Bofuri Itai No Wa Iya Nanode Bogyo-Ryoku Ni Kyokufuri Shitai To Omoimasu (NL)

Volumen 2

Capitulo 10: Build Defensiva Y La Cacería Del Calamar

Treinta minutos de batalla…

“Bien… ¿qué más podemos intentar…?”.

“¡Sally! ¿Ideas?”.

“Uh… ninguna…”.

Sally estaba quieta, perdida en sus pensamientos.

Esto era posible porque los tentáculos estaban concentrados por completo en Maple.

Maple estaba siendo golpeada sin cesar.

“Gracias al cielo tu defensa es tan ridícula”.

Estos ataques acabarían con cualquier otro jugador de un solo golpe, o al menos los dejarían en rojo, pero no le causaban a Maple más daño que una tacleada de conejito.

Maple estaba volando por los aires como una pelotita de pinball.

“¡Maple! ¡Trataré de alcanzarlo nadando!”.

“¡Entendido! ¡Ten cuidado!”.

Sally ya había probado toda su colección de hechizos, pero ninguno había logrado penetrar la gruesa capa de agua protegiendo al calamar.

Maple había sugerido usar Hidra para envenenar el agua, pero si eso no funcionaba, de todos modos, dejaría el agua demasiado envenenada como para que Sally nadara. Habían decidido usarlo como último recurso.

Primero, Sally iba a tratar de llegar a él nadando.

Pero no todos los tentáculos estaban golpeando a Maple.

El calamar había guardado unos como reserva para amenazas que se acercaran demasiado.

Obviamente, estos fueron los que atacaron a Sally.

“Asombroso… genial, Sally”.

Volando por los aires luego de otro golpe, Maple miró hacia arriba y vio a Sally esquivando los tentáculos con destreza, acercándose más y más al cuerpo del jefe.

“¡Oh! ¡Su barra de HP bajó!”.

Las dagas de Sally habían soltado un efecto de ataque, cortando al calamar. Maple miró, aguantando más golpes.

“Hmm… tiene menos HP de lo que esperaba…”.

Sally hizo un combo de cinco ataques, y con eso la barra de salud del jefe bajó un 15 por ciento.

“¡¿Mm?!”.

Los tentáculos alrededor de Maple dejaron de atacar, y ella cayó al suelo.

El decente daño causado por Sally había atraído la agresividad de los tentáculos.

Percatándose de esto, Sally nadó rápidamente de regreso con Maple.

Sin importar cuan buena fuera esquivando, un ataque AOE bien hecho la golpearía sin duda.

Y si todos esos tentáculos atacaban al mismo tiempo, sería su fin.

“(Jadeo)…”.

“¡Movimiento de Protección! ¡Protección!”.

Maple no usó Devorador. Simplemente saltó entre Sally y los tentáculos, y dejó que todos ellos golpearan contra su armadura.

“¡Hidra!”.

El dragón de veneno tragó los ocho tentáculos.

Este calamar no era tan rápido como el ave, así que la Hidra golpeó sin problemas, sin necesidad de escoger el momento adecuado y pensar en algún truco.

Simplemente no era tan rápido como para esquivar.

“Pero volvieron a crecer”.

Podían deshacerse de los tentáculos, pero estos reaparecían rápido y no le causaban daño a la barra de salud principal del jefe.

Aun así, esto no fue completamente inútil. Lograron que los tentáculos se concentraran en Maple de nuevo.

“¡Sally, te toca!”.

“¡Gracias! ¡Eres una salvavidas!”.

Sally nadó de regreso al océano.

Sally atacaba, mientras Maple llamaba la atención de los ataques.

Cada vez que el jefe comenzaba a atacar a Sally, ella regresaba con Maple, y Maple se volvía el objetivo de nuevo.

Simplemente debían repetir hasta que algo cambiara.

La segunda fase llegó antes de lo esperado.

Cuando Sally había bajado la salud del calamar al 70%, el jefe cambió.

Círculos mágicos aparecieron alrededor del calamar, generando peces.

Claramente eran monstruos.

Los peces monstruo nadaron hacia las chicas.

Todos los tentáculos que habían estado ocupados con Maple perdieron el interés, regresando al agua.

“¡Están nadando en el aire!”.

Maple no estaba bajo el agua, pero a los peces no parecía importarle. Estaban saltando fuera del océano y volando por el aire—cubiertos por un aura azul.

Era bonito, pero… eran monstruos. Ella no podía quedárseles viendo.

Los peces empezaron a golpear a Maple desde todas direcciones.

“Hmm… ¡Grito Paralizador!”.

Un schiiing hizo eco en la cámara, y los peces cayeron al suelo, incapaces de moverse.

“¡Qué buena skill!”, gritó Maple.

Pero el calamar y los peces todavía en el agua quedaron fuera del alcance, sin ser afectados en lo absoluto.

“¡(Jadeo)! ¡Logré escapar!”, dijo Sally. Ella emergió del agua, salpicando.

El resto de peces y tentáculos estaban justo detrás.

Pero Sally actuaba como si hubiera logrado escapar— porque Maple estaba ahí.

Había pocos lugares en el mundo más seguros que al lado de Maple.

“¡Maple!”.

“¡Entendido!”.

Maple sacó su Luna Nueva de nuevo.

Un sello purpura apareció en su punta.

Era el ataque favorito—y más poderoso—de Maple.

“¡Hidra!”.

Este derritió a todos los peces, y tragó a todos los tentáculos, y…

…cayó en el agua.

““¡Augh!””.

Cada una de las cabezas de la Hidra quedó bajo el agua, donde se disolvieron.

¿Era su imaginación, o el océano se había tornado ligeramente púrpura?

No sabían si sería seguro que Sally nadara ahí.

“¡¿A-A-Ahora qué?!”.

“¡N-No me preguntes a mí!”.

“¡Em, uh, cierto! ¡El calamar! ¡Su barra de salud!”.

Ella levantó la mirada… y vio que su barra de salud no estaba bajando para nada.

Los tentáculos estaban regenerándose.

Los peces que ella había paralizado estaban comenzando a emitir un aura azul y alzando vuelo de nuevo.

Nuevos peces estaban apareciendo también.

“Supongo—que será mejor que empieces a correr, Sally”.

“¡Intentaré acabar con algunos peces también!”.

“¡Discúlpame mucho!”.

Tantos peces.

Ocho tentáculos.

Y esos peces no solo tacleaban. Ellos también lanzaban agua del mismo color que su aura.

“¡Maple! ¡Creo que es como Oceánico!”.

Esa era la skill de Sally que reducía la Agility del oponente, y estaba muy segura que estos peces podían hacer lo mismo.

“¡A mí ya me golpearon! Pero… no creo que me haya vuelto más lenta”.

“B-Bueno, no. ¡En primer lugar ni tienes nada de Agility! ¡No puedes bajar de cero! O… tal vez solo sea agua normal. ¡Argh, no lo sé!”.

El error de Maple había puesto fin a su confiable estrategia, y ahora había veneno y peces misteriosos por todo el suelo. El aire estaba lleno de peces y tentáculos.

Maple ahora era una verdadera pelotita de pinball.

Entre los gritos de pánico, ambas gritaban ideas cuando se les ocurrían, y sin duda este era el epítome de un pandemónium total.

“¡Al diablo todo! ¡Échale todo el veneno que puedas al océano!”.

“¡Bien! ¡Sólo déjame usar Devorador en algunos tentáculos!”.

“¡Adelante!”.

El escudo de Maple tragó algunas de las extremidades del calamar.

Cada vez que tragaba, un cristal rojo aparecía en su superficie.

Esto era su reserva de MP.

“Mientras Maple se encarga del calamar—yo me iré de pesca!”.

Sally se dirigió al banco de peces, siempre a máxima velocidad, atacando y escapando como siempre.

Por otro lado, Maple…

“Bien. ¡Ojalá funcione!”.

Ella estaba parada a un lado de la pared de océano.

Acababa de tragarse todos los tentáculos, así que había conseguido unos momentos de relativa paz.

Los peces seguían atacándola, pero ella los ignoraba.

“¡Vaya, de cerca son bonitos!”.

Maple estiró su mano hacia uno de los peces, solo para que este la golpeara.

Pero ella siguió sonriendo, así que más que un ataque de monstruo, se vio como un niño jugando con su pez mascota.

“Creo que deberían alejarse un poco”, dijo Maple, y apuntó Luna Nueva al agua. “¡Hidra!”.

Ella no le apuntó a nada en particular, así que la Hidra entró de lleno a las profundidades del océano.

Y como era de esperarse, su cuerpo se disolvió en el agua, sin causarle daño directo al calamar.

“¡Que este hermoso océano… se vuelva venenoso!”, gritó Maple con voz cantarina.

Había bastante agua, así que claramente debía seguir atacando.

Pero el agua en definitiva estaba tornándose más y más púrpura. Era mucho más obvio que antes.

“Será mejor alejarme un poco para que los tentáculos no me lancen dentro”.

Maple se movió hacia el centro del domo, chapoteando entre el veneno que había creado y el agua que los peces habían salpicado.

Ella debía esperar antes de poder usar Hidra de nuevo.

Y eso les dio tiempo a los tentáculos de regenerarse.

Ya que Sally no estaba atacando al calamar, su atención seguía por completo en Maple.

“¡Adelante! ¡Atácame con todo!”, dijo, recostándose en el suelo.

Ya que sabía que no podría escapar a su destino de convertirse en pelotita de pinball, pensó que bien podría dejarse llevar.

“¿Oh?”.

Pero cuando se recostó, los tentáculos simplemente la golpearon desde arriba.

No podían elevarla al aire como cuando estaba parada.

“¡Bien! Así está mejor”.

“Rayos… Qué locuras hace siempre Maple…”.

Sally estaba ocupada corriendo un maratón contra un banco de peces, así que… ella no era quién para hablar.

Maple pasó un rato lanzando veneno al océano.

Y ambas chicas notaron que el HP del calamar estaba comenzando a disminuir poco a poco.

“¡Está funcionando!”.

“¡Eso creo! Pero…”.

Pasaba muuuuuuuuuuucho tiempo entre cada bajada de HP.

Unos cinco minutos. Y cada bajada era de más o menos un milímetro de barra de salud.

Si tenían que esperar tanto, se volvería doloroso rápidamente.

“¡Continua!”.

“Entendido!”.

Unas cuantas Hidras más y la barra de HP empezó a bajar más rápido.

Una hora después, había logrado sacarle un 10 por ciento.

Al jefe le quedaba 60 por ciento de vida.

A este paso, estarían luchando otras seis horas.

“¡Lanza Venenosa!”.

Maple se había quedado sin munición para su Hidra, así que comenzó a usar otras skills.

“¡Seis horas más corriendo así es demasiado!”.

“¿Qué hacemos entonces?”.

Nada que se le ocurriera parecía que pudiera causar una diferencia dramática.

Siguieron así otra hora, y la barra de salud del calamar bajó a menos de 50 por ciento.

“¡Rayos!”.

Maple había estado recostada cerca de una pared de agua, así que lo notó de inmediato.

El agua estaba expandiéndose.

Las paredes y techo se acercaban.

Cuando dejaron de moverse, el espacio del domo había disminuido hasta la mitad de su tamaño original.

Entonces, el calamar escupió una nube de tinta, ocultándose en el agua.

Había sido difícil moverse en el agua antes, ¿y ahora tendrían que hacerlo a ciegas? Si hubieran luchado de la forma convencional, habría sido realmente difícil.

Pero como ya se habían rendido en usar un acercamiento común…

“Maple, ¿cuántos Devorador te quedan?”.

“¡Sólo uno!”.

“…Guárdalo!”.

“¡Entendido!”.

Con las paredes acercándose, los ataques de los peces empezaron a llegar más rápido.

Lo cual hacía más difícil que Sally pudiera escapar.

“¡Provocación!”.

Si a Sally le estaba yendo mal, entonces sería mejor que Maple fuera a la que atacaran. Ella empezó a llamar aún más la atención del jefe.

“¡Gracias!”.

“No hay problema”.

El calamar no lanzaba tinta constantemente—así que justo como el veneno de Maple, la tinta empezaba a diluirse.

Podían ver cómo el jefe nada por todos lados, como si no planeara lanzar una segunda nube de tinta.

“Ahí está… Creo que ya está en rango. ¡Bien! ¡Maple!”.

Maple se levantó de un salto y llegó corriendo.

“¿Cuál es el plan?”.

“¡Sígueme! ¡Salto!”.

Su salto la llevó hacia el calamar, pero quedó corta por quince yardas.

“¡Movimiento de Protección!”, gritó Maple, siguiendo a Sally.

“¡Aquí vamos! ¡Lanzamiento de Hombro!”.

Sally tomó a Maple y la puso en posición, lanzándola hacia el agua.

“¡¿Aiiiieeeeee?!”.

“¡Golpe de Impacto!”.

Sally lanzó un golpe. Un crack resonó, y un proyectil de aire golpeó a Maple, empujándola aún más alto— haciéndola pasar por el agua de arriba.

Maple salió volando directo hacia el calamar, atacando con su escudo pesado.

El escudo de inmediato carcomió gran parte de su salud justo en el momento de impacto.

“¡Este es el nuevo Cañón Maple!”.

“¡¿C-Cómo se supone que aterrice ahora?!”.

“………No lo pensé hasta ese punto”.

Habían estado explorando y luchando por mucho tiempo—y Sally ya no estaba pensando con claridad.

Maple quedó condenada a chocar contra el suelo con un fuerte clang.

“Ya que yo le causé bastante daño…”, dijo Sally, aterrizando con suavidad.

Maple cayó de golpe a su lado.

Una caída de veinticinco yardas… y no recibió daño.

Qué increíble defensa.

Por otro lado, el calamar no parecía tener tanto HP o defensa.

La forma en que los ataques de Sally lo habían dañado antes era prueba de ello.

Ella pensó que, si podían acertarle uno de los golpes de Maple, entonces podrían bajarle al menos un veinte por ciento en un solo ataque.

“¡Eso nos ahorró tres horas!”.

“Pero aun así quedan otras tres”.

Maple se había quedado sin Devorador. No podían usar ese truco una segunda vez.

“Oh, va a tirar tinta de nuevo”.

“Quién se imaginaría que este océano se veía tan bonito antes”.

Con la tinta y el veneno, casi no quedaban señales del azul del océano.

Las chicas aguantaron hasta que el HP del jefe había quedado en 10 por ciento.

Y entonces, entró en su fase final.

“¿Eh? Los peces…”.

Los peces perdieron sus auras… y se secaron, convirtiéndose en polvo.

Las auras separadas se elevaron y fueron absorbidas por el calamar.

“¡Prepárate!”.

“¡Estoy lista!”.

Maple levantó su escudo.

Ella se había quedado sin Devorador, pero seguía pudiendo usarlo como un escudo normal.

El calamar gigante se sacudió; un aura azul lo envolvió—justo como los peces. Salió del agua a toda velocidad…

Y el poderoso brillo azul mantuvo su masivo cuerpo en el aire.

“¡Ya viene!”.

“¡Movimiento de Protección! ¡Protección!”.

Justo cuando Maple gritó, el calamar las golpeó.

Maple había cubierto a Sally por si acaso, y mientras ella estaba siendo arrojada de un lado a otro, aguantando los ataques del calamar, Sally fue capaz de alejarse con seguridad.

El calamar volvió a acelerar, metiéndose al agua en las lejanías del domo.

Había bajado la salud de Maple en un 40 por ciento.

Movimiento de Protección había causado que el daño original se duplicara.

Pero esta era apenas la segunda vez que Sally había visto algo con suficiente daño como para atravesar las defensas de Maple con fuerza bruta.

“Qué buffeo tan ridículo”, murmuró Sally.

Ella usó Curación en Maple, manteniendo un ojo en el calamar.

Si las trataba de atacar, eso probablemente le permitiría contraatacar.

“Primero esquivo… ¡y luego ataco!”, gritó Sally.

La atención del calamar seguía por completo en Maple.

“¡Super velocidad!”.

Y eso significaba que Sally tenía camino libre para atacar.

Pasando a cámara lenta, ella blandió sus dagas.

“¡Corte Triple!”.

Seis golpes acertaron en el abdomen del calamar mientras Sally pasaba.

“¡Lanza Venenosa!”.

Maple apuñaló al calamar justo en la cabeza.

El ataque del calamar lastimó a Maple, pero él recibió más daño que ella.

El calamar volvió a entrar al agua en la lejanía de nuevo.

“¡Acabaremos con él en el próximo ataque!”.

“¡Ya casi ganamos! ¡Aguantemos un poco más!”.

Ellas siguieron al calamar atentamente con la mirada, listas para atacar de nuevo.

No querían arruinar su mejor oportunidad de ganar.

El calamar viró hacia ellas, listo para atacar de nuevo.

“¡Aquí viene!”.

“¡Sí!”.

Ellas alistaron sus armas…

…y lo último de la salud del calamar cayó víctima del veneno.

““¡¿Eh?!””.

Se convirtió en luz, desapareciendo.

La luz limpió el agua.

Las partículas resplandecían como luz solar, moviéndose entre las corrientes, y pronto se desvanecieron.

“…………Bueno, qué anticlimático”.

“…………y que lo digas”.

Ninguna había sentido que esta victoria fuera satisfactoria.

Aun así, ganar es ganar. Un círculo mágico azul oscuro apareció frente a ellas.

“¿Entramos?”.

“¿No habrá alguna recompensa?”.

“Uh… supongo que sí. ¿Quieres que vaya a nadar un poco?”.

“Por favor”.

Sally se fue a bucear.

El veneno se había ido, y ahora podía explorar a sus anchas.

“Si Syrup fuera una tortuga marina, podría haberle pedido que ayudara”.

Pero todo lo que podía hacer era ver a Sally nadar hasta que regresara.

“Sólo un tentáculo de calamar”.

“¿Y las medallas?”.

“Uh… no pude encontrar ninguna. Busqué bastante entre todo el coral. Y dudo que las recompensas dropearan en un sitio tan difícil de encontrar”.

“Cierto…”.

Pero no conseguir medallas era una lástima. Ellas entraron al círculo mágico.

Habían asumido que esto las llevaría a la cima del acantilado de antes, así que se sorprendieron de aparecer bajo el agua.

“¡¿C-Cómo voy a respirar aquí?! ¡Esto es malo!”.

“Uh, espera. ¡Maple! Podemos respirar aquí”.

“¿Eh? Oh. Tienes razón…”.

Ambas estaban hablando con normalidad.

Podían sentir el agua a su alrededor, pero no se estaban ahogando.

“¡Qué misterioso!”.

“¿Estas son las ‘tranquilas profundidades azules’?”.

Sin duda, era un sitio tranquilo.

Si se mantenían en silencio, el único sonido audible serían las ocasionales burbujas.

Este parecía ser un fondo marino bastante cerca de la superficie.

La tranquilidad del azul a su alrededor era casi soporífera—pero había un cofre azul puesto entre el coral.

“¿Te importa si hago los honores?”.

Dentro había dos medallas y dos pergaminos.

Sally tomó un pergamino y leyó la descripción.

“¿Qué skill es?”.

“Océano Antiguo. Te pide tener al menos una skill de agua… y te deja invocar aquellos peces con auras azules de antes”.

Habían visto más que suficientes de esos durante su batalla contra el calamar.

Sally siguió leyendo. Como sospechó, su ataque de agua azul causaba un debuff de un 10 por ciento en Agility.

No era una skill que ayudara mucho a Maple, pero a Sally le daría más opciones.

Habían resuelto el acertijo en la superficie para llegar aquí. Eso había debilitado al jefe y cambiado las recompensas por su victoria—pero ellas no tenían forma de saberlo.

“Uh… ¿Hidra no cuenta como skill de agua?”.

“Voy a suponer y diré que no es una skill de agua”.

“Me lo imaginaba”.

Maple lo intentó, pero fue incapaz de adquirir la skill.

Por ello, la puso en su inventario, guardándola para otro día.

Cerraron el cofre y se sentaron.

Había sido una larga batalla, y habían terminado de explorar las ruinas. Estaban exhaustas.

Y habían conocido a Kanade esa mañana.

Había sido un día muy ocupado.

“Quizás no sería malo que pasemos un día relajándonos”.

“Ah-ha-ha… tal vez”.

Si alcanzaban su meta de medallas a tiempo, quizás podrían tomarse el séptimo día de descanso.

Por el momento, simplemente se quedaron dormidas.

Este era el sitio perfecto para una siesta.

“Descansemos… un rato…”.

“Sí…”.

El abrazo del océano hacía que esta fuera la mejor cama que habían encontrado hasta ahora.