1LDK Soshite 2JK (NL)

Volumen 2

Capítulo 12: El Hermano Menor Y Las JK

Se suponía que sería el mismo regreso a casa de siempre. Pero este día no es el mismo de siempre.

Cuando llegué a casa del trabajo, subí al ascensor, y me bajé en el tercer piso…

Entonces me quedé congelado.

Porque frente a mi apartamento hay un tipo rubio tratando de espiar en el interior por la mirilla de la puerta.

No importa cómo lo mires, es una persona muy sospechosa. Pero este tipo no es una persona sospechosa ni nada por el estilo.

—Kouki… —por reflejo, murmuro el nombre.

Inmediatamente después, esa persona también parece notar mi presencia.

Levanta la cabeza y mira en mi dirección.

—Yo, niichan, bienvenido a casa. Quiero decir, ¡largo tiempo sin verte!

Con una sonrisa despreocupada y levantando una mano, es mi hermano menor, que no hace mucho vivía conmigo en esta habitación.

Por el momento, me desplazo hasta el frente del apartamento. Esta situación es mala, muy mala.

Si no recuerdo mal, Himari no debería estar trabajando hoy…

—Hombre, estás actuando sospechoso. Los residentes del edificio llamaron a la policía, ¿sabes?

—Mi culpa, lo siento. La verdad es que perdí las llaves de este apartamento, así que estaba esperando a que volvieras a casa, niichan.

… ¿Hmm?

¿Significa eso que Kanon aún no ha regresado?

Él debió haber presionado el intercomunicador una vez para saber que yo aún no había regresado; si Kanon hubiera estado, ella se habría ocupado.

Pero el hecho de que esté esperando fuera significaba que, al parecer, Kanon no ha llegado a casa todavía. ¿Se está tomando su tiempo con las compras?

No, mejor dejar eso de lado por ahora.

—Llámame antes de venir, ¿vale?

Son palabras que realmente salen del fondo de mi corazón. Si hubiera sabido de antemano que venía, pude haber tomado más contramedidas.

—Mi culpa, no lo tenía planeado. Por casualidad, tenía un trabajo cerca.

Aproveché la oportunidad para simplemente echar una pasada.

Kouki es fotógrafo independiente.

Sin embargo, parece que por lo general toma más fotos de establecimientos y comida para revistas que de personas.

Cuando vivíamos juntos, salíamos de excursión a fotografiar pájaros salvajes, gatos callejeros y cosas por el estilo.

—Ya veo… En ese caso, ¿vamos a comer algo?

Lo que sea estará bien. Tengo que alejar a Kouki de esta casa a como dé lugar.

Entonces, contactaré a casa desde el baño del restaurante, y le pediré a Himari que se esconda.

No queda más que adherirnos al plan.

—Hmm, no me interesa comer. Comeré cuando llegue a casa. O, mejor dicho, creo que mi novia se encargará de ello.

«¡Este normie!», grito de inmediato en mi mente.

¿Cómo puedo estar tan envidioso por algo como tener una novia esperándote y que te cocine cuando regresas a cas…?

Esperen, yo también estoy en una situación similar ahora, ¿no? Aunque para nada es una novia.

Quiero decir, el plan ya se ha colapsado… ¿Qué puedo hacer?

—Más importante aún, padre me ha contado. Estás cuidando a Kanon- chan, ¿verdad?

—Mm-hmm.

—Ya veo… Hace tiempo que no la veo. ¿Cómo está ahora?

—Eso… ¿Cómo decirlo?… Muy estudiante de instituto.

—¿Qué es lo que significa? ¡Niichan, tu léxico es una mierda, ¿sabes?! Mientras se ríe por un rato, Kouki le echa un ligero vistazo a mi maleta. Supongo que quiere decir que abra la puerta rápido.

… Esto realmente es terrible.

Como es de esperarse, sería demasiado antinatural no entrar en casa en esta situación.

Por otro lado, si entro en casa tal como están las cosas, no hay duda de que tendrá un «encuentro aleatorio» con Himari.¹⁸

Pongo mis manos en el interior de la maleta, moviéndome lo más lentamente posible. Aunque sé que en este punto no hay ningún sentido en ganar tiempo.

¹⁸ Aquí se usa una palabra para encuentro aleatorio que corresponde a esta en específico «エンカウント» ‘random encounter’, y es un término especifico de videojuegos.

—Ah, ¿acaso no es Kanon-chan?

Al escuchar lo que dice Kouki, me giro hacia el ascensor.

Y ahí está Kanon, sosteniendo dos bolsas de compras y mirándonos con los ojos bien abiertos.

Kanon lentamente se nos acerca.

—Uhm… Tiempo sin verte…, Kou-nii.

Con los ojos mirándolo hacia arriba, lo saluda tímidamente.

—Tiempo sin verte. Oh, sí que has crecido, Kanon-chan.

—G-gracias.

Kanon me mira de reojo.

Nuestros ojos solo se encuentran por un momento, pero es suficiente para que Kanon me transmita que también está pensando «esto es terrible».

En esta situación no hay coartada para alejarlo de aquí.

Si se tratase de otra persona, podría excusarme diciendo «es que está hecho un desorden», pero Kouki es familia.

Incluso si se lo dijera, probablemente lo descartaría diciendo que no hay necesidad de preocuparse por eso.

Si sucede, no me queda más que prepararme para lo peor. Después de una breve pausa, finalmente saco las llaves de la casa.

«Gachari».

El sonido del desbloqueo es más pesado de lo habitual.

Cuando abro la puerta lentamente, están apagadas las luces de la casa. Los zapatos de Himari están ahí, pero un silencio sepulcral se extiende en el interior.

Esto…

¿Será que Himari notó el evento inusual delante de la puerta y se escondió?

—Oh, la echaba de menos.

Kouki entra y me sigue por detrás, sin hacer alusión a los zapatos de Himari.

Tal vez piensa que son propiedad de Kanon.

Kanon entra y enciende el interruptor de la luz, luego pone las bolsas de supermercado sobre la mesa de la cocina. La expresión de Kanon es más rígida que la de hace un momento.

Kouki se dirige a la sala de estar y se agacha frente al televisor.

—Por cierto, coloqué por aquí algunos juegos que había comprado. ¿Te molesta si me los llevo?

—Hmm, no hay problema.

Ahora que lo pienso, no he tocado la consola de videojuegos desde que Kanon y Himari vinieron a casa. O, mejor dicho, apenas lo he hecho desde que me volví un hombre de oficina.

Después de terminar el trabajo estoy muy cansado como para ponerme a conectar el cable de la consola en el tomacorriente…

Miro hacia mi habitación, a poca distancia de Kouki, que está buscando los videojuegos.

Himari no está allí.

Pero el hecho de que sus zapatos están en la entrada significa que tiene que estar en algún lugar.

Lo suplico, por favor, que Kouki se vaya sin darse cuenta…

—Ah, cierto. ¿Aún tienes mi camiseta? Creo que también la dejé.

—¿Cómo es?…

En el intervalo en el que yo respondo, Kouki abre el closet.

—¡¿Uguaaaaah?! —grita y luego da un gran salto.

Inmediatamente sé la razón. Es porque Himari está acurrucada en un extremo del closet.

Puedo sentir como en un instante mi rostro pierde todo color.

Al mismo tiempo, Himari también tiene el rostro pálido y los ojos llorosos.

Estamos todos reunidos en la sala de estar, simplemente guardando silencio.

Kouki mira a Himari de arriba hacia abajo y luego en mi dirección.

—Niichan…

No tengo respuesta ante el llamado de Kouki, que se siente claramente como si dijera… «he visto algo muy malo».

Yuuri se ofreció a cooperar convirtiéndose en «cómplice», pero no necesariamente Kouki podrá decir eso en estas circunstancias.

Al contrario de su apariencia, Kouki es relativamente serio.

—Cuando la vi por primera vez, pensé que era un cadáver, y creí que mi corazón se detenía…

Esperen, ¿dijo cadáver?… Como sea, no tengo ninguna respuesta.

—Pero, cuando entré en la sala de estar, pensé ligeramente «¿hmm?». Eso es porque había dos futones.

Aún sigo sin nada qué poder responder.

No tenemos espacio en el armario para guardar los futones de Kanon y Himari, y los dejamos en la sala de estar doblados.

—Es decir que Kanon-chan también lo aprueba, ¿verdad?…

También Kanon cuando es llamada por su nombre no puede hacer más que agachar la cabeza, pareciendo incómoda.

Kouki mira a Himari, que está con la cabeza agachada y luego me mira a mí una vez más.

—Si se llega a saber, ¡probablemente lo reportarán como un delito,

¿sabes?!

No es «probablemente», es un delito. Pero eso lo he sabido muy bien desde el principio.

—Increíble, pensar que a Niichan le gustan las jovencitas…

… ¿Hmm?

—Más aún, viviendo juntos de manera tan abrupta…

¿Hmmm?…

—Además, no guardas ninguna discreción con Kanon-chan estando aquí, lo que no es solo un poco, sino bastante aterrador…

¿Hmmmmm?…

¿Esto…?

¿Acaso Kouki piensa que Himari es mi novia?

Pero pensándolo normalmente sería la primera respuesta a la que se llegaría. Normalmente, no se pensaría algo como que le estás dando refugio a una chica que se escapó de casa…

Incidentalmente, la mirada de nosotros tres se encuentra… Entonces asentimos ligeramente con la cabeza para que Kouki no pueda notarlo.

Es una señal que dice… «dejaremos que Kouki siga teniendo esa idea equivocada».

Ciertamente, es comunicación telepática. Una sola mente. He aquí los resultados de estar viviendo juntos por un mes.

—Bueno, qué puedo decir, no hay nada qué hacer si te has enamorado… Guardaré silencio con nuestros padres… Niichan, trata de que no se enteren de esto, ¿vale?

Sigo sin entenderlo del todo, pero me he salvado.

… Me pregunto si esto es realmente una salvación. Bueno, pretendamos que sí por ahora.

—Bueno, por ahora, déjame ver… ¿Qué tal si me la presentas?

Asiento con la cabeza y luego tueso ligeramente para recuperar la compostura.

—Comprendido. Ella es Himari. Es de la misma edad de Kanon…

—La misma de Kanon-chan —Kouki queda sorprendido. Entonces nos mira a Himari y a mí sucesivamente.

—Déjame ver. A decir verdad, Kanon y Himari son conocidas… ¿Cómo decirlo?, las cosas simplemente se dieron…

—¿Una conocida? Eh… ¿No estás molesta, Kanon-chan?

—Hmm, bueno… Más bien, estoy feliz de tener a Himari. Es que nunca he vivido junto con un hombre…

—Ah, de seguro, ¿no?… Ya veo…

Aunque nuestra explicación es ambigua, no vienen tsukkomis de parte de Kouki.

Probablemente, siente la atmósfera de «no indagues demasiado». Como sea, eso es de gran ayuda para mí.

—Eso, Kou-nii. Ya es hora de ponerme a preparar la comida…

—Ah, no es necesario que prepares para mí. Me voy en un rato.

—Ya veo, okey —después de decir eso, Kanon se dirige a la cocina.

—Yo-yo también voy a ayudar —diciendo eso, Himari acompaña a Kanon. Parece que iba a ser incómodo que se quedara, y creo que también es lo mejor para mí.

—Hmm… ¿Qué era lo que estaba haciendo?

Tal vez ha sido una situación tan impactante para Kouki que olvidó su objetivo original. Si yo estuviera en la posición opuesta, también lo habría olvidado.

Mientras se rascaba la nuca, Kouki me preguntó lo anterior.

Kouki saca su camiseta del clóset y se traslada a mi cuarto. Yo simplemente lo sigo.

—Entonces, niichan. Quiero decir, tengo curiosidad, pero también estoy preocupado… Sé que es una charla indiscreta. ¿Cómo te van las cosas?

—…

Inmediatamente, me hace una pregunta repentina con un susurro. Como era de esperar, tampoco puedo responder de inmediato.

—No lo hacen, ¿verdad? Ya sabes, Kanon está aquí.

—Bueno…, eso sería un delito… Por ahora vivimos normalmente.

Es bastante embarazoso hablar de estas cosas, incluso si es mentira… Pero lo aguantaré.

—Ya veo. Me gustaría decir que me alivia…, pero, honestamente, es difícil, ¿verdad?

—Bueno… Está el escusado, ya sabes…

—Sabía que sería así… Se daría fácilmente cuenta por el olor si es en la habitación. Ah, te aconsejo que nunca lo hagas en el baño. «Aquello» tiende a ponerse duro con el agua caliente… Tapé el drenaje del baño, y mi novia se enojó mucho conmigo por eso. Luego me dijo «¡eso significa que yo no soy necesaria, ¿eh?!», y, cuando le dije que se equivocaba, no me entendió. Aquello fue una verdadera carnicería… —Kouki lo dice mientras tiene una mirada distante, como si acabara de regresar del campo de batalla. Me transmite por completo «fue verdaderamente terrible».

—Lo recordaré, gracias…

«Especial cuidado con el drenaje del baño…».

La historia de cómo Kouki cavó su propia tumba queda grabada profundamente en mi cerebro.

—Entonces, niichan, Kanon-chan y Himari-chan, nos vemos. Despedimos a Kouki en la entrada.

Tal y como lo había anunciado, Kouki no hizo una visita larga.

—Ah, cierto, niichan. Tal vez ya lo has escuchado, pero nuestra madre está por salir del hospital.

—Eso me recuerda, dijeron que para finales de este mes, ¿eh? Pasaré por casa de ellos.

—Vale. Te veré la próxima vez. —Ondeando la mano para despedirse, Kouki deja el apartamento, aún con el ridículo malentendido de que Himari y yo estamos saliendo.

Eso ciertamente es de ayuda, pero, dicho esto, ¿cómo es que mi propio hermano no piensa que la situación de que yo salga con una chica de instituto es extraña?…

¿Es decir que para Kouki soy el tipo de persona que haría tal cosa? Eso me deja algo deprimido…

Después de cerrar la puerta, casi de manera simultánea dejamos salir un «¡uf!».

—Hace tiempo que no veía a Kou-nii, pero sigue siendo el mismo, ¿sabes?

—En efecto…

—Las cosas han terminado en un terrible lío, ¿no?… Lo lamento…

—No viene aquí a menudo, así que deberíamos estar bien. Es más, es la primera vez que viene desde que se fue.

—¿Es así?

Con un lapso de tiempo como este, Himari no debería estar aquí la próxima vez que Kouki venga.

Por lo que supongo que no habrá problema en ese punto. Además, más tarde le enviaré un mensaje recordándole que avise la próxima vez que venga.

—Pero, aun así, en términos de apariencia y personalidad, Komamura-san y su hermano son polos opuestos, ¿verdad?

—Cierto. Kazu-nii, estaría bien que te pusieras un poco más a la moda, como lo está Kou-nii. A lo menos, ponerte lentes de contacto.

—¡No me gusta eso de meterme los dedos en los ojos, ¿sabes?! Y también sería un problema arreglarme el pelo. Así estoy bien.

Y, sobre todo, no se me da eso de andar con una onda animada y divertida como Kouki.

Dicho eso, no es como si no me agradara ese tipo. Es que desde siempre ha sido así.

Pero el hecho de haberle mentido a Kouki dejó una espinilla dentro de mí.