Watashi, Nouryoku Wa Heikinchi De Tte Itta Yo Ne! (NL)

Volumen 13

Capítulo 99: El Regreso A Casa De Wonder Trio.

Parte 2

Después de que la princesa Morena regresó a casa, Wonder Trio guardó silencio durante un tiempo.

“Aún no tengo interés en permitirme convertirme en alguna concubina de la familia real…”.

“Hija adoptiva de una familia noble suena bastante bien, pero sé que yo misma no valgo tanto. Solo nos quieren como cebo para traer de vuelta a Adele a casa. Además, es fácil imaginar cómo podría ser tratada una chica de origen común entre un montón de nobles. E incluso si me trataran amablemente en la superficie, no hay forma de que todos me acepten en una vida de ocio…”.

“¡Lo mismo aquí!”.

Marcela, Aureana y Monika estaban todas de acuerdo.

Y así…

“¡¡¡Es hora de irnos de aquí!!!”

***

Al día siguiente, Morena esperó y esperó a que Trio llegara al palacio. Finalmente, su paciencia se agotó y se dirigió a la posada para encontrar…

“Esas chicas se fueron apresuradamente en medio de la noche”.

“¿Qué…?”.

Obviamente, la posadera no estaba en posición de negarle algo a una princesa, incluso en base a proteger la información personal de un cliente. Especialmente porque Morena había estado tan apurada que no se había molestado en disfrazarse, saliendo con un contingente de guardias… Por lo tanto, la posadera no dudó en compartir lo que sabía.

Ahora con más prisa, Morena se dirigió al gremio, yendo directamente a la recepción.

“W-Wonder Trio…”.

La empleada estaba suficientemente entrenada como para tratar a Morena de la misma manera que trataría a cualquier cazadora de rango F o miembro de Wonder Trio, sin importar el hecho de que estuviera vestida como princesa y acompañada por sus guardias.

“Dejaron una carta para ti…”.

Morena prácticamente arrebató el sobre de la mujer, rompió el sello con manos temblorosas y extrajo la carta de su interior. Escaneó rápidamente el contenido para leer…

Bajo sus órdenes, regresaremos a nuestra misión de buscar a la Vizcondesa Adele con Ascham. Nada qué reportar. Aún en servicio. Todas están bien.

“¡¡¡Lo han hecho de nuevoooooo!!!”

***

“Entonces, ¿qué camino deberíamos tomar?

¿Deberíamos regresar directamente con Adele?”

“No podemos correr de vuelta hacia ella, ¡eso sería embarazoso!”

“Bueno, ¿por qué no nos dirigimos al oeste, en dirección opuesta, para despistar a todos? Podemos hacernos más fuertes como cazadoras, lo suficientemente fuertes como para que Adele no pueda negarnos. Luego, después de hacer un viaje al oeste, regresaremos, nos infiltraremos en Brandel y nos dirigiremos a Tils. Es cierto que Adele es la razón por la que nos convertimos en cazadoras, pero eso no significa que no podamos convertirnos en cazadoras de pleno derecho por nuestra cuenta. Y supongamos que íbamos a seguir como cazadoras, sin importar si ella está con nosotras o no… Ella ya no tendría motivo para negarse a viajar con nosotras, ¿verdad?”

“¡¡¡Eso es!!!”.

Así pues, Wonder Trio se dirigió hacia el oeste. Pasaron por la casa de Mile, las tierras de Ascham y continuaron hacia el país al oeste que Pacto Carmesí había visitado una vez…

En su camino de regreso a la capital de Brandel, no aceptaron ninguna misión y se dirigieron directamente a su tierra natal. Durante todo el viaje, toda la práctica mágica que habían realizado se centró en verificar las habilidades de apoyo que habían aprendido de Mile, por lo que aún no habían lanzado hechizos de ataque a plena potencia.

Ni siquiera sabían que ahora tenían un gran número de nanomáquinas con una afinidad excepcionalmente alta que las rodeaban permanentemente, ni tenían idea de lo que eso significaría para ellas.

Una vez más, Mile no tenía idea de lo que había desatado…

***

“Por cierto, sobre este inventario”, dijo Marcela, volviéndose hacia sus dos compañeras con una expresión seria en su rostro. “Es increíblemente conveniente, así que podemos usarlo tanto como queramos cuando no hay nadie más cerca para vernos, pero frente a otras personas creo que es mejor que solo una de nosotras lo use a la vez. De lo contrario, causará un poco de conmoción si hay tres usuarias de magia de almacenamiento juntas…”.

“Es razonable”.

Wonder Trio comprendía los peligros de excederse. Aquellos que estuvieran al tanto de sus circunstancias podrían aceptar sus nuevas habilidades como una recompensa de la Diosa, pero eso no significaba que las personas no intentarían aprovecharse de ellas, merodeando y esperando obtener sus propios beneficios. Mientras tanto, aquellos que no estuvieran al tanto de su conexión con la Diosa nunca creerían que un solo grupo con tres usuarias de magia de almacenamiento se había reunido por casualidad. Las probabilidades de algo así eran astronómicamente bajas, por lo que era natural que supusieran que Trio estaba ocultando algún tipo de secreto.

Podrían pensar que habían descubierto algún método revolucionario para aprender magia de almacenamiento. O que tenían algún tipo de artículo especial, como una bolsa mágica. Algo heredado a través de sus líneas de sangre. Y así sucesivamente…

Había más de unos pocos nobles, miembros de la realeza, comerciantes y criminales que no dudarían en arruinar la vida de algún plebeyo para obtener ese secreto. Al menos podrían considerarlo un desperdicio tener a tres usuarias de magia de almacenamiento juntas en un solo lugar y obligar a las miembros de Wonder Trio a seguir diferentes direcciones, enviando a una a los altos mandos del gremio, a otra a la Corona y a la tercera al ejército.

“Si lo ocultamos por completo, no podremos usarlo para cosas como transportar las criaturas que cazamos. Sin embargo, debería estar bien si nos aseguramos de que solo una de nosotras lo use, incluso si la capacidad llama la atención. Entonces, en cuanto a quién de nosotras debería hacerlo…”, continuó Marcela. Respiró hondo y luego continuó con calma: “Creo que debería ser yo”.

“¿Qué?!”, Monika y Aureana se quedaron atónitas.

“¡No! ¡Una niña que pueda usar magia de almacenamiento sería un objetivo demasiado atractivo para bandidos y traficantes, es demasiado peligroso! Yo lo haré. De todas formas, es menos inusual que yo lo use, ya que soy hija de un comerciante y no una noble…”.

“No, debería ser yo. Tengo el estatus más bajo de las

tres, así que debería ser la que asuma ese peligro”.

Al escuchar los argumentos en contra de las otras dos, Marcela respondió con un tono inusualmente enojado: “¡Cualquier noble que empuje el peligro hacia un plebeyo es basura! ¿Acaso todas ustedes no conocen el concepto de noblesse oblige? Miss Monika, ¿me obligarías a considerarme un fracaso como noble? ¿Y tú, Aureana?”. Su mirada se movió entre las dos. “¡El estatus no significa nada entre nosotras!”.

Sin embargo, las otras dos argumentaron de vuelta.

“¡Eso es un doble estándar! ¡¿Cómo puedes decirle a Aureana que el estatus no significa nada, mientras usas tu propio estatus como justificación para tu argumento?! ¡Es bastante arrogante de tu parte!”, gritó Monika.

“Permítanme ofrecer un enfoque más lógico”, intervino Aureana. “Tengo menos habilidad mágica que las tres. Si estuviera usando magia de almacenamiento, eso explicaría por qué no tengo energía para usar muchos otros hechizos. Hablando en términos mágicos, no tengo mucho que ofrecer, por lo que esta sería una forma efectiva para que yo desempeñe un papel más útil en el grupo. Por otro lado, Miss Marcela, si asumes este rol, tu valor aumentará demasiado y cada vez más personas te buscarán, incluida la familia real y otros nobles de alto rango. Una joven noble sin perspectivas de matrimonio actual, que puede usar hechizos de ataque, tiene el favor de la Diosa y además es una usuaria de magia de almacenamiento. Nunca podrías escapar. ¿Estás realmente bien con eso?”.

“Uh…”.

Marcela no era una mala argumentadora, pero claramente estaba fuera de su liga al enfrentarse a las fuerzas combinadas de Monika, la hija de un comerciante, y Aureana, con su inteligencia natural. No pudo argumentar con su lógica. Sin embargo, todos tienen ciertas cosas por las que nunca cederán. Para Marcela, esta era una de ellas.

Finalmente, Marcela sacó un as bajo la manga. “¡He tomado mi decisión como líder del grupo!”. “¡Guh!”.

Nunca antes Marcela había utilizado esa carta. Pero todas sabían que las decisiones del líder del grupo eran ley. Un grupo de caza no era algún tipo de club recreativo. Si se sentaban a discutir todo hasta llegar a un acuerdo o al menos a una decisión mayoritaria, serían rápidamente eliminadas. Si un miembro del grupo discrepaba vehementemente con las decisiones del líder, tendría que abandonar el grupo. Estas eran las reglas claras y estrictas de un grupo de caza.

Las otras dos se quedaron en silencio, incapaces de decir algo. Luego, después de unos momentos de debate interno…

“Entendido. Aunque preferiría no entenderlo…”.

“Lo mismo digo”.

Aparentemente, habían decidido aceptar el juicio de Marcela… o más bien, el mandato de su líder del grupo.

“Ahora bien, solo por si acaso, repasemos el hechizo de evacuación de emergencia que se me ocurrió anoche”, propuso Aureana de repente, rompiendo la atmósfera tensa.

“¿Eh?”.

“Bueno, vas a asumir todo este nuevo peligro, así que he pensado en una técnica que podemos usar en caso de que te secuestren o necesites escapar por alguna otra razón… aunque acabo de pensar en esto y aún no he investigado ni probado completamente el concepto”.

Al  ver  que  Monika  y  Marcela  prestaban  toda  su atención,  Aureana  continuó:  “Cuando  estemos operando por separado, si alguna de nosotras está en peligro o es capturada…”.

Las dos esperaron pacientemente a que terminara.

“… simplemente métanse en el inventario”. “¿¿Qué??”.

Sus dos compañeras cazadoras lucían completamente perplejas.

“No pasa el tiempo adentro. Por lo tanto, no necesitarán comida, agua ni siquiera aire. No importa cuánto tiempo tengan que quedarse adentro, no tendrán que preocuparte por el dolor o el aburrimiento de esperar. Entonces, si están en peligro, simplemente métanse en el inventario y esperen a que una de las otras dos las saque. De hecho, ni siquiera tendrán que esperar, ya que solo se sentirá como un momento para quien esté adentro… De todos modos, cada vez que estemos operando por separado, todas debemos aceptar la responsabilidad de verificar una vez al día para asegurarnos de que nadie esté dentro del inventario”.

“¡¡¡Eres una genio!!!”, las otras dos exclamaron.

“Bueno, eh”, dijo Monika, “obviamente eres una genio. Pudiste pasar el examen de ingreso a la beca especial, que es superdifícil…”.

“Eso es muy cierto…”, agregó Marcela, mientras las chicas se reían.

“Sin embargo, hay algo a lo que debemos prestar mucha atención”.

“¿Qué cosa?”.

“Bueno, si todas nos metemos dentro sin darnos cuenta de que las demás ya están adentro, entonces…”.

“¿Entonces?”.

“Entonces no habría nadie que nos saque y quedaríamos atrapadas allí para siempre. Y como el tiempo nunca pasa adentro, no podríamos sacarnos a nosotras mismas tampoco…”, explicó Aureana.

“ ”.

Las otras dos palidecieron.

“De acuerdo, a menos que estemos desesperadas, deberíamos revisar adentro antes de entrar nosotras mismas”, añadió Aureana. Con este pensamiento, las otras dos parecieron recuperarse ligeramente. Sin embargo…

“Ah”, dijo Marcela suavemente.

“¿Qué sucede, Lady Marcela?”, preguntó Monika con curiosidad.

“Si una de nosotras viajara sola a una tierra lejana, y una de las otras que se quedara atrás se metiera en el inventario, podrían viajar a otro país al instante. ”.

“Ah”.

“Y luego, cuando se haya terminado la misión, ambas

podrían meterse y regresar a casa. ”.

“…”. “ ”.

“ ”.

“¡¡¡Esto es esa magia de teletransportación

extradimensional de las historias!!!”.

“¡¿Por qué se te ocurrió siquiera eso?! ¡¡¡Te estás pasando con tus ideas!!!”.

“Perdónenme…”.