Meikyuu No Ou (NL)

Volumen 2

Interludio 5: ¿Qué es esto?

Cuando el minotauro derrotó al dragón de metal por centésima vez, había aparecido una pequeña entrada frente a la sala del jefe, en el pasillo más exterior de la centésima planta. Sin embargo, el minotauro nunca se había acercado a ella.

En realidad, pasó una vez, cuando la gran turba de humanos había atacado. Se había acercado a la abertura mientras se desbocaba por el suelo, pero no se dio cuenta.

Cualquiera que no tuviera las calificaciones adecuadas era incapaz de verlo.

El minotauro volvió a salir de la sala del jefe de la planta cien, mató a otras tres hidras y recorrió los pasillos.

No tenía un destino en mente. Sólo quería mover su cuerpo. Sólo quería luchar.

El minotauro pasó entonces por delante de la pequeña entrada.

¿Qué es esto?

Debería haber pasado por este lugar muchas veces antes.

Pero si esto estuviera aquí, es imposible que no me diera cuenta.

Lo que significa que debe haber aparecido después de que me recluyera en la habitación del dragón de metal.

A través de la entrada había un largo pasillo que descendía ligeramente a medida que avanzaba. El minotauro se preguntó si habría algo al otro lado de ese largo pasillo. Incluso podría haber otra escalera hacia abajo, que había renunciado a encontrar.

Atravesó la entrada y entró en un pasillo que nunca había visto antes.

El pasillo se extendía a lo lejos. El minotauro avanzó.

Caminó y caminó, pero el corredor nunca terminó.

La escalera que bajaba del noventa y nueve al cien por cien también era increíblemente larga, pero ésta era mucho más larga.

El pasillo estaba completamente oscuro, pero eso no era un problema para el minotauro gracias a su habilidad de [Visión Nocturna] y a varias otras habilidades sensoriales.

Intentó ampliar el alcance de su habilidad de [Percepción], pero no detectó nada.

Eso significaba que no había criaturas vivas cerca.

El minotauro siguió caminando.

No era consciente del tiempo que llevaba caminando. Probablemente era una distancia aún mayor que la que existía entre el primer y el centésimo piso del Laberinto de Sazardón.

Tan pronto como empezó a considerar infructuoso el viaje, vio una tenue luz por delante.

Cuando se acercó a la luz, vio que había un pequeño espacio abierto al final del pasillo. Parecía un callejón sin salida.

Se sintió ligeramente decepcionado, pero cuando entró en el espacio abierto, unas piedras planas dispuestas en círculo en el centro de la sala se iluminaron con un brillo azul.

Iluminado por la luz azul que provenía del suelo en la sala que, por lo demás, estaba completamente negra, el minotauro parecía un extraño dios de leyenda.

La luz debía decirle que pisara las piedras. Eso es lo que decidió el minotauro, así que lo hizo.

Entonces, el minotauro desapareció.