Toaru Majutsu no Index – New Testament (NL)

Volumen 15

Capítulo 2: Paz, o una Trampa Tendida. Board_Game

Parte 2

La primera clase de la tarde era E.F. y hoy eso significaba un maratón.

Los chicos y chicas de la clase de Kamijou fueron sacados de la escuela.

— ¡Hah, haa! ¡Esto no está bien! ¿Por qué nuestra carrera larga o maratón o lo que sea se está convirtiendo en una escena de un poema de invierno? ¿¡Quiero decir, qué no incluso los jugadores profesionales de béisbol evitan entrenar demasiado duro en invierno porque se harían daño!?

— ¿Puedes hablar tanto mientras corres? Haa, haa. ¿Estás realmente muy en forma, Kami-yan?

— ¿¡Eso es gracias a ser perseguido por las calles de noche por delincuentes extraños todo el tiempo!? ¡¡Eso no me hace nada feliz!!

Kamijou y Aogami no eran la cabeza del grupo; estaban corriendo más casualmente hacia el final del grupo intermedio. Pero podían seguir corriendo mientras se gritaban entre sí, así que tenían una resistencia decente en comparación con aquellos en el fondo sujetando sus costados tras comer demasiado espléndidamente su almuerzo.

— Como sea, Kami-yan. ¿Has oído sobre el sistema que usa esta escuela? Tienen un sistema de tutoría para la secundaria y la preparatoria.

— Creo que Fukiyose lo mencionó. Conseguir un tutor gratis suena conveniente, pero apuesto a que tiene la intención de hacer que más estudiantes de secundaria se queden para la preparatoria. Esto les impedirá elegir alguna otra escuela después de graduarse de secundaria. En ese sentido, es probablemente muy restrictivo.

— Cuando oí sobre un sistema donde senpais dan lecciones individuales a sus kouhais, lirios blancos llenaron mi mente. ¿Eso significa que debería ir a que me hagan una resonancia magnética?

— No, yo te recomendaría conseguir asesoramiento o convertirse en monje. Y esto no se limita a las chicas, así que habría tutorías de hombre con hombre también.

— ¿¡Gwah!? ¡No hablamos de las sobras en el baile folclórico aquí! ¿Por qué…? ¿¡Por qué no permiten mezclas chico/chica mejor!?

— Probablemente porque están preocupados por el exacto escenario en tu cabeza.

¿Pero cómo resultaría realmente eso?

Claro, recibir lecciones individuales de una chica perfectamente hermosa y del tipo amable encargada de dormitorio con pechos a punto de escapar de su top, un vistazo de un liguero en sus muslos, y cuyo elitismo habitual era compensado por algo de torpeza sería el paraíso, ¿pero qué pasaba con la realidad que no permitía ese tipo de sueños?

Kamijou y Aogami Pierce iban directo a casa sin ninguna actividad de club, ¿entonces una senpai que violaba sin piedad su tiempo de estudio privado realmente sería una presencia tan bienvenida?

— Bueno, creo que es hora de un esfuerzo serio. ¡Me voy a adelantar!

— ¿Eh? ¿¡Qué te tiene tan motivado de repente, Aogami!?

— No seas tonto, Kami-yan. Estamos con las chicas para E.F. hoy, y sabes lo que significa un maratón de chicas, ¿verdad? ¡¡Mucho rebote y balanceo!!

— Sabes, apuesto que podrías salvar una galaxia o dos si dirigieras ese poder tuyo en una dirección digna.

— En este mundo, derrotar al Gran Rey Demonio y salvar todas las galaxias del universo si siquiera te da un solo beso de recompensa. Pero me he dado cuenta de algo. ¡No puedes ver rebote y balanceo al seguirlo desde atrás! ¡¡No tiene sentido si no estás mirando desde adelante!! ¡Así que debo estar en la cima! ¡¡¡¡¡Para poner mis ojos en todo el rebote y balanceo!!!!!

Con pasos intensos, la espalda de Aogami Pierce se volvió más pequeña más adelante. Estaba corriendo como un velocista aunque este era una maratón, pero su sentido del dolor probablemente se había adormecido por toda la dopamina y endorfinas que su cerebro estaba bombeando. Probablemente se desmayaría por falta de oxígeno antes de llegar a la cima, así que Kamijou hizo una nota mental para no pisarlo.

(Ahora que lo pienso, ¿qué le pasó a Tsuchimikado? Olvidé preguntarle a Kamisato sobre eso.)

— Oye, humano.

— Oh, el Infierno Othinus. Algo más que olvidé.

— Gracias por el amable saludo. Me aseguré de guardar silencio en tu bolsillo, si no lo notaste.

— ¡Espera…no…no! ¿Dónde estabas mientras me cambiaba, Othinus? ¡¡No me digas que viste todo…!!

— ¡¡~~~~!! ¡Esa fue tu culpa por olvidarte de mí y cambiarte sin avisar! ¿¡Tienes alguna idea de cómo me sentí sin ningún lugar para correr!?

Su posición no importaba mientras terminaran el maratón para el final de la clase, así que Kamijou se detuvo a un lado de la ruta para centrarse en su conversación con Othinus.

— Eso fue pacífico. Contactaste a Kamisato Kakeru, ¿verdad?

— Oh, sí. Si te hubiera notado en mi bolsillo allí, el mundo podría haber sido destruido un poco.

Tardíamente notó cuán peligroso había sido el escenario en la cafetería.

— ¿Pero realmente crees que Kamisato preparó todo esto? ¿Estaba esperándome y tuvo algo que ver con la selección de una nueva escuela para nosotros? Pero fue el Sumo Sacerdote quien destruyó nuestra escuela y habría habido un gran aspecto aleatorio para la escuela de reemplazo elegida por Komoe-sensei y los demás profesores. Sin mencionar que no habría esperado la conclusión de nuestro encuentro anoche. Si pensaba que eso sucedería, ¿no habría ideado un plan de ataque diferente?

— Sí. Si podía pensar tan adelantado, podría haber estado esperando un poco mejor y habría preparado una situación donde no habría perdido.

Othinus lo admitió fácilmente mientras se sentaba en su hombro.

— Pero eso no importa si solo es realmente bueno para improvisar. Si esto fue solo un golpe de suerte para él, no me sorprendería que lo aprovechara al máximo y tratara de derribar tu fortaleza. Y por suerte para él, están compartiendo una vida escolar ahora, así que puede atacar cuando quiera.

— …

— Viste sus métodos anoche. Para ser francos, él es más como yo que tú. ¿Recuerdas a la Diosa Mágica Othinus que gobernaba Gremlin? Reuní tanto a la ciencia como a la magia, jugué con enemigos y aliados por igual, y traté a todo el mundo como prescindible para lograr mi objetivo. Kamisato Kakeru no tiene santuarios. Podrías querer decir que es imposible, pero no puedes decir algo así aquí. Recuerda que un dios una vez arrasó al mundo entero y arrancó sus partes más suaves solo para romperte a ti y solo a ti.

— ¿Es tan malo…?

— Sí. – insistió. – Ya fuera intencional o no, ambos ganamos un poder único que creó una distorsión y luego tratamos de revertirlo a la forma en que estaba. Yo sé cómo es eso. Para la gente como él, el mundo ante sus ojos parece superficial, así que no tiene interés en cualquier sacrificio o daño causado a su alrededor. Siente que está viviendo en una película o una escenografía, así que no siente culpa. No dudará en destruir cualquier cosa a su alcance si cumplirá su objetivo. Si necesita causar un apagón en toda una ciudad para abrir una bóveda, ignorará a los recién nacidos en el hospital y las máquinas de oxígeno en los hogares de vida asistida al accionar el interruptor.

Kamijou exhaló lentamente.

— No creo que vaya tan lejos.

— ¿Oh? ¿Puedes decirme qué piensas?

— Si realmente no sintiera nada, no entiendo por qué se esforzaría por salvar a las hermanas Birdway.

— Como dije, lo ve como una película o un programa. – Othinus sonaba exasperada. – Esta es una obra de ficción. Nombres, personajes, lugares, e incidentes son productos de la imaginación del autor o son usados de modo ficticio. Cualquier parecido con hechos reales, lugares o personas, vivas o muertas, es pura coincidencia…Aun así, no quieres ver una tragedia. Si puede cambiarlo, lo hará. Pero es todo. Si tu puntuación sube o tus vidas restantes bajan en un videojuego, no afectará tu vida real. Pero cuando ves esos números en la pantalla, se te sube la sangre a la cabeza, ¿no? Así que ten cuidado. Su empatía y pasión son ligeros. Podría llorar con un pañuelo en un momento y luego accionar el interruptor para su propio objetivo más tarde. Al igual que un artista que parece muy sorprendido durante cada todos los anuncios de tazas de fideo. Necesitas asumir que la comprensión de ayer no se reflejará necesariamente en el comportamiento de hoy.

Kamijou Touma no conocía a Kamisato Kakeru tan bien tampoco.

No era un perfilador experto, así que no podía determinar la verdad y profundidad de todo lo que alguien decía.

Pero.

Se encontró incapaz de coincidir con Othinus tan fácilmente. Kamisato era definitivamente un enemigo. Era un peligro que no dudaría en destruir el brazo derecho de Kamijou Touma y asesinar despiadadamente a Othinus como el último Dios Mágico restante.

¿Pero podía negar la parte de ese chico que se había esforzado por salvar a las hermanas Birdway?

Kamisato puede haber estado equivocado en su ira sobre las chicas que quería proteger, ¿pero no era esa una línea de la que no se desviaría a menos que encontrara algo realmente merecedor de ello?

Othinus soltó un suspiro exasperado en el hombro de Kamijou.

— No me digas que estás dejando que Kamisato llegue a ti.

— ¿Eh?

— Tienes que estar bromeando…Como puedes ver por la fuerza de lucha única que lo rodea, Kamisato Kakeru es muy hábil en controlar el corazón de las personas. Y apuesto a que es más que ser un buen conversador. Heh. El tipo de chico normal de preparatoria que se puede encontrar en cualquier lugar, ¿verdad? Dice ser un representante de la gente común y se hace parecer débil para reunir empatía, pero esto va más allá. Llámalo un aura o carisma si quieres, pero él tiene el aspecto de alguien con esa característica invisible.

— …

— Kamisato Kakeru no es tan simple como parece. Si tú eres un diamante natural que milagrosamente ha logrado un buen equilibrio, entonces él es un diamante artificial que reproduce eso en un laboratorio. Ambos brillan igual de intenso, pero deja que te encante y serás devorado.

Kamijou tragó saliva…y luego pareció confundido.

— Espera, Othinus. Eso no encaja.

— ¿Qué cosa?

— Bueno, si él es un diamante artificial y yo un diamante natural, eso significaría que yo tengo algo igual que él. Y no estás hablando de una mano derecha especial que atrae a la gente a ti. ¿Realmente crees que un chico normal de preparatoria como yo tiene ese tipo de aura o carisma o lo que sea?

— Bien, bien. Entiendo. Realmente eres denso, ¿verdad?

— ¿?

Cuando Kamijou inclinó la cabeza, una chica le habló desde atrás.

— ¿Qué pasa, Kamijou? Te sientes enfermo ya que acabamos de almor…oh. Fue Fukiyose Seiri en su ropa de gimnasia de manga corta.

Esa compañera frentona de pelo negro le dio una mirada tenue cuando vio a Othinus en su hombro.

— Kamijou, eso es una característica tuya, no un defecto. ¿Pero por favor puedes pensar más cuidadosamente cuando la sacas?

— ¡Bien, solo voy a decirlo ahora! Othinus no es una muñeca vestida con un traje sugerente. Ven aquí y tócala. Entonces lo verás.

— Puedo entender el gusto de ver muñecas, pero tocarlas es ir un poco lejos… ¿Y forzar a una chica a hacer eso es una forma de acoso sexual?

— Humano. ¿Realmente crees que un dios dejará que alguien además de su Entendedor lo toque?

— ¿Y después de demandar que lo haga, me rechazas con ventriloquia? Has ido demasiado lejos para que interfiera. ¿Y tu linda muñeca se hace llamar un dios? ¿Cómo se supone que me acerque a un compañero de este modo?

— ¡¡Ayúdame, dios!! ¡¡Estoy a punto de ser colocado en una categoría extraña!!

Kamijou estaba a punto de llorar, pero a pesar de decir ser su Entendedor, Othinus se negó obstinadamente a dejar su hombro.

Mientras tanto, Fukiyose pareció darse cuenta que seguir con esto no ayudaría, así que cambió de tema.

— Por cierto, Kamijou, ¿sabes algo sobre el estudiante de transferencia?

— ¿Qué? ¿No hay muchos de nosotros?

— Solo estamos tomando prestado el edificio, así que técnicamente no somos estudiantes de transferencia. – Fukiyose calmó su respiración. – ¿Cuál era su nombre? Kamisato Kakeru creo. Tú lo conoces, ¿no? Escuché algo de su conversación en la cafetería.

— …

— ¿Kamijou?

— Bueno.

– se detuvo.

Escuchar a un compañero decir el nombre de Kamisato causó que su corazón saltara más de lo que había esperado. Ese nombre se sentía como si perteneciera al reino donde términos como “magia” y “Dios Mágico” eran normales.

— Pero por lo que escuché, no parecía una conversación muy alegre. Parece que él solo sería enterrado sin el término “estudiante de transferencia” ayudándole. Me siento algo mal con todos nosotros haciéndolo a un lado.

— A él no le gusta sobresalir, así que apuesto a que realmente está agradecido.

— Eso espero.

Quizás había estado preocupada por eso.

Ella era una compañera considerada.

Pero si Kamijou no volvía al maratón pronto, podría no ser capaz de terminar para el final de la clase. Corrió tranquilamente por la ruta designada con Fukiyose.

— Sabes, habría pensado que estabas acostumbrada a correr, Fukiyose. Pero ya que eres más lenta que yo, ¿realmente estás debajo del promedio?

— Esto es para mantener mi salud. No voy a estresar mi cuerpo en una carrera loca por el mejor tiempo. Me importa más mantener mi ritmo que conseguir una posición decente.

Se dio cuenta de que ella no estaba respirando con dificultad y sus músculos no parecían tensos. Supuso que podría competir por los mejores lugares si tomaba esto en serio.

Y cuando ella lo notó observándola desde un lado, le dio una mirada sospechosa.

— ¿Por qué estás mirándome?

— …………

Esto no era completamente culpa suya. O él quería creer que no lo era.

Esta desgracia había venido de su entorno.

Uno: Fukiyose Seiri mencionando que estaba “mirando” dirigió su atención a lo que yacía ante sus ojos.

Dos: Antes de salir corriendo, Aogami Pierce había repetido cierta frase en sus locos

desvaríos: rebote y balanceo.

La expresión de su compañera pasó de sospechosa a blanca y ella hizo una pregunta rígida.

— ¿Son tan fascinantes?

Kamijou Touma dio una respuesta honesta.

— ¡¡Sí!!

Un cabezazo verdaderamente honesto lo alcanzó un momento después.

***

El color naranja era espeso.

Era después de clases y, como era diciembre, el sol se puso temprano. Los estudiantes salían de la escuela para sus actividades de club, actividades de comités, o para divertirse fuera de la escuela. Toda la escena estaba teñida en el naranja de la puesta del sol.

Kamijou Touma no era parte de un club o un comité y no tenía otro lugar a donde ir, así que estaba paseando por los terrenos de la escuela.

Llevaba una gran bolsa de basura combustible y otra de basura no combustible. (Um, solo tengo que llevarla aquí, ¿verdad?)

Había un basurero cerca de la puerta trasera para la facultad. Le habían dicho dónde estaba, pero todavía estaba un poco nervioso caminando allí por primera vez. Por suerte esta no era una clase especial ni nada, así que no tenía límite de tiempo.

Ya que no había nadie allí, Othinus sacó su cabeza de su bolsillo.

— Nnn.

— Othinus.

— Si tienes un problema con esto, pregúntate por qué podría ser. Y al menos no pongas la bolsa de basura combustible de mi lado. ¡Apesta a basura de cocina! ¿Qué hay en este recipiente? ¿Yakisoba? ¿¡Pollo frito!?

Othinus se quejó mientras subía por su brazo a su hombro. Su hombro se movía arriba y abajo un poco dado su tamaño y su equilibrio era malo, pero ella parecía haber decidido que era su lugar.

— No hubo nada como lo que decías. Kamisato no mostró ninguna señal de atacarme.

— No tengo ninguna obligación de decirte esto, pero las cosas están muy mal desde el momento que Kamisato Kakeru está viviendo una vida normal en una ciudad administrada tan estrictamente como esta. – Othinus sonaba exasperada. – Puede ser difícil que lo comprendas ya que has vivido aquí por tanto tiempo, pero eso pondría una gran carga sobre él en los frentes tecnológico, informativo, y monetario. Y eso es incluso si la Mesa de Directores decide ignorarlo. Eso significa que debe tener alguna razón para estar aquí. No podría hacer esto solo porque no tiene ganas de irse aún.

— ¿Eso realmente es…?

Kamijou se detuvo y rápidamente envolvió su bufanda.

La envolvió alrededor de Othinus para ocultarla dentro. Le pareció oír algo así como un “¿¡Bgh!?”, pero tenía un asunto más apremiante.

En pocas palabras, ya había alguien en el basurero.

El espacio era compartido por la secundaria y la preparatoria, así que había unas pilas impresionantes de bolsas de basura. El espacio era del tamaño de dos salones, pero las bolsas estaban apiladas más altas que un humano en algunos lugares. Alguien podría quedar enterrado fácilmente si había un terremoto.

Debido a los envases de bebidas y envolturas de pan dulce de la tienda escolar, todo el lugar estaba rodeado de un aroma dulce.

La persona que había visto estaba en el valle creado entre dos montañas de basura.

Ella llevaba su uniforme y tenía guantes de plástico en sus manos.

Era la presidenta del consejo estudiantil con pelo largo, una gran cinta, y el mismo tamaño pequeño que Komoe-sensei.

— Hola, hola. ¿Qué te parece…nuestra escuela? Algunos espacios son compartidos entre la secundaria y la preparatoria, así que puede ser más confuso que una escuela normal y podrían perderse.

— No te preocupes. Las instalaciones son realmente mejores que nuestra vieja escuela. Debe haberse sentido aliviada de escuchar eso.

Pero…

— Me dijiste tu nombre, ¿verdad? ¿Cuál era?

— ¿Estuviste…encargado de la limpieza hoy?

— Oh, cierto. Era Jumpy Bunny.

— Para que lo sepas, eso es jerga o un tipo no oficial de… ¡ay! Me mordí la lengua… ¡¡C-como sea, ese no es el tipo de apodo que deberías usar frente a mí!!

Ella parecía desafiar la gravedad cuando se alteraba por algo porque empezó a saltar en el aire.

Kamijou ignoró a Othinus mientras se retorcía dentro de su bufanda y le dio una mirada curiosa a los guantes de plástico de la chica.

— ¿Qué haces aquí, presidenta?

— ¿¡Ni siquiera estás tratando de aprender mi nombre, verdad!? M-M…

— ¿?

— ¡¡Mie-chaaaaaan!! ¡¡Wahhhhn!!

La Jumpy Bunny parecía llamar a esa chica de secundaria cuando se ponía demasiado emocional porque empezó a operar su teléfono con los guantes de plástico todavía puestos. La respuesta llegó con una velocidad increíble. Ni siquiera los atajos de predicción explicaban esa velocidad, así que la conversación probablemente se llevó a cabo solo con símbolos y emoticones.

Y la presidenta se petrificó en cuanto abrió el correo.

Preocupado por la chica portátil inmóvil, Kamijou miró vacilante sobre su hombro al teléfono.

“Mi-ke> Corres a mí con demasiada facilidad, Onee-chan. (-_-+) ¿Soy tu sirviente? （／ロ°）／～E *golpeando la mesa de té*”

— B-bgfh…wahhhh…

— Realmente no creo que esto sea digno de sollozar como un cerdo y llorar, presidenta. Tú dijiste en el almuerzo que ella es un adolescente, ¿verdad?

— Fghfh. Voy a pedirle a Mie-chan que salga conmigo para compensar esto, así que guarda silencio. Y esto definitivamente no es que esté entrando en modo mendigo con una estudiante de secundaria porque temo que ya no me tenga paciencia.

Cuando puso una mano tranquilizadora en su hombro, sus sollozos se calmaron gradualmente. Y mientras el chico con pelo de punta actuaba como si supiera de qué hablaba, él también cayó en la categoría adolescente.

En cualquier caso, parecía que los problemas compartidos ayudaban a unir a la gente.

La Jumpy Bunny habló mientras sollozaba y se frotaba su nariz roja.

— Uuu…C-como sea, esto es parte de mis tareas habituales del consejo estudiantil…Es uno de nuestros trabajos.

— ¿Hm?

— Separar la basura. – ella señaló aquí y allá. – Generalmente se divide entre una pila combustible y una pila no combustible, pero algunas personas tiran papel de aluminio y otras cosas porque separarlo es demasiado trabajo.

— Oh…

Kamijou miró a las bolsas de basura, pero él no notó ningún problema real por lo que podía ver a través de las bolsas transparentes.

— Bueno, las instalaciones de procesamiento de basura de Ciudad Academia hacen mucho reciclaje también. Ellos por supuesto hacen fertilizante la comida y reciclan papel viejo, metal, y plástico, pero también hacen minería urbana…es decir, reciclar las tierras raras microscópicas dentro de circuitos electrónicos. Utilizan aire, magnetismo, electricidad estática, y separación centrífuga…Pero todavía me gustaría evitar que cualquiera tire una hoja de cúter rota o una lata de spray para el cabello.

— Ugh. ¿La gente es tan descuidada?

Era bastante fácil para la persona tirarlo, pero en algunos casos, podría volarle un dedo al recolector que llegaba a recogerla. Después de todo, para aumentar la eficiencia lo más posible, las bolsas de basura eran aplastadas con una poderos prensa dentro del camión de la basura.

— Um, uh, hay más de quinientas personas aquí si cuentas la secundaria y la preparatoria. Y podría ayudar que no puede ser rastreada de nuevo a ellos como se puede con la basura doméstica. Se sugirió que escribiéramos los números de clase en las bolsas, pero por alguna razón hubo mucha oposición y fue negado…

— Pero…

Kamijou siguió las instrucciones precisas de Jumpy Bunny para tirar casualmente sus dos bolsas en las pilas adecuadas.

— Este espacio es tanto para la secundaria como la preparatoria, ¿verdad? No veo por qué el presidente del consejo estudiantil de la preparatoria tendría que llegar tan lejos.

— La secundaria realmente solo está “unida” a la preparatoria, así que toda la responsabilidad recae en la preparatoria. Además…

La presidenta con guantes de plástico exhaló lentamente.

— Incluso si no tengo que hacerlo, um, el peligro será ignorado si nadie lo hace. Y eso significa que alguien debe hacerlo.

— …

Kamijou miró alrededor del área ahora que había terminado su trabajo.

Era del tamaño de dos salones y las pilas eran más altas que él en algunos lugares.

— ¿Quieres un poco de ayuda?

— Ahaha. Son cien años demasiado pronto para eso. Además, terminaré por el día una vez que revise las que acabas de traer.

Él miró a los montones extraordinarios de basura una vez más.

¿Ella ya había revisado todo eso por su cuenta?

— Estoy creciendo todos los días.

— Um…Perdón, pero ¿dónde?

— ¿Podrías no mirar todo mi cuerpo de esa manera? ¡¡Especialmente cuando nos acabamos de conocer hoy!!

La Jumpy Bunny cruzó sus brazos para proteger su poco impresionante pecho y se agachó con lágrimas en los ojos.

— Pensé en abrirlas todas a mano primero, pero, um, muy rápido me di cuenta de que eso no funcionaría.

— Sí, también lo creo.

Pero al parecer ella hizo las cosas de modo diferente ahora.

En cuanto a cómo…

— Las cosas realmente peligrosas como hojas de cúter y aerosoles están hechas generalmente de metal, ¿verdad? Así que ordené un detector de metales barato. Eso me da una idea general de dónde se encuentran solo acercando el dispositivo.

— Ya veo.

— ¡N-no es que eso realmente separe todo perfectamente! Pero como dije, Ciudad Academia hace un muy buen reciclaje, rozando la minería urbana, así que todo es sobre dar y recibir. ¡¡Y si me das una mirada impresionada como esa, no puedo evitar coincidir contigo!!

— Oh, así que no estabas usando algún tipo de poder raro…

— ¿¡Por qué sigues burlándote de mí hoy!? ¿¡Te hice algo!?

— ¡¡Gyaaaah!! ¡¡No me agarres con esos guantes de plástico sucios!! ¿¡Este es un nuevo tipo de terrorismo bioquímico!?

— Oh, lo siento.

Soltó el cuello de Kamijou.

— Como sea, si no tienes más asuntos aquí, no hay razón para que te quedes. Um, ¿tienes alguna actividad de club después de esto? ¿O trabajas?

— Solo voy a casa.

— Ya veo. – fue todo lo que dijo la presidenta.

Para bien o para mal, no parecía interesada. Ella estaba gastando su tiempo después de clases en su deber más problemático, pero al parecer no tenía ningún prejuicio contra las personas que simplemente iban a casa.

— Entonces vamos a casa.

— ¿Eh? ¿Qué pasa con el consejo estudiantil?

— Um, hay días ocupados y hay días con nada en absoluto. La parte horrible es que no podemos elegir qué días son cuales.

La Jumpy Bunny se rio débilmente y se quitó sus guantes de plástico.

Esa ceremonia parecía decir que su trabajo del día estaba completo.

Sin nada que hacer, Kamijou notó algo casi enterrado en la basura.

Era una caja metálica oxidada casi del tamaño de dos bóvedas lado a lado y tenía una chimenea conectada.

— ¿Todavía hay un incinerador aquí en esta época?

— El fondo al parecer estaba fijado al suelo de concreto, así que removerlo habría costado un montón de dinero.

Había una puerta de metal en la parte superior de la caja, pero estaba cerrada con gruesas cadenas y un candado. Igual la pequeña ventana en el fondo para dejar salir las cenizas.

— Si nadie lo usa, ¿por qué molestarse en cerrarlo?

— Um…

La presidenta se sonrojó y se removió por alguna razón. También golpeó sus dedos índices frente a su (pequeño, o más bien, plano) pecho.

La expresión de Kamijou desapareció ante esta respuesta inesperada. ¿Realmente había cualquier tipo de elemento “rosa” en lo que estaban hablando?

— ¿Estás diciendo que esto tuvo que ver con una persona obsesionada con el bondage que anda por ahí colocando cadenas en todo o alguien que ama sellar espacios cerrados para que nadie pueda entrar o salir? ¿O quizás alguien que quiere realizar un juego mortal en el futuro?

— ¿¡No estás dejando volar tu imaginación demasiado!?

— ¿Entonces qué es?

— Uuh…

Comenzó a removerse de nuevo.

Y entonces le respondió como si estuviera haciendo una confesión.

— Bueno…Si el incinerador se deja abierto, um, parece que estudiantes le meten cosas por la noche y las queman…Por ejemplo, um, una revista inapropiada por la que reunieron su valor para llevarla a la registradora pero se decepcionaron y no saben qué hacer con ella. O muñecas tamaño natural o dakimakuras que se dejaron llevar y pidieron en línea por la noche.

Kamijou sintió un relámpago atravesar su mente.

El forcejeo dentro de su bufanda se negó a guardar silencio.

— (No me digas que eso te pareció una buena idea.)

— P-por supuesto que no. No puedo creer que pensaras eso.

— ¡Um, n-no puedes hacer eso! ¡Termina causando mucho humo, así que no puedes hacerlo a escondidas, y las chispas y el humo podrían incluso activar la alarma de incendios de la escuela! Terminarás llorando mientras te acusan de entrada ilegal y tentativa de incendio. ¡Incluso si no hablabas en serio, si la gente capta un vistazo de la cara o el brazo quemados de una muñeca realista, puede causar pánico y serás acusado de obstrucción forzosa de negocios también! ¡¡Solo te quedarás con unos registros oficiales desconcertantes del incidente!!

— ¡¡Te prometo que no pensé que era una buena idea!!

Parecía ser más por costumbre que para asegurarse que estuviera cerrado, pero la mínima presidenta sacudió el candado conectado a las cadenas.

— No hay problema tampoco hoy. Bien, vamos a casa.

— Claro.

Kamijou y la Jumpy Bunny dejaron el basurero.

Otro día de trabajo duro se completó.