Kuma Kuma Kuma Bear (NL)

GRACIAS A UNA MISTERIOSA CHICA que se vestía de oso, me recuperé de mi enfermedad. Nunca pensé que me liberaría de mi sufrimiento. Siempre pensé que eso pasaría cuando falleciera. Nunca pensé que volvería a los días en que vivía feliz con mis hijas. Nunca podría agradecer lo suficiente a la chica vestida de oso, Yuna.

Cuando le dije que quería compensarla, sonrió y dijo algo completamente ridículo.

“Quiero que ustedes dos vivan juntos por el bien de Fina y su hermana”.

Gentz ​​realmente nos había estado ayudando desde que mi esposo falleció. Me preparó medicamentos cuando me enfermé y recomendó a mi hija para trabajar. Trabajé con él durante mis días de aventurera, así que no era como si no lo conociera. Habíamos llegado a confiar en él estos últimos años. Fue bueno con mis hijas y las cuidó. Si alguien me preguntara si lo amaba, no sabría qué responder. Si alguien me preguntaba si no me agradaba, podría decir que no. Independientemente de eso, me alegré cuando Gentz ​​realmente me dijo que me amaba. En ese momento sentí que también lo amaba.

Mis hijas bendijeron nuestro matrimonio. Me sorprendió lo feliz que parecía Gentz ​​cuando eso sucedió. Buscamos un lugar donde los cuatro pudiéramos vivir y nos mudamos a una nueva casa.

La mudanza pasó rápidamente gracias a Yuna. Ella realmente no estaba haciendo nada más que cuidarnos. Incluso si quisiera devolverle el dinero, no sabía cómo podría hacerlo. Por supuesto, no consideré casarme con Gentz ​​como una forma de devolverle el dinero. Quería que nos casáramos porque pensaba en nosotros. Salvó a mi hija de los monstruos y compartió su comida con nosotros. Mis hijas y yo estábamos en deuda con ella hasta un punto que nunca podríamos pagar, excepto poco a poco.

De todos modos, como estaba mejor, necesitaba empezar a trabajar. Solo teníamos una cantidad limitada de dinero. Gentz ​​estaba trabajando en el gremio de aventureros, pero la compra de la casa le había gastado los ahorros. Tampoco podíamos apostar a que ninguno de nosotros se enfermara en el futuro. Necesitábamos algo en reserva si eso sucedía.

“Quizás trabajé como aventurera”, les dije a todos mientras comíamos. “Puedo matar lobos, así que estaba pensando en aceptar misiones de menor rango”.

Yo era una ex aventurera. Podría enfrentarme a un lobo por mi cuenta. Eso aliviaría nuestras finanzas y nos permitiría acumular algunos ahorros. Pensé que era una gran idea cuando se lo dije a todos, pero todos estaban en contra.

“De ninguna manera. No te dejaré hacer algo tan peligroso”.

“Está bien. Gentz, sabes tan bien como yo que al menos puedo matar lobos.”

“¿Cuántos años crees que han pasado desde que te retiraste como aventurera? Tienes una brecha laboral. ¡Es muy peligroso!”

Gentz ​​estaba extremadamente en contra.

“Así es, mamá. Es peligroso.”

“Mamá, no puedes hacer nada aterrador”.

Mis hijas se aferraron a mí de izquierda a derecha.

“Estará todo bien. No haré nada imprudente. Además, necesitamos el dinero”.

“¿Estás planeando morir y dejar a tus hijas atrás? ¿Es eso lo poco que confías en mí para ser el sostén de la familia?”

“Eso no es lo que estoy diciendo. Usamos mucho dinero para la mudanza y probablemente necesitemos más de aquí en adelante”.

“Trabajaré”, dijo Fina. “Hablaré con Yuna y conseguiré mucho trabajo de carnicería”. Ahora incluso mi hija ha comenzado a decir ese tipo de cosas.

Hice todo lo que pude para persuadirlos, pero Gentz ​​se enojó, mis hijas rompieron a llorar y terminamos con una difícil comida. Teniendo en cuenta la oposición de todos los miembros de mi familia, renuncie a ser una aventurera, y llegamos a un acuerdo de que encontraría un trabajo a través del gremio de comerciantes.

Todos eran unos incurables preocupones.

Al día siguiente, me dirigí al gremio de comerciantes en busca de trabajo. Me encontré con Yuna afuera. Ella me preguntó por qué estaba en el gremio, así que le expliqué nuestra reunión familiar. Dijo algo increíble.

“Tiermina, ¿estarías interesada en trabajar para mí?”

Me dijo que estaba comenzando un negocio y me invitó a bordo. Fuimos a la casa de Yuna para hablar de los detalles. Siempre me sorprendía la casa de los osos, sin importar cuántas veces la viera.

Quería vender huevos. Además de eso, ya compró un terreno cerca del orfanato y había construido un edificio. Al parecer, iba a preparar los pájaros y empezar a traer toneladas de ellos. La escuché en estado de shock. ¿No se suponía que ella era una aventurera?

A pesar de que seguía diciéndome: “Estoy haciendo esto por mí, ya que solo quiero comer huevos”, sabía que realmente lo estaba haciendo por los huérfanos. Ella es una niña realmente buena. Esta chica de buen corazón y con traje de oso salvó a Fina, me ayudó y nos dio a Gentz ​​y a mí el empujón que necesitábamos. Por eso acepté el trabajo de inmediato. Quería pagar incluso la cantidad más pequeña de mi deuda y ayudar a Yuna mientras hacía todo lo posible por hacer esto por los huérfanos.

Cuando fui al gremio de comerciantes y hablamos de los detalles, me di cuenta de que esto implicaría una gran cantidad de dinero. Independientemente de eso, Yuna trató de confiarme todas las ventas. Estaba feliz de que ella tuviera confianza en mí, pero eso era demasiado dinero. Al final, distribuimos las ventas depositándolas entre mi tarjeta de gremio y la de Yuna. Administraría el dinero para los salarios y los gastos necesarios. El resto de las ventas se pondrían en la tarjeta del gremio de Yuna.

Me preguntaba si Yuna simplemente no sabía cómo manejar el dinero, pero mientras la veía hacer todo, me di cuenta de que no estaba haciendo esto para obtener ganancias. Si le preguntara al respecto, estoy seguro de que me habría dicho que lo estaba haciendo por los huevos. Esa era la chica de buen corazón que era.

Con eso, comencé mi trabajo. Al principio no había muchas aves, pero Yuna las trajo de la nada y la población comenzó a aumentar constantemente. Los huevos se podían vender a un precio alto mientras no hubiera muchos, pero cuando aumentaba la oferta, su precio también bajaba. Teniendo en cuenta eso y la mano de obra, pensé que habría sido más fácil mantener la oferta baja y venderlos con un margen de beneficio. Sin embargo, Yuna sonrió y me dijo que, si hubiera más huevos y fueran más baratos, todos podrían comerlos.

Según la lógica de Yuna, si los huevos eran valiosos, existía la posibilidad de que atrajeran a los ladrones, y eso potencialmente pondría a los huérfanos en peligro. Por otro lado, si los huevos fueran baratos, no habría ningún incentivo para robarlos y no estaríamos poniendo en riesgo a los huérfanos.

En lo único que pensaba eran en los huérfanos y en cómo hacerlo para que cualquiera pudiera tener acceso a los huevos. ¿Esta chica tenía realmente quince años? Si me hubiera dicho que era la hija de un comerciante, probablemente le habría creído. Era una niña de buen corazón y una amiga importante para mi hija. Trabajaría tan duro como pudiera para pagar incluso una pequeña parte de mi deuda con ella.

Pero como ella estaba pagando mi salario, ¿realmente se lo estaba pagando?

Bueno, yo también tengo trabajo hoy. Es hora de poner todo mi empeño.