Kuma Kuma Kuma Bear (NL)

“¡TODOS, aléjense del cobertizo!”

Justo cuando el oso gritó, apareció un tigre negro, si mal no recuerdo. Un monstruo despiadado. ¿Por qué estaba esa cosa aquí?

Traté de escapar, pero el oso me detuvo. En el momento en que me moví, el tigre negro volvió la cabeza en mi dirección.

No podíamos movernos. Si dábamos incluso un paso, seríamos mutilados.

El tigre negro se estaba comiendo a los goblins. Probablemente también quería comernos a nosotros, ¿verdad? Todo el mundo se puso pálido. Estaban temblando de miedo. ¿Qué íbamos a hacer? A este ritmo, seríamos comida de tigre.

Mi garganta estaba seca. Tomé un trago. Me armé de valor. “Yo-yo seré un señuelo. Mientras tanto, escapen”.

Entonces tal vez todos los demás podrían escapar. Todos se sorprendieron cuando dije eso. Shia trató de detenerme, pero a este paso todos moriríamos. Alguien tenía que quedarse atrás.

“Yo también me quedaré, Maricks”.

“Timol …”

“No puedo dejar morir a las chicas. Si los dos somos señuelos, eso debería ganarnos más tiempo. Sin embargo, no intentes ser mutilado antes que yo”, dijo Timol tembloroso. Sabía que se estaba esforzando a sí mismo para hacer esto, a pesar de que estaba aterrorizado. Todavía estaba feliz de escucharlo.

“Timol, sé que estás tratando de actuar con calma, pero te tiemblan las manos”.

Las mías también lo estaban. Nos miramos y sonreímos.

Teníamos nuestras mentes puestas en ello. Pero en el momento en que comenzamos a correr, el oso nos detuvo. Nos dijo que había más de cien lobos rodeándonos, por lo que huir no era una opción. Incluso si los demás pudieran escapar, llevarían a los lobos a la aldea, o tal vez incluso al tigre negro.

¿Qué más se suponía que teníamos que hacer?

Y en medio de toda esa desesperación, el oso soltó algo tan estúpido que tuve que pensarlo solo para asegurarme de que era real. Ella dijo que pelearía. ¿lucharía contra ese feroz tigre negro? ¿Esta chica con un atuendo extraño? ¡Vamos!

Tampoco pensé que podría vencerlo. Tendría la suerte de comprar unos minutos para que todos los demás se los comieran los lobos. Pero aquí estaba la niña oso, hablando sobre lo que protegernos era su trabajo. Este rango C de nombre solo esperaba qué, ¿mostrarle su tarjeta al tigre o algo así? No pude ocultar mi frustración.

Pero tan pronto como el oso salió, me quedé entumecido. Los ositos de mascotas a su lado de repente se volvieron enormes.

¿Qué demonios…? Todos estábamos sorprendidos, es decir, todos menos Shia.

El oso dejó a Shia y sus mascotas para protegernos, luego se dirigió hacia el tigre negro por su cuenta. Ella seriamente iba a luchar contra eso. Extendí la mano hacia ella, pero mi mano solo cogió el aire; no pude agarrar la ropa del oso.

“Maricks…” dijo Timol. Incluso su voz temblaba ahora. “¿No deberíamos ir con ella?”

Cuando intente ir, el oso mascota negro se adelantó para bloquearme. Luego dejó escapar un “cwoom …”

No hablaba oso, pero estaba lo suficientemente claro. El oso negro no nos dejaría ir.

“¿Que pasa contigo?” Dije. “¡Muévete! Tu dueña se va a ir a que la maten”.

El oso negro no se movió.

“Maricks, cálmate”, dijo Timol. “Si lo que dijo Yuna es cierto, hay lobos cerca. ¿Quieres llamar su atención?”

“Maldita sea.”

Miré a la chica oso.

Cuando se acercó al tigre negro, rugió y dejó de comerse a los goblins. Enseñó los colmillos. Parecía que atacaría en cualquier momento. Era aterrador solo mirar. Mis piernas se convirtieron en gelatina. Y en medio de esa temible aura, ante ese monstruo de pesadilla, el oso con el ridículo atuendo caminó hacia el tigre negro. No pude hacer nada. Me sentía impotente.

Comenzó la pelea. El oso atacó y la pelea se convirtió en algo de un sueño: el tigre negro y el oso se enfrentaron como iguales.

El oso esquivó los ataques del tigre negro. Lanzó magia, y cada hechizo era más poderoso que cualquier cosa que hubiera visto en mi vida. ¿Y cómo se movía así? El tigre apenas podía tocarla. Ella golpeó. Ella lo esquivó. Intercambiaron golpes.

“Shia, ¿lo sabías?” Ella debe haberlo hecho. Shia era la única que había reaccionado de manera diferente al oso desde el principio. La había mirado de manera diferente. Cuando le dije que cuidara de ese oso, se alegró de hacerlo. Ella sabía algo. “Shia, dime.”

Shia parecía un poco vacilante, pero confesó: “Sabía de Yuna desde antes”.

“Lo sabía. ¿Ese oso es realmente una aventurera de rango C?”

“Lo es. Yuna se convirtió en una aventurera de rango C por sus propios méritos. Ella no es una aventurera malcriada rica”.

Apenas podía creerlo, pero … podía ver que era verdad. “¿Crees que puede vencer a ese tigre negro?”

Ninguno de los dos había herido fatalmente al otro. Si alguien estaba perdiendo el equilibrio, era el oso.

“No lo sé”, admitió Shia, “pero Yuna es fuerte. Escuché que mató a un centenar de goblins, un rey goblin, Tiger wolves, una serpiente negra e incluso destruyó el clan de bandidos de Zamon por su cuenta. Creo que mi madre y mi padre ocultan aún más sobre ella”.

“Me estás tomando el pelo. ¿Cierto?” La mire. ¿Cien goblins, un rey goblin, Tiger wolves, una serpiente negra y el clan de bandidos de Zamon?

Había oído hablar de los bandidos de Zamon por mi padre, un caballero del castillo. Había aparecido un grupo de ladrones que tenían como objetivo la celebración del cumpleaños del rey. Un aventurero había capturado parte del grupo, lo que permitió a los caballeros obtener información sobre el escondite, y los eliminaron. Mi papá fue parte de esa operación. Se fue por un par de días.

Por lo que escuché, no quedaban muchos bandidos en el escondite. Escuché que su líder había sido sometido por un aventurero … ¿y ese era ella?

Además, ¿una serpiente negra? No, de ninguna manera. “Eso no puede ser cierto”.

No lo podía creer. No quería creerlo. ¿Cómo podía ser tan fuerte esa chica ridícula con un traje de oso? Pero ahí estaba ella, usando magia que parecía imposible, haciendo cosas que no podían ser reales.

¿No le tenía miedo al tigre negro? Solo miramos, y esta chica, esta pequeña, más joven que yo, luchó sola.

“Shia, ¿por qué no nos dijiste cuán fuerte era Yuna?”

“Eso era parte de la prueba. Puedes ver cómo está vestida Yuna, eso definitivamente iba a causar problemas contigo y con los demás. Mi trabajo era asegurarme de que eso no causara ningún problema y … bueno, no quería contarte mucho”.

“¿Eso otra vez?”

“En la vida real, hay cosas que los altos mandos pueden y no pueden decir, y no pueden dejar que eso se interponga en el camino de una misión. Esto fue una práctica para eso, no es que me hubieras creído si te lo dijera”.

Ugh. Ella tenía razón, probablemente yo no lo habría hecho. No hubiera pensado que una chica oso extrañamente vestida fuera fuerte, que una chica más pequeña que yo podría ser más fuerte. Ni siquiera le había creído cuando supe que era una aventurera de rango C. Solo pensaba en ella como otra estudiante más joven que yo, una misión de escolta sorpresa a lo sumo. Le había dicho a Shia que protegiera al oso, pero ella nos había estado protegiendo a nosotros.

“Esto es solo mi suposición”, dijo Shia, “pero no creo que nadie creyera que Yuna era nuestra escolta basándose en cómo se viste, incluso si realmente se suponía que debía estar protegiéndonos. Dado que estamos hablando de mi madre, probablemente estaba deseando ver cómo actuaríamos”. Eso sí parecía Lady Ellelaura. Ella tenía razón. “Pero no creo que mi madre esperara que nos encontráramos con un tigre negro”.

¿Quién lo hubiera imaginado? ¿Y quién iba a creer esto ahora? ¿Quién creería que una niña más pequeña que yo y vestida de oso podría enfrentarse a un tigre negro en igualdad de condiciones? Hombre, apuesto a que me comprometería si intentara decírselo a alguien.

Yo también me habría reído si alguien me hubiera dicho eso. Simplemente no parecía realista.

Pero aquí la chica del traje de oso luchaba por salvarnos a todos. Todos estábamos mirando al oso en silencio, no, mirando a Yuna, y no había nada que pudiera hacer.

Pero Yuna siguió luchando para protegernos. Esquivó las afiladas garras y los puntiagudos colmillos del tigre, perfectamente ágil, disparando hechizo tras hechizo con más poder del que jamás había visto. ¿Que era esto? ¿Cómo podía alguien moverse tan rápido, lanzar magia tan rápido y tantas veces?

Solo los aventureros de primera clase podían hacer cosas así.

Shia no estaba mintiendo. Al principio tenía la intención de pelear con ella, pero no podía entrar sin estorbar. Un sabor a hierro caliente se esparció por mi boca; me había mordido el labio hasta sangrar sin darme cuenta.

Era un humano impotente.

“¡Yuna!” Shia gritó. En el momento en que aparté la mirada, el tigre negro estaba encima de Yuna, con los colmillos mordiendo su mano. Seguí adelante, queriendo ayudar. En el momento en que di un paso adelante, el oso de Yuna se interpuso en mi camino.

“¡Tu dueña está en peligro!” Grité, pero el oso no hizo nada.

En ese instante, Yuna hizo algo y el tigre negro cayó de costado. Como no podía ver alrededor del oso, no sabía qué había sucedido.

“¿Que está pasando?”

“Yuna puso su mano dentro de la boca del tigre negro y disparó magia”, dijo Cattleya, con la voz temblorosa.

¿Ella realmente lo venció? El tigre negro no se movía.

Shia llamó a Yuna y empezó a correr. Antes de darme cuenta, yo también estaba corriendo. Nunca había visto a un aventurero tan poderoso, y además de eso, Yuna mató a toda la manada de lobos que nos rodeaban, ella sola.

Pensé que podría ayudar a Yuna, pero ella dijo que la retrasaría. Fue perturbador, pero tal vez fuera cierto. Solo podía verla matar a los lobos mientras sus osos me protegían.

Diez, veinte, treinta. Cuarenta … cien …