Infinite Dendrogram (NL)

Volumen 16: Las Posibilidades Tartareanas

Capítulo 7: De Pie e Indomable

Parte 1

Ciudad de Comercio, Cortana, Mansión del Alcalde.

Benetnasch se dio cuenta de la anomalía poco después de terminar de negociar con AR-I-CA.

Poseía habilidades que le permitían ver las almas circundantes y el rencor. Los muros y otros tipos de barreras similares no significaban nada ante esas habilidades, que le permitían ver claramente las almas bajo la mansión.

Eso le facilitó comprender que las casi doscientas almas aquí reunidas estuvieran ahora lamentándose. La sensación le congeló en su sitio.

“¿Qué te preocupa, amigo mío?” Preguntó Aragorn mientras se ocupaba de atravesar las numerosas paredes de la mansión.

“… Esto está muy mal.” Dijo Benetnasch sacudiendo la cabeza y con una frustración bastante fuera de lo normal en él.

Un momento después, un gigantesco brazo pálido atravesó el suelo frente a ellos, seguido de cinco más. Estos miembros se agitaron y se aferraron a cualquier parte de la mansión que tocaban. Bajo el inmenso peso de la criatura, el edificio empezó a derrumbarse rápidamente.

“¡Conmigo, amigo mío!” Aragorn llamó.

“… Sí.” Dijo Benetnasch, saltando dentro de la caja torácica del dragón esquelético. Aragorn se apresuró entonces a volver al jardín, pulverizando los muros y pilares que había por el camino. Cuando salieron, la mansión se había derrumbado por completo.

Benetnasch contempló los restos cubiertos de polvo, sin decir palabra. No hacía falta ver almas para saber el destino de los sirvientes que seguían dentro.

“¡Por abajo!” Dijo Aragorn justo antes de que los seis brazos que destruyeron el edificio tiraran de los escombros, levantándose y revelando la forma completa de la criatura: la de un gusano con extremidades humanas.

El gusano era más grande incluso que los Pure-Dragons; tenía seis brazos largos y tantas patas que era difícil contarlas. Cada centímetro estaba formado por diminutos gusanos.

Era tan repugnante que la sola visión rompería las mentes más débiles.

Aun así, a Benetnasch no le resultó difícil entender lo que estaba viendo.

“Amigo mío, ¿esto es…?”

“Parece que el UBM sellado ha sido liberado.”

“¿El Orb contenía esta enorme masa de gusanos? Qué repulsivo.”

“No.” Dijo Benetnasch sacudiendo la cabeza. “Este cuerpo está hecho de humanos vivos.”

“… ¿Qué?” Preguntó Aragorn conmocionado. El nigromante no había presenciado el momento en que se creó la forma actual de De Vermis, pero podía ver almas, y vio las muchas almas atrapadas dentro de los gusanos que componían la criatura.

Mientras hablaba con Hugo, Persephone había explicado la relación entre las almas, las mentes y los cuerpos utilizando el hielo, el líquido y una taza como sus respectivos paralelismos. Se había centrado principalmente en el efecto que el rencor hirviente tenía sobre las almas y los cuerpos, pero no era la única forma en que la relación podía agriarse: la carne también podía afectar al alma y a la mente.

Al ponerlas en un recipiente repulsivo muy distinto del original, las almas y las mentes se contaminaban igual que las bebidas vertidas en vasos de plomo se envenenaban.

En este caso, De Vermis era la copa principal.

Aunque las células de las personas utilizadas en su creación habían sido sustituidas por gusanos, seguían vivas. Habían muerto una vez, pero sus almas estaban atrapadas dentro de sus cuerpos. Como aún vivían, ni siquiera podían ser fundidos por el rencor y desvanecerse.

Por eso, ser uno con De Vermis era un destino peor que la muerte.

“Verdaderamente, esto no es suficiente.” Dijo De Vermis. “La eternidad requiere más potencia y volumen.”

A continuación, la masa humano-magia utilizó uno de sus seis brazos para recoger el cadáver de una criada que había muerto en el derrumbe de la mansión y aplastó el cuerpo con la mano, destrozando la carne tanto por dentro como por fuera.

Empezando por las células dañadas, el cadáver destruido empezó a transformarse en gusanos retorcidos, todos los cuales fueron absorbidos por De Vermis para hacerlo crecer en tamaño.

“Amigo mío, esta criatura…” Dijo Aragorn.

“Me pareció extraño cuando vi que al alcalde le crecían esas ‘piernas’.” Respondió Benetnasch. “Aunque ese UBM pudiera utilizar sus poderes desde el interior del Orb, no podría haber sacado sus órganos de puesta de huevos al exterior para infestar así al alcalde. Ahora tiene sentido. Los gusanos no nacieron…”

“… sino que se transformaron.” Aragorn terminó la frase. “Así que usó una habilidad para convertir el cuerpo de ese despreciable en gusanos.”

“… Así es como probablemente también le hizo sano.” Añadió Benetnasch. “Supongo que la terapia con gusanos existe en la vida real, pero esto es sólo…”

Asqueroso, terminó en su cabeza.

Ese juicio no se basaba sólo en su apariencia o naturaleza, sino en el hecho de que atrapaba almas.

Las células transformadas siguieron viviendo como gusanos y, como criaturas vivas, ligaron a ellas las almas que una vez habían poseído como seres humanos. Forzadas a adoptar tal forma, estas almas y mentes antaño humanas acabarían convirtiéndose en las de los gusanos.

Benetnasch ya había notado que tales cambios empezaban a arraigar en el alcalde cuando se había reunido con él en la entrada. La fusión con De Vermis no había hecho más que acelerar el proceso, y precisamente por eso Benetnasch lo calificó de “realmente malo”.

Las almas atrapadas en su interior se lamentaban de haber sido convertidas en inhumanas y de no poder morir como personas.

“… Deadly Explosion.” Benetnasch desató un hechizo. Con todos en el palacio ahora muertos, no tenía que preocuparse por matar a nadie, así que decidió usar la habilidad de trabajo definitiva del High Necromancer en las inmensas cantidades de rencor acumuladas por los actos del alcalde.

El corazón de la explosión fue el sótano, donde el rencor era más denso, y las llamas producidas consumieron fácilmente todos los escombros de la mansión. La explosión arrancó incluso los árboles del jardín, enviando al cielo una gigantesca columna de llamas.

La potencia de fuego de este ataque igualaba a la del Baolongba que una vez utilizó la Maestra Jiangshi, Xunyu.

“Mi amigo…”

“… Lo estoy viendo. No hace falta que digas nada.”

Ni siquiera las inmensas llamas de la Deadly Explosion pudieron quemar a De Vermis.

El hechizo seguramente habría quemado incluso a Pure-Dragons con alta resistencia al fuego, pero la masa de gusanos salió ilesa.

Gran parte de su cuerpo quedó carbonizado, pero los trozos ennegrecidos volvieron a ser blancos rápidamente al ser reemplazados por gusanos nuevos y sanos.

Esto era lo que hacía tan aterrador al Reinvigorating Rebirth de De Vermis.

Lo que hacía este poder era sustituir las células dañadas por gusanos —sus fragmentos—, lo que hacía posible que De Vermis se curase por completo simplemente sustituyendo sus propias células dañadas por un retorcido crecimiento nuevo.

“Los UBM son siempre unos enemigos tan poco razonables…” Dijo Benetnasch.

“Ciertamente.” Asintió Aragorn.

“… Deberías saber que tú no eras mejor.”

Aunque los trozos carbonizados se curaron rápidamente, la Deadly Explosion había volado por completo una parte del tamaño total de De Vermis, con células y todo, lo que se manifestó como daño infligido.

Sin embargo, eso no había representado ni una décima parte de su HP total.

“Entonces… ¿Volver a hacer eso es opción?” Preguntó Aragorn.

“No. Eso hizo explotar todo el rencor que había alrededor de la mansión.” Respondió Benetnasch. Deadly Explosion era un hechizo que transformaba el rencor en potencia de fuego, por lo que era un hechizo de un solo uso que sólo podía emplearse con grandes acumulaciones de rencor.

Si hubiera llevado consigo Crystals of Resentment como Gouz-Maise el Lich, la historia habría sido diferente, pero esos objetos se oponían directamente a los objetivos de Benetnasch. Obviamente, nunca llevaría ninguno.

“La única forma de derrotarlo es destruirlo por completo, sin que quede ni rastro.” Dijo Aragorn. “Qué criatura tan amenazadora. Debe ser casi Mythical.”

“Del nivel de un Ancient-Legendary superior…” Dijo Benetnasch. “¿Pero eso no lo haría más fuerte que tú?”

“Estoy seguro de que fui rival para él en pura condición, aunque la compatibilidad está tan en mi contra que nunca podría derrotarlo.” Concluyó Aragorn, tras dedicar un momento a analizar sus propios poderes en comparación con los de sus oponentes.

“… Bueno, cortarlo probablemente no le haría mucho.” Convino Benetnasch.

Mientras mantenían este intercambio, empezaron a reunirse Maestros de toda la ciudad, probablemente para investigar el origen del pilar de llamas.

Al ver las palabras “The Rebirthing Infestation, De Vermis” sobre la cabeza del gran gusano, todos lo reconocieron como un UBM y se movilizaron para destruirlo.

Algunos se sorprendieron por la aparición de Aragorn y también se prepararon para luchar contra él, pero rápidamente se dieron cuenta de que era un esbirro undead de un Maestro e inmediatamente volvieron a centrar su atención en De Vermis.

“Hmm… Para una ciudad de tal escala, pocos Maestros se han reunido aquí.” Observó Aragorn.

“Basado en lo que Persephone me dijo, la Murder Princess causó algunos problemas en el bazar… Imagino que muchos recibieron la pena de muerte tratando de lidiar con ella.”

“¿La chica que comparte clan con ese saqueador de tumbas? Bueno, no puedo imaginar a ningún Maestro ordinario siendo rival para ella.”

“… Al menos espero que no sea tan temible como Rascal.” Mientras su conversación continuaba, más y más Maestros se reunían y centraban su fuego en De Vermis. El UBM no tenía defensas ni resistencias adecuadas, así que todos los hechizos, cortes y debuffs le golpearon con todo su efecto… sólo para que se recuperara de ellos instantes después.

Cualquier parte quemada por un hechizo se fijaba de la misma manera que las partes de su cuerpo carbonizadas por la Deadly Explosion.

Los ataques con armas sólo separaron brevemente la masa que se retorcía, y los gusanos individuales que fueron seccionados se regeneraron rápidamente.

Y entonces, los gusanos afectados por los debuffs fueron reemplazados instantáneamente por otros nuevos y sanos.

Independientemente de lo que se le hiciera, De Vermis se regeneraba instantáneamente y volvía a un estado de salud perfecto.

Los que tenían Reveal se darían cuenta de otra cosa: el SP del UBM no disminuyó por muchas veces que se restaurara.

Esta era la segunda cosa que hacía que Reinvigorating Rebirth fuera tan temible.

Era una habilidad que no sólo no costaba SP, sino que aumentaba continuamente sus reservas de SP.

De Vermis podía curarse innumerables veces y nunca sentirse fatigado por ello.

De hecho, la fatiga podría empeorar las “células”, provocando que Reinvigorating Rebirth las sustituyera de nuevo.

La habilidad mantenía a De Vermis con buena salud para siempre, pasara lo que pasara.

Su falta de defensas o resistencias no era realmente un problema para él: cualquier pieza dañada simplemente se sustituiría.

“Su HP se mide por volumen, como el de un slime. Y puede regenerarse… no… renacer sin límite.” Dijo Aragorn.

“Eso me recuerda lo que dijo Persephone sobre la Murder Princess.” Dijo Benetnasch. “Aparentemente, ella puede revivirse una y otra vez… Ella debería haber estado aquí para luchar contra De Vermis.”

“… Sin duda habría sido un espectáculo infernal.” Mientras De Vermis curaba todas y cada una de las heridas que le infligían, el malestar se extendía entre los Maestros.

Algunos habían utilizado hechizos que igualaban o incluso superaban a la Deadly Explosion, pero el UBM incluso se había recuperado de eso.

Y una vez que terminó de capear todos los ataques, De Vermis pasó a la ofensiva.

Levantó las palmas de sus seis brazos hacia su entorno.

“Iniciando magia ofensiva paralela. Disparando.” Dijo, liberando innumerables hechizos ofensivos.

Rayos, bolas de fuego, lanzas de hielo, cuchillas de viento, lanzas de tierra y rayos de luz llovieron sobre los Maestros circundantes.

Todos eran hechizos conocidos por los propietarios de los cuerpos que ahora componían De Vermis. Dado que la mayoría de ellos habían sido esclavos y vagabundos, esta magia era obviamente muy básica. Su poder era mínimo individualmente, y aunque el UBM podía lanzarlos como una andanada, aquí no hacían más que arañar a los Maestros veteranos.

Pero eso no era un problema, pues un rasguño era todo lo que necesitaba.

“¡Eh! ¡Eso apenas califica como daño!”

“Parece que este UBM está muy centrado en la salud y la regeneración. No parece más débil que antes, pero si seguimos—¿hm…?”

Los Maestros que luchaban contra De Vermis se dieron cuenta de repente de que algo no iba bien.