Chitose Kun Wa Ramune (NL)

Volumen 4

Capítulo 1: Piscina Extraescolar Y Coletas Descubierta

Parte 8

“¿Por qué?”

“Debe ser algo relacionado con el club de béisbol, ¿verdad? Yo también quiero oírlo.”

Yūsuke miró nuestra interacción y sonrió amargamente. “Es exactamente porque está relacionado con el club de béisbol que no quiero que un extraño lo escuche.”

Haru resopló. “¿No me oíste el otro día? Ahora soy yo quien juega a pillarlo.”

“Eso es sólo jugar por diversión, ¿cómo se puede comparar…?”

Esta vez le interrumpí. “Lo siento, pero mi compañera no se echará atrás una vez que insista.”

Viendo a Yūsuke apretar ligeramente los dientes, mi corazón también sintió un cosquilleo.

—Compañera. Así le llamaba yo.

“… De acuerdo, si tú lo dices.”

Después de movernos a una zona menos concurrida, Yūsuke abrió la boca.

“No sé cómo hacer una pequeña charla previa, así que iré directo al grano. Volvamos a jugar juntos al béisbol.”

En realidad, en cierto modo me lo esperaba.

“No voy a repetir las palabras de Haru, pero ¿no te lo dije el otro día? Mis sentidos se han embotado, ahora soy inútil.”

“Sí, pero eso es sólo si realmente dejas el béisbol.” “También te hablé de eso, ¿no?”

Después de decir eso, Yūsuke agarró mi brazo con fuerza. “Si realmente te rendiste, ¿por qué tienes las manos así?”

“¡——!”

Aparté mis manos por reflejo, porque mi apego estaba escrito en ellas.

A Yūsuke no le importó y continuó. “Esas son unas manos que balancean un bate cientos de veces al día. Después de que los callos desaparecen, nuevos callos crecen de nuevo y la mano se vuelve rígida.”

Como era de esperar, es difícil engañarle, ¿verdad? Incluso Atomu pudo ver a través de mí una vez. “Tú…” Murmuró Haru.

Le di una palmadita en su pequeño hombro, como diciéndole que no era nada. “De alguna manera, eso se convirtió en un hábito.”

“Aunque sea un hábito, significa que no has olvidado la sensación de golpear la pelota con un bate.”

Yūsuke dio un paso adelante y cerró la distancia. Di un paso atrás.

“Basta, Yūsuke. ¿Cómo puedes obsesionarte con un tipo que se fue hace un año justo antes del gran torneo de verano?”

“Esa es exactamente la razón.” Yūsuke me dio su celular. “Echa un vistazo.”

Tomé el teléfono y amplié la imagen que aparecía en la pantalla. “… ¿Esta es la lista de jugadores?”

La foto mostraba una larga lista de nombres nostálgicos. Quizá fueran los que presentaron para el torneo de este verano.

“Entonces, ¿quieres que te felicite por conseguir nuevos miembros o algo así?”

“Ve hasta el final.”

“Me importa un bledo, ya me he ido, así que no me interesa.”

Más bien, dado que sólo había once jugadores en el club de béisbol, mientras que el número máximo de participantes era de dieciocho, todos los nombres de los miembros debían figurar ya en la lista.

Dicho esto, es poco probable que su intención fuera hacerme saber quiénes se habían convertido en jugadores habituales del número uno al nueve.

No podía entenderlo, así que me desplacé por la pantalla y una columna de texto que me resultaba familiar me llamó la atención.

“¿Qué… es esto?”

—El duodécimo jugador inscrito allí fue Chitose Saku.

¿Es la lista del año pasado?

No, si era así, ¿cómo podía estar en la lista el nombre de un jugador de primer año que yo no conociera? Y el número de dorsal también era diferente.

Mientras me sentía confundido, Yūsuke agarró mi hombro firmemente. “¿Lo entiendes? ¡El entrenador puso tu nombre en la lista de jugadores!”

Thud, sentí un golpe como si me hubieran dado con una pelota en la cabeza.

“Escucha Saku. Sabes que no es el tipo de persona que comete un error o hace algo así por sentimentalismo. Debe estar muy arrepentido.”

Las palabras y el entusiasmo de Yūsuke fluyeron hacia mi corazón, haciendo que latiera más rápido.

“Si estás dispuesto, podemos luchar juntos este verano. Por favor, vuelve. Danos la oportunidad de enmendar los errores que cometimos el año pasado, las promesas que no pudimos cumplir.”

Ah, este tipo era el mismo de siempre. Siempre es tan sincero y apasionado. “… Detente.”

“¿Eh?”

“—¡¡DEJA DE BROMEAR, BASTARDO!!”

Un cobarde sincero, apasionado y desesperado.

Pisé con fuerza las planchas de acero bajo mis pies, apartando su mano de mi hombro. El cubo que había tirado rodó erráticamente por el suelo.

Podía sentir cómo el cuerpo de Haru se encogía a mi lado. Sin embargo, no estaba de humor para preocuparme.

“¿Luchemos juntos este verano? ¿Para cumplir nuestra promesa? Tú, que hiciste la vista gorda en aquel momento y decidiste callarte junto al resto, ¿vienes y te atreves a pedirme eso?”

“Lo… lo siento.”

“Si realmente lo sientes, ¿por qué sólo hablas de esto ahora?” “Eso es porque… no estaba seguro de si aún querías jugar al

béisbol.”

“¡Incorrecto! Sólo actúas ahora porque el entrenador dejó esa lista de jugadores. ¿Crees que si me pones el cebo delante, volveré al club moviendo el rabo? ¿Que podríamos fingir que todo esto nunca sucedió y jugar al béisbol felizmente? ¿De verdad crees que voy a seguir tratándote como a un compañero?” Apreté fuertemente el puño derecho. “¡No… no me fue fácil tomar esa decisión!”

Un cúmulo de emociones que siempre superaba me recorrieron el cuerpo. Como para desahogarlas, di un puñetazo al muro de hormigón—

“¡¡Chitose!!” En un instante, Haru corrió hacia mi brazo. “¡Eres un atleta, tu mano dominante no puede estar lesionada!”

“—¡Suéltame!”

“¡Idiota, no te soltaré aunque me mates!” Me miró con fiereza, su menudo cuerpo aferraba mi mano con todas sus fuerzas. “¡No hagas un acto tan patético!”

La sinceridad de las palabras de Haru me golpeó justo en el corazón. Fue como si me hubieran abofeteado con esas palabras, y volví en mí.

Haru me miraba con firmeza. Era deslumbrante, y fuera de lugar. La luz del sol pareció borrar la oscuridad y mi mente se calmó.

Solté un gran suspiro y relajé los brazos. Sonreí al recordar lo que había pasado una tarde cuando estábamos en los columpios. Ella me ha vuelto a salvar.

Incluso cuando me enfrentaba a Yanashita, sólo usaba mi mano izquierda.

“Gracias Haru, ya estoy bien.” “¿En serio?”

Para tranquilizarla, que seguía dudando, le respondí con mi tono familiar y desenfadado.

“Sí. Además, había algo parecido a una pequeña magdalena tocándome hace un momento.”

“…. ¿Pan ♡ de ♡ melón ♡?”

“Vamos, no fue tan grave, basta con un pequeño bollo de crema.” “—Así que esas tenemos, voy a romper esto.”

“¡No, es mi mano dominante!”

Está bien.

Vuelvo a ser el de siempre.

Al congelado Yūsuke que estaba atado por sentimientos de remordimiento, lástima, un poco de superioridad, decepción y esperanza, le volví a hablar.

“Lo siento, perdí un poco los nervios. Tomé esa decisión basándome en mi propia estética, y no te lo reprocho a ti ni a nadie. De todos modos, habría ocurrido tarde o temprano. Así que olvídate del ex miembro del club, avanza hacia el Koshien apasionadamente como atleta de secundaria.”

“Saku…”

“He tomado una decisión. Nunca volveré a batear para el equipo de béisbol de la Secundaria Fuji.”

Recogiendo el cubo y el cepillo que estaban tirados, empecé a alejarme.

Mi antiguo compañero se quedó quieto, incapaz de decir nada.

Mi actual compañera se apresuró a colocarse a mi lado izquierdo, como abrazándome, y me dijo: “¡Chitose, vamos a limpiar la piscina hasta dejarla reluciente!”

“¡Hagamos que brille como el verano!”

La cigarra chirriaba ansiosamente y soplaba un fuerte viento.

Me froté los ojos con la mano derecha, mientras el polvo seco del suelo se precipitaba directamente a mi cara.

* * *

Al salir de clase, el fondo de la piscina, que se había vaciado previamente, seguía agradablemente húmedo, reflejando una luz cristalina como el hielo raspado azul hawaiano.

Como dijo Kura-sensei, la piscina no estaba tan sucia como debería.

¿Era necesario vaciar específicamente el agua y luego limpiarla? Para ser honesto, estaba confundido, pero supongo que era una cuestión de procedimiento.

Me remangué los pantalones. Haru también se quitó las zapatillas y los calcetines.

Aunque iba descalza, sus piernas sanas, tonificadas como las de un miembro de un club deportivo, parecían asombrosamente frescas, quizá porque la superficie de piel expuesta era mayor de lo habitual.

Siguiendo las instrucciones que habíamos aprendido, empezamos a limpiar por los lugares altos, como el borde de la piscina y el trampolín. Rociamos agua con la manguera conectada al grifo, fregamos con un cepillo de cerdas duras y, para las zonas que estaban especialmente sucias, utilizamos un polvo que no sabíamos si era detergente o desinfectante.

Cada vez que Haru se inclinaba hacia delante, la parte trasera de su falda se levantaba ligeramente, y los tirantes azul aguamarina de su ropa interior emergían claramente de la parte trasera de la camiseta que se ceñía a su cuerpo.

Sin embargo, parecía ignorar por completo su aspecto.

Verla limpiar la piscina con diligencia me hizo sentir un poco culpable por echarle un vistazo de vez en cuando.

Entonces, después de unas dos horas de limpiar en serio y pulir cada centímetro del fondo de la piscina, los bordes del cielo empezaban a adquirir un tono rojo intenso y brillante.

“Kura-sensei definitivamente no tendrá nada de que quejarse después de ver esto.”

Al oír mi comentario, Haru soltó una risita. “Así es. Es tan agotador como entrenar.”

Se aflojó la corbata mientras hablaba y se abanicaba con la mano por dentro de la camisa.

Tomé una botella de Pocari Sweat que había junto a la piscina y se la lancé.

La botella dibujó un semicírculo perfecto, Haru la atrapó con una mano.

Inmediatamente abrió el tapón y engulló la bebida, una gota de agua se derramó por el borde de su boca y corrió por su cuello, mezclándose con el sudor.

Verano, después del colegio, piscina, chica con coleta.

Esta escena es tan buena como un anuncio.

“Gracias por lo de antes.”

Después de decir eso, Haru dejó la botella y me miró fijamente. “Resulta que eres una persona muy impulsiva, señor.”

“Siento mostrarte mi lado malo.”

“Bueno, eso es mucho mejor que mostrar una sonrisa en esa situación.”

Aunque no conocía los detalles de la situación, consiguió tocar un punto sensible de mi corazón con cada palabra.

Haru siguió jugueteando con la boquilla conectada a la punta de la manguera. “De todos modos, aunque te pida que me lo digas, te encogerás de hombros.”

No le pregunté qué quería decir con eso. Por otra parte, tampoco supe cómo responder sin pisotear su amabilidad.

Al final, sólo pude sonreír vagamente como respuesta. Haru suspiró cansada: “Qué hombre más difícil eres.”

Entonces agarró la boquilla de la manguera, que apuntaba hacia mí.

Pushu, el agua salió disparada como un cohete y me golpeó en la cara.

“¡Hey, el agua esta fría!”

Me apresuré a tapar el agua con la palma de la mano, y Haru soltó una carcajada al verme. “¿Te has enfriado un poco?”

“¡No me rocíes en modo chorro! Al menos usa el modo ducha.”

—Pushu, pushu.

“¡Escúchame, maldita sea!”

Corrí con todo el cuerpo empapado de agua.

“Te apuñalarán si robas una base así, chico béisbol~.” “¡Muy bien, así está bien! Tú tampoco deberías moverte.” Tomé un cubo de plástico nuevo que tenía cerca.

Como hacía tanto calor, el cubo estaba lleno de agua limpia que de vez en cuando podíamos utilizar para lavarnos la cara y las manos.

Presintiendo algo, Haru retrocedió lentamente. “¡Espera, Chitose, no hagas eso!”

“Ojou-chan, voy a echarte este enorme cubo de agua por encima, así que prepárate.”

“¡En serio no lo hagas, no ahora!” “¡Vamos, no seas así!” “¡Noooo!”

Vertí todo el cubo de agua sobre ella sin piedad.

Haru, empapada de pies a cabeza, se agachó apresuradamente.

Estaba acurrucada sobre las rodillas con la camisa pegada al cuerpo… “¡——!”

El tono brillante de la piel y los tirantes del sujetador azul claro pálido eran claramente visibles.

“… No me mires, idiota.” Dijo Haru avergonzada, su voz era casi inaudible.

“Lo siento, pero ¿por qué no llevas camisola, tonta?”

“Pensé que hoy haría mucho calor, así que me la quité antes de limpiar.”

“¿No pensaste que aún sería visible si sudabas?”

“Es porque ninguna de las camisetas del club es transparente… Ya me he acostumbrado.”

Desvié la mirada e hice todo lo posible por fingir calma, pero la escena de hace un momento estaba profundamente grabada en mi mente, no podía olvidarla.

La piel expuesta bajo la camiseta mojada era aún más seductora que la de la chica en bañador.

—Especialmente cuando se trataba de Haru.

Se había convertido en alguien a quien ya no podía tratar como a un amigo varón.

Ni una chica joven, sentí como si hubiera tocado el lado “femenino” que estaba enterrado dentro de Haru, y esta vergüenza hizo que mi corazón latiera más rápido.

“Pero…” Dijo Haru.

Drip, drip, se oía el sonido del agua goteando. “—No pasa nada si eres tú.”

El corazón me dio un vuelco y no pude evitar mirar en la dirección de donde procedía la voz.

No sabía cuándo se había levantado. Entrecerró ligeramente los ojos, bajó la cabeza, se sonrojó y se abrazó el pecho. Sin embargo, sus delgados brazos y su corbata no bastaron para cubrir el encaje tan delicado como una gloria de la madrugada.

Su cabello mojado se le pegaba a las mejillas y al cuello, y su respiración lenta era tan encantadora que me ponía la piel de gallina.

Temía que, si seguía mirándola, me vinieran pensamientos extraños a la cabeza, así que bajé los ojos y vi unas gotas que goteaban del interior de su falda, acariciándole la cara interna de los muslos.

Con todo el autocontrol que pude reunir, aparté el cuerpo.

Sin tener fuerzas para intentar adivinar el significado de las palabras que acababan de llegar a mis oídos, la voz de Haru continuó.

“¿No estás interesado en mí, Chitose?” “No me refiero a eso…”

Kuchu.

Kuchu, kunchu.

El sonido de pies descalzos pisando el agua se acerca. Se detiene justo detrás de mí.

“Si no, entonces mírame.” Me susurró suavemente al oído.

Me di la vuelta lentamente, tomándome mi tiempo como si buscara desesperadamente una respuesta que no llevaba en el bolsillo.

“Sabes qué, yo—¡Hmmmphh!”

Una columna de agua salió disparada hacia mi boca abierta, provocándome un fuerte ahogo.

“¡Te tengo!” Haru sacó la lengua.

“¡Qué astuta, aprovechar la oportunidad cuando bajo la guardia!” “¿Hmm? Chi ♡ to ♡ se ♡, ¿te fascina la actuación sexy de Haru-

chan?”

Al oír esas palabras, me eché el flequillo hacia atrás en silencio con rostro serio.

“Lo siento, Haru.” Le tomé suavemente la mano, como si estuviera tocando algo frágil. “Me siento excitado… tal vez no pueda calmarme.”

“¿De qué demonios estás hablando? Hey, ¿hablas en serio?” “Tienes ropa para cambiarte, ¿verdad? No importa si te ensucias.”

“Sí, la tengo, pero… No, espera Chitose…” Haru cerró los ojos con fuerza.

SPLASH.

Agarré disimuladamente la manguera y apunté la boquilla a su cara sin dudarlo.

“Whoa, ¿q-qué estas—mmmph? Tos, tos.”

“¡Por supuesto, no puedo dejar que te salgas con la tuya!” “…..”

“¿Hmm? Ha ♡ ru ♡ -chan ♡, ¿imaginas algo diferente cuando ves el cuerpo húmedo y sexy de Chitose-kun?”

Haru se apartó el flequillo mojado y se echó a reír. “Muy bien, voy a atarte a la escalera de allí y rezar por la victoria del club de natación.”

“¿En verdad piensas perpetrar un sacrificio humano?”

Después, nos divertimos tanto que perdimos la noción del tiempo.

Estaba tan agotado que me tumbé en el fondo de la piscina. Haru también se desató la coleta y se tumbó como yo.

Antes de darme cuenta, las nubes como algodones se habían teñido de carmesí y se acercaba la noche vidriosa. El charco de agua del suelo reflejaba suavemente la luz frente a mí, dando la ilusión de que dos personas flotaban en el cielo.

El viento se hizo mucho más fresco, soplando sobre nosotros con cuidado.

Los insectos chirriaban y el cepillo que había dejado en un rincón cayó al suelo.

Los dos cuervos eran como manchas negras en el cielo, volando hacia las montañas.

“Hey, Chitose.” Haru habló en voz baja. “El verano pasado, Kaito me invitó al estadio para verte jugar en el torneo.”

“Supongo que eso pasó.”

Recordé que era al principio cuando teníamos más oportunidades de charlar así.

“Eras el único que podía pensar así.” No dije nada y la dejé continuar.

“La única persona que realmente creía que incluso un pequeño equipo de una escuela tan centrada en los estudios podría llegar al Koshien.”

“… Ya veo.” “Eso fue genial.”

Haru no tenía nada más que decir, y la conversación terminó.

Deseaba poder quedarme mirando el cielo nocturno en silencio hasta que estuviera completamente negro, tan oscuro que ocultara mi expresión lastimera.

Entre el crepúsculo y la noche, la luna flotaba en lo alto como una fina capa de hielo.

Apreté la mano que estaba a punto de extender y la golpeé contra el hombro de Haru.