Ore no Imōto ga Konna ni Kawaii Wake ga Nai (NL)

Volumen 5

Capitulo 2: Imaginar Alguna Forma De Amor

Parte 3

Hoy es viernes.

Íbamos a hacer la fiesta de bienvenida hoy.

Por eso es que cuando las clases terminaron, fui a buscar a Kuroneko, porque con lo que ha pasado, estaba preocupado que no fuera a la fiesta.

De hecho, después de lo que paso, ya no la volví a ver.

“No soy el reemplazo de tu hermana” ¿eh? Pienso que esta frase es algo que solo un personaje de un manga diría.

Pero… lo cierto es que… lo que dijo… rompió mi corazón.

Lo que ella decía era cierto, empecé a considerarla como mi hermanita también. Es por eso que empecé a cuidarla.

Pero lo que sigo diciendo, es que, los primeros meses en una nueva escuela son vitales para un estudiante.

Es ahí cuando se decide a que club ir, como hacer amigos… etcétera.

Si fallas en hacer eso, en adelante, las cosas en la escuela solo se te complicarían.

Evidentemente mi situación esta bien, pero como estudiante de preparatoria, estoy al pendiente de estas cuestiones.

Es por eso que Kuroneko me preocupa.

No miento cuando digo que estos son mis sentimientos…

¿Pero eso era todo? ¿Esa era la única razón por la cual me afligía por ella? Probablemente no.

Metí la nariz en los problemas de Kuroneko porque… no espero que ella diga “gracias”, pero la ayudo porque… la imagen de Kuroneko y la de esta niña solitaria se traslaparon.

Y ahora que no esta más por aquí, inconscientemente, sigo tratando de ayudarla.

Ahora recuerdo lo bien que me sentía cuando ella dependía de mi, pero ahora… tal vez es por eso que yo… ay, no tengo remedio.

Pero esto no importa.

Haré lo que tengo que hacer.

Y aunque me siento avergonzado porque descubrió mi motivo, seguía queriendo ayudarla, sin mencionar la promesa que le hice a Saori.

Incluso si yo mismo no se que es lo siento, estoy seguro de lo que tengo que hacer y de que lo quiero hacer ahora.

“Muy bien. Hagámoslo.”

Tranquilizándome, me di cuenta que yo ya estaba frente a los salones de primero. Las clases terminaron, todos han empezado a irse a sus casas… ¿y si ella me evita? Trate de deshacerme de esos pensamientos.

Abrí la puerta.

No esta.

“aahhhh haaah”

Sacudí la cabeza, no había tiempo que perder. Tengo que seguirla en seguida.

Con angustia voltee para todos lados… “¡aaaaaaahh!”

Casi brinco del susto.

Porque Kuroneko estaba justo detrás de mi. Su cara inexpresiva casi choca con la mía.

“… Escabulléndote en los salones de primer año como un viejo pervertido…” “Ah”

¿Seguiría enojada?

Ella siempre habla en el mismo tono, así que no puedo saber su estado de ánimo. “Oye…”

¿Qué debía decirle?

Había preparado muchas disculpas, pero ahora no podía recordar ninguna de ellas.

Mientras buscaba que decir, Kuroneko me dio la espalda a la vez que me lanzaba una mirada de hielo.

“ummm… Apurate.” Empezó a alejarse.

Yo me di prisa para alcanzarla.

Parecía que se dirigía a la fiesta de bienvenida.

Aunque ya llevamos tiempo de conocernos, ahora en este momento, no puedo ni siquiera imaginarme que es lo que esta pensando.

Nuestra fiesta no se llevaría a cabo en el salón del club; para eso pedimos prestado un salón de clases.

Llevamos botanas y algunas bebidas, eso fue todo.

Comparada con algunas otras fiestas a las que he asistido, esta era muy pequeña. Pero eso era porque en todas las demás Saori había sido la organizadora.

Eso demuestra que mi definición de “normal” difiere un poco de la de los demás. Y cuando estaba a punto de alcanzar a Kuroneko le dije:

“Este… me tranquiliza ver que estas ansiosa por unirte a la fiesta. Pensé que odiabas a las multitudes.”

“Claro que odio a las multitudes. En especial en fiestas como esta.” Seguía mirando de frente, sin que volteara a mirarme.

Estaba a punto de preguntarle: “entonces porque todavía quieres venir”, pero me interrumpió:

“Pero el ambiente en este club es bueno. De hecho es mucho mejor para hacer un juego con mis propios recursos. Así que al menos tratare de cooperar.”

“Entiendo.”

Estimo que solo la mitad de lo que dice es cierto.

Pero aparte de eso, creo que hay otra razón…

“Yo… pienso que Kuroneko no esta enojada, si yo fuera ella, también diría una o dos cosas ofensivas. Todo lo que necesitas es disculparte mas tarde con ella, probablemente te perdone” eso fue lo que Saori me dijo cuando hable con ella unos días antes.

No estoy seguro a lo que se refería cuando dijo “si yo fuera Kuroneko” pero ahora eso no importa. En otras palabras, Kuroneko tiene otra razón… ¿o me equivoco?

… Luego de que ella llegara a la puerta, aun mirando de frente, me ordeno: “Entra.”

“Si señora.”

Me puse en su lugar y abrí la puerta.

Ya había un buen número de miembros dentro.

Estaban haciendo los últimos preparativos, como acomodando mesas y sillas, servir los refrescos… después de un pequeño saludo me les uní.

Esta es la primera vez que veo a tanta gente en este grupo.

Parece ser que incluso algunos de los miembros inactivos vinieron también. Y después de que todo estuviera listo, cada quien tomo un lugar.

Yo me senté en un lugar cualquiera y enseguida Kuroneko se sentó a mi lago. “¿Pasa algo?”

“Nada.”

A Kuroneko le daban miedo los extraños, así que aunque estuviera enojada, ella se sentaría junto a mi.

Pero… ¿Dónde esta esa tal Sena?

Mire hacia todos lados hasta que encontré a una chica con lentes, la que asumí que era Sena.

Comparada con alguien de su edad, era alta, un poco flaquita con un pecho muy desarrollado que le da un aire de madurez.

Cabello corto, rojo natural. No parecía muy estricta.

Lentes de chica.

Toda una lindura.

Pero la cara que tenia gritaba “estoy de mal humor”. Makabe, que parecía derrotado, le dijo:

“Akagi-san, hay un asiento justo aqui.” “Ahhh…”

Ella miró en nuestra dirección. “Ahí estas bien, espera por favor.”

Ella se sentó en un lugar entre Makabe y yo.

Es decir, de derecha a izquierda estábamos Kuroneko, yo, Sena, Makabe, tipo gordo, presidente, otro gordo… yo no esperaba quedar emparedado entre dos muchachas, pero bueno, esto también puede funcionar.

“Escuchen todos… Vamos a empezar.”

Makabe acaba de anunciar, dirigiéndose a todos.

Algunos también dieron sus respectivos saludos y luego todo volvió a la normalidad. “Primero, nuestro presidente tiene algo que decir.”

“Gracias a todos por reunirse hoy aquí. Espero que este año nos llevemos mejor. ¡Salud!” Después de eso, se podían escuchar murmullos provenientes de todos los rincones de la sala.

Mire a todos los presentes, por supuesto que ellos eran mas o menos otakus, pero a mi parecer, de lo que había visto en el Comiket o en fiestas de Cosplay, no había nada.

Evidentemente, todos ellos tenían que obedecer las reglas y portar el uniforme. Pero hablaban sobre temas de otakus.

Seguramente era por eso que se habían reunido.

Y Kuroneko… seguía callada, sin comer nada, solo mirando a los demás. A ella realmente no le gustaba este tipo de ambiente.

Tuve un mal presentimiento cuando escuche la palabra “fiesta” además del hecho de que también odia las aglomeraciones de gente, entonces tuve que planear ayudarla con las conversaciones, al menos hasta que consiguiera un amigo.

El mejor ejemplo es con Kirino.

Después de que ella se fue, Kuroneko parece tan solitaria.

Por fuera ella parece tan dura, pero al interior es solo una niña. “Entonces…”

¿Qué es lo que sigue? Mire de ladito a Sena.

No importaba lo que ella hiciera, mientras Kuroneko mantuviera su aura de “no te me acerques”, ella no respondería.

Deseaba poder hacer que hablara con Kuroneko.

“Mucho gusto. Mi nombre es Kousaka. Soy de tercer año.” “Mucho gusto. Soy Akagi, de primero.”

“Ya veo.”

Parece que esto va muy bien.

La chica no parecía un otaku, y aunque es bonita, no se parece a ninguna de las amigas de Kirino. Si esto fuera un eroge, definitivamente ella seria una “jefa de grupo”.[3]

“¿Hay algún problema?”

“Nada, solo que no pareces muy contenta.” “Siempre estoy así.”

“Ohh… ya veo.”

Demasiado pesada para una conversación.

Mirando mi cara apenada, Sena pareció avergonzada.

Al menos era diferente a Kuroneko quien siempre tiene la misma expresión.

“Ah… realmente no estoy de mal humor, es que simplemente no puedo disfrutar este club.” “¿Por qué?”

“¿Por qué? En primera, porque toda esa inmundicia de hombres me hacen querer vomitar. Segundo, se llaman a si mismos club de investigación de juegos, pero lo que en realidad hacen es malgastar el tiempo hablando tonterías. Y tercero, ellos con toda libertad llenaron de eroges y figuritas el salón del club.”

Sena agitaba sus dedos mientras hablaba. Y yo era incapaz de responderle algo. “¿Entonces por que te uniste?”

Le pregunte lo primero que me vino a la mente.

¿Tal vez Makabe seguía presionándola y ella no quería rechazarlo?

Noooo… si ella es capaz de decir cosas tan crueles, entonces rechazar algo le seria fácil. “Si… ¿por que?”

“Porque quería aprender a programar.” “¿Aprender a programar?”

Sena parecía molesta porque yo no dejaba de preguntar y respondió:

“El juego que hizo el presidente es muy profesional, entonces lo más que puedo hacer es preguntar como lo hizo. Y después de enterarme que el podía hacer todo desde componer hasta crear mapas de nivel, decidí unirme. Después de eso, me di cuenta de que si, en efecto hay muchos buenos equipos en el club, pero, están muy estropeados. Aun así creo que elegí la opción correcta.”

Al igual que Kuroneko, a esta chica le gusto tanto el equipo del club que decidió unirse. Si esta fuera Kuroneko, seguramente usaría el mismo pretexto para ocultar su timidez.

¿Pero que había sobre Sena?

Ella también podía ganarle a ese juego, ¿así que esto implicaba que también a ella le gustaban los juegos?

Pero ella no parecía un otaku en lo absoluto.

“Hay otra razón por la cual ya no soporto este club…” “¿y cual es?”

“La completa falta de reglas y disciplina. Por ejemplo este desordenada reunión: los escándalos de allá, los flojos de por allá y los aquellos asquerosos; sin mencionar que algunas veces se roban las cosas. Los detesto a todos ellos.”

¿A dónde he oído esa frase antes? ¿Así que no solo lucia como una jefa de grupo, sino que actuaba como tal?

“Estas en lo cierto…”

“Gracias… es por eso que te digo que ya no lo soporto. Este club es demasiado informal. Entre ellos solo hay un reducido grupo de gente seria tratando de hacer algo… sin mencionar que nuestro presidente no se ha bañado en un largo tiempo.”

Bebió de su vaso y continúo.

“Es por eso que no puedo permitir que las cosas sigan de esta manera.” Creo que ya lo entendí.

Esta mujer no solo actúa como jefa de grupo, sino que también se cree la administradora. Ella se va meter en cualquier asunto que le parezca “no lo suficientemente bueno”.

Que pesadilla de chica.

Seguramente le decía a sus compañeritos de la primaria que “limpiaran todo a detalle”… “¿Ehh? ¿Por qué te me quedas mirando?”

“Ah… no… nada…”

No me atrevía a hablarle de nuevo, necesitaba cambiar de tema, ¡rápido!

“No pareces una otaku. Es mas, ni siquiera pareces alguien a quien le interesen los juegos.” “Ah…. Eso es porque…”

Miró al horizonte, se acomodo los lentes y dijo:

“Es bueno oírlo. Ya que nunca me he considerado igual que todos estos.” Me sentí un poco irritado, cuando insinuaban que yo ya era un otaku.

Aparte, eso ya lo había escuchado antes, de mi propia hermana. Así que le pregunté: “¿Sabe tu familia que te uniste a este club?”

“No tendría porque ocultarlo. Bueno, no es que lo ande pregonando, pero, incluso si ellos se enteraran, yo no tendría problemas de ninguna clase.”

“¿Así que es eso?”

¿De donde sacaba tanta confianza?

“¿No te preocupa que alguien lo descubra y te considere un otaku?”

“Lo negaría. Si me preguntan la razón por la cual me uní les respondería “programación”. Aunque en realidad no me interesa si alguien me dijera otaku.”

“Estoy sorprendido.”

Pensé que detestaba a los otakus, ¿pero esto? Este asunto se esta complicando mas y mas.

Por ahora recordemos únicamente lo primero que dijo. De repente, la voz de Sena cambió a un tono amigable.

“Por ejemplo, recientemente han salido animes acerca de “chicas con un pasatiempo otaku oculto”. Todos ellos son exageraciones. En la vida real, no te puedes meter en problemas únicamente con que te guste un juego o un anime. De hecho, la gente hasta va al cine a ver anime.”

¿Así que lo que estaba diciendo es que un otaku ahora es más aceptado que antes? ¿esas eran buenas noticias para los otakus, cierto?

Solo que…

“¿Y sobre los eroges? ¿Hablabas también de eso?” “Claro…”

Cerrando los ojos, dijo:

“Depende de que tan serio sea. Una cosa es el tipo de eroge que te guste, pero hablar de ello en una reunión social es otra cosa.”

Kirino alguna vez dijo lo mismo.

Esa era la razón por la cual no mostró su lado otaku en la escuela.

Sin embargo, a diferencia de Sena, Kirino todavía tiene que verificar con quien habla antes de decir algo.

En otras palabras, ella establece un límite a lo que dice.

Bueno, para una niña de secundaria tal vez esa es la mejor opción.

“En mi opinión, la gente no odia a los otakus nada más porque son otakus. Ellos son odiados porque están llenos de muchos defectos abominables. Por ejemplo…”

Ella claramente sabía quien estaba junto a mi, aun así continuó:

“Por ejemplo, algunas personas siguen actuando extrañamente a donde sea que vayan. Esa gente es la peor.”

“…” Kuroneko probablemente podía escuchar todo, pero seguía inmóvil.

Mierda, el ambiente estaba muy pesado. ¿Ay…? No puede ser… ¿apoco la cague? … Seguramente… “Si quieres vivir mucho, deberías mirar a todos lados antes de hablar.”

“… Ah, Gokou-san. Pero si también estas aquí. Eres tan insignificante, que no te vi hasta este momento.”

“¡¿Cómo me llamaste?! ¡Usa mi nombre real!”

“No entiendo lo que dices. ¿Nombre real? Que flojera. ¿No crees, Gokou-san? Por cierto ¿te sientes bien? ¿Cuánto mas vas a seguir con eso?”

“Ehhh… Mi nombre real es Kuroneko. Sin importar como me llames, mi alma no te responderá.” “Para mí, es tu estupidez la que te impide responderme.”

Oigan ustedes dos…

“¿Ustedes dos ya se conocen?”

Mis ojos saltaban entre una y la otra…

“Já … ella es la mujer más desesperante de toda la clase.” “… Ella es la mujer más latosa de toda la clase.”

Bueno… las dos, se… odian mutuamente.

¿Pero que diablos?

Había escuchado que tanto ella como Kuroneko estaban en primer año. Mire a Makabe, el también parecía perdido.

Bien, primero necesitamos calmarlas.

Aprendí de Saori que es mejor detenerlas antes de que la discusión empeore. “¡Ya cálmense!”

“Jáh. Jamás voy a hablar con ella.” “¡Es justo lo que iba a decir!”

De los ojos de ambas, casi se podían ver salir de ambas rayos y centellas. Tenia que detener esto de inmediato.

Pero era incapaz de pensar en algo, tenia la mente completamente en blanco. Afortunadamente Makabe salió en mi ayuda.

“Gokou-san, Akagi-san, ya que las dos son miembros de nuestro club ¿Por qué no tratan de ser mas amables entre ustedes dos?”

“Estoy muy apenada Senpai, pero cuando me entere que ella estaba en el mismo club que yo quise enseñarle algo de educación. Es una demente. Por lo que hace, por lo que dice. Menosprecia a todos los compañeros con esa manera tan hiriente de hablar. Jamás había conocido a alguien tan abominable. Todos dicen que a la hora del recreo, seguramente ella va al baño a comer mierda.”

Ya detente por favor. Estoy que chillo.

“¡Ahora resulta! O sea que te pudre que yo este en el mismo club que tu. No te preocupes, yo también detesto estar en el mismo lado que tu.”

Kuroneko se levanto (de sus ojos empezaban a salir lagrimas). “Oye, espera.”

De inmediato jale del hombro a Kuroneko.

“Por favor… tómalo con calma.”

“Si, Gokou-san. ¿Acaso dije que eras una molestia?”

¿Y esta pendeja que es lo que quiere decir? Invicta, miraba a Kuroneko:

“Ahora, ya que estamos en el mismo club, es una buena oportunidad para mí de regresarte al buen camino. Así que si decides huir ahora, entonces si se volverá un problema.”

Todos nos quedamos callados.

Después de diez segundos Kuroneko con voz trémula, pregunto:

“… ¿Quién te pidió que lo hicieras?”

“Nadie. Lo decidí yo sola. Pero primero apréndete esto: no lo hago por buena voluntad o por amistad. Simplemente lo hago porque no tolero a la gente como tu.”

Lo que dijo fue bastante duro, pero era cierto.

Y aunque teníamos diferentes motivos, lo que cada uno de nosotros planeaba para con Kuroneko, era lo mismo.

“…”

El ambiente en el salón era muy tenso.

Nadie dijo nada hasta que… hubo un ruido extraño… todos voltearon hacia la fuente de donde provino.

“Ay… lo siento. Por accidente se me salió uno…” El presidente alzo la mano y se disculpó. “Imbécil.”

Sena cerró los ojos, apretando los parpados hasta fruncirlos y luego lanzo una mirada asesina al presidente.

Y esta vez, Makabe no critico al presidente como acostumbra.

A lo mejor lo que el presidente quiso hacer fue algo que detuviera a esas dos. Sin embargo, apesta.

Makabe abrió la ventana y se dirigió a Sena:

“Es una lastima. Pensé que ustedes dos se harían buenas amigas rápidamente, pero…” “¿Qué? O sea… ¿esa y yo?”

“Si. Las dos son buenas jugando. No estoy completamente seguro, pero creo que están casi al mismo nivel.”

Después de que dijo eso, tanto Kuroneko como Sena tenían una expresión de “no inventes”.

No podría asegurar nada con Sena, pero estoy seguro que Kuroneko estaba pensando: “¿igual, que yo?”

“Makabe Senpai, ¿me estas diciendo que Gokou-san es tan buena como yo jugando?”

“Si. Tu eres buena anticipándote a la situación. Pero el tiempo de reacción de Gokou-san esta a la par de Matsudo Blackcat[4], es casi sobrehumano.”

“¡Definitivamente estas exagerando!” Sena lo interrumpió.

“¿Crees?”

“Pienso que es una grosería compararlo a él, con esta chamaquita de secundaria. Makabe Senpai, no deberías alabar a esta mujer con palabras tan inverosímiles como esas.”

“Oh… Ah… j aja, perdón. Akagi, perdón.” Parece que Sena es fan de ese tal Matsudo. “…”

Kuroneko estaba calladita, escuchando la discusión.

¿Pero que carajo?

¿Por qué siguen hablando de juegos?

Deberían de cambiar de tema para que ellas no se vuelvan a pelear. Sin embargo no creo que eso sea tan malo.

La primera vez que Kirino y Kuroneko se vieron, no, cada vez que se ven, ellas discuten.

Pero al final de todo, se han vuelto buenas amigas, porque ambas querían a alguien con quien pudieran compartir sus aficiones.

Después de que Kirino se fue, Kuroneko perdió a su mejor contrincante.

Y ahora Sena obstinadamente la rechazaba, ¿es esto lo que Kuroneko necesita ahora? Cuando la fiesta terminó, Kuroneko y sena seguían sin ser amigas.

No creo que hoy haya sido un fracaso, pero todavía es demasiado pronto para esperar algún resultado.

Por el momento, seria mejor esperar. Nos encontrábamos limpiando el salón.

Sena limpiaba y daba órdenes a los demás al mismo tiempo.

“Senpai, por favor junta toda la basura de allá… Cuando acaben con lo que les toca se pueden ir… Yo me encargo del resto.”

Para una chica de preparatoria, mandar y limpiar, de modo que sus superiores puedan irse a casa antes, sería normalmente una actitud digna de admirarse.

Pero en mi opinión, se parece más a un ama de casa tan ansiosa de vacaciones que podría limpiar todo si obliga al marido que la ayude.

“Perdón Akagi, pero aun sigo siendo el presidente, así que debo quedarme aquí hasta que todo termine.”

Y Sena le dio una escoba:

“Entonces ayuda por favor.” “No hay problema.”

“Oye, oye Kousaka Senpai. ¿Qué haces ahí parado? ¿si quieres ayudar al menos concéntrate en lo que haces?”

“Ay, perdón.”

Esta mujer si que estaba acostumbrada a dar ordenes. Pero a lo mejor esta era una buena oportunidad.

Ahora solo estábamos yo, el presidente, Kuroneko, Makabe y Sena.

Estaban todos con los que podía contar así que era el momento preciso para usar mi as bajo la manga.

“Pensé que siempre estabas muy ocupada, Gokou. Si quieres ya puedes irte.” “Estoy libre el día de hoy. Irme o no, es asunto mío.”

Una nube negra parecía formarse de la nada…

Antes, cuando Kuroneko y Kirino se conocieron, ellas en seguida se dieron cuenta que eran muy parecidas.

Es por eso que desde el inicio ambas se leyeron la mente.

Evidentemente Akagi Sena no era Kousaka Kirino pero a pesar de eso, reciclar la táctica que hizo que Kirino y Kuroneko se volvieran amigas podría resultar.

Es por eso que me prepare con esta carta que me dará el triunfo.

La única cuestión es que Sena no es Kirino, no hay ninguna razón para que se abra con Kuroneko, es decir, no hay ningún motivo por el cual muestre su verdadero yo a Kuroneko.

Y si esto sigue así, mi plan no va a funcionar. Necesitaba algo que forzara la comunicación entre ellas.

“Mnnn… Acerca de…”

No estaba seguro si funcionaria, pero no se perdía nada con intentarlo. Solo una vez.

Me acerqué a Sena y casualmente le pregunte:

“Oye Sena…” “¿Si…?”

“Hace rato dijiste que te uniste aquí para aprender a programar, pero ¿Qué hay sobre jugar? ¿No juegas videojuegos?”

“Si… me gusta jugar videojuegos también.”

“Eso creí. Escuche que eres muy buena con ellos, ¿verdad?”

“Ya deja de andarte por las ramas. ¿Qué es lo que me quieres decir, Senpai?”

¿Soy tan predecible?

Tuve que sonreír y preguntarle:

“Dijiste que si uno de tus amigos te preguntaba por que te habías unido a este club, le responderías que para aprender a programar, ¿no?”

“¿Ajá, y luego?”

“Pues que me parece una excusa, y no tu razón verdadera.” Centré mi atención en sus ojos.

“¿Ah no?…” Mordiéndose el labio, Sena dejo escapar un suspiro.

“Ay, perdón. Olvida lo que dije. No trataba de esconder algo, pero si tengo otra razón. Aprender a programar es… tan solo la mitad de mis motivos.”

“¿La mitad?”

¿Y eso que significa?

“Yo… yo, quiero convertirme en una diseñadora de juegos.” “¿Diseñadora de juegos? ¿Te refieres a los que hacen juegos?” “Si, y espero poder entrar a una gran empresa.”

“¿Así que es por eso que quieres aprender a programar?” “… Si, algo así…”

Y después de que dijo eso, Sena, volteó hacia otra parte evadiendo mi mirada. Tal vez se sentía avergonzada de su sueño.

Podía entender lo que sentía, así que le sonreí y apoye lo que decía:

“Eso, es… aja ja ja… o sea que tu talento con los juegos va mas allá de lo común, ¿no?” “Si… admito que, me gustan mucho los juegos. Desde jugarlos hasta diseñarlos.” Ahora ya hasta se había puesto rojita.

¡Que linda!, pensé. Seguí adelante:

“¿Conoces un juego llamado “Homoge Club”?” “¡Es maravilloso! ¡Un juego súper fantástico!”

………………….¿EN SERIO? “Ah… olvida lo que dije por favor.” “Perdón, pero ya lo oí.”

“Auuuu…”

Y por primera vez vi a Sena de esta forma.

Gracias a la descripción dada por mi amigo Akagi: “mi hermanita es una fujoshi”, “mi hermana es una niña de primero que usa lentes” y el hecho de que se parecían un poquito me hizo suponer que era ella.

“Tu… tu… ¿de que estas hablando? ¿No entiendo a que te refieres?”

Pero tan solo unos segundos después ya se había recuperado y actuaba como si nada hubiera pasado.

“Ora, ora… no sabia que la jefa de mi grupo tuviera esos gustitos…”

“¿no oíste lo acabo de decir, Gokou-san? No tengo interés en esas cosas.” “¿Entonces por que estas a la defensiva? Acaso es porque… ¿estamos en lo cierto?”

“¿Y ahora crees que me estoy defendiendo de esa mentira como si fuera verdad? No lo puedo creer, Gokou-san.”

Aunque Sena intentaba contraatacar, su oponente no era alguien que dejara ir una oportunidad como esta.

“Gracias por el cumplido.”

Miren, ahora es ella quien la esta molestando a propósito. “¡Ehhhh!”

Sena nos miro con odio a mi y a Kuroneko, supuse que estaba pensando: “¿y este tipo como supo mi secreto?”.

Perdona, la culpa es de tu hermano.

Él y su bocota me dijeron todo sobre ti.

Claro, que esto yo no lo podía decir en voz alta, así que me quede callado, a la vez que Kuroneko mostraba una macabra sonrisa feliz.

Seguramente estaba pensando “y ahora, como me debería seguir burlando de ella”. Sentí algo de pena por Sena ya que yo había ocasionado todo eso.

No pensé que acabaría todo de esta manera.

Es mas, ¿por que tuvo que gritar sobre su pasatiempo tan estrepitosamente como lo hizo? Kuroneko se relamió los labios, y entonces, igual que un demonio, le susurro a Sena:

“Es solo un rumor… pero escuche que Maschera últimamente se ha hecho muy popular.” “¿Eh… Eh? ¿Mas… Maschera? ¿De que hablas?”

“Cerberos Astaros, Lucifer, Shinya. El guapo y oscuro príncipe del inframundo. Una relación entre un gran señor y un humano es una buena inspiración para una historia de amor singular. El tema habitual es como ellos interactúan entre si. En este caso es el amor y el odio entre Shinya y Lucifer,

¿Verdad?”

“¿Pero de que carajo estas hablando? No te entiendo ni una sola palabra. Ya deja de decir tonterías.”

“Ay ya. No te hagas la tonta. Seguramente has estado gimiendo de placer todas las noches, fantaseando en como Shinya y Lucifer cogen. ¿O no?”

“Estas loca.”

Con ojos de fiera, Sena rugió:

“Lucifer, el guapo y tsundere activo y Shinya, el pasivo, es la esencia de Maschera. ¿Deshacer esa pareja? ¡Imposible! ¡Eres una falsa! ¡No eres una fujoshi!”

Oigan…

¿Qué es lo que acaba de pasar? Todo ya estaba bien.

Pero, ¿Por qué reaccionó de esta forma?

Estoy seguro de que nadie mencionó algo como fujoshi, ni nada sobre algo tan sensible para ambas.

Mire hacia todas partes, sólo para toparme con que el presidente y Makabe estaban con la boca completamente abierta mirando, y Kuroneko estaba sonriendo.

“Claro que lo se. Deshacer o destruir esa pareja es imposible. Pero al parecer metiste la pata… por fin.”

Sena rápidamente se tapo la boca con una mano.

“Ehhhh…”

Todavía con la macabra sonrisa, Kuroneko miró a Sena con una expresión de “tu y tu bocota”. Y por supuesto que yo no tenía ni la mas remota idea de lo que estaban hablando.

Como cualquier conversación de Kirino con Kuroneko, esta también estaba repleta de terminología de anime.

“Tu… tu… me pusiste una trampa.”

“¿Qué yo te puse una trampa? ¿De que hablas? Es tu hobby y lo dijiste abiertamente. ¿Y ahora que hay sobre las reglas? ¿Todavía somos diferentes?”

“Pues claro que no somos iguales. Yo si puedo guardar mis gustos. ¿Y eso que? ¡Me gusta el homo!

¡Estoy completamente podrida! ¡Pero lo oculto para así no afectar a los demás!”

… Oye… si te das cuenta que todos seguimos aquí todavía, en la escuela. Sin embargo Sena estaba completamente fuera de control.

Kuroneko sarcásticamente dijo:

“… ¿Ah si? ¿Si eres así de sucia, entonces estoy segura que hasta puedes fantasear con cosas casi reales, por ejemplo el musical del Príncipe del Tenis?”

“¡Eso es muy fácil! No es que este alardeando, pero tengo muy buena imaginación. Casi real o 2D o inanimado, en tanto me hagan vibrar, puedo guardarlos en mi mente y fantasear. Por ejemplo, puedo tomar un tenedor y una cuchara e imaginar alguna forma de amor.”

“Admiro tu confianza. ¿Pero puedes fantasear hasta con hombres de verdad?”

“Ya no tengo nada que ocultar. Anoche, tuve un sueño, en el cual Makabe Senpai era violado por todos los miembros del club.”

Esta mujer si que era un caso.

Hasta Kuroneko, quien uso su sabiduría de fujoshi para llevar a Sena a este punto, dio un paso hacia atrás con los ojos completamente abiertos por la impresión.

Se le notaba que estaba sudando frio.

“No… no… no puedo creer que tengas una mente llena de tanta maldad.” Ni Kuroneko esperaba que Sena fuera así.

¿No era la mujer que quería todo limpio? ¿Cómo es que podía fantasear hasta con una cuchara y un tenedor?

El presidente, mirando a ambas mujeres, dijo con una voz totalmente quebraba:

“Ma… Makabe… ¡¡¡Trajiste a una pervertida absolutamente terrorífica a nuestro club!!!” “…”

Makabe no respondió.

Tenía la mirada perdida y el cuerpo paralizado.

Y al siguiente momento, después de que se dio cuenta que les había contado a todos sobre sus fantasías durante su ataque de honestidad, Sena…

“¡¡¡Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!” Grito mientras se agarraba fuerte la cabeza.

“Cof, Cof,”

Trató de aclarar su garganta.

Con ojos llorosos trata de explicarle a Makabe:

“No, no, Makabe Senpai. Esto… esto es un error.” “…”

Makabe no podía responder, debido a simple hecho de que su alma había dejado su cuerpo. Sena lo tomo por los hombros y dijo:

“¡Perdón! ¡Perdón! ¡Makabe Senpai, lo siento, fantaseaba que tu y el presidente salían! ¡Y como no podía oír tu tono amable de voz más que como tsundere, pensé: “esto es tan moe”! ¡Y también pensé, que el presidente sigue sin graduarse porque te ama y no quiere separarse de ti!”

“Oye, oye… ¡Detente ya! No le causes un trauma todavía mas profundo del que ya tiene.”

“¿Eh? ¿Volví a decir otra pendejada?” “¡Ya dijiste muchas!”

“Ah… Ah… así que. ¡Para la otra voy a fantasear con el presidente y Kousaka Senpai!” “¡¿Lo estas haciendo a propósito?!”

En silencio rogué para que nada me pasara.

Si no importara que el alma de Makabe haya dejado su cuerpo, esto seguiría siendo muy estúpido. “¡Por favor, solo no pienses nada sobre mi!”

“¡Aaaaaaaaaaaaaaaaa! ¡Lo volví a hacer! ¡Mátenme! ¡Solo mátenme!” Sena se cubrió la cabeza y gritó “mátenme” una y otra vez.

Siento que esto en parte es mi culpa también ¿pero qué podía hacer? ¿Así es como realmente luce una fujoshi?

Ya había dicho que Sena es un caso especial… pero ahora que lo pienso, no puedo hacer otra cosa que respetar a Akagi.

Si yo fuera él, ya me habría suicidado.

¡De veras! ¡Akagi! ¡Era el único que podía resolver esta situación ahora!

Saque mi teléfono celular esperando que el hermano de Sena tuviera alguna solución.

…Ring …Ring …Ring…

“¿Kousaka? ¿Qué pasa? Estoy algo ocupado…” “Tu hermanita enloqueció. ¿Qué hacemos?”

“Dile “Sena chan, eres muy linda. Sena chan, no es tu culpa” hasta que se calme.” “¡Lo tengo! ¡Tú también estas mal de la cabeza!”

¿Cómo pude decirle eso?

Ambos, hermano y hermana, están locos.

“… Le daré mi teléfono a ella, trata de calmarla por mi.” “Okey. Dáselo.”

Después de que Akagi decidió ayudar, en silencio me acerque a Sena y puse mi teléfono enfrente de ella.

“Tu hermano.” “Ohhhh.”

Tan pronto como escucho “hermano” Sena recobró el sentido.

Se quito los lentes y luego puso mi teléfono en su oreja y susurró´:

“¿Onii-chan?”

¿Onii-chan, eh? Teníamos algo en común, pero había un gran diferencia entre ese par de hermanos y yo

“… Si… si… el club… fiesta de bienvenida… si….” Mientras lloraba, Sena le contó a su hermano todo.

De su voz, supe que ella confiaba totalmente en Akagi, pero… de alguna forma, eso me hirió.

Para Sena, su hermano era alguien con quien podía quitarse la máscara, y convertirse en una niña mimada.

“Humm… Lo se… gracias… lo siento…échale ganas, onii-chan.” Después de eso, colgó y me devolvió el teléfono.

“De lo que acaba de ocurrir… Perdón, por haber hecho tal escenita.” “No, eso…”

No podíamos hacer como si nada hubiera pasado. Pero al menos, ya se había calmado.

Respirando profundamente, Sena me preguntó:

“Kousaka Senpai… ¿eres un buen amigo de mi onii-chan?”

“Sí, algo así. Hemos sido compañeros de clase un largo tiempo.” “Ya veo…”

Pero que… de momento Sena dejo escapar una sonrisa misteriosa.

“¿Oye, que es lo que te acabas de imaginar? ¿No puede ser que… esa horrible escena… o si?”

¡Ya no soporto más a esta tipa!

Después de que todos se tranquilizaron, todavía roja de la cara, Sena se disculpo con todos: “…Perdón. Tengo este mal hábito.”

“Es lo que veo. Yo también quiero disculparme por haberte emboscado. No volveré a hablar de esto otra vez.”

“Ni yo.”

“Yo no vi nada.”

Tanto Makabe como el presidente estuvieron de acuerdo conmigo. Mire a Kuroneko…

“¡Tu también!”

“Sí, sí, ya se.”

Y aunque parecía reacia, yo sabía que si nosotros no decíamos nada, Kuroneko tampoco hablaría de eso.

Y así es como nuestra fiesta de bienvenida concluyo. Sin que Kuroneko pudiera conseguir una amiga.

Parecía que necesitaba una lluvia de ideas.

Me fui a casa con Kuroneko. No dijimos nada en todo el camino, solo lo recorríamos. Acabo de recordar la conversación entre Sena y Kuroneko.

Primero, Sena era claramente una fujoshi.

Pero rápidamente se recupero, y luego se sintió apenada y se arrepintió de sus acciones.

Y aunque ellas discutieron ferozmente, a diferencia de Kirino, ellas no tuvieron los mismos gustos. Debí haber esperado que Akagi Sena, después de todo, no sería Kousaka Kirino.

De la misma forma en que Kuroneko no podía convertirse en el remplazo de mi hermanita, Sena no podría convertirse en el remplazo del mejor amiga de Kuroneko.

No podía obligarla, o de lo contrario, se enfurecería como lo acaba de hacer. Dudando, le dije:

“Lo siento.”

“¿Por qué te disculpas?” Kuroneko respondió fríamente.

En verdad todavía no me perdonaba.

Lo único que podía hacer ahora era tomar al toro por los cuernos.

De todos modos hablar no es mi fuerte, así que lo único que podía hacer era tratar de explicarme lo mas que pudiera.

“Lo admito. Me sentí solo porque mi hermana ya no está aquí.” “Es lo que veo.”

Me doy cuenta ahora.

No importa cuánto lo niegue o no quiera verlo, lo verdad es que me siento solo. Es por esto que me sentí atraído por esta chica que me decía “Onii-chan”.

Es por eso que llegué a considerarla como mi hermana y trate de ayudarla y al mismo tiempo llenar el vacío que hay en mi corazón. Estoy bastante avergonzado por eso.

Odio a mi hermana, y sigo haciéndolo ahora, ¡maldición!

Pero, aun si la odiara, no… porque la odio… es por eso que cuando se fue sin avisar, el impacto fue mucho más grande de lo que hubiera pensado.

Deje escapar un suspiro nuevamente.

“Incluso con su manera de ser, me siento solo sin ella.” “Ya veo.”

Dejamos de hablar.

Pero creo que ambos pensábamos lo mismo, porque mis sentimientos y los de Kuroneko hacia Kirino, son los mismos. Ambos apartamos la mirada, susurrando:

“Yo… yo estoy preocupado por ti. Asi que voy a seguir metiéndome en tus problemas.” “Como quieras. Ya no me interesa.”

“¿Puedo preguntarte algo? ¿Ya no quieres decirme Onii-chan porque no quieres convertirte en la sustituta de Kirino?”

“No. Deje de hacerlo cuando tu hermana todavía estaba aquí, ¿recuerdas?” Sí, eso era cierto.

“¿Entonces por qué?”

“No significa nada en especial. Si tuviera que darle uno…” “¿Sería…?”

“Que solamente quería un cambio de actitud.”