Durara! (NL)

Volumen 10

Capítulo 3: Una Serpiente En Un Pecho: Primera Parte.

Parte 2

En las afueras de la ciudad, el segundo piso de un edificio abandonado.

“No hay problema ¿No? Ryugamine Mikado-kun.”

El hombre que repentinamente había aparecido ante Mikado y la pandilla, desajustó la atmósfera completamente.

“¿Huh?…”

Mikado, quien hasta ahora solo había estado quedándose con la mirada en estado de shock

– en ese instante, su cuerpo se congeló.

El hombre no había hecho algo en especial.

Él había dicho el hombre de Mikado, eso era todo lo que había dicho.

Pero por la postura del hombre, la forma en la que respiraba, el peso oculto en su voz, el hecho incomprensible de que supiera el nombre de Mikado, a pesar de ser su primera reunión, la inquietud de su mirada fija, ilegible detrás de sus lentes, todo eso se asoció para convertirse en una amenaza, trayendo a Mikado una ansiedad que nunca antes había sentido hasta ahora.

Más que en la primera reunión de los Dollars, cuando había confrontado a la hermana de Yagiri Seiji –

Más que en el momento en el que escuchó que Anri había sido atacada por el acuchillador –

Más que esa vez cuando había sido conducido por Celty a la fábrica abandonada, solo para ver a Masaomi lleno de heridas –

Más que cuando estaba siendo perseguido por la pandilla, y escapaba en la furgoneta de Kadota –

Más que cuando su kouhai Aoba, reveló su verdadera identidad –

Más que cuando fue atacado por el acosador de Hijiribe Ruri, una personificación de la violencia –

Ahora mismo, el miedo que se originó en el cuerpo de Mikado excedió cualquier cosa que hubiera sentido antes.

Él había sido llamado por su nombre, por un hombre extraño que había aparecido de repente.

Ese único hecho fue suficiente para enviar alarmas a su cuerpo que nunca había sentido antes.

Sintió como si la voz del hombre se convirtiera en incontables serpientes mordiendo a través de su piel, serpenteando alrededor de su cuerpo entero, desde adentro de sus venas.

Moriré.

Esto es malo.

¿Qué?

¿Por qué?

No, no quiero morir.

Esto es malo.

Quien.

Peligro.

Moriré.

Si no corro.

¿Qué es el?

Esto no puede ser

Seré asesinado.

No quiero morir.

Hay cosas que tengo que hacer

No.

No puedo morir, aun no no no no no no no puedo morir aquí, quiero vivir, yo siento la necesidad de correr a cualquier parte, pero es imposible, no puedo escapar, pero no puedo morir, debo hacer algo, hacer algo , sino hago algo algo algo –

Porque tuvo esa premonición de su muerte ¿Por qué sintió tal terror? Incapaz de comprender aun eso, Mikado solo hizo algo como para gritar instintivamente.

“-erg, Ahn…”

Sin embargo, la tensión extrema solo había reducido drásticamente toda humedad en su boca, y con toda sinceridad, él estaba en un estado en el que no podría hablar normalmente aun si lo quisiera.

Viendo a Mikado empapado de sudor, con su boca abriéndose y cerrándose – el hombre golpeó el asfalto con su bastón.

El estrecho sonido tembló a través de los tímpanos de Mikado y el hombre misteriosamente se rió entre dientes.

“¿…? Ah, uh…”

Mikado descubrió que había sido liberado de la tensión previa, y miró otra vez hacia el hombre ante él.

El hombre con lentes recogió su bastón y dio golpecitos a su hombro mientras hablaba.

“Bueno, estoy aliviado.”

“¿?”

“Por lo menos, es el tipo de chico que se asustaría de la atmósfera de ahora mismo.”

El hombre sonrió abiertamente, y se acercó un paso más.

“Me preguntaba lo que debería hacer, digo, si resultaba ser un tipo peligroso que podría conservar una cara seria en esta situación.”

Con esas palabras, los chicos de los Blue Square parecían haber asimilado la situación, y empezaron a moverse.

“Hey ¿Qué pasa viejo?”

“Nosotros reservamos este lugar ¿Lo sabias?”

Unos cuantos se acercaron a él de inmediato, y uno de ellos estuvo al alcance para agarrar su cuello.

[Hey, haz que se detengan.]

Al mismo tiempo, Celty le mostró su PDA a Mikado.

“¿Eh?”

Justo cuando Mikado murmuró eso –

Los chicos rodeando al hombre volaron del suelo uno por uno.

Mejor dicho, más exactamente, habían sido cruelmente derribados por el hombre.

“¿¡!?”

Ni los que habían sido echados a volar ni los que habían presenciado todo, podían entender que había pasado.

Solo parecía que aquellos que habían sido brutalmente heridos, su parte trasera se había entumecido, y no podían moverse de su posición.

“¿ESP?”²⁹

Fue quizás debido a la presencia de Celty, en sí misma una existencia imposible, que tal posibilidad entró a la mente de Mikado.

Pero al escuchar las palabras de Mikado, el hombre se rió y lo negó.

“De ninguna manera. Es simplemente un truco. Si Oi-chan tuviese poderes ESP… si los tuviera… si los tuviera… ¿Qué? ¿Qué suena bien? Transportadora-san.”

Inesperadamente, habiendo sido a la que se le acercó, Celty rápidamente escribió en su PDA.

[No lo sabría. Pienso que dependería de la clase de poder que sea.]

“Eso es cierto. Bueno, pensaré acerca de eso por mí mismo.”

Mikado no podía ver la PDA desde donde estaba, pero podía suponer que estaban bromeando.

“Um, Celty-san ¿Quién es?”

Mikado preguntó cortésmente. Celty, vacilando, consultó a Akabayashi primero.

[¿Esta bien si lo digo?]

“No me importa. Después de todo, por eso vine aquí.”

Después de asegurarse de eso, Celty directamente les dijo a Mikado y Aoba la verdad.

[Este hombre es Akabayashi-san. Es un ejecutivo de los Awakusu.]

“Los Awakusu, él… no puede ser.”

La verdad simplemente había sido mostrada en su cara, un frío estremecimiento bajó por la columna vertebral de Mikado. El nombre de los Awakusu era uno que se descubría sin investigar a fondo a su grupo líder, la alianza Medei – pero Mikado vagó por el mar del internet buscando noticias de Ikebukuro y lo había encontrado repetidas veces.

29ESP: Mikado se refiere a un esper, es decir una persona con poderes ya sean sobrenaturales o de cualquier tipo, si han visto to aru ya estarán familiarizados.

Él era consciente de que clase de organización eran los Awakusu.

Él se había preparado para eso.

Al mismo tiempo, había esperado que ese momento nunca llegase.

Pero ese hombre, Akabayashi, daba la apariencia de ser un mensajero espectral de la muerte, que fue a decirles eso.

Que los Dollars tenían los pies puestos en la parte baja de la ciudad. Y estaban quizás ya profundamente arraigados.

Aoba estimaba a Akabayashi con una expresión solemne, hizo señales con sus manos para que sus compañeros no se movieran.

En medio de esa tensa atmósfera, el hombre que era la fuente rió, y se sentó sobre un montón de materiales al lado de Mikado.

“Realmente, que coincidencia. Oi-chan conocía un poco acerca de este lugar también ¿O descubrieron acerca de este lugar por el problema reciente?”

“¿?”

Aunque Mikado no entendió y estaba confundido, Aoba parecía entender lo que quería decir y evitó sus ojos ligeramente.

Akabayashi notó esa diferencia, pero no dijo nada, y simplemente continuó hablando.

“Bueno, bueno, por qué no dejamos eso de lado por ahora. Ryugamine Mikado-kun ¿Tienes curiosidad acerca de por qué Oi-chan conoce tu nombre?”

“… No, Akabayashi-san, eso es…”

“Ah, puedes sentirte en libertad de llamar a Oi-chan, yakuza. Pero la palabra yakuza nunca tiene buenas connotaciones, tengo colegas que se molestarían si les llamaras así en sus caras, así que cuida eso.”

“… Muchas gracias. Y acerca de lo de antes…. Si usted es yakuza, sería realmente fácil

enterarse de mí, entonces…”

Con los Awakusu de lado, Mikado entendía muy bien el poder sustentado por grupos de violencia. Podían poner en una esquina a las personas que debían préstamos ilegales en la desesperación. De eso, Mikado solo podía sospechar que tenían una habilidad investigadora más allá de sus fantasías.

Esta vez, Akabayashi no había tocado el poder de los Awakusu como una organización, y en lugar de eso, había comprado información de Orihara Izaya – pero Mikado no tenía forma de saber eso.

“Ya veo. Es bueno que entiendas. Entonces, mis amigos… un montón de personas llamadas ‘Jyan Jyaka Jyan’ te seguían, así supe como venir aquí… Bueno, estaba sorprendido cuando vine. No pensé que tendrías amistad con una transportadora que conozco.”

Con una mirada a Celty, Akabayashi continuó.

“Bueno. Sabes lo que quiere decir que alguien como yo venga aquí ¿no? ¿Sabes que quiere decir no?”

“¿Los Dollars han traído problemas…?”

Tragar grueso. Mikado reunió coraje y estrujo esas palabras de su garganta.

Espeluznante.

No parece estar bien pensar esto, pero…

Las personas de farmacéuticas Yagiri no están a la altura de esto en lo absoluto.

Reprimiendo el temor que bajaba corriendo por su columna vertebral, Mikado se dijo a si mismo que tenía que afrontar la realidad ante él, y apretó sus puños.

De esa primera reunión, cuando había visto el poder de los ‘Dollars’ – ya sabía que había una posibilidad de que las personas que tenían ocupaciones en el bajo mundo se involucraran con los Dollars.

Pero también Mikado, estuvo todo el tiempo aferrado a la fugaz esperanza de que esa situación en cierta forma pudiera ser solucionada.

En la noche de esa primera reunión, era cierto que había considerado a los Dollars omnipotentes.

Pero en la primavera, cuando los Toramaru atacaron, esa ilusión se rompió. Y ahora fue hecha pedazos por el hombre ante sus ojos.

Él había escuchado que recientemente los grupos de violencia progresaban y hacia métodos inteligentes, y aquellos que podrían ser reconocidos estaban disminuyendo.

Ciertamente, si uno ignora la cicatriz en su cara y su traje, el hombre ante él no emitiría una impresión particularmente violenta. Ciertamente, no era un asalariado, estaría dentro de los límites aceptables imaginarlo como un productor de música, o alguien de ese tipo.

Aun así, ahora mismo, al mismo instante que el nombre Ryugamine Mikado dejó sus labios, una ‘Premonición’ bien definida de ‘Muerte’ había emergido en el corazón del chico.

Necesito, necesito hacer algo.

¿Va a tomar dinero? ¿O nos aplastará?

Cualquiera que sea, definitivamente tiene que ser evitado.

Él también había considerado pedirle a Celty que actúe como una intermediaria, pero era poco clara como era su relación con los Awakusu, y sería irrazonable meterla en el asunto.

En la vacilación de Mikado, Akabayashi continuó, suavemente.

“Bueno… me pregunto si realmente seguro sobre los otros hombres viejos actuar contra de civiles, tú sabes.”

“ …Ya veo”

deberíamos llamarlo problemático. No estoy tan de esta era, pero el Oi-Chan de aquí prefiere evitar

“¿Cómo lo debería poner? Según las palabras de esos mangas o esas revistas dramáticas, sería la superficie y el abdomen de la ciudad ¿Sí? Proteger ese límite, es el trabajo de Oi-Chan.”

“ … Ya veo.”

No hubo nada más que Mikado pudiera decir, y entonces Akabayashi continuó.

“Si los dedos del pie de alguien se encontraran en la línea, para ponerlo simple, les daríamos una patada de regreso a la superficie, pero si insisten en acercarse – nosotros los traemos como aliados o los aplastamos, así es como funciona.”

Akabayashi golpeó ligeramente su bastón, y él miró fijamente hacia los ojos de Mikado a través de sus lentes.

“Entonces ¿Cuál preferirías tú? ¿Ser aplastado? ¿O convertirte en nuestro aliado?”

“…”

Por un momento, el silencio reinó a través del edificio.

Después de que muchos segundos pasaran, Mikado lentamente, fuertemente, comenzó a hablar.

“¿Usted no nos dará un tercer camino?”

“¿Así que no te gusta ninguno? Bueno, está bien. Dime sobre tu tercer camino.”

Él primero había remarcado de forma brusca: ‘¿Así que te niegas a nuestra oferta?’ Pero no obstante, Akabayashi había dejado a Mikado continuar.

“Nosotros, como los Dollars, caminamos sobre ese límite. Podríamos tener algunas riñas o reuniones alrededor de la ciudad, pero definitivamente no le proporcionaremos problemas a los Awakusu… ¿hay tal camino?”

“Ese camino tuyo de seguro es estrecho. Y los problemas pueden venir de muchas formas.”

“Entonces, simplemente un poco ¿Podemos entrar en más detalle? No tenemos intención de obstruir su lado. Andamos simplemente buscando un lugar hasta tener un sitio.”

“Un lugar hasta tener un sitio, huh.”

El sonido del bastón hizo eco en el cuarto, sin embargo, probando a Mikado, preguntó.

“Si tú estás buscando un lugar que tenga un sitio, hay suficiente en la superficie ¿No? Mikado-kun, ahora mismo, tus ojos están llenos de determinación, pero no están calmados. Si tuviera que compararlos, esos serían los mismos ojos de un jugador de apuestas que cae más y más profundo. Deja de jugar esos juegos de azar. Eso es todo lo que tienen que hacer, pero comienzan a decir que la emoción es de donde pertenecen, y al final, todo el mundo se salpica.”³⁰

“…”

Incluso Mikado no podía afirmar que no había nada de eso.

Él era consciente del hecho que ciertamente, caminaba por un camino peligroso.

Pero aun así, Mikado tenía algo que quería proteger.

Hace mucho tiempo, eso que había presenciado en la noche de su primera reunión – esa que podría ser llamada la representación de los Dollars ideales – esa ilusión.

Si bien él podía entender, en su cabeza, que no era más que una ilusión, no podía reprimir el afán que formaba remolinos profundamente en su corazón. Y esto era porque Mikado

30la frase quiere decir que los que apuestan, al final dicen que pertenecen a esa emoción (apostar) y siguen hasta que se “esparce” aquí si quedaría salpicar, porque lo dicen en el sentido de que se meten tanto en la emoción que ellos mismos se salpican y se joden. O eso me parece.

trataba de hacer a esa ilusión una realidad – porque él trataba de caminar sobre un límite diferente del que Akabayashi le había hablado.

“Por eso, es que me gustaría algún consejo sobre cómo no perder esta apuesta.”

“Entonces, no juegues juegos de azar.”

Akabayashi contestó rápidamente.

“Y en primer lugar, tú no das la impresión de ser alguien lo suficientemente hábil como para caminar por una cuerda floja. Bueno, está bien. Ahora sé un poco más acerca de los Dollars. En todo caso, no parece que podamos detener los Dollars incluso si te secuestráramos. Si así es como es, entonces simplemente comenzaré a aplastar a quien quiera que vea con mi ojos, soy condescendiente.”

Como Akabayashi se levantaba de los escombros, Mikado continuó, tenazmente.

“¡Uh, um!”

“¿Hm?”

“Sí, por ejemplo… Si las personas de los Awakusu trataran de matar a uno de nosotros sin razón, también sería un ‘problema’. Si usted trafica drogas, también sería un problema si detuviéramos a los Dollars de comprarlas, ¿no?”

Por un instante – la cara de Akabayashi perdió toda expresión.

“… ¿Estás diciendo que nos agruparíamos en pandillas contra civiles sin razón?”

Incluso cuando se desalentó bajo los estrechos ojos de Akabayashi, Mikado apretó sus puños aún más fuerte, y replicó.

“Pero… usted es un yakuza ¿No?”

[¡Mikado!]

Celty tecleó en su PDA, pero Mikado, con sus ojos fijos en Akabayashi, no le prestó atención.

Durante poco tiempo, Akabayashi y Mikado se miraron fijamente.

El aire amenazador que Akabayashi emitía era mucho más feroz que cuando había entrado; Pero haciéndole frente a eso, Mikado no evitó su mirada fija.

Y luego, al siguiente momento, la cara de Akabayashi mostró la misma sonrisa abierta de antes.

“Haha. Eso es. Oi-chan también lo dijo – tú me puedes llamar yakuza. Supongo que es touché. Ah, bueno, es porque somos yakuza.”

Golpeando ligeramente su bastón frente a sí mismo, se rió mientras continuaba.

“Si tú en realidad ves a las personas agrupándose en pandillas contra alguien, llama a la policía directamente. Tú puedes solucionar eso sin lastimarte.”

“¿Eh? Ah, y, sí.”

“Y tú no tienes de que preocuparte. Nuestro grupo no trafica con drogas, y si hay alguien extraño vendiendo drogas, Oi-chan, aquí presente, será el primero en aplastarlos.”

A pesar de su sonrisa, esa dura declaración parecía contener una aguda furia.

Pero Mikado no sabía la causa, así que sólo podía estar confundido.

Akabayashi miró de arriba abajo a Aoba, quien a diferencia de Mikado, no había dicho una sola palabra. Finalmente, recorrió a Celty con la mirada, y habló.

“Bueno, hoy es una advertencia. No vine aquí a fastidiar. Simplemente se consciente de que las personas como Oi-Chan tienen un ojo puesto en ti.”

“ … Ya veo. Muchas gracias por su preocupación.”

“Sip, es bueno ser modesto. Aunque si pudieras salirte de los Dollars, todo el mundo sería feliz. Y si tus padres supieran que eres el líder de los Dollars, probablemente se angustiarían… Y, oye, hay una chica a quien eres cercano ¿No? Cuál era su nombre. Uh, la chica con gafas…”

“¡Sonohara-san no tiene nada que ver con esto!”

Para cuando Mikado se percató, ya había gritado.

Su expresión se puso más inquieta que en cualquier punto anterior de su conversación. Y al siguiente momento, era de horror.

“Puedo decir que ella es definitivamente una persona importante¿no? Al menos, fíngelo un poco. Como esperaba, la cuerda floja será un poco difícil ¿No?”

Naturalmente, Mikado era ignorante de que Anri y Akabayashi eran viejos conocidos. Decir el nombre ‘Sonohara’ en tal lugar, y dejando a una persona involucrada en un grupo de violencia saber que ella era muy preciada para él, era su máxima falla hoy, eso era lo que sentía Mikado.

El chico se había quedado callado; Y entonces Akabayashi continuó.

“Y ¿Lo sabías? Oi-chan ha formado parte de los Dollars desde hace algunos meses.”

“¿¡!?”

“A menos que tuvieran un mínimo de comprensión de los funcionamientos internos, no hay alguien que sepa quien ha causado problemas ¿No? eres ingenuo.”

Akabayashi se rió sarcásticamente, y se movió hacia las escaleras.

“Bueno, en lo que respecta a Jinete Sin Cabeza-san, guardaré todas mis preguntas para la próxima vez.”

[Entiendo. Pero, Mikado no es el tipo de idiota que haría un enemigo de su clase, Akabayashi-San.]

“Esperanzadoramente ese es el caso.”

[Eso es en lo que yo creo.]

Akabayashi asintió con la cabeza en satisfacción a la respuesta de Celty, y se detuvo frente a las escaleras.

“Entonces, ahora, como miembro de los Dollars, me gustaría hacer una petición.” “¿?”

“Un amigo mío tiene un problema relacionado con los Dollars.”

Al decir eso, se volteó hacia la escalera, y llamó hacia el primer piso.

“Oi, Niekawa, puedes salir ahora.”

¿Niekawa?

Era Celty quien reaccionó a ese nombre.

Habían sólo dos personas a quienes ella asoció con ese raro nombre.

Algunos segundos después, la persona subió las escaleras – era ciertamente, una cara familiar para ella.

“Esto ¿Este tranquilo niño? ¿Realmente?”

El hombre vio la cara de Mikado, y pareció asombrado con la diferencia entre la expectativa y la realidad.

“Sí, por lo menos, yo pienso que él es la cosa más cercana a un líder en los Dollars.” Akabayashi le informó lentamente, y Celty, al lado de él, mostró su PDA.

[¡Niekawa-san! ¡Usted es Niekawa-San del ‘Tokyo Warrior’! ¿No? ¿Por qué está usted aquí?]

“ ¿¡Uh, huh?! ¿Jinete sin cabeza?”

[Le dije mi nombre antes ¿No? ¡Es Celty Sturluson!]

Celty comenzó a hablar de algo completamente irrelevante, y continuó con urgencia.

[¿Por qué está aquí? ¿Usted conoce a Akabayashi-San? Um, si usted entrevista a Mikado-Kun ¡Por favor, no publique su cara! ¡Hay personas que estarían molestas!]

“N-n-no, no, no vine a entrevistar hoy.”

Mikado vio el bizarro intercambio entre Celty y Niekawa, y se confundió más aun, ypreguntó.

“¿Usted también conoce a esta persona, Celty-San?”

[No, uh, hace mucho tiempo, él me entrevistó sobre de Shizuo.]

Celty le explicó en su PDA, y Niekawa, a un niño lo bastante joven como para ser su hijo, inclinó su cabeza.

“Si eres el más familiarizado con los Dollars, por favor, mi hija fugitiva, aparentemente ella es un miembro… Por Favor ¡Ayúdame a encontrar a Haruna!”

En la ráfaga de palabras del hombre, Celty se sintió débil.

Haruna-chan,  ella, no es la que está con Saika.

¿Esa chica está en los Dollars?

Con conocidos apareciendo uno tras otro en ese edificio, se originaron una pila de consecuencias después de los acontecimientos.

Ante esa enredada situación, sintió deseos de escapar, e ir a casa rápidamente para hablar con Shinra, sólo para verlo.

Shinra, ayúdame, Shinra.

Yo… ¿Me pude haber puesto a mí misma en algo increíblemente problemático?

Al apenas darse cuenta de su posicion–

La Jinete sin cabeza, una miembro de los Dollars, alzó un suspiro desde lo profundo de su corazón.