Regressor Instruction Manual

Capítulo 77: Tercera Clase (Parte 3)

El segundo piso del gremio, normalmente ruidoso, se encontraba en silencio; no me acostumbraba.

Supongo que me he encariñado con ellos.

Nunca imaginé que me sentiría así a pesar de que no había pasado tanto tiempo desde que se fueron, pero por supuesto, no era hasta el punto de sentirme solo. Solo reaccionaba así por el repentino cambio de ambiente. En realidad era divertido. No podía negar el hecho de que me sentía incómodo, pues rara vez tenía tiempo para mí mismo, ya que Jung Ha-Yan siempre estaba pendiente de dónde estaba, Park Deok-Gu me visitaba al azar y Sun Hee-Young a menudo me pedía que fuera de voluntario con ella. Afortunadamente, Kim Ye-Ri no iniciaba ninguna conversación conmigo. No sería exagerado decir que no tendría vida personal si esa niña también me tomara confianza. Me sentía como si estuviera de vacaciones.

Eso no cambia el hecho de que sigo necesitando trabajar desesperadamente.

Para conseguir la tercera clase y el aumento de atributos que Kim Hyun-Sung había marcado como objetivo, necesitaba trabajar tan desesperadamente como los otros miembros del grupo. No estaba seguro de qué parte de mí le hacía pensar a Kim Hyun-Sung que sería capaz de alcanzarlos, pero estaba seguro de que tenía un plan.

En realidad no estaba en una mala situación. Tenía equipo de alquimia de rango épico y una tonelada de catalizadores y materiales, así que ya estaba creciendo. El problema era mi atributo de inteligencia, no las demás. Como me resultaba imposible aumentar mis otras capacidades desde el principio, no podía elegir cuáles quería aumentar. Por eso era tan importante el tercer cambio de clase. Ni siquiera pensaba usar mi habilidad de combate, pero creo que soy un miembro útil del grupo. Aun así, no podía limitarme a seguir al grupo y hacer investigaciones. No podía dejar de pensar en las distintas posibilidades que se me iban ocurriendo a medida que crecía lentamente y que eran respuestas a problemas que aún no habían sucedido. Necesitaba una forma de tener la mínima capacidad de combate sin perder mi singularidad como alquimista.

Primero el homúnculo…

Esta oportunidad podría ser mía gracias a que elegí la clase de alquimista. Era muy ventajoso para mí, debido a que podía controlar seres similares a las invocaciones sin tener que usar mi magia. En la Introducción a la Alquimia de Ramus Tucker, estaba escrito un análisis muy profundo sobre un homúnculo.

[Un homúnculo es una criatura creada artificialmente sin tomar prestado el vientre de una mujer. Como cada escuela lo interpreta de forma diferente, la opinión de cada uno puede ser ligeramente distinta, pero como autor, definiré el homúnculo como una criatura creada por el hombre. Por supuesto, no me refiero a una quimera. A diferencia de una quimera, que es creada a partir de algo, el homúnculo que controlamos los alquimistas es creado a partir de la nada].

Un homúnculo era una vida artificial, pero no sabía qué aspecto tenía ni qué podía hacer. Para empeorar las cosas, Tucker solo escribió su teoría en su libro. Escribió una comparación detallada entre una quimera y un homúnculo. Era posible que el homúnculo fuera un tema misterioso incluso para Tucker. No, incluso si él consiguiera crear una criatura viva, estaba seguro que no iría por ahí diciéndolo si no quería una muchedumbre con horquillas y antorchas afuera de su casa

En segundo lugar está la medicina líquida.

En este mundo, las medicinas líquidas se llamaban pociones. Si me preguntaran si alguien sería capaz de obtener habilidades de combate simplemente bebiendo una poción, sin duda negaría con la cabeza, pero esta teoría se basaba simplemente en mi imaginación.

¿Puedo poner magia en una poción?

En pocas palabras, el principio mágico de este continente era el siguiente: uno apilaba su magia y recitaba un conjuro para imaginar el hechizo. Un hechizo completo residía en el brazo del lanzador o en una parte específica del cuerpo y el hechizo se activaba cuando el lanzador lo deseara. Entonces, ¿sería imposible que un hechizo completado residiera en una poción o en un objeto específico en lugar de en el cuerpo?

Era ese tipo de experimento. Investigué sobre objetos que contuvieran magia, pero aún no habían sido creados. Había algunas escuelas de magia que encantaban objetos, pero la cantidad de magia en ellos era ínfima y los efectos poco eficaces.

Si un alquimista pudiera contener una magia de un solo uso utilizando un círculo mágico, tendría un gran éxito comercial.

La tercera es la quimera.

Era una forma de crear una bestia invocada manipulando sus genes. Sinceramente, pensé que era el método más fácil ya que, incluso en este mundo, los monstruos eran un tema apasionante. Simplemente crear una quimera era fácil. Había algunos monstruos que tenían genes similares y si realmente experimentaba mezclándolos, el monstruo definitivamente viviría. Sin embargo, controlarlo era el trabajo de un mago oscuro, no de un alquimista. Mi magia no sería suficiente para controlarla. Por supuesto, podía atrapar a un monstruo joven, entrenarlo y luego criarlo, pero no me garantizaba que tuviera éxito. Después de todo, no quería ser devorado por la quimera que criara.

No solo eso…

Se me ocurrieron gran variedad de métodos porque, para mí, esto estaba directamente relacionado con mi supervivencia. Era muy peligroso, pero incluso pensé en experimentar directamente con mi cuerpo y en fabricar una Piedra de Sabio. Sin embargo, me pareció que no sería muy eficaz y no me consideraba lo bastante hábil para controlarla.

Lo había estado posponiendo, pero ahora era el momento de decidir qué camino de crecimiento iba a tomar. En mi opinión, lo más importante era trabajar con eficacia. Claro, esto no podía hacerse en poco tiempo y no quería pasarme el tiempo experimentando y fracasando constantemente. Así, se me ocurrió una solución.

Conseguir ayuda.

No era mala idea. Ya sea que no entendiera algo o me quedara atascado en mi investigación, siempre podía preguntar.

Aunque la magia y la alquimia eran dos caminos diferentes, ambas tenían las mismas raíces. Como cada uno interpreta las cosas de forma distinta, pedir ayuda era el método más razonable para salir de un bloqueo.

El Gremio del Diablo sería el mejor, ¿verdad?

No era una mala decisión. Tenía la sensación de que si les pedía a los que me rogaban que los incluyera en la investigación de la Piedra del Sabio, se convertirían en fieles trabajadores del laboratorio de Lee Ki-Young.

Bajé a la cafetería sin prestar atención a mi alrededor. Estaba sumido en mis pensamientos.

“¿Estás comiendo solo hoy?” alguien me llamó.

“¿Eh?”

Cuando giré la cabeza, vi a una mujer joven, de tez pálida y un largo y ondulado cabello verde, un tanto desteñido en las puntas.

“¡Oh! Creo que es nuestro primer encuentro. Soy Hwang Jung-Yeon, la líder del quinto grupo Cariano” se presentó, extendiendo su mano.

“Encantado de conocerte” acepté su apretón. “Yo soy…”

“Sé quién eres. Eres Lee Ki-Young, el alquimista del séptimo grupo, ¿verdad?”

“Sí”.

“¿Qué tal el Jardín Tenebroso?” preguntó.

Parecía una pregunta al azar, pero enseguida me di cuenta de por qué lo preguntaba.

La descubridora.

Hwang Jung-Yeon fue quien descubrió la mazmorra y nos dio permiso para entrar en ella.

“Fue una gran experiencia, así que muchas gracias” respondí.

“Tienes una mente rápida, igual que los rumores” comentó.

“Me lo tomaré como un cumplido”.

“Claro que es un cumplido” se rio. “Pero me siento un poco mal por todo el asunto con Jung Yoo-Ra. Supongo que te arruinó la experiencia…” suspiró. “Un amigo mío del Cisne Negro me pidió que te dijera que lo sienten, pero supongo que ya es un poco tarde”.

“¡Oh, no pasa nada! Ya he recibido sus disculpas y el problema está bastante resuelto. En realidad fue una oportunidad para darme cuenta de lo mucho que me faltaba” le dije.

“Me siento mucho mejor después de oírlo de ti. Es la primera vez que hablo con un miembro del famosísimo séptimo grupo” bromeó. “Estoy muy contenta”.

Su rostro y su voz estaban ligeramente calmados. Creo que relajada era la mejor manera de describir su rostro. Aunque parecía un poco joven, su humor me recordaba al pasado, por alguna razón. No era muy apropiado para una mujer que vivía en la era moderna, pero desprendía un aire de doncella de familia respetable.

“En realidad, hace tiempo que volví de mi expedición, pero todos ustedes siempre están juntos, así que no me resultó fácil hablar contigo” dijo Hwang Jung-Yeon.

“Sí, pasamos mucho tiempo juntos. ¿Querías algo en particular?”

“Solo estaba deseando que llegara el día en que todos pudiéramos salir a comer, pero los otros grupos aún no han vuelto de sus expediciones… y el gremio ha estado muy ocupado últimamente. Supongo que nadie ha tenido tiempo” explicó.

“Ohh, me enteré. Oí que entraron en una mazmorra de rango épico…” asentí.

“Así es” después, se quedó callada por unos segundos. “Parece que tienes algo en mente…”.

“Mmm…”

Obviamente era una maga. Supongo que debió suponer que era una lucha que solo dos personas con roles similares entenderían. Parecía una persona muy entrometida, teniendo en cuenta cómo hablaba con su inferior y el hecho de que renunció a la propiedad de la mazmorra, mas esa parte entrometida de ella era obviamente una gran ayuda para mí.

Aunque no usara el Ojo de la Mente para mirar los atributos de Jung-Yeon, me di cuenta de que era una maga con talento. Tenía una vaga idea de cuáles eran sus cifras, ya que no trataba de ocultar su magia y se notaba el brillo de sus ojos. Estaba seguro de que su personalidad relajada estaba influenciada por el poder mágico único que poseía.

Creo que es útil…

No creí que hubiera necesidad de seguir pidiendo ayuda al Gremio del Diablo, ya que parecía que a ella no le importaría que le hiciera muchas preguntas.

“Me da un poco de pena” admití. “Sí, tengo algo en mente. Siento que últimamente no he podido decidir qué camino debo tomar”.

“Sí, lo entiendo. Todos hemos pasado por ahí”.

“Hay muchas opciones, pero…” me encogí de hombros. “No tengo ni idea”.

“Mmm, estoy segura de que se aplica más a usted, señor Ki-Young” dijo ella.

“¿Cómo dice?”

“Estás contemplando entre la Reina Mercenaria y la señorita Ha-Yan, ¿verdad? Has estado saliendo con una desde que estabas en la Tierra y has experimentado la vida y la muerte con la otra… es natural que te cueste elegir” continuó, con un brillo peligroso en sus ojos.

“¿Perdón?” volví a preguntar.

“Puede ser difícil de entender con la ética moderna donde la poligamia y la monogamia se dan por sentadas, pero elegir ambas podría ser la respuesta también”.

Como estaba mirando fijamente mi expresión extremadamente nerviosa, solo tardó un segundo en darse cuenta de que estábamos hablando de dos cosas distintas. Hwang Jung-Yeon sonreía mientras hablaba, pero enseguida se quedó callada.

“Oh, así que no se trataba de eso” desvió su mirada y se ajustó sus lentes.

“Sí” y yo miré mi comida, confundido.

“Lo siento. Estabas pensando tanto, así que definitivamente pensé que era…”

Se veía avergonzada. Estaba haciendo su mejor esfuerzo para arreglar el ambiente incómodo, pero no estaba funcionando. Era una sensación similar a la que sentía en otro lugar.

Son similares…

Su impresión y aspecto eran completamente diferentes, no, su raza era completamente diferente. La cara que me estaba imaginando era la de un cerdo que parecía un bandido y la mujer que estaba delante de mí tenía la imagen de una buena esposa y una madre sabia. Pero en conclusión, me di cuenta de que esta mujer desprendía una vibración similar a Park Deok-Gu.

Son parecidos.

Tuve la sensación de que iba a ser molesto si encontrábamos algo en común. Mientras pensaba si sería mejor irme, continuó hablando.

“Lo siento, debo haber estado fuera de mí” se disculpó, volviendo a fijar su mirada en mí. “Hacía tiempo que no veía un drama… Supuse cosas sin saberlo”.

“Oh, ya veo…”

“Es que estás muy unido a las dos. Para ser honesta, hay veces que sonrío sin saberlo cada vez que veo a la señorita Ha-Yan contigo… parece que realmente le gustas, señor Ki-Young, así que tal vez por eso ha estado usando ese hechizo” dijo Hwang Jung-Yeon, mirando por encima de mí.

“¿Qué hechizo?” pregunté.

“Un hechizo de rastreo. No estoy segura de si está bien que esté aquí contigo… Espero que Ha-Yan no lo malinterprete” contestó.

“¿Eh?”

“No tienes por qué avergonzarte de ello. Incluso le diste una parte de tu cuerpo. Qué romántico”.

Me quedé en silencio, anonadado por lo que acababa de revelarme. Al notar mi sorpresa, ella puso cara de confusión.

“¿No eras… consciente de ello?” preguntó. “No puedes fingir… espera, ¿de verdad no lo sabías?”

La información que revelaba era, como mínimo, impactante.