Toradora! (NL)

Volumen 5

Capitulo 4: Lo Rompí. Lo Siento

Parte 2

“Si quieres, me gustaría que los tuvieses”

Al oír esto, Ami miró el objeto que ella le estaba entregando, y se quedó en silencio por unos segundos.

“Ugh, ¿qué hay adentro? ¿Algún tipo de res de animal?”

Ami dio una mirada realmente disgustada mientras levantaba sus finas cejas. Después de que la escuela hubiese terminado, en la pequeña esquina de la caótica sala de clases, donde las dos estaban paradas en su propio espacio, crearon instantáneamente una atmósfera glacial y hostil. Sin dejarse intimidar por esto, Taiga continuó:

“No seas tonta, Bakachi. De ninguna manera te daría a ti algo así”

Taiga se encogió de hombros de mala gana, tragándose todo lo que podía utilizar para tomar represalias contra Ami mientras insistía en darle el objeto que tenía en sus manos. El objeto era una elegante caja envuelta, o ‘anzuelo’ como Taiga le había puesto. Ella puso forzadamente la caja en el pecho de Ami, y sin importar cuánto Ami lo alejase, ella rehusaba en rendirse.

“Esto es para ti. Sólo tómalo ya, Bakachi…”

“No, no lo quiero. Para que tú me des un regalo, es porque tramas algo”

Como era de esperarse de la reina del engaño, Ami era extremadamente perceptiva a la hora de detectar algo sospechoso. Había adivinado correctamente que ella estaba tramando algo. Incluso Ryuuji, que estaba parado junto a ellas, no pudo evitar murmurar: “Qué increíble percepción”

“No, no, no estoy planeando nada en absoluto”

Taiga movió sus brazos ampliamente ante ella, y abriendo sus ojos gentilmente como su padre, le sonrió y le dijo:

“Sólo quería darte esto Bakachi, dado que creo que te gustará” “¿Eh…?

Taiga dijo esto con la fuerte voz de una chica gentil, causando que Ami la mirase con un poco de indignación, aunque ella no estaba apartándose de Taiga. A regañadientes volteó su cara con el ceño fruncido, y decidió oír a Taiga. ¡Bien! ¡Lo hiciste! ¡Ahora es cuando! Le susurró Ryuuji a Taiga por atrás.

“Te sugiero que no asumas que todo el mundo tiene una doble cara como tú. Es mejor que supongas lo mejor”

¿¡Qué!? ¿¡Por qué tiene que decir repentinamente esa tontería!? Un ataque de rabia pasó destellando por la cara de Ami, la cual se volvió tan roja como una rosa.

“¿Por qué has…? Justo cuando acababa de callarme para oír lo que tenías que decir…” “Sólo tómalo ya, Kawashima”

Ryuuji decidió intervenir, de espaldas hacia Taiga, y dándole a Ami una sonrisa inusualmente gentil; esto sólo agregaba más sospecha a Ami de que algo estaba pasando.

“Hay algunas cosas muy buenas dentro, así que acéptalo. Te garantizo que serás feliz una vez veas lo que es”

Pero ni siquiera la amabilidad de Ryuuji podía persuadir a Ami.

“¿Eh? ¿¡Qué tiene que ver esto contigo!? ¡Ahora piérdete!” Ami movió su mano para que Ryuuji se alejara.

“A pesar de que tienes razón…”

“Definitivamente no tomaré ningún regalo de la Tigre”

Ami volteó su cara hacia un lado y los ignoró. Ryuuji y Taiga ahora se encontraban de repente enfrente de un difícil obstáculo mientras se miraban el uno al otro.

En el interior de la sala de clases después de la jornada escolar, a pesar de que el enfrentamiento entre las dos bellas chicas más un estudiante delincuente estuviese explosivamente intenso, nadie les estaba poniendo atención. Esto se debía a que toda la clase estaba ocupada preparándose para el festival escolar del día siguiente. Se escuchaban risas y gritos de todas partes mientras el ensayo del show de lucha libre estaba entrando a su fase final. Haruta estaba por completo en modo de director al reunir a los compañeros de clases del club de gimnasia para perfeccionar la coreografía de la voltereta hacia atrás, mientras constantemente se quejaba: “¡No está bien! ¡Inténtenlo de nuevo!”, sólo para ser ignorado por todos. Se presentía que pronto sería rematado él mismo por la brigada de las sombras.

El cielo fuera de la ventana estaba oscuro. No tan sólo la clase 2-C estaba haciendo todo el ruido. Las clases de al lado y enfrente de ellos estaban en lo mismo. Cada estudiante estaba de carpintero, llevando escaleras, o vistiéndose con todo tipo de trajes de criada. Kitamura no estaba en la sala de clases, él estaba ocupado yendo por la escuela mientras se hacían las preparaciones de las funciones del consejo estudiantil. Al parecer esta vez la clase 2-C no era la única con gente interesada en los premios que ofrecía el consejo estudiantil. Aparte de las clases de tercer año que tenían exámenes, casi todas las demás estaban formando parte en esta competición.

Entre este ocupado ciclón de la escuela…

“¡Creo que tendrá un gran sabor, así que comete uno!”

Ryuuji decidió adoptar un bajo perfil en un intento de mejorar la situación. “¿Comida~?”

Aunque todavía no era suficiente para atraerla. La actriz principal, que estaba tomando un descanso, torció su bella cara, y miró a la villana principal y a su lacayo para decir:

“Esto cada vez me asusta más… Ahora definitivamente no lo tomaré”

Ella negó rotundamente el regalo de su ‘Némesis’, sin siquiera recibirlo. Taiga probablemente fue demasiado lejos con sus payasadas diarias, pero nunca pensé que pasaría esto. Parece que tendré que hacerlo yo mismo… Ryuuji siguió actuando como mediador.

“Sólo tienes que abrirlo y sabrás a lo que me refiero. Te aseguro que te encantará. Vamos tómalo. ¡Abre el envoltorio y ve lo que hay adentro! ¿Está bien?”

Oyendo la apasionada persuasión de Ryuuji, Ami pensó, ¿Es esta una compra de Takasu? Y volteó su cabeza mientras miraba con recelo. Ella no quería tener esa caja, la cual parecía contener comida del suelo, pero finalmente estiró su blanca mano, y de mala gana tomó la pequeña caja. Mientras la miraba con el ceño fruncido, vio el logotipo del envase, y repentinamente abrió mucho sus ojos.

“¿Eh? ¿¡No puede ser!? ¿¡Es realmente uno de esos!?”

Atrapada.

Taiga y Ryuuji intercambiaron miradas, pero Ami no lo vio y abrió el envoltorio, para abrir poco a poco la caja.

“¿¡No me digas, que es…!? ¡Oh cielos…!”

Ami exclamó más suavemente de lo normal. Dentro había una caja de macarons¹ hecho por un restaurante francés muy conocido, los cuales eran conocidos por ser muy difíciles de encontrar una reserva. Los macarons estaban alineados pareciendo un hermoso arco iris.

“Últimamente mi padre me ha llevado a cenar. La comida en este restaurante francés al que fui anoche se veía muy bien, así que decidí comprar algo para ti. Creí que te gustarían, ¿no es así?”

“¿Cenaste con tu padre en ese restaurante?”

1 NdT: Pastelillo tradicional francés hecho de clara de huevo, almendra molida, azúcar glas, y azúcar

La mirada de Ami, la cual estaba fijada en los macarons, estaba repentinamente cubierta de oscuridad. Incluso su hermosa barbilla se veía torpe ahora.

“No puede ser… ¿Qué has dicho? Ni siquiera yo y mis colegas modelos hemos estado ahí, así que ¿por qué la gente común como tú y tu padre pueden entrar…? ¿Estás bromeando, cierto? Ya veo… no me extraña que hayas estado teniendo acné últimamente. Es porque has estado comiendo todas estas buenas cosas, ¿eh?”

Los ojos llorosos de Ami apuntaron hacia la barbilla de Taiga, que de hecho revelaban algunos puntos rojos de acné por comer tantas cosas buenas. “¡Hmph!” Ami sin reservas puso una cara de envidia y dijo con amargura:

“Tu padre, ¿eh?… Oí que tus padres estaban divorciados. Que vivas sola a tu edad, pobrecita~ Oh cielos, ¡nunca pensé que ustedes se llevasen tan bien!”

Qué grosera al señalar descaradamente los asuntos familiares de otras personas. Si fuera la Taiga de siempre, definitivamente haría que el infierno se congelase, pero hoy era diferente. Sin importar lo qué las personas dijeran, ella se veía reservada. El corazón de esta tigre reina ya había sido llenado con todo tipo de exquisitos platos franceses, envueltos en una capa de grasa. Como resultado de ello, cualquier insignificativo ataque de la chihuahua era como una pequeña picadura de mosquito para ella.

“Sí, nos llevamos bien. Lamento desilusionarte”

Je… sonrió Taiga con el acné en su cara mientras esquivaba elegantemente todos los ataques. Ryuuji murmuró en aprobación:

Taiga lo está haciendo increíble. Ella ocultó su agresividad muy bien esta vez.

Esto es bueno… Él asintió con su cabeza sin parar. Síp. Esto es bueno, definitivamente.

“Bakachi, ¿por qué no intentas comerte uno?”

“¿Eh? ¿Quieres que me coma esto ahora mismo? ¿Por qué? ¡De ninguna manera! Mi boca se secaría. Aunque todavía estoy molesta contigo, los macarons son inocentes, así que voy a llevarlos a casa con un corazón lleno de gracia, y los disfrutare tranquilamente con una taza de té rojo… Pero, maldición… no puedo creer que un plebeyo enano como tú fuese antes que yo… Definitivamente iré el próximo fin de semana…”

“¡Lo que sea! ¡Sólo comételo! ¡Apresúrate y comételo! ¡Comételo! ¡Comételo!” “¡No! Eres muy molesta, ¿lo sabes? ¿¡Qué estás haciendo!?”

“¡Vamos! Sólo comételo ya~”

Taiga comenzó a hacer pucheros como una niña, y se aferró a Ami, agarrándose por dentro de su equipo de educación física, mientras pateaba el trasero de Ami con sus zapatos.

“¡Oye, detente! ¡Deja de tirar de mi uniforme de educación física! ¡Lo vas a estirar…! ¿¡Y no llevaste tus zapatos al baño!? ¡Deja de pisarme ya! ¡Ahh~! ¡Ya es suficiente! ¡Los comeré! ¿¡Está bien!?”

Ami finalmente cedió ante la inflexible Taiga, y arrojó un pedazo de macarrón en su boca. Aferrada a Ami como un mono, Taiga le dijo en voz baja.

“Te lo comiste…”

Y luego saltó de vuelta al suelo, manteniendo una distancia de Ami y mirándola hasta que se tragó el macarrón. Sacándose el polvo de las manos, Ami le dijo:

“Muy bien, me lo he comido, es sabroso, ¿estás feliz ahora? ¡Ahora piérdete! ¡Vete! Realmente puedes ser una gran molestia a veces, ¿sabes?”

“¡Te lo has comido! ¡Ahora tienes que hacer lo que yo te diga!” “¡Ah! ¡Así que si tramabas algo! Demonios… ¡cof cof!”

Ami se atragantó y se le pusieron los ojos llorosos mientras intentaba escupir los restos de macarrón que se acababa de tragar, y apuntó con un dedo acusador a Taiga.

“¡Eres una persona muy despreciable! ¡Oye, Takasu-kun! ¿Oíste lo que dijo? Y yo que estaba pensado porque ella sería tan amable en darme un regalo, ¡nunca creí que sería este tipo de persona!”

¡Esto es horrible! Incluso aunque Ami dijera esto, Ryuuji sólo podía sonreír tímidamente, dado que él era un cómplice también. Él volteó su cabeza lejos de la hermosa mirada de Ami como si no tuviese nada que ver con él. Taiga se aproximó a Ami y le dijo:

“Dado que tú aceptaste mi regalo, tendrás que cambiar los roles conmigo mañana en el show de lucha libre. Sólo será una vez, no quiero ser la villana, quiero ser la buena”

Taiga finalmente lo había dicho. Era la más descarada y degradante de las peticiones. “¿Eh? ¿¡Por qué!?”

“¡Ugh!” Los labios de Taiga se movieron temblorosamente como un gatito, y probablemente se sintió avergonzada ahora por agarrar el uniforme de educación física de Ami con todo su peso, como si fuese una tabla de surf…

“Mañana mi papá vendrá al festival, pero no pude decirle que yo actuaría como la villana… sólo le dije que tenía un montón de líneas, y supuso que sería una obra de teatro… Él incluso me dijo que dado que tenía el personaje principal, vendría definitivamente…”

“Pero esto no es una obra de teatro, y tú no eres el personaje principal”

“Claro que sé eso. ¡Esto es sólo un estúpido show de lucha libre pensado por ese idiota de pelo largo! ¡Pero no puedo cambiar eso! ¡Sin importar qué, el vendrá! ¡Así que déjame actuar como el personaje principal! ¡No podía decirle que no viniera!”

“Hmm…”

En vez de moverse, los ojos de Ami estaban viendo fríamente a Taiga. Tirando de su uniforme de educación física, ella movió sus labios, pareciendo querer decir algo desagradable, pero rápidamente se lo tragó. Después de pensarlo por un momento, Ami colocó su dedo sobre sus labios y dijo en voz baja:

“Ya veo~ ¿Tu padre vendrá a ver la competencia de Reina? ¿Le dijiste que ibas a participar?”

“Umm… sí… aunque no quería decírselo, lo solté accidentalmente…”

Jo~ como si escuchase una broma interesante, Ami entrecerró sus ojos mientras sonreía.

“Eso está bien… al menos así te asegurarás de participar en la competencia de Reina. Si sólo nuestra clase no participa, entonce me veré mal como presentadora. Hmm, está bien, cambiaremos los roles cuando tu padre venga a vernos. Ah, dado que Ami-chan tiene que actuar el personaje principal todo el tiempo, será divertido hacer ocasionalmente el papel de villana. En cuanto a la excusa, pensaré en algo para mantener a todos los demás alejados. Además, no es como que un ‘complejo de padre’ como tú le diga a cualquiera que cambien roles”

“¿A quién le llamas ‘complejo de pa…” “Ya está bien~”

Esta vez era el turno de Ami de aproximarse a Taiga, inclinándose para ver su cara y decirle con una voz inusualmente dulce:

“Hablando de ello, ¿qué hace tu padre de todos modos? Dado a tu descripción, me huele a un aristócrata~ Puedo cambiar los roles contigo, pero vas a tener que decirle a tu papá que la anfitriona de la competencia de Reina es tu amiga. ¡Por no hablar de una modelo, extremadamente linda, amable y sorprendente! Simplemente di un montón de cosas buenas de Ami-chan, déjame crear una buena relación con él. ¿Eh? ¿Por qué, preguntas? A pesar de que nosotros no nos reunamos entre sí durante el trabajo, aún puedo establecer una buena relación con la gente del restaurante, llámalo una red social si quieres~”

“¡Uwah! ¿Cómo me pides eso mujer repugnante…?”

“¿¡Qué estás diciendo!? ¡Ya he aceptado tu solicitud! ¿¡Cómo puedes seguir diciendo tales cosas!?”

¿Un trato… supongo?

Ami y Taiga estaban gritando ahora y corriendo alrededor de la sala de clases como de costumbre. Ryuuji sólo permaneció inútilmente de pie mientras las observaba.

“Sólo recuerda presentarme a tu papá, ¿¡de acuerdo!?”

Justo cuando Ami había levantado su voz… “¿El padre de Taiga…? ¿Qué está pasando?”

Preparándose para el show de mañana, Minori limpiaba su gorra calva mientras se acercaba a Ryuuji. ¡Ella me está hablando a mí! Ryuuji casi salto de alegría como un cachorro. Después de haber moderado su emoción, logró explicar con indeferencia lo que estaba pasando, mientras se sentía desconcertado al mismo tiempo, ¿ella no sabe nada?.

“Esa chica de papá dijo que él vendría mañana al festival. Cuando Kawashima oyó esto, insistió en que Taiga se lo presentase, así que es por eso que están peleando ahora. Realmente no sé lo que espera”

Justo cuando estaba a punto de continuar con su explicación. “…”

Minori de repente cerró su boca y contuvo el aliento. Sus brillantes ojos negros estaban muy abiertos, mirando simplemente a Ryuuji que estaba parado ante ella. Los hoyuelos de sus mejillas estaban llenos de energía. Tan linda. Ryuuji se relajó evidentemente al pensar en eso.

“¿Qué, qué dijiste?”

Después de unos segundos, Ryuuji finalmente sintió que algo no estaba bien. Minori parecía haber escuchado algo muy sorprendente, y era incapaz de hablar. Su cara se había puesto rígida, como si estuviese petrificada. Normalmente, sin importar lo que ocurriese, Minori siempre resolvería las cosas con su positivo pensamiento, al ser una chica extremadamente optimista y entusiasta, con una personalidad que brillaba tanto como el sol.

¿Dije algo raro?

“¿Por… por qué?”

Minori finalmente habló, pero su voz sonaba ansiosa e inquieta por alguna razón. “Me preguntas por qué, pero…”

Ahora incluso Ryuuji se quedó mudo. ¿Qué está pasando? ¿Dije algo malo?

Minori miró rápidamente alrededor, y luego de forma casual le dio la espalda a Ami y Taiga, que estaban ahora peleándose entre sí, y acorraló a Ryuuji entre ella y la pared antes de decir:

“¿Qué es esto?… vamos cuéntamelo”

No había ni un rastro de sonrisa en su cara. Sus cejas estaban fuertemente fruncidas, y mordía sus labios con una seria mirada. Esta era la primera vez que Ryuuji la veía con esa expresión, él nunca pensó que hiciera una cara como esta. El sonreír alegremente, el hacer muecas graciosas, y algunas veces el mostrar la ansiedad de una chica adolescente… Esas eran las emociones de Minori que Ryuuji conocía.

“Deja de estar tan tranquilo. Dime, ¿qué está planeando el papá de Taiga esta vez?” “¿Qué está planeando? Él vendrá al festival…”

“Es por eso que estoy preguntando, ¿¡por qué viene!?”

Minori gritó de repente, sorprendiendo a Ryuuji. Incluso Minori se sorprendió de ello, y rápidamente cerró su boca, para calmarse. Luego ella abrió sus ojos de nuevo, y tomó un profundo respiro. Ryuuji ahora lo entendía.

Minori estaba enojada.

Sin embargo al entender esto, la duda entró en la mente de Ryuuji como un relámpago.

¿Por qué Minori se enojaría repentinamente? Esto no tiene sentido. Por alguna razón, es muy complicado. Él no sabía que significaba todo esto.

Frente a un silencioso Ryuuji, Minori dijo con una voz inquieta:

“Te estoy preguntando, Takasu-kun, ¿por qué él vendrá? Si sabes la razón, dímela por favor.

¿Qué paso con Taiga? ¿Por qué su padre apareció ahora tan de repente?”

La voz de Minori sonó casi mecánica. Ryuuji pudo oírla hablar a una velocidad que normalmente no oía, y en palabras que parecían reprenderlo. Él no sabía la razón detrás de todo esto, pero como no podía ignorar la pregunta, respondió:

“Taiga va a vivir con su papá. Estoy seguro que conoces muy bien su pasado, pero últimamente, parecen estar comportándose como padre e hija de nuevo”

Ryuuji intentó permanecer calmado, y dijo los hechos que conocía. Un segundo después.

“…”

Minori no pudo decir nada.

Se podía ver claramente su pecho jadeando debajo de su uniforme mientras ella inhalaba. Su cara se había vuelto pálida y cuando abrió sus labios, los cuales parecían no poder exhalar, simplemente temblaron de impotencia. Su reacción era diferente a cómo Yasuko terminó al azar la conversación de antes. Al parecer ella se lo tomó muy serio.

“¿Estás bien? Oye, luces muy mal, ¿qué está pasando?”

Aunque estaba dudando un poco, aún así Ryuuji puso gentilmente su mano sobre el hombro de Minori. Él quería sostenerla para animarla, sin embargo…

“Qué diablos…”

Los ojos de Minori ya no podían ver a Ryuuji ni a nada. Ella temblaba mientras se quitaba de encima la mano de Ryuuji, sujeto con fuerza su gorra calva y dijo:

“¿¡Que diablos es todo esto!? ¡No me fastidies!”

Minori dijo algo similar de nuevo. Ryuuji no sabía con quién estaba hablando. Al momento siguiente, Minori le dio la espalda a Ryuuji, y caminó en búsqueda de Taiga.

“¡Alto!”

Ryuuji se encontró a sí mismo agarrando la mano de Minori para detenerla. No había una calidez romántica en sus pieles al entrar en contacto. Minori volteó su cabeza, y le dio a Ryuuji lo que parecía ser una hostil mirada.

“Takasu-kun, déjame ir”

“¿Adónde vas? ¿Qué estás planeando hacer? Estás delirando, ¿puedes calmarte por favor?” “La que está delirando es Taiga”

Esta vez fue Ryuuji el que se quedó sin palabras.

“Taiga debe haberse vuelto loca, necesito que entre en razón. Tengo que decirle que ella no puede confiar en semejante padre”

“¿Qué…?”

Ryuuji estaba tan sorprendido que pudo sentir que la piel de gallina crecía por todo su cuerpo. Tranquilízate, tranquilízate… esta vez se lo decía a sí mismo.

“¿Por qué dices esas cosas? ¿No eres la mejor amiga de Taiga? ¿Por qué tienes que decir esas cosas…? ¿Por qué no te sientes feliz por ella?”

“¿Feliz? ¿Yo? ¿Por qué? El papá de Taiga apareció en este momento, y ella cree en las palabras de semejante sujeto. ¿Cómo puedo estar feliz con eso? ¡No puedo quedarme al margen de esto y sonreír mientras mi amiga es lastimada!”

¿Estás diciendo que estoy sonriendo mientras veo que Taiga es lastimada? Fue un milagro que Ryuuji lograse contenerse. Esta es Kushieda Minori, la chica que me gusta… Ryuuji repitió este pensamiento como si fuese un mantra. Después de abstenerse de gritar, él le dijo tranquilamente:

“¿No es eso un poco exagerado? Aunque él pueda hacer cosas fuera de lo común, el padre de Taiga es un viejo normal que sólo quiere amar a su hija y hacerla feliz. Él puede haber cometido errores, y haber lastimado a Taiga antes, pero ahora está haciendo todo lo posible para reparar sus errores, y Taiga está haciendo su mejor esfuerzo para corresponder a esos sentimientos. Tú eres sólo una espectadora, ¿qué derecho tienes en decir tales cosas? Ni siquiera sabes nada…”

Ryuuji respiró profundamente, tratando de mantener la calma. Pero Minori ni siquiera quiso oírlo, y no estiró sus brazos tampoco, sólo entrecerró sus ojos y continuó regañando a Ryuuji.

“¿Has conocido al papá de Taiga? Debiste haberlo hecho… es por eso que me dices esto. Lo entiendo, quieres lanzar a Taiga en un pozo de fuego… Takasu-kun, cuando conociste al padre de Taiga, ¿abriste tus ojos y lo viste cuidadosamente? ¿Estás siquiera seguro que tenías tus ojos abiertos?”

“¿Qué? ¿Qué se supone que significa eso? ¡Por supuesto que los tenía abiertos!” “Olvídalo. Ya lo entiendo. No tiene sentido hablar contigo”

“¿¡Qué has dicho!?”

La voz de Ryuuji se fue volviendo más silenciosa debido a la sorpresiva reprimenda.

“¡Deja de hablar como si lo supieras todo! ¿¡Por qué dices esto!? ¿¡Por qué no estás feliz por Taiga!? ¡La única que debería abrir sus ojos aquí eres tú!”

Ryuuji siempre había creído en que Minori era tan brillante como los rayos del sol, y por eso debería, más que nadie, desear la felicidad de Taiga. Debería estar esperando felicitar a Taiga y a su padre. Deseando la felicidad de Taiga, quien finalmente tendría una familia una vez más, deseando verla feliz con él, y sonriéndole mientras decía: “Esto es lo mejor”. Cuanto más creía en esto, más herido se sentía por la traición. Esa herida fue mucho más lejos de lo que Ryuuji pudiese comprender, y con sólo mirarla le hacía hervir la sangre.

“Eso es porque yo no confió en su padre”

“¿¡Quién eres tú para decidir si él es de confianza!? ¿¡No deberías dejar que Taiga lo decida!?”

“¡Es por eso que voy a decirle a Taiga que no confíe en él!” “¡Quédate fuera de esto!”

“¡Esto no tiene nada que ver contigo!” “¡Tiene mucho menos que ver contigo!”

¿¡Cómo puede ella ser tan insolente!? ¿¡Cómo puede decir tales cosas!?

Ryuuji miró a Minori con sus ojos que parecían disparar fuego, aunque Minori era difícil de intimidar, y rehusó dar marcha atrás. A medida que se miraban y recuperaban el aliento, sus compañeros de clases comenzaron a notar la pelea.

“¿Qué está pasando con Kushieda? Pareciera que…” “¿Fue Takasu el que acaba de gritar…?”

En medio del murmullo, una sorprendida Taiga los miró a ambos, y al parecer acababa de descubrir su disputa. Ella abrió mucho sus ojos y su boca sorprendida, mirando entre Ryuuji y Minori. Luego ella…

“¡Ryuu… Ryuuji!” Corrió hacia ellos. “¡Minorin!”

Esta fue la primera vez que Ryuuji había visto tal expresión en Taiga; una expresión de ansiedad se asomaba en sus rostros, así que Taiga hizo lo mejor para darles una sonrisa, e intentó resolver todo lo que había pasado con eso.

“¡Vamos a chocar las manos…!”

Metiéndose entre ellos, Taiga agarró sus manos e intentó hacerlas chocar. Pero el apretado puño de Ryuuji se resistió, y cuando sus nudillos entraron en contacto con los de Minori la alejó bruscamente y la miró. Minori no lo estaba mirando, en vez de eso, simplemente miraba sus propios zapatos.

Ryuuji no quiso saber lo que pasaría después. Sin importar lo que la gente dijera, sin importar la cara que Minori pusiera, él no iba a preocuparse más, y simplemente dijo: “Esto no tiene nada que ver conmigo”

Con su mente adormecida y en blanco, decidió alejarse de todo, y salió disparado de la sala de clases.

***

Lo que no sabía Ryuuji era que lo veían como un matón, un vándalo, y un delincuente en serie.

Quienes lo conocían lo veían como un tipo amable y educado, pero serio, y como un extraño estudiante de secundaria que se comportaba como un ama de casa.

Él probablemente nació con ello, otros dicen que lo heredó de su torpe madre Yasuko, quien lo había criado desde su nacimiento. Desde que aprendió a pensar por sí mismo, Ryuuji tomó el papel de hijo, de ama de casa profesional, y de acompañante de Yasuko al mismo tiempo, lo cual explicaba por qué era más independiente que los otros chicos. Al suprimir sus impulsos infantiles, sus quejidos y egoísmo de aquellos años, Ryuuji fue capaz de convertirse en el hombre que es hoy. Como un sauce, tenía que ser lo suficientemente flexible para tomar todo lo que viniese por su cuenta, en otras palabras, si la relación entre madre-hijo fuese inestable, la familia Takasu hubiese caído fácilmente en el caos.

Además de eso, la cara de vándalo que heredó de su padre era también algo que obligaba a Ryuuji a ser calmado y reservado.

Sin ni siquiera hacer nada, la gente simplemente asumía que era un violento malandrín con sólo mirarlo. Ellos se dejaban intimidar por el miedo, e incluso suponían cosas sobre él, y eventualmente lo excluían de sus círculos sociales. Como él había experimentado esto a menudo, estaba preparado plenamente para ello. Es por eso que se exige a sí mismo ser más correcto y gentil que nadie, y que no se enojaba ni se involucraba en ninguna discusión sin importa qué pasara, en vez de eso, vivía su vida honestamente. Él creía que al hacerlo, habría alguien que lo entendiese, y quisiese ser su amigo. Mientras él tuviese amigos que lo entendieran, no importaba que pasara, siempre estarían ahí para él; sin importar la situación, sabrían que en el fondo, es una buena persona.

Antes de hoy, Ryuuji siempre entendió que al estar enojado o irritado, la última persona que sufriría siempre sería él mismo, razón por la cual nunca mostró sus emociones antes…

“Quiero morirme…”

¿Es este mi castigo?

Entre las dos máquinas expendedoras había un espacio vacío de 50cm de ancho, y ahora, Ryuuji estaba en ese espacio mientras agarraba malhumorado una lata de café helado. Como la temperatura de la lata era menor a los 10 grados, los dedos de Ryuuji, los cuales envolvían el alrededor de la fría lata, estaban cerca de congelarse.

Él estaba enojado, e hizo exactamente lo que no debía haber hecho; soltar su enojo. Utilizando toda su fuerza, le dio a la inocente máquina expendedora un duro golpe. El cual terminó creando una abolladura en la máquina, causando que expulsara una lata de café helado, la cual rodó a los pies de Ryuuji.

Podría haber dejado la lata, pero su cuerpo estaba entumecido, y era incapaz de mover sus dedos. Además, lo sintió como más o menos un castigo, de modo que a pesar de que sus dedos habían perdido la sensibilidad, él continuó sosteniendo la fría lata.

Todo esto es culpa de Kushieda. Pero, yo me puse a gritar también.

Si pudiera regresar el tiempo, ¿podría resolver las cosas? El problema era que el tiempo nunca volvería atrás, y es por eso que Ryuuji se sentía fatal.

Él no sabía cuánto tiempo había permanecido ahí sentado. Todo estaba tranquilo a su alrededor, y no podía sentir el fluir del tiempo, ni tampoco podía pensar, dado que no quería recordar lo que acababa de pasar.

Si muero aquí… quizás Minori llore por mí.

“Hola. Señor Bobo”

Repentinamente se escuchó una suave voz. “Déjame en paz…”

Sin siquiera mirar, con sólo oler el perfume, él pudo saber quién era la que se estaba acercando con un elegante caminar.

“Ese espacio está reservado para Ami-chan”

Ami se cruzó de brazos y bajó su frente, proyectando una sombra sobre sus brillantes ojos mientras revelaba una suave sonrisa. Ella se acercó a Ryuuji, que estaba sentando en el piso, y lo miró.

“¿Quién lo dice?”

“Lo dice Ami-chan. Ahora vamos. Muévete, levántate”

Con los dedos tan finos como huesos, agarró las frías manos de Ryuuji. El suave tacto no contenía ningún daño mientras Ami sacaba a Ryuuji con todas sus fuerzas. Para luego sentarse en el espacio.

“¿Lo ves? El cuerpo de Ami-chan se adapta bien aquí. Este lugar de verdad esta reservado para Ami-chan… Jeje” Ami sonrió satisfecha.

Ryuuji no tuvo más remedio que sentarse enfrente de ella con las piernas cruzadas. Esto es increíble. Incluso cuando la miró tan altanera y con su maliciosa sonrisa, difícilmente se ve mal. Sin importar cuánto la mire, esta chica nunca simpatizaría conmigo… Esto era también porque él sabía que era capaz de relajarse y continuar sintiéndose deprimido, sin preocuparse si ella lo descubría.

“¿Cómo está Kushieda?”

“¿Qué pasa con esta lata de café? No me gustan los café en lata, ¿sabes? Oh, y Minori-chan se fue a casa ya”

“¡No puede ser!… Oh maldición…”

“Bueno, tú mismo te lo causaste, al gritarle a la chica que te gusta”

Dijo Ami al mismo tiempo que abría la lata, pero ella no esperó que Ryuuji cállese en sus palabras tan fácilmente.

“¡Esto es culpa de Kushieda! ¡Es porque ella dijo esas cosas que llegamos a esto!” “¿Hmm…? Bueno, no sé exactamente lo que estaban discutiendo, pero tú no sueles pelear,

¿cierto? Además, la persona con la que estabas discutiendo era una chica, y para colmo, la

chica que te gusta”

“Cállate… eso no importa. Yo estaba muy enojado, no quería creer que ella pudiese… Esto es simplemente terrible. No puedo creer que dijera tales cosas, ahora sé que tipo de persona es ella…”

Ryuuji notó que estaba haciendo pucheros abandonando toda dignidad como hombre, pero él ya lo había dicho, y no podía pretender que nada hubiese pasado.

“Oh cielos, te ves patético. ¿Puedes no decirme esas cosas? No me interesan. ¿De verdad crees que voy a quedarme a tu lado y simpatizar contigo?”

“Sí, tienes razón”

Ami jugaba con sus cejas con una mirada indiferente y bebía su café enlatado. Ryuuji no dijo nada por un momento, y sólo miró la garganta de Ami mientras se tomaba el café.

“¿Te puedo encargar traerme mi bolso? Tengo ganas de irme a casa de inmediato” Puesto que ya le había mostrado a Ami su lado patético, pensó en que podía seguir. “De ninguna manera~”

Era de esperar que hiciera eso y respondiese con una desdeñosa actitud.

“Sólo estoy aquí para tomar un breve descanso antes de regresar a la sala de clases. Puedes venir conmigo”

“Dame un descanso… Todos estaban trabajando tan duro y animadamente, sólo para ser arruinado por mí…”

“Puede que tengas razón, pero he suavizado las cosas y les dije a todos que los ignoraran, así que creo que debería estar bien, ya que todo el mundo ha vuelto a sus ensayos”

“¿Suavizar las cosas…? ¿Tú?”

“Eso no fue nada para mí. Yo no soy como esa enana Tigre de bolsillo, que sólo sabe cómo hacer ruido e intimidar a la gente a su alrededor”

“¿No se fue ella a casa con Kushieda?”

“Corrió detrás de ella, pero luego se tropezó y fue dejada atrás por Minori-chan. Al parecer se había lastimado sus tobillos y estaba por llorar, así que Nanako-chan la llevó a la enfermería. Ella probablemente esté de vuelta a la sala de clases ahora”

Ryuuji sintió como si presenciara toda la escena mientras daba un suspiro. ¿Y de quién fue la culpa de que pasase esto? Un efecto de estéreo se formó en su cabeza mientras pensaba en esto, por un lado podía oírse gritar: ‘¡Es de Minori!’ mientras que por el otro lado, se decía tímidamente, ‘¿Es mía?’.

Sin embargo Ryuuji no podía aceptar que Minori dijera que él no podía entender esto en lo absoluto. Incluso si él rogaba para que el tiempo fuese para atrás, y aún si lo hiciera, todavía no estaría de acuerdo con las palabras de Minori. Sin importar cuánto deseaba ir para atrás, sin importar lo mucho que se arrepentía y se odiaba a sí mismo, seguiría respondiéndole y tratando de convencer a Minori para voltear tales engreídos pensamientos. Esto es algo bueno, por lo que nosotros debemos sentirnos feliz por Taiga.

“Hemos descansado lo suficiente. Volvamos”

Ami se acabó la lata de café de un sorbo, y luego arrojó la lata en la papelera con precisión “¡Bien! ¡Como era de esperarse de Ami-chan!”, dijo haciendo una pose de victoria. “Muy bien, vamos. Estarás bien”

Ami agarró a Ryuuji del brazo debajo de su chaqueta gakuran como un niño, y bruscamente paso el brazo alrededor de su hombro. Como eran muy similares en altura, el hermoso rostro de Ami estaba extremadamente cerca de Ryuuji. Incluso en estos momentos, aquellos dos parpados y preciosos ojos seguían viéndose deslumbrantes.

“Serás capaz de entrar a la sala de clases conmigo, ¿cierto? Sólo pretende que nada ocurrió”

¿Por qué? Hoy, sus ojos no revelaban ninguna de las travesuras que normalmente tendría, ni tampoco la confusión con la que seducía a la gente o con la que jugaba con él.

Ella estaba realmente cercana a él hoy, como una ‘amiga’. Quizás era por Ryuuji estaba muy deprimido en estos momentos…

“Tú de verdad has cambiado”

… Pero estoy muy agradecido.

“¿Lo dices en serio?”

“Tú eres la única que ha crecido”

“Jeje…” Ami alejó su vista de Ryuuji y miró el espacio delante de ella.

“Siempre he sido una persona madura, pero algo ha cambiado… He estado pensado que, después de todo, quiero cambiar…cambiarme a mí misma”

Un atisbo de duda pareció aparecer en la cara de Ami.

“Yo quiero cambiar también. ¿Así que qué debo hacer, Kawashima?” “Dejar de hacer pucheros y pensarlo por ti mismo”

Ami caminó hacia delante y cuando volvió su rostro hacia atrás, mostró su usual sonrisa traviesa.

“Yo no soy la Tigre de bolsillo que siempre está pegada a ti; ni tampoco soy Minori-chan, que es tu sol brillante. Yo, Kawashima Ami, estoy parada en el mismo suelo que tú, caminando por el mismo camino. Sólo que estoy unos pasos adelante… Vamos, tenemos que volver a los ensayos. Mañana es el festival escolar, la verdadera hora del espectáculo”

Ami dio la vuelta y se fue adelante. Ryuuji miró un poco sus pies antes de levantar la vista y ver la espalda de Ami.

En el rincón donde las maquinas expendedoras estaban, había una moneda de ¥ 600 yen en una de las ranuras de cambio, y con ella había una nota indicando el nombre y la clase de los culpables. El mensaje decía: “Lo rompí. Lo siento”