Toradora! (NL)

Volumen 3

Capitulo 1: La Chica Problemática

Parte 2

¡Argh! No lo soporto me desespera, ¿qué fue lo que hice mal? ¿Por qué estoy en esta situación? ¡No lo soporto!, ¡no lo soporto! Una vez más ya es de día, y fui una vez más víctima del enojo de Taiga, ahora a la escuela. Taiga y Ami se encontraran en algún momento y la ira de ambas se desatara hasta alcanzar proporciones inimaginadas ¿no? No quiero hacer esto, no quiero hacer esto, no quiero hacer esto…

A causa de esto no durmió bien y se pasó toda la noche murmurando.

“… ¿Eh?… ¿Eh?” Ryuuji se preguntaba ¿por qué no había escuchado el sonido de la alarma?, y lentamente abrió sus ojos para ver el reloj.

“… ¿¡Eh!?”

Volaron las sabanas, al ver la hora “8:05” hizo que sus parpados se abrieran totalmente y su cerebro se despertara al instante, pero a pesar de esto no dejaba de pensar…

Mierda, mierda, mierda…

Me quedé dormido, ya estoy retrasado por una hora, a este paso mi asistencia será un problema, primero el baño…pero mientras intentaba quitarse la camisa, su mente estaba hecha un desastre, ¿Qué hago? ¿Qué hago? ¿Qué hago?

“¡Oh no! ¡Taiga!”

Ryuuji se acordó de Taiga – quien no se levantaba a menos que él la despertara – si iba a despertarla; con el tiempo que tardaría en prepararse era seguro que llegarían tarde. No tenía opción, este era finalmente el momento de usar su arma secreta, Ryuuji la había preparado desde hacía mucho tiempo para una situación como esta, sacó una escoba prácticamente nueva, con esto seguramente lograría despertarla.

Ryuuji abrió la ventana de su cuarto e intentó no mirar hacia abajo mientras colocaba un pie sobre la baranda del balcón y el otro sobre la pared que separaba el edificio de la casa; tomó la escoba y comenzó a golpear la ventana.

“¡Taiga! ¡Despierta! ¡Nos quedamos dormidos! “

Golpeó una y otra vez la ventana, sin embargo nada ocurría, Ella no sería capaz de dejarme e irse sola a la escuela ¿verdad? era posible. En ese momento Ryuuji comenzó a pensar, ayer nos fuimos juntos, si hoy la despierto como lo hago siempre ¿Cuál sería su reacción? O tal vez debería dejar que siga durmiendo y no despertarla… No, no, no, si no lo hago la situación se pondrá aún peor… Lo intentaré una vez más, si no está ahí entonces no hay nada que hacer, este es el último intento.

Ryuuji una vez más golpeó la ventana con la escoba. “Qué demonios…estás…Ah”

“¡¡Hay!!”

La ventana se abrió de repente y el mango de la escoba hizo contacto con la frente de su cara molesta, como si estuviera en un manga, Taiga cayó de espaldas como una ficha de domino y desapareció de la vista de Ryuuji.

“¡Taiga! ¡Sujétate!”

Después de unos momentos… “Duele bastante…”

Sujetándose del borde de la ventana, daba la impresión de que Taiga comenzaría a llorar, aunque sus pucheros eran lindos, no era el momento de pensar en eso.

“…Lo… ¡lo siento!, ¡me quedé dormido!, ¡ya pasan de las 8!” “… ¿Eh? ¿Por qué? Duele… y mucho”

La semi dormida Taiga frotó sus ojos y suspiró como una niña pequeña, limpió sus manos húmedas con su pijama blanco. Parecía aun no haber comprendido la situación, mientras aun tenía algo de cabello adherido a su rostro.

“¿Qué hay de desayunar? ¿Por qué me despiertas de esta manera hoy?

Todo parecía indicar que había olvidado que estaba enojada, aun no se había puesto de mal humor, ¿era esto acaso buena suerte?

“¡No he preparado ni el desayuno ni los bentos! ¡Lávate la cara, cepilla tus dientes y cámbiate! ¡Es una emergencia! Si no nos vamos en cinco minutos ¡llegaremos tarde!”

“…Mmm…”

No estaba claro si había comprendido o no, Taiga parpadeó otra vez. “Mmm…”

Inclinó la cabeza. Entonces haré como si lo hubiera entendido, Ryuuji regresó a su recamara.

“Hey, ¡más rápido! ¡Cierra la ventana! ¡Muy bien! Ciérrala y ponle seguro ¡así!”

Ryuuji confirmó que Taiga hubiera cerrado la ventana, y comenzó a cambiarse… justo en ese momento de dio cuenta de que había salido a hablar con Taiga con tan solo los bóxers puestos.

“Qué suerte, aun estaba medio dormida… y lo mejor es que nadie más vio, yo también estaba medio dormido ¿no?”

Ryuuji rápidamente se puso los pantalones del uniforme de verano y abotonó su camisa de manga corta… Los dientes debo lavarlos bien, pero en la cara solo necesito echarme un poco de agua.

Justo cuando buscaba sus calcetines en el cajón…

“Oh, la comida de Yasuko y el alimento para Inko-chan, agua y comida… ¡pero no hay tiempo!”

…

Lo único que pudo hacer, fue dejar una nota pidiéndole a su madre cuidar de Inko-chan y de ella misma, luego destapó la jaula.

“¡Ah!”

Después de que habían regresado de ver al veterinario, el perico estaba tan cansado que estuvo balanceándose de un lado a otro y ahora estaba durmiendo en la percha, con un poco de pelusas en las pocas plumas que le quedaban, estaba en una posición normal y sus ojos blancos miraban inexpresivamente haciendo que su cara se viera horrible.

“Siento mucho lo de ayer, duerme bien…”

Ryuuji no podía hacer nada excepto unir sus palmas y pedir perdón. “Inko-chan… ¿murió…? ¡Uwah!”

A un costado de la jaula estaba Yasuko durmiendo ruidosamente bajo los efectos del alcohol, pero repentinamente se despertó y comenzó a quejarse y a rodar en el piso hacia una esquina del cuarto.

“…Zzzz…”

Llegó hasta la alacena y una vez más comenzó a roncar pacíficamente. “No tiene sentido… ¡aun no está muerto!”

Yasuko probablemente no lo había escuchado, pero Ryuuji contestó con honestidad, la cubrió con la colcha y se colocó apuradamente los calcetines, tomó su mochila y se dirigió hacia la puerta.

La luz del sol brillaba con nitidez, a pesar de que la calle estaba opaca por la niebla, Ryuuji se fue rumbo a la entrada del edificio de apartamentos. Presionó en repetidas ocasiones el botón del número 201, pero no había respuesta, justo cuando Ryuuji comenzaba a entrar en pánico como una hormiga en una olla caliente…

“¡Cállate!”

La puerta se abrió silenciosamente y salió una bastante gruñona Taiga. “¡Ya estás despierta!”

“¿No fuiste tú quien me despertó? Me duele mucho la frente”

Con una velocidad increíble, Taiga se palpó la cara hasta el borde y observó a Ryuuji con una mirada llena de furia y desprecio.

“Uwah…”

Aunque estaba medio dormida, recordaba lo que pasó, Ryuuji sintió un escalofrío recorriendo su espalda mientras salía del edifico con Taiga.

Estaban a la mitad de la temporada de lluvias y el pastó estaba muy oloroso, mientras corrían bajo los árboles.

“Taiga, primero debemos ir la tienda o si no, no habrá almuerzo” “…”

“Taiga, ¿Me escuchaste?” “…”

“Ouch, no me toques ahí” “…”

“Voy junto a ti Perro pervertido, escuché cuando dijiste lo de ir a la tienda”

Ryuuji comprendió que si alguien quería hablar el día de hoy con Taiga tenía que gritar en verdad fuerte o ignorar por completo su actitud.

El mal humor de Taiga y su actitud difícil hacia él eran algo normal, pero aun tenía la sensación de que su actitud en esta ocasión era un poco más violenta de lo usual. ¿Era a causa de la forma en que la despertó esta mañana? O porque ¿se había quedado dormido? Ryuuji trató de comprender cuál era la razón, pero sintió que estaba engañándose a si mismo… porque como era de esperarse, todavía sentía que Taiga estaba enojada por lo que ocurrió ayer.

Hum! Taiga una vez más volteó la cabeza, y mordió el interior de su mejilla, evitando la mirada de Ryuuji. Ah…Ah… ¿Tendré que sufrir sus ataques de cólera otra vez como ayer? Ryuuji comenzó a sentirse deprimido.

“Pezones negros…” “¿¡Qué!?”

En medio del trote, Ryuuji creyó escuchar las murmuraciones de Taiga…

“Todavía tengo la imagen de tus pezones negros pegados en mi retina, que molestia…”

Se podía decir, que la razón que estaba detrás de la molestia de Taiga hoy, eran los pezones de Ryuuji, no tenía nada que ver con lo que ocurrió ayer, ‘porque tus asuntos son tus asuntos, no los míos’, tan simple como eso.

“No eran…no eran negros ¿no?”

“Eran negros, ¡mis ojos fueron invadidos por tus pezones completamente negros!”

Si era increíble pero durante su dieciseisavo verano, Takasu Ryuuji había descubierto una nueva razón para sentirse apenado de su cuerpo.

Llegaron al cruce donde normalmente los esperaba Minori, pero con tan solo unos minutos para que sonara la campana, la reconfortante diosa de Ryuuji ya se había marchado.

***

“Ah, ¡finalmente estás aquí! ¡Gracias por lo de ayer!” Lograron llegar en el último momento al salón de clases.

“¡Oh! ¿Sabes? Tu cabello esta como si te acabaras de levantar ¿te quedaste dormida?”

Atrás de Ryuuji estaba un Arcángel que olvidó traer sus alas, brillando con claridad, por supuesto que esto solo era en su exterior, ya que en realidad ella era una chihuahua con una personalidad verdaderamente desagradable. “Ella” no era otra que Kawashima Ami, sus ojos brillaban como joyas, con sus manos blancas como la nieve tocó el remolino en el cabello de Ryuuji que se había formado anoche mientras dormía

“¡Así que Takasu-kun también se quedó dormido!”

Ami usó su sonrisa perfecta, aquella que usaba para las sesiones de modelaje (haciendo un puchero, luego abriendo grandemente sus ojos e inclinándose ligeramente hacia delante para hacer énfasis en su escote) y dijo:

“¡Qué lindo!” “…”

“¿Oh? ¿Qué sucede?

Aunque me preguntes ‘¿Qué sucede?’, ¿Qué puedo decir?, Ryuuji muy sutilmente decidió no responder a su saludo matutino. Parece que Ami pretende hacerme perder el tiempo con esa mascara de ángel también hoy, aunque ya la conozca de hace tiempo y le haya mostrado a otros su lado oscuro, ¿todavía piensa que esa fachada artificial funciona? Debe estar bromeando, mientras pensaba en esto, Ryuuji intentó imaginar cómo debería responder a Ami.

“¡Ah! No me malentiendas por favor, por supuesto que no quise decir que Takasu-kun es lindo, sino que yo lo soy, ¡Ami-chan!… Takasu-kun todavía es normal, ¡es de esos que uno conocería con tan solo ver su cara!”

“¡Del tipo que uno conocería con solo ver su cara!”

Ami formó la V de la victoria con su mano, mientras estaba a un lado de él. “110”

‘Suspiro…’ El recorrido a toda velocidad se había llevado la mayor parte de su energía, así que Ryuuji no podía hacer otra cosa que suspirar fuertemente. ¿Qué hacer? ¡Tengo la mirada de un criminal fugitivo!

“Engañado…”

“Jojojo, ¿Qué sucede?”

Detrás de los ojos sonrientes de Ami, se escondían sus verdaderas intenciones, a Ryuuji le parecía que ella era como un chihuahua de corazón negro y con una personalidad desagradable.

“Actuando tan temprano… cuida que no se te vaya a acalambrar la cara” “Soy una profesional, no soy tan tonta”

La máscara de Ami desapareció por un momento, mientras le sacaba la lengua a Ryuuji, pero inmediatamente la recobró.

“… ¡Pff!”

“Estás en el camino, chihuahua estúpida”

Atrás de Ryuuji estaba la tigre de bolsillo, quien había causado que la hermosa chica se quejara, parecía que había usado un ligero exceso de fuerza al golpear el estomago de Ami con su mochila.

“Argh…Aisaka-san, tal parece que hoy en verdad estas de mal humor…”

“Buenos días, Kawashima-san, comenzar el día con golpes debe ser muy difícil para ti” Los ojos de Taiga miraban a Ami y a Ryuuji, y luego se volteo dejando atrás su fría mirada. “¡Oh! ¡Está bien!”

Ami aplaudió y gritó…

“Aisaka-san, lo siento, pero ¿todavía estás enojada por lo que pasó ayer?, lo siento mucho, pero ¡solo fue un malentendido! Aisaka-san se equivoca, pero ¿estás celosa sólo por eso?

¡Oh dios mío! Celosa y con envidia, eso no va con Aisaka-san ¡Ah!…Ah…Qué dolor de cabeza… y todo porque soy una cabeza de chorlito, todo esto sucedió porque siempre hago cosas que causan malentendidos…”

“…”

Taiga se detuvo y giró lentamente…

“Así que tu tampoco lo entiendes ¿verdad?”

Sus labios se retorcieron y lanzó una mirada despiadada, que buscaba sangre y tenía intenciones asesinas. Como si fueran las palabras de la muerte, sus palabras se convirtieron en una masa de oscuridad que nublaba el área, creando una atmósfera maléfica. Y luego…

“Todo este asunto, yo ni siquiera estoy ni un poco enoj…” “¡Hyuppah!”

De repente, Taiga flotó en el aire, era como si dominara la levitación… mientras Ryuuji estaba atónito y con la boca abierta, a un costado del delgado cuerpo flotante de Taiga quien tenía una cara brillante y una sonrisa genuina.

“¡Buenos días! Taiga y Takasu-kun lograron llegar justo a tiempo” “Mi, Minorin…bájame”

Podía tomar el diminuto cuerpo de Taiga por la espalda y levantarla fácilmente por encima de su propia cabeza…

“Ya sabes Taiga, que eres bastante ligera ¿no? ¿Me pregunto por qué? A pesar de que comes lo mismo que yo”

“Deja de usarme como una pesa”

…No era otra que Kushieda Minori.

“Pero entonces mis brazos se volverían débiles”

Mientras bajaba y levantaba a Taiga, su cara sonriente era la personificación de la salud perfecta, la luz del sol, en la opinión de Ryuuji, la chica más perfecta del mundo.

El uniforme de verano revelaba fácilmente su figura flexible, así que Ryuuji apartaba su mirada instintiva. Después de sufrir el vil trato de Taiga desde ayer en la noche, Ryuuji encontró que la dulzura de Minori era demasiado para él, en un intento de pánico de desacelerar su corazón, miró hacia otro lado, no era que estuviera frenético o algo, solo era que estaba abrumado.

Minori, por otra parte, no ponía atención en el comportamiento extraño de Ryuuji…

“En verdad, Kawashima-san también es bastante delgada ¿verdad? ¿Has estado corriendo recientemente?”

Ella solo buscaba otra pesa humana, esta clase de situaciones es lo que la gente llama amor ‘no correspondido’.

“Fiu…”

Ryuuji secretamente dejó escapar un triste suspiro, se preguntaba cuándo, o si alguna vez, Minori se daría cuenta de sus sentimientos hacia ella. Había estado admirándola minuciosamente todo este tiempo…

“Por alguna razón, ustedes dos no se ven muy bien… Ah, podría ser porque Taiga y Takasu-kun se quedaron dormidos, y ¿por esa razón no desayunaron? En ese caso, tienen suerte porque traje algunos bocadillos, aquí cómanlos”

Era difícil decir si ella era estúpida o en verdad estaba en sintonía con los demás, pero Minori tomó una pequeña bolsa de su bolso y dijo…

“¡El pezón negro!”

Dijo sosteniendo una pasa² en cada mano, y colocándolas en la punta de su busto.

“¡Estoy llena, así que coman las que quieran!… ¿Qué? Takasu-kun ¿Por qué estás tan deprimido?”

Colocando su mano firme en el hombro de Minori, Taiga respondió.

“En este momento, el yo de Ryuuji se ha convertido en un desorientado y vagabundo que se encuentra atrapado entre su imagen auto proyectada y la dura realidad”

“Ooh… Eso es bastante… ¡buena suerte Takasu-kun! ¡Trabaja duro y tráelo a casa! O algo”

Suavemente le entrego el pezón negro al deprimido Ryuuji, y a su vez hizo que Ami tomara la restante.

“Kawashima-san, en verdad me quiero disculpar por lo de ayer, medité mis acciones, yo fui quien tuvo la idea, pero de verdad que no tuve opción y tuve que ir a mi trabajo de medio tiempo… lo siento; ¿Estás bien? Me dijo Kitamura hace unos momentos que tuvieron éxito al encargarse del acosador, ¿verdad?”

“¡No hay necesidad de disculparse! Si, al menos por ahora estoy haciéndolo todo bien, debería agradecerte, estoy de verdad agradecida por todo lo que Minori-chan ha hecho por mí. ¡Voy a aceptar este pezón negro también!”

Continuando, Minori observó una vez más a Ryuuji y a Taiga… “Quiero disculparme con Taiga y Takasu-kun también”

“No te preocupes Minorin, no podrías haber ayudado después de todo” “En verdad lo siento”

Doblando su delgada espada, se reverenciaba repetidamente, sus reverencias estaban llenas de un sentimiento sincero de disculpa.

² Ndc: A de suponerse que es una fruta seca, como lo son las pasas de uva, higo, ciruela, etc.

Los ojos de Ryuuji la veían y a la vez volvía a traer su preocupación por los pezones. Estaba demasiado nervioso como para hablar, pero discretamente miraba la cara de Minori, él agitó su mano; trataba de decir ‘no te preocupes’ incomprensiblemente Taiga hizo una interpretación…

“Ryuuji también dice que no te preocupes, ¿verdad Ryuuji?”

Mientras inclinaba la cabeza, él pensaba en sus razones para ayudarlo de esta manera a pesar de que estuvieran enfadados, Taiga realmente era una buena persona… por lo menos por un breve instante tuvo una opinión favorable de ella.

“Hey, Minorin, fue un golpe de suerte para Ryuuji que te hayas ido, Kitamura y yo caímos en una zanja y abandonamos la misión, pero gracias a eso Ryuuji se quedó solo con Kawashima, la llevó a su casa y…”

“¡Qué!”

¡¿Qué demonios esta diciendo?! Prácticamente por instinto rápidamente brincó para cerrar su boca, pero no fue suficiente porque con sus dedos pudo liberarse…

“Anoche en la casa de Takasu, los dos se fueron acercando y…” “¡Ah!”

“Pezón negro”

¡Hyupia! En un esfuerzo desesperado por callar su boca, tomo a Taiga justo como Minori lo había hecho antes, la levantó con todas sus fuerzas, el ligero cuerpo de Taiga rápidamente se levantó por los aires.

“¿¡Gyaaaah!? ¡Suéltame, perro pervertido!” “Te soltaré cuando dejes de gritar”

“Oh, buenos días Aisaka-san” “…”

Frente a frente con Taiga, Kitamura Yusaku le tendió la mano para saludarla, y con solo eso el coraje de Taiga se desvaneció, e incluso olvido la pelea con Ryuuji.

“Bue… Buen… Buenos días”

Con una voz inaudible para cualquiera, parecía que estaba haciendo la imitación de un disco rayado, Ryuuji pudo sentir que la temperatura de las axilas de Taiga se incrementó por lo menos dos grados.

“¿Y qué hacen? ¿Están jugando como siempre? Tienen una buena relación ¿verdad?”

Les dio una palmada a ambos en el hombro, a Taiga que finalmente estaba en el suelo y a Ryuuji. Kitamura observaba a Taiga.

“Cierto, olvidé regresarte esto ayer, accidentalmente me lo llevé a casa” “…Ah…Si…”

“Tenía algunas astillas, así que me tome la libertad de limarla un poco… ¿Te parece bien?” “…Si…Gracias…”

Contestó Taiga, que estaba roja completamente, formando con sus labios un pequeño triangulo y temblando, este también era un ejemplo representativo de un amor no correspondido, la escena en la que le regreso el objeto fue como algo sacado de un manga para chicas.

“No vayas agitándola por ahí demasiado, es peligroso” “…Si…”

La espada de madera cambió de manos, pasó de las de un héroe valiente a las de una heroína que le daría buen uso. Ryuuji quien finalmente había dejado de recibir golpes, tenía sentimientos encontrados mientras miraba la hermosa escena, entonces…

“…Y ¿de qué estaban hablando?” “¿Hum?”

Sin pensarlo, Ryuuji se dio la vuelta, Minori estaba parada con su cabeza inclinada, observándolo con sus ojos cafés.

“Te pregunto, que ¿Qué era lo que decía Taiga? ¿Takasu-kun?” “…Nada, realmente”

Contrario a lo que expresaba su respuesta fría, por dentro estaba a punto de explotar, sentía que tenía un detonador en cuenta regresiva en su interior, buscando ayuda, volteó en dirección a Ami, pero ella ya se había ido.

“¡Eh! Donde compraste eso, es tan lindo”

“En el segundo piso de la estación del tren, ¡fue en verdad barato!” “No puede ser quiero uno también”

“¡Yo también!”

Inmediatamente después de que se fue se unió a otro grupo, el de las chicas populares, Maya y Nanako. Así que ella no era un opción, no espera ¿tal vez fue afortunado? Tal vez no era tan agresiva como Taiga pero sus palabras vaya que si lo eran.

Minori miraba hacia arriba a Ryuuji.

“Bueno, si Takasu-kun lo dice, entonces lo creeré… pero como te dije antes, si molestas a Taiga entonces Minori no tendrá piedad… solo bromeo”

“Uff…”

Swoosh. Le dio una advertencia en tono de broma, pero venia de parte de su amor no correspondido, así que se preguntaba si existían palabras lo suficientemente dolorosas como para describir lo que estaba sintiendo, pero en un giro del destino, al mismo tiempo…

“Hey, Aisaka, Sobre lo que pasó entre Takasu y Ami ayer, parece que lo que sucedió fue que Takasu le estaba ayudando a ella a encontrar uno de sus lentes de contacto que se le cayó, así que no te preocupes por eso ¿vale? Y por favor no te enojes con Takasu, ¡espero que los dos continúen juntos! ¡Bye!”

“Ah…”

Taiga estaba siendo asediada por las preocupaciones fuera de lugar características de Kitamura. Ellos solo querían poner su cabeza entre sus brazos… parecía que desde la primera vez que se vieron, durante la primavera, su relación con sus respectivos amores no correspondidos no había cambiado ni siquiera un poco, de hecho si algo había cambiado era solo una cosa…

“…Es tu culpa…todo es por tu culpa… ¡Kitamura está alentando una relación entre tú y yo!”

“Eso debería decir yo, hace rato intentabas sabotearme así que no fue otra cosa que justicia divina”

Parados el uno frente el otro, frunciéndose el ceño, e intercambiando miradas dentro de un intenso duelo. Lo único que había cambiado era que la relación entre Taiga y Ryuuji se estaba poniendo cada vez más ruda.

***

Probablemente este era el día de suerte para Koigakubo Yuri (29 años, soltera)… “¡Buenos días a todos!”

Dijo mientras sus ojos hinchados miraban a toda la clase, los parpados de los que tanto se enorgullecía estaban hinchados, nadie en la clase 2-C era lo suficientemente tonto como para preguntar la razón…

Sin embargo había una nueva maestra a cargo de la clase de primer año; 27, tenía novio, que presumía: ‘mi novio me ha propuesto matrimonio, pero todavía tengo dudas, es mejor seguir igual por ahora, lo más pronto que me casaré será hasta dentro de un año’, comentaba en la sala de profesores… *³

“Koigakubo-sensei, ¿qué le pasó a tus ojos? Creo que tal vez deberías maquillarlos” “¿De qué demonios están hablando? ¡Solo hagan lo que tienen que hacer!”

Aunque hoy es un buen día, las noticias que recibió anoche…

Koigakubo sensei fue sola a un restaurante familiar para cenar ¿Y qué importa si fui sola?

¿Hay algo malo en eso? Bebió una cerveza, cuando de repente comenzó a recordar a sus viejos amigos…

Hablando de eso, por aquellos días casi no salía con sus amigos cuando era estudiante, no es demasiado tarde ahora, pensó que sería buena idea si les llamaba, así que llamo a Risa que era muy cercana a ella, Risa levantó el teléfono muy rápido…

“No puede ser ¿¡Yuri!? Ha pasado mucho tiempo ¿verdad?” “¿De verdad? ¿Qué te parece si salimos juntas el Sábado?”

“¡Ah! Lo siento, pero voy a estar ocupada, de hecho me voy a comprometer ese día, así es, así es, es un funcionario público”

“Ooh…”

“Puedes considerarlo como el destino, y no como una insistencia por parte de mis padres…

¡Oh! Escuché que Saiya tuvo un bebé, vamos a verlo juntas la próxima vez, desde la boda de Miyu dejamos de salir juntas… a propósito ¿Cómo has estado últimamente? ¿No me dijiste que tenías a un chico prometedor que era más joven que tú? Incluso dijiste que iban salir durante el Golden Week, así que ¿Cómo te fue? ¿Qué tanto progresaron? ¿Hola?
¿Hola?” “…”

3 Ndc: Desde aquí en adelante pasamos los pensamientos de Koigakubo sensei, tenerlo en cuenta para una buena comprensión del texto.

“¿Y al final que pasó?”

Que se supone que debo decir si no pasó nada, ¿por qué es tan lenta para entenderlo? ¡Por favor!…

Luego de esto bebió tres cervezas de un solo trago, pero sentía que no era suficiente, así que al llegar a su casa abrió una botella de vino rojo y cocinó algunos platillos que llevaban alcohol, sal y muchas calorías: Carne de puerco, con vegetales a las dos de la mañana, y finalmente se quedó dormida después de llorar por un largo rato.

La mañana siguiente, a las 8:30 AM, es decir ahora:

“¡La piscina estará abierta a partir de esta semana! Todos están emocionados ¿verdad? no olviden cuidar su cuerpo y prepararse para todos los retos”

Los puros e inocentes estudiantes de preparatoria contestaron con un ‘¡Sí!’. Los inocentes chicos se alegraron mientras que las chicas por otra parte comenzaron a quejarse de sus estómagos, brazos, muslos, estaban preocupadas por tener que usar traje de baño.

La aún soltera Maestra suspiró en silencio. Bola de idiotas… todavía son estudiantes de preparatoria, que hay de malo en eso…todavía son jóvenes, así que hay de malo en eso.

“¿Eh? ¿Debemos nadar junto a los chicos en la escuela? No quiero, es muy embarazoso”

Kawashima Ami ¿Qué no eres súper delgada, súper linda? ¿Qué no eres modelo? ¿De qué estas apenada? De lo que estas apenada es de…

“Sensei ¡demos la clase por terminada!” “¡Bien! ¡Váyanse!”

Dejando todo en manos del capaz presidente de la clase, Kitamura, la maestra se quedó parada sobre la tarima con la mirada perdida en los estudiantes que estaban bajo la plataforma.

“¡Párense!, ¡saluden!” Todos coordinados con las órdenes de Kitamura

En ese momento la maestra por casualidad se dio cuenta. Es verdad ¿Por qué siento que este es un buen día?

La chica problemática que siempre le encrespaba los nervios, conocida como La Tigre de bolsillo, Aisaka Taiga no se estaba quejando, si no que permanecía en silencio… Pero aunque como era usual no le saludó, lo raro era que miraba fijamente hacia la ventana. Tenía unas envidiables mejillas rosadas, así que no parecía estar enferma, tal vez no se había dado cuenta de que la maestra estaba frente a la clase y estaba demasiado preocupada viendo el cielo.

Todo transcurrió pacíficamente esta mañana, así que no se perdió sangre por culpa de los ataques de La Tigre de bolsillo, esto bastaba para que se sintiera afortunada.

Tal vez soy muy linda, o tal vez tengo un poco de suerte, o quizá mi fortuna matrimonial se incrementará… La actualmente soltera maestra, mostraba pequeñas señales de victoria y obtuvo fortaleza para enfrentarse al día de mañana.

Aun no se había dado cuenta de que su clase estaba a punto de ser arrastrada muy pronto hacia un lugar repleto de amor y odio… El hecho de no haberse dado cuenta de algo tan simple, le iba a complicar su trabajo de una manera aterradora.