Totsuzen Papa ni Natta (NL)

Volumen 1

Capítulo 20: El Sr. Dragón es Testigo del Examen del Alumno del Rey

“Voy a preparar el examen ahora.” Dijo la Srta. Phyllis. “Por favor, espere hasta que esté listo.”

Mientras esperábamos el regreso de la Srta. Phyllis, la Srta. Courié entabló una pequeña charla con nosotros. “Sr. Eldraco, me han dicho que vive en el Pico Sagrado de Olimpia…

¿Ha vivido usted en esa tierra sagrada durante generaciones?”

“¿Durante generaciones? Bueno, he vivido allí durante mucho tiempo.” Y eso no era mentira.

“Digo que la historia de su familia debe ser muy rica. Aunque supongo que se encuentra en la entrada del bosque. Demasiado profundo en esos bosques, y el maná es demasiado espeso para que los humanos vivan allí por mucho tiempo.”

“¿De verdad? ¿Es así?”

“Por supuesto. Es cierto que si uno vive allí desde una edad muy temprana, su cuerpo puede acostumbrarse al maná… pero eso es sólo una teoría. De hecho, si hay alguien que creció en ese ambiente, me gustaría conocerlo.”

Te gustaría conocerlo, ¿eh? Bueno, Olivia se ajusta a esos criterios… no es que pueda decirle eso.

“Si, hipotéticamente, un niño se criara en Olimpia, ¿cómo crecería?”

“Es todo teórico, pero probablemente poseería cantidades sobrehumanas de maná.

Suficiente para superar incluso a los darkin y a los elfos.”

“Ya veo…” Tal vez por eso Olivia es tan buena en la magia. Pensé que era porque había leído en la Biblioteca de Grimorios mientras ventilaba los libros.

Seguimos charlando hasta que por fin…

“Siento haberte hecho esperar.”

La Srta. Phyllis entró en el área de entrenamiento de hechizos. “¡Vaya, Papi, mira! ¡La directora es tan bonita!”

“Lo es, cariño.”

La Srta. Phyllis llevaba una túnica blanca y brillante y sostenía un bastón con una joya que brillaba con todos los colores del arco iris. Incluso más que antes, tenía un aura a su alrededor.

“Srta. Phyllis, ¿podría ser… podría ser uno de los Siete Objetos Sagrados Supremos, la Gema-Escalada de la Eternidad? La herramienta mágica enjoyada que amplifica enormemente su maná inmaculado.”

Se rió. “Cuando me enfrento a un candidato a héroe de leyenda, es de buena educación que me ponga seria.”

Vaya. Supongo que es el bastón favorito de la Srta. Phyllis. Lo miré fijamente. Espera, la “Gema-Escala de la Eternidad”… Esa piedra del color del arco iris en la punta…

“¡Guau!”

“¿Q-Qué es, Sr. Eldraco?”

“¿Es esa la bonita piedra que se me cayó cuando…?” “¿Perdón?”

“Oh, nada; es sólo que saqué una gema parecida de mi santuario… err, quiero decir de mi casa, y la dejé caer en algún lugar.”

Lo recordaba como si fuera ayer. Destacaba entre las joyas esparcidas por mi santuario, ya que era especialmente grande y brillante y le tenía bastante cariño. Hace unos mil años, me deprimí mucho cuando la perdí.

La Srta. Courié parecía enfadada. “¡Cómo se atreve! Quiero que sepas que este cacareado tesoro cayó del cielo cuando su predecesora, la Reina Filósofa de los elfos, Phyllia, fue testigo del buen presagio de un dragón anciano que se elevaba hace más de mil años.”

“Ah, ¿es así? Así que tenía razón…”

“¿Tenías razón?”

Sí, tenía razón. Solía llevarla conmigo porque era tan brillante y bonita. La perdí mientras volaba, ¿eh? Bueno, supongo que estoy feliz de que alguien más lo haya cuidado bien. Así que ahí está eso.

“Ejem. Ahora bien, vamos a recomponernos… Olivia Eldraco.”

“¡Sí, señora!” Respondió, levantando la mano. Aunque parecía nerviosa por la forma en que la Srta. Phyllis la miraba, mantenía la cabeza alta.

“Comencemos el examen final para la selección del Alumno del Rey.” Ella seguía agarrando el bastón adornado con mi bonita piedra. “Ahora ven a mí sin ninguna reserva y sin contención.” Declaró solemnemente.

“¿Sin contención, Srta.?” Olivia me lanzó una mirada de preocupación.

***

Así que esto es lo que implica la prueba de selección para la beca de Alumno del Rey. La Srta. Phyllis atacaría a Olivia con maná sagrado, probando si Olivia puede defenderse de él. Entonces, los roles de atacante y defensor se invertirían, y Olivia tendría que romper la barrera de la Srta. Phyllis.

Hablando de simple.

La Srta. Courié me susurró suavemente. “No te preocupes. No hay forma terrenal de que Olivia pueda vencerla. Todo esto es sólo una formalidad.”

“Ajá…”

“En otras palabras, ella todavía tiene una oportunidad de convertirse en la Alumna del Rey, incluso si no tiene éxito. Así que no tiene que parecer tan ansiosa.”

“Ah, sí, sí, por supuesto.”

Sin embargo, eso no es lo que me preocupa. ¿No le dijo la Reina Oscura a Olivia que no usara todo su poder? Recordé lo que el mentor mágico de Olivia había dicho:

“Escucha, Olivia. Está bien que vayas a este lugar llamado ‘escuela’ o lo que sea, ¡pero primero necesitas practicar la contención de todo tu poder! Ya tienes mucho poder sólo por haber aprendido la magia directamente de tu gloriosa Reina Oscura y las habilidades con la espada y la lucha de mi mano derecha, la bella Caballera Darkin, la Capitana Clowria. Incluso te enseñé una magia tan potente que sólo este castillo puede resistirla, lo cual, en retrospectiva… sí. Así que nunca, nunca vayas a por todas en la escuela, ¿me entiendes?

¡Nunca jamás!”

¡Eso es lo que dijo! ¡Me acuerdo!

“Papi…” Olivia parecía perdida.

Lo pensé un momento. Luego le di un fuerte asentimiento.

“Está bien. Si eso es lo que dice la Directora, entonces significa que puedes ir a por todas.”

Estamos hablando de la Reina Filósofa de los Elfos. Estoy seguro de que puede manejar todo lo de Olivia. La Reina Oscura dijo que Olivia no debería ir a por todas con los humanos. Ergo, si su oponente es un elfo, no debería preocuparse. Además, antes la Srta. Phyllis estaba hablando de su sabiduría.

Con mis ánimos, Olivia dio un paso adelante, animada por una renovada determinación. “Muchas gracias, Srta. Directora.”

“De nada. Muéstrame todo tu poder.” Con gracia y compostura, la Srta. Phyllis sonrió mientras asumía su postura. Claramente, ella estaba confiada. No espero menos de la Reina Filósofa de los Elfos. Estoy seguro de que es muy poderosa.

Primero fue el turno de la Srta. Phyllis para atacar. La directora Courié volvió a susurrarme al oído. “Descanse tranquilo, señor. Sin duda, ella se contendrá de tal manera que la vida de su hija nunca estará en peligro… Aunque el mundo sea vasto, pocos pueden soportar un ataque con toda su fuerza de una sabia tan grande.”

“Así que es así de fuerte.”

Ya veo. Ese tipo de cosas no están en mis libros de paternidad, así que es todo nuevo para mí.

“Ahora.” Dijo la señorita Courié. “Despliega tu magia a la señal de salida.” “¡Sí, señora!”

“Y… ¡empieza!”

La Srta. Phyllis blandió el bastón que lleva mi piedra favorita. “¡Rayo de fotones!”

La gema brilló. ¡Vaya, qué imprevisible! ¿Quién iba a saber que esa pequeña y bonita roca tenía esa utilidad?

El rayo de luz envolvió a Olivia.

“¡Hi-ya!” Olivia extendió sus manos. En ese instante, una luz cegadora empapó la arena.

“Naturalmente, no puede salir totalmente indemne. Esta es una dura prueba diseñada para impresionar a quien la toma y así mostrar la brecha entre su poder y la pura sabiduría de la Srta. Phyllis… ¡¿Qué?!”

“¡Ah, Olivia! ¡Estás a salvo! ¡Uf!”

La luz se aclaró y allí estaba ella, sin un rasguño. Me sentí muy aliviado. Si hubiera estado herida, me habría enfurecido un poco. Para ser justos, deberían haberme dicho de antemano si existía la posibilidad de que se lesionara.

Olivia tenía los ojos cerrados. ¿Está bien? ¿Había demasiada luz para ella?

“No, ¿qué…?” La Srta. Phyllis estaba temblando, con la Gema-Escalada de la Eternidad aún en la mano. No dejaba de mirarla y Olivia a su vez, visiblemente desconcertada.

Finalmente, Olivia rompió el silencio, ladeando la cabeza con desconcierto y preguntando: “Err… ¿Es ese el final de la parte de defensa del examen?”

“¡Ah, eh, err, yo, eh, s-sí, sí, lo es! La magia defensiva parece ser tu fuerte y algo más, Olivia.” La Srta. Phyllis se aclaró la garganta en voz alta.

Parecía que Olivia había pasado la primera mitad. ¡Increíble, cariño!

“T-Toca la siguiente etapa, es el momento de atacar.” Y que la Srta. Phyllis lo bloquee.

“La quintaesencia de la magia de luz de los elfos es la defensa y la curación… así que no esperes que esto se desarrolle de la misma manera que antes. Sepan que esforzarse al máximo es una señal de respeto hacia mí, la única Phyllis Florence.”

“¡Sí, señora! ¡Entendido!”

Así es mi chica. Siempre con respuestas respetuosas y enérgicas. Es muy tarde, así que también debe tener sueño. ¡Qué soldado!

La Srta. Courié levantó la mano en alto. “A-Ahora bien… ¡QUÉ EMPIECE!”

La Srta. Phyllis no perdió el tiempo. “¡Hilos de luz, téjanse a vuestra voluntad! Barrera:

¡Escudo Hidroshimmer!”

Mi gema de color arco iris brilló, haciendo aparecer un gigantesco círculo mágico que llegaba hasta el techo. Estaba formado por varios círculos mágicos más pequeños, y pude ver que cada uno de los círculos pequeños estaba ligado a un poderoso maná. Ya veo. Así que esta magia es aún más fuerte que antes. Supongo que estos “elfos” son muy hábiles en este tipo de magia.

Observé a Olivia mientras se colocaba ante la barrera defensiva de la Srta. Phyllis. “Sin contención… Sin contención, ¿eh?” Parecía estar reflexionando como una loca en su cabeza, y ¿quién podría culparla? Nunca había desatado todo su poder, así que debía ser difícil para ella. Si se esforzaba al máximo y fallaba… Mis libros de paternidad me dicen que eso es aterrador para un niño en crecimiento.

“Muy bien.” Dijo ella. “Papi, Srta. Maredia, Srta. Clowria. Voy a intentar ir a la máxima potencia.”

Se acercó lentamente a la barrera de la Srta. Phyllis.

“¿Qué está haciendo?” Preguntó la Srta. Courié. “Sólo se puede romper una barrera creada a través de magia con magia. Eso es teoría mágica de nivel principiante.”

“Oh, no, eso es probablemente magia.” Murmuré en respuesta. Sabía a dónde iba esto. “¿Perdón?” Dijo ella, con una mirada dudosa.

“¡Hi-ya!” Con una forma impecable, golpeó la barrera de la Srta. Phyllis. “¡Guau!” Solté, impresionado.

Su puño estaba revestido del fuerte de la Reina Oscura, magia oscura. A eso hay que añadir la forma de artes marciales que había aprendido de la Srta. Clowria. Así que eso es lo que Olivia imaginó como atacar “sin contención”. Me sentí todo cálido y confuso por dentro. En momentos como éste, Olivia tenía ganas de apoyarse en sus hermanas mayores, las dos damas con las que compartía hogar.

CRACK. Las fisuras atravesaron la barrera antes de que se rompiera en finos fragmentos. Estos cayeron al suelo, bailando en el aire nocturno del Área de Entrenamiento de Hechizos.

“¿Q-Qué? H-Ha roto su barrera.” Murmuró para sí misma la estupefacta Srta. Courié. “¿Y encima con un puñetazo?”

Bueno, en realidad, eso fue un hechizo.

“Tú…” La Srta. Phyllis, igualmente estupefacta, habló en un volumen apenas audible. “Tú… pasas. Olivia Eldraco… tu talento es genuino. Yo… Yo…”

“¡Si!” Olivia saltó de alegría y corrió hacia mí.

La abracé con fuerza. “¡Bien hecho, Olivia! ¡Has aprobado! Papi está muy orgulloso.” “¡Tee jee! Estuve un poco nerviosa, Papi.”

“¿De verdad? No lo parecía.”

“¿No lo parecía? Tee jee…” Acarició su suave mejilla contra mí. Sus niveles de ternura estaban fuera de lo normal.

“Ahora podré seguir estudiando junto a todas, ¿no?” “¡Sí! ¡Eso es lo que te prometieron!”

“¡Uf!” Lanzó un suspiro de profundo alivio.

Ya veo. Para ella, esta era una lucha que no podía perder, para no perder su tiempo con sus amigas. Y se metió en ese campo de batalla ella sola. Olivia, eres el orgullo de tu padre.

“Aunque…” Hizo un pequeño mohín de arrepentimiento. “¿Qué pasa, cariño?”

Ella susurró su secreto: “Parece que ir a por todas es un poco difícil para mí. Me daba mucha vergüenza… así que acabé conteniéndome.”

Siempre es lo más bonito del mundo cuando se ríe así. Le dediqué una bonita y amplia sonrisa. “Está bien. A partir de ahora, podrás entrenar con una profesora como la Srta. Phyllis, así que practica mucho sin contenerte. Eso es lo que dijo la Srta. Phyllis, ¿no?”

“¡Ah! Ah, pero la Srta. Maredia me dijo: ‘¡No hagas el rayo láser! ¡Nunca hagas el rayo láser!’, así que pienso cumplir esa promesa. Ella dijo que la escuela se derrumbaría.”

“¿La escuela, derrumbarse? No querríamos eso, ¿verdad?”

Olivia asintió, con voz emocionada. Pero detrás de ella había alguien que no sonaba tan alegre. La Srta. Phyllis chilló. “¡Eek!”

¿Qué ha pasado? Me pregunté. ¿Habrá visto un bicho o algo así?

Mientras nos expresábamos nuestra alegría y alivio, la Srta. Phyllis se aclaró la garganta. “Ejem. Con esto, el examen ha terminado. Más adelante se les comunicará la ceremonia de investidura de los Alumnos del Rey. Uf, estoy… agotada… Eso es, hoy no me siento bien… Mis verdaderos poderes no son tan fáciles de vencer…” Gimió, con los hombros caídos.

Oh, vale. Pensar que realizó el examen por el bien de Olivia mientras se sentía mal…

¡Qué buena Srta.!

“Ahora bien, Srta. Olivia Eldraco.” Dijo la Directora Courié. “Vuelva a los dormitorios por hoy. Y señor, por favor, haga uso de la habitación de invitados. Qué lástima, aunque, considerando todo esto… Apenas puedo creerlo. Poseer un talento tan inigualable, sólo para desear una vida escolar corriente en aras de amistades corrientes…”

¿Por qué habla mal de una vida escolar normal cuando es la directora? en serio, eso es triste.

Olivia debió de pensar lo mismo, porque bajó las cejas.

¿Qué es esto? ¡Olivia parece triste! Como su papi, tengo que intervenir y decir algo.

Recordé las sabias palabras de un libro sobre paternidad que había leído recientemente: La Diferencia entre los Padres Monstruosos y los Buenos Padres. Lo compré pensando que era para dragones como yo u orcos o cualquier otro tipo de ‘monstruo’ que se encontrara siendo padre. ¿Quién iba a saber que ‘padre monstruoso’ es un término que significa un padre excesivamente exigente y de pesadilla? Y tampoco esperaba que ese libro me ayudara en esto. Además, ese libro decía que transmitir tu razonamiento justificado de forma racional es diferente de cómo hacen las cosas los ‘padres monstruosos’. Así que empecé a buscar palabras para decirle a la Srta. Courié lo que pensaba.

En ese momento, la puerta del área de entrenamiento de hechizos se abrió con un BANG.

“¡Wah!” Grité sorprendido. Había un grupo de pequeñas sombras, siluetas de niños, en el origen del ruido. Todas llevaban pijamas. Mis ojos de dragón tienen visión nocturna. Espera, la conozco…

“¡Daisy!” Olivia corrió hacia ella.

Lo sabía.

“¿Estás bien, Olivia?” Preguntó Daisy. “¡Rubí! ¡Iria! ¡Lena…! ¡Están todas aquí!”

En total eran seis, y por lo que parece, todas eran amigas de Olivia.

“¡Están violando las reglas de la escuela!” Dijo la Srta. Courié, con voz severa. “Ya ha pasado el toque de queda del dormitorio…”

“Lo siento, Srta. Directora.” Dijo Daisy. “Yo fui la que trajo a las demás aquí.” Estaba frente a la Srta. Courié, de pie, decidida y con la cabeza alta.

“¿Qué has dicho? Pero tú eres la joven heredera de la Casa de Palestria, que tanto se enorgullece de su rectitud moral…”

“Cuando nos enteramos de que Olivia se presentaría al examen de selección de Alumnos del Rey, apenas pudimos soportar la ansiedad. Habíamos oído cómo había quienes se presentaban al examen y se lesionaban, o dejaban la escuela porque la confianza en su magia quedaba destrozada… Y queríamos ayudarla como fuera.”

Las otras chicas asintieron con la cabeza:

“No somos tan buenas en la magia o en el combate físico como Olivia, pero pensamos que podríamos hacer algo si trabajamos juntas.”

“¡Claro, así que no es sólo culpa de Daisy!” “… Urgh…”

“¡Sí! Queríamos salvarla… ¡Vine porque quise!” “¡Lo que ella dijo!”

¡Vaya! Eso me hizo muy feliz. Todas se escabulleron de los dormitorios por la preocupación por Olivia.

La Srta. Courié se frotaba las sienes. “Dios mío… ¿Ninguna de ustedes mira a la Srta.Olivia con envidia o frustración…?”

Fue Daisy quien respondió. “Sí, pero sólo un poco. A pesar de todo, es mi preciosa amiga.”

“Daisy…” Dijo Olivia, conmovida. Sus ojos brillaban. “Ustedes…”

La Srta. Courié jadeó. “Amigas…” Se empapó lentamente de la escena de todas las amigas de Olivia apiñadas a su alrededor. Los ojos de las pequeñas de primer año estaban clavados en su directora. Entonces, un rato después, la Srta. Courié lanzó un profundo suspiro. “Ahora recuerdo… La vida escolar no consiste sólo en perfeccionar las habilidades o los conocimientos académicos. Parece que, a pesar de ser directora, he olvidado algo muy básico.” Sonrió un poco y dio dos palmadas. “Ahora bien, todas ustedes. Puede que ya se hayan enterado, pero la Srta. Olivia ha pasado el examen de Alumno del Rey ilesa… Y no sólo eso, sino que será la Alumna del Rey de una manera sin precedentes, viviendo su vida escolar junto a ustedes.”

Las niñas se alegraron.

“Todas ustedes tienen un lugar en sus corazones para sus amigos. Eso calienta mi alma como directora de la Academia de Florencia. Dicho esto, las celebraciones deben tener lugar en una fecha posterior. Ahora vuelvan a los dormitorios. Tienes clases mañana. Y por dejar los dormitorios sin permiso y violar el toque de queda, un castigo adecuado… Veamos… Sí, creo que las lecciones extracurriculares servirán.”

Las chicas parecieron aliviadas al escuchar que eso era todo. Volvieron a los dormitorios, de la mano.

Olivia me saludó con una sonrisa realmente satisfecha. “Buenas noches, Papi.”

“Buenas noches, Olivia. Dulces sueños… Y gracias, chicas. Espero que sigan siendo amigas de mi Olivia.”

La Srta. Courié tenía una expresión pacífica. Bien, estoy seguro de que verá el valor de una vida escolar normal para las niñas sin que yo tenga que decir una palabra.

Y con eso, dejé atrás el Área de Entrenamiento de Hechizos. Aliviado por el hecho de que Olivia había pasado la prueba sin problemas, esa noche dormí como un bebé.

A la mañana siguiente, temprano, oí que llamaban a la puerta de mi habitación en la Academia de Florence.

“Buenos días, Sr. Eldraco.”

Me puse nervioso. Era la mujer de la secretaría. “Ah, eh, buenos días… Lo siento, todavía estoy en pijama.”

Me alegro de que el golpe no me haya hecho volver a la forma de dragón. La habitación se habría derrumbado con seguridad.

“Está bien, señor. He venido a decirle que el horario está decidido. Debo decir que su hija es impresionante. He oído que ha aprobado el examen de selección de Alumnos del Rey.”

Así que ya es consciente. Mi día estaba teniendo un comienzo bastante agradable, escuchando las alabanzas de Olivia.

“Muchas gracias. Así que, err, sobre ese horario…”

“Es la ceremonia de investidura de los Alumnos del Rey… Aunque debido a los deseos de la propia Srta. Olivia, no será el habitual acto a gran escala, sino que se celebrará dentro de la academia. De hecho, se llevará a cabo antes de la cena de hoy. Disculpas por la poca antelación.”

“Um, ¿también puedo asistir?”

“Sí, por supuesto. Y tampoco nos importa que se quede otra noche.” “Gracias. Le tomaré la palabra… Ah.”

“¿Ah?”

Me di cuenta. Había dos damas en casa que estarían encantadas de ver la hora del triunfo de Olivia.

“¿Cree que podría salir hasta que la ceremonia esté en marcha?” “No debería haber ningún problema con eso…”

Le di las gracias de nuevo y me dispuse a vestirme. Muy bien, un vuelo rápido y traeré a las dos damas. El viaje de ida y vuelta me lleva medio día, así que pude traer a la Reina Oscura y a la Srta. Clowria a la academia a tiempo.

Como era de esperar, la Reina Oscura refunfuñó por salir al exterior, así que le hice adoptar la forma de gato. Estaba cómodamente metida en el pecho de la ropa de la Srta. Clowria.

“Haugh… Nunca pensé que vería el día en que estaría montando a un Dragón Anciano.

¡Cuán lejos he caído!” Pero su cola se movía. Me alegra que haya tenido un vuelo divertido.

“Si no recuerdo mal.” Dijo la Srta. Clowria. “Son cien estudiantes por grado, ¿correcto? Con los seis grados en un solo lugar, será todo un espectáculo.” Acarició la cabeza de la Reina Oscura mientras observaba el auditorio.

Estábamos sentados en los últimos asientos del auditorio, esperando que comenzara la ceremonia de investidura. Tal y como había comentado la Srta. Clowria, con todas las alumnos desde el primer curso de Olivia hasta el sexto, el público del auditorio era bastante impactante.

Poco después, la Directora Courié subió al escenario y comenzó a hablar a su digna manera. “Como todas ustedes han sido informadas, la alumna con beca especial, la Alumna del Rey, ha sido seleccionada de la Real Academia Femenina de Florence.”

Las estudiantes estallan en aplausos.

La Srta. Courié continuó. “Además, la alumna elegida esta vez como Alumna del Rey no desea un trato especial. Ha elegido vivir su vida escolar aquí con normalidad. Con la condición, por supuesto, de que no descuide sus estudios como Alumna del Rey. En resumen, ha elegido mantener una estrecha relación aquí con sus amigas. Y me parece que acaba de recordarle a su directora una valiosa lección.”

Una vez más, las alumnas aplaudieron. También aplaudimos a la Srta. Courié. Su discurso no fue ni demasiado largo ni demasiado corto. Hizo un buen trabajo transmitiendo los sentimientos de Olivia a los alumnos, pensé con alegría.

“Ahora, permítanme presentarles a la Alumna del Rey seleccionada entre las estudiantes de la Real Academia Femenina de Florence. La Srta. Olivia Eldraco de la Clase Cero.”

Olivia subió al escenario y los aplausos aumentaron.

“¡Vaya, parece que los rumores de la niña genio eran ciertos!” “Es increíble. También es tan pequeña.”

“He oído que tiene una gran personalidad. Al parecer, incluso se lleva bien con las chicas de fuera de la Clase Cero.”

“Seguro que me gustaría que las chicas de la Clase Cero de mi curso aprendieran un par de cosas de ella.”

Oír los susurros de las alumnos me llenó de orgullo. ¿Qué tal mi hija? Es una joya,

¿verdad?

Olivia pronunció su discurso en el escenario. Su discurso fue breve, pero le honra. Y al final, sonrió y dijo: “Estoy agradecida a mi querido Padre, que me ayudó a inscribirme en esta academia.”

No pude contener las lágrimas. Me ha llamado ‘padre’. Siempre grita ‘papi’ con esa sonrisa despreocupada y se abalanza sobre mí, pero ha madurado lo suficiente como para llamarme ‘padre’ cuando se dirige a otras personas. Olivia, ¡tienes mi más sincero reconocimiento!

Más tarde, la fundadora de la Academia, la Srta. Phyllis, apareció con sus maneras señoriales para otorgarle un manto blanco puro. Al parecer, el manto de terciopelo, adornado con una cresta, servía como prueba de sus credenciales de Alumna del Rey. Era lo suficientemente grande como para cubrirla por completo hasta los glúteos, y se balanceaba cada vez que se movía.

¡Alerta de lindura! ¡¡Sobrecarga de ternura!!

Quiero decir, no es justo. A ella le queda bien cualquier cosa… Es suficiente para que me desconcierte.

La asamblea llegó a su fin y, al compás de las voces del coro, las alumnos salieron del auditorio en ordenadas filas.

“Ha crecido en el poco tiempo que no la hemos visto, nuestra Olivia.” Dijo la Srta.Clowria.

“Haughh.” Gimió descontenta la Reina Oscura, todavía en la parte superior de la Srta. Clowria. Por lo poco que pude entender de su casi ininteligible murmullo, aunque estaba feliz de ver a Olivia tan honrada, estar en una habitación con tanta gente era duro para ella. “Urgh… Esto me recuerda a lo podridos que estaban los mandos intermedios cuando yo mandaba en el ejército. Era una compañía súper negra. Vamos, Clowria, ¡vamos a casa ya!”

Veo que la Reina Oscura tiene sus propias dificultades… Yo vivía una vida libre y despreocupada, así que no puedo imaginar lo que tuvo que pasar al mando de un ejército. “¿Mandos intermedios? ¿Qué es eso?”

La Reina Oscura saltó al suelo e intentó guiar a la Srta. Clowria hacia la salida. “Haugh. Podemos hablar de eso en otro momento. Salgamos de aquí. Tengo que ver a Olivia pavonearse, así que estoy satisfecha… Haugh, ¿qué?” Chilló en cuanto salió del auditorio.

¿Qué? Preocupado, corrí a su ubicación… sólo para encontrarla rodeada por todos lados por las estudiantes.

“¡Mira, un gato! ¡Es tan lindo!”

“¿Me pregunto si es el familiar de alguien?” “¿Soy yo, o acaba de hablar?”

“Mira, lleva unos bonitos cuernos de oveja… Espera, ¡son reales!” “Tal vez sea una quimera o algo así. Aparte de eso, ¡es tan adorable!”

Bombardeada por los comentarios sobre su belleza, el pelo de su cola se erizaba. Fue entonces cuando llegó Olivia, con su flamante manto de terciopelo balanceándose al caminar. “¡Papi! Y Ustedes dos.”

“¡Olivia! ¡Ese manto te queda muy bien!” “Tee hee. Gracias, Papi.” Sonrió dulcemente.

Las estudiantes que rodeaban a la Reina Oscura se hicieron más ruidosas, con los ojos brillantes.

“¡Así que esa es su familia!”

“Estoy tan celosa, su padre es tan genial.”

Me da un poco de vergüenza oírlo, pero me llaman genial, ¡así que lo acepto!

“¡Tee hee, hasta la Srta. Maredia está aquí!” Olivia tomo al gato negro en brazos.

Olivia podía decir que era la Reina Oscura, a pesar de su cambio de forma. “¡Eres mi preciosa amiga!” Acarició su mejilla contra ella, sonriendo todo el tiempo.

La Reina Oscura, por su parte, pareció calmarse un poco mientras estaba en sus brazos.

Sus ojos rasgados se entrecerraron y ronroneó, como un gato de verdad.

Los estudiantes adularon a la Reina Oscura durante un buen rato. Parecía satisfecha de sí misma. “Je, je, estas jovencitas deben saber lo que hacen si se fijan en lo guapa que soy.” No tardó mucho en volver a casa en brazos de la Srta. Clowria, pero tuve la sensación de que también disfrutó de su breve estancia en la escuela.