Totsuzen Papa ni Natta (NL)

Volumen 4

Capítulo 6: El Sr. Dragón Canta una Canción de Cuna

Mi plan fue un éxito rotundo. Al oír mi canto, las sirenas se quedaron pasmadas… y luego todas se desplomaron de risa. Se reían tanto que se agarraban el estómago de dolor. Las sirenas empezaron entonces a aplaudir, y todas parecían un poco excitadas. Habían dejado de cantar por completo.

Uhh… Estaba cantando con mucha pasión, ¿no?

Poco después, la tripulación empezó a salir a cubierta y a gritar. “¡Sirenas! ¡¿Las leyendas eran ciertas?!”

“Teníamos tapones de cera para los oídos y todo, pero nunca tuvimos la oportunidad de usarlos…”

“¿Qué pasa con esta canción? Nunca la había escuchado, pero me está dando todo tipo de energía…”

Al oír mi voz cantarina, la tripulación también se echó a reír. Algunos incluso empezaron a bailar. Tenían el mismo aspecto que Olivia cuando era más joven. No tenía ni idea de lo que estaba pasando. Se suponía que era una canción de cuna.

Olivia estaba a mi lado, cantando conmigo.

Esto me trajo a la mente todo tipo de recuerdos nostálgicos, como cantar juntos bajo la luz de la luna en el viejo santuario que llamábamos hogar.

“Me sorprende que recuerdes la letra. Eras muy joven cuando te canté esa canción.”

“Tee jee, ¡me aseguré de no olvidarla!”

Entramos en un ritmo constante, cantando juntos con energía.

Empezaba a ser bastante divertido.

“Haugh… ¿Estaba dormida? ¿Y qué es esta loca canción de cuna?” “Suena como la voz del Dragón Anciano… Esa fue una buena

siesta…”

“¡Eh, no te duermas otra vez, Clowria!”

“Lo siento, escuchar una nana tan… creativa me está dando sueño otra vez.”

“En efecto, es la primera vez que escucho una de las nanas del Dragón Anciano… Me produce la misma sensación que aquel dibujo que Olivia hizo de su padre hace un tiempo.”

“Sí, entiendo lo que quieres decir.”

La Reina Oscura y Clowria sonrieron mientras nos observaban.

¿De verdad es tan creativa esta nana?

“Para, estás haciendo que me sonroje.”

“¡Eso no fue un cumplido!”

“Sin embargo, gracias al canto de Sir Dragón Anciano, hemos

evitado hundirnos. ¿No deberías darle las gracias, como capitana?” “Haugh, supongo.”

Poco después de que llegaran las dos damas, Shadow también subió a cubierta. Parecía mucho mejor después de comer y dormir. Volvía a tener la forma humana de piel oscura y cabello plateado con la que lo conocimos.

“Ah… ya veo. Por eso, caí en el mar…” “¿Qué quieres decir?” Le pregunté.

“Me fui de casa, volando. Entonces tuve mucho sueño…” “Y entonces apareciste en la playa, ¿eh?”

Eso significaba que nos dirigíamos definitivamente en dirección a Vandilsen. De momento las sirenas parecían haber renunciado por completo a cantar, pero para estar seguros, la tripulación se puso los tapones para los oídos. Cuando amainara la tormenta, todo iría sobre ruedas.

Pero no parecía que las cosas fueran a ser tan fáciles ahora. La lluvia era cada vez más intensa, y el viento que soplaba justo delante de nosotros hacía que pareciera que llovía de lado.

“¿No tienes frío, Olivia?”

“No, estoy bien. Gracias, papi.”

“Eso está bien.”

Que conste que yo tenía mucho frío. Como era un poco más grande, podía soportar el frío mejor que Shadow, pero los dragones seguían siendo como grandes lagartos. Si hacía mucho frío fuera, empezábamos a ralentizarnos. Sin embargo, a diferencia de los lagartos, podíamos utilizar la energía del aire para crear fuego en nuestro interior y seguir moviéndonos. Aun así, seguía siendo bastante sensible al frío.

“Ahora bien, no tiene sentido estar arriba en la cubierta, así que vamos a volver—¿eh?”

“¿P-Papi? ¿Oyes algo?”

Pudimos oír otro ruido enervante y retumbante. Sonaba como si algo estuviera debajo de nosotros, retorciéndose bajo las olas.

“¿Haugh? ¿Sigue roncando esa gran tortuga?” “No, ya estoy despierto.” Respondió Pao Pao. “¿Oh? Entonces… ¿qué es este sonido?”

Tenía un mal presentimiento. Aunque las sirenas se habían estado riendo y sonriendo con mi canción de antes, ahora se miraban unas a otras con expresiones nerviosas en sus rostros… y luego empezaron a saltar de nuevo al mar.

En ese momento… “¡Whoa!”

“¡Papi!”

Sentí que algo tiraba de mi cuerpo. Algo pesado y blando se había enrollado alrededor de mi cuerpo. Y una especie de manchas se me pegaban y no podía quitármelas.

“¡W-Whoa!” “¡Dragón Anciano!”

“¡Mi Reina, esto es…!”

“¡Es… de papá, un kraken!” Exclamó Shadow.

¿Un kraken? ¿Tal vez era la mascota de Vandilsen o algo así? No quería ser demasiado brusco, pero tendría que volver a mi forma de dragón para que me dejara…

Oh, oh. Tardé un momento en darme cuenta de que me habían arrastrado bajo el agua. No podía respirar. ¿Qué hago ahora? Mi visión se estaba oscureciendo. Eso significa… ¡Me estoy ahogando!

Después de lo ocurrido durante la excursión de Olivia al lago, debería haberme esforzado por aprender a nadar. Pero ya era demasiado tarde para lamentarlo. Si me convertía en mi forma de dragón, pesaría tanto que me hundiría. No sería capaz de volver a la superficie…

Estaba realmente atascado. ¿Debería usar fuego para evaporar toda el agua? No, entonces terminaría hirviendo al Sr. Pao Pao y a las sirenas… El barco en el que estaba Olivia también estaría en grandes problemas.

No pude hacerlo en absoluto.

Uh oh… No puedo respirar…

***

Qué decepción, pensé. Había pensado que un dragón antiguo sería capaz de enfrentarse a papá. Pero los dragones de mar nunca subían a tierra, y los dragones de tierra nunca bajaban al mar. Como dragón de tierra, comprendí que no estábamos hechos para nadar.

“¡Papi!” Gritó la niña humana mientras corría tras él.

Ríndete. La mascota de papá no sólo era grande, era violenta. También había puesto esas sirenas alrededor del continente, y seguían hundiendo cualquier barco que se acercara. Papá había conservado este kraken durante miles de años. No permitía que nadie se le acercara.

Estaba seguro de que ya se había dado cuenta de que había desaparecido. Si estaba enfadado, sus mascotas empezarían a reflejarlo. Así es como estaban hechas. No había nada que pudiéramos hacer. Papá se había enloquecido, y era mi culpa. Ya no había forma de detenerlo.

“¡Sr. Pao Pao, por favor ayude a papá!” “¿Eh…?”

“¡Papá no sabe nadar!”

“¡Ya lo tengo! ¡Déjaaaaamelo aaaa míííííííí!”

En el momento en que la hija del dragón gritó a la enorme tortuga, ésta se sumergió bajo las olas con un chapoteo. El barco que había estado posado sobre su lomo volvió a flotar directamente sobre el agua.

Esta enorme tortuga podía entender el habla. Probablemente era una criatura antigua y orgullosa. Pero nadie podía derrotar al kraken en el océano. Me sentí mal por la tortuga; su larga vida estaría llegando a su fin y se convertiría en comida para un calamar.

Pero mientras observaba fríamente a Olivia, la superficie del agua empezó a agitarse.

¿Qué está pasando? ¿Qué demonios está pasando?

Con un rugido y un tremendo chapoteo, el kraken fue lanzado fuera del agua y hacia el cielo.

¿Eh? ¿Qué ha pasado?

“¡Jo jo jo, el caparazón de una tortuga puede no ser rival para un calamar, pero mi edad es otra cosa!”

“¡¿Eh…?!”

El kraken había sido lanzado por los aires. El dragón anciano había vuelto a su forma de dragón y había salido volando del agua, libre ya de los tentáculos de la criatura. Pero el kraken alargó un tentáculo. Tal vez había apuntado antes al dragón por su canción, pero esta vez apuntaba al barco.

“¡Si un calamar es un pez, entonces…!” Olivia estiró las manos hacia el kraken. Antes de que pudiera siquiera preguntarme qué estaba haciendo, un destello de brillante luz blanca me cegó. Al mismo tiempo, un sonido parecido a una explosión llenó el aire.

Ah, ya veo.

“… Relámpago.”

***

El rayo de Olivia alcanzó al kraken en pleno vuelo. El monstruo paralizado cayó al mar, creando una enorme ola. El rayo no había tocado el agua en absoluto, así que el Sr. Pao Pao y los demás peces que nadaban cerca estaban bien.

“¡Papi!”

“Gracias por salvarme, Olivia…” Nunca hubiera imaginado que diría esas palabras. ¡Se había vuelto tan capaz!

Ha crecido mucho, ¿verdad?

Bajé a la cubierta del barco, donde Olivia me agarró del hocico en un fuerte abrazo.

“¡Gracias a Dios, papi!” “Gracias, Olivia.”

“¡Tee jee! Todos decían que no debía hacerlo más, pero acabé otra vez terminé usando ese hechizo.”

“Sí… Bueno, sólo le diste al calamar, y fue una especie de emergencia…” Evitamos mirar a la aturdida criatura, que flotaba en la superficie del agua. Me sentí un poco mal por ella.

Puede que se debiera a los relámpagos de Olivia, pero la lluvia había cesado y las nubes empezaban a diluirse. Con un fuerte suspiro hacia arriba, dispersé las nubes para dar los últimos retoques al tiempo. Cuando el sol apareció de nuevo sobre nosotros, la tripulación del barco empezó a celebrarlo.

“¡Lo hemos conseguido! ¡Vencimos a las sirenas y a un kraken!

¡Dos causas legendarias de naufragios!”

“¿Viste lo que acaba de hacer? ¡Esa Alumna del Rey es verdaderamente increíble!”

“¡Hurra! ¡Esta noche hay fiesta de calamar! ¡Viva Olivia!” Los aplausos para Olivia comenzaron por todo el barco.

“Haugh… Mira lo popular que es… Quizás ha llegado el momento de cederle el puesto de Capitana…” La Reina Oscura se quitó el sombrero de capitana y se lo puso en la cabeza a Olivia.

“¿Srta. Maredia?”

“Olivia… Te confío este sombrero a ti.” “¿Eh?”

“¡Ahhh! ¡Siempre quise decir una frase así! ¿Cómo fue, Clowria?

¡¿Cómo fue?!”

“Estuvo muy bien, mi Reina.” Respondió Clowria con una risita. “¡Sí!”

“Tee jee, ¿me queda bien?” Preguntó Olivia. “¡En efecto, te queda perfecto!”

Con el calamar gigante derrotado y el tiempo despejado, todo el mundo se sentía alegre.

Bien, bien.

Habíamos escapado del peligro, o al menos, lo habíamos hecho por ahora.

“Shadow, ¿estás bien?” Le pregunté.

“… Sí.” Shadow asintió. “Dragón, Olivia… Umm…” “¿Qué pasa?”

“Quiero hablar, un poco más.” Dijo, con expresión seria. “Sé… para qué quiere papá usar las Reliquias.”