Totsuzen Papa ni Natta (NL)

Volumen 3

Capítulo 1: El Sr. Dragón se Dirige a la Capital ~La Pequeña Chef Real, Kate Flachette~

La capital de Shutora se encontraba a medio día de vuelo hacia el sur de la Real Academia Femenina de Florence. Bueno, en realidad, íbamos en carruaje. Una vez más en mi forma humana, sentí que el carruaje de la escuela se sacudía debajo de mí. Al parecer, tardaríamos un día en llegar. Esmeralda pensó que causaría un poco de alboroto si un dragón terminaba volando a la capital, así que en vez de eso decidimos viajar de esta manera. No me importaba ir así de lento, pero ¿un alboroto? No es que vaya a hacer nada… Tal vez sea sólo porque puedo parecer un poco aterrador.

Esmeralda había dicho que volvería a la capital antes que nosotros y había desaparecido después de ponerse detrás del edificio de la escuela. Tenía la habilidad de moverse entre las sombras. Al parecer, sólo podía ir a lugares con los que estaba familiarizada, pero sigue siendo una habilidad muy conveniente. Ese era un poder de la Corona del Crepúsculo que ella poseía, que era uno de las Siete Reliquias Supremas.

“¡Estoy emocionada de poder viajar en el mismo carruaje que tú, Kate!”

“¡En serio! Aunque seamos compañeras de clase, ¡apenas podemos relajarnos juntas ya que estamos en diferentes dormitorios!”

La Academia Real Femenina de Florence estaba dividida en tres dormitorios. Olivia vivía en el dormitorio de los manantiales, Fontaine, y si no recuerdo mal, Kate vivía en el dormitorio de los árboles, Arbor.

“¡Oh, también me alegro de estar contigo, Luca!” “S-Sí, yo también…”

Estaba sentada junto a Olivia y Luca en el carruaje que se tambaleaba mientras recorría la carretera. Frente a nosotros estaba Kate, una chica de rostro radiante y cabello rojo intenso, que era compañera de clase de Olivia. Su padre era un fantástico cocinero, llamado chef real, y la propia Kate preparaba bocadillos y comida para las fiestas de té de las alumnas en la escuela. Siempre era brillante y alegre. Incluso ahora estaba sacando de su cesta galletas que había hecho ella misma para compartirlas con Luca. La chica parecía un poco desconcertada al recibir la merienda, pero imitó la forma en que Olivia la comía con ambas manos.

“Son muy buenos, ¿verdad?” “De hecho, bastante deli-ciosos.”

Munch-munch-munch-munch. Las dos comiendo una al lado de la otra me recordaron a un par de ardillas.

“Oh, ¿también quieres un poco, señor?”

“Gracias, Kate.” Acepté una galleta de ella. Sí, estaban muy buenas. Como cocinero que soy, quedé muy impresionado. Aunque era una simple galleta de mantequilla, tenía una cualidad rica, dulce y que se derretía en la boca. Eran realmente fantásticas. Ahora sólo necesitaba un té para acompañarlas.

“Ah, así es. Si vienes a la capital, ¿quieres quedarte en mi casa?” Ofreció Kate con una brillante sonrisa.

“¿Podemos?” Olivia respondió al instante. Así que, en resumen… “¡Es una pijamada!”

La expresión de Olivia se convirtió en una brillante sonrisa. Empieza a parecerse a las vacaciones de verano, ¿verdad?

***

“Bienvenida, Alumna del Rey Olivia Eldraco.”

El castillo real de Shutora era aún más grande y espacioso que el castillo de la Reina Oscura que nos habían prestado como hogar. Era realmente como algo que se vería en un libro de imágenes. Y en lo más profundo, esperando en la sala del trono estaban Esmeralda y la reina del Reino de Shutora. Una tela blanca colgaba delante del trono para que no pudiéramos ver a la reina sentada en él. Supongo que con mis ojos podría ver a través de la tela con bastante facilidad, pero decidí no hacerlo. No me gustaban ese tipo de cosas.

La reina habló lentamente, dándonos la bienvenida al castillo. “Y bienvenida seas, alumna de la jefa de la División de Magia de la Corte Real, Esmeralda Serpentia, e hija de dragónkin oriental, Luca Ioenami.”

“¡Gracias! Es un gran honor volver a recibir su invitación, Su Majestad!”

“No hace falta ser tan formal.” Se rió la reina. La respuesta de Luca le pareció divertida. Tenía una risa bastante agradable, sin una pizca de desprecio detrás. “Y… mis disculpas, pero

¿quién podría ser este caballero?”

¿Caballero?

“Está hablando de ti, Sir papi.” Me explicó Luca en un susurro. “¡Ah!” ¡Gracias, Luca! “¡Soy el papá de Olivia!” Me presenté. “Ya veo… Entonces usted es el padre de Olivia Eldraco…”

“Sí, Su Majestad.” Intervino Esmeralda. “Es el Sr. Eldraco del que hablé.” “Así que tú eres ese gran dragón…”

“Oh, ya lo sabes.” Puede que ahora esté en mi forma humana, pero en realidad era un dragón.

“Hay mucho que me gustaría preguntarte, pero… no puede haber otra razón para que te haya convocado aquí que la búsqueda de las Siete Reliquias Supremas. En ese sentido, ha habido algunas noticias inquietantes…”

“¿Hay algún problema?” “Esmeralda.”

“Sí, Su Majestad.” A la señal de la reina, Esmeralda se adelantó. “Creo que todos conocen las Siete Reliquias Supremas, transmitidas en el Reino de Shutora desde hace mucho tiempo. Son artefactos elaborados con gemas que contienen un gran poder.”

“Gemas poderosas…”

“Sí. Aunque todas son únicas, cada una posee una naturaleza que les permite almacenar energía mágica adicional con el tiempo. En pocas palabras, cuanto más tiempo pasa, más fuertes se vuelven. De forma similar a como un Dragón Anciano posee una magia mucho

mayor que la que podría tener un humano debido a su larga vida.” Esmeralda escribió algunas letras en el aire utilizando su magia.

La Gema de la Luz, utilizada en la Gema-Escala de la Eternidad. La Gema de la Oscuridad, utilizada en la Corona del Crepúsculo. La Gema del Agua, utilizada en la Hoja de Agua Azul.

La Gema del Fuego, utilizada en la Lanza Bendita del Fuego. La Gema del Viento, utilizada en el Arco Hoja de Viento.

La Gema de la Tierra, utilizada en el Escudo de Tierra Vasta. 

“Luz, oscuridad, agua, fuego, viento y tierra… como saben, son los seis grandes elementos que conforman el mundo en el que vivimos. Luca, ¿puedes explicarnos por qué es tan importante para nosotros reunir las Siete Reliquias Supremas?”

“¡Sí, maestra!” Cuando Esmeralda la señaló, la mano de Luca se elevó en el aire. “En el pasado, las Siete Reliquias Supremas liberaban su energía mágica en un momento determinado, una vez cada treinta años. Al hacerlo, concedían los deseos del pueblo en un evento conocido como el ‘Ritual de la Estrella Fugaz’. Sin embargo, hace más de trescientos años que las Reliquias se perdieron, por lo que han estado acumulando poder desde entonces.”

“Efectivamente.” Asintió Esmeralda. “Phyllis tiene la Gema de la Luz, yo tengo la Gema de la Oscuridad, y Luca tiene la Gema del Agua. Pero no sabíamos dónde estaban las otras.”

“Uhh, si son tan importantes, ¿cómo se perdieron?” Preguntó Olivia.

“El tiempo es un amante cruel.” Respondió Esmeralda. “La primera se perdió hace mil años, cuando el Escudo de Tierra Vasta desapareció durante la guerra con los invasores darkin. Desde hace trescientos años, las siete han desaparecido.”

“Oh, vaya…” Parece que los humanos siempre están peleando por algo. Cada vez que miraba desde mi montaña para ver qué estaban haciendo a lo largo de los años, casi siempre se peleaban entre ellos. Esa era una de las razones por las que no me interesaba en absoluto el mundo humano hasta que conocí a Olivia.

“Algunas de las Reliquias han estado acumulando energía durante más de mil años. Según mis cálculos, pronto deberían alcanzar una masa crítica de energía. Antes de que eso ocurra, tenemos que encontrarlas todas y realizar el Ritual de la Estrella Fugaz.”

“El Ritual de la Estrella Fugaz es un evento que libera la tremenda energía contenida en las Siete Reliquias Supremas, y utiliza esa energía para hacer realidad cualquier deseo.” Explicó Luca.

“¡¿Cualquier deseo?!” ¿No es eso algo importante? Olivia y yo nos miramos sorprendidos.

“Por esa razón, debemos mantenerlas fuera de las manos de aquellos que las usarían para el mal.” Continuó Esmeralda.

“¡¿El mal?!” ¿Existe realmente gente que haría eso?

Al ver mi sorpresa, la reina habló. “Nuestro vecino, el Imperio de las Máquinas de Gerakias, lleva mucho tiempo esperando una oportunidad para atacar nuestras tierras.”

“¿Más peleas?” Debía de referirse a la práctica común de los humanos de montar campamentos enfrente cuando tenían una discusión.

“En realidad, nos hemos enterado de que una de los Siete Reliquias Supremas, el Arco de Hoja de Viento, ha caído en manos de Gerakias.” Continuó la reina. “También deben estar intentando reunir las Siete Reliquias Supremas.”

“Por lo tanto, debemos trabajar rápidamente para recoger las Reliquias restantes y liberar su energía acumulada en el Ritual de la Estrella Fugaz… así lo ha decidido Su Majestad.”

“Los magos y soldados del reino se están esforzando al máximo en la búsqueda, pero aún no hemos encontrado ni una sola pista. Ya que han podido localizar la Lanza de Fuego Bendita, nos gustaría pedirles que pasen sus vacaciones de verano ayudándonos a localizar las otras Reliquias.”

Olivia escuchaba atentamente el discurso de la reina. Comprendió lo importante que era esta petición.

“Soy consciente de que las vacaciones de verano de la infancia son un bien insustituible… Pero aun así, debo pedirte ayuda.”

Olivia asintió un poco. “Umm, ¿puede Papi venir con nosotros?”

“Bueno… mientras no te importe, Dragón Anciano, no tengo ningún problema…”

“Está bien. Mientras Papi esté con nosotros, nos divertiremos.” Mientras Olivia decía eso, se giró para mirarme con una brillante sonrisa. “¿Verdad, Papi?”

Incluso en una situación tan seria como esta, ver la sonrisa de Olivia hace que mi corazón se derrita. Es demasiado linda. No importa cómo la mires, ¡sencillamente lo es! Cada año, establece un nuevo récord de ternura.

“… ¿Sir Papi?”

“Lo siento, Luca. No quería agitarme así, ja, ja.” Eso fue peligroso. Menos mal que no estaba en mi forma de dragón, ¡o este hermoso castillo se habría reducido a escombros!

“Por ahora, empecemos por poner en orden nuestra información.” Por un momento me pareció que la mirada de Esmeralda era un poco fría mientras me miraba, pero estoy bastante seguro de que era sólo mi imaginación. “Queremos que busques el Escudo de Tierra Vasta, que actualmente ha desaparecido.”

La Gema de la Luz estaba al cuidado de la directora de la Real Academia Femenina de Florence, la reina filósofa, la elfa Phyllis. La Gema de la Oscuridad la llevaba Esmeralda, una maga real y auténtica dracoshamana con el poder de un dragón de agua. La Gema del Agua había estado bajo la protección de la familia de Luca durante generaciones. Dejando de lado la Gema del Viento robada, sólo quedaba la Gema de la Tierra, que daba poder al Escudo Tierra Vasta. Nuestra aventura de verano consistiría en buscarla.

“Algún día, también tenemos la intención de reclamar el Arco Hoja de Viento, y finalmente realizar el Ritual de la Estrella Fugaz.” Declaró la reina. “Cuando llegue ese día, Olivia… te permitiremos pedir cualquier deseo que quieras.”

“Espera, ¿yo?” Olivia saltó sorprendida. “¿Un deseo, eh…?” Su cabeza se inclinó hacia un lado. Aparentemente, no tenía nada que le viniera inmediatamente a la mente. “¿Y tú, Papi, que pedirías?”

“A ver…” Me paré a pensar cuando la pregunta se me pasó de repente. Un deseo… Un deseo… “Bueno, últimamente algunas de tus amigas han venido a jugar, así que quiero un horno nuevo. Ah, ¿y tal vez un jardín más grande?”

“Vamos, Dragón Anciano, estás pensando demasiado en pequeño.” “¿Y tú, Olivia?”

“Umm… quiero quedarme con Papi para siempre… ¿Qué te parece?” Incluso sus deseos eran un manojo de ternura.

“¡Sir Papi! Por favor, vuelve en sí.” Me amonestó Luca. ¡Uy! Había acabado agitándome de nuevo…

“Si todos fueran tan despreocupados como ustedes, el mundo sería tan pacífico.” Dijo Esmeralda con un suspiro. “No sabemos cuál fue su motivo para robar el Arco Hoja de Viento, así que por el bien de la protección de la paz cotidiana de tu escuela y del reino en general, tenemos que ponernos serios con esto…”

“Espera…” Un pensamiento se me ocurrió de repente. “Uhh… se les llaman las Siete

Reliquias Supremas, ¿verdad?”

“¿Sí?” Respondió Esmeralda, sin saber a qué quería llegar.

“Quiero decir… luz, oscuridad, agua, fuego, viento y tierra… son sólo seis, ¿no?” Pensé que serían siete, teniendo en cuenta su nombre. Me pareció recordar que había otra cuando hablamos de ellas con anterioridad.

“Así que te has dado cuenta…” Dijo Esmeralda, con los ojos brillantes mientras me señalaba. “¡Bien hecho!”

“¡Como era de esperar, un dragón se daría cuenta!” “Ah, eso tiene sentido. Hasta un dragón lo captaría.” “Un dragón se daría cuenta.”

No sé qué creen que son los dragones…

Esmeralda se aclaró la garganta. “Entre las Siete Reliquias Supremas, hay una gema cuya naturaleza aún no hemos averiguado.”

“¿Averiguado?” Repitió Olivia, confundida.

“No sabemos nada al respecto.” Explicó Esmeralda. “La séptima Reliquia Sagrada, el Anillo de la Luz de la Misericordia, es también conocido como el Origen Perdido. Apenas existe en los registros históricos, pero se dice que su gema tiene el poder de controlar las otras Reliquias Supremas.”

El Origen Perdido. Eso sonaba bastante bien.

“De cualquier manera, dudo que podamos encontrarla.” La reina terminó la explicación de Esmeralda. “Si logramos encontrar a las otras seis, el peligro que actualmente enfrentamos pasará. Primero, por favor, busca el Escudo Tierra Vasta. Tengo grandes esperanzas en ti.”

“¡Sí, Sra.!”

“¡Está bien!”

Olivia y Luca le respondieron al unísono. Parecía una tarea un poco seria, pero una búsqueda del tesoro sí que sonaba emocionante.

***

La capital, Shutora, era aparentemente la ciudad más grande del continente. Era difícil decirlo desde el interior del carruaje, pero ahora que estábamos caminando, era bastante obvio.

¡Había tanta gente!

“¡Vaya, hay mucha gente aquí!” Había tanta gente caminando que apenas podíamos ver la ciudad. Hombres y mujeres, adultos y niños, y abuelos y abuelas. Olivia, que había nacido en un pequeño pueblo y se había criado en las montañas, lo miraba todo con los ojos muy abiertos. Pensábamos que la ciudad cercana a la academia que habíamos visitado para ir de compras era grande, pero ni siquiera se comparaba con esto. Pensaba que había muchos humanos en la ceremonia de ingreso a la academia, pero esto estaba en un nivel completamente nuevo. ¡Había muchas veces, diez veces, cientos de veces más gente de la que había visto antes! Olivia y yo estábamos totalmente impresionados.

“Vaya…” “Whoa…”

“¡Papi, mira toda la gente!”

“¡S-Sí, hay una tonelada de ellos!”

“Vaya…” Olivia se aferraba fuertemente a mí. Al ver su sorpresa con los ojos abiertos mientras miraba a su alrededor, la sujeté con la misma fuerza.

“¡Olivia, asegúrate de no soltar mi mano!” “¡Claro! ¡Está bien!”

“¡Si nos separamos aquí, puede que no nos volvamos a ver!”

Bueno, si nos separamos, definitivamente la encontraría.

¿Qué deberíamos hacer? Se suponía que íbamos a quedarnos en casa de Kate esta noche, pero ¿podríamos llegar hasta allí entre toda esta gente? Oh, si me convirtiera en un dragón…

¡no, oh-no-no-no! Eso no estaba permitido. Quería que Olivia pudiera vivir felizmente con otros humanos. Que yo me convirtiera en dragón cada vez que tuviera un problema sería abuso de poder. También quería que Olivia se sintiera cómoda caminando por un lugar como este. Necesitaba superar estas dificultades como humano con ella.

“¡Olivia!”

“¡Papi!”

Apreté su mano aún más fuerte. ¡Olivia! Esta situación puede ser difícil, ¡pero tu papi está aquí! ¡Definitivamente te mantendré a salvo!

“… Umm, ¿Querida Olivia? ¿Sir Papi?” “¡Luca, agárrate tú también!”

“¿Qué demonios estáis haciendo ustedes dos…?” Luca nos miró fijamente, sin impresionarse. Esmeralda todavía tenía asuntos en el castillo, así que Luca había venido para guiarnos hasta la casa de Kate.

“¡Emm… veras… quiero decir, mira toda la gente…!”

“Algo así es absolutamente común. Así es la vivacidad de la capital de Shutora.” Luca parecía un poco exasperada con nosotros.

“¡¿Qué hacemos?! ¡Me voy a perder!” Se lamentó Olivia.

“No, no lo harás.” Dijo Luca, tendiéndole una mano. “Je, je. Desde el día en que yo, Luca Ioenami, fui tomada como discípula de Lady Esmeralda, ¡me crie en esta misma ciudad! Tal conjunción no es suficiente para alterarme.” Luca se hinchó de orgullo mientras hablaba. Con la forma en que el sol brillaba detrás de ella, parecía extremadamente confiable. Y en este maremágnum de gente, nada menos, Luca era definitivamente más fiable que nosotros. “¡Partiremos, Querida Olivia, Sir Papi!”

“¡Luca…!”

“¡Síganme!”

Olivia agarró la mano de Luca. “¡Bien!” Al ser arrastrada por la mano, la seguimos a través de la multitud. ¡Gracias, Luca!

Llegamos a una mansión bastante cercana al castillo. Era la casa de Kate. Kate estaba afuera esperándonos, así que cuando nos vio…

“¡¿Qu-Qu-Qu-Qu-Qué?!”

Ella gritó.

“Oh, hola, Kate. Lo logramos.” Olivia la saludó… desde mi espalda. “¡¿Q-Qué pasó, señor?!”

“Bueno, uhh… terminamos perdiéndonos.”

Así es. Aunque todavía era lo suficientemente pequeño como para caminar por las calles, había vuelto a mi forma de dragón. Habíamos llegado bastante lejos siguiendo a Luca por las calles, pero en algún momento, los empujones de la multitud nos habían separado. En una multitud tan grande, no había forma de encontrar a alguien tan pequeño como Luca. Mientras dábamos tumbos intentando saber qué hacer, Olivia había empezado a llorar.

Sí… Si iba a llorar, no tenía otra opción. A fin de cuentas soy su papi. Tenía que hacer lo que fuera para que se detuviera. Y mira, al llegar a un punto de vista más alto, sería más fácil encontrar a Luca. Tal vez ella tampoco podría encontrarnos entre la multitud de gente, pero no había manera de que no viese a un dragón.

Así que acabé transformándome en un dragón de tamaño medio, más pequeño que mi forma habitual. Sin embargo, sentí que debía disculparme con la gente que nos rodeaba. Estaban realmente sorprendidos.

“Urgh… No es que me haya perdido…” Protestó Luca. “Tee jee, vamos, Luca, no llores…”

“¡NO VOY A LLORAR!”

“Bueno, gracias a Luca, hemos llegado a salvo a la casa de Kate, así que todo está bien.” Dejando que las dos bajaran de mi espalda, volví a mi forma humana. Esta noche tendríamos una fiesta de pijamas en casa de Kate.

***

La casa de Kate era una mansión con un enorme comedor. A juzgar por el tamaño de la sala, pensé que su familia debía de tener más de cincuenta personas, pero, al parecer, acababan de construir un comedor tan grande porque solían invitar a muchos huéspedes.

“¡A fin de cuentas mi padre es un chef real! La gente de la familia real viene de visita todo el tiempo. A veces incluso se cuela gente muy importante de otros países.” Explicó Kate con orgullo. Incluso en el colegio, siempre hablaba del trabajo de su padre. También era una apasionada de la cocina y la repostería.

Kate nos sirvió un poco de té y unos bocadillos en la sala de recepción. “Una vez más,

¡bienvenida a mi casa, Olivia!” El té desprendía un aroma fuerte y refrescante. Los aperitivos eran pasteles de magdalenas, esponjosos y brillantes.

“Tee jee, ¡estos se ven deliciosos!”

“Perdona por venir de forma tan repentina, Kate.”

“¡No, en absoluto! Buen trabajo con tu audiencia con la reina. Vaya que eres la Alumno del Rey, consiguiendo una audiencia con ella directamente. Me haces sentir orgullosa de ser tu amiga.” Las mejillas de Luca comenzaron a hincharse. “¡Yo también estoy orgullosa de ti, Luca!”

“¡Claro que sí!” Miró hacia otro lado con un resoplido, pero no antes de tomar para si una de las magdalenas.

“Este té huele muy bien.” Dijo Olivia, moviendo la nariz al percibir el aroma. La forma en que sostenía cuidadosamente la taza con ambas manos era absolutamente adorable. “¡Y sabe tan bien!”

“¡Je, je, es la mezcla de té secreta de mi familia para antes de las comidas! ¡No es un té negro, sino un té de hierbas hecho con hierba de limón!”

“¿Ese sería el Limoncillo, no?”

Al parecer, era una especie de hierba medicinal.

“Ayuda a estimular el apetito. Normalmente, se sirve un poco de Limoncillo mezclado con agua helada antes de una comida… ¡pero Olivia sigue siendo una niña!”

Estoy bastante seguro de que tú también eres una niña, Kate…

“¿Te refieres al alcohol?” Preguntó Olivia.

“¡Sí!” Declaró Kate con orgullo. “¡Ustedes tres son invitados muy importantes esta noche! La familia Flachette hará todo lo posible para que su estancia sea cómoda. Como dice el refrán:

¡Sea nuestro invitado!”

La idea de hospitalidad de Kate era fenomenal. Una comida fantástica, mejor que cualquier cosa que hubiera visto en cualquier foto o libro de recetas, estaba alineada ante nosotros. Había una sopa verde brillante, una ensalada colorida, un pescado asado que olía fantásticamente, un pan crujiente pero esponjoso, ¡y un enorme pastel de frutas!

“¡Mi padre está en el castillo para una cena, así que me he adelantado y he preparado la cena para todos! No se preocupen por los modales, ¡sólo disfruten!”

“Esto es increíble…”

El festín cubría cada centímetro de la mesa. Olivia, Luca y yo nunca seríamos capaces de terminarlo todo. Y cada uno de los platos tenía un sabor fantástico. Fue casi tan divertido ver cómo sacaban los nuevos platos como comerlos.

“¡Está todo tan delicioso!” Olivia sonrió alegremente mientras se llenaba la boca. Luca masticaba en silencio, aparentemente bastante entusiasmado con los platos de marisco. A mí, sin embargo, me conmovió la sopa verde.

¿Cómo lo hizo? ¡Está fría! ¡Pero el sabor es tan bueno!

“Es increíble. ¿Cómo has hecho esta sopa? Aunque esté fría, ¡su sabor es tan rico!” Como persona, o más bien dragón, que pasaba tanto tiempo en la cocina, no pude evitar emocionarme. Pensaba que toda las sopas tenían que estar caliente, como la sopa de leche favorita de Olivia. Pero ésta estaba fría. Y deliciosa. Una sensación totalmente nueva. Y las pequeñas migas que flotaban en ella daban una sensación muy agradable al comerla. ¿Eran trozos de galleta? Era la primera vez que comía algo así…

“Es un potaje frío de judías mungo. Machacamos las judías hasta convertirlas en una papilla fina antes de realzarlas con el consomé especial de la familia Flachette. Y luego, usando el hechizo Viento Carámbano que aprendimos en la escuela, ¡lo enfrié enseguida!”

“¿Así que hay recetas así por ahí?” Pensaba que había leído bastantes libros de recetas, pero nunca había oído hablar de algo así. Mientras disfrutaba a fondo de la sopa, Kate no dejaba de mirarme, con una mirada tímida que parecía querer decir algo más.

“¿Qué pasa, Kate?” Olivia no tardó en darse cuenta y preguntarle. Inclinando la cabeza hacia un lado con el cuchillo y el tenedor en la mano, parecía tan preciosa como siempre.

“Bueno, en realidad… esta no es la receta de mi padre.” “¿Eh?”

“El potaje frío de frijoles mungo es algo que se me ocurrió a mí…”

Olivia y yo compartimos una mirada. Luca también había estado mirando con recelo la sopa, murmurando algo sobre lo verde que estaba, y aún no la había probado. Finalmente, probó una cucharada con vacilación y sus ojos se iluminaron de inmediato.

“Lo siento. Supongo que una sopa fría es algo raro, ¿no? Intentaba pensar en algo que a mi padre no se le ocurriera, pero…”

““¡Es increíble!”” Antes de que Kate pudiera terminar de hablar, tanto Olivia como yo gritamos juntos.

“… ¿Eh?”

“¡Es increíble, Kate! A nadie se le ocurriría intentar hacer una sopa fría!” Olivia siguió colmándola de elogios.

“¡¿De verdad lo crees…?!”

“Yo pienso lo mismo.” Dije con un gran movimiento de cabeza. Eso debe ser lo que llaman ser creativo.

“¿En serio? La verdad es que es la primera vez que intento servir una de mis recetas personales a un invitado… Me alegro de que les gustase.”

“¡Está todo super, super delicioso!”

“Sí, y con lo rápido que nos has preparado todo esto, a pesar de presentarnos con tan poco tiempo de antelación… ¡Realmente quiero venir a comer aquí de nuevo!”

“¡Yo también! … ¡Eh, yo también!” Se apresuró a añadir Luca, aun sosteniendo un trozo de pan con ambas manos. Parecía bastante contenta con la comida que Kate había preparado para nosotros.

“¡Me alegro de que mis primeros invitados hayan sido ustedes!” Kate se rió, aliviada. Seguimos disfrutando de la comida que nos había preparado hasta bien entrada la noche.

* * * * *

A la mañana siguiente, antes del amanecer, Kate entró en la cocina con la boca abierta en un amplio bostezo.

“Buenos días, Kate.”

Cuando la saludé, dio un salto de sorpresa. “¡¿Quéééé?!” “Lo siento, ¿te he asustado?”

Aunque todavía estaba oscuro, Kate llevaba el uniforme blanco de cocinera. Parpadeando sorprendida, soltó un ‘oh’ al ver lo que estaba haciendo.

“Sir, ¿es usted…?”

“Perdón por usar tu cocina sin permiso. Quería hacer algo como agradecimiento por lo de anoche.” En una sola olla había gachas de leche para cuatro personas. Para empezar, había cocinado algunas cebollas y añadido la sopa de consomé que había sobrado de la noche anterior. Luego lo mezclé todo con la cebada hervida y el arroz para continuar la cocción. Una vez que el arroz se convirtió en papilla, derretí un poco de queso por encima para darle el toque final. Esto era lo que siempre hacía el día después de una gran comida. Olivia comía de todo y en cualquier cantidad, así que a veces comía demasiado. Al día siguiente, tenía sueño porque todavía estaba llena… así que siempre le preparaba estas gachas de leche porque son buenas para la digestión. Los ingredientes eran básicamente los mismos que los de la sopa de leche que siempre hacía.

“Gachas de leche…”

“¿No comes mucho este tipo de cosas?” “No, es la primera vez que las veo.”

“Ya veo. Lo encontré en un libro de recetas muy antiguo. ¿Tal vez sea una receta de hace mucho tiempo?” Si recordaba correctamente, el libro del que provenía esta receta podía estar escrito en la antigua escritura. Era uno que había encontrado en un rincón de la Biblioteca de Grimorios de la Reina Oscura.

“Estoy un poco nervioso porque alguien que pudo hacer una comida tan maravillosa como la que hiciste para nosotros anoche, pruebe mi cocina, pero hazlo, por favor. Este es mi agradecimiento por lo mucho que trabajaste para nosotros anoche.” Serví un poco en un bol y se lo entregué. “Olivia y Luca aún no están despiertas, pero toma, puedes tener tu parte ahora.”

“Pero eso no es bueno.” Dijo Kate con un gemido. “Eso no es bueno en absoluto. No puedo obligar a mis invitados a prepararse su propio desayuno.”

“Lo hice porque quise, así que no te preocupes.” Dije con una sonrisa. Al mismo tiempo, su estómago dio un buen estruendo.

“Oh no…”

“¡Ah ja ja, parece que tienes hambre!”

“En realidad, no acabé comiendo nada anoche…” “¡¿Qué?!”

“Me centré tanto en cuidar de ustedes que me olvidé de prepararme la cena.” Kate agachó la cabeza, avergonzada. “Mi padre siempre hace lo mismo. Se enfrasca tanto en ver a la gente disfrutar de su comida que se olvida de comer.”

“Vaya.” Creo que entendí cómo se sentían. Ver a Olivia disfrutar de la comida que le preparaba era mejor que el sabor de cualquier cosa que yo mismo comiera.

“Me encanta ver a mi padre tan orgulloso después de llegar a casa tras una cena exitosa.” “Y estoy seguro de que te quiere igual.”

“¡Por supuesto!” Respondió Kate entre risas y carcajadas. Soplando las gachas para enfriarlas, probó un bocado. “… Está deliciosa.”

“¿De verdad? Me alegro de oírlo.” Me sentí bastante aliviado al escuchar los elogios de una cocinera tan hábil como ella.

“En serio, es genial. No es brillante ni colorida como la cocina de mi padre, pero…”

“S-Sí, parece un poco simple, ¿no?” Nunca había pensado en el color. Cuando usábamos los ingredientes de temporada que encontrábamos en la ladera de la montaña, como que siempre resultaba colorido por sí mismo.

“Pero…” Probó otro bocado. “Este es el sabor con el que Olivia creció, ¿eh? Lo entiendo perfectamente. Cuando me enteré de que eras un dragón, me sorprendió mucho… y eh, sentí un poco de miedo.”

“… Sí, lo entiendo.” Era comprensible. Cuando la gente subía a la montaña, siempre saltaba de sorpresa o se caía de miedo ante mí. Al principio, pensé que era una especie de saludo. Hace mucho tiempo, fui a visitar un pueblo con Olivia en mi forma humana y me tiré al suelo con un grito de sorpresa para saludar a la gente de allí. Sólo me miraron de forma extraña. Recordándolo ahora, ¡fue bastante embarazoso!

“Pero estas gachas de leche saben tan, tan… suaves.” Dijo Kate mientras comía. “Lo sé todo sobre la cocina. Quiero decir, ¡soy la hija del mejor chef real de la historia! Así que puedo decir por estas gachas de leche lo mucho que te importa Olivia…”

“Kate…”

“¡Je, je, gracias por el desayuno!”

Debe haber estado tratando de hacerme sentir mejor por lo de ayer. Acabé convirtiéndome en un dragón en medio de la calle y asustando a todo el mundo. Era tan considerada y se esforzaba tanto por sus invitados. Estaba seguro de que crecería y sería una fantástica cocinera algún día.

Olivia y Luca acabaron despertando y el desayuno se animó. “¡Me encantan las gachas de leche que haces!”

“Nunca hubiera pensado que añadir leche a las gachas sería soportable… pero esto no está tan mal.” Luca parecía encantada.

¡Ahora bien! Hoy ha sido el primer día de nuestra búsqueda del resto de las Siete Reliquias Supremas. ¿Pero por dónde deberíamos empezar?

“¡Ya sé!” Gritó Olivia mientras se ponía en pie de un salto. “Son las vacaciones de verano, así que estaba pensando que deberíamos asegurarnos de divertirnos, ¿verdad?”

Olivia ha hecho una gran sugerencia.