SSS Class Suicide Hunter

Volumen 1

Capítulo 53: El Obsesionado Rey Final (Parte 1)

– ¡Estáis viendo un vídeo increíble ahora mismo!
– Una hechicera, popularmente conocida como la Bruja de Dragón Negro, está liderando el equipo de asalto del piso 11. Este es el último vídeo que hemos recibido de BBS. ¡Oh, déjame ampliar la imagen en esta parte!
– ¡Sí, es esta parte! Pausemos el vídeo por un segundo.

Una silenciosa sala de espera.

Yo estaba mirando la tele, ausente.

– A toda nuestra audiencia, ¿están viendo eso? La Bruja de Dragón Negro se está cogiendo de la mano con otro cazador. Presumiblemente se trata del Rey de la Muerte.
– Si este vídeo no es una edición ni está manipulado, significaría que el Rey de la Muerte cazó al jefe del piso 11 de un solo golpe. Pero, hasta ahora, no ha habido ningún precedente de un jefe que cayera derrotado con un único ataque.

El comentarista y el narrador estaban conmocionados.

– ¿Así que estás diciendo que esta es la primera vez?
– Sí, lo es. Por supuesto, la Bruja de Dragón Negro ayudó, pero el cazador que se enfrentó por si mismo al jefe parece ser el Rey de la Muerte.

En la parte inferior de la pantalla había un cintillo de última hora, [Conferencia de prensa del Rey de la Muerte esta tarde].

– Señores, veamos el siguiente vídeo juntos.
– El Rey de la Muerte ha estado por debajo del radar todo este tiempo, hasta que finalmente se dejó ver ayer por la tarde. Regresó a Babilonia a través del portal de transferencia. Y, como pueden ver, la Bruja de Dragón Negro y el Santo de la Espada estaban con él.
– ¿No da la impresión de que están escoltando al Rey de la Muerte?
– Sí. Para transmitir adecuadamente el ambiente de esta escena, voy a alzar un poco la voz.

Era un vídeo que parecía haber sido grabado por el teléfono móvil de alguien. En mitad de la pantalla, yo caminaba sin expresión alguna.

– ¡Por favor, mira hacia aquí!
– ¡Oye, no me empujes! ¡Por favor, di algo!
– Bruja de Dragón Negro, ¿cuándo podremos tener un anuncio oficial?
– ¿Qué tipo de relación tenéis vosotros dos…?

*Clic*

No pude soportarlo más y apreté el botón de apagar en el mando a distancia. Luego le fruncí el ceño a Bae Hu-Ryeong, que estaba a mi lado viendo la televisión.

-¡Aaaah, ¿por qué lo has quitado?! Me lo estaba pasando muy bien viendo eso.

Abrí la boca.

“¡Porque estoy tan avergonzado que podría morirme!”.

Aquel lugar era la sala de espera. Había pasado ya un día desde que recibí el reconocimiento del Santo de la Espada. Era el día en el que tendría lugar la conferencia de prensa con respecto al progreso de superación de la Torre.

Originalmente alguno de los maestros de los gremios más grandes iba a ocuparse de ello, pero, en esa ocasión, me habían llamado como invitado especial. Después de un rato, empezaría la entrevista.

-¿Por qué no te suicidas? Tampoco es que vayas a morir, de todos modos.

“¡Pero no quiero!”.

No tenía nada que hacer hasta que llegara la hora de la conferencia de prensa, así que pensé en ver la televisión un rato… pero resultó ser un grave error.

-Ah… Mier… vale, lo pillo. Pues por lo menos pon otro canal.

“¡Todos los canales están hablando de mí, de todos modos!”.

Fuera el canal de las noticias o cualquier otro, prácticamente todas las transmisiones estaban tratando el asalto a los pisos del 11 al 20. Y los programas de televisión no eran los únicos centrados en ello. Las cosas eran iguales mirara donde mirara en internet.

Me había convertido en un famoso de la noche a la mañana. Así me sentía.

[La Diosa de la Protección señala lo excepcional que fue tu logro]

La espada sagrada vibró en mi cintura.

[La fama es el impuesto que paga a diario cada héroe. La Diosa de la Protección te aconseja que te acostumbres a la posición de héroe]

“…”.

Me sentí tan agobiado que bajé la espada sagrada.

“Ayer estaba tan cansado que me quedé dormido sin poder hablar demasiado… Señora Diosa, ¿estás ahí? ¿No te parece que estás sobrevalorándome un poco?”.

[¡Tú eres la luz!]

La espada sagrada vibró más aún. No sabía si solo era una impresión mía, pero parecía una fan obsesionada con un idol.

[La Diosa de la Protección susurra que todavía recuerda, claro como el día, el momento en el que trepaste al castillo imperial y diste aquel rugiente discurso. Y tu gallarda postura cuando declaraste ‘Puedes dejarnos el Imperio a nosotros de ahora en adelante’… estabas tan arrebatador en ese instante…]

“¡Ahhhhh!”, grité, tapándome los oídos. “¡Basta! ¡Basta ya! ¡Dije todas esas chorradas cuando estaba totalmente poseído por la emoción!”.

Pero no sirvió de nada. La voz de la espada me llegaba directamente a la mente, no a través de los oídos. Ella siguió susurrando interminablemente sobre los momentos más oscuros de mi pasado.

[La Diosa de la Protección expresa que es una ley no escrita que un héroe debe tenerse gran aprecio a sí mismo. Las palabras de un héroe sin autoestima siempre resultan miserables, y eso haría que la gente a su alrededor fuera infeliz. En ese sentido, ¡tu confianza es muy agradable! ¡De verdad que es sorprendente!]

Yo tenía razón. La Diosa de la Protección era simplemente una gran fan mía.

“Para… por favor, para…”.

Al igual que yo había sido una vez un fan totalmente obsesionado con el Emperador de las Llamas, la Espada Sagrada se había convertido en mi fan.

No me importaría lo más mínimo si expresara su ardiente deseo en algún lugar donde yo no pudiera verla ni oírla, pero su voz era retransmitida a mi cabeza en directo 24 horas al día.

[La Diosa de la Protección quiere hacer una confesión]
[¡Estoy muy contenta de servir a alguien como tú como mi segundo maestro!]

Oh, Dios mío. ¿Alguna vez había escuchado a alguien alabarme continuamente mientras estaba en su compañía durante tanto tiempo? Alguien que me halagara tan incesantemente que me hiciera pensar todo el rato en mi oscuro pasado, que quería olvidar lo antes posible.

Simplemente mátame.

[Especialmente ese momento en el que trajiste al Rey Demonio de la Lluvia Otoñal bajo tu mando y después murmuraste ‘el señor tiene la responsabilidad de proteger a su propia gente’. Fue una escena grandiosa…]

De verdad, era demasiado. Alcancé mi mochila y saqué el aceite de odo. Era un producto usado para la limpieza de espadas. Eché un poco del líquido en un trapo y miré a la Espada Sagrada.

“Tú empezaste con esto”.

Mi mano se acercó a la hoja de la espada. Un temblor de luz blanca brotó del arma.

[La Diosa de la Protección se siente amenazada]
[La Diosa de la Protección te suplica que dejes lo que estás haciendo]
[La Diosa de la Protección…]

Diez minutos más tarde…

[La Diosa de la Protección se disculpa por su torpeza]

*Relucir*

Gracias a mis honestas habilidades con el trapo, la espada sagrada estaba completamente limpia. La hoja se volvió tan clara como un espejo que reflejaba mi rostro. Sin embargo, el arma divina temblaba de vergüenza.

“Uf, por fin se ha callado un poco”, suspiré bajando la espada, que había dejado de hablar. “Entiendo que eres una Constelación, pero… ¿por qué una espada? ¿Era una posesión tuya anteriormente?”.

Por lo que sabía, las Constelaciones eran como administradores de los pisos.

Al igual que el espectro vengativo, la Constelación podría incluso haber empezado siendo un monstruo. No podía ni imaginarme cómo una ‘Espada’ se había convertido en una Constelación.

Cuando murmuré aquella pregunta, la espada sagrada emitió un sutil fulgor blanco.

[La Diosa de la Protección sacude la cabeza]
[Yo era originalmente un espíritu sagrado, adorado como un dios. Pero el fundador del imperio, ‘Lefanta Aegim’, me dividió en cinco espadas y me selló en ellas]
[Eres el primer dueño en posesión de la Espada Sagrada ‘Ídolo’]

Parpadeé.

“¿La espada se llama Ídolo?”

[Es correcto]
[Primera Espada, Ídolo]
[Segunda Espada, Lástima]
[Tercera Espada, Oración]
[Cuarta Espada, Sacrificio]
[Quinta Espada, Salvación]
[Esos son los nombres de las cinco espadas hermanas]
[La Diosa de la Protección presume diciendo que si reúnes todas las espadas hermanas, ella recuperará la fuerza que tenía en su mejor momento]

“Oh, oh”.

Resumiendo, la espada que relucía ante mis ojos era solo un fragmento de la verdadera espada sagrada. En otras palabras, tendría que encontrar las otras cuatro espadas para poder extraer su verdadero poder.

“Interesante. ¿Y dónde están las otras espadas hermanas?”. Ella no contestó. Un silencio incómodo ocupó la habitación. “¿Hola? ¿Diosa? ¿Dónde están tus hermanas?”.

Silencio.

Entrecerró los ojos.

“Por casualidad podría ser que… ¿no lo sepas?”.

Después de un rato, una voz murmuró.

[La Diosa de la Protección se acoge a la Quinta Enmienda]

Taku: La Quinta Enmienda a la Constitución de EEUU establece, entre otras muchas cosas, que una persona que está siendo juzgada tiene derecho a no declarar para no incriminarse a sí misma.

“O sea, que no tienes ni idea”.

[La Diosa de la Protección argumenta que puede sentir la presencia de otras espadas hermanas si está lo bastante cerca de ellas]

Sonreí. “Bueno, no tengo prisa por encontrarlas ahora mismo. De todos modos, tú debes tener al menos una quinta parte del poder de la espada, señorita Ídolo. ¿Qué puedes hacer?”.

[Puedo conseguirte el apoyo total de los ciudadanos del Imperio Aegim]

“Eso lo sé mejor que nadie. ¿Algo más?”.

*Flash*

Como si hubiese estado esperando ese momento, la espada sagrada emitió luz blanca a máxima potencia.

“¡Argh! ¡Mis ojos! ¡Mis ojoooos!”.

Rodé por el suelo mientras me tapaba los ojos. Mientras lo hacía, pude escuchar la voz de la espada en mi mente.

[La Diosa de la Protección presume de que tiene mucha confianza en su capacidad de emitir luz]

“¡Lo he visto tantas veces que estoy harto ya, así que, evidentemente, ya lo sabía!”. ¿Pero qué coño…? Tuve suerte de haberme protegido los ojos con Aura casi instantáneamente. De lo contrario, podría incluso haber perdido la visión. “¿Qué más puedes hacer, aparte de conseguir apoyo del Imperio Aegim y brillar?”.

El silencio volvió a tomar la sala. El brillo de la espada sagrada disminuyó. En términos humanos, era como si estuviera tartamudeando.

[Tengo confianza en mi capacidad para manipular monstruos]

“…”.

[A toda prisa, la Diosa de la Protección añade que también tiene confianza en su capacidad para manipular a humanos]

*Toc, toc, toc*

En mitad del silencio, mientras yo seguía atónito, alguien tocó a la puerta de la sala de espera. Envainé rápidamente la espada sagrada. Desde el punto de vista de otra persona, parecería un chalado si me veían hablando con mi arma.

“¿Quién es?”.

“Soy yo”

Taku: ¿Qué vienes a buscar? ♪♫

Era la voz de la Bruja, que llegaba desde el exterior de la habitación. “Llevas un rato haciendo bastante ruido. ¿Va todo bien?”

“Estoy bien. No está pasando nada”.

“¿En serio…?”. La Bruja parecía sospechar pero no me interrogó más. “La conferencia de prensa empezará en cinco minutos. Los periodistas, probablemente, te van a ametrallar a preguntas. El piso 21 se abrirá cuando terminemos. Contestaremos las preguntas de los reporteros con moderación y luego iremos directamente al piso 21. ¿Entendido?”

“¡Sí!”.

“Qué buena respuesta… No llegues tarde”

Escuché pasos al otro lado de la puerta. *Tac, tac* Solo saqué la espada cuando comprobé que los pasos de la Bruja se habían alejado bastante, y miré silenciosamente la hoja.

“Básicamente, aparte de poder brillar, no hay nada más en lo que seas útil”.

[La Diosa de la Protección protesta contra tus opiniones sesgadas…]

“Bien, entonces. A partir de ahora, no eres la Diosa de la Protección. Te llamaré Shiny. ¡Es un desperdicio que lleves el nombre de la Espada Sagrada!”.

Taku: Aunque imagino que la inmensa mayoría ya lo sabréis, en inglés ‘shine’ significa ‘brillar’ o ‘relucir’. ‘Shiny’ significa ‘reluciente’ o ‘brillante’ y se pronuncia ‘shaini’. Dejo el nombre de la espada en inglés porque en español me da cringe.

Pensándolo bien, ¡esa Constelación era patética! ¿Había fallado en su tarea de proteger su mundo y había sido devorada por el Rey Demonio de la Lluvia Otoñal? Al final, había tenido que hacer el trabajo de esa Constelación y proteger su mundo. Al igual que el espíritu vengativo, ella no estaba en posición de levantar la cabeza frente a mí.

“Y haces demasiado ruido. Mi cabeza ya está sobrecargada por culpa del Emperador de la Espada. Me estoy volviendo loco porque tú sigues con tu ‘La Diosa de la Protección esto’ y ‘La Diosa de la Protección lo otro’. A partir de ahora, no me hables si no es imprescindible”.

[La Diosa de la Protección…]

“Hey, hey. No me obligues a devolverte al Imperio Aegim. ¿Lo entiendes, Shiny?”.

El silencio duró unos instantes y luego la espada sagrada tembló.

[Mi Señor, Shiny está de acuerdo]

Ese fue el momento en el que me apropié de la Constelación.

***

La conferencia de prensa se llevó a cabo en la plaza. No solo la propia plaza estaba completamente atestada de gente, sino también todas las calles que desembocaban en ella. La multitud parecía superar fácilmente las decenas de miles de personas. Mientras caminábamos hacia el escenario preparado en el centro, los flashes de las cámaras nos rodeaban.

La Bruja. El Santo de la Espada. Yo.

Los tres nos sentamos uno junto al otro en la mesa previamente preparada.

“Gracias por la cálida bienvenida”, dijo la Bruja, hablando a través del micrófono. A medida que su calmada voz fluía, cánticos y gritos de ánimo brotaban de cada rincón de la plaza.

“¡Señorita Bruja de Dragón Negro!”

“¡Aaaaaaaah!”

“Por favor, mire aquí, señorita Bruja de Dragón Negro. ¡Una sola vez, con eso basta!”

Un nutrido grupo de gente agitaba pancartas frente a nosotros. Había incluso una persona que había traído la primera página de una revista para la que la Bruja hizo de modelo.

‘Esto es increíble’.

¿Era porque la Santa todavía no había aparecido? Como mujer y cazadora, la Bruja de Dragón Negro disfrutaba de una popularidad incomparable.

Tras inclinar su cabeza como saludo, la Bruja empezó la conferencia con toda seriedad.

“Como la mayoría de ustedes sabrá, hemos despejado los pisos del 10 al 20. Fue un logro magnífico, como se ha mostrado en diferentes medios de comunicación, emisiones de televisión e incluso prensa de menor envergadura. Nos habíamos estado preguntando cómo anunciar estas alegres nuevas… pero parece que no teníamos que preocuparnos al respecto, ya que todos ustedes se han encargado de darles una magnífica promoción. Por lo tanto, déjenme agradecerles que nos hayan permitido ahorrarnos los costes de los anuncios”. Varias risas ligeras llegaron desde la carpa de prensa que ocupaban la fila frontal junto al escenario. “Pero hay algo más de lo que estamos muy orgullosos esta vez”. La plaza gradualmente cayó en el silencio. “No se trata del hecho de que la superación del piso 10, algo que habíamos estado ansiando durante años, finalmente se ha hecho realidad. Tampoco tiene relación con haber despejado el piso 20 a una velocidad inesperada”. La Bruja hizo una pausa dramática. “Cero bajas. De entre todas las cosas, el hecho de que ni una sola persona muriera… eso es lo que nos ha hecho más felices”.

Había empezado con algo de humor para después pasar a expresar sus sentimientos con toda sinceridad. Incluso yo, que nunca había formado parte de aquel circo, podía darme cuenta de la habilidad con la que la Bruja dirigía la conferencia de prensa con su discurso.

‘Como era de esperar. Este es el nivel mínimo requerido para ser la líder del mayor gremio’.

Me pregunté si realmente era la misma persona que el día anterior estaba vistiéndome como si fuera un muñeco y que no paraba de decir y hacer tonterías.

“Por favor, que todo el mundo mire al suelo por un momento”, dijo la Bruja. “Mirad el suelo de la plaza de Babilonia que estáis pisando. Podéis ver, grabado en cada piedra, un nombre. Los nombres de los guerreros caídos hasta ahora. Los nombres de nuestros antecesores, que dedicaron sus vidas a despejar la Torre”.

*Flash*

Los flashes de las cámaras de la carpa de prensa iluminaron el suelo simultáneamente.

“Cuando asaltamos el piso 2, cuando asaltamos el 3… incontables nombres fueron grabados en este suelo. Es gracias a sus sacrificios que hoy podemos estar aquí. Frente a toda esta gente, estoy muy feliz de poder anunciar esto”. La voz de la Bruja resonó a través de la plaza. “Hoy, ningún nombre tendrá que ser grabado en la piedra”.

*Click, click*

Los reporteros fotografiaban alternativamente las baldosas de la plaza y a la Bruja. Eso no solo decidiría qué fotos se publicaban en el periódico del día siguiente, sino que también fijaba la atmósfera y el ambiente de la conferencia de prensa. La multitud gritó el nombre de la Bruja y animó.

‘No tengo ninguna necesidad de meter aquí las narices’.

Vi cómo se desarrollaba la conferencia con un rostro inexpresivo. Me sentí gratificado sin motivo alguno.

‘Es lógico, pero aliarse con la gente correcta es muy importante’.

Sintiéndome en paz, alcé la vista hacia el cielo.

[01:22:10]

Era una cuenta atrás idéntica a la que hubo cuando se abrió el piso 11. Incluso en ese mismo momento, había un reloj de luz en el cielo. Cuando el número indicara 0:00:00, el piso 21 se abriría.

‘Qué ganas tengo de que termine la conferencia de prensa e ir al piso 21…’

Todo procedió con suavidad, y, durante la sesión de preguntas y respuesta entre los reporteros y la Bruja… “¡Soy el periodista John Evans, del Babylon Daily News!” … un reportero se puso en pie. “Tengo una pregunta para el Rey de la Muerte, el nuevo rango 3”.

‘¿Uh? ¿Para mí?’.

Miré al periodista. Naturalmente, los ojos de la audiencia reunida en la plaza estaban al completo sobre mí.

“Hay muchos rumores acerca de su súbito ascenso en los rankings. En concreto, se especula si es [un Novato Especial que los gremios han estado criando desde hace tiempo]. ¡Suena bastante convincente!”

“Uh…”.

“Si esto fuera cierto, significaría que el señor Rey de la Muerte es un héroe creado intencionalmente por parte de los grandes gremios. ¿Qué piensa sobre esas sospechas?”

Una ruidosa conmoción se levantó en la plaza.

“También hay muchas voces preocupadas porque los grandes gremios podrían unirse y monopolizar los pisos del 10 al 20. En particular, he escuchado que el señor Rey de la Muerte ha recibido los derechos en exclusiva del piso 20. ¿Es eso cierto?”

La conmoción ganó todavía más intensidad.

“Tsk”

La Bruja, sentada junto a mí, se mantenía inexpresiva, pero chasqueó la lengua, tan suavemente que solo yo pude oírlo. Apagó el micrófono y me susurró: “Está intentando provocarte. No le contestes. Yo me encargaré de él”.

“No”, rechacé, sacudiendo la cabeza. “Este tipo de gente va a seguir apareciendo aquí y allá. Prefiero aclararlo de una vez por todas”.

“Pero…”

“No te preocupes. Está bien”. Estiré la mano hacia la Bruja. “Por favor, pásame el micrófono”.

“…”

Mi determinación era absoluta. Antes de seguir trepando el piso 21, tenía que asegurarme de destrozar ese tipo de provocaciones.