Majo no Tabitabi (NL)

Volumen 3

Capítulo 8: Cese al Fuego Después de Diez Años

Chapoteé y aplasté el suelo con mis pies.

La lluvia había caído con fuerza sobre la región hasta esta mañana, y la humedad se había acumulado, volviendo muy húmedo el bosque.

Bañadas por la luz del sol de la mañana, las gotas de lluvia que se escurrían de las ramas de los árboles de vez en cuando esparcían destellos al caer antes de ser absorbidas por el suelo empapado o por mi sombrero negro puntiagudo.

El camino del bosque estaba húmedo y el calor se elevaba como a principios del verano.

Hace tanto calor. Uf, esto es molesto.

“…Ughhh”. Las sombras de las hojas se balanceaban con la brisa tibia, bailando por el suelo bajo mis pies.

No estaba muy dispuesta a caminar por el bosque con esa horrible sensación, pero si volaba en mi escoba en una situación como esta y dejaba que los árboles ya no me cubrieran, estaba segura de quedar empapada por las gotas de lluvia sobrantes que quedaban atrapadas en el viento creadas por el paso de mi escoba.

Sin embargo, si bien ese pudo haber sido el caso, me empapaba de sudor cuanto más caminaba, por lo que no me salvaba de ningún modo.

“Hace calooorrr…”

Sostenía mi varita con ambas manos, usando mi magia para conjurar una brisa.

“Ugh… ni siquiera me refresca…”

No quería usar mi túnica en un día tan cálido. Me la había quitado y solo usaba una blusa, una falda y mi sombrero negro puntiagudo. Con este atuendo, alguien probablemente entrecerraría los ojos al verme, sin estar seguro de si yo era una bruja o no.

Para combatir el calor, intentaba refrescarme con una brisa desde mi varita, que era lo suficientemente fuerte como para hacer que mi cabello cenizo ondulara mientras pasara por mi cuello. Aun así, mi humor no cambió en absoluto. Más bien, mi malestar empeoraba cada vez más.

Odio al tiempo después de la lluvia en climas húmedos.

Solo quiero darme prisa y llegar al próximo país y relajarme y descansar en una bonita posada.

Veamos… ¿cuánto falta para mi destino?

“…Hmm”.

Al parecer, debería llegar en unos treinta minutos.

Un letrero que decía  TREINTA MINUTOS AL REINO

CERIAL había sido colocado cuidadosamente junto al camino.

TOMA UN DESCANSO.

Justo al lado del letrero había una pequeña banca.

Cielos, eso es un poco exagerado con este clima.

“……”

Sin embargo, parecía que existía en este mundo un individuo de amplios criterios que podía aceptar pacientemente un favor tan fuera de lugar.

Holgazaneando en la banca, abanicándose con un abanico plegable, había un hombre solitario.

Por su aspecto, había estado sentado allí durante bastante tiempo. Las manchas de sudor en la camisa habían formado un patrón intrincado, y podía distinguir claramente la fatiga en su rostro. En cuanto a su apariencia, parecía estar en la treintena. Algunos mechones plateados se mezclaban con su cabello negro.

¿Es posible que haya estado sentado aquí pacientemente durante mucho tiempo?

Por cierto, había una gran cantidad de agua y comida a su lado, por lo que era posible que también planeara quedarse aquí durante mucho tiempo después de esto.

Bueno, no creo que ese sea el caso, ¿eh?

Además, al lado de los pies del hombre se sentaba una especie de criatura extraña con pelaje como si fuera un trapeador.

¿Quizás sea su mascota? Sin embargo, parece una gran bola de musgo.

……

“¿Usted es un viajero?”

Hablé con el hombre una vez que llegué hasta el costado de la banca, conjurando vanidosamente mi propia brisa por un rato. Me obligué a adoptar una sensación de tranquilidad.

Hacía demasiado calor para preocuparme por la comodidad de otra persona.

El hombre negó lentamente con la cabeza en respuesta a mi pregunta. “No. Soy de ese país”.

Mientras hablaba, señaló el camino que acababa de recorrer, por el que mis huellas se extendían en la distancia. En este punto, no se veía absolutamente nada en el camino excepto el bosque, pero si seguía ese camino, estaba el Reino de Mellnell, donde me había quedado hasta esta mañana.

Por cierto, no había mucho allí.

“Si eres de ese país, entonces… ah, debes ser un comerciante o algo así. Gracias por todo su arduo trabajo”.

“No. No soy un comerciante. Yo solo vivo ahí. Además, no tengo ningún asunto en particular en el Reino Cerial.”

“¿…?” Incliné mi cabeza ante la confusión. “Bueno, entonces, ¿qué hace en un lugar como este?”

“Estoy esperando a alguien”.

“Oh. Por lo que parece, la persona a la que estás esperando tiene un sentido de sincronización muy impreciso”.

¿No estás empapado de sudor?

“Me doy cuenta. No se le da el tiempo”.

“¿Cuánto has esperado?”

Yo estaba realmente interesada. Mi pregunta no tenía un significado profundo en particular, y tampoco admiraba especialmente la paciencia de una persona que soportaría este calor, esperando a alguien mientras se empapa de sudor.

“He esperado aquí durante más de una década,” respondió el hombre, y si bien, eso era preocupante, fue la siguiente parte la que realmente me preocupó. “…y seguiré esperando, tanto como sea necesario”.

***

“Por supuesto, yo también tengo un trabajo, así que no estoy aquí veinticuatro siete ni nada. Pero cuando tengo tiempo, me siento aquí. Siempre estoy aquí esperando. He visto pasar los días y los meses durante diez años”.

Mi interés despertó, me había sentado en la banca, y el hombre me había dicho que se llamaba Nord mientras me hablaba de esto y aquello.

Le di mi nombre, dejando de lado el hecho de que yo era una bruja para que no hubiera confusión, luego pregunté inclinando mi cabeza; “¿A quién estás esperando?”

“A mi mujer. Partió y fue al campo hace diez años, pero nunca regresó. He estado esperando aquí todo el tiempo”.

“¿No sería mejor ir a buscarla?”

Pero el hombre negó lentamente con su cabeza.

“Mi nación y la que está más abajo estuvieron en guerra hace diez años, y desde entonces, no ha habido ninguna relación entre ambas naciones. Incluso ahora, no abrirían la puerta si alguien de nuestro país entra en el de ellos”.

“Así que por eso no puedes ir”.

“Así es. Por eso he estado esperando aquí”.

¿Durante diez largos años?

No, más bien…

“Si se fue allá hace diez años, entonces eso significa—¿está, ya sabes, muerta o algo así?”

“No. Mi esposa es una bruja. Ella fue a luchar contra ese otro país”.

“……”

“Creo que sé lo que quieres decir. Si no ha vuelto después de diez años de espera, probablemente esté muerta. Eso es lo que te gustaría decir, ¿no es así?”

Asentí.

“Yo también lo creo. Pero mientras exista la posibilidad de que esté viva, no puedo simplemente renunciar a ella, ¿verdad?”

“Entonces así son las cosas, ¿eh?”

“Así son las cosas. Después de todo, estamos casados”.

“……”

Me quedé en silencio por un rato, buscando las palabras adecuadas.

Durante esa pausa, la criatura al lado del hombre se puso de pie y comenzó a retorcerse inquietamente.

“……”

Su pelaje parecido a un trapeador se retorció y estiró, levantando su cuerpo rechoncho y musgoso, y comenzó a gatear sobre sus innumerables piernas hechas de cabello.

Las piernas peludas eran más largas de lo que yo era, así que, todavía sentado en la banca, miré la cara de la criatura—o la parte que parecía más una cara. No pude ver ningún ojo. Solo un cuerpo rechoncho, cubierto de pelo denso.

“…Um, ¿qué es esta criatura? Me lo he estado preguntando todo este tiempo.”

La bola de pelo denso estiró sus piernas entre el hombre y yo y tomó asiento en la banca entre nosotros.

El hombre acarició la bola de pelo a su lado y dijo; “Ah, me preguntaba cuándo lo preguntarías. Esta es una especie de criatura misteriosa”.

“Um, puedo notarlo con sólo verlo”.

“Quizás sí, vive en esta banca”.

“Eh”. Asentí sin pensar, pero cuando lo pensé un poco más, quedé completamente confundida. “Espera, ¿qué rayos…?”

¿Vive en esta banca? ¿Eh?

“La verdad es que tampoco sé nada sobre esta criatura. Cuando terminó la guerra y mi esposa no regresó, vine a esperar en esta banca, y desde ese día en adelante, esta criatura siempre ha estado aquí. Desde la mañana hasta la noche, siempre está aquí”.

“……”

“Creo que también podría estar esperando a alguien”.

“…Podría ser, ¿eh?”

“Es gracias a su compañía que he podido esperar a mi esposa con tanta paciencia. Por alguna razón, me siento tranquilo con ella a mi lado, y la espera no me ha parecido tan mala”.

Mientras hablaba, el hombre volvió a acariciar la bola de pelos.

Se estremeció levemente.

“… ¿No le gusta eso?”

“No, eso fue un saludo feliz”.

“……”

Imité al hombre e intenté acariciar a la criatura. Como era de esperar, volvió a temblar. Podía sentir las vibraciones a través del cabello espeso y enmarañado.

“Oh, eso no le gusta”.

“Pero parece que fue la misma respuesta que cuando lo acariciaste”.

“Estoy seguro de que así lo verá el ojo inexperto, pero puedo saberlo”.

“Entonces así es, ¿eh?”

“Así es. Nos entendemos como un matrimonio de ancianos”.

“Dado que han estado juntos durante diez años”.

“……”

Luego, mientras se abanicaba él con el abanico plegable, el hombre dijo en voz baja; “Y seguiremos estando juntos. Vaya, diría, sé todo lo que hay que saber sobre esta cosa…”

La brisa húmeda sopló entre nosotros y la bola de pelo denso tembló ligeramente.

No tenía ni idea de qué emoción significaba eso.

***

Después de ese breve interludio, finalmente llegué a la puerta del próximo país.

Sin embargo…

“¿Hmm…?”

Era extraño. La escena ante mis ojos iba en contra de la descripción del hombre.

“¡Bienvenida, Señora Bruja! ¿Es usted una viajera del país que está por ese lado?”

Estaba segura de que el tipo que estaba en la banca me había dicho que la puerta estaría cerrada, pero estaba abierta tal como se esperaría normalmente, y el guardia sonreía de oreja a oreja cuando me saludó.

“Soy una viajera, pero no soy de ese país”.

“¡Ah, ya! ¿Y cuántos días se quedará?” Preguntó el guardia. “Estaríamos felices si se quedara al menos tres, si es posible, pero…”

“¿Hmm? ¿Por qué?”

Era una petición extraña.

¿Por qué tres días?

Luego el guardia dijo algo más extraño. “¡Porque en tres días, este país ya no estará en guerra!”

Mi cabeza va a explotar.

Después de entrar al país, pasé dos días haciendo turismo. Me habían pedido que me quedara al menos tres días y tenía que admitir que tenía curiosidad.

La gente aquí parecía estar esperando ansiosamente el final de la guerra.

¡Por fin, el fin de la guerra!

¡Por fin ha llegado el día que hemos esperado durante diez años!

¡Finalmente, podemos seguir adelante!

Carteles y lemas como estos se exhibían por todo el pueblo.

Había tantos que en realidad era un poco molesto.

Por cierto, ¿por qué la guerra termina en tres días? En el país que acabo de visitar, la guerra ha terminado hace mucho tiempo. ¿Por qué sigue habiendo guerra aquí?

Quería andar preguntando esto y aquello y de hecho lo hice para pasar el rato, pero desafortunadamente, nadie me respondió.

“No se preocupe, lo entenderá en tres días,” dijeron.

“……”

Entonces, antes de que me diera cuenta, llegó el día de cese al fuego.

Sin embargo, ahora que había llegado el día, estaba desconcertada.

“… ¿Por qué?”

Absolutamente no entendí.

La gente estaba reunida en una plaza en medio del pueblo. Parecía que todos estaban viendo el centro de la plaza con una sonrisa en sus rostros, como si anticiparan algo espectacular.

Allí, en medio de los espectadores, los soldados con rifles habían formado un círculo. Cada uno de ellos tenía el cañón de su arma apuntando hacia el centro.

“……”

Sin embargo—

¿Por qué hay tantas de esas extrañas bolas de pelo? ¿Son un grupo de criaturas similares a la que vi en el bosque en mi camino aquí, y están rodeados por soldados?

Para mí, parecía que la gente de este país había unido fuerzas para perseguir a las pobres como criminales. Las bolas de pelo estaban apiñadas muy juntas, temblando.

“¿Qué rayos son esos?”

Cuando toqué el hombro de una de las personas a mi lado que miraban a las criaturas y pregunté, recibí mi respuesta de inmediato, como si fuera lo más natural.

“¿Qué son, preguntas…? Pensé que todos sabían que eran las brujas del otro país”.

***

Finalmente conseguí que alguien me dijera la verdad sobre lo que había sucedido aquí hace diez años.

Los efectos de la guerra finalmente habían llegado al frente interno. Un grupo de unas diez brujas del otro país había formado un escuadrón de élite para atacar el corazón del territorio enemigo.

Se opusieron a la única bruja que vivía en esta nación. Estaba condenada al fracaso desde el principio.

El grupo de brujas había invadido el campo, demoliendo edificios, destruyendo armas y arrebatando los medios de la gente para hacer la guerra, uno tras otro.

Llevados contras las cuerdas, la gente confió su futuro a la bruja solitaria.

“¿No hay forma de derrotar a una cantidad tan grande de brujas a la vez?” Preguntaron.

La bruja solitaria, amando su hogar por encima de todo, dio su vida para detener el ataque de las brujas enemigas.

Ella se sacrificó y maldijo a todas, transformándolas en esas extrañas criaturas.

Este país había perdido a su única bruja y, con ella, su último rayo de esperanza. Como tal, se vieron obligados a emprender una campaña de autodefensa desesperada. Al otro lado del campo de batalla, los invasores habían perdido a todas sus brujas y no querían arriesgarse a un segundo ataque.

De esta manera, la guerra llegó a su fin de forma natural y los dos países ya no tenían nada que ver el uno con el otro.

“Por cierto, esas extrañas criaturas tienen varias características peculiares”.

“¿Oh?”

“Son más unos objetos simples y menos que animales. No necesitan comer nada y no pueden morir, pase lo que pase”.

“¿Y bien?”

“Mantienen la calma incluso cuando se ahogan, y de alguna manera no se queman, aunque sean abrazados por las llamas. Cuando les disparan, las balas salen de la bola de pelo denso. Son prácticamente inmortales”.

“……”

“Es como si la bruja de nuestro país hubiera ideado un plan para que, pase lo que pase, nunca estén libres de sus crímenes de guerra. Pero hay un final para su inmortalidad. Había un límite de tiempo para la maldición de nuestra bruja. Se supone que su inmortalidad desaparecería diez años después de que se lanzó inicialmente la maldición”.

“…En otras palabras, dices que…”

“Así es. Hoy marca el día en que han pasado diez años”.

“……”

“Por eso estamos celebrando. Por eso la guerra realmente termina hoy”.

Y así sucedió.

Los gritos de la gente se hicieron más fuertes y se fusionaron en una cuenta regresiva.

El sonido de las palmas disciplinadas adquirió un ritmo, como para instar a los soldados. Apenas podía verlos levantar sus armas desde el otro lado de la concurrida plaza.

Y luego—

El sonido de los disparos atravesó el aire.

***

En el centro de la plaza, que estaba envuelta de gritos y aplausos, pétalos de flores rojas bailaban hermosamente en el aire.

“……”

Esto no es una metáfora. En realidad, había pétalos de flores rojas volando. Cuando extendí las manos, uno de los pétalos, llevado por el viento, se posó en mi palma.

Este confeti floral había sido disparado con las armas de los soldados. No los habían cargado con balas reales y, por supuesto, nadie había muerto.

Al contrario—

“… ¡Yupi! ¡Finalmente somos humanas de nuevo!” “Ah… fueron diez largos años…” “Por fin, hemos sido liberadas de ese infierno… en serio, esos fueron unos días oscuros…” “¡Aguardiente! ¡Tráigannos aguardiente!” “¡Quiero comer pastel!” “¡Quiero un hombre!”

Las extrañas criaturas que se habían apiñado en el centro del círculo recuperaron su forma humana. Volvieron a ser brujas. En la lluvia de pétalos de flores rojas, gritaron felices, abrazando a los soldados y al pueblo de este país.

“Eh, ¿qué está pasando?”

Estaba desconcertada una vez más.

“¿Qué quieres decir? ¿No es obvio? ¡Estamos todos felices porque la guerra terminó!”

“……”

¿Eh? ¿Qué?

“Um, pensé que, ahora que han pasado diez años y ya no son inmortales, las matarían a todas. Pensé que iba a haber ese tipo de desarrollo en la trama”.

“¿De qué estás hablando? Claro que no. Hemos pasado estos últimos diez años reparando nuestra relación con esas brujas. Nos hemos perdonado unos a otros y hemos decidido seguir adelante y vivir en paz”.

“…Pero en ese caso, ¿por qué cerraron la frontera y cortaron el contacto con el otro país?”

“Eso fue inevitable. ¿Qué tan bien crees que nos hubiera ido si, después de dejar de atacarnos, hubiéramos entregado a las brujas en sus estados transfigurados? ¿Crees que nos hubieran perdonado si dijéramos ‘convertimos a todas tus brujas en estas extrañas criaturas, pero ya no tenemos ganas de pelear’? Solo habría sido echar leña al fuego, así que esperamos que pasaran diez años”.

“¿Y todos perdonaron a la gente del otro país?”

“Perdonamos y fuimos perdonados. Ha sido un largo tiempo. Es por eso que estamos celebrando el final de la guerra con estas brujas”.

“……”

Considerando todas las cosas, fue un final bastante anticlimático.

Cuando dijeron que las criaturas perderían su inmortalidad después de diez años, simplemente habían querido decir que la maldición se disolvería dentro de diez años, y las temblorosas bolas de pelo, rodeadas de soldados, no se habían encogido ni temblado de miedo, sino que habían estado temblando de alegría.

Qué insatisfactorio.

Verdaderamente anticlimático.

“Creo que dijiste que eras una viajera, ¿correcto? ¿El otro país todavía nos guarda rencor?”

Sonreí amargamente ante la pregunta.

“Parece que este año es el décimo año de ese mismo rencor”.

***

Después de eso, pasé varios días en un país lleno de alegre celebración.

Conocí a las brujas que habían recuperado su humanidad y le conté a la gente de este país sobre el estado del mundo exterior.

Al parecer, la gente del pueblo ya había decidido sus planes para el futuro. Abrirían sus fronteras por primera vez en diez años y pedirían la reconciliación cuando devolvieran a las brujas a sus vecinos.

Espero que salga bien.

Aunque supongo que no tiene mucho que ver conmigo.

“……”

Me fui después de varios días.

Todos los signos de lluvia que habían estado en el aire sobre el bosque habían desaparecido, y una brisa fresca y seca pasaba por mi cuello.

La brisa se sentía agradable.

Apuesto a que esto se sentiría aún mejor si estuviera en mi escoba.

“¡Es hora de partir!”

Me había tomado un descanso.

Me levanté de la banca situada a la sombra del bosque, saqué mi escoba y me senté de costado encima. Debajo de la escoba que se elevaba suavemente, la tierra seca se arremolinaba en el aire y cubría la banca.

La banca vacía se quedó allí, como si esperara pacientemente a que viniera una nueva persona y tomara asiento.