Kuma Kuma Kuma Bear (NL)

MI PRÓXIMA PARADA fue la residencia Fochrosé. No me importaba Cliff, pero quería invitar a Noa a comer pudín. Le dije al guardia que estaba frente a la puerta la razón general por la que quería ver a Noa. El guardia ya me conocía y me dijo que esperara. Un poco más tarde, la propia Noa llegó corriendo desde la puerta principal.

“Yuna”.

Bomph. Noa se abalanzó sobre mi pecho. Pero el traje de oso absorbió el impacto.

“Cuánto tiempo sin verte, Noir”.

“Puedes llamarme Noa. Bueno, ¿tenías alguna razón para querer verme? Aunque no la tengas, me alegro de darte una cálida bienvenida”.

“Te traje un dulce, así que quería ver si lo probarías”.

“¿Un dulce? Eso suena delicioso”.

Tirando de mi brazo, Noa me llevó a una habitación.

“Bueno, entonces, ¿qué tipo de comida es?”

“Es un postre hecho con huevos de kokekko”.

Saqué el pudín del almacén de osos. Por supuesto que no pude olvidar la cuchara.

Noa tomó la cuchara y comió un bocado de pudín.

“Es delicioso.”

“Me alegro de que te guste.”

“Esta es la primera vez que como algo tan bueno”.

“Estás exagerando.”

“No, en absoluto. Esta es la primera vez que pruebo algo tan meloso, frío, dulce y delicado”.

“Bueno, a las mujeres y los niños tienden a gustarles esos sabores, supongo”.

Noa no solo me estaba halagando, realmente parecía saborearlo mientras comía.

“Oh, parece que ya me lo comí todo”.

La taza ya estaba vacía. Me miró en silencio y llena de codicia.

“Solo uno más, está bien”.

“Gracias.”

Cuando le entregué otro pudín, alguien llamó a la puerta.

“Voy a entrar, Noa. Escuché que Yuna vino.”

Cliff entró en la habitación.

“Perdón por venir”, dije.

“No me importa. ¿Qué están haciendo ustedes dos?”

“Yuna está compartiendo un dulce que hizo conmigo que se llama pudín”.

“¿Pudín?”

Noa tomó un bocado de su pudín recién adquirido. Sonreía como una niña pequeña. Eso solo justificaba venir aquí.

“¿Es realmente tan bueno?” Preguntó Cliff, mirando la sonrisa de su hija.

“Sí, está delicioso”.

“Noa, ¿tendrías la amabilidad de dejarme comer algo?”

“De ninguna manera”, Noa lo rechazó de plano.

“Noa”.

“No. Fue un regalo de Yuna”.

“¿Yuna?”

Cliff me miró con avidez. Simplemente no estaba bien que un adulto me mirara así.

“Agh, ya está bien. Hágame saber lo que piensa cuando haya terminado. Todavía es un prototipo, por lo que aún no he ajustado el sabor”.

“¿Esto es solo un prototipo?” dijo Noa. “Pero ya es mejor que cualquier otro dulce que conozca”.

“Bueno, lo llamo un prototipo, pero solo necesito ajustar la dulzura”.

Le pasé un pudín a Cliff, quien le dio un mordisco.

“¿Qué es esto?”

Su rostro cambió.

“Nunca antes había probado un dulce tan delicioso, ni siquiera en la capital real”.

¿Quizás este mundo no tenía muchos dulces geniales, entonces? Bueno, supongo que no podrían evitarlo si fuera tan difícil conseguir huevos. Las cucharas de Cliff y Noa nunca dejaron de moverse.

“Gracias por el regalo, Yuna. Fue muy bueno.”

“¿Lo estaba? Qué bien. ¿Hubo alguna parte que hubieras querido mejorar?”

“No, no creo que tenga una sola falla”.

“Estaría bien incluso si me dijeras que lo quieres un poco más o menos dulce”.

“Para mí, creo que me gustaría un poco menos dulce. El primer bocado es delicioso, pero comienza a volverse abrumador después de un tiempo”.

“¿Tú crees? Sin embargo, pensé que estaba delicioso”, dijo Noa.

“Bueno, los paladares varían entre adultos y niños y, después de todo, entre géneros. Voy a usarlos a ambos como referencia”.

“¿Vas a abrir una tienda o algo así?”

“No tengo la intención de hacerlo ahora. Es solo que estaba pensando que podría ayudar a los huérfanos en sus futuras carreras si, por ejemplo, querían cocinar o hacer postres en lugar de criar pájaros”.

“¿Estás pensando tan lejos?”

“Solo estaba pensando en cómo, si hubiera un negocio, podría comer un pudín sin tener que esforzarme por prepararlo yo misma”.

“Entonces, ¿estás guiando a los niños? Eres un adulto mucho mejor que yo”.

Recogí las tazas vacías y las puse en el almacén de osos.

“Bueno, entonces, ¿hay algo más que necesites?”

Había venido específicamente a la habitación de su hija para encontrarse conmigo, y dudaba que hubiera venido solo a verme.

“Sí, tengo un favor que pedirte. ¿Podrías acompañar a Noa a la capital real por mí?”

“¿A la capital?”

“Sí, tenemos que asistir a la celebración del cuadragésimo cumpleaños del rey, pero alguien me dio una montaña de trabajo por hacer, y sospecho que no podré salir hasta el último minuto. Si eso sucede, estaremos en un itinerario muy estricto y preferiría no hacer pasar a mi hija por eso”.

“Cuando dices que alguien te causó mucho trabajo… no estás hablando de mí, ¿verdad?”

“Estoy agradecido, de verdad lo estoy, pero es verdad”.

Esa fue una acusación falsa en el mejor de los casos. El asunto del orfanato fue todo el descuido de Cliff como Lord. No fue mi culpa en absoluto. Dado que fui yo quien descubrió el crimen, realmente debería agradecerme.

Pero la capital real, eh.

“¿Habrá otros escoltas? ¿Cómo iríamos allí?”

Si hubiera otros acompañantes, consideraría rechazarlo, ya que sería una molestia. Viajar en carruaje sería aún más doloroso.

“Solo con la que derribó a la serpiente negra, creo que serás más que suficiente. Y tienes tu bestia convocada para el transporte, ¿no es así?”

“¿Eso significa que puedo montar los osos?” Noa soltó un estallido de alegría.

“Escuché que tus invocaciones son más rápidas que los caballos. Si ese es el caso, puedes correr si encuentras algún peligro”.

De todos modos, quería ir a la capital, así que no tenía motivos para negarme.

“Bueno, entonces, ¿cuándo nos vamos?”

“Si quieres ir temprano, mañana debería funcionar bien. Estoy seguro de que Noa quiere ver a su madre más temprano que tarde”.

Ahora que lo mencionó, no había visto a su madre en la casa antes. Nadie la mencionó, así que asumí que había fallecido, pero supongo que estaba equivocada.

“¿Tu mamá vive en la capital?” Le pregunté a Noa, que parecía emocionada.

“Ajá, ella trabaja allí”.

“En ese caso, ¿quieres salir mañana?”

“¿De verdad?”

“Quieres ver a tu mamá tan pronto como puedas, ¿verdad?”

Terminé aceptando el papel de escolta de Noa a la capital.

“En ese caso, ¿podrías esperar un momento, Yuna? Tengo algo que me gustaría que le llevaras a mi esposa”, se fue Cliff y luego regresó con dos cartas y una caja grande. “¿Podrías entregarle esto a Ellelaura?”

“¿Qué es eso?” Señalé la caja.

“Dentro se encuentra la espada del rey goblin que me diste. Si ocurre algo inesperado, dáselo a Ellelaura. Escribí los detalles en esta carta, para que ella sepa qué hacer cuando se la entregues. Además, entrega esta carta al gremio de aventureros. Les he pedido que traten esto como una misión”.

Dejé la carta y la caja con la espada del rey goblin en el almacén de osos.

“Espero verte mañana, Yuna”.

“Si, también.”

Dejé la residencia del Lord para prepararme para mañana.