Toradora! (NL)

Volumen 3

Capitulo 1: La Chica Problemática

Parte 1

“¡Todo es tu culpa!” dijo ella de forma monótona y todavía con un tono molesto en su voz, que aunque era un poco débil, trastocaba la tranquilidad de los corredores de la sala de emergencias, durante la noche.

“¡Todo es tu culpa!, estás mal”

Para poner más énfasis, Aisaka Taiga, se sentó en el borde derecho del sofá y murmuró de nuevo.

En el mismo sofá, sentado lo más lejos posible, Takasu Ryuuji estaba observando sus uñas, con su afilada mirada hacia lo alto, había llegado a la conclusión de que no importaba lo que dijera, solo perdería su tiempo, además ya no tenía la fuerza para discutir y de cualquier manera éste no era el momento para hacerlo.

Una ambulancia pasó cerca de la ventana, el repentino y agudo ruido de la sirena hizo que Ryuuji brincara, la ensordecedora sirena dejó de escucharse abruptamente, solamente quedaba la luz roja; dicha luz arrastraba las siluetas de Ryuuji y Taiga a través del piso de linóleo, parecía que el departamento de emergencias del hospital universitario, que se encontraba a un costado, estaba más ocupado de lo normal, aunque fuese entre semana y de noche.

“… ¿Qué hora es?”

Mirando su muñeca “Olvidé mi reloj” como si hablara con ella misma, Taiga se volteo hacia Ryuuji, su cara blanca se veía pálida aún en la oscuridad, sin embargo ella evitó su mirada, sin dejar que eso lo molestara; Ryuuji abrió su teléfono celular.

“Un poco antes de las diez”

Respondió escuetamente, es decir, había pasado casi una hora desde que habían llegado en Taxi a ese lugar, deprimido e increíblemente fatigado; Ryuuji subconscientemente suspiró, a su lado, Taiga también suspiró y comenzó a hacerse rizos en su cabello con los dedos.

Al verla Ryuuji le dijo:

“Deberías ir a casa primero”. Diciéndolo despreocupadamente, ella se veía cansada, pero…

“… Mira que necesitar a un perro para que se preocupe por mí, he caído muy bajo ¿verdad? lo que yo quiera hacer es cosa mía, no te incumbe, si tratas de darme ordenes otra vez…”

Mientras sus refunfuños se arrastraban por el suelo, de pronto su alrededor se convirtió en una jungla que olía a sangre, en el centro de este mundo en el que ella mandaba, Taiga tronó los huesos de sus nudillos de manera ruidosa, sus ojos que habían evitado a Ryuuji desde hacía una hora, en ese momento lo estaban viendo directamente con un odio y desprecio terribles.

En términos de apariencia, Ryuuji era similar a ella: con ojos de color negro en mayor proporción y un poco de azul que emitían un destello como el de un cuchillo que se observaba de forma más nítida mientras él observaba la cabeza de Taiga…o por lo menos así se veían, a decir verdad ellos no tenían en común nada más que un rasgo físico hereditario.

“¿Qué quieres decir con eso?… está bien haz lo que quieras”

Ryuuji respondió en voz baja, incapaz de sentarse por más tiempo en el mismo sillón con la bestia salvaje, rápidamente se puso de pie mientras fingía indiferencia.

“…Fuh”

Taiga arrogantemente jadeó y luego se deslizó al centro del monopolizado sofá, después sacó el pecho como un rey, fríamente levantó el mentón. Aunque en un momento como este, ella era la reina de los carnívoros, un abominable tigre salvaje. Con un tentador y bello pequeño rostro, además de un delicado y menudo cuerpo, no parecía una estudiante de segundo año de preparatoria, llevaba un vestido floreado, de una sola pieza con adornos y un lazo, el cual era cubierto por la parte de atrás por su cabello castaño que se extendía suavemente por su espalda. Cada aspecto de Taiga se veía tan delicado y eso era casi demasiado, su belleza la hacía parecerse a una muñeca francesa o al botón de una rosa. Desafortunadamente esa rosa escondía una dosis letal de veneno. No, no lo escondía sino que lo esparcía en todas direcciones.

Así que esta cruel, brutal y feroz chica era llamada la tigre de bolsillo. Después de algunos sucesos, el único que había conseguido el milagro de vivir pacíficamente con esta tigre de bolsillo era Ryuuji, sin embargo…

“Haa…”

Inmóvil, frotó sus ojos con ambas manos, la situación había dejado de ser solamente un poco difícil para convertirse en algo peor. Ryuuji, quien normalmente era tranquilo, en ese momento estaba muy tenso, después de llegar al hospital en medio de la noche, no podía hacer nada excepto permanecer de pie y observar la puerta cerrada del consultorio, el doctor aún no se había presentado, manteniéndolos a la espera en el oscuro pasillo. No habían sido informados todavía sobre el tratamiento que se estaba aplicando dentro del consultorio, ni mucho menos sabían que tan grave era la situación; en realidad no sabían nada, así que esperaban mientras el tiempo pasaba. Solo había algo que perturbaba la tranquila atmósfera que los rodeaba: la respiración de ambos, los intestinos llenos de ansiedad de Ryuuji seguían empeorando.

“…Me pregunto ¿Qué estará pasando?”

Aunque la voz de Taiga finalmente rompió el silencio, éste de inmediato volvió, no hacía ningún intento por irse a pesar de su descontento, tal vez Taiga sentía un poco de la misma ansiedad que Ryuuji, quizá contrario a lo que decía anteriormente ‘¡Todo es tu culpa!’ quería expresar que en parte era su responsabilidad.

“…Me pregunto que estará pasando, en verdad”

Si lo malo se vuelve en algo peor… No, ni siquiera quería pensar en eso, subconscientemente cerró sus ojos y comenzó a sacudir su cabeza, trataba de eliminar de su mente los peores escenarios cuando…

“Takasu-san, por favor entre”

La puerta del consultorio se abrió y la expresión de su voz lo hizo verse más apurado. “Doctor, ¿Cómo está? ¿Cuál es su condición?”

“Puedes pasar”

Caminando rápidamente hacia el consultorio, de pronto fue cegado por un momento debido a unas luces muy brillantes, cuando finalmente recupero la visión y pudo distinguir los colores otra vez, vio al débil miembro de la familia recostado frente a él.

“¡No puede ser!”

Era incapaz de sentir una pizca de calor o por lo menos alguna otra señal de vida en su cuerpo callado. Atrás de él, Taiga también contuvo el aliento y permaneció en silencio, dio un paso hacia atrás; cerca de la pared, colocando una de sus manos sobre el hombro de Ryuuji, el Doctor apuntó hacia la figura que yacía tendida pacíficamente.

“… Está haciendo una cara bastante fea ¿No crees?”

Tocó con las yemas de sus dedos el pico ennegrecido, se podía ver que su lengua estaba teñida de un horrible color gris azulado que no se veía nada bien en un perico.

“Todavía está vivo”

Hubo un breve silencio entre los dos. “… ¿Eh?”

“No puede ser, esta cosa definitivamente está muerta ¿No?”

Después de que Taiga habló, el doctor, bueno el veterinario, sacudió su cabeza.

“Está vivo, no hay nada malo en su cuerpo”

Tímido e incrédulo, Ryuuji se acercó a la mascota de la residencia Takasu, Inko-chan estaba boca arriba sobre la mesa, sus piernas que más bien parecían unas ramitas, estaban entrelazadas, sucias y mojadas, estaba fuera de sí, su boca estaba como se describió hace algunos momentos y justificadamente, sus ojos abiertos estaban completamente en blanco, sus alas estaban desaliñadas; probablemente debido a que su cuerpo había sido parcialmente abierto hace unos momentos, de su pico salía un líquido desconocido y aunque perdió algunas plumas durante su apurado traslado, el plumaje en general parecía estar intacto, excepto por algunos parches que parecían manchas.

“In…Inko-chan, soy yo, ¿puedes oírme?” “…”

“¡Inko-chan! si estás vivo, por favor di algo, ¡Respóndeme! ¡Por favor!”

Inko-chan que parecía más un grotesco cadáver, daba vueltas obstinadamente de forma extraña y no respondía, la tensión en el aire parecía indicar que se trataba del rigor mortis.

“Doctor, no responde”

“… Normalmente los pericos no suelen hablar mucho” “Sin embargo, nuestro Inko-chan si lo hace”

Cuando Ryuuji lo miró desesperadamente con sus peligrosos ojos, el veterinario silenciosamente dejo de verlo, dio tres grandes pasos hacia atrás para distanciarse un poco… ¿Por qué está así? Además llamó feo a su mascota. El normalmente gentil Ryuuji estaba cerca de perder el control.

“Espera un minuto, apártate”

Jalando el hombro de Ryuuji, Taiga caminó rápidamente hacia la mesa.

“Si no hay ningún problema con su cuerpo, entonces… en otras palabras ¿estuvo fingiendo?”

Se inclinó sobre el grotesco cuerpo de Inko-chan que estaba durmiendo, y lo miró para confirmarlo, Ryuuji no podía ver su rostro a causa de su largo cabello, pero…

“T… ¿Taiga? Espera un minuto, ¿Qué tratas de hacer?”

“Una enfermedad fingida, es una enfermedad fingida, mira que preocuparnos de esta manera y hacernos gastar 200 yenes en el Taxi, y luego encontramos que está fingiendo… que divertido, Ryuuji… es divertido, ¿no es verdad?”

Excepto que no había ni una pizca de jovialidad en su cara.

“¡Fuh!, si tu plan consiste en insistir que estás enfermo, ¿por qué no actúas apropiadamente? ¿Eh? Pájaro feo”

Ryuuji lo vio entonces, Inko-chan quien estaba totalmente paralizado, de pronto comenzó a parpadear, aparentemente sin miedo… Taiga lo debió haber visto también.

“…Las aves, ¿tienen columna vertebral?”

Mientras las palabras cargadas de maldad de Taiga se disipaban, Inko-chan continuó haciéndose el muerto.

“Bueno, aunque digan que no hay ningún problema físico, no necesariamente significa que está fingiendo, podría tratarse de un problema mental”

“Podría tratarse de su cabeza, o de su trasero”

Tomando en cuenta las palabras del veterinario, eso significaba que esto estaba sucediendo desde hacía tiempo, Ryuuji se detuvo y observó algunas gotas de sudor que salían del pico de Inko-chan. Esta clase de aves en verdad sudaban.

“¡Inko-chan!, ¡abre tus ojos inmediatamente!”

“Ryuuji, aléjate, este perico es así porque siempre estas mimándolo y desgastando su fuerza de voluntad”

La voz desesperada de Ryuuji se cortó con la mano de Taiga tapándole la boca, cuando de pronto…

“¡Puedo Volar!” “¡Ah!, ¡voló!”

…Aunque dijo esto, en realidad fue más como un salto, de cualquier forma era uno de los misterios de la vida, después de esperar la muerte de Inko-chan, escuchar su voz era algo sorprendente. ¡PAAN! Saltó bastante alto, Ryuuji al verlo con los ojos abiertos, fue testigo de su energía, el salto fue tan alto casi golpea el techo.

“¡Bien Inko-chan!”

Pero Inko chocó torpemente contra la cama. “¡Oh! No”

Rápidamente, el veterinario se acercó, y prácticamente aplastándolo, lo levantó para ver si no tenía alguna herida.

“¡Estúpido!”

El doctor de nuevo se dio cuenta de que lo estaba mirando, la mirada de Ryuuji era de reproche, así que el veterinario rápidamente se volvió hacia Inko-chan, para revisar que no tuviera ninguna lesión en su cuerpo.

“Está bien, no parece tener ninguna lesión de cuidado… sin embargo… tiene una forma algo desagradable… ¿Dónde lo compraste? ¿Algo así se puede vender?… Inko…¿Qué rayos es?”

Continuó…

“¿Puedo tomarle una foto? A mi hija le encantaría, tiene 6 años así que está en la edad en la que le gustan las cosas grotescas”

“¡Uhh! ¿No sería peligroso?”

Retiró la mascota de las manos del veterinario, Ryuuji suavemente sujetó a Inko-chan contra su pecho, en verdad era feo, pero aun así no era nada agradable que hablaran de él de esa forma, usarlo como una imagen grotesca era demasiado, no volvería a traer a Inko-chan con este veterinario jamás.

El centro avanzado de emergencias era parte del hospital de la universidad, de hecho estaba a un lado. Ryuuji había buscado frenéticamente en la sección amarilla¹, hizo bastantes llamadas telefónicas y finalmente encontró un lugar con servicio nocturno, eran muy pocos los hospitales para animales con este tipo de servicio.

“Bueno, de cualquier manera… qué bueno que no se trató de una enfermedad grave, oye Inko-chan”

Ryuuji trataba a Inko-chan como si fuera un trofeo, suavemente le acariciaba la cabeza, aunque pareciera imposible que alguien tuviera el estómago para tener un ave tan fea tan cerca, pero para él era precioso.

“ Nko-cha nko-cha nko-cha nko……n……u.nko”

“Mmn, mmn, está bien”

Le susurró en el oído, lo mimaba como a un niño, sin darse cuenta sus labios tocaban la cabeza de Inko-chan mientras lo arrullaba.

“Estuvo cerca, al final no resultaste herido a pesar de que Taiga casi te mata… ¡maldición! A ella en verdad le encanta gritar cuando está enojada”

1NdT: En México así se le dice al directorio telefónico comercial, el equivalente al yellow pages en inglés, no sé cómo se conozca en otros países, que a su vez es diferente a las paginas blancas o White pages o al elenco telefónico (Italia). 

“¿Qué?”

No escuchó muy bien, porque le hablaba al pájaro muy bajo. “… ¿Escuchaste?”

“Escuché, ¿Quien tuvo un estallido de cólera?”

El increíble sentido del oído que poseía Taiga era bastante irritante, golpeó la mesa con sus puños…

“Que… Que… ¿Qué es esto?”

Con su aberrante torpeza de siempre, hizo que todos los instrumentos médicos que se encontraban en la mesa cayeran sobre la cama.

“¡Ah! Los cabo de desinfectar… ¿cuánto tiempo piensan permanecer aquí?, Inko no tiene ninguna lesión grave, de verdad que están comenzando a estresarme”

Taiga comenzó a juntar y organizar los instrumentos, el semblante cansado del veterinario de guardia era similar al de Ryuuji y Taiga.

“Ustedes deben pelear de esta manera muy seguido ¿no? Las mascotas son sorprendentemente receptivas, es por eso que cuando los dueños se ponen agresivos, las mascotas lo notan y les causa sufrimiento”

Ryuuji desde un costado reconoció la veracidad de sus palabras, y dándose la vuelta… “¿Qué quieres decir? ¿Pelearnos?”

Con un “¡Ja!” Taiga se encogió de hombros y extendió sus brazos como un extranjero y se burlo del consejo del veterinario.

“Es solo que el cerebro de este perro pervertido está controlado por la parte inferior de su cuerpo, así que va por ahí causando problemas debido a sus sueños imposibles, por esa razón necesita un correctivo para que piense de la forma correcta, la mayoría de la gente finge no saberlo, pero no puedo estar siempre detrás de alguien para que no se convierta en un idiota. JoJoJo”

Siendo insultado de esa manera, Ryuuji no pudo permanecer en silencio.

“¿Qué?, no digas solamente lo que te conviene, ¡maldición! Todo fue por causa de tus gritos que el débil de Inko-chan tuvo que pasar por esto”

Pero la reacción de Ryuuji fue exactamente lo que la gente podría llamar ‘impulsivo’ o tal vez ‘arriesgado’ aunque para ser honestos tal vez ‘dijo demasiado’.

“¿Eh? Así que no escuchaste sobre mis métodos correctivos después de todo… ¡Oh! En ese caso ¿Por qué no dejamos las cosas claras? Explica por que desquite mi ira con Inko y ¿por qué razón estoy tan molesta?”

“No tengo idea después de todo, si no tienes inconveniente ¿Podrías decírmelo?”

Se podía ver en el interior de los ojos de la Tigre de bolsillo que tenía una fuerte intensión de matar, continuó acercándose poco a poco, Ryuuji temerosamente contuvo el aliento, pero pensó por un momento que si iba a morir de todas formas, podría decir todo lo que pensaba.

“Tú también, si tienes algo que decir, ¡entonces dilo! Tu expresión es irritante y odiosa” Hubo un momento de silencio.

En medio del silencio, Taiga lentamente colocó su mano derecha en su oído inclinó su cuerpo en dirección a Ryuuji, ladeó su barbilla y colocó su mano izquierda en su cintura.

“¿Y bien?”

La respuesta era una simple palabra.

No escuché, no entendí, y además no tengo ningún interés en lo que digas… en este extenso, extenso mundo ¿quien podría ser tan increíble como para ser capaz de expresar tantos pensamientos con tan solo ladear su barbilla?

“Mira esto”

Incapaz de responder apropiadamente, Ryuuji se encogió de hombros, aun en esta situación Taiga no lo dejaría tan fácilmente, y con un gruñido Taiga levantó su boca e ignoró por completo los 30 cm. de diferencia en altura mientras miraba a Ryuuji, después abrió su boca con los aires de un rey.

“¿Sabes Ryuuji? Voy a aprovechar esta oportunidad para decírtelo claramente, no tengo tiempo para estar con un perro vago como tú, de ahora en adelante cuando abras la boca piensa cuidadosamente en estas tres cosas: Uno, ¿Es una información necesaria?, Dos, ¿son buenas noticias?, y Tres, ¿Es algo que valga la pena ser escuchado? ¿Entendiste?

¿Entendiste? Estúpido ¿Qué te parece mi idea? Tu eres el único que sale perjudicado cuando dices esas palabras tan crueles”

“… ¿De veras?”

La voz de Taiga no mostraba sus verdaderos sentimientos, sus ojos le lanzaban una mirada un tanto arrogante, y al no entender de que se trataba el asunto, a causa del miedo, el estomago de Ryuuji se hizo nudos, la mirada de Taiga podría hacer subir al cielo a cualquier espíritu bueno; de hombre o de mujer, sin embargo lo malo del asunto era que su voz continuaba inalterada como un charco de agua.

“Has hablado de más, y eso solo hace que me ponga de mal humor”

Las manos suaves y delicadas de Taiga se movían como si las manipulara una persona muerta que salió del hospital de junto, ‘Gaki’ Con una fuerza increíble, los dedos de Taiga sujetaron el labio inferior de Ryuuji.

“N, nnngu”

“¿Sabes? La razón por la que no veo esto como algo divertido… es muy sencilla, tú siempre tienes ideas estúpidas y ya estoy cansada de que hagas esos comentarios tan imprudentes”

“Ow! Ow! Ow! Ow! Ow! Ow! Ow! Ow! ¡Suéltame!… ¡Sólo suéltame!”

Sintiéndose identificado con Ryuuji, quien se tambaleaba mientras le sujetaban del labio inferior, Inko-chan comenzó a despojarse de sus plumas otra vez, Con una voz cansada el veterinario les dijo a ambos…

“Vayan a casa”

“¿Estás de mal humor?” “No, no lo estoy”

“Entonces ¿por qué te ves irritada?”

“Porque dices cosas estúpidas como ‘estás de mal humor’…”

Se desconoce cuánto tiempo duraron con esta conversación, así que vamos a saltar cinco horas hacia el pasado….…

Básicamente, estaba siendo seducido por Ami, Ryuuji no era un chico tan ingenuo como para no comprender, así que cuando lo sorprendieron mientras estaba con ella; en medio del silencio que junto con el crepúsculo invadía el departamento del 2DK, les pareció una broma de mal gusto.

Siguiendo la secuencia de los eventos, entre Kawashima Ami y Takasu Ryuuji solo había un pequeño espacio… tal vez desde la ventana pareciera que estaban abrazados, para ser más claros estaban en una posición en la que se daba la impresión de que uno había sido empujado hacia el suelo de tatami.

Sin embargo, la primera en ver la escena fue la madre de Ryuuji, Yasuko quien no pensó que se tratara de una broma, dejó caer las bolsas que sostenía con ambas manos y le dio un sermón, aunque la mayor parte fue ignorada.

“… No puede ser”

La voz venía detrás de Yasuko.

Desde la puerta, con la ayuda de Kitamura, quien estaba todo lleno de lodo, se escuchó la voz de Taiga que denotaba que su mente procesaba lo ocurrido. Taiga y Ami eran enemigas naturales; así que la combinación entre Ami y este malentendido podría causar que las cosas se pusieran difíciles, pensó Ryuuji. Y como era de esperarse el tigre estalló en cólera.

Un simple castigo no sería suficiente para tranquilizar a Taiga quien había llegado al límite de su indignación, no había ninguna duda de que el departamento sería destruido, además estaba la posibilidad de que en cualquier momento asesinara de verdad, Taiga era la tigre de bolsillo así que algo así estaba al alcance de su potencial.

“E…Esto…Esto no es lo que parece”

Dijo estas palabras empujando a Ami, y dando un paso atrás, enseguida se sentó con estilo japonés, sin embargo este chico voluble no debió haber hablado. Taiga abrió sus ojos totalmente y observó a Ryuuji y a Ami, por supuesto que en ese momento no estaba buscando una explicación a favor de Ryuuji.

“¿Ara? ¿Pasa algo malo? ¿Ami-chan, causo algo malo?

Ami  susurró  con  un  pequeño  “jeje  ”  y  actuó…como  si  nada  malo  hubiera pasado…mientras sonreía.

“Uhhm, uhhm”

Trataba desesperadamente de entender lo que estaba pasando, Yasuko entrelazaba sus dedos una y otra vez.

“Uhhhmm”

Continuaba murmurando esto en medio de su confusión, subconscientemente se rascaba la cabeza, seguía sin comprender.

Con una indescriptible expresión en su rostro, Kitamura retrocedió sin decir una palabra… intentaba retirarse. Taiga lo dejo llevarla sobre su espalda, a causa de la caída en la zanja tenia lodo escurriendo de su cuerpo y sus anteojos estaban deformados, continuo retrocediendo hasta desaparecer de la vista de Ryuuji con la intención de darle tiempo para que pensara las cosas cuando…

“…Unme!”

Soltando los hombros de Kitamura, Taiga tomó la puerta de la entrada con ambas manos y colocó sus pies entrelazados a la parte baja de su cuerpo como la grulla mecánica de un parque de diversiones con el fin de detener el movimiento de Kitamura.

“A, Aisaka, ¿Qué demo…?”

“…Kitamura-kun ¿Por qué tratas de escapar? Ibas a pedirle a Ryuuji que te prestara su baño ¿no? No hay necesidad de escapar”

Aunque la mayor preocupación de Taiga era que Kitamura girara y saliera por la puerta, mostraba una fuerza sobrehumana a la hora de sujetarse a la puerta y hasta logró suspender en el aire a Kitamura. Debido a la fuerza con que lo sujetó, de sus rodillas brotó sangre que se escurrió por sus hermosas piernas.

“…Uhm, discúlpame Taiga-chan, pero de acuerdo con Ya-chan, bueno, Ryuu-chan, déjame ver…ah…ah….ah”

Yasuko sacudió ligeramente su pecho, la parte que no sujetaba el brassier, sin saber que decir, Taiga rápidamente paso por un lado de ella y caminó hacia Ryuuji y Ami que estaban sentados uno junto al otro, Ryuuji contuvo el aliento; ella tenía aún lodo en su cara y en su cabello, en el pequeño espacio que le dejaba el lodo en su cara, se apreciaban sus ojos como esferas de cristal. La mirada de Taiga hacia Ryuuji y Ami era tranquila, como la de un robot asesino, se detuvo frente a ambos, Ryuuji parecía temblar.

Y luego…

“Takasu Ryuuji es mío, así que no puedes tocarlo cuando tú quieras”

Estas increíbles palabras se robaron el aliento de todos, aunque solo fue por un momento, enseguida volvieron a estar bajo su mutuo escrutinio y todo se desvaneció.

“… ¿Pensaste que yo iba a decir algo como eso?”

Dijo Taiga; Ami que estaba a un lado de Ryuuji, quien se encontraba sin palabras, quizá él esperaba algo así.

“¿Hum? ¿Qué quieres decir? Sería divertido, ¿no?”

Ami dijo esto a pesar de las circunstancias, e hizo un puchero de manera tierna y dulce, con un sentimiento genuino de valentía.

“¿Hum?… no necesito decir algo como eso ¿o sí? Tal vez estés decepcionada Kawashima Ami, lo siento, pero en verdad no me interesa detrás de quien ande este perro pervertido”

Kukuku… Envió una amarga sonrisa hacia donde estaba Ami, pero no estaba dispuesta a dirigir su mirada despectiva hacia Ryuuji, Taiga dio la media vuelta.

“Haz lo que quieras, yo me voy a casa, Kitamura-kun, no te lo había dicho antes, pero mi mansión está muy cerca de aquí, aunque te hayas tomado la molestia de traerme hasta aquí, creo que tomare el baño en mi casa”

Después de hablar de una manera relajada y desinteresada con Kitamura, Taiga animadamente se dirigió hacia la salida de la residencia Takasu.

Finalmente todo terminó, Ami dijo: ‘Se me cayeron mis lentes de contacto, pero Takasu- kun los encontró’, después de decir esta mentira Ami hizo un guiño, Yasuko y Kitamura comprendieron. Después de tomar una ducha, Kitamura llevó a Ami a su casa y de alguna manera la paz regresó.

Taiga ‘como siempre’ fue a comer algo, ahí es cuando todo comenzó. Esta era la oportunidad de Yasuko.

“¡Esto es genial, Taiga-chan! Justo ahora me preguntaba si todavía estabas molesta y no vendrías a cenar”

Yasuko le sonrió mientras charlaban y se preparaba para ir a trabajar. Taiga rió mientras su mirada estaba solamente en la TV.

“¿Por qué pensaste que no vendría? Qué extraño, me pareció algo gracioso, en verdad esa broma me pareció graciosa, ¿Por qué alguien pensaría que me molestó?”

Ella controlaba su temperamento mientras hablaba con Yasuko debido a que era la jefa de la casa, sin embargo…

“¡Oh!, es verdad, que molestia, ¡lo olvidé por completo! Ryuuji me parece que estuviste ‘caliente’ hoy, jajaja, haz lo que quieras, a propósito, ¿Qué vamos a cenar esta noche?

¿Jambalaya? ¿Por qué no Frijoles con Arroz? ¡Jo jo jo!”

Taiga rió con una mano en su cintura y otra en su boca, sin embargo no había alegría en su mirada, podían leerla como un libro, un sentimiento asesino emanaba impacientemente.

Esto significaba que después de todo tenía que darle una explicación, eso fue lo que Ryuuji pensó mientras preparaba la cena en la cocina, por supuesto que en alguna parte de su cabeza pensaba ¿Por qué tengo que darle explicaciones a ella? Taiga no necesita de razones para tomar sus decisiones, mientras esto pasaba por su mente…

“Umm… ¿Taiga?”

En este momento era diferente. Bajo condiciones normales, Taiga era una chica, pero cuando se transformaba en la tigre de bolsillo, era capaz de poner de cabeza todo a su alrededor. Probablemente se sentía culpable al ser incapaz de ser amiga de Kawashima Ami, ya que ella conocía mejor que nadie su verdadero carácter.

“Ah…Ah…Ah, pareces estar muy relajado, ¿verdad? ¡Pájaro feo, jojojo!”

Taiga estaba en cuclillas mientras sostenía la jaula de Inko-chan con su manos, en su espalda podían verse brillar sus intenciones asesinas como si fueran chispas de color azul, parecía ser que Taiga estaba un poco perturbada.

Para mantener un ambiente agradable, algunas veces es necesario disculparse, aun cuando no hayas hecho nada malo, así que Ryuuji abrió su boca una vez más.

“Taiga…”

“… ¿Qué quieres?”

Ryuuji caminó hacia ella y tocó su espalda ligeramente, la risa de Taiga se detuvo, y el único sonido que podía escucharse era el de la secadora de cabello que Yasuko estaba usando.

“¿Cómo podría decir esto? Sobre la situación de esta tarde…” “¿Situación? ¿Cuál situación? No tengo idea de lo que estás hablando” Taiga se paró fríamente, ante esto Ryuuji retrocedió un poco.

“Kawashima me estaba jugando una broma, te lo aseguro, fue solamente eso… ¿Cómo podría decirlo? Perdón por ponerte de mal humor”

“¡Holaaaa!”

Inko-chan de pronto gritó, levantó su cabeza y observó lo que Ryuuji no podía, la expresión en la cara de Taiga, comenzó a alejarse, pero solo consiguió perder el equilibrio y caer de la percha de madera.

“¿Por que necesitas disculparte? Oh, está bien, voy a comer mientras veo este pájaro feo, pásame mi tazón de arroz”

Todavía de espaldas a Ryuuji, Taiga estiro su brazo para que le pasara el tazón. “¿Y el entremés? Hoy tenemos pescado asado…Alfonsino…”

“Ponlo en el arroz, no uses el tazón de arroz normal, usa uno extra grande y ponle algo de vinagre”

De esta manera Taiga comió de espaldas a la mesa, ni Yasuko ni Ryuuji intentaron hablarle y comieron tranquilamente.

“Ya, Ya-chan, ¿tienes que ir a trabajar ahora?”

Hoy, Yasuko iba más temprano de lo normal, para decirlo de otra forma, estaba huyendo, dejando atrás a Ryuuji y a la que actuaba como si ‘todo estuviera bien’ y que como ocio mataba el tiempo en la casa de los Takasu, el único sonido que podía escucharse era el de la televisión, Taiga seguía mirando a Inko-chan que estaba inmóvil como una estatua. Ryuuji rechinó los dientes y se levantó, ligeramente levanto la jaula y la colocó entre sus manos.

“…”

Un destello, los hermosos ojos de Taiga brillaron y observaron a Ryuuji.

“Yo creo… que casi es hora de cubrir la jaula de Inko-chan, para que duerma” “¿Por qué? Normalmente lo haces más tarde”

“Por nada…sólo…mira, Inko-chan en verdad luce cansado” “Quiero seguir viéndolo, ponlo ahí”

Taiga extendió una de sus manos blancas como la nieve y tomo la jaula desde la base, la cual se meció y tiró un poco de agua.

“¿Por qué? ¿Acaso tienes un interés especial en Inko-chan?” “¿Por qué no? ¿Es malo? ¿Raro? o ¿molesto?”

Los dos permanecieron en silencio, y cada uno trató de jalar la jaula hacia si mismo. “¡Bien! Entiendo, comprendo lo que quieres decir, solo dame a Inko-chan primero” Los ojos de Taiga se estrecharon aún más.

“¿Qué? ¿Qué quieres decir? ¿Qué fue lo que comprendiste? ¿Qué es lo que intentas decir exactamente?”

La jaula de Inko-chan estaba todavía en medio de ambos, el aire dentro de la casa estaba en el punto de congelación.

“Um, esto es…ya sé que estas enojada…”

“¿Estoy enojada? ¿De qué me estás hablando? ¿Te parezco enojada? ¿Por qué habría de estarlo? Probablemente porque piensas que te vi coqueteando con Kawashima Ami, yo me puse irritada, celosa, enojada y por eso trataste de disculparte, ¿Es lo que quisiste decir?

Qué soy una chica trágica y tu eres extremadamente popular entre las damas, y que eres digno de mis celos, ¿Eso es lo que quisiste decir?”

Taiga dijo todo lo que quería decir de un jalón, luego se paró y caminó un poco, Ryuuji abrazó la jaula y la acercó a su pecho y de manera subconsciente caminó un poco hacia atrás, pero detrás de él estaba la pared… era de esperarse cuando se está dentro de 38 metros cuadrados.

“Tranquilízate, no es lo que quise decir, solo quise que se calmaran las cosas…”

“¿No dijiste hace unos momentos, que estaba enojada? ¿Dijiste que era infeliz? Es lo que has estado diciendo todo este tiempo ¿verdad? obviamente soy la misma de siempre, lo que has estado diciendo es que yo estoy enojada ¿verdad? si quieres que te diga porqué estoy tan enojada, entonces te diré por que lo estoy, ¿no es natural estar enojada? Caí en una zanja, me lastime las rodillas, me dieron ganas de llorar, apestaba mucho y Kitamura-kun me vio de esa manera y hasta me trajo hasta aquí sobre su espalda…y al final, tú estabas aquí coqueteando con esa mujer repugnante.”

Taiga dejó de caminar, arrugó su nariz y miró a Ryuuji con desprecio, como un depredador, sus ojos brillaron con la luz del odio y sus labios pálidos se movieron de tal manera que parecía sonreír dulcemente.

“Pero lo que más me molesta, es que pienses que puedas saber lo que estoy pensando, me insultas, hey, ¿me estas escuchando?”

Taiga se paró de puntillas y levantó la barbilla, casi como si se estuviera besando con su novio, sin embargo su voz, estaba llena de malicia.

“¿Por qué habría de estar enojada porque ustedes dos estuvieran juntos? No me interesa ni un poco a quien elijas para moverle la cola”

En verdad estás enojada. Si él hubiera dicho esto, seguramente hubiera sido asesinado, y aunque todavía tenia algunas cosas por decir, mantuvo su boca cerrada, probablemente era lo mejor.

“…”

“Desde ahora, no tienes permitido decir esa clase de cosas sin sentido, es por tu propio bien”

Taiga miró a una vez más a Ryuuji con desprecio, le dio la espalda y dijo mientras lo hacía…

“No me importa lo que haya ocurrido hoy, pero a causa de tus estúpidas palabras, ahora estoy enojada, me voy a casa”

Justo cuando se había colocado las calcetas y caminaba sobre las colchonetas de tatami hacia la entrada…

“…119…”

¿Quien dijo eso? 119… ¿Shibuya? No, ese es 109… ¿de quien seria esa voz? ¿Podría ser de Inko-chan? tratando de escapar de la dolorosa realidad, Ryuuji rápidamente observó la jaula que estaba en sus manos.

“¿¡Qué!?”

Ryuuji no logró nada con gritar, y al mismo tiempo recordó que el 119, ¡es el número de emergencia para solicitar una ambulancia! Al escuchar los gritos de Ryuuji, Taiga también emitió un grito de sorpresa.

“¡Yiyi!”

Taiga de inmediato corrió hacia Ryuuji para ver la jaula. “Esto no sucedió por los jalones de hace rato ¿verdad?”

Dentro de la jaula, la victima que había sido usada como una herramienta de argumentación, estaba soltando plumas, no estaba clara la razón por la cual estaba tieso y cayó de la percha, de cualquier manera, la cabeza de Inko-chan estaba en medio de dos barras de la jaula.

Taiga sollozaba cosas como ‘se acabó, se acabó, ¿Qué hacemos?’ Mientras Ryuuji gritaba ‘¡llama a una ambulancia! No espera, a un veterinario’.

Takasu Inko, vivió 6 años completos… no podía ser ¿o sí?

“¡Hey! Qué demonios… el taxi estaba vacío”

Ryuuji miraba amenazantemente las luces del taxi que no se detuvo, y sin darse cuenta, hizo un gesto como diciendo ‘bastardo’ esa fue la razón por la cual el segundo taxi tampoco se detuvo.

Desde que dejaron el hospital de animales intentaron tomar el taxi en la avenida principal, habían pasado 10 minutos.

“No es por seamos estudiantes de preparatoria ¿verdad?” “¿No podría ser porqué tu cara es demasiado atemorizante?

Taiga se sentó sobre el barandal, mientras sujetaba a Inko-chan quien había sobrevivido a una experiencia cercana a la muerte, veía con aburrimiento el tráfico.

“Olvídalo, caminemos hasta el cruce que esta por allá, yo creo que ahí debería haber más taxis en la estación del tren”

“Fuh”

Después de que Taiga exhalara con tristeza, y se preparara para saltar, inesperadamente exteriorizó una señal de sobresalto ‘Uwah’ se dio vuelta y observó que su vestido de una pieza se quedó atorado en el barandal.

“¿Es en serio?… ¿Qué estás haciendo?”

Taiga frunció el ceño y parecía estar lista para jalar el vestido, Ryuuji gritó frenéticamente. “¡Hey, hey, el vestido se va rasgar, jálalo con suavidad!”

Ryuuji se arrodilló y se preparó para tirar suavemente del vestido de 100,000 yenes cuando…

“Que desagradable”

Acompañado de un sonido agudo, la fina tela del vestido se rasgó a causa del tirón de Taiga, luego colocó la jaula en las manos de Ryuuji y volteo su rostro molesto en otra dirección.

“¡No puedo soportar esto!”

“En verdad, hay algunos puntos que merecen nuestra reflexión… al final, todo esto sucedió porqué creíste que Inko-chan estaba herido, hey Ryuuji en parte esto también es tu culpa, es culpa de tu imaginación, por pensar cosas como ‘Taiga está enojada’.”

“¿Qué?”

Taiga no se volteo, sin embargo lo que murmuraba era incomprensible, Ryuuji caminaba a su lado mientras miraba las expresiones en su rostro. Taiga continuó…

“Es verdad no he sido para nada comprensivo…”

Escucha, escucha, Ryuuji inclinó la cabeza.

“Es solo que me pareció algo gracioso y definitivamente no perdí el control, hablo en serio, desde el fondo de mi corazón, ya sé que esto no tiene nada que ver contigo”

“…”

En ese momento dentro del corazón de Ryuuji, el cansancio vencía al enojo; ya no tenía fuerzas para quejarse, solo miraba el rostro de Taiga. Taiga acomodó su cabello mientras le sonreía débilmente.

“Creo que me adelantaré, pues no quiero caminar junto a un perro pervertido”

Eso fue algo cruel, lo más probable es que haya dicho esto sin la sonrisa, Taiga caminaba silenciosamente entre la oscuridad de la noche y la niebla, su lenguaje corporal lanzaba un claro mensaje: no importa quien se atraviese le lanzaré una mirada mortal.

Al final Taiga logró parar un Taxi, aunque eran vecinos y se dirigían al mismo lugar; Ryuuji no quiso abordarlo, pero el grito de “Deja de hacerte el tonto y sube al taxi” de inmediato quebranto su voluntad, caminando como si se dirigiera hacia su ejecución, Ryuuji se sentó junto a Taiga quien permaneció en silencio durante todo el trayecto.

Taiga pagó el trayecto sin siquiera mirar a Ryuuji y caminó hacia su departamento, él tenía pensado pagarlo…

Habían pasado ya 5 horas desde el incidente y las cosas parecían ponerse cada vez peor.