Infinite Dendrogram (NL)

Volumen 16: Las Posibilidades Tartareanas

Capítulo 2: Minus

Parte 2

Ciudad del Comercio, Cortana.

Abrumado por la inquietud, Zhang corrió por las calles de Cortana con Emily a su lado. Esa conversación… sus ojos y su aura… No hay duda de que ella lo sabe, pensó.

Ni siquiera Zhang esperaba que Emily revelara información relacionada con IF tan a la ligera.

El Maestro que estaba con The Blue Sky Songstress parecía despistado, pero ella misma sospechó de nosotros desde el momento en que nos sentamos, y esas sospechas se confirmaron cuando Emily pronunció el nombre de Rascal.

Y por si fuera poco, Emily realizó la absurda hazaña de comer helado a velocidad supersónica.

Zhang ni siquiera sabía que ella era capaz de eso, y ciertamente no esperaba que lo hiciera frente a alguien que podría ser uno de sus enemigos.

Con ello, los disfraces que les daban sus accesorios se volvieron completamente inútiles.

“Emily, ¿por qué fuiste tan incauta frente a nuestros enemigos?” Preguntó Zhang.

“¿Eh? ¿Enemigos? ¿Quiénes?”

“The Blue Sky Songstress y el otro Maestro. Estábamos sentados con ellos.” Respondió Zhang, todavía sosteniendo la mano de Emily.

“Pero el señor y la señorita no eran enemigos…” La chica ladeó la cabeza confundida. “Quiero decir, no eran minus. Además…”

“Además… ¿qué?” Zhang ya había oído la palabra «minus» antes, así que estaba más curioso acerca de lo que tenía que decir más allá de eso.

Sin embargo, antes de que Emily pudiera responder…

“Vaya, mira eso. ¿Viajeros? ¿En un lugar como este?”

“Je, je, je, je. ¿Qué te trajo a nuestro callejón? ¿Buscas algo?”

… un grupo de hombres, que claramente no eran personas respetables, se les adelantaron y les cerraron el paso.

Armados y con sonrisas maliciosas en sus rostros, se movieron para rodear a la pareja.

… Cometí un grave error. Estaba tan concentrado en alejarme del café que elegí el camino equivocado, pensó Zhang.

Estaba profundamente familiarizado con los de su tipo. Perseguían a los más débiles y se apoderaban de sus objetos de valor o incluso de sus vidas. Cuando estaba a cargo de la mafia Huang He en Hermine, solía reprimir a este tipo de personas cada vez que sobrepasaban sus límites.

Otra cosa que sabía de ellos era que a menudo eran terribles calibrando el poder de sus objetivos.

“Vaya, la mocosa es un maldito Maestro.”

“¡Je! No voy a tener miedo de una niña sólo por eso.”

“Oigan, ustedes dos, si no quieren salir lastimados, será mejor que empiecen a soltar su dinero.”

Los matones no tenían la menor idea de que Zhang era un Trabajo Superior o que Emily formaba parte de Illegal Frontier. Ni siquiera se plantearon la idea de que eran los débiles aquí—asumieron que estos dos no eran diferentes de sus víctimas habituales.

En este escenario en particular, los accesorios de disfraz de Zhang y Emily eran en realidad un inconveniente. Si revelaban sus verdaderos poderes, los que acudían a Cortana en busca del Orb desconfiarían de ellos, así que los accesorios estaban preparados para que no parecieran amenazadores. Incluso Reveal mostraba estadísticas falsas que los hacían parecer gente común, así que quizá era difícil culpar a los hombres por pensar que eran blancos fáciles.

Aunque, en cierto modo, los errores de los criminales aún no eran fatales. Tal vez si sintieran un instinto o algo que les advirtiera que corrieran, este encuentro no iría a más.

Después de todo, aún estaban en su zona gris.

Pero entonces, sellaron su propia perdición.

“¡¿Se van a quedar ahí parados o qué?!” El hombre más grande entre ellos sacó su arma…

“¡Denme el dinero! ¡O los mataré!”

… y dijo esas palabras: el mayor error de su vida.

“… Minus.” Dos sonidos siguieron, y Zhang necesitó un momento para averiguar su origen.

El primer sonido fue una voz fría como el hielo, y Zhang apenas se dio cuenta de que pertenecía a Emily.

El segundo sonido sólo duró una fracción de segundo, por lo que era muy difícil adivinar de qué se trataba.

Zhang tardó un buen rato en darse cuenta de que era el sonido de una espada partiendo al hombre desde la parte superior de la cabeza hasta la ingle.

La hoja en cuestión era un hacha de color negro rojizo que brillaba con un tenue lustre como la sangre seca. Su forma general era similar a la de un tomahawk, pero la hoja tenía el estilo del ala desplegada de una rapaz.

Ese detalle hacía que la hoja pareciera de adorno, pero cualquier duda sobre su capacidad para cortar se disipaba por el hecho de que acababa de partir a un humano por la mitad.

Y la que sostenía esta hoja… era Emily.

La espada que acababa de destrozar a un hombre estaba empuñada en su mano derecha, pero sostenía otra igual —aunque aún sin ensangrentar— en la izquierda. Estaba de espaldas a Zhang, y aunque el aspecto de las hachas era lo único que había cambiado en ella físicamente, su aura era completamente distinta.

“¿Emi… ly?” Zhang vacilante llamó, pero la chica no se volvió hacia él.

Esto le impidió ver su expresión. De algún modo, dudaba que siquiera pareciera humana.

Sin embargo, por el ángulo de su cuello, al menos podía adivinar lo que estaba mirando.

Miraba a los hombres que seguían vivos y que acababan de presenciar cómo partían en dos a uno de los suyos, cuyas entrañas se desparramaban por el suelo y empezaban a apestar en medio del calor sofocante. Apenas podían asimilar lo que estaba ocurriendo.

“¿Eh… ah? ¿Huhh?”

“¿H-Howard? ¿Eh? P-Pero tiene un… trabajo de alto rango…” Se quedaron mirando los restos del hombre con incredulidad.

Pero entonces se dieron cuenta de que Emily… los miraba directamente.

“¡¿AIEEEE?!”

“¡A-AHHHHHHHHH!”

¿Qué habían visto en su mirada?

Fuera lo que fuese, huyeron despavoridos, algunos tropezando consigo mismos.

Sin embargo, quedaba uno, que prácticamente le reventaba un vaso sanguíneo mientras la miraba con el rostro torcido por la rabia.

“Mi hermano… ¡MALDITO DEMONIO!” El hombre levantó su espada de dos manos, pero en el momento en que lo hizo, Emily lanzó el hacha con su mano izquierda.

Girando salvajemente, voló hacia los brazos levantados del hombre y los seccionó por los codos…

Pero entonces volvió volando como un boomerang… y lo decapitó.

Cuando el hacha volvió a ella, ahora había dos cuerpos en el suelo: uno sin cabeza y otro partido por la mitad.

Al ver esto, los hombres restantes volvieron a gritar y huyeron con aún más fervor. Sin embargo, Emily se limitó a observarlos huir, sin mostrar intención de seguirlos.

En todo esto, Zhang no movía ni un músculo.

No era el miedo lo que le había inmovilizado: dudaba en moverse porque, por lo que sabía, eso podría hacerla estallar.

Una vez que los hombres estuvieron completamente fuera de su vista, Emily comenzó a hacer otra cosa.

Clavó un hacha en cada uno de los restos.

Al principio, parecía que se deshacía de los cadáveres, pero ese no era su objetivo.

Las hachas empezaron a absorber los restos como si bebieran agua. Los cadáveres se secaron a una velocidad inmensa… y muy pronto, el agua que había en su interior, así como todas y cada una de sus células, desaparecieron por completo.

Entonces… se convirtieron en motas de luz.

Se suponía que los Tians dejaban atrás cadáveres, sin embargo, aquí, se habían convertido en luz y se habían desvanecido como monstruos y Maestros.

Las motas pronto se mezclaron con el viento del desierto que pasaba y desaparecieron por completo de la vista.

Una vez hecho esto, Emily se volvió hacia Zhang.

“¿Sr. Zhan? ¿Qué ocurre?”

Los ojos curiosos de Emily mientras miraba a Zhang eran todo inocencia. Eran puros, ciertamente no los ojos de alguien que acababa de cometer un brutal asesinato.

Zhang se quedó perplejo y le costó responder.

Pero al final…

“Emily…”

“¿Sí? ¿Qué pasa?”

“… ¿Qué ibas a decir?”

… habló, pero no preguntó por lo que acababa de pasar.

Quizá sólo necesitaba un momento para serenarse antes de preguntar por la brutalidad que acababa de presenciar.

En cualquier caso… desde luego no sabía que obtendría su respuesta inmediatamente.

“¿Cuándo?”

“Dijiste: «No eran minus. Además…». Estabas a punto de decir algo, ¿verdad?”

“¡Oh! ¡Ya me acuerdo!” Dijo Emily. “Decía que si fueran enemigos, se irían a alguna parte. Por eso ese señor y esa señorita no eran enemigos.”

Palabras crípticas, dichas con una sonrisa inocente.

“¿«Se irían a alguna parte»?”

“¡Sí! La gente que se convierte en enemiga me odia, así que se alejan de mí. Me pregunto adónde van…”

Por aterrador que fuera, el Truth Discernment de Zhang no se activó.

El único defecto de la habilidad era que no reaccionaba ante las palabras que el hablante creía sinceramente que eran ciertas.

Esto significaba que Emily pensaba que las personas que se convertían en sus enemigos simplemente se alejaban de ella… cuando la realidad era que ella los mataba. A cada uno de ellos.

Así que esto… es su “verdadera naturaleza”, ¿eh? Zhang ahora entendía completamente lo que Rascal había querido decir.

Cuando se enfrentaba a alguien a quien consideraba un enemigo, Emily era como una máquina que lo descuartizaba al instante. Sin embargo, en realidad no recordaba ninguno de esos asesinatos.

Si Zhang de alguna manera se convirtiera en su enemigo, ella lo mataría instantáneamente y ni siquiera recordaría el evento.

Simplemente… ¿cómo? ¿Cómo llega a ser una persona como ella? Zhang había pasado por mucho y había visto todo tipo de gente, sin embargo, la verdadera naturaleza de la niña que tenía delante le producía escalofríos.

Al mismo tiempo, sin embargo, ahora comprendía que esta Emily era la misma Emily de la que había oído rumores.

Era la titular del Trabajo Superior “Murder Princess”, que se desbloqueaba matando al menos a diez mil personas con armas cuerpo a cuerpo.

Era portadora del Embryo Superior “Soul-Eating Axes, Youaltepuztli”, un par de hachas del color de la sangre.

Era la asesina en serie más infame entre todos los Superiores… Emily Killingston, “la Kill Leader”.