Toradora! (NL)

Volumen 1

Capitulo 5: Adiós, Takasu-kun.

Parte 2

El receso fue muy normal en la clase 2-C. Takasu Ryuuji leía su manga en su escritorio bañado por la luz del sol, mientras Aisaka tranquilamente tomaba a sorbos su caja de leche una expresión aburrida y un aura que parecía decir: “déjame en paz.”

Sin embargo una amiga muy valiente vino y llamo por la espalda a Aisaka: “Oye, Taiga… ¿estas libre ahora?”

Era nada menos que Kushieda Minori.

• Así que finalmente ella lo hará, ¿huh? – toda la clase estaba pendiente detrás de la Tigre de bolsillo.

“¿Por qué estas tan seria…¡oye!¿¡Minorin!?”

Tenía una seria expresión a diferencia de las que llevaba normalmente, Minori arrastro a Taiga por su cuello y la saco de su asiento. La pequeña Aisaka exclamo:

“¡Pu, puedo moverme por mi cuenta sin que estés empujándome! ¡Me voy a caer!” “¡Sólo sígueme!”

Minori aparentemente era la única persona en este mundo capaz de hacerle tal cosa a la Tigre de bolsillo. Si fuese cualquier otra persona, seria mordido en menos de tres segundos. Mientras todos contenían la respiración, Minori arrastro a Aisaka por el piso, como si fuera un equipaje y le dijo a la persona frente a ella:

“…Tú. ¡Ven también!” “… ¿Eh? … ¿yo?”

La persona que apunto no era otro que Takasu Ryuuji. Él se sintió un poco extasiado con el llamado…aunque ella me llamo simplemente “tú”…sus ojos se mostraron sorprendidos con el pensamiento, pero para todos fue un ceño fruncido.

El aire de la escuela se lleno de una atmósfera de tensión…aunque no podía ser visto, pero era lo que se sentía de todos modos.

Era un día bastante agradable. Las nubes flotaban lentamente de una forma placentera. “¿M, Minorin…?”

“¿Kushieda?”

Después de arrastrar a Ryuuji y Aisaka a la azotea, Kushieda Minori volvió su espalda hacia ellos…Whoosh…en esta inusual situación, la chaqueta del buzo que llevaba en la parte superior de su uniforme, por alguna razón, ondeaba contra el viento.

Ryuuji de repente bajo su voz y le susurro a Aisaka, quien estaba de pie 30 centímetros abajo:

“Oye… ¿qué está pasando aquí?”

“¿Cómo voy a saberlo?…esta también es la primera vez que veo a Minorin así… ¿quizás ella este enojada por algo?”

Aisaka miro un poco melancólica y inclino su cabeza incómodamente, sin embargo, decidió dar un paso adelante…

Cuando ella estiro su mano, su voz se detuvo. El mundo entero pareció detenerse también. Girándose, los ojos de Minori parecieron brillar por un instante antes de que saltara de repente frente a Aisaka.

“¿¡Wah!?” grito Aisaka, cubriéndose con sus manos. ¿Qué esta pasando? Minori suavemente se deslizo delante de Aisaka y entonces…

“TAKASU——KUUUUUNNN !!!”

“¿¡WHOA?!”

Minori se deslizo a unos pocos metros frente a Ryuuji y elegantemente se arrodillo frente a él.

La mayoría del polvo salio volando y ondeo la chaqueta del buzo…

“¡Yo ahora te confió a mi Taiga! ¡PORFAAAVOOORR ! ¡¡Cuida bien de ella!!”

Ella grito con una voz que atravesó el cielo. “… ¿Huh?! ¿Wha. ? ¿EHHHHH?!”

Minori se inclino con las manos en el suelo, tocando con su frente sus dedos. Ryuuji estaba completamente impresionado por todo esto, mientras que Aisaka, estaba luchando por mantener la mandíbula cerrada.

“Takasu-kun, esta chica…Taiga, ella es una amiga muy importante para mi. Ella puede tener un mal genio a veces, pero ¡ella es una chica amable y gentil!. ¡por favor! ¡¡Hazla

feliz!!”

Sollozos…Lo único que podía ver Aisaka eran los sollozos de Minori. Paso un segundo…diez segundos…treinta segundos…

El primer en volver en conciencia fue Ryuuji, que dijo:

“Kushieda, espeee, espera un minuto… ¿de qué estas hablando…? “¡Por favor deja de decir eso!”

Minori levanto su cabeza y miro a Ryuuji con una seria expresión, y continúo:

“Deja de pretender que no sabes nada, ¿esta bien? Takasu-kun, ¡déjalo ya! ¡Lo se todo ahora! ¡Te apoyare de todas formas!”

Minori exclamo esto con una clara y determinada expresión, mientras miraba directamente a Ryuuji…Ryuuji, por su parte, estaba tan anonadado por su consideración que no podía hablar.

“… ¿Crees que no me había dado cuenta? ¿Ustedes dos siempre caminan juntos a la escuela? Y yo siempre estuve en medio. Estuve esperando mucho tiempo para que me dijeran que estaban saliendo… ¡pero! No importa cuanto espere, ¡no me dijeron nada!”

“¡N, no! ¡No es así! Esto…Kushieda, lo has entendido todo mal…”

“¡Solo les diré que dejen ya de andar con secretos! ¡Takasu-kun! ¡Taiga! ¡Ya se que están saliendo juntos! ¡Siempre quise decirles esto!”

Minori apunto a Ryuuji con su dedo mientras aun permanecía de rodillas, entonces ella sonrió y se inclino profundamente una vez más.

“¡Es cierto! ¡Esto no esta mal! Takasu-kun, ¡¡Tú y Taiga son solo uno! ¡Yo definitivamente no dejare que nadie se entrometa en su camino! Así que por favor quédense tranquilos y continúen saliendo, ¿¡Esta bien!? “

Incluso si me lo pides tú, yo…como si fuese golpeado por una gran fuerza, Ryuuji cayó arrodillado cansadamente, como si su alma estuviese a punto de abandonarle.

El shock lo dejo sin palabras…aunque el quería negarlo. ¡Tengo que negar esto!

“¡No! ¡Estas mal, Minorin! ¡¡Nosotros no tenemos ese tipo de relación!! ¿Puedes escucharnos al menos a nosotros primero? ¡Así que por favor apresúrate y levántate!”

Aisaka salto en frente de Ryuuji y comenzó a explicar. Ryuuji estaba al borde de las lagrimas…Así es, aun esta Aisaka. Ella puede explicar este mal entendido, Ryuuji cayó sobre  el  suelo  de  concreto  y  le  transmitió  este  mensaje  sin  voz.

Sin embargo…

“Ho, ho, ho, no hay necesidad de ser tímidos. ¡Felicidades ustedes dos!”

Minori tomo su falda como un elegante caballero y miro en silencio atrás de Aisaka, a Ryuuji…

“…Takasu-kun, si tu haces llorar a Taiga, ¡no te perdonare!” Exclamo revelando una muy solemne expresión.

¡Eso no importa! ¡Espera un minuto! ¡No es lo que crees! ¡¡No es así!! Ryuuji gritaba desde el fondo de su corazón, luchando por decir algo, para estirar su mano, para explicarle a Minori quien ahora se había girado y se preparaba para alejarse caminando…pero su garganta, sus manos, y todo lo demás estaba paralizado por el shock, y era incapaz de explicárselo a ella.

Ante un Ryuuji inmóvil, la última esperanza que quedaba para que explicara todo era – Aisaka – quien también fue noqueada por una cuchillada. El diminuto cuerpo cayo sin vida hacia atrás ante sus ojos, y permaneció quieto; farfullando sangre y tiñendo su cuerpo con la roja sangre.

Todo esto fue porque Kitamura estaba aquí también:

“Así que era eso…Hmm, ¡me preguntaba porqué ustedes dos siempre estaban juntos! Takasu, yo estaba por los alrededores y te vi, así que vine aquí…pero creo que eso no importa. ¡Felicitaciones, a ustedes dos! Aunque aun no puedo creer que nunca me hablases de esto antes.”

Vio todo desde la entrada a la escalera. Y después oyó la confesión de Minori, como resultado, lo mal entendió todo.

El se dirigió al pequeño cadáver tendido en el suelo, y dándole el golpe de gracia dijo:

“Aisaka. Dejo a Takasu a tu cuidado. Asegúrense de quererse entre ustedes. Ahora que lo pienso, ¡ustedes dos son tal para cual!”

Y así los dos cuerpos paralizados permanecieron sobre el suelo tal cual, sin ser capaces de levantarse…

***

“Umm, podría por favor, tomar su pedido…” “…”

“…”

“…Per, perdóneme, pero si no piden nada…” “…Algún jugo…”

“…Que sean dos. El mismo que el de ella…”

“…Bebidas, ¿no? Bien, las copas están por allí, así que por favor sírvanse ustedes mismos.”

Después de terminar sus líneas designadas, el camarero se giro y se fue. Sin embargo, ni uno se levanto para ir a buscar alguna bebida.

Eran alrededor de las 10 de la noche, en un restaurante familiar al lado de la carretera principal. Sentados en una mesa de no fumadores al lado de una ventana habían dos cadáveres…

Aunque aun era abril, el cadáver grande llevaba una camiseta suelta, el corte de pelo que el tenia mientras se lavaba su cara seguía igual en su cabeza, el cadáver pequeño vestía una camisa roja y una falda verde a cuadros, en su cabeza tenia un desorden con su largo cabello.

Ambos parecían absolutamente miserables y arruinados. No podían decir una palabra, ni siquiera podían parpadear, simplemente dejaban que el tiempo pasase lentamente.

“Cómo…paso…esto…”

El primero en hablar fue el cadáver grande. Coloco sus codos sobre la mesa, agarro con fuerza su cabeza y hablo suavemente:

“¿Hicimos algo mal? ¿Por qué Kushieda Minori se hizo esa equivocada idea…?

Ryuuji finalmente vio una parte de Minori que no conocía; una muy chica muy individualista, incapaz de escuchar a los demás. En otras palabras, ella era súper egocéntrica. Sin embargo, dado que ella era la mejor amiga de Aisaka, tenia sentido que tuviesen algo en común.

“Pero de todas las personas tenia que ser Kushieda…que mal…”

Y con esto su enamoramiento de un año de repente cayo ante él…sin embargo, fue igualmente de importante para Aisaka, quien también sufría el mismo golpe.

“…”

Aisaka puso sus ojos blancos, mirando hacia arriba desanimadamente mientras estaba sentada muy cerca del borde del sofá. Ella va a resbalarse hacia abajo sentada así, ¿es esta la Tigre de bolsillo real? ¿Es esta la Tigre de bolsillo de la clase 2-C que puede alejar a un chico muy lejos solo con su mirada? ¿La Tigre que ruge con ferocidad? Ryuuji comenzó a sentirse realmente triste…

“A, Aisaka…cálmate…”

Ryuuji estiro su brazo por la mesa y sacudió el pequeño hombro de Aisaka, pero… “…”

El alma de Aisaka aun no había regresado. “Aisaka…”

Dijo Ryuuji usando lo último de sus energías, después cayo exhausto sobre la mesa.

Enserio… ¿¡Por qué esta pasando esto!?

El no entendía bien porque se sentía tan herido.

Si lo estaban incomprendiendo o dando la impresión equivocada, le pasaba esto desde el jardín infantil.

“…Ahh, se acabo…”

Ryuuji entonces se dio cuenta del porqué estaba tan sorprendido. No fue porque lo estuviesen incomprendiendo, fue porqué después del mal entendido, lo que recibió fueron sonrisas felices y serias palabras de apoyo…y esto le dio como resultado, el que no fuese capaz de explicárselo a si mismo y del porqué estaba tan frustrado.

¡Soy tan idiota! Ryuuji se maldijo a si mismo. Era de esperarse…a pesar de que ella no me creyera, yo nunca hice nada para ganarme su corazón, ¿¡Qué podría esperar!? Quizás, ni siquiera tenga derecho de sentirme desanimado.

Después de permanecer en ese estado durante unos minutos, levanto su cabeza, notando algo…

“Ah…”

El sonido de dos vasos puestos en una mesa.

“…Esta es la tuya. No se que querías, así que…son de melocotón de las indias occidentales, tienen mucha vitamina C…”

Aisaka silenciosamente se había levantado de su asiento, y había traído dos vasos grandes de jugo rojo. Después de colocar los vasos sobre la mesa, se deslizo de nuevo en su asiento.

“… Aisaka…”

¿Cuándo comenzó ella a respirar de nuevo? Aisaka libero un profundo suspiro frente a Ryuuji. Levanto su cabeza y dijo:

“Lo siento, esto paso porque siempre estamos juntos…todo porque siempre quise hacer las cosas a mi manera, termino así…siempre queriendo involucrar a Ryuuji…una desesperada ama como yo, no tiene derecho a llamarte perro estupido…”

Solo sus ojos mantenían su usual agudeza. Aunque ella decía eso, se veía exhausta, y sus ojos carecían de su habitual brillo.

Una piedra cayó en lo profundo del corazón de Ryuuji.

Aisaka sintió lo mismo. ¡Es porque siempre estamos juntos que fuimos mal entendidos y heridos! Tanto Aisaka como yo, ambos nos involucramos en esto a fondo. Y es por eso que, siempre estamos al frente del otro, siempre juntos…

Sin embargo…

“…bueno…no importa…que estemos…juntos…”

Ryuuji quería decir algo, pero decidió rendirse. ¡Aisaka también esta afectada por dentro! Esos es porque…yo no puedo sólo hablarle confiadamente con ánimo…esta vez Aisaka hablo:

“Me he…decidido.”

Jugando con el hielo en su bebida con la bombilla, ella levanto la cabeza y miro directamente a Ryuuji con una mirada determinante.

“Mañana, iré y me confesare a Kitamura-kun. No habrá errores. Voy a usar la manera mas tradicional… y sencilla de confesarse.”

Aunque sus ojos traicionaban su seguridad, ella agrego: “me he decidido.” Ryuuji había quedado impactado.

“…Aisaka…porque…tan de repente…no, en este momento tú no has tenido ningún progreso con él…”

“Es cierto. No hay progreso…sin mencionar que…”

– Él nos mal entendió, y te arrastro en esto también…- ella dijo esto en una voz muy suave. “…Por ello, quiero poner fin a esto,”

“¿Un fin? ¿Qué quieres decir…?”

“Ponerle fin a que nosotros ¡estemos juntos todo el tiempo’” Concluyo ella.

Después de terminar, la mirada de Aisaka era clara, aunque su expresión era fría, como una piscina con agua recién cambiada. Ryuuji se quedo sin habla.

“¡Eres libre de ahora en adelante! Puedes hacer lo que te plazca…no voy a decirte nada. Si quieres confesarte a Minorin o lo que sea, ¡adelante!…no importa como termine mi confesión mañana, ya no tienes que escucharme.”

“…!”

“Tu trabajo como perro termina hoy. A partir de mañana, vamos a volver a nuestros viejas maneras de ser… ¡antes de la carta de amor!”

Una declaración de emancipación. Ryuuji no tenía porque escucharla.

Estaba supuestamente feliz por este momento. Y aun así no dijo nada.

Él podía por lo menos decir: “Gracias por la compañía” o “por fin, un momento para descansar” o algo así, pero el no dijo nada. Ni siquiera: “las cosas estarán solitarias desde ahora…” absolutamente nada. El cerebro de Ryuuji no podía llegar a nada, todo lo que él podía hacer era mantener el vaso con hielo…a pesar de que sus dedos comenzasen a acalambrarse por el frío del hielo, y su corazón estuviese ahora frió como el invierno.

Sin embargo, por alguna razón Aisaka sonreía…ella sonreía en silencio. Mirando a Ryuuji, volvió su mirada lejos del distraído Ryuuji y cubrió su boca con sus manos mientras bajaba la cabeza.

“…es muy extraño, ¿Por qué terminamos juntos así? Incluso hoy, ¡sin siquiera ponernos de acuerdo! Los dos caminamos como zombies y terminamos encontrándonos aquí…comiendo juntos cada día…constantemente flojeando juntos o discutiendo juntos…”

Una pequeña sonrisa se veía a través de su mano, mientras entrecerraba sus ojos en forma de luna creciente. Aisaka se reía de verdad, era la primera vez que Ryuuji la veía riendo de corazón.

“Yo…no quiero ir a casa, no quiero volver a ese lugar donde estoy sola, siempre irrumpía en tu casa e incluso comía ahí, eso era realmente…umm, muy…”

Aisaka dejo lo que trataba de decir y se encogió de hombros en silencio. ¿Qué esta queriendo decir? Cambio su mirada y luego cerró sus ojos, como si estuviera sellando todo lo que sus ojos habían visto, muy suavemente, sin ni un sonido.

“Era…haha, ¿Cómo puedo decirlo? Pero…umm, es cierto, no me moriré de hambre. Um, yo soy muy torpe ¿no es así? Tú notaste que vivo sola, ¿cierto?”

Aisaka probablemente no vio el asentimiento de cabeza de Ryuuji.

“Es una triste historia. Yo no me llevo muy bien con mis padres, y siempre teníamos discusiones. Un día yo dije –‘me voy de esta casa’ -, y ellos simplemente dijeron – ‘adelante’ -. Y entonces me dieron este apartamento… antes de que me diese cuenta, ya estaba pensando en mudarme…pero, me sentía muy orgullosa de tomar esa decisión…así que me mude, y descubrí que no podía hacer ni una tarea domestica….me sentí herida,

¡enserio! Además nadie me visitaba… que estupida fui, sabiendo que mis padres eran ese tipo de personas, insistí en mudarme. Bastante tonto, ¿huh? ¡Así que adelante y ríete! No me enojare.”

Aisaka abrió sus ojos.

Después de decir todo eso de una sola vez, Ryuuji sabía que debía sentirse bastante…

¿Que demonios fue eso? Ryuuji soltó un gruñido del fondo de su garganta.

Quiero decir, ¿Qué demonios fue todo esto? Esta simple historia que Aisaka contó… ¿no es una de esas historias trágicas de abandono? ¿No es esto como una muñeca que se queda sola en un castillo tras ser abandonada por el rey y su familia?

Pero Aisaka estaba sonriendo, y parecía espera que Ryuuji se riera también, así que… “Heh… ¡ja ja!”

Rió Aisaka, por lo que Ryuuji le respondió:

“Heh heh heh! Hahaha! Sí, eso es muy tonto…” “¡Te lo dije!”

Ryuuji se reía, pero su corazón se sentía desgarrado, aun así intento dar su mejor risa calidamente…

A partir de mañana todo volvería a ser como antes – sin molestarse en saludar, volviendo a ser la Tigre de bolsillo a la cual nadie se atrevía acercarse, volviendo a tener una terrorífica compañera de clase conocida como la Tigre de bolsillo.

Si ese era el caso, entonces el podía reír cuanto quisiera ahora, y observar cuidadosamente la ultima sonrisa de Aisaka en este restaurante familiar tan mal decorado.

Entonces, ¡debería mostrárselo también a ella! Estoy seguro se reirá mucho viendo esto.

“Hahah, oh sí, déjame mostrarte algo interesante. ¿Sabes quien es?” Se trataba de una vieja foto que él tenía en su cartera.

“¿Eh? Ah… podría ser… ¿¡tu padre!? “¡Bingo! ¡Acertaste!”

“Pft! Wahahahahahaha!” Una ruidosa carcajada que atrajo la mirada de las personas de alrededor.

“¿Qué, que es esto? ¡Eres igual a él! ¡ahahaha! ¡Esto es muy gracioso!” “Mira sus ojos…son iguales, ¿cierto? ¡Los míos y los de este matón!” “¡Basta ya! ¡Deja de mostrarme eso! ¡ahahahahaha!”

Temblando y reteniendo sus lágrimas, Aisaka se deslizo sobre la mesa riendo, golpeándola con sus manos, pateando salvajemente con sus piernas. Continúo riéndose cada vez más fuerte. La cara de mafioso perfectamente heredada había provocado algo en Aisaka. Si la característica heredada que despreciaba tanto la hacia feliz, entonces quizás valía la pena tenerla después de todo.

“…Nunca le había mostrado a nadie esta foto.”

“¡Ha, haha…! No creo que me haya reído tanto antes… ¿¡Cómo se logran esos genes!? “Es divertido, ¿verdad?”

“¡Puedes apostarlo! ¡Ahh! ¡Es cierto! Como muestra de agradecimiento por mostrarme tu secreto, déjame contarte algo interesante como recompensa…te diré mi secreto.”

“Ya sabes…” dijo ella escondidamente, cubriendo su boca para evitar que la risa se le saliese, las mejillas de Aisaka se pusieron rojo carmesí y sus ojos brillaban como una bromista. Le hizo un gesto a Ryuuji para que se acercara y le susurro al oído:

“…Esas galletas estaban saladas, ¿cierto?”

“¿¡Qué?!”

Su suave voz hizo que Ryuuji gritase. ¿Cómo? ¿Cómo supo ella que estaban…?

“¡Heh heh! En realidad, cuando encontré las galletas, ¡comí una con frustración! ¿y sabes que? ¡Sabían horrible! Pero no me dejaste detenerte, y te las comiste todas juntas….e incluso me mentiste…”

De repente salio con esa revelación.