Suzumiya Haruhi no Yūutsu (NL)

Volumen 1

Capitulo 2: Ella Es Asahina Mikuru-chan

Parte 1

Por lo que pasó después, mi presentimiento se hizo realidad.

Después de clase, Haruhi no salió corriendo del salón de clase como todos los días. Esta vez, tomó mi mano con fuerza y salió corriendo arrastrándome con ella, cruzamos los corredores, subimos las escaleras, y finamente nos detuvimos junto a la puerta que conduce a la terraza.

Esa puerta estaba cerrada con llave casi todo el tiempo, y las escaleras del cuarto piso parecían haber sido usadas como bodega temporal por el Club de Artes. Lienzos enormes, marcos de madera rotos, estatuas con partes rotas, y muchas otras cosas, se apilaban en las escaleras, haciendo casi imposible el paso, en un lugar que ya de por sí era bastante estrecho.

¿Que está tratando de hacer al traerme aquí?

“Necesito que me ayudes.”

Haruhi dijo esto agarrándome por la corbata. Con sus ojos fijos en la parte inferior de mi cabeza, daba la impresión de estar amenazándome.

“¿Ayudarte con qué?”

Fingí no tener idea.

“¡Ayudarme a crear un nuevo club!”

“Bueno, y dime, ¿Por qué tengo yo que ayudarte a hacer algo que se te acaba de ocurrir?”

“Porque necesito conseguir un salón para el club y algunos miembros, así que tú tienes que averiguar qué formularios tenemos que diligenciar para eso.”

Ni siquiera me estaba escuchando. Hice a un lado su mano con la mía.

“¿Qué tipo de club estás tratando de organizar?”

“¡Eso no importa! Lo importante es tener un club primero.”

Dudo mucho que la escuela nos deje formar un club sin conocer nuestras actividades.

“¡Escúchame bien! Cuando acaben las clases, irás a preguntar qué es lo que tenemos que hacer, y yo voy a ir a conseguir un salón para el club. ¿Está bien?”

¡NO!

Si hubiera respondido así, seguramente habría muerto en el acto. Mientras yo todavía estaba pensando cómo responder, Haruhi ya se había dado la vuelta y bajaba por las escaleras, dejando atrás aun pobre y confundido estudiante en aquel espacio polvoriento.

“…pero si ni siquiera te dije que sí…”

Bueno, decirle eso a una estatua de yeso fue totalmente inútil. Sólo pude salir caminando lentamente, pensando en cómo le explicaría todo eso a mis compañeros de clase.

Requisitos para formar una “asociación”:

Cinco miembros o más. Son necesarios un profesor que los supervise, un nombre para el club, un director, y un resumen de actividades u objetivos — que luego deberán ser aprobados por el Comité Ejecutivo del Consejo Estudiantil. Las actividades del club deben estar de acuerdo con las políticas escolares de impulsar el conocimiento y la creatividad. Basándose en los registros de las actividades y los resultados, el Comité Ejecutivo decidirá si la asociación es promovida al rango de “grupo de estudio.” Además, mientras sea una asociación, la escuela no proveerá ningún tipo de patrocinio económico.

No tuve que buscar a fondo ninguno de estos requisitos, ya que todos se encontraban claramente explicados en la parte de atrás del reglamento.

Lo de los miembros es fácil; podemos anotar a cualquier persona para completar el número, así que eso no será un problema. Un profesor que nos avale será más difícil de encontrar, pero creo que puedo arreglar eso. Respecto al nombre, cualquier cosa que no levante muchas sospechas servirá. Y la directora del club, sin duda, será Haruhi, claro.

Pero estoy dispuesto a apostar, que la lista de nuestras actividades u objetivos no va a estar, ni en lo más mínimo, de acuerdo con “las políticas escolares de impulsar el conocimiento y la creatividad.”

Claro que Haruhi no es del tipo de persona que se preocupa mucho por las reglas. Cuando sonó la campana indicando el final de las clases, Haruhi demostró su increíble fuerza bruta al agarrar la manga de mi chaqueta y arrastrarme fuera del salón a una velocidad increíble. Me tomó un gran esfuerzo asegurarme de no dejar mis cosas en el salón.

“¿A dónde vamos?”

Le pregunte porque, bueno, yo sí soy una persona normal.

“Al salón del Club.”

Haruhi, tan animada y llena de energía que apartó de una patada a todos los que se cruzaron en nuestro camino, respondió a mi pregunta con esa simple frase, y no volvió a abrir la boca. ¿Al menos podrías soltarme primero?

Después de atravesar el vestíbulo del primer piso, cruzamos hasta un edificio vecino y subimos las escaleras. Caminamos por un oscuro pasillo, y al llegar a la mitad, Haruhi se detuvo. Claro está, yo también hice lo mismo.

Había una puerta frente a nosotros.

Club de Literatura

Un gastado aviso con el nombre estaba pegado en esa puerta.

“Aquí es.”

Sin siquiera golpear, Haruhi abrió la puerta y entró en el salón sin pedir permiso. Por supuesto, yo iba detrás de ella.

Era un salón inusualmente grande, o quizás simplemente se veía así porque sólo tenía una mesa rectangular, unas sillas de metal, y un librero. Algunas grietas en el techo y las paredes mostraban lo viejo que era aquel edificio.

Como si fuera también parte de la habitación, había una niña sentada en una silla se metal, leyendo un libro muy grueso de pasta dura.

“Desde ahora, éste será nuestro salón del club.”

Haruhi abrió los brazos y anunció esto formalmente. Su rostro una vez más mostraba esa brillante sonrisa. ‘Si tan sólo sonriera de esa manera en clase…’ a pesar de que lo pensé, no me atrevía decirlo en voz alta.

“Espera un segundo, ¿Qué es este lugar?”

“Es el edificio de los clubes culturales y de arte. Aquí están los salones de pintura y de música para el Club de Artes y la orquesta. Los clubes y asociaciones que no tiene un salón fijo también realizan sus actividades en este edificio, se le conoce como el Complejo Antiguo. Y éste salón le pertenece al Club de Literatura.”

“¿Pero entonces qué pasó con el Club de Literatura?”

“Después de que todos los miembros de tercer año se graduaron en primavera, el club se quedó sin miembros. Como no se inscribieron nuevos miembros, iban a cancela el club. Por cierto, ella es una estudiante de primer año, y es el único miembro actual.”

“¡Entonces aún no lo han cancelado!”

“¡Pero casi! Un club con un solo miembro es lo mismo que uno vacío.”

¡Idiota! ¿Estás tratando de apoderarte de los salones de los otros clubes? Le di un rápido vistazo a la chica del Club de Literatura.

Tenía unos gruesos anteojos y el cabello corto.

Haruhi estaba gritando a todo pulmón. Pero aquella chica no había levantado la vista ni siquiera una vez. Excepto porque a veces pasaba las páginas con sus dedos, parecía absolutamente inmóvil, ignorando nuestra presencia por completo. ¡Esta chica también parecía muy extraña!

Le pregunté a Haruhi en voz baja:

“¿Entonces qué hacemos con ella?”

“¡Ella dijo que no había problema!”

“¿En serio?”

“Le pregunté durante el almuerzo. Le dije que necesitaba tomar prestado el salón, y dijo ‘adelante’, con tal de que la dejemos leer sus libros en paz. Ahora que lo mencionas, es un poco rara.”

¡Mira quién habla!

Esta vez, observé a la chica del Club de Literatura con más cuidado.

Tenía la piel clara y un rostro inexpresivo. Sus dedos se movían rítmicamente como los de un robot. Su cabello corto, que penas cubría levemente su rostro, hacía que desearas quitarle los anteojos para poder mirarla mejor. Daba la impresión de ser un maniquí de vitrina. En otras palabras, ¡Una chica rara y completamente inexpresiva!

Quizá notando que la observaba fijamente, la chica levantó un poco su cabeza y empujó levemente el puente de sus anteojos con un dedo.

Vi sus ojos profundos mirándome desde atrás de esos lentes. Ni sus ojos ni sus labios mostraban ninguna expresión en absoluto, casi como si fueran una máscara. Era muy diferente de Haruhi —su rostro básicamente no mostraba ningún tipo de emoción.

“Nagato Yuki.”

Su tono sugería que su nombre seguramente sería olvidado por casi todo el mundo apenas tres segundos después de escucharlo.

Nagato Yuki me observó por un momento; y luego como si hubiera perdido todo interés, dirigió su atención nuevamente hacia el libro.

“Hey, Nagato-san,” le dije, “Esta chica quiere usar tu salón para un club que ni siquiera tiene nombre todavía. ¿Eso te parece bien?”

“Sí.”

La mirada de Nagato no se movió del libro.

“Pero quizá te vamos a molestar mucho.”

“No importa.”

“¿Y si te expulsa de aquí?”

“Pueden hacerlo.”

Aunque respondió de inmediato, no dejó ver ninguna expresión. Parecía que de verdad no le importaba en absoluto.

“Muy bien, ya está decidido,” dijo de repente Haruhi.

Se escuchaba bastante animada, lo cual me dio un mal presentimiento.

“De ahora en adelante, nos reuniremos en este salón después de clases. ¡No vayan a faltar! ¡De lo contrario serán hombres muertos!”

Lo dijo con una sonrisa brillante como una flor de cerezo. Yo asentí con desgano.

¡Por favor, todavía no deseo morir!

Así que ya habíamos encontrado un salón para el club, pero todavía no teníamos nada para los formularios. Todavía no habíamos decidido un nombre para el club, ni qué actividades íbamos a realizar. Le había sugerido a Haruhi que pensara en eso primero, pero ella parecía tener una idea muy diferente.

“¡Todo eso podemos decidirlo después!” Dijo Haruhi casi gritando. “Ahora lo más importante es reclutar algunos miembros. Necesitamos al menos otras dos personas.”

¿Entonces ya incluiste a la pobre chica del Club de Literatura? ¿No estarás tratando a Nagato Yuki como una pertenencia del club, o sí?

“No te preocupes por eso. Pronto voy a reunir a más gente; ya tengo a alguien en mente.”

¿Cómo quieres que no me preocupe? ¡Ahora sólo has logrado preocuparme más!

Cuando terminaron las clases del día siguiente, después de rechazar la propuesta de Taniguchi y Kunikida de ir a casa con ellos, me arrastré lentamente hacia el salón del club.

Haruhi simplemente dijo “¡Ve tú primero!” y salió corriendo del salón con una velocidad que le habría servido mucho al Club de Atletismo. Iba tan rápido que me pregunté si acaso llevaba cohetes en los zapatos. No sabía si estaba apurada por reclutar algunos miembros, o si simplemente estaba excitada por haber dado un nuevo paso en su propósito de encontrar extraterrestres.

Por otro lado, yo apenas podía soportar el peso de mi maleta, así que caminé despacio hacia el salón del Club de Literatura.

Al entrar al salón del club, descubrí que Nagato Yuki ya estaba adentro, sentada en la misma posición, leyendo su libro. Me acerqué lentamente, pero igual que el día anterior, su mente estaba completamente ocupada con su libro, e ignoró mi presencia. ¿Todo lo que hacían en el Club de Literatura era leer? ¿Por qué estaba leyendo todo el tiempo?

Absoluto silencio.

“…… ¿Qué estás leyendo?”

Pregunté, incapaz de soportar ese silencio por más tiempo. Nagato Yuki respondió levantando un poco el libro y mostrándome la cubierta. Mis ojos sólo vieron un montón de palabras en un idioma extranjero; parecía algún tipo de novela de ciencia ficción.

“¿Es interesante?”

Nagato Yuki empujó sus anteojos hacia arriba, antes de responde con un tono vacío: “Único.”

Parece que respondería cualquier cosa que le preguntara.

“¿Qué parte?”

“Todo.”

“¿Entonces te gusta leer?”

“Mucho.”

“Ya veo……”

“……”

Silencio otra vez.

¿Ya me puedo ir?

Pensé en eso mientras dejaba mi maleta en la mesa. Justo cuando estaba punto de sentarme en una de las sillas de metal, la puerta se abrió de golpe, como si hubiese recibido una fuerte patada.

“¡Hey, siento llegar tarde! ¡Me tomó algo de tiempo atrapar a esta niña!”