Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 13

Capítulo 72: El Alma Marcada

Parte 2

Alus se aclaró la garganta, con la esperanza de despejar también el extraño ambiente antes de volver al tema en cuestión.

―Estoy planeando que aprendas la magia heredada de la familia Fable.

―¡¿Eh?! Pero yo creía que eso sólo lo sabía mi madre ―dijo Tesfia.

―Por supuesto que no conozco los detalles. Pero tu madre me ha dado una pista, lo que significa que ha reconocido que Zepel es uno de los pasos para la versión final completada ―explicó Alus―. Bueno, técnicamente es muy parecido y no una coincidencia exacta.

De hecho, por lo que Alus pudo comprobar, la composición de Icicle Sword era más compleja de lo necesario. Pero al analizarla y aplicarle la teoría mágica, el camino previsto para ella quedó claro.

Dado que las fórmulas mágicas eran un sistema muy sencillo, el siguiente paso llevaría inevitablemente a Zepel o a algo muy similar.

Eso significaba que cuando los que tenían la naturaleza para ello aprendían Icicle Sword, en última instancia les llevaría al hechizo heredado completo. Sin embargo, era dudoso que algún investigador fuera capaz de analizar la fórmula mágica y notar las partes no naturales mezcladas.

La conjetura de Alus era que Icicle Sword se preparó como un paso básico para que el usuario aprendiera a esculpir hielo. La razón por la que pensó así fue que la parte de la fórmula relativa a la escultura era imprecisa. Se había dejado abierta a la interpretación, lo que probablemente había sido la intención de Frose cuando enseñó a Tesfia Icicle Sword. Así que las habilidades de Tesfia para esculpir fueron en gran parte gracias a sus esfuerzos y a su excepcional sentido común.

Zepel era el escenario que seguía después. Para usarlo, había que adquirir la habilidad de manipular la magia del hielo mediante coordenadas espaciales.

Es un diseño bastante amable una vez que lo descubres. Está cuidadosamente configurado para alcanzar la forma final a medida que lo mejoras, pensó Alus tras explicárselo a Tesfia.

Una vez que lo hubo escuchado todo, habló con voz animada.

―¡Además de la dificultad, eso significa que es un reto de mi madre!

―No estoy tan seguro de eso, pero no hay duda de que ella quiere que aprendas la magia heredada ―respondió Alus.

―Entonces, ¿quizá sea amor materno? ―replicó Tesfia―. A fin de cuentas, mi madre sigue siendo la única que conoce el hechizo heredado en la familia Fable hoy en día.

―¿Hmm? No, eso no es…

Por lo que Alus escuchó, ni siquiera Frose había aprendido uno de los hechizos heredados. Así que era probable que la madre de Tesfia ni siquiera conociera la forma completa de Icicle Sword que buscaba Tesfia.

Según Selva, les parece bien tratar el hechizo que se me ocurra como el heredado, pero ¿qué hacer…? Bueno, dejaré que pase lo que tenga que pasar.

El hechizo heredado que Frose había estado intentando dominar debía ser bastante avanzado en su momento. De hecho, era tan futurista que podría haber superado incluso las teorías mágicas modernas. Pero incluso la talentosa Frose fue incapaz de dominarlo.

Con el nivel tecnológico de la época, ¿cómo se les había ocurrido semejante idea? Aunque había muchos misterios en torno a los hechizos heredados de la familia Fable, la curiosidad de Alus se centraba totalmente en la versión completa de Icicle Sword.

¿Qué clase de poder tendrá la forma completa de Icicle Sword…? Es natural que sienta curiosidad por esta misteriosa magia, ya que ni siquiera sé cuándo se inventó.

Alus quería al menos comprender los fundamentos de la forma completa, para empezar. Consideraría si enseñársela o no a Tesfia una vez que tuviera una idea de cómo era la fórmula.

Y había una cosa más.

Esto es sólo una corazonada, pero probablemente Zepel no sea el último paso. Debería haber más por delante. Pero con llegar al siguiente paso debería estar bien, pensó Alus antes de continuar.

―Sobre eso, Fia. Frose tampoco domina la magia heredada. Ella misma lo dijo.

―¡No puede ser! Ah, pero… ―Tesfia pareció darse cuenta de algo y se quedó pensativa.

―¿Hmm? ¿Hay algo más? ―preguntó Alus―. Francamente, los asuntos de tu familia no tienen importancia en este momento. Con el Tenbram por delante, no sería mala idea aprender un hechizo más avanzado y aprender a protegerse del peligro.

―S-Sí… ―Tesfia bajó los ojos disculpándose, lo que provocó la sonrisa de

Alus.

―Oye, pelirroja. Para que sepas, tu tarea esta vez es la más difícil. Pero si eres capaz de dominar el siguiente paso, estoy seguro de que Frose se alegrará. Parece que le molestan las expectativas de los padres, ya sabes.

Por supuesto, cuando se trataba de estar a la altura de las expectativas, Tesfia ya estaba rindiendo admirablemente, como lo había hecho durante el Torneo Mágico de la Amistad. Pero no era tarea de Alus decírselo. Mientras que Frose se alegraría, Selva tendría aprensiones sobre un hechizo heredado desconocido.

―¡¿De verdad?! ¿Mi madre se siente así…?

La mandíbula de Tesfia se relajó y sus ojos brillaron. Se alegró mucho de saber que su madre tenía grandes expectativas en ella. Aunque hiciera esa conjetura, seguía pensando que el vínculo entre una madre y una hija era inexplicable.

Si bien Tesfia era inteligente, también era lenta para captarlo. Esta vez iba a enseñarle todo de manera detallada, forzando el conocimiento en su cabeza. Si era posible, quería que ella encontrara su propio punto de apoyo lo antes posible.

Pero si se limitaba a entregarle unos papeles con fórmulas mágicas por todas partes, su cerebro seguramente se recalentaría. Era fácil imaginar que le salía vapor por las orejas.

Se preguntó si estaba bien hablar de los secretos de la familia Fable, como la magia heredada, cerca de Alice y Loki. Pero probablemente Frose no esperaba que llegara al siguiente paso tan pronto, ya que ella no le había puesto restricciones.

Aun así, optó por decir lo mínimo y mantener la fórmula oculta a Alice y Loki. Por supuesto, planeó que los dos no contaran nada sobre sus propios hechizos.

Una vez que hubo hecho los arreglos, Alus se volteó hacia una emocionada Tesfia.

―Siento no estar a la altura de tus expectativas, pero no es Niflheim lo que te voy a enseñar. Además, independientemente de cuál sea el objetivo final de la magia heredada, al final llegarás allí cumpliendo parcialmente los requisitos… ―Alus se interrumpió―. Pero a ti te gustan mucho este tipo de cosas, ¿no?

―¿Eh? Uhm… ¿se me notó en la cara?

―Estaba más claro que el agua ―añadió Loki con la mirada perdida. Eso hizo que Tesfia se frotara la cara y contrajera a la fuerza su expresión.

Alice sonrió irónicamente al verla hacer eso.

―Te encanta ese hechizo, ¿verdad, Fia?

―Bueno, es magia de nivel experto y es un gran hechizo de hielo que no puedes pasar por alto. Y te muestra un mundo de hielo que es simplemente abrumador.

Desde el punto de vista de Alus, aunque Tesfia no fuera malísima, estaba claro que no tenía un conocimiento sólido de la teoría de la magia. Además, tenía la tendencia a saberlo todo desde el esquema. Aunque podría ser capaz de aprender, si era cuestión de si la teoría le convenía o no, Alus concluyó lo último.

―En algún momento se tocará el tema, pero esta vez es un hechizo diferente. Aunque en cierto sentido es más raro que Niflheim.

―¿Eh? ¿Qué es? Vamos. No te des aires. Dímelo.

Alus frunció el ceño ante su impaciencia, pero era demasiado tarde para quejarse de eso.

―Vas a aprender Cocytus.

―¡Ah! Estaba ese hechizo. Fue el que Ul… uhm, Ulhava, usó durante la demostración en el torneo… ―dijo en un tono bastante evasivo, dudando por un momento en decir el nombre. Luego miró torpemente hacia otro lado, como si tratara de ocultar algo.

Alice intervino para ayudar a Tesfia.

―Oh, era esa persona con la máscara… Me pregunto quién podría ser…

―Dijo con voz monótona, su actuación era terrible.

Dos miradas se dirigieron a Alus, esperando su reacción.

La Demostración de Artes Marciales Mágicas fue un evento que tuvo lugar durante el Torneo Mágico de la Amistad de las Siete Naciones. Y Alus había participado en él bajo la falsa identidad de Ulhava.

Intentó ser considerado.

―No es que intentara ocultarlo. Pero para que lo sepan, fue la gobernante quien ideó ese nombre. Así que si dicen algo estúpido, serán penalizadas por filtrar secretos de estado.

Lo dijo en broma, pero las dos se estremecieron e insistieron en que no sabían nada.

―Ya está bien de actuar de forma extraña. Preferiría fingir que nunca ocurrió, pero es demasiado tarde para eso ―continuó Alus con una expresión amarga. Fue entonces cuando Loki intervino para ayudar.

―¡Sir Alus! ¡Eso no es cierto para nada! Tenía un aspecto muy valiente y esa máscara le sentaba muy bien ―Loki apretó sus pequeñas manos.

Tesfia leyó rápidamente el ambiente y añadió su afirmación.

―¡Sí, eso fue genial dentro de lo que cabe!

Loki también había alabado la extraña máscara que Alus usó durante la clase extracurricular, así que pensó que tal vez su sentido de la moda era simplemente cuestionable… Pero si pensaba demasiado en ello, tenía la sensación de que vería un lado de Loki que preferiría no ver. Así que por el momento, se limitó a dar una simple respuesta.

―Ya veo.

Tesfia dejó escapar un suspiro de alivio, alegrándose de que no hubiera surgido nada más.

―Pero la verdad es que no me di cuenta enseguida, ¿verdad, Alice?

―Sí, destacabas bastante, así que fue cuando lo pensamos después ―confirmó Alice.

―Sí, fue sólo cuando miramos la reacción de Loki… ¿sabes?

Alus podía entender el punto de vista de Tesfia. Loki tenía tendencia a expresar sus emociones hacia el exterior. Como era el gran día de Alus y estaba tan emocionada, lo hizo evidente para los que la rodeaban.

Pero por alguna razón todavía tengo ese traje guardado… Tendré que asegurarme de que Loki no lo vea. Se lo habían entregado desde el palacio por correo urgente, pero no tenía sentido cuestionar cada movimiento de Cicelnia.

―No importa. No hay tiempo, así que volvamos al tema. Seguramente será más rápido mostrarte.

Hizo una señal a Loki para que trajera su AWR, Night Mist, y luego se alejó a un espacio más abierto mientras las otras dos chicas miraban. Pensando en ello, sintió que había pasado bastante tiempo desde la última vez que les enseñó magia así.

―Debido a la complejidad de su estructura, Cocytus está clasificado como un hechizo de nivel experto ―explicó Alus mientras tiraba de la cadena de Night Mist y sostenía un anillo con la otra mano. El anillo empezó a brillar de color azul.

Al poco tiempo, un pequeño núcleo de maná apareció en la palma de su mano. Con el tiempo, unas enredaderas parecidas a las zarzas salieron de él y empezaron a envolverlo. Era mucho más pequeño que el que había mostrado durante la demostración de artes marciales mágicas.

Alus miró a Loki, que lanzó un cuchillo cubierto de maná. Se dirigió a toda velocidad hacia el núcleo, pero de repente se vio envuelto en zarzas de hielo y se congeló en el lugar.

―Esto es Cocytus, un hechizo que detecta maná específico dentro de un rango y lo congela, lo detiene o lo anula.

Era correcto decir que el funcionamiento del maná estaba sellado en el proceso de construcción del hechizo. Era un poderoso hechizo que sellaba el vínculo entre el lanzador y el hechizo.

―Es increíble. ¿Pero esto no es…? ―comenzó Tesfia. Luego ladeó la cabeza y preguntó directamente lo que tenía en mente―. ¿No está enfocado más a la defensa? No parece un hechizo muy ofensivo. Como si fuera más adecuado para tácticas pasivas.

―¿Te diste cuenta? ―respondió Alus.

―Sí, pero se supone que es un hechizo de nivel experto como Niflheim, ¿no? ¿No sería mejor porque puedes usarlo para atacar? ―Poder preguntar lo que se le ocurriera era una de las virtudes de Tesfia.

Alus asintió con gravedad.

―Bueno, no es que no pueda entender lo que quieres decir, pero ambos tienen sus propias ventajas. Si pudieras aprender Niflheim, estaría bien, pero he propuesto esto porque parece que sería demasiado difícil.

―¿Quieres decir que Cocytus es un hechizo sustituto? ―Eso fue difícil de tragar para Tesfia.

Al comparar los efectos y el fenómeno que manifestaba cada hechizo, así como la cantidad de maná que consumía cada uno, los dos eran completamente diferentes. Pero como Tesfia había señalado, a primera vista había varios hechizos que parecían similares a Cocytus.

Loki pareció estar de acuerdo, pero no dijo nada. Sin embargo, lanzó una mirada interrogativa a Alus, lo que significaba que no entendía el sentido de aprender Cocytus.

―Voy a repetirlo: Este hechizo tiene sus usos, y sin duda es un hechizo increíble. Retrocediendo un poco… los nobles suelen tener magia heredada que no le cuentan a nadie. Algunos son incluso catalogados como tabú, su propia existencia está clasificada. Hay varias razones por las que los hechizos pueden ser considerados tabú, no sólo porque son letales contra las personas. Algunos se tratan como tales porque son útiles pero arriesgados. En otras palabras, su uso es difícil y costoso.

Alus respiró profundamente y se concentró en el maná que fluía por su cuerpo.

Cuando exhaló, su aliento se convirtió en una niebla blanca.

―Sólo haré esto una vez, así que asegúrate de perdértelo ―Al soltar Cocytus, el cuchillo de Loki se descongeló y cayó al suelo. Mientras caía, Alus extendió un dedo hacia él.

Esta vez el cuchillo se congeló por completo. Sin embargo, los efectos del hechizo fueron claramente diferentes. Cuando retiró el dedo, el cuchillo no siguió cayendo. Se congeló en el aire como si el tiempo mismo se hubiera detenido.

―¡¿Eh?! ¿Qué hiciste? ―Tesfia parecía asombrada.

Alus se frotó sin decir nada las yemas de los dedos. El hechizo se activó durante menos de un segundo, pero su piel seguía hormigueando. Incluso el uso momentáneo provocaba congelación, un efecto secundario del hechizo que se reflejaba en el usuario. El hecho de requerir algo más que maná lo hacía más arriesgado que otros hechizos.

―Este es el verdadero Cocytus ―dijo Alus―. Es poderoso y hará caso omiso de cualquier barrera mediocre para congelar incluso el tiempo y el espacio, pero a cambio, perjudica al invocador. Yo no tengo mucha afinidad con el hielo, así que me congela. Su alcance también es muy limitado.

―Sir Alus, ¿está bien…? ―Mientras se explicaba, Loki tomó la mano de Alus y lo miró con preocupación.

―No es un gran problema. No cometería semejante error por una simple demostración.

Loki suspiró aliviada mientras le calentaba el dedo con sus manos.

―Este es el hechizo que usó en Vanalis, ¿no es así? ―preguntó Loki.

Alus asintió silenciosamente. Había utilizado el mismo hechizo para arrancarle una pierna al Shem Azah. Sin embargo, debido a la estrecha área de efecto, sólo pudo manifestarlo en la superficie del cuerpo del Demonio.

El hechizo venía con la limitación de sólo una pequeña área alrededor de donde el invocador tocaba. Como resultado, las manos de Alus corrían el riesgo de sufrir una grave congelación después de utilizarlo durante sólo unos segundos contra un oponente veloz y con alas. Esto significa que los invocadores sin afinidad por el hielo corrían peligro sólo por utilizarlo. A cambio del riesgo, mostraba un efecto tremendo.

Aunque viendo que prácticamente interfiere con el espacio mismo, no sería extraño que fuera catalogada como magia de control del espacio, pensó Alus. Bueno, supongo que es un efecto asociado al fenómeno de la congelación.

Cuanto más extremos se volvían los hechizos, más excedían sus efectos y alcances los marcos de referencia humanos. Excedían el ámbito de los atributos, con varios ejemplos de hechizos de alto nivel que cambiaban las leyes de la física o controlaban el espacio.

Y con estos hechizos, el control del maná se volvía aún más importante.

―¿Lo entiendes? El Cocytus que mostré primero no era más que un camuflaje para la versión real. Es un poco complicado, pero también hay casos así.

―Al… ¿por qué tienen el mismo nombre de hechizo? ―intervino Alice para preguntar.

Como era un buen cambio de ritmo, Alus le respondió.

―Probablemente sea para evitar que el hechizo se extienda y para evitar que algún Magicmaster de segunda categoría lo intente. Normalmente, no sería extraño que un hechizo como este fuera clasificado como un hechizo tabú, pero el hecho de que pueda ser controlado hasta cierto punto es lo que evita que eso ocurra. Sin embargo, el invocador aún puede poner en riesgo a sus aliados, y las cosas pueden ir realmente mal si alguien lo usa sin cuidado… Incluso pueden autodestruirse.

Los tipos de hechizos explosivos que usaba Lettie eran similares.

―Pero Fia va a practicar eso, ¿verdad? ¿Y si se autodestruye…?

Tesfia se estremeció ante las palabras de Alice y su expresión fue complicada. La explicación de Alus había sacado a la luz el enorme riesgo del hechizo y había terminado por traicionar las expectativas que ella, egoístamente, había mantenido.

Era un arma de doble filo, y dado que Tesfia lo usaría, no confiaba en que no cometiera un error.

―Tendrá que tener cuidado. Además, Fia tiene aptitudes para ello ―respondió a Alice, y luego dirigió su respuesta a la propia Tesfia―. Es un hechizo de hielo, y el trabajo de base de Icicle Sword y Zepel ayudará mucho. Y como el control del maná también intervendrá en él, no es que puedas usarlo todavía. Sin duda es un hechizo que se adaptará al siguiente paso de la magia heredada de tu familia. Y tampoco tengo que inventar un nuevo hechizo.

―H-Hmm… Bien, lo intentaré ―Tesfia finalmente asintió, con una expresión seria, habiéndose decidido.

―Eso sí, no puedo enseñarte la fórmula tal cual. Se trata de un hechizo de nivel máximo y no es algo conocido en el resto del mundo. Así que sólo te daré la base, pero me aseguraré de que al menos puedas usarlo en la punta de los dedos como acabo de hacer yo.

―Entonces, ¿quieres decir que mientras lo controle no es peligroso? De acuerdo, ¡entendido! De hecho, ¡estoy deseando probarlo! ―Apretó los puños y sus mejillas se sonrojaron por su entusiasmo.

Al ver eso, Alice no pudo evitar intervenir.

―Pero, Al, en lugar de ese hechizo que suena peligroso… ¿por qué no buscas la magia heredada y se la enseñas cuando la encuentres? Tengo un poco de curiosidad por saber qué tipo de hechizo es la magia heredada.

―Espera ―dijo Tesfia―. Aunque lo averigües, no puedes enseñarme tal cual. Ni siquiera la fórmula mágica de Icicle Sword se ha hecho pública.

―Lo sé. Francamente, aún no sé cómo sería la forma final. La única clave para los elementos estructurales necesarios es Icicle Sword. Como mucho, podría adivinar cuál es el siguiente paso. Además, esta es una tarea que debes hacer. Siempre que cumplas las condiciones necesarias, estoy seguro de que a Frose le encantará que aprendas la magia heredada completa.

Alus también tenía otra razón para enseñar Cocytus a Tesfia: podía interferir fuertemente con el espacio dentro de su rango de influencia. No era un efecto secundario de la manifestación del hechizo, sino un truco incorporado en la fórmula. Si Tesfia podía captarlo y entenderlo, seguramente le sería útil cuando pasara a la siguiente fase de la magia heredada.

―Además, paso de que Frose me fulmine por falta de consideración. He creado una buena cuota de hechizos y me he ganado una buena cuota de rencor y celos.

―Hmm, entonces supongo que no se puede evitar… ―Alice finalmente cedió y lo aceptó.

―Bueno, Al puede leer fórmulas mágicas, así que es bastante tranquilizador. Pero no tiene sentido si no hago algo por mi cuenta ―dijo Tesfia.

―Entonces volvamos al tema ―dijo Alus―. En primer lugar, Icicle Sword se caracteriza por su intrincado esculpido de la espada de hielo.

Sin embargo, para Alus ese esculpido era artístico pero no práctico. Por eso, si él utilizara Icicle Sword, la espada tendría una forma mucho más sencilla. Ahora bien, Tesfia era ciertamente hábil en la escultura, e incluso Alus lo reconocía.

―A continuación, la clave de Zepel es captar las coordenadas espaciales y reescribirlas secuencialmente. En tu caso, vinculas los movimientos a tu cuerpo – tus brazos y extremidades- para resolverlo por la fuerza.

―Ja, ja, ja…

Tesfia dejó escapar una risa forzada cuando Alus la miró fríamente. Captar con precisión las coordenadas espaciales requería una gran habilidad. Como alguien a quien no se le daba muy bien pensar en cosas complicadas, a Tesfia le convenía más el método tosco que estaba utilizando en estos momentos.

A continuación, Alice levantó la mano e hizo una pregunta.

―P-Pero Fia lo está usando, así que estará bien, ¿verdad?

―Es cierto, mientras ella pueda usarlo, no habrá ningún problema ―Alus asintió y continuó―. Pero la magia heredada de la familia Fable no termina sólo con el aprendizaje del hechizo. En cierto modo, el proceso de aprendizaje es también una forma de entrenamiento. De hecho, se podría decir que es más importante seguir todos los pasos y aprender la teoría que hay detrás. No sé si es algo que se les ocurrió a tus antepasados, pero es un proceso de aprendizaje interesante para una familia famosa por su magia de hielo.

Si ese tipo de academia formaba parte de las tradiciones de la familia Fable, ayudaba a explicar la afición de Frose por el entrenamiento.

―De todos modos, la magia heredada de la familia Fable tiene técnicas y teorías que deben aprenderse por pasos. Por los ejemplos que he visto hasta ahora, esas técnicas son la escultura y la comprensión de las coordenadas espaciales y su reescritura. El siguiente paso, por lo que puedo adivinar, es la interferencia espacial utilizando el fenómeno de congelación del atributo de hielo.

―Ya veo. Así que ese era el objetivo del Cocytus que acabas de demostrar.

―Si vas a enfrentarte a un hechizo de nivel definitivo de buenas a primeras, no habrás terminado para cuando te gradúes. Así que crearé una fórmula que sólo cumpla los requisitos necesarios. Limitaré el área de manifestación a tus dedos, y también añadiré una restricción de tiempo como la mía.

―¡Objeción! ¡Quiero un hechizo que realmente se pueda utilizar! ―Tesfia levantó la mano y se quejó. Al parecer, ella quería tomar la versión adecuada del hechizo.

Tras el excepcional comportamiento estudiantil de Tesfia, Alus la hizo callar como un profesor.

―¡Rechazado! Tu madre quiere darte la educación adecuada como futura jefa de familia. En ese sentido, dominar la fórmula mágica asegurará tu lugar en la familia. Es la cualificación necesaria para que puedas llamarte la heredera secreta, la Ertlade. Además, prometí convertirlas en Magicmasters que puedan luchar en el Mundo Exterior. Esto es sólo otra parte de eso. Si eres la sucesora legítima o la Ertlade no importa. Pero si te conviertes en la sucesora legítima, toda tu situación cambiará, no sólo con los Womruina.

En cuanto a Frose, aunque cediera el patrimonio familiar a alguien, se sentía demasiado incómodo con Tesfia tal y como está ahora. Alus no tenía intención de involucrarse mucho, pero que Tesfia aprendiera la magia heredada también la calificaría para convertirse en la próxima jefa de la familia.

―Así que mi madre está pensando hasta en eso. Ya veo.

Tal vez sintió algo detrás de la habitual conducta fría de su madre. Tesfia retorció su cuerpo, como si estuviera avergonzada.

―De acuerdo. Lo haré ―dijo―. ¿Será suficiente un mes?

―No seas tonta. Si pudieras hacerlo, tendrías más talento que yo ―dijo Alus en tono exasperado.

Pero Tesfia tenía tendencia a superar sus expectativas. Era de las que aprenden haciendo y a veces captaban las cosas a una velocidad extrema.

―Puede que toquetee un poco la fórmula mágica, pero sería muy impresionante que la dominaras en un mes. Sabiendo que eres todo palabrería y entusiasmo, mantendré mis esperanzas bajas.

A pesar de esas palabras, Tesfia se emocionó inmediatamente.

Sin embargo, expectativas familiares aparte, aprender el verdadero Cocytus no era tarea fácil, ni siquiera con afinidad por el hielo. Ni siquiera Alus podía sacar toda la potencia de ese hechizo. En su caso, sólo pudo reproducir parte de su poder compensando las cualidades que le faltaban con su amplio conocimiento de las fórmulas mágicas y la manipulación del espacio. Se decía que este hechizo podía congelar una parte del propio mundo, que suponía la muerte de todo, incluido el propio tiempo, y que era uno de los efectos más extremos de la magia dentro del atributo hielo. El hechizo podía literalmente sellar una parte del mundo en un silencio eterno.

De todos modos, he preparado un obstáculo bastante alto, pero me pregunto qué pasará.

Este fue el último desafío de Alus. Hasta ahora, Tesfia y Alice habían superado los obstáculos que él había preparado y lo habían hecho sin chocar con ningún muro. Sus talentos habían dejado a Alus maravillado, pero si podían superar esta prueba, no tendría más remedio que reconocer su talento como algo real.

Me pregunto si tendrán el talento para rivalizar con Loki, pensó Alus.

Tal vez la naturaleza instructora de Frose le había contagiado, porque sintió que algo parecido a la euforia brotaba en su interior. La sensación hizo que los bordes de sus labios se elevaran.

Después, Alus llevó a Tesfia y a Alice al campo de entrenamiento, donde pasó dos horas enseñándoles sus nuevos hechizos. Cuando se trataba de aprender magia, sin alguna guía al principio tendían a perder el tiempo.

En el caso de Tesfia, el comienzo era crucial. Destacaba en otros aspectos, pero era descuidada y tendía a cometer muchos errores al principio.

De hecho, lo primero que intentó fue utilizar el hechizo Freeze (Congelar) con la punta de los dedos, pero no era más que un hechizo de nivel principiante que no era más que una imitación barata de la demostración de Alus.

Como resultado de su mejora en el control del maná, había aprendido trucos como éste. Alus no pudo evitar pensar que, de cualquier manera, tenía un largo camino por delante.

Loki, que para empezar era considerablemente hábil, no necesitó repasar la fórmula mágica que Alus le dio durante mucho tiempo.

No obstante, era necesario comprenderla por completo, ya que estaba intentando aprender el tipo de magia más complejo. Un hechizo tan desafiante sólo se manifestaría gracias a los cimientos establecidos por sus esfuerzos y comprensión de la teoría.

Parece que tampoco puedo quitarle los ojos de encima a Loki. ¿Qué se le ocurrirá y qué hará?

Por primera vez desde que dejó el ejército, Alus sintió cierta satisfacción. Sintió que había encontrado algo aparte de la lucha a lo que aspirar.

Y finalmente está Alice…

A Alice se le había encomendado la tarea de aprender a controlar los anillos de su AWR. Era el tipo de campo en el que brillaba alguien que sobresalía en los estudios. Tenía que buscar una solución sobre cómo controlar mejor los anillos, ya sea cambiando constantemente las coordenadas espaciales o incorporándolos a los elementos estructurales de los hechizos.

Shangdi Fides era una excelente AWR, y exigía a Alice algo diferente de lo que pedía a Tesfia o a Loki.

En un principio, Alus sólo iba a darles una breve lección para no consumir demasiado de su tiempo, pero era de naturaleza humana querer ver las cosas hasta el final.

Mientras supervisaba el entrenamiento de las tres chicas, murmuró para sí mismo: Parece que por el momento acabaré empleando mi tiempo en investigar tres hechizos diferentes.

Sus murmullos desaparecieron en silencio entre los gritos y el clamor de las chicas.

***

―Ay ―Esa fue la primera palabra de Tesfia en su camino a casa―. M-Mi cuerpo está completamente… ―Sus brazos pesaban como el plomo y se sentía entumecida a cada paso que daba. Incluso se inclinaba un poco hacia delante como una anciana―. Yo-yo no pensé que llegaría a estar tan cansada… ¿Y tú, Alice? ―preguntó Tesfia.

Mientras Tesfia avanzaba a trompicones, Alice reflexionó sobre los logros del día.

―Creo que le he tomado el ritmo el primer día. No podemos tener a Al pendiente de nosotras todo el tiempo, así que creo que fue genial captar la idea general desde el principio.

Primero le habían enseñado el crux para que se concentrara y aprendiera a controlar los anillos. Como resultado, sintió que sería capaz de superar el primer obstáculo sin mucha dificultad.

―Ojalá pudiera hacer lo mismo ―dijo Tesfia, frotándose los hombros cansados―. Todavía no lo he conseguido. No entiendo muy bien cómo se supone que se congela el espacio.

La distancia desde el campo de entrenamiento hasta el dormitorio de las chicas no era tan grande, pero ahora mismo le parecía realmente lejana.

―Pero Al dijo que ya tienes la base.

―Aunque no lo parece. Si alguna vez tengo la sensación de que puedo hacerlo, estoy segura de que el resto llegará rápidamente.

―Je, je, ¿de dónde viene esa confianza? Deberías empezar por no congelarte los dedos.

A Tesfia le pareció que su estricta mejor amiga no iba a pasar por alto su intento de farol medio confiado.

―¡Uf… vamos! ―dijo, mirando con envidia a su mejor amiga, que había obtenido resultados antes que ella. Luego dejó escapar un suspiro―. Bueno, simplificado o no, se basa en un hechizo de nivel defenitivo. Ni siquiera puedo usar correctamente los hechizos de nivel experto, así que no creo que pueda hacerlo de inmediato.

Alus explicó que los hechizos de nivel experto eran tan avanzados que era dudoso que incluso los Únicos pudieran utilizarlos. Aunque como eran secretos militares, era difícil confirmar qué hechizos podían usar los Únicos, pero incluso cuando se miraba a los Dobles al alcance del rango Único, sólo un puñado de ellos podía usar un hechizo de nivel definitivo.

Y ahora mismo, Tesfia estaba aprendiendo uno de esos hechizos. Incluso con la ayuda de Alus, no era tan sencillo.

―Me pregunto cuánto tiempo llevará.

―No lo sé. Pero conociendo a Al, no nos enseñaría algo que es imposible para nosotras en este momento ―dijo Alice.

―Yo no estaría tan segura. Puede que se dé por vencido a mitad de camino y nos diga que practiquemos nosotras solas hasta la graduación.

―Hmm… Aún así parece que tenemos un largo camino por recorrer.

Sus hombros se desplomaron al mismo tiempo.

―Por cierto, ¿te enteraste de cómo le fueron las cosas a Loki? ―Tesfia lanzó el tema como un intento de sacudirse el pesado ambiente.

―¿Hmm? De ninguna manera. No podría preguntarle.

A diferencia de ellas, Loki había sido una Magicmaster en activo antes de llegar a la Academia. Así que el entrenamiento que estaba haciendo para adquirir un nuevo poder era casi completamente diferente a todo lo que ellas dos conocían.

Cada vez, se concentraba en su tarea hasta que se quedaba sin maná. Estaba muy seria, y el aire a su alrededor era tenso. Alice no podía hablar casualmente con ella.

Las dos se estremecieron al ver hasta qué punto Loki se estaba arrinconando en el primer día. Probablemente era la actitud correcta para aprender magia. Y las dos se dieron cuenta de que seguían pensando en sí mismas como estudiantes.

Aunque no había hecho ningún ejercicio pesado, Loki estaba empapada de sudor mientras se dirigía a casa.

―Si mal no recuerdo, ella también estaba trabajando en un hechizo muy avanzado, ¿no?

―Sí, creo que era uno de esos hechizos llamativos llamado vértice del trueno. Es un atributo diferente, así que no sé mucho sobre él, pero parece ser un hechizo de nivel definitivo o al menos de nivel experto.

Normalmente, el nivel definitivo no era el tipo de término que aparecía en las conversaciones de los estudiantes. De hecho, las lecciones sólo llegaban hasta el nivel experto.