Sokushi Cheat Ga Saikyou (NL)

Una paloma comenzó a hablar con la voz de Edelgart.

Era una paloma mensajera. Estas aves, nacidas como criaturas mágicas, mantenían un importante rincón de la red de inteligencia mundial. Aunque la magia podía ser utilizada para la comunicación a larga distancia, requería que ambas partes se realizaran de manera justa en las artes mágicas, y por lo tanto no era algo que la gente común pudiera utilizar.

Esta era la residencia de Lain, una mansión de paredes blancas en el continente flotante. En una sala de recepción que no daba ninguna pista de la naturaleza de su amo como vampiro, dos sabios se sentaron uno frente al otro.

Uno era el amo de la mansión, el Sabio Lain. El otro era el responsable de traer a Yogiri y a sus compañeros a este mundo, el Sabio Sion.

Mientras que la voz de Edelgart estaba bastante asustada, su punto principal se comunicaba claramente: el Sabio Santarou estaba muerto. Y lo que es más, Yogiri Takatou y Tomochika Dannoura pueden haber estado involucrados.

“Por eso te llamé aquí”, dijo Lain. Ella había sentido la necesidad de hacer correr esta información a través de Sion.

“¿Oh? ¿Han hecho algo los candidatos que he convocado?” La gestión de los candidatos a Sabio era una responsabilidad que recaía en quien los había convocado. Tratar con candidatos ajenos era algo tabú entre los sabios.

“Ahora que un sabio ha sido asesinado, no es algo que pueda ignorar. Hace mucho tiempo que han excedido la capacidad de los simples candidatos a sabios. Además, los problemas que están causando están dentro de mi jurisdicción.”

La jurisdicción de Santarou estaba alrededor de la capital de Manii, pero en este caso su persecución del invasor lo había llevado al territorio de Lain. Cuando se trataba de tratar con los invasores, la distinción entre las jurisdicciones territoriales no era especialmente importante, pero ahora que la muerte de un sabio estaba involucrada, las cosas habían cambiado. Como responsable del territorio donde esa muerte había tenido lugar, una cierta responsabilidad recaía también en Lain.

“No hay pruebas de que hayan hecho algo, ¿verdad? Santarou fue enviado a luchar contra un gran robot. ¿Estás segura de que no lo mataron con eso?”

“Es posible. Pero incluso si sólo existe la sospecha de que puedan tener la capacidad de matar a un sabio, no se les puede dejar vagar por su cuenta.” Lain había tomado un interés personal en este misterioso poder. Tenía la intención de observar y ver cómo se desarrollaban las cosas por un tiempo, pero las circunstancias ya no lo permitían.

“Si son capaces de matar a un sabio, están fuera de los límites de un candidato a sabio. Eso es suficiente para convertirlos en un sabio en el acto. Los revisé personalmente y no vi a nadie que se acercara a ese nivel”.

“Entonces, ¿cómo murió Santarou?”

“La especialidad de Santarou era su habilidad para usar la magia de todos los elementos, ¿correcto? Entre los sabios, él tenía el mayor rango de habilidades. Con esas habilidades, podía adaptarse y ser efectivo en cualquier campo de batalla, pero como resultado, el poder individual de sus hechizos era un tanto deficiente. En resumen, era un gato de todos los oficios pero un maestro de ninguno. Un solo error en la batalla podía ser suficiente para matarlo”.

“Haces que parezca tan fácil. Pero el cuerpo de Santarou no tenía heridas externas. Algunos de sus huesos estaban rotos, pero eso probablemente ocurrió después de su muerte. La causa de la muerte es aún desconocida, pero escuché de su asistente que esos dos tienen algo como la magia de la muerte instantánea.”

“Youichi tiene un poco de inquietud”, suspiró Sion, como diciendo “¿y qué?” ” Aun si piensas que ellos son los culpables, ¿qué razón tendrían para matar a un sabio? ¿Santarou no tenía heridas visibles, dijiste? Así que no hay evidencia de que le hayan quitado la Piedra Filosofal”.

“No, no hubo ningún informe de que le abrieran el estómago. Aunque es ciertamente extraño que simplemente lo mataran y lo dejaran allí, no hay manera de que podamos adivinar sus motivos. De todas formas, voy a tratar con esos dos. Sé que no necesito tu permiso, pero pensé en hacértelo saber”.

“¿Te encargarás de ellos? Y yo que pensaba que eras un pacifista”.

“No recuerdo haberme jactado nunca de unos principios tan absurdos. A diferencia de los otros sabios, yo no mato gente sin razón. Si hay una necesidad real, no tengo problemas en quitar vidas.”

“Entonces bien, haz con esos dos lo que quieras. Pero en realidad, pensé que me habías llamado aquí por una razón diferente.”

“¿Y qué sería eso?”

“También está relacionado con Santarou… y la Oscuridad. Me dijeron que se las arregló para alejarla, pero aún persiste en algún lugar de este mundo. Pensé que podría ser sobre eso.”

“¿Te preguntas quién será el próximo en luchar contra ello?”

Con Santarou muerto, el territorio del que era responsable estaba ahora vacante. La responsabilidad de ese territorio probablemente recaería en alguien cuya jurisdicción lo bordeara, en este caso, Lain o Sion.

“¡Ah! Ahora que lo pienso, me debes un favor, ¿no?” Sion aplaudió como si de repente se le hubiera ocurrido una gran idea.

“Está bien, iré a ocuparme de ello”.

Alguien tendría que hacerlo de todos modos. Lain no tenía ninguna razón en particular para evitar manejarlo por si misma, así que si podía saldar su deuda con Sion al mismo tiempo, era la opción más conveniente.

“Bueno, entonces, por favor, permítame disculparme.” Con sus negocios concluidos, Sion no perdió tiempo en hacer su salida.

“Masayuki”, Lain llamó a la sala de recepción vacía.

“¿Llamaste?” Un momento después, una voz masculina respondió desde atrás de ella.

“Lleva a los Inmortales a Hanabusa. Encuentra a Yogiri Takatou y Tomochika Dannoura, y mátalos”.

“Espera, ¿hablas en serio? ¿Sólo esos dos? ¿En qué demonios estás pensando?”

“Esos dos tienen que ser absolutamente atendidos. Parece que pueden usar algo parecido a la Magia de la Muerte Instantánea. Existe la posibilidad de que otra unidad no sea capaz de enfrentarse a ellos”.

“Ahh, ya veo. Eso hace a los Inmortales perfectos para este trabajo. No es como si pudieras matar a alguien que ya está muerto, ¿verdad?”

El Cuerpo de Inmortales tenía alrededor de cien miembros, y estaba compuesto casi en su totalidad por no-muertos, gólems y otras entidades similares que no calificaban como “vivos”. En otras palabras, era una unidad entera que consistía en seres inmunes a la Magia de la Muerte Instantánea.

“Pero aún así, ¿no sería suficiente por mí mismo?” Masayuki era un miembro de la línea de sangre de Lain. Como vampiro que podía ser llamado uno de sus hijos, también era un no-muerto de alto rango.

“Para garantizar sus muertes, necesitamos números como ese. Si aún no tienes suficientes, recluta de los locales”.

“¡Whoa, whoa, whoa! ¿Estás diciendo que está bien destruir a Hanabusa?” Una alegría inconfundible llenó su voz. Masayuki había subido a bordo inmediatamente.

“Sólo si es necesario. No hagas nada que no sea necesario.”

“No te preocupes. Me aseguraré de que los atrapemos”. A pesar de la advertencia de Lain, no parecía estar particularmente preocupado.

“Estoy planeando salir. Es necesario que me enfrente a un invasor”. Mientras que tratar con un asesino sabio era importante, los invasores eran una amenaza más apremiante.

“Te dejaré esos enemigos más complejos a ti. Soy mucho más adecuado para destrozar a la gente con sangre y tripas”.

Con Masayuki y todo el Cuerpo Inmortal, la muerte de dos candidatos a sabios estaba más o menos garantizada. Si Yogiri y Tomochika sólo tuvieran la magia de la muerte instantánea de su lado, no tendrían ninguna oportunidad. Sin embargo, si de alguna manera sobrevivían contra todo el Cuerpo de Inmortales…

Esa posibilidad no era ni siquiera una entre un millón. Y aún así Lain no podía evitar esperar secretamente que lo hicieran.