al Emperador de las Llamas!

“¿Uh?”

El periodista agarró su micrófono con una sola mano y parpadeó, desconcertado. Probablemente no esperaba una reacción tan amable por mi parte. Mientras tanto, rememorando en mi cabeza la sonrisa de comadreja del Emperador de las Llamas, insistí. “Lo repetiré. En mi opinión, se trata de una voz de preocupación debida a mis debilidades”.

Mi método secreto era muy simple.

‘¡Tengo que, sea como sea, decir exactamente lo contrario de lo que diría el Emperador de las Llamas!’

¿Daba la impresión de que tenía un talento oculto para las entrevistas?

Yo no era como la Bruja. No tenía ese talento para cautivar a la audiencia con discursos. Ni talento, ni habilidad, ni experiencia.

Pero sí que tenía una única cosa. Tenía el conocimiento que les faltaba a los demás. ¡Las entrevistas del cazador más desagradable del mundo!

‘Si hago exactamente lo opuesto a lo que hizo el Emperador de las Llamas, aunque no sea bueno haciéndolo, seguirá dentro del territorio de lo aceptable’.

Había sido un gran fan del Emperador de las Llamas durante casi una década. Gracias a eso, el interior de mi cabeza se parecía bastante a una biblioteca. Una biblioteca en la que las atrocidades y absurdas frases de aquel hombre estaban almacenadas.

¿Qué pasaría si el que sujetara el micrófono fuera el Emperador de las Llamas?

Diría algo así: [Si hemos despejado el piso 20 es gracias a mi grandeza, montón de idiotas. Trabajé como un esclavo para escalar la Torre, ¿sabéis? Así que, ¿qué esperáis que haga? Los objetos y habilidades que conseguí son, evidentemente, para mí. Oye, periodista de mierda. Si no lo jo-, si no me los quedo yo, ¿a quién debería dárselos? ¿Eh? ¿A tu padre?]

Y no es algo que me estuviera inventando en el momento. ¡Él, de hecho, era así!

‘Por eso, antes de mi regresión, la Bruja palidecía cada vez que había una conferencia de prensa…’.

De hecho, aquel incidente se había hecho famoso y se le llamaba [El momento ‘Tu padre’]. Por supuesto, la rueda de prensa había sido un desastre. El audio de los periodistas insultando al Emperador de las Llamas se emitió en directo, y, para cuando la Bruja se dirigió allí a toda prisa, ya era demasiado tarde. Era, literalmente, una catástrofe de dimensiones incalculables.

La emisión en directo fue interrumpida enseguida, pero aquella pesadilla no había acabado.

Mientras Yoo Soo-Ha devolvía los insultos a los periodistas, la madre de todas las peleas verbales, con todas las groserías y palabras malsonantes que existen en el mundo, se formó en aquella conferencia. La escena que sucedió después solo se emitió por parte de ‘streamers’ particulares que estaban presentes.

‘Hay un buen motivo por el que le apodaban ‘La Plaga’, no cabe duda’.

Los rumores aseguraban que, tras ese día, la Bruja pasó una semana en cama.

Quizá fue debido al [Momento ‘Tu padre’] que la Bruja descubrió qué tipo de existencia era el cazador Yoo Soo-Ha. De hecho… ¿no fue ese incidente el motivo de que los grandes gremios se distanciaran de él?

‘En el pasado, el Emperador de las Llamas se dedicó concienzudamente a joder esta rueda de prensa’. En otras palabras… ‘Solo tengo que decir lo opuesto a lo que dijo la Plaga’.

Si haces exactamente lo contrario de lo peor, ¡consigues lo mejor! Así, agarré el micrófono mientras recordaba las absurdas frases de Yoo Soo-Ha.

[Si hemos despejado el piso 20 es gracias a mi grandeza, montón de idiotas]

“Sé que la opinión pública está fuertemente agitada debido a mí. Pero me sobreestiman. Sin la ayuda de la Bruja de Dragón Negro y el Santo de la Espada, aquí presentes, jamás habría sido capaz de despejar el piso 20 por mí mismo”.

[Trabajé como un esclavo para escalar la Torre, ¿sabéis?]

“Por supuesto, puedo decir con orgullo que me esforcé al máximo. Con el objetivo de que hubiera cero sacrificios, lo dimos todo. Trabajamos como esclavos. Pero no creo que esto se pueda considerar un ‘sacrificio’ por nuestra parte. Es lo que debemos hacer como seres humanos. Como cazador, era lo correcto, lo que tenía que hacer. Y, por encima de todo eso… lo hice porque es algo que me gusta hacer”.

[Los objetos y habilidades que conseguí son, evidentemente, para mí. Oye, periodista de mierda. Si no lo jo-, si no me los quedo yo, ¿a quién debería dárselos? ¿Eh?]

“Y, debido a eso, no tengo intención de reclamar mis derechos. Por eso les he confiado los derechos de los pisos del 10 al 19 a los líderes de gremio. Solo dije que quería quedarme el piso 20… No. El piso 20 es un área formada por una especie de [Cinturón Verde]. Allí vivirán los residentes de la Torre que originalmente tenían su hogar en ese lugar. Seré feliz teniendo únicamente el rol de administrador”.

[¿Tu padre?]

“Eso es todo, don Evan”.

“…”

“¿Tiene alguna otra pregunta?”.

El joven cuyo espíritu periodístico había estado encendido tartamudeó.

“Na… nada más”

Bien.

A partir de ese momento, mi velocidad de procesamiento mental aumentó todavía más.

Si hubiera sido el Emperador de las Llamas, ¿qué habría contestado tras escuchar las palabras del periodista?

[Okey. Si no tienes nada más que decir, pues que te jodan, cerdo americano]

Era una escena que me podía imaginar con facilidad. Y, probablemente, lo habría rematado haciéndole una peineta.

‘Veamos. Si quiero decir exactamente lo contrario a eso…’, pensé antes de abrir la boca.

“Gracias. Ah, si alguien tiene alguna otra pregunta, me quedaré a contestarlas durante un rato”.

Hubo un momento de silencio que barrió la plaza al completo. Pero fue solo eso, un momento.

“¡Aquí, aquí! ¡Soy del periódico Hwanmun!”

“¡Por favor, responda a nuestra pregunta, señor Rey de la Muerte! ¡Soy del Only Tower Daily!”

“¡Venimos del Sistema de Retransmisiones de la Torre de Babel!”

“¡Señor Rey de la Muerte!”

Todos los periodistas levantaron la mano a la vez. Tan pronto como tuvieron la impresión de que era alguien afable con la prensa, se apresuraron a preparar sus artículos.

La escena me recordaba a un montón de patitos estirando diligentemente sus picos hacia su madre.

‘Wow’. Estaba genuinamente impresionado. ‘La estrategia que se puede aprender de tus lecciones es una locura’, pensé mientras miraba a los reporteros.

Como cabía esperarse de la Plaga. Un psicópata que podía presumir de ser la mayor mierda del mundo entero. Siempre había sido el hombre que podía convertirse en mi brújula moral… en el mal sentido. Incluso en ese mismo instante, me marcaba claramente la dirección de cómo reaccionar.

[¿Qué? ¿El periódico Hwanmun? Jamás te daré una entrevista. Allí no hay nada más que un puñado de viejos bufones. Con solo pasar una página te llega un tufo a viejales. Oye, si te llamas periodista a ti mismo, al menos date una ducha]

Una vez más, recordé las palabras del Emperador de las Llamas antes de hablar.

“Muy bien, empezaremos con el reportero del periódico Hwanmun”.

El efecto fue magnífico. La conferencia terminó con muy buenas sensaciones. Los periodistas dispararon preguntas más o menos vagas intentando extraer aunque fuera una línea extra de información que poder incorporar a sus artículos. Al final, la Bruja cogió el micrófono y se despidió con un agradecimiento sencillo.

“¡Señores! Entiendo vuestro deseo de saber más sobre nuestro nuevo héroes. Sin embargo, no queda mucho tiempo”, dijo señalando al cielo.

[00:05:27]

Antes de darme cuenta, el reloj de luz estaba ya muy próximo a 0:00:00. ¡Solo quedaban cinco minutos hasta que se abriera el siguiente piso! No había mejor excusa para dar por terminada la rueda de prensa.

“Terminaremos aquí nuestra noche de descanso y hoy nos volveremos a centrar en despejar la torre. Por favor, observadnos con mucho interés y todo vuestro apoyo. Esta vez también haremos todo lo que podamos para alcanzar nuestro objetivo de tener cero bajas”.

“Ahhhh…”

De aquí y de allá brotaron sonidos de decepción.

Mientras me preguntaba si la conferencia de prensa terminaría así, sin más, una última figura valiente alzó la mano.

“¡Bruja, Bruja de Dragón Negro! ¡Una última pregunta, por favor!”

“Muy bien. Con esta pregunta termina la rueda de prensa”

“¡Bruja de Dragón Negro y Rey de la Muerte! ¿Qué relación tenéis vosotros dos?”

En ese momento, los ojos de todos los presentes brillaron.

Puro interés. Algo de travesura.

Desde los albores de la historia, aquello por lo que los humanos han mostrado más curiosidad han sido las historias de amor. Los periodistas probablemente querían emparejarme con la Bruja en ese sentido.

“Hmm…”. La Bruja pensó durante un rato, y luego me miró. ¿Debería decir que vi algo parecido a una broma pesada? Había un deje juguetón en sus ojos. “Nuestra relación… bueno”. La Bruja abrió la boca y una frase que quedaría como una de las más famosas de esa era brotó de sus labios. “Nuestra relación es… más que amigos, camaradas de armas”.

Se levantó una gran agitación. Los periodistas dieron gritos emocionados. ¿Deberían centrarse en la parte de ‘más que amigos’? ¿Deberían hacerlo con lo de ‘camaradas de armas’? La frase estaba intencionalmente formulada para que no quedara claro a qué se refería la Bruja.

El periodista que había hecho la pregunta también puso ojos como platos.

“Ami… ¿Una relación que va más allá de la amistad? ¿Eso quiere decir?”

“¿Quién sabe?”, remató misteriosamente la Bruja. “Lo repetiré de nuevo. Nuestra relación es de más que amigos, camaradas de armas. Eso es todo lo que hay. Confío en que no haya malentendidos ni interpretaciones erróneas”

“¡Pero si hay malentendidos e interpretaciones erróneas, entonces…!”

“La rueda de prensa organizada hoy por el gremio Dragón Negro termina aquí”, cortó la Bruja levantándose de su asiento. “Quiero agradecer sinceramente a todos ustedes por vuestro interés y apoyo, de parte de la líder del gremio Dragón Negro, la Bruja de Dragón Negro. Os deseo un buen día”

Los reporteros se pusieron en pie de un salto.

“¡Se-señorita Bruja de Dragón Negro! ¿Cómo puede usted marcharse dejándonos así?”

“Por favor, ¡denos un comentario más detallado de lo que acaba de decir!”

“¡Bruja de Dragón Negro!”

“Señor Rey de la Muerte, ¿cuál es su postura al respecto de esa declaración? ¡Señor Rey de la Muerte!”

Wow. El clamor de los periodistas se volvía cacofónico mientras sus gritos se solapaban unos con otros. Sin embargo, la Bruja mantuvo su actitud relajada. Mientras me guiaba hacia el backstage, soltó una breve risita.

“Vámonos, rápido”

“Uhh…”.

Miré hacia atrás, a la zona de prensa. Todo el mundo estaba gritando.

“¿Vas a irte sin más después de poner sobre la mesa un tema tan candente?”.

“Soy una mujer que adora el drama”, contestó guiñándome el ojo. Un guiño juguetón. “Desde un principio, tienes que terminar pegándole fuego al escenario para dejar una impresión duradera”

Sus palabras estaban envueltas con la dignidad y la autoridad de la líder del gremio que reinaba sobre la Torre.

***

En el backstage, nos alejamos caminando hacia un lugar donde no atraeríamos la atención de la gente. Solo una vez estuvimos allí la Bruja se permitió exhalar un profundo suspiro. Después me cogió las manos.

“¡Eso ha sido perfecto, Rey de la Muerte!”. Los ojos de la Bruja brillaban alegremente. Me pregunté si realmente era la misma persona que se las apañaba para mantener una expresión calmada durante las ruedas de prensa. “¿Cuándo aprendiste cómo dar una entrevista? ¡Puedes estar orgulloso!”.

“Uh…”. Solo había hecho lo opuesto a lo que habría hecho el Emperador de las Llamas.

“¡Tu actitud humilde fue un extra particularmente bueno! A la gente le gustan los héroes, pero hay cosas que les gustan todavía más. ¡Y una de ellas es un héroe capaz de inclinarse ante ellos! ¡Uno que agacha la cabeza! Por supuesto, tu humildad no debería excederse o se convertirá en servilismo… pero tú lo hiciste perfecto. Oh, Dios mío. ¡El equilibrio fue exquisito!”

Simplemente recitando lo contrario a lo que hubiese dicho el Emperador de las Llamas.

“No sabía que tenías talento para tratar con la prensa. Ahhh, ¿qué demonios ha estado haciendo este niño para aparecer tan tarde? Además de despejar la Torre, incluso sabes cómo crear una buena imagen. Siento que me he quitado un peso enorme de los hombros”

“…”.

¿Qué estaba pasando? Mi corazón estaba intranquilo viendo cómo ella expresaba tanta alegría. No podía evitar pensar que solo había imitado a ese psicópata, pero justo al revés.

“Si hay algo que quieras, dímelo enseguida. ¿Dinero? ¿Fama? ¿Autoridad? ¿Una novia? No te preocupes por nada. Si existe dentro de la Torre, te daré cualquier cosa”

“Está bien, básicamente ya tengo todo lo que quiero. Bruja de Dragón Negro, esa declaración de que somos ‘más que amigos, camaradas de armas’… ¿de qué iba todo eso? Me cogiste por sorpresa”.

“Ah, ¿eso?”, contestó con una sonrisa astuta. Era una expresión que parecía decir que era algo trivial. “No es nada. He estado poniendo algunas cortinas de humo”

“¿Cortinas de humo?”.

“Ajá. La prensa estará un buen tiempo escarbando en busca de un escándalo tuyo que no existe. De esa manera, tu imagen sufrirá daño. Por eso prefiero poner de antemano una cortina de humo para que centren su atención en tú y yo”

“¿Eso por eso?”.

Nunca había tratado con la prensa antes, así que no sabía si estaba equivocada o en lo cierto.

Ella se rio un poco.

“No te preocupes, Rey de la Muerte. Ya hace varios años que me encargo de manejar la opinión pública. Puedes confiar en mí por completo en lo relativo a esta área. Déja estas cosas para los especialistas, ¿vale?”

“Ah, está bien”.

Qué raro. No sabía qué era, pero sentía que ahí había algo raro… Eso era, me sentía como si estuviera acechando a un monstruo de los campos de caza cuyas habilidades fueran desconocidas. Sin embargo, aquello no eran los campos de caza, sino la ciudad del primer piso, Babilonia. Era imposible que allí hubiera un monstruo.

¿Era por el ambiente?

-Tsk, tsk, tsk -chasqueó su lengua Bae Hu-Ryeong-. Eres patético, Zombie. Está claro que debo llamarte así, porque parece que tienes una cabeza pero no un cerebro. Te llamas a ti mismo cazador, pero no te das cuenta de que vas derechito a tu propio lecho de muerte.

‘¿Ah? ¿Qué balbuceas?’

-¡Eres patético! ¡Patético!

Bae Hu-Ryeong se golpeó el pecho como si se estuviera asfixiando. Sin embargo, la imagen resultante era la de un gorila dándose puñetazos en el pecho.

Y, en ese momento…

“¡Waaaaaa!”

Del otro lado del escenario, desde la plaza, llegó el sonido de un fuerte grito. La voz contenía una excitación distinta a la de la aclamación hacia nosotros.

“¡Diez!”

“¡Nueve!”

“¡Ocho!”

Era la cuenta atrás.

La Bruja y yo dejamos nuestra conversación y miramos al cielo.

[0:00:05]

Antes de darnos cuenta, había llegado el momento de que se abriera el piso 21.

“¡Tres!”

“¡Dos!”

“¡Uno!”

Y…

[0:00:00]

Los rayos de luz que habían formado el reloj se escindieron en todas direcciones. Los gritos de la gente aumentaron todavía más su volumen. Y, como para contestar a esos encendidos chillidos, los rayos de luz convergieron de nuevo para formar el holograma de la Diosa.

[Guerreros]

El holograma de la Diosa abrió los labios con su imagen recortada sobre el cielo azul.

[Aquellos que trepan la Torre]
[Felicitaciones por abriros paso a través de las sombras del Rey Demonio]

Era el momento en el que un nuevo piso iba a abrirse. La gente empezó a hacer aún más ruido. Parecían felices, quizá porque estaban viendo en vivo el holograma de la Diosa.

Pero yo, que ya había experimentado la Torre en el pasado, lo sabía.

-Ey, Zombie.

‘Sí’, asentí. ‘Está bien. No voy a bajar la guardia’.

Al igual que la Torre, cuyos pisos del 1 al 10 estaban diseñados para ser un tutorial, cambiaba por completo a partir del 11, era un hecho que desde el piso 21 volvería a haber un cambio completo de escenario con respecto al 20.

[Todos vosotros podéis quedaros en el primer piso de la Torre para siempre]

El holograma parecía calmado mientras enunciaba ese hecho.

[Es un refugio para aquellos que huyen]
[Si os hubieseis rendido en este desafío, podríais haber escogido un ‘aperitivo’]
[Pero habéis optado por despejar los pisos del 10 al 20]

La voz resonaba en el amplio cielo.

[Para ser testigos del final de esta Torre]
[Por lo tanto, lo correcto es responder a esa voluntad]

*Crack*

Rayos de luz blanca nos envolvieron sin previo aviso. No solo a mí y a la Bruja. Desde la plaza llegaban sonidos nerviosos.

“¿Q-qué está pasando?”

“¡Yo no he dicho nada!”

Esa era la mayor diferencia en comparación con la vez anterior. Nadie había dicho “Transmitir”, pero la luz blanca nos tragó a todos. La Bruja miró sus propios pies con una expresión confundida.

“Imposible… ¿es una transferencia forzosa?”

Su especulación estaba en lo cierto.

[Aquellos que trepan la Torre]
[Aquellos con la determinación de trepar la Torre]
[Aquellos que están dispuestos a recibir un nuevo nombre y convertirse en guerreros de la Torre]

La Diosa juntó sus manos frente a su pecho, como si rezara por alguien.

[De ahora en adelante, solo los guerreros escogidos pueden afrontar esta noble tarea]

De súbito, los rayos de luz blanca nos cubrieron por completo.