Mahou Shoujo Ikusei Keikaku (NL)

Volumen 7

Capítulo 4: Soy El Culpable

Parte 3

✰  Filru

Tanto Lady Proud como Shufflin habían sido asesinadas por los demonios. Filru había estado sola por encima de los árboles luchando contra los demonios alados, y había oído sus gritos, y el sonido de la alegría de los demonios y el rechinar de sus dientes. Snow White, Uttakatta y Styler Mimi habían confirmado que estaban muertas, y por si fuera poco, Fal había dicho que no había detectado más señales de chicas mágicas, así que ya no había dudas.

Ella había pensado que podría haber víctimas mortales.

Si una chica mágica hubiera aceptado ese correo electrónico, de alguna manera se las hubiera arreglado para buscar a las chicas mágicas artificiales y encontrar el laboratorio por algún medio, y llegar a la clandestinidad, también, para llegar a este punto, no podía decir que no estaba preparada para esto. Pero ahora que sus aliadas estaban siendo asesinadas, aunque no lo hubiera presenciado ella misma, era un golpe duro.

Las dos con las que acababa de hablar, Lady Proud, que había estado preocupada por la usurpación de su posición de líder, y Shufflin, que había estado tan nerviosa y ansiosa que te daba pena, habían sido despedazadas por los colmillos de los demonios. No volvería a ver ni a hablar con ninguno de las dos.

Siendo una chica mágica, esto no podía ser más malo. Si no hubiera sido una chica mágica, habría estado huyendo o llorando y lamentándose por su miedo a la muerte.

A simple vista, las demás también parecían estar tranquilas, pero el ambiente era asfixiante. La del tridente, que se había presentado como Princess Deluge, en particular, era la más retraída. Las cosas habían salido así por su bondadoso intento de salvar a Shufflin, y como nadie se atrevía a llamarla tonta, estaba sentada ociosamente en un rincón del pasillo.

Haber perdido un lugar al que volver era algo que Filru tenía en común con las demás. Era como decir, volvamos al campamento base por ahora, pero luego cuando intentas volver, el campamento base ha sido arrasado. La realidad era como una pesadilla y una mala broma.

Saliendo del bosque, volvieron a la entrada, y cuando volvieron, Grim Heart no estaba. Tampoco había sofá, ni alfombra, ni escritorio, ni candelabro. Grim Heart y sus cosas habían desaparecido por completo, como si nunca hubieran estado. Ahora el problema ya no estaba en la dimensión de preocuparse por cómo contarle la muerte de Shufflin. Se añadía una más a la lista de chicas mágicas que habían desaparecido hasta el momento, incluidas Kafuria y Umbrain. Por muy confiada que pareciera la aludida, no deberían haberla dejado sola.

Snow White estaba discutiendo con Fal.

Stanczyka hacía una pantomima frente a Deluge, que no prestaba atención.

Marika Fukuroi estaba sola, lejos de las demás. La raflesia que llevaba en la cabeza se había marchitado, pero un hedor seguía pegado a ella. Acercarse a ella provocaba náuseas y hacía que los ojos lloraran sin cesar. Aunque Filru estaba agradecida por el buen resultado — Marika había eliminado a todos los demonios con ese hedor—, evitaba acercarse.

Styler Mimi estaba tocando la puerta de la entrada.

“Esto es bastante desafortunado.” Hablar con Uttakatta hacía que las cosas parecieran menos serias de lo que realmente eran. Sin embargo, mejoró el estado de ánimo.

“Sí.” Respondió Filru. “No deberíamos haber dejado sola a Grim Heart.”

“… ¿Es realmente un problema?”

“Vamos, es un problema. Es un verdadero problema.”

“Pero sabes…” Los ojos de Uttakatta se volvieron hacia la sala. Allí, Snow White estaba conversando con Fal. Si Filru utilizaba su hilo, podría escuchar la conversación, pero no iba a intentar espiar a alguien que podía leer la mente. “La Srta. Snow White juzgó que estaba bien dejar a Grim Heart sola.”

“Eso fue un error, eh.”

“Me pregunto si realmente lo fue.” “Uh, pero lo fue, ¿no?”

“La Srta. Snow White… parecía no querer trabajar con Grim Heart.

No podría decir si confiaba en ella o no.” “¿Crees que no confía en ella?”

Si Snow White, que podía leer la mente, no confiaba en ella, ¿qué significaba eso? Si Grim Heart hubiera tenido malos pensamientos, entonces no sería una cuestión de confianza, y podría haber dicho allí mismo que tenía malos pensamientos. Incluso si no había un problema inmediato, a veces la gente tenía problemas con su naturaleza, ¿no? Y si se trataba de la naturaleza, entonces con ese aire extraño hacia ella, y cómo se había ido sola a otro lugar, también habría problemas con ella.

“¡Maldita sea!” Styler Mimi golpeó la puerta con amargura. “La puerta sigue diciéndome que introduzca la contraseña.”

“¿Eh?” Dijo Filru. “No dijo nada al entrar, ¿verdad?”

“En ese caso, todo es todo un desastre, ¿no?” Respondió Uttakatta.

“¡Ja, ja, ja! Me encanta. Entonces estamos atrapadas aquí.” Marika Fukuroi era la única persona que parecía estar pasándolo bien. Aunque acababan de conocerse, aun así, algunas de sus aliadas habían muerto. Así que, ¿cómo podía estar riendo? A pesar de que la flor de su cabeza se había marchitado y caído, la chica en cuestión estaba llena de energía y se lo estaba pasando en grande. Tal vez alguien debería reírse de ella.

Había sido tan repentino que habían conseguido todos estos nuevos miembros, así que sería extraño decirle que tuviera más conciencia de grupo. Cuando el número había aumentado a tres, Filru se había preocupado por dividir el crédito, pero luego, cuando Grim Heart y Shufflin, y después Lady Proud, Umbrain, Stanczyka, Snow White, Marika Fukuroi y Styler Mimi se habían unido, bueno, su número había aumentado, pero también lo había hecho el margen de seguridad, y mientras Filru desempeñara un papel, seguiría teniendo crédito… o eso se había consolado. En ese sentido, Filru no podía encontrar ningún fallo en Marika, pero aun así, había que decir algo sobre la actitud.

Si nadie lo iba a decir, ¿debería hacerlo Filru? Marika Fukuroi era alguien tan agresiva que daba miedo. Si eso era lo que impedía que la gente se quejara, ¿no debería ser alguien con confianza en su propia fuerza quien hablara? ¿No era ese el trabajo de Filru?

Mientras dudaba de esas cosas, le temblaba el dedo meñique.

“El mamparo… ¡Se está abriendo! ¡Lado izquierdo! ¡En el lado del desierto!”

Las que estaban sentadas se levantaron rápidamente, y las que estaban de pie prepararon sus armas y salieron corriendo.

Con Marika Fukuroi cargando primero y aullando como una bestia, las chicas mágicas se alinearon en el pasillo. Estaban a quince metros del mamparo.

Al otro lado del mamparo que se abría poco a poco había una cara conocida.

“¿Eh…? ¡¿Estabas viva?!”

Era Shufflin. No era la Shufflin de corazón que había sido cuando la mataron. Era la Shufflin de pica que habían visto en el desierto, y por alguna razón, su número se había convertido en siete. La alegría de que Shufflin estuviera viva, de que hubiera sobrevivido de alguna manera, se borró inmediatamente.

Mudamente, Filru observó. Empezando por el Siete de Picas, salieron filas de Shufflin. Había múltiples Shufflin.

“¡Son enemigos! ¡Luchen!” Gritó Snow White con simpleza, mientras que simultáneamente, todas las Shufflin levantaron sus lanzas en forma de pica a la vez y comenzaron su asalto.

Antes de que Filru pudiera siquiera parpadear, hicieron contacto con el enemigo.

Marika Fukuroi repelió una lanza, pero un garrote le dio en el hombro, y cuando Stanczyka intentó ayudarla, ambas fueron tragadas por la multitud de Shufflin.

Snow White y Princess Deluge salieron al frente y trataron de rechazar a la turba con sus armas, pero sin prestar atención, las Shufflin continuaron su carga. Incluso cuando una o dos resultaron heridas, lo ignoraron.

Filru saltó hacia el techo y se quedó allí, por encima de las cabezas de las Shufflin. Uttakatta se movió al mismo tiempo que ella, saltando por encima de las cabezas de las Shufflin para soplar una bocanada de burbujas y luego meterse en una enorme burbuja que la rodeaba.

Antes de que la atención de las Shufflin pudiera dirigirse hacia arriba, Filru se arrastró por el techo como una araña. Había enhebrado hilos allí arriba de antemano. Mientras sus hilos estuvieran allí, era un juego de niños para ella arrastrarse por el techo, deslizándose por encima de sus cabezas. Las burbujas de Uttakatta siguieron su ritmo y, mientras se movían, compartieron una mirada y asintieron. Cuando llegaron al final de la multitud de Shufflin, saltaron hacia abajo y giraron.

Desde algún lugar en medio del grupo, escucharon el grito salvaje de Marika Fukuroi. Agarró el tobillo de una Shufflin con la mano derecha, mientras que con la izquierda agarró el tobillo de otra Shufflin, y las hizo girar a ambas, golpeando las paredes, el suelo y otras Shufflin.

Snow White cortó el brazo de una Shufflin. Princess Deluge bloqueó la lanza de una Shufflin, congelando toda el arma así como el brazo de Shufflin. Styler Mimi contraatacó con sus tijeras a una Shufflin que se había abierto paso.

Filru apartó de una patada a una Shufflin, mientras Uttakatta soplaba sus burbujas. Había muchas de ellas, y eran fuertes, comparadas con la Shufflin de corazón, pero a nivel individual, no eran tan poderosas. Lentamente, caminaron hacia atrás, atrayendo al enemigo hacia ellas, y abrieron el mamparo. Junto con Uttakatta, Filru saltó ágilmente hacia el desierto, y cuando las Shufflin intentaron seguirlas, todas tropezaron.

Justo antes de salir de la habitación, Filru había colgado un hilo a sus pies. Era una trampa invisible.

Cuando cayeron, las pateó y las pisoteó.

Diariamente, Filru había continuado recitando una y otra vez la regla de que nunca debía mostrar piedad con los amotinados o con los presos que se escapaban, por lo que toda vacilación había sido eliminada de su interior. Para un carcelero era importante gestionar una prisión sin problemas, y no había que mostrar piedad con los delincuentes. Puso el peso de su cuerpo en ello, aplastándolas con la intención de romperles los huesos.

En la batalla, los sentimientos de indignación de Filru hacia Marika Fukuroi desaparecieron. Pisando sin piedad la cabeza de esta chica que hasta hace unos momentos había sido su aliada, le quitó la capacidad de luchar. A su lado, Uttakatta estaba haciendo lo mismo, soplando burbujas en el pasillo.

La batalla fue caótica. Pero ahora ella podía ver hacia dónde se dirigía la situación. Las Shufflin estaban atacando sin preocuparse por sus propias vidas, pero había una clara brecha en la capacidad. Había sido un error del enemigo elegir luchar en el pasillo. En un espacio abierto, podrían haber sido rodeadas, pero en un pasillo, incluso si el lado de las chicas tenía menos números, podrían frenar la marea.

Pasando su aguja por las extremidades de las Shufflin caídas, Filru las cosió al suelo. Hizo lo mismo con las Shufflin que estaban cerca de la pared. Las golpeó con fuerza y, cuando sus movimientos se debilitaron, las cosió a la pared.

Mientras sonaban los golpes, oyó un fuerte golpe a su lado.

Filru miró a Uttakatta. Había perdido su habitual compostura y sonrisa, y con una mirada de incredulidad, sus ojos apuntaban hacia la lanza que le atravesaba la garganta.

La lanza no era sostenida por una Shufflin. Salía del saco que colgaba de la cintura de una de ellas.

La lanza se empujó más adelante, y la sangre rebosó de la garganta de Uttakatta.

Tras la lanza, la mano, el brazo, la cabeza y los hombros de una nueva Shufflin aparecieron del interior de la bolsa; la garganta de Uttakatta escupió sangre y se desplomó.

Era el saco que Grim Heart había llevado de un lado a otro, el que había transportado su dosel y su trono, e incluso una estantería y un escritorio, y que nunca había cambiado de tamaño. Las Shufflin probablemente también cabrían dentro.

Aunque Filru estaba abrumada por el shock, su cabeza calculaba con calma. Si Uttakatta había caído, no podría bloquear el pasillo ella sola. Sólo había logrado contener a las Shufflin porque Uttakatta estaba allí, y habían practicado juntas tácticas de cooperación. En lugar de tomar la mala decisión de continuar con el ataque en pinza, sería mejor alejar a una buena parte de los enemigos y dejar esto a las demás.

Mientras esquivaba y bloqueaba los ataques enemigos, Filru volvió a aferrarse al techo.

***

✰  Grim Heart

Pateó la silla. La sala de reuniones estaba amueblada con un total de seis sillas, y todas ellas permanecían, sin ser afectadas por la explosión de los sujetos experimentales, pero al ser duras e incómodas para sentarse, dado que los bárbaros ya no las usarían, no había razón para que Grim Heart las utilizara.

Sacando su trono favorito, lo colocó en el centro de la habitación.

Sólo el as de espadas estaba a su lado.

Todas las Shufflin que habían llenado esta sala se habían quemado. Grim Heart sólo había logrado uno de sus objetivos hasta ahora. E incluso eso estaba incompleto.

Básicamente había logrado su objetivo de conseguir los sujetos experimentales: dos de ellos, la elemental de tierra y la elemental de viento.

Para capturar a este último sujeto, había hecho que uno de los tréboles acechara en el desierto y atacara. Los tréboles eran expertos en emboscadas y actividades encubiertas, y sus habilidades de combate sólo eran superadas por las picas.

No existía ninguna chica mágica que fuera capaz de contraatacar a un trébol que la tomara por sorpresa escondiéndose en el desierto usando la bolsa cuatridimensional. Grim Heart había conseguido un sujeto experimental, y también había capturado a Kafuria, que había estado en combate con el experimento. A ésa le daría un uso diferente.

En cuanto al sujeto de tierra, le había puesto el as de espadas. Este sujeto en particular había cumplido su papel de peón sacrificado para dejar escapar al sujeto de fuego, y lo hacía tan bien que resultaba francamente irritante.

Además, Grim Heart había conseguido a Umbrain como chica mágica de reposición.

Mientras Grim Heart y la Shufflin corazón habían acaparado los ojos y oídos de todos los presentes, el As de Picas y el As de Tréboles habían saltado de la bolsa para atraparla. Ni una sola persona se había dado cuenta de ese ataque sorpresa de la profesional del sigilo y de la profesional del combate, incluida la que había sido atacada.

Eso debería ser suficiente para la reposición. Y en cuanto a los sujetos experimentales, también estaba bien. Dos serían suficientes. Deberían ser datos suficientes. No dejaría que los académicos se quejaran.

El mayor problema era que un número ridículo de chicas mágicas se había enterado del proyecto de chicas mágicas artificiales que se estaba llevando a cabo en este mundo. Grim Heart tenía que hacer que ese plan nunca hubiera existido.

La insolencia de simples súbditos bajo el mando del Reino Mágico intentando crear chicas mágicas con sus propias manos era desorbitada. Cuando los niños abrían una puerta que no debía abrirse, eran castigados. Sólo su conocimiento era un pecado.

Grim Heart ya había dejado escapar a una, pero aceptaría que hubo forma de evitarlo. Si su número disminuía, habría cualquier número de formas de tapar el agujero. Y además, incluso la que había dejado escapar estaba tan malherida que pronto debería caer muerta. No había ningún problema. Grim Heart se había resignado incluso a la humillación de fingir que cooperaba con los bárbaros con tal de acorralarlos a todos, y ahora por fin había conseguido encerrarlos a todos. Ahora las Shufflin se las arreglarían, de alguna manera. Grim Heart simplemente tenía que esperar.

Grim Heart miró el perfil del As de Espadas. Simplemente miraba al frente, sin ninguna emoción profunda en su rostro.

Era una chica mágica aburrida. Pero era capaz.

Si Grim Heart consiguiera la tecnología para hacer “chicas mágicas artificial” de este mundo, podría convertirla en una sirvienta aún más capaz. Este mundo era bárbaro, pero las diferencias en su cultura e ideas podían dar lugar a una tecnología única. Por lo que había visto, había algún material muy intrigante, como los potenciadores temporales y la cooperación para provocar una explosión.

Grim Heart también quería equipar a Shufflin con esa tecnología. La excelente tecnología debería ser utilizada por el homúnculo, la chica mágica artificial creada por el Reino Mágico.

Pero las fuerzas de Grim Heart no eran suficientes. Las Shufflin de diamante, que estaban a cargo de las habilidades y el conocimiento, estaban todas muertas. Aunque habían podido cambiar la contraseña de la entrada, Grim Heart no podía hacer nada más, por su cuenta.

La idea de que Grim Heart tuviera que salir a hacer algo ella misma era absurda, en primer lugar. Debería quedarse sentada mientras sus sirvientes hacían lo que ella quería. Sería vergonzoso para ella tener que corretear para lidiar con esos bárbaros, y la vergüenza equivalía a la muerte.

Grim Heart —uno de los Tres Sabios que se decía que eran los más grandes magos del Reino Mágico, la encarnación mortal de Chêne Osk Baal Mel— no tenía ninguna obligación de hacer el trabajo. Su propia existencia era el sentido de su existencia.

Grim Heart metió la mano en su bolsa para sacar a las dos chicas mágicas y a dos sujetos experimentales: el sujeto de viento, el de tierra, Kafuria y Umbrain. Todas habían sido atadas con una cuerda mágica. No podían moverse y el uso de su magia estaba sellado.

Kafuria se lamentaba de algo en forma de chillidos.

Parecía que se había emocionado, y estaba gritando y llorando.

No había necesidad de entender lo que decía. El hecho de que fuera irritante hizo que Grim Heart se decidiera por ella como primer sacrificio. Volviendo a meter la mano en la bolsa, sacó a Shufflin.

“Que le corten la cabeza.”

No era necesario decir de quién. Levantando su gran guadaña, Shufflin la balanceó hacia abajo.

El Joker era un excelente sirviente. No traicionaría la confianza de su amo. Cuando Grim Heart encontraba a Kafuria irritante y deseaba hacerla callar, el Joker intuía sus sentimientos y actuaba. Si era necesario un sacrificio, el Joker sacrificaba primero a quien más desagradaba a su ama.

La cabeza de Kafuria salió volando, y su fuerza vital se vertió en las Shufflin a través del Joker. Todas las Shufflin que habían sido quemadas, así como la que había sido devorada, todas las que habían perdido su fuerza vital se generaron una tras otra desde el cuerpo del Joker.

Con el sacrificio de una chica mágica, podría reponer en su totalidad a las cincuenta y dos que le faltaban.

Las Shufflin de picas eran eficaces en la batalla, las Shufflin de diamantes tenían habilidades y conocimientos, las Shufflin de trébol eran excelentes en la ocultación y el sigilo, y las Shufflin de corazones eran estúpidas e incompetentes, y sólo destacaban por su resistencia anormal, que las hacía dignas de ser torturadas. Mientras el Joker estuviera vivo, la vida de una chica mágica podría reponerlas a todas.

Los dos experimentos y Umbrain estaban armando un escándalo.

La forma en que temblaban de miedo era un buen entretenimiento.

“Diamantes, apúrense y tomen el control de los sistemas de la instalación. Picas, acaben con las chicas mágicas restantes.”

Grim Heart asintió satisfecha mientras escuchaba las instrucciones del Joker.