Tensei Shitara Slime Datta Ken (NL)

Volumen 15

Capitulo 2: Poder Desatado

Parte 3

En lugar de preocuparse más por eso, decidió tomar medidas. Como había hecho con Veldora, creó un conjunto de cuerpos separados parciales para lanzar 11 rayos de luz a la vez—su ataque de cañón nuclear. Al mismo tiempo, los once rayos también desataron otra ronda de Aliento Ardiente. Este ataque de calor de múltiples etapas y 22 partes tenía suficiente temperatura para vaporizar fácilmente un asteroide. Si Rimuru sobrevivía a esto, entonces claramente el calor no funcionaba con él.

Los resultados fueron un poco difíciles de tragar para ella. Los rayos de calor, desplegados en ángulos convergentes para evitar cualquier escape, dispararon contra Rimuru—pero todos fueron repelidos por el escudo de luz que conjuró.

¡Maldita sea! ¡Lo bloqueó con un mínimo movimiento absoluto—como si lo hubiera calculado a la perfección!

Velgrynd ya no estaba disfrutando esto. Ver a Rimuru ser inmune al calor la enfureció, pero peor aún, ese ataque de hace un momento fue casi una completa pérdida de tiempo. Si lo hubiera agotado, aunque sea un poco, su gran ventaja en magículas habría hecho que su victoria fuera inexpugnable… pero en este momento, Rimuru casi no consumía energía. A este ritmo, se dio cuenta Velgrynd, muy bien podría terminar agotándose ella misma primero.

Claramente era hora de ponerse seria. Pero había un acto más desagradable en juego. Rimuru le había lanzado una mirada a Velgrynd al comienzo de todo esto, pero después de eso, ni siquiera se molestó en mirarla. Su enfoque estaba completamente en Veldora, y prácticamente no le prestaba atención a su hermana. Además, no estaba usando ningún escudo contra Veldora, sino que evadía todos sus ataques. Solo cuando la evasión era imposible reaccionaría con un ataque similar para cancelarlo—pero con Velgrynd, ese escudo de luz era todo lo que necesitaba para repeler todo.

Sí, podía usar Percepción Absoluta para controlar todo lo que lo rodeaba, pero claramente la estaba ignorando. Casi le declaró a Velgrynd que no la veía como una amenaza. Eso, más ofensivo que cualquier otra cosa, fue lo que desencadenó su ira.

¡Haré que se arrepienta de menospreciarme!

Así que la orgullosa Velgrynd decidió desatar el ataque más poderoso que tenía.

Con una mirada de odio a Rimuru (quien aún la ignoraba), Velgrynd comenzó a conjurar su poderosa fuerza mágica, recorriéndola a través de su cuerpo. El apoyo brindado por Raguel, combinado con la aceleración simbolizada por su propio calor, podría funcionar en paralelo para calentarla a la fuerza—en otras palabras, aumentar su rendimiento. Los resultados permitieron a Velgrynd ir miles de veces más rápido que la velocidad del sonido—la velocidad física más rápida del mundo.

Entonces, ¿qué sucede cuando el objetivo de este poder es alguien que no sea ella misma? Como una forma de vida espiritual con resistencia a ataques físicos, Velgrynd no tiene problemas para soportar esta nueva actuación—pero, ¿alguien más podría resistirlo? La respuesta es no. No importa qué tipo de forma de vida sea, ningún cuerpo físico puede soportar una aceleración forzada continua. Lo mismo es cierto para los espirituales—incluso los pensamientos pasajeros se convierten en energía, lo que finalmente conduce al colapso térmico.

Eso es exactamente para lo que fue diseñado.

“¡Prepárate para que tu cuerpo se pudra y no quede ni un solo trozo de carne! ¡¡Aceleración Cardinal!!” Era su técnica más poderosa, eclipsando incluso el Abrazo Ardiente.

Aceleración Cardinal contenía toda la fuerza y autoridad de Velgrynd. Ella lo elaboró en secreto para Velzard, en preparación para la batalla final que deben librar en algún momento en el futuro; normalmente nunca lo desperdiciaría con un simple rey demonio, pero estaba demasiado enfurecida para dejar que eso la detuviera.

Con un rugido del dragón carmesí, una ola de perdición se dirigió hacia Rimuru. Este último golpe simbolizaba el orgullo del Dragón de las Llamas en su máxima expresión, capaz de hacer que toda la materia se derrumbara en un instante. Podía enterrar a cualquier enemigo, a una velocidad que hacía imposible que nadie la esquivara. Para cuándo Rimuru, ocupado enfocándose en Veldora, se diera cuenta de lo que estaba pasando, sería demasiado tarde. Su mente no trabajaría lo suficientemente rápido para comprender lo que acababa de ocurrir antes de que dejara de existir en este mundo.

Desearía poder hacer que se arrepienta de haberme subestimado, pero ahora no tendrá tiempo para eso, ¿verdad? Ese es el único arrepentimiento que tengo.

Con esta confianza absoluta, Velgrynd miró hacia adelante para ver cómo funcionaba.

¡¿…?!

En cambio, se quedó boquiabierta al ver a Rimuru de pie allí, ileso.

No… No puede ser…

Dudaba de sus propios ojos. No había absolutamente ninguna manera de que alguien pudiera soportar un golpe completamente letal e imposible de evitar como ese sin un rasguño. Incluso el mismísimo rey demonio Guy Crimson—incluso su hermana Velzard el Dragón de Hielo—podrían haber sido derribados por él, o al menos así lo creía Velgrynd.

“… ¿Estás ileso? Eso es imposible. ¡Mi Aceleración Cardinal funciona contra todo tipo de barrera y habilidad defensiva! Si lo recibiste tan fácilmente, ¿qué hiciste?”

Velgrynd claramente estaba perdiendo la calma. Si hubiera cancelado el ataque de alguna manera, eso era una cosa, pero ninguna barrera podría haberlo desviado. La realidad de todo esto era demasiado para lidiar. Lo que afectó gravemente su compostura.

“Eh”, respondió Rimuru. “Bueno, estuvo cerca, sí, pero dada la impulsividad de la misma, fue bastante fácil de devorar, ¿sabes?”

Esto fue, de hecho, enteramente obra de Ciel, quien se dedicaba a manejar a Velgrynd. Funcionó exactamente como se calculó; la asistente de Rimuru estaba intentando que Velgrynd lo atacara. Ciel ponía a Rimuru por encima de todo lo demás, haciendo lo que se le ordenaba sin interponerse en su camino, y eso era suficiente para acorralar a Velgrynd. Ejecutó Analizar y Evaluar sobre la naturaleza del dragón, seleccionó una respuesta efectiva y la puso en acción.

Un ejemplo de esto era el escudo de luz que Rimuru había estado usando, que tenía un efecto especial en los poderes de Velgrynd. Ciel, la suma de todas sus habilidades integradas, tenía todas las habilidades definitivas de Rimuru bajo su control. Una de esas era Beelzebub, Señor de la Gula; Ciel acababa de usar su habilidad de depredación, obteniendo una comprensión inmediata de la aceleración cardinal de Velgrynd y la habilidad de aislamiento para capturar y desterrar el ataque en el espacio complejo—una versión evolucionada del estómago de Rimuru.

Ese ataque ciertamente era capaz de destruir a Rimuru. No podría defenderse con métodos normales, e incluso el poder computacional de Raphael no habría podido lidiar con eso. Pero Ciel no era Raphael. Ya no era una mera habilidad, se había convertido en una presencia de una dimensión diferente del Señor de la Sabiduría. Y no importa cómo pueda atacar el enemigo, siempre que Ciel pudiera determinar la naturaleza del ataque, no era un problema—algo que simplemente demostró en la forma en que manejaba a Beelzebub.

Una vez que se invocaba el Asilamiento, todo lo que quedaba era Absorber la energía en el Espacio Complejo. Cuando se usaba así, la habilidad Espacio Complejo de Beelzebub se transformaba en una medida defensiva tan fuerte como la Defensa Absoluta de Uriel, Señor del Pacto.

La sorpresa de Velgrynd era comprensible. Después de todo, todo había terminado antes de que el mismo Rimuru tuviera la oportunidad de pensar Oh, mierda, estoy en problemas. Aun así, Rimuru respondió desafiante a la sorpresa de Velgrynd—él no quería que ella se diera cuenta de que no era nada que él mismo hubiera hecho.

Pero el plan de Ciel no terminó ahí. Capaz de comunicarse con Rimuru más fluidamente que nunca, incluso podría usar el arte de la conversación como un arma para perseguir a Velgrynd. Pero hablando de Velgrynd…

¡Tienes que estar bromeando! ¿Lo ‘devoraste’? ¡¿Simplemente te comiste Aceleración Cardinal, mi mayor habilidad?!

No podía comprender lo que quería decir Rimuru. Aún estaba en medio de la batalla, pero estaba demasiado aturdida para moverse—y aunque fue solo por un momento, fue un error fatal.

“Así que lamento molestarte mientras todavía estás sorprendida de que tu increíble ataque haya sido un fracaso, pero no olvidaste que estamos en una pelea aquí, ¿verdad?”

Ya era demasiado tarde cuando preguntó. Ciel era implacable en sus acciones, y Rimuru le dio todo su respaldo.

Cálculo de la cuenta mágica de Velgrynd completo. Después de tener en cuenta la naturaleza y las características del sujeto, determiné que es posible encerrar al objetivo en prisión aislada durante varios cientos de segundos. ¡Activando!

Antes de que Velgrynd se diera cuenta, un círculo mágico en capas la había rodeado.

Esta era una habilidad compuesta, que combinaba la habilidad definitiva Prisión Infinita de Uriel con Aislamiento Espacial. Ciel lo había creado hace un momento, exclusivamente para usarlo contra Velgrynd, quien ahora estaba atrapada en él.

El espacio de combate había sido completamente computado por Ciel—la temperatura, la humedad, la gravedad, las corrientes de viento, la luz del sol, los pulsos de todos los seres vivos dentro de él. Todo estaba en la palma de la mano de Ciel, y sin importar lo que hiciera Velgrynd, le sería imposible salir de este espacio.

La luz cegadora de este encarcelamiento aislado declarado por Ciel hizo que Velgrynd se sintiera mareada.

¿Cómo…? ¡¿Cómo puede ser tan fácil para él?!

El cuerpo carmesí del dragón tembló de humillación por haber sido golpeado. Pero sin importar lo que intentara, el Aislamiento ni siquiera vaciló.

“Está bien, siéntate ahí por un rato, ¿de acuerdo? Jugaré contigo después de liberar a Veldora”. Las palabras colocaron un signo de exclamación final en la derrota de Velgrynd.

Está bien. Admitiré la derrota esta vez. Pero aún tengo Existencia Paralela. Y ya sea que se trate de un encarcelamiento aislado o no, ¡puedo rastrear un corredor de almas fuera de aquí!

Velgrynd tenía un movimiento más que podía hacer. Significaría renunciar a su cuerpo actual, pero la mayor parte de su energía restante se canalizaría de regreso a la réplica que colocó junto a Rudra como seguro. Era brutalmente humillante, pero aún no era el final para ella.

Lentamente, con cautela, se puso a trabajar, asegurándose de que Rimuru no se diera cuenta. Poco a poco, comenzó a transferir magículas a través del corredor de su alma… sin darse cuenta de que eso era exactamente lo que Ciel quería.

Tengo que reconocérselo a Raphael. Ciel, quiero decir. Me pareció un poco deprimida, así que le puse el nombre por capricho… y supongo que la hice más feliz de lo que creí que sería.

Después de todo, sus anteriores reacciones mecánicas hacia mí eran mucho más suaves y más humanas. Siento que ha mejorado mucho. Estaba en muy buena forma ahora, me pregunto qué le pasó justo antes. Había entrado en modo de batalla automática en mí varias veces en el pasado, pero ahora estaba activando habilidades y haciendo todo tipo de cosas—la escala de todo era totalmente diferente.

Incluso Velgrynd, que me parecía tan abrumadora, no era rival para eso. Su sugerencia—hacer que activara su habilidad más potente, luego esperar a que su conteo mágico disminuya justo después—era una estrategia perfecta. La combinación de mis habilidades y la forma en que ella respondió a ciertas cosas fue lo que hizo que funcionara… lo que hace que suene fácil, pero no tengo idea de cuánta potencia informática se necesitaría para hacerlo posible. Con suerte, éramos superados en conteo mágico después de todo, así que, si queríamos enjaular a este oponente superior, necesitábamos un encarcelamiento aislado construido de manera eficiente y con solo los elementos en los que puedo disfrutar de una ventaja. Llámalo una ‘prisión calculada’ que creé con mi compañera—eso fue lo que necesitó Ciel para obtener una victoria completa.

El quid de esta operación residía en si podía o no resistir el ataque de Velgrynd. El cómputo de Ciel decía que podía, y confiaba en eso—pero si ella malinterpretaba eso, también sería mi fin. ¿Por qué confié en ella? Simple. Estaba tratando con Veldora y le dije a Ciel que estaba a cargo de Velgrynd. Sabía que podía hacerlo—y estuvo a la altura de mis expectativas perfectamente, incluso mejor de lo que había imaginado. Ciel usó mis habilidades más hábilmente que yo para cumplir con el trabajo.

Como se esperaba de mi compañera. Ahora estaba más impresionado con Ciel que nunca.

Entonces, gracias a una bendición inesperada, Ciel ahora era más confiable que nunca para mí. Pero no podía olvidar mi objetivo. Antes de que Velgrynd hiciera otro movimiento, necesitaba liberar la mente de Veldora. Entonces, ¿cuántos segundos podemos retenerla, exactamente?

Incluso si Velgrynd se enfureciera violentamente, el encarcelamiento aislado se mantendrá por un total de 200 segundos más. Sin embargo, no creo que debamos preocuparnos por eso.

¿Por qué no?

Incluso tres minutos y poco más eran algo por lo que estar agradecido, pero Velgrynd sigue siendo una gran amenaza. No puedo ignorarla todo ese tiempo…

No, como se predijo, Velgrynd actualmente está tratando de escapar. Sabía que podía usar un corredor del alma para transferir energía lejos de ella, así que consideré la posibilidad de que huyera sin preocuparse demasiado por esta réplica que teníamos delante.

¿Ya veo? O creo que sí. Si se pudiera hacer alguna réplica en su cuerpo ‘real’, ¿no habría una gran necesidad de forzar su salida de este encarcelamiento aislado? O tal vez lo hubo… y por eso Ciel creó una escapatoria para que Velgrynd intentara explotarla. Así es—Velgrynd mostró demasiado su mano, jugando con la Existencia Paralela y sin dudar en usarla contra las tres demonios y Veldora. Había estado monitoreando todo eso, así que no había escasez de material para que Ciel lo analizara.

La Existencia Paralela de Velgrynd no podía producir un suministro inagotable de clones. Ciel debe haber medido su conteo mágico hasta el punto de saber la cantidad máxima que podía contener—y una vez que lo supiéramos, entenderíamos cuántas réplicas más necesitábamos antes de que ella fuera derrotada.

Ciel, mientras tanto, trabajó hacia atrás desde allí. Vio que Velgrynd probablemente tenía una póliza de seguro a mano, por lo que la animó a escapar en ella. Probablemente haría lo mismo si tuviera un poder tan útil, pero mis réplicas no tenían acceso a las habilidades definitivas. Un poco molesto, pero estaba dispuesto a admitir la derrota allí.

Al final, la Existencia Paralela aparentemente omnipotente solo podría usarse como señuelo o contra un oponente más débil. Quiero decir, sigue siendo un seguro extremadamente útil y un buen activo dependiendo del oponente—puedo pensar en algunas formas divertidas de usarlo. Pero simplemente no parecía efectivo contra alguien de igual o mayor rango. Pero Ciel fue quien expuso esa debilidad para que todo el mundo la viera. Como, en realidad estoy un poco asustado por su capacidad informática. Todo iba exactamente como Ciel quería, como si estuviera prediciendo el futuro.

El progreso que ha hecho es un poco exasperante, pero, de cualquier manera, Ciel es mi compañera. Lo mejor es dejar de preocuparse por cosas superfluas y continuar con el objetivo en cuestión. Ciel había conquistado a Velgrynd, una de los más fuerte Dragones Verdaderos, y seguro que no me iba a quedar atrás.

“Está bien. Pero por si acaso, voy a poner todo mi poder contra Veldora ahora mismo para asegurarme de terminar en menos de 200 segundos. ¡Dame una mano, Ciel!

¡A sus órdenes!

Yo—o Ciel y yo, supongo—nos enfrentamos a Veldora, nuestra misión principal. Ciel me había ganado un tiempo precioso—no mucho, tal vez, pero para nosotros, bien podría haber sido infinito. Nunca lo superaría si no lo aprovecháramos al máximo. ¿Podemos hacerlo? Esa no era la pregunta—lo estábamos haciendo.

Esa fue la determinación en mi mente cuando reanudé mi ataque a Veldora.

Liberar a Veldora, luego derrotar a Rudra. Esos eran mis objetivos—y es lo que quería hacer, no solo porque Guy me lo pidió.

El nacimiento de Ciel me había sorprendido tanto que, sin anticiparlo, volví a mi estado mental normal. Hace mucho tiempo que mi serenidad había regresado a mí… pero eso no significaba que mi ira se había aplacado. Esa ira, decidí, la guardaría hasta que pudiera desquitarme con el Emperador Rudra. Pero primero lo primero.

Entonces, ¿cómo me acercaría a Veldora? Bueno, para empezar, estaba tratando de hablar con él. Hablar de ‘gobernar’ a Veldora era bastante fácil, pero estábamos tratando con un Dragón Verdadero con cantidades gigantescas de energía—debe tomar un esfuerzo increíble. Asumir la voluntad de una forma de vida espiritual es una de las tareas más difíciles que se me ocurren, de hecho.

Como lo vi, había varios tipos de subyugación como esta. Uno estaba basado en el encanto—hacías que el sujeto siguiera tu voluntad, corazón y alma. Otro estaba basado en la coerción, quitándoles el libre albedrío y obligándolos a obedecer. Un tercero era la dominación total, donde el objetivo ni siquiera era consciente de que estaba siendo subyugado. La lista seguía y seguía.

Yuuki llevó a cabo una dominación total sobre sus súbditos, pero en el caso de Kagali, se basó más en la coerción—y eso era con lo que estaba lidiando Veldora también.

Esta coerción también podría funcionar en varios niveles. El objetivo puede conservar su libre albedrío, pero aún verse obligado a seguir órdenes de mala gana, o puede que se le elimine por completo su libre albedrío, convirtiéndolo en un robot incuestionable. No me parecía que a Kagali le quedara libre albedrío en este momento, pero ¿qué hay de Veldora? Todas las formas de vida espiritual tenían voluntades increíblemente fuertes, algo que no pensé que pudiera borrarse tan fácilmente, así que decidí que valía la pena intentar llamarlo.

Pero la resistencia de Veldora era demasiado feroz.

Supuse que sus órdenes eran eliminar al enemigo (es decir, a mí), pero simplemente era cruel, tirando toda restricción por la ventana. Incluso con Ciel manejando a Velgrynd por mí, Veldora solo estaba demostrando ser un rival difícil. Todavía tenía a mano mis variadas habilidades tipo tormenta, por lo que era posible cancelar sus movimientos—pero con el poder fuera de lo común que presumía, el solo hecho de hacer eso mantuvo mis manos ocupadas. En otras palabras, no estábamos realmente en un estado de ánimo conversacional.

En eso estábamos cuando decidí dejar que Ciel me defendiera. Lo de Controlar la Probabilidad era complicado, pero confiaba en que Ciel lo manejaría. Ahora comienza el verdadero trabajo, pensé mientras intentaba acercarme a Veldora. Vendavales de viento volaban a mi alrededor, pero mi ubicación era tan tranquila como el ojo de un huracán. Era, como, realmente alentador. Todo lo de Veldora estaba siendo compensado, y Ciel ni siquiera estaba tan frenética como yo hace un momento. Apenas tocó mis magículas—y lo mejor de todo, estaba en una forma increíblemente buena.

Por supuesto. Los demonios que te sirven te han estado enviando apoyo basado en la Cadena Alimenticia a través de sus corredores del alma.

¿Era eso? Sentí que me estaba volviendo más fuerte—pero gracias a mis otros aliados, me defendía contra Veldora.

Una vez que me di cuenta de eso, no había forma de que pudiera fallar. Después de finalmente llegar a un lugar justo en frente de Veldora, aproveché la oportunidad para llamarlo.

“Lamento retenerte, Veldora. ¿Me reconoces?”

Sin respuesta. Bueno, dejó escapar un rugido de tormenta eléctrica, pero aparte de eso, nada.

Le arremetí con mi puño, inconscientemente irritado. Pero, como cualquiera podría haber esperado, eso no lo detuvo. El ataque habría necesitado un elemento de fuerza mágica, no solo física, o de lo contrario nunca lo dañaría mucho. Pero eso estaba bien para mí. Mi objetivo era despertar a Veldora, no matarlo— por ahora, solo le daría una buena paliza.

Así que continué golpeando a Veldora en la cara tan fuerte como pude. En realidad, estaba demasiado cerca para que funcionara gran parte de su repertorio de ataque; muchos hechizos y habilidades terminarían golpeándolo también. Siendo controlado de esta manera, podría seguir sacándolos de todos modos sin preocuparse, pero pensé que Ciel se encargaría de eso.

Un golpe. Otro puñetazo. Luego una patada. Pero Veldora solo rugió en respuesta.

¿Qué opinas sobre usar Predación en Veldora y encerrarlo en tu Espacio Complejo?

Una sugerencia bastante aterradora de Ciel, pensé. Si esa era una pregunta de sí/no, me inclinaba un poco hacia sí… pero ¿era posible algo así?

No es un problema. Beelzebub está bajo mi mando, así que, si recibo la orden, puedo ponerlo en acción de inmediato.

Ciertamente es… confiable, supongo. Era gracioso pensar que Beelzebub, Señor de la Gula—esta habilidad definitiva todopoderosa—comenzó hace mucho tiempo con Depredación, una habilidad de slime específica de la especie. Gracias a eso, no podría haber estado mejor orientado hacia mí; manejarlo siempre era una simple. Y ahora que Ciel lo había optimizado aún más, pensé que también funcionaría en Veldora.

Ahora que yo era un slime-rey demonio—un slime demoníaco, por así decirlo—Beelzebub podía ser invocado desde cualquier parte de mi cuerpo. De hecho, ya ni siquiera necesitaba hacer contacto físico con mi objetivo. Sin embargo, tomaba más poder cuanto más cerca estaba de la otra parte, así que ahora que estaba a quemarropa de Veldora, esperaba un rendimiento completo.

De todos modos, mi mente estaba tomada.

“¡Gracias por causarme todo este maldito problema, Veldora! ¡Deja de hacer que me preocupe por ti todo el tiempo!”

Tan pronto como lo grité, inmediatamente intenté devorar a Veldora a través de Beelzebub. Pero entonces:

「¡Kwah-ja-ja-ja-ja! Solo un pequeño error de mi parte. ¡Perdóname! 」

Escuché una voz en mi cabeza que realmente no debería haber estado escuchando.

「Veldora, ¿verdad?」

「De hecho, soy yo. ¡Veldora el Dragón de la tormenta, tu antiguo aliado! 」

No pudo haber sido una trampa. Estaba actuando demasiado tonto para que lo fuera. Esa voz despreocupada, sin un pensamiento en su mente—no podría haber sido nadie más.

「Oye, ¿entonces estás consciente?」

「Sí. En realidad, separé mi núcleo lo más rápido que pude. No puedo hablar físicamente, ¡pero todavía tengo mi ingenio sobre mí! 」

Ajá. Así que él está allí, de acuerdo.

Si Beelzebub se abría paso a través de su cuerpo, ¿eso hacía posible la comunicación telepática a través de su ‘corazón’? De cualquier manera, me alegré de que estuviera a salvo—pero ahora estaba enojado por otras razones.

「Entonces, ¿qué estás esperando? ¡Recupera el control de tu cuerpo! 」

Toda esa preocupación, y él estaba tratando esto como un día de campo. ¿Tenía alguna idea de lo mucho que me estaba volviendo loco? Me sentí justificado en quejarme un poco al respecto.

「¡Hubiera hecho eso hace mucho tiempo si pudiera! Pero escúchame, Rimuru. ¿No crees que deberías calmarte un poco y ser un poco más cuidadoso? 」

Como si necesitara que me lo dijera. Además:

「¡Cállate! ¡Si ibas a estar tranquilo con esto, no habría hecho algo tan loco como enfrentarme a dos Dragones Verdaderos a la vez! 」

No necesitaba que nadie me lo señalara. Ahora que estaba más tranquilo, en realidad estaba un poco impresionado de haber sobrevivido. Pero no podría haber sido demasiado cauteloso allí. Nada sobre tratar con Dragones Verdaderos era ‘cuidadoso’ en primer lugar. Pero mientras pensaba en esto, Veldora seguía dándome consejos alegremente.

「¡Oh! Cuidado con esto—¡Estoy a punto de lanzar un Relámpago Oscuro! 」

「¡Deja de proporcionar comentarios como una transmisión deportiva!」

Peor aún, no lanzó Relámpago Oscuro en absoluto; en su lugar, era Viento que Llama a la Muerte. Ciel lo canceló por mí y estoy bastante seguro de que podría haberlo esquivado de todos modos, pero ¿por qué diablos me estaba dando un consejo falso?

「¡¿A eso lo llamas relámpago?! ¡Era Viento que Llama a la Muerte! ¡Estaba a punto de matarme! 」

Mis quejas fueron recibidas con una excusa entre risas.

「¡¿Hmm?! ¡Oh, lo siento! ¡Kwah-ja-ja-ja! Parece que todavía tengo que obtener una comprensión completa de mi cuerpo. Puedo sentirme activando una habilidad lo suficientemente bien, pero no las distingo」

Así que no estaba siendo útil. Mi enemigo también tenía Controlar Probabilidad, lo que significaba que probablemente era más seguro simplemente ignorar las predicciones de Veldora.

「Está bien. No es necesario que hagas eso, así que ¿puedes callarte por mí? No sería muy divertido si confiara en tonterías tuyas en este momento crítico y me mataras, ¿verdad? ¡Estoy realmente decepcionado de ti! 」

Esto hizo que Veldora comenzara a entrar en pánico un poco.

「¡Espera, Rimuru, espera! Estoy haciendo lo mejor que puedo aquí. ¡Déjame ayudarte un poco! 」

Estaba defendiendo su punto desesperadamente, pero no había mucho para respaldar sus afirmaciones. Tuve que poner la razón primero aquí, no la emoción. Además, ya conté con su cooperación. Solo escuchar la voz de Veldora hizo mucho para aliviar mis preocupaciones.

「Bueno, estoy feliz de que estés bien」 Veldora respondió con su habitual risa enérgica.

「¡Kwah-ja-ja-ja-ja! ¡Por supuesto que lo estoy! ¡Soy el más fuerte de todos los dragones! 」

Cierto. Eso era un alivio. Pero entonces:

「Además, no fue Rudra quien cortó nuestro corredor del alma, sino yo mismo. ¡Nunca he perdido realmente una batalla! 」

¿Eh? ¿De qué está hablando este tipo…?

「¿Qué quieres decir?」

「Oh, es simple. Cuando estaba ocupado enfocándome en el ataque de ese hombre, Kondo, Rudra trató de ejercer control sobre mí. Estaba furioso por esto—¿los tres me atacan a la vez, incluida mi hermana? ¡Es injusto! Quería evitar el peor de los casos, así que a regañadientes tomé la decisión de cortar

el corredor」

Me parece, Dragón Poderoso-sama, que estaba siendo un poco descuidado, ¿no es así? No existe tal cosa como ‘justo’ o ‘injusto’ en el campo de batalla…

「¡Deja de actuar como si eso fuera tan noble de tu parte! ¿Qué demonios estabas haciendo? ¡Te he estado diciendo constantemente que nunca bajes la guardia! 」

「¡Kwah-ja-ja-ja-ja! ¡Nunca pensé que estarías sermoneándome en estas circunstancias! 」

Veldora parecía estar disfrutando esto sin fin. Era espantoso. Espantoso y sin sentido de tolerar, así que seguí adelante.

「¿Así que la decisión que tomaste fue cerrar nuestro corredor del alma?」

「De hecho. Razoné que la dominación de Rudra no solo me habría afectado a mí, sino también a ti a través del corredor」

¿Así que se apresuró a apagarlo para protegerme? Bueno, si esa es la historia, realmente no podría estar enojado con él.

「Muy bien. ¡Genial! Bueno, en ese caso, ¡quédate quieto mientras me ocupo de esto! 」

「¡Muy bien! ¡No tengo ninguna preocupación en el mundo! 」

Es bueno escuchar eso.

「Correcto. Te tendré libre en un momento, así que aguanta un poco」

「¡Kwah-ja-ja-ja-ja! Qué maravilloso escucharlo. ¡Confiaré en eso, amigo mío! 」

Entonces supe lo que le pasó a Veldora. Había perdido el control sobre su propio cuerpo, pero su núcleo aún estaba intacto. Sin embargo, no tenía el poder para recuperar el control en este momento, así que tendría que solucionarlo por él. No esperaba problemas—si su núcleo estaba bien, podría resolver el resto.

Aquí había una idea:

“Ciel, si tenemos el núcleo de Veldora en la mano, ¿podríamos revivir su habilidad definitiva Veldora, Señor de la Tormenta?”

No es un problema. Se ha conservado toda la información relacionada con la habilidad, por lo que una vez que se vuelve a conectar un corredor del alma al núcleo de Veldora, se puede restaurar la habilidad definitiva.

Bueno, eso fue fácil. En resumen, todo lo que tenía que hacer era consumir a Veldora frente a mí y recuperar su núcleo. Ahora solo tenía que hacer mi movimiento—pan comido.

De acuerdo, es hora de derrotar a este enemigo—Veldora el Dragón de la tormenta, ¡el más fuerte de la tierra!

Ahora teníamos un camino claro para resolver este problema, así que decidí terminar con esto rápido.

Aún había dos problemas en juego: mi límite de tiempo y la ubicación de su núcleo. En términos de tiempo, todavía tenía mucho de eso. Habíamos estado usando Acelerador de Pensamiento para minimizar el tiempo dedicado a esa última conversación, por lo que solo habían pasado unos segundos de tiempo real. Incluso con el ataque y la defensa que tuvieron lugar en el medio, tenía más de tres minutos para trabajar.

El problema era la ubicación del núcleo. Estaba dentro de su cuerpo, lo suficientemente cerca como para poder comunicarme con él a través de la telepatía, pero identificar sus coordenadas exactas era bastante complicado. Si accidentalmente lo destruyo en el proceso, todo estaría perdido—esta misión sería un fracaso, y Veldora pasaría por el proceso de reencarnación. Normalmente, nunca tendrías que preocuparte por esto—el núcleo de la criatura es la parte más protegida. Pero en el caso de Veldora, su núcleo se separó de su cuerpo principal, dejándolo bastante indefenso. Un golpe descuidado en el lugar equivocado podría terminar siendo un golpe directo, lo que sería más que desafortunado. Lo liberaría del control de Rudra, estoy seguro, pero también eliminaría la personalidad actual de Veldora, y tampoco restauraría nuestro corredor del alma. Eso había que evitarlo a toda costa.

Si pudiera devorar a Veldora de una sola vez, no tendría que preocuparme por nada de esto. Sin embargo, lamentablemente no era posible tragarlo entero, incluso con mi Espacio Complejo—no sin su consentimiento. Podría intentar debilitarlo y reducir un poco su conteo mágico, o podría probar un poco más de depredación con él, teniendo cuidado de no dañar el núcleo en el camino… Hmm…

Ahora que lo pensaba más, dañar activamente el cuerpo de Veldora parecía imposible. Tal vez golpearlo en la cabeza un par de veces, como lo hice antes, era algo aterradoramente peligroso. Entré pensando que sería difícil dañarlo, mucho menos derrotarlo, y ahora me parecía una figura frágil.

Por supuesto, un rayo o dos de magia ni siquiera lo rayarían, y un puñetazo o una patada al azar tampoco lograrían mucho. Solo cuando agregas los efectos de una habilidad definitiva a estos ataques, el daño se vuelve más sustancial. Incluso Desintegración, la magia sagrada más poderosa, solo podía hacer un poco de daño contra el gigantesco Veldora. La durabilidad de estos Dragones Verdaderos no era una broma—es lo que los convertía en Dragones Verdaderos.

Entonces, sí, creo que algunos ataques son lo suficientemente seguros, pero nunca se sabe qué sucederá si golpeas a alguien en el lugar equivocado. Eso era doblemente cierto ahora que Veldora no tenía control sobre su propio cuerpo. Simplemente no se sabía lo que haría.

Por lo tanto, hasta que supiera la ubicación del núcleo de Veldora, era más seguro no lanzar ningún ataque. Eso significaba que solo tenía un camino a seguir. Necesitaba poner mi nariz en la piedra de afilar, usar Depredación para devorarlo poco a poco y esperar encontrar el núcleo en el camino. Sería una carrera contra el tiempo, pero no tenía otra opción.

Solo tres minutos… pero, de nuevo, tres minutos podrían ser todo el tiempo del mundo para mí. Archivando el problema del tiempo en el fondo de mi mente, encendí a Beelzebub a su máxima potencia y comencé a abrirme camino hacia Veldora.

Mi cuerpo volvió de humano a forma de slime—no mi forma líquida habitual, sino una especie de masa viscosa de forma irregular. Este era Ciel optimizando mi forma de acuerdo con la depredación hostil en la que estaba involucrado. Cuanta más superficie de contacto tenía con mi objetivo, más eficiente era el proceso.

Así que mi cuerpo en constante cambio se comió la superficie del cuerpo de Veldora, extendiéndose a su alrededor. Pero el objetivo era demasiado grande. No importa cuánto me extendiera, en realidad era solo un punto desde el punto de vista de Veldora. Era una tarea abrumadora, pero no podía rendirme ahora.

Tirando toda precaución al viento, aceleré mi consumo, activando Consumir Alma mientras buscaba su núcleo. Esto también habría sido imposible sin la ayuda de Ciel. Mirando esa increíble fuerza que exhibió antes, comencé a pensar que tenía un poder computacional en una escala mucho más allá de la que tenía Raphael. Supongo que no solo los monstruos evolucionan cuando los nombras.

Gracias a Ciel, las cosas en general iban bastante bien en este momento, pero no estábamos completamente libres de obstáculos. Para ser exactos, tenía un dolor intenso. El cuerpo de Veldora había detectado lo que estaba haciendo y se resistía a toda costa. El aura del Dragón de la Tormenta estaba causando que mi cuerpo se desintegrara. Yo trataba de consumirlo mientras él intentaba aplastarme—y la batalla apenas comenzaba.

Dolor, calor y sufrimiento. Se suponía que no podía sentir dolor, pero ahora estaba recorriendo todo mi cuerpo. El calor no debería haber significado nada para mí, pero sentí que alguien me estaba sumergiendo en agua insoportablemente caliente. Y luego el sufrimiento agonizante—algo que nunca antes había sentido en este mundo.