Chitose Kun Wa Ramune (NL)

Volumen 3

Capítulo 4: Nishino Asuka (El Viento Que Sopla Mañana)

Parte 1

Este lugar fue el pueblo donde yo, Nishino Asuka, nací y viví hasta el sexto grado de la escuela primaria.

Aunque todavía se consideraba la ciudad de Fukui, estaba ubicada en el borde mismo de la frontera.

A un corto paseo se encontraba la ciudad vecina, Sakai. Y aunque este lugar no era un área rural dentro de la prefectura de Fukui, todavía estaba rodeado de campos de arroz.

Casi no había entretenimiento decente.

En vacaciones, mi mayor placer era comprar libros nuevos en la librería del centro comercial Ami, que era mucho más pequeña que Lpa, o en la librería Miyawaki, una pequeña librería cercana.

Nacida en un pueblo así de padres que eran maestros estrictos, yo era una niña muy tímida y aburrida. Aunque me fue razonablemente bien en el trabajo escolar, no era muy buena en los deportes, y no era del tipo que inspiraba a todos y era el centro de la clase.

Sin embargo, no estaba tan triste como para no poder hablar con nadie, y tenía algunos amigos como cualquier otra persona. En resumen, creo que la palabra “ordinario” era una descripción perfecta de mí en ese momento.

No había niños de mi edad en el vecindario y tenía prohibido jugar demasiado lejos, así que regresaba a casa tan pronto como terminaba la escuela y me sumergía en el mundo de los libros.

Parecía que todos mis compañeros de clase se reunían en la casa de alguien después de la escuela todos los días para jugar, así que tal vez yo era un poco marginada en ese sentido.

• Sin embargo, pensé que mientras tuviera estas historias, sería suficiente.

Los personajes de las historias eran todos sorprendentemente sencillos, apasionados, amables y deslumbrantes. Podían correr libremente por el mundo con sus propias voluntades como guía.

Ojalá pudiera ser como ellos.

Aun así, aunque les tenía mucha envidia, todavía podía distinguir la realidad de la ficción.

Porque en realidad, tenías una madre y un padre que te decían lo que podías hacer y lo que no, por lo que no podías hacer todo lo que querías.

Digamos que querías ir a un festival, o tener una fiesta de pijamas en la casa de un amigo, o emprender una aventura solo en un lugar extraño, no podrías hacer nada de eso sin recibir su permiso primero.

Durante mucho tiempo me habían dicho que me convertiría en un adulto respetable si seguía los consejos de mis padres al pie de la letra, e incluso ahora, nunca pensé que estaban equivocados de ninguna manera.

Sin embargo, ese verano en mi cuarto grado de primaria, conocí a un chico.

El chico que obviamente era más joven que yo, pero sorprendentemente sencillo, apasionado, amable y deslumbrante.

—…… Cuánto tiempo sin verte, Saku-nii~

—… Tu eres…

¡Lo dije, finalmente pude decirlo!

Las palabras que había estado conteniendo desde que lo volví a encontrar en septiembre pasado.

Miré el rostro de la persona parada frente a mí.

Siempre estaba tratando de verse bien, pero ahora, sus ojos estaban muy abiertos, una expresión tonta apareció en su rostro. Parecía que estaba realmente sorprendido.

¿Esa palabra podría haberle recordado a mí?

Habiendo llegado hasta aquí, si resulta que ni siquiera existo en un rincón de su memoria, sería un poco… no, sería demasiado devastador.

—Saku-nii, ¿qué pasa?

Observé su rostro confundido, tratando de encontrar alguna respuesta con un tono juguetón.

Probablemente estaba tratando desesperadamente de conectar las piezas del rompecabezas de su memoria, o tal vez estaba resolviendo la situación en este momento ya que todavía no respondió con su comentario casual.

Así es.

Para él, yo era Asu-nee, y de ninguna manera lo llamaría Saku-nii, incluso si fuera por error.

Pero si estoy siendo honesta aquí, ¿no fui yo quien lo llamó Saku-nii primero?

—Eh, espera; Él presionó su frente. —¿Es posible que tú y yo nos conociéramos cuando éramos niños?

—Sí.

—¿Tu cabello llegó a tu espalda en ese momento?

—Sí.

—Pero no eras más… ¿cómo debería decir esto… tímida?

—Sí.

—¿No jugamos mucho durante las vacaciones de verano?

—Sí. ¡Así es!

—¿¡Por qué no me lo dijiste antes!?

No pude contenerme más y me eché a reír.

De hecho, mi apariencia y personalidad eran muy diferentes a las de entonces, y ahora que lo pienso, para empezar, ni siquiera le había dicho mi nombre.

En ese entonces, Saku-nii siempre me había llamado “Kimi” (tú).

—¿Te acuerdas? Aunque en este momento tú eres Kimi y yo soy Asu-nee, en ese momento, yo era Kimi y tú eras Saku-nii.

—¿Cómo es eso posible?

—¿No te lo dije? Los cuentos de hadas también pueden ocurrir en la vida real, y están muy cerca de nosotros.

Al escuchar mi respuesta, kimi se rascó la cabeza… no, ¿debería referirme a él como Saku-nii en su lugar? Pero se sintió mal, así que vamos a referirnos a él como Saku por ahora.

Jalé al confundido Saku de la mano y salí de la pequeña estación.

Mientras inhalaba el aire con todas mis fuerzas, sentí que la atmósfera nostálgica del arrozal impregnaba cada rincón de mis pulmones. Desde algún lugar en el aire, podía oler los campos en llamas. Aunque los habitantes de la ciudad encontrarían el olor desagradable, para mí fue un aroma relajante que me recordó a mi infancia.

—En ese entonces, siempre pensé que eras más joven; Dijo Saku, que caminaba a mi lado.

—Solo descubrí que era mayor que tú durante nuestras segundas vacaciones de verano, cuando te pregunté por tu cumpleaños. Sin embargo, pensé que era demasiado tarde para cambiar la forma en que nos llamábamos, así que no lo corregí.

En términos generales, las niñas eran más maduras cuando tenían alrededor de la edad de ir a la escuela primaria, y pensé que eso era verdad hasta cierto punto, pero mi impresión de él cuando lo conocimos fue que era un hermano mayor confiable.

Y como yo era bastante ingenua y tímida, no era de extrañar que ocurriera tal malentendido.

—Esto se siente nostálgico. No he estado aquí después de graduarme de la escuela primaria porque estaba demasiado ocupado jugando béisbol.

Saku comenzó a mirar alrededor.

—Hay un pequeño santuario al otro lado del camino. ¿Recuerdas haber ido allí conmigo, Asu-nee?

Por supuesto que sí.

Ese es mi precioso recuerdo.

—¿Así que me trajiste aquí para sorprenderme?

—Esa fue una de las razones. La otra fue para confirmar nuestro comienzo.

¿Nuestro comienzo?

—¿Puedes escuchar mi historia esta vez?

Cuando vi a Saku asintiendo con la cabeza, comencé a hablar lentamente.

***

• Fue durante las vacaciones de verano en mi cuarto grado de primaria. Escuché que había un niño que visitaría a la abuela que vivía sola en mi barrio.

La simpática abuela, que de vez en cuando me daba dulces, me pidió de antemano, “Cuando venga ese niño, por favor sé amigo de él”.

Me sentí obligada a ir a la casa de la abuela como prometí, pero francamente, mi corazón estaba acelerado.

Nunca antes había estado a solas con un chico y no sabía qué tipo de persona sería.

El nieto de una abuela simpática podría no ser tan simpático como ella, y dado que parecía vivir mucho más cerca de la ciudad que aquí, podría pensar que yo era un pueblerina y mirarme con desprecio.

Así que me puse mi vestido favorito, el vestido más adulto que tenía, y me puse un sombrero de paja antes de ir a la casa de la abuela.

Serían una armadura o un escudo para proteger mi corazón.

Y allí conocí a un chico que se veía tan hermoso como una chica.

Aun así, su piel estaba bronceada y los brazos debajo de la camisa eran bastante fuertes, completamente diferentes a los míos.

Cuando abrió la boca y sonrió, los dientes blancos que me mostró fueron muy impresionantes.

—¿Eres de aquí?; El chico me miró.

—…U-Um, sí, vivo por aquí.

Su apariencia intrépida me puso nervioso.

Había muchos niños enérgicos y alegres en mi escuela, pero todos eran un poco toscos y yo no era muy buena para tratar con ellos.

—Entonces, ¿podrías mostrarme los alrededores?

Sin embargo, esta persona parecía ser algo suave en su forma de hablar y actitud.

—Sí, pero aquí no hay nada, solo campos de arroz.

—No hay tal cosa como nada. ¡Vamos!; El chico tomó mi mano con fuerza. —Mi nombre es Chitose Saku, por cierto.

—Saku-nii…

La temperatura de su cuerpo, que era mucho más cálida que la mía, me hizo sentir segura de que no podía evitar llamarlo por su nombre.

Cuando comenzamos a caminar de la mano, me sentí un poco avergonzada.

Cuando se trataba de esta área, además de las casas antiguas, los canales de riego, los pequeños santuarios y los parques, en realidad solo había campos de arroz.

Debe estar decepcionado.

Eso pensé y miré tímidamente a la persona a mi lado.

—¡Vaya , este lugar parece tan divertido! ¡Apuesto a que puedes atrapar muchos zancudos de agua, renacuajos y cangrejos de río aquí! Y como no hay autos pasando, ¡parece que puedes ir a cualquier parte!

Su rostro brillaba de alegría.

Pasamos dos días juntos después de eso, y él era un genio para encontrar la diversión en todo.

Atrapó cangrejos de río y cigarras, trató de atraer a los escarabajos pintando miel en el gran árbol del santuario y dio grandes saltos en los columpios del parque.

Básicamente, todo lo que yo podía hacer era aplaudir y animarlo, pero la ciudad, que antes de conocerlo pensaba que estaba vacía, ahora parecía un joyero resplandeciente.

Estaba tan apegado a él que lo seguí de la mañana a la noche, llamándolo por su nombre, “¡Saku-nii, Saku-nii!” En todas partes.

Al tercer día, Saku-nii regresaba.

Estaba triste, y me había estado sintiendo mal desde la mañana.

—Después de que Saku-nii regrese a casa, volverán a ser los mismos viejos tiempos.

—¿Los mismos viejos tiempos?

—Sí, los mismos viejos tiempos. Solo ir a la escuela, volver y andar por aquí.

Quizás sintiendo algo de mis palabras, reflexionó un momento antes de preguntarme.

—Oye, ¿cuál es el lugar más lejano al que has ido a pie?

—Porque me han dicho que no vaya demasiado lejos… lo más lejos es el lugar donde tomé a Saku-nii.

—Entonces, ¡vamos de aventura! ¡A lugares que nunca has visto antes!

—Pero si hago eso, mi padre se enfadaría…

Después de que dije eso, tomó mi mano inquieta.

—No importa lo que piense tu padre. ¿Qué hay de ti? ¿Quieres ir?

—… Sí.

—¡Ese es el espíritu!

Saku-nii tomó el onigiri y la botella de agua sobrantes que la abuela nos había dado para el almuerzo y los metió en su mochila, luego tomó mi mano y se puso en marcha.

Debería ser la primera vez que camina por este camino, pero no parecía asustado en absoluto.

Al principio, estaba un poco nerviosa porque parecía que estábamos haciendo algo malo, pero ese sentimiento pronto se desvaneció después de ver su rostro sonriente.

Pasando por barrios familiares, caminamos recto a lo largo del río durante mucho, mucho tiempo.

Realmente era un camino rural vacío. Cuando miré a mi alrededor, todo lo que pude ver fue el verde de los campos de arroz y las riberas de los ríos, con algunas colinas y casas en la distancia.

Pero para mí, todo esto me pareció nuevo y emocionante.

Saku-nii era un genio que podía encontrar la diversión en cualquier cosa y encontraba varias maravillas incluso en escenarios ordinarios.

—Oye, ¿qué crees que es ese pequeño edificio?

—¿No es ahí donde se administra el río?

—Eso es aburrido. Mira, ¿puedes ver esa cosa parecida a una manguera gruesa? Esa es la casa de los Kappa.

—¿Kappa?

—De hecho, los kappa ha estado por aquí durante mucho tiempo, pero hoy en día, sería malo si fueran descubiertos, ¿verdad? Entonces, por lo general viven en ese lugar que los peces gordos de Fukui han preparado para ellos, y cuando necesitan entrar al río, pasan por esa casa para evitar ser vistos.

—¿Qué tipo de historia es esa? ¡Es raro!

Los dos charlamos varias veces sobre esos temas y nos reímos juntos.

Después del río, continuamos por un camino recto a través del campo de arroz.

Nos detuvimos muchas veces para mirar el canal de riego al costado de la carretera. A continuación, de repente nos emocionamos y empezamos a correr. Seguimos adelante sin un destino claro.

Luego, cuando volví a mis sentidos, el área estaba completamente cubierta por el cielo de la tarde.

—Ya es hora de que volvamos; Saku-nii me miró. —El lugar que nunca antes habías visto … Ya no son los mismos viejos tiempos, ¿verdad?

Asentí repetidamente.

—¿No es esto muy fácil?

El niño sonriente de espaldas al atardecer me miraba como la libertad misma.

Para mí, que siempre había seguido los consejos de mis padres y vivía tranquilamente en mi pequeño mundo, este viaje fue como mi primera gran aventura.

Pero para Saku-nii, era un lugar donde simplemente podía volar.

Después, dimos la vuelta por el camino por el que habíamos venido.

Los verdes campos de arroz de verano, las avenidas rectas, las líneas eléctricas que se extienden desde los pilones y la superficie del río, todos estaban teñidos de un color rojo brillante.

En la distancia, las cigarras cantaban ruidosamente y las ranas comenzaron un coro como para ahogarlas.

El onigiri que comimos juntos mientras caminábamos a casa tenía ciruelas encurtidas adentro, lo cual no me gustó, pero por alguna razón, su sabor salado era sorprendentemente delicioso hoy.

También nos detuvimos un momento para beber nuestro té de cebada.

Pronto oscureció y el cielo se llenó de una luna redonda y estrellas centelleantes que parecían azúcar Konpeitō.

Era la primera vez que salía a esta hora, pero mientras tuviera mi mano izquierda conectada a la de Saku-nii, curiosamente, no tenía miedo en absoluto.

Aunque mi padre nos regañó mucho cuando llegamos a casa, no estaba nada triste.

Mis lágrimas no podían parar cuando el auto que traía a Saku-nii se alejaba y desaparecía de mi vista.

Si tan solo el próximo verano llegara pronto, pensé eso muchas, muchas veces.

***

• Mis vacaciones de verano en mi quinto grado finalmente llegaron.

Estaba esperando a Saku- nii, con un vestido blanco puro que les había pedido a mis padres que compraran con entusiasmo.

Aparentemente, había comenzado a jugar béisbol, por lo que había crecido y sus rasgos eran más juveniles en comparación con el año pasado.

Pero su yo interior no había cambiado mucho, y aún deambulábamos juntos para jugar en varios lugares.

Mientras caminábamos por la orilla de un pequeño canal de riego que no era empinado, rápidamente me acerqué a la espalda de Saku-nii, quien caminaba un poco adelante para asustarlo.

• Pero como resultado, pisé el aceite fangoso y lo siguiente sucedió en un instante. Perdí el equilibrio y caí al río con un fuerte chapoteo.

Afortunadamente, no choqué con nada ni me lastimé, pero el vestido blanco puro que compré para mostrarle a Saku-nii estaba arruinado. Sintiéndome tan triste y avergonzada, mis ojos se pusieron calientes de repente.

¡No, no puedo llorar frente a Saku-nii!

vacaciones de verano, se suponía que íbamos a disfrutar de este raro momento de felicidad.

A pesar de que apreté los dientes y fruncí el ceño, las lágrimas seguían cayendo por el rabillo del ojo como un grifo roto.

No, no, no.

No quería que viera mi cara desordenada.

¡Para, para, para!

• En ese momento…

Con un sonido de choque que fue más fuerte que el mío, Saku-nii saltó al río.

—¿Por qué te diviertes sola? ¡Déjame jugar también!

Él sonrió felizmente y comenzó a salpicarme agua.

El agua con un olor ligeramente a pescado salpicó mi cara, lavando mis lágrimas.

Fue entonces cuando me di cuenta.

¿Mis lagrimas… se detuvieron?

Un sentimiento extraño me invadió, olvidando por completo que había estado llorando solo unos segundos antes. Entonces lo perseguí.

—¡Eres tan malo, este es mi vestido favorito!

—Entonces no vengas con ese vestido. El próximo año, recuerda empacar pantalones cortos, una camiseta y zandalias.

—¡Uuuhh, no puedo creerlo! ¡Estúpido Saku-nii!

Las dos jugamos juntas en el barro, y sin darme cuenta, dejé de preocuparme por el vestido mientras nos reíamos el uno al otro.

***

• Llegaron mis vacaciones de verano en mi sexto grado.

Saku-nii, que estaba ocupado con la práctica de béisbol, solo pudo quedarse una noche.

Sin embargo, esta noche hubo un festival de verano en un pequeño santuario cercano.

Si pudiéramos ir los dos juntos, sería una experiencia memorable.

Había hablado con mi madre y mi padre sobre mi plan el día anterior, pero ambos me dijeron que estaba mal que los niños fueran solos a un lugar así.

Aunque les dije que otros niños de la escuela iban con sus amigos, insistieron en que cada regla de la casa era diferente.

Dijeron que podía ir con mi padre, pero ese no era el problema, yo quería ir con Saku-nii.

Con pantalones cortos, una camiseta y chancletas, le conté a Saku-nii mientras comíamos una sandía.

—Bueno, los maestros de la escuela dijeron algo similar, y tu mamá y tu papá también son maestros.

—¿Saku-nii, no quieres ir conmigo?

—¡Por supuesto que sí! ¿Por qué no te recojo por la noche? Les explicaré que no vamos a hacer nada peligroso.

—Eso no va a funcionar. Trataré de discutirlo nuevamente con ellos…

Al ver mi mirada abatida, parecía que Saku-nii estaba pensando en algo. Luego volvió a hablar, como si se le hubiera ocurrido una buena idea.

—¡Hagámoslo de esta manera! Vas a casa y tratas de convencer a tu padre de nuevo. Iré a buscarte por la tarde y él te dará permiso entonces, ¡el problema está resuelto!

—¿Y si no lo hace?

—¡Entonces tenemos que hacer una promesa! Si te rindes, me iré directo a casa. Pero si todavía tienes ganas de ir conmigo, solo toca tu oreja izquierda en secreto como una señal.

—¿Y entonces qué?

—…… Vendré y te llevaré.

Ba-dump, mi corazón dio un vuelco.

Aunque volví a discutirlo de nuevo, la respuesta de mi padre siguió siendo la misma.

Cuando Saku-nii vino a recogerme, las palabras de mi padre, aunque sonaron amables, dejaron en claro que no podía dejarnos ir solos al festival.

Entonces yo…

—Lo siento, Saku-nii.

Lo dije mientras colocaba mi cabello detrás de mi oreja izquierda.

—Ah, claro. Tengo que volver temprano mañana por la mañana, así que te veré el próximo año.

Saku-nii agitó las manos en el aire y se alejó, luciendo extremadamente decepcionado.

Espera, ¿qué pasa con la promesa?

¿No te diste cuenta? Te di la señal tocándome la oreja izquierda.

¡Dijiste que me llevarías, pero mentiste!

Lleno de ira, tristeza y soledad, me encerré arriba y presioné mi cara contra la almohada.

Las lágrimas que no pude contener salieron, manchando la almohada y extendiéndose lentamente.

¡Solo tuvimos un día para estar juntos este año!

Si hubiera sabido que resultaría así, debería haber dicho que quería ir, ¡incluso si tuviéramos que ir con mi padre!

Sentí que la fuerza abandonaba mis manos.

Si fuera imposible, nunca deberías haber hecho una promesa en primer lugar.

Luego, comencé a quedarme dormida sin darme cuenta y me despertó un sonido extraño.

• Toc, toc, toc, toc.

Me levanté, todavía medio dormida, miré alrededor de la habitación y me sobresalté.

Vi a Saku-nii saludándome desde fuera de la ventana.

—¿E-Eh? ¿No es este el segundo piso?

Sintiéndome confundida, abrí la ventana. Saku- nii levantó su dedo índice y dijo “Shhh”, antes de sonreír.

—¿Por qué estás dormida? ¿No vamos al festival?

Asomé un poco la cabeza hacia abajo y allí había algo como una escalera.

—Robé la escalera de la casa de mi abuela; Saku-nii se rió entre dientes.

No sabía si estaba feliz o aliviada, pero las lágrimas caían de nuevo.