Dungeon Busters (NL)

Volumen 3

Capítulo 1: Los Cruzados de las Mazmorras en Japón

Parte 3

[Mazmorra de Yokohama — Ezoe Kazuhiko]

En la planta 5 de la Mazmorra de Yokohama, nos encontramos cara a cara con el mismo monstruo que había pululado por la planta 3 de la Mazmorra de Sendai — los sabuesos. Su pelaje negro como el carbón hacía que pareciera que los sabuesos infernales ardían en llamas negras mientras lanzaban bolas de este fuego de ébano por la boca.

Amane hizo descender su látigo que viajaba tan rápido como el sonido, cortando el aire. El sabueso infernal esquivó el látigo que viajaba tan rápido como el sonido, pateando la pared para tomar velocidad mientras volaba justo sobre el escudo de Masayoshi.

Sin embargo, esto entraba dentro de las previsiones de los cuatro cazadores. Rinko e Hisato se colocaron a ambos lados del sabueso infernal que saltaba hacia ellos, con sus armas preparadas.

“¡Aaah!”

“¡Yaah!”

Golpeado simultáneamente por un báculo y una espada, el sabueso infernal se convirtió en humo antes de poder aterrizar.

Condujo al enemigo hacia donde quería que fuera usando el látigo antes de matarlo en el aire mientras no podía correr. Este patrón de ataque era el resultado de la cooperación entre los cuatro.

“¿Y? ¿Qué opinas de luchar contra un monstruo de rango C por primera vez?” pregunté.

Los cuatro se miraron entre sí antes de que Amane, la mayor, hablara.

“Como era de esperar, no se pueden comparar con los monstruos de rango C, tanto en términos de poder como de velocidad. Cuando éramos de rango E, aún podíamos enfrentarnos a monstruos de rango D, pero en este caso, luchar contra monstruos de rango C siendo todavía de rango D habría sido bastante imprudente. Incluso como estamos ahora, sólo conseguimos ganar porque cooperamos y atacamos juntos. Creo que la historia sería diferente si hubiéramos intentado luchar uno a uno. En el futuro, también tendremos equipos. Por eso nos haces practicar las peleas en equipo, ¿verdad?”

“Así es”, dije. “Cada uno de ustedes dirigirá un equipo de seis personas y seguirá luchando para despejar las mazmorras. En estos momentos estoy reclutando a posibles nuevos cazadores que se unirán a ustedes.

Decidiremos los equipos y haremos que todos se reúnan a finales de marzo, cuando nuestro cuartel general esté finalmente terminado. Hasta entonces, consideraré las reglas y los diferentes criterios que utilizaré para evaluarlos. Cuando terminemos de limpiar la mazmorra de Yokohama, espero que también me hagan llegar sus opiniones.”

Cuando llegara marzo, estaríamos bastante ocupados con la mudanza. También sería cuando llegarían los cruzados enviados por el Vaticano. Por eso deseaba mucho terminar con la Mazmorra de Yokohama en esta semana. Después de eso, estaba previsto un viaje para todos los empleados de Dungeon Busters. Tenía la intención de aprovechar esa oportunidad para anunciar mis planes para el futuro de Dungeon Busters.

“¡El siguiente está ahí!”

Un lebludor había aparecido. Luchar con los miembros del Rango C se convertirá en una gran experiencia para ellos. Hagamos que luchen en la Planta 5 durante todo el día.

***

[Ministerio de Defensa — Ishihara Yukie]

El contrato de Dungeon Busters estipulaba que la mazmorra de Yokohama debía estar despejada antes de la siguiente oleada de emergencias de mazmorras, prevista para el 6 de marzo. ¡Sin embargo, han trabajado muy rápido! Puede que incluso la despejen antes de que termine febrero.

Además, cuatro de sus miembros ya habían alcanzado el rango C. Por lo que había oído en secreto de mi amigo, los soldados gamerianos que habían sido elegidos para formar una unidad especial todavía se estaban demorando en el rango D. Haber obtenido el título de “Rompedor de Límites de Especies” seguramente se convertiría en un criterio importante para los aventureros en el futuro.

<El piso 5 tiene monstruos parecidos a perros, lebludors. El piso 6 tiene monstruos parecidos a los osos, los grizzlies del diablo. El piso 7 tiene monstruos tipo león… Espera, ¿cómo se lee esto? Teufel…>

“¿Teufel löwe? Eso significa león diabólico en alemán, ¿verdad? No estoy muy seguro de por qué su nombre está en alemán…” Dije. “¿Y qué hay de la planta 8?”

En la pantalla apareció la cara de un hombre junto con la carta de monstruo que acababa de escanear. La segunda imagen que mostraba el hombre era la de un camino recto, similar al que había en el piso inferior de la Mazmorra Sapporo.

<La Mazmorra de Yokohama tiene ocho pisos en total. El piso inferior parece ser el mismo que el último que vimos. En cuanto al relieve del techo…>

Las imágenes cambiaron. Sin pensarlo, me incliné hacia delante. Por lo que pude ver, un monstruo que parecía el diablo estaba a punto de ser tragado por líneas arremolinadas, con una expresión de angustia. Era bastante difícil ver los detalles con claridad, ya que no había color, pero el relieve parecía mostrar algún tipo de ser demoníaco justo antes de ser destruido.

“Esto es bastante extraño. ¿Qué crees que representa?”

El hombre de la pantalla se encogió de hombros. Me dijo que lo único que podía decir por ahora era que si suponíamos que cada una de las 666 mazmorras tenía un relieve diferente en su piso inferior, seguramente entenderíamos la historia a medida que fuéramos despejando más mazmorras. Estuve de acuerdo.

Todavía quedaban muchas otras mazmorras. ¿Cuánto tiempo tardaríamos en despejarlas todas? Ya habían pasado cuatro días desde que los últimos reclutas de Dungeon Busters habían alcanzado el rango C. Aunque todavía teníamos mucho tiempo hasta la fecha límite, no podía evitar sentirme impaciente.

“Sólo has tardado un día en limpiar la mazmorra de Sapporo después de empezar tu investigación, pero parece que estás empleando más tiempo en esta. Estás tardando alrededor de un día por piso. ¿Hay alguna razón para esto?”

<Eso es porque estaba seguro de que íbamos a ser capaces de despejar la Mazmorra Sapporo desde el principio. No estoy tan seguro de esto. Cuatro de mis miembros han alcanzado el rango C muy recientemente. También voy a ir más despacio para que se acostumbren a limpiar mazmorras. No te preocupes. Cuando terminemos con la mazmorra de Yokohama, les daré a los cuatro un equipo para que lo dirijan. Todos trabajarán de forma independiente para limpiar las mazmorras después de ese momento. El número de cazadores también crecerá gradualmente. Me aseguraré de que seamos capaces de limpiar todas las mazmorras antes de la fecha límite.>

Parecía que había percibido mis preocupaciones. Si un solo equipo intentara limpiar todas las mazmorras, tendría que mantener un ritmo de una mazmorra cada cuatro días para terminar antes del límite de diez años. Si se tiene en cuenta el tiempo de viaje entre las mazmorras, era prácticamente imposible. Por eso, Dungeon Busters pretendía convertirse en un clan que fomentara varias partidas. Probablemente no pasaría mucho tiempo antes de que numerosos grupos fueran enviados por todo el mundo para limpiar mazmorras de forma independiente.

<Todavía estamos en la etapa inicial. Por ahora, no me importa incluso si nuestro ritmo es tan malo como una mazmorra al mes. Lo que realmente importa es permitir que los busters desarrollen sus habilidades de cooperación y ayudarles a convertirse en aventureros de pleno derecho.

Estandarizar el proceso de entrenamiento y poner en marcha un sistema que permita entrenar continuamente a los nuevos busters es lo más importante ahora mismo.>

“Tú eres el que construyó esta organización. Te lo dejo a ti. Mañana desafiarás a la planta baja, ¿verdad? Ten cuidado.”

Después de cortar la comunicación, me dirigí a la sala de reuniones, donde actualmente mantenía conversaciones para poner en marcha un nuevo sistema para el Ministerio de Defensa.

***

[Mazmorra de Yokohama — Ezoe Kazuhiko]

Completar Yokohama en un día era ciertamente posible si lo deseaba. Sin embargo, quería evitar apresurarme en las peleas con mis miembros habiendo alcanzado recientemente el Rango C. Me había llevado mucho tiempo superar el Rango B después de alcanzar el Rango C, e incluso Akira había necesitado más o menos un mes entero. Incluso El Rompedor de Límites de Especies seguían siendo personas. Como tal, se necesitaba tiempo para acostumbrarse a luchar — y en general a vivir — dentro de las mazmorras.

Justo fuera de la habitación del Guardián, me detuve para explicar lo que sabía a los otros cuatro.

“Muy bien. Estamos en el piso inferior. Al final de este camino recto nos espera el núcleo de la mazmorra. Lo mismo ocurría en Sapporo. El núcleo de la mazmorra estará protegido por un guardián que será del mismo rango o de un rango superior al de la propia mazmorra. Ten en cuenta que, aunque diga un guardián, en realidad puede haber varios.”

Para estar seguro, también materialicé a Akane, Emily y Liu Fengguang. El guardián de la mazmorra Sapporo — una mazmorra de rango D — había sido de rango C. Era muy posible que aquí apareciera un guardián de rango B.

Tras comprobar que todo estaba listo, Rinko empujó la puerta. Las dos puertas se abrieron lentamente.

“Parece que sólo hay un Guardián, eh. ¿Es una hiena?”

En el fondo de la sala, un monstruo que se parecía mucho a una hiena estaba durmiendo, acurrucado en el suelo. Se levantó lentamente, demostrando ser bastante grande, fácilmente más de dos metros de altura. Fijando sus ojos rojos en nosotros, mostró sus colmillos.

“Es una hiena del infierno”, dijo Akane, explicando qué tipo de monstruo era. “Es un monstruo de rango C, pero es capaz de invocar a familiares de rango D que lucharán a su lado. Mientras el líder de ojos rojos no sea derrotado, seguirá llamando a más y más familiares.”

“Entiendo. Rinko, Masayoshi, Amane, Hisato. Por ahora, los cuatro deberían intentar luchar por su cuenta. Si la situación se descontrola, les ayudaremos.”

Despejar una mazmorra sin ayuda les daría un impulso de confianza en sí mismos. Esperaba que pudieran terminar esto solos, si era posible. Sin embargo, la hiena parecía más dura de lo que había esperado en un principio.

Varios círculos blancos aparecieron en el suelo, y en pocos segundos, más de diez hienas más pequeñas aparecieron.

“Las hienas realmente cazan en manada, eh. Cuatro contra doce…” Hice una pausa. “¿Es demasiado para ustedes?”

“¡Por favor, deja que los cuatro lo intentemos por ahora! Si se vuelve peligroso, tienes que venir a ayudarnos sin embargo, ¿de acuerdo?”

“¡Ya vienen!”

Masayoshi levantó su escudo. Dos grupos de cuatro hienas trataron de rodearlo por ambos lados, mientras que el resto lo atacó de frente.

“¡Bloquearé el lado izquierdo con mi magia!” gritó Hisato. “¡Rinko, Amane, por favor, encárguense de las de la derecha!”

Hisato utilizó Flecha de Fuego, el hechizo que había aprendido de Emily, deteniendo eficazmente a las hienas en su camino. En cuanto a Masayoshi, se las arregló para rechazar a los tres monstruos que se habían abalanzado sobre él, desviándolos hacia la derecha, donde les esperaba el látigo de Amane. Aunque hubiera un grupo de ellas, las hienas seguían siendo sólo monstruos de rango D. Cuatro aventureros de rango C trabajando juntos podrían enfrentarse a ellas sin problemas.

Sin embargo, en cuanto Rinko y Amane acabaron con los monstruos de su lado, apareció otra oleada de la nada. Parecía que el líder sólo podía convocar hasta once monstruos a la vez.

“¡Rinko! ¡Eres la más rápida entre nosotras! ¡Distraeremos a los pequeños, así que ve a matar al jefe!”

“¡Entendido!”

Masayoshi llevaba un Saco de Monstruos, las hienas fueron todas inmediatamente atraídas hacia él, que combatió usando sus habilidades Golpe de Escudo y Golpe. Rinko aprovechó para acercarse al jefe de una sola vez.

“¡¡¡ROOOOARRR!!!”

Justo cuando Rinko iba a golpear, el jefe rugió. Levantó su pata delantera derecha, haciendo un movimiento circular.

Rinko cambió inmediatamente a una postura defensiva. Un fuerte impacto sonó mientras docenas de pequeños cortes aparecían de repente por todos sus brazos y piernas.

“¿Se cortó por la fuerza del impacto que reverberó en el aire?” pregunté.

“No, no es eso”, dijo Emily. Se había limitado a observar a los cuatro mientras luchaban, pero su expresión era ahora sombría. “Impregnó sus garras con magia de viento. Es impresionante que haya sido capaz de bloquearlo a pesar de no haber visto nunca este ataque, pero creo que hará que luchar contra la hiena infernal en combate cuerpo a cuerpo sea bastante difícil…”

“Bueno, supongo que iré a ayudar”, dije tras pensarlo unos segundos.

Mientras agarraba el Zantetsuken, Akira puso su mano en mi hombro y negó con la cabeza. Comprendí inmediatamente la intención de Akira con sólo mirar su cara. Estaba diciendo que aún podían luchar y que simplemente debíamos vigilarlos todo lo que pudiéramos.

Tras bloquear el primer ataque, Rinko había cambiado de estrategia y ahora esquivaba todos los golpes, probablemente utilizando la evasión. En cuanto a los otros tres, habían sufrido algunas heridas, pero no dejaban de derrotar a los monstruos.

“Entiendo…” dijo Rinko. “Creo que lo tengo. No puede seguir invocando familiares mientras usa magia de viento, y…”

Rinko cargó directamente contra el jefe. En respuesta, levantó su pata una vez más, liberando una ráfaga de magia de viento. Rinko se agachó y se deslizó por el suelo, esquivando con éxito la cuchilla invisible y clavando su bastón justo en la boca de la hiena infernal.

“¡Sólo puede atacar en línea recta!”

El bastón de Rinko atravesó justo el cráneo del monstruo, salpicando de sangre todo el lugar.