Otonari No Tenshi (NL)

Volumen 6

Capitulo 1: El despertar De Tenshi-sama

El cantar de las aves podía escucharse en cualquier parte, Amane retomó su conciencia lentamente desde un letargo dominado por una cómoda calidez, levantó los parpados con algo de resistencia al querer dormir aún más.

Al corroborar lo que había dentro de su campo de visión al acabar de despertar, se percató de la luz que entraba entre las cortinas, además de una calidez a su lado que normalmente no habría. Ese calor le hacía recordar a cuando se apagaba el aire acondicionado gracias al temporizador, pero la calidez en su pecho no era desagradable.

Al abrazar esa calidez mientras la pesadez se apoderaba de su cuerpo pudo percibir un dulce aroma, y le dio la sensación de escuchar una pequeña voz dulce de “Nn” que no perdería ante su aroma.

Al bajar la mirada hacia su brazo, allí estaba un rio color lino que no estaba acostumbrado a ver al despertar, De seguro fue una buena decisión no levantar la voz de inmediato, al ver a Mahiru durmiendo plácidamente en su pecho en lugar de levantar la voz dejó salir un pequeño suspiro.

(… Ahora que lo pienso ayer dormimos juntos)

Como acababa de recordar no podía salir de un brinco, pero eso no cambiaba el peso para su corazón aun acabando de despertar.

Ton, ton, ton, pudo sentir dentro de su pecho el sonido de corazón y sintió difícil respirar, pero al ver como Mahiru dormía tranquilamente los latidos de su corazón comenzaron a retomar la tranquilidad, respiró profundamente para tranquilizarse, y volvió a ver a Mahiru dormida. Estaba sonriendo cual si estuviera tranquila y feliz, le dejó una gran impresión al verla sonreír dormida.

(… En serio, indefensa y linda)

No sería una exageración decir que era la expresión de un ángel durmiendo, además de que era tan pura que sentía vergüenza que le llamaran ángel, si se lo dijera directamente seguramente se molestaría, pero si era dentro de él mismo podría decirlo cuantas veces quisiera, si se lo susurrara ahora posiblemente no se daría cuenta.

“Que linda” pensaba mientras la observaba, y con la mano libre acarició gentilmente su cabeza. Continuó acariciando su cabeza como si estuviera formándose al aro del ángel, y movió un poco el brazo que tenía entumecido por prestárselo como almohada cambiando un poco su postura, al hacerlo así podía ver mejor el rostro de Mahiru.

Si podía continuar viendo su rostro al dormir, algo como tener el brazo entumecido era un pago barato. Mahiru aún no daba señales de que fuera a despertar mientras sonreía, Amane la observaba sin aburrirse mientras acariciaba su suave mejilla… cuando de pronto llamaron a la puerta.

— Amane, ¿estás despierto?

La voz contenida del otro lado de la puerta era de su padre.

(¿Qué pasa?)

De seguro habría venido a despertarlo, pero si Amane respondía estaba la posibilidad de que despertara a Mahiru, le dio pena el despertarla cuando parecía dormir tan cómodamente, y desde el punto de vista de Amane preferiría observarla un poco más. Aunque diciendo eso si no respondía que estaba despierto de seguro entrarían a la habitación, estaba dudando en que es lo que debería de hacer… pero antes de que pudiera llegar a una respuesta la puerta se abrió.

En dirección a la puerta pudo ver la acostumbrada figura de su padre, y el rostro de Amane se puso tenso, en cambio, Shûto al verlo en la cama se quedó con los ojos bien abiertos, y dejó salir un “oya” con una pequeña sonrisa. Ah, le va a decir a Shihoko y después se van a burlar, por un instante Amane se llenó de determinación, y tras rendirse llevó uno de sus dedos a sus labios, aunque no dijera nada estaba claro que era lo que quería decir, Shûto con una alta capacidad de comprensión asintió ante el gesto de Amane, mientras sonreía lo despidió moviendo la mano y salió lentamente de la habitación.

(Solo espero que no lo malinterprete…)

Una pareja de novios estaba durmiendo en la misma cama, de seguro era algo para malinterpretarse con facilidad, aunque hayan comenzado a salir y hubieran pasado la noche juntos en la misma habitación, tenían una relación inusualmente saludable en la que apenas se habían besado, pero no había manera de que sus padres superan hasta donde habían avanzado. No, para empezar Shûto no era de las personas que se metían demasiado en los asuntos de otros, pero aun así lo que era vergonzoso era vergonzoso.

Continuó acariciando el cabello de Mahiru mientras se preparaba para lo que le dirían después, cuando notó algo…. era algo inusual que Mahiru con un estilo de vida muy correcto no se despertara.

—… Nn.

Mahiru acercó su rostro al brazo de Amane buscando calor mientras dejaba salir un pequeño sonido por su garganta, le pareció linda, pero si continuaba moviéndose podría terminar por despertarla por completo, así que dejó de acariciar su cabeza. Se suponía que el aire acondicionado ya se había apagado, pero Mahiru no se alejaba de Amane frotando su mejilla contra él, le había dicho que era alguien que se enfriaba con facilidad, y al notar como ella acercaba sus pies a los suyos pensó que podría ser cierto después de todo. “entonces anoche debió de tener mucho frio” se arrepintió mientras le respondía rozando los pies con el de ella y rodeándola con el brazo hacia su espalda sintiendo su calidez directamente.

Se sintió bastante feliz al poder compartir así la calidez de sus cuerpos y al tocar gentilmente su suave cuerpo, en esta ocasión sintió como se movió, volteando a verlo lentamente.

Sus ojos color caramelo se quedaron viendo fijamente el rostro de Amane, su expresión aún era somnolienta, lo que le hizo verse inusualmente más infantil.

— Perdón, ¿te desperté?

Al acariciar su cabeza ella sonrió con esa expresión somnolienta y luego volvió a cerrar los ojos, dejando que continuara mientras parecía serle placentero. “Está medio dormida” pensó, y al recorrer suavemente la línea de la mejilla de aquella linda Mahiru medio dormida, ella dejó salir un pequeño “Nmm”

(… Se deja consentir mucho cuando se acaba de despertar)

Era adorable, y sin querer terminó acariciándola, pero después de que pasaron cinco minutos por fin parece que su conciencia regresó a la realidad abriendo los ojos. Una vez que Amane corroboró que se hubiera despertado le respondió con un “buenos días” y le dio un ligero beso en la mejilla, Mahiru se petrifico al punto de poder decir que fue algo divertido de ver.

—.. ¿He? ¿Amane-kun…? Po… ¿Por qué…?

— ¿No te acuerdas? A pesar de que tuvimos una noche tan caliente.

Parece que no terminaba de reaccionar tras despertar, así que intentó decirlo de una manera que podría malinterpretarse, por cierto, no fue una mentira, no es como si fuera una noche apasionada, más bien era una noche de clima cliente, la verdad es que tenían el aire acondicionado encendido, pero no dijo eso.

Pasaron la noche juntos, en cuanto dijo eso Mahiru volteó a verlo con un “¿He….?

¿He…?” y después corroboró como se veía, puede que su ropa estuviera un poco desalineada, pero aun así no habían rastros de que hubieran echo nada indecente, bueno, realmente no pasó nada por lo que si pensara lo contrario sería un problema.

— Es broma… ¿No hicimos nada verdad?

— Ah… si…

— Bueno, aunque es cierto que te acabo de besar en la mejilla.

Un beso de buenos días de seguro estaría dentro de lo permitido, al sonreírle Mahiru se puso completamente roja, le regresó una sonrisa después de susurrar “demasiado estimulo desde temprano”

—… Parece que dormiste bastante bien pero ¿Cómo dormiste?

Parece que por fin se había despertado por completo y le preguntó mientras la abrazaba y Mahiru sumió su rostro en sus brazos como si le avergonzara.

—.. Este… fue bastante tranquilo estar en tus brazos.

— ¿No se te aceleró el corazón?

— Bu… bueno si pero… es tranquilizador.

“Incluso ahora tengo el corazón acelerado” susurró mientras que Amane aflojó un poco su abrazo para verla.

— Si te parece tan tranquilo ¿Qué te parece si dormimos todos los días así?

— E… eso sería… este…

— Es broma.

Lo dijo sabiendo que Mahiru dudaría, pero no podía decirlo de verdad, para Amane si durmieran así todos los días le dio la sensación de que su cordura terminaría muriendo, incluso ahora pudo contenerse muy apenas, tenía miedo de que si durmieran así todos los días podría terminar intentando ponerle una mano encima.

Dijo que era una broma diciéndoselo a si mismo también al no tener plena confianza en su cordura, cuando se percató de que Mahiru estaba agachada. ¿Se había burlado demasiado de ella? Cuando le tocó ligeramente en la espalda, ella levantó su rostro para ver a Amane a la cara. Sus mejillas estaban teñidas de rosa.

—.. Si… si es de vez en cuando… entonces…

Susurró con una tenue voz, y la cabeza de Amane se quedó en blanco por un instante.

“Si es de vez en cuando…”

Es decir que no le desagradaba el hecho de quedarse a su lado, incluso que quiere dormir a un lado de Amane.

— ¿Lo dices en serio?

— Se…. se puede…. quedarse a dormir… si somos novios…. ¿verdad?

—… Bueno si pero…

Si lo decía de esa manera no podía responderle nada, puede que las parejas de preparatoria normalmente se quedaran a dormir en la casa del otro, al contrario, puede que Amane y Mahiru no lo hicieran por su lento avance, Parece que Itsuki se queda frecuentemente a dormir en casa de Chitose, entonces no sería raro que hicieran cosas que Amane y Mahiru desconocían. Pero el problema es que Amane como hombre no podía evitar esperar algo, no había nada que hacerle Mahiru se puso completamente roja como si se hubiera dado cuenta de lo que estaba pensando Amane, y se le quedó viendo con lágrimas en los ojos.

— Este… no… No es como si deseara eso… es solo que… estoy feliz por poder pasar mucho tiempo contigo Amane-kun…

—… Oh…

—… ¿No quieres?

— No hay manera de que no quiera, al contrario, es algo para estar feliz.

Intentó negarlo con fuerza cuando lo vio hacia arriba insegura dejando salir lo que pensaba. Mientras se arrepentía por hacer que Mahiru temblara por la vergüenza, terminó tragándose sus deseos y le acarició la cabeza.

—… Bu… bueno, puede que después…

— Si.

— Vamos, ya va siendo hora de que nos preparemos, también tienes que cambiarte…

— Es cierto.

Por ahora terminaron con el tema, si continuaba pensando mucho en el tema no podría terminar por ser perjudicial. Respiró profundamente para tranquilizarse y se alejó de Mahiru, y ella se bajó avergonzada de la cama volteando a verlo, ¿Qué pasa?” en el instante en que lo pensó, ella de golpe acortó su distancia.

Sintió su dulce aroma, y una sensación suave en sus labios.

Ambos se alejaron rápido, en cambio sus cabellos color lino se frotaron en su mejilla.

— Te burlaste mucho de mí, así que me toca.

Dijo eso con el rostro rojo conteniendo la vergüenza y dejó a paso rápido la habitación, Amane se le quedó viendo y después de eso se dejó caer sobre la cama.

(Parece que necesitaré algo de tiempo para tranquilizarme)

Amane se le quedo viendo al techo hasta que el calor en su cuerpo se enfriara mientras sufría por lo inusualmente atrevida que era Mahiru.

— Ara, Amane, buenos días.

Sus padres ya se encontraban sentados para el desayuno. Pudo ver esos acostumbrados cabellos color lino desde la cocina junto al sonido de los utensilios, de seguro estaría haciendo el prometido Omurice.

—… Buenos días.

— Vamos, siéntate, siéntate, Mahiru-chan está haciendo el desayuno.

— Oh…

Amane tomó asiento dudando, de seguro Mahiru se apresuró a preparar las cosas desde antes, Puede que haya sido conveniente que justo antes había prometido hacerle ese Omurice, y parece que lo estaba haciendo para el desayuno.

— En serio que se llevan bien.

—… ¿Es normal si están saliendo verdad?

— Bueno, es cierto, pero aun así superan lo normal que se llevan bien una pareja, es como una esposa joven.

En cuanto Shûto dijo eso se escuchó en la cocina un plato cayendo en el lavavajillas. Fue bueno que no fuera un sonido de algo rompiéndose, pero de seguro se le había caído por la impresión.

— Ara, Mahiru-chan ¿estás bien?

— A, si, el plato no se rompió, lo siento, se me cayó…

— Está bien, cualquiera puede cometer errores.

“Aunque en parte fue por culpa de alguien…” Amane no pudo decirlo, solo decidió ignorarlo mientras veía a Shihoko sonreír. Aprendió durante sus 16 años de vida, en no meterse de mas, Shihoko parecía algo insatisfecha al ver a Amane así, pero siguió tranquilamente la petición de Shûto de “no te burles de ellos” para Amane eso fue un alivio.

Entonces, después de algo de tiempo el desayuno estuvo servido.

— ¿Y? ¿Ocurrió algo mientras no estábamos verdad?

Cuando Mahiru llegó a la mesa los cuatro platillos de Omurice ya estaban listos para comer, pero cuando estaba llevándose el primer bocado a la boca Shihoko lanzó una pregunta directa hacia Amane. Estaba completamente seguro que le preguntaría acerca de Mahiru con él anoche o algo por el estilo, pero le fue una sorpresa que se le preguntara de esa manera. Por ahora no podía hablar con comida en la boca, así que después de masticar bien y tomar algo de agua habló.

—… ¿Por qué dices eso?

— Cuando regresábamos actuaban diferente, pensaba que algo podría haber pasado.

— No puedes menospreciar los ojos de tus padres, es claro que notaríamos un cambio en nuestro hijo.

Podría ser de sentido común, pero parece que sus padres veían a través de él, era una mirada que parecía tener algo de preocupación, pero para Amane era algo que ya había superado, así que era nada para preocuparse.

— Nada realmente, cuando paseábamos terminé topándome con Tôjô.

— Ah, así que fue eso… por tu respuesta parece que ya todo pasó.

— Es cierto, ¿Cómo decirlo? Ya pasó, ya lo superé, no creo que sea algo para molestarse.

Incluso aunque recordara ese momento su pecho ya no dolía, aunque se topara de nuevo con esas personas, su corazón se mantenía tranquilo. Pero le dolió un poco el saber que si el tema se dirigiría a que posiblemente eso era porque Mahiru se encontraba a su lado.

— Parece que has crecido un poco, eso es algo bueno.

“Ya estoy bien” Shûto parecía más tranquilo, en el momento en que pasaron las cosas sus padres estaban bastante preocupados, por lo que han de pensar que ya no por qué estarlo más, cuando mucho ya parecía que cuando fue a la preparatoria ya se había recompuesto, pero aun así no podían dejar de estar preocupados.

Mientras que Shûto parecía más tranquilo, en cuanto salió el nombre de Tôjô en la conversación Shihoko puso una expresión como si estuviera atónita.

— Últimamente no lo he visto mucho, pero parece que el hijo de los Tôjô no ha cambiado mucho, sus padres dan un poco igual, pero parece que está en su etapa rebelde.

Shihoko conocía a muchas personas desde que tenía esa personalidad, posiblemente tendría conexiones de los que Amane ni siquiera podría imaginarse, por supuesto, también se relaciona con las personas del vecindario, por lo que había tenido la oportunidad de relacionarse con los padres de Tôjô. Amane también había tenido la oportunidad de verlos, pero eran recuerdos de cuando era su amigo, no es como si tuviera recuerdos de ellos disculpándose por lo que le hicieron su hijo o algo por el estilo.

— Quien sabe, la verdad no me interesa en relacionarme y no sé nada de él, posiblemente ya no vuelva a verlo.

— Esa manera de dejar pasar las cosas es tu punto fuerte,… si hubieras vuelto a pasarla mal hubiera terminado pensando que hubiera sido mejor que no regresaras a casa.

Habían prometido verse cuando menos una vez cada medio año, pero debido a que sus padres estaban un poco preocupados casi no le exigían que regresara a casa.

— Fui yo el que se decidió en regresar a casa… además, al final todo salió bien, lo volví a ver y ya todo quedó atrás.

Desde el punto de vista de Amane, puede que haya sido bueno que se viera con Tôjô en ese momento, no es como si hubiera echo algo malo como para tener que soportar el sufrimiento y salir huyendo, pero si se salvaba solo con huir entonces pensaba que bastaba con que huyera, pero el Amane de ahora logró enfrentarse a su pasado, más que continuar huyendo y que quedaran las marcas en su corazón, lo mejor sería enfrentarlo y terminar con todo, y ahora que lo había superado ciertamente su corazón ya no parecía flaquear.

Si fue gracias a personas como Tôjô que conoció a Mahiru, entonces al contrario, puede que tuviera que estar agradecido, puede que fueran desagradables, pero para el Amane de ahora eran existencias con las que estaba agradecido.

Ante ese Amane que no dijo algo tan sorprendente como eso se encontraba Shihoko mostrándole una suave sonrisa.

— Los niños siguen creciendo, en ese entonces estaba preocupada de que pudieras terminar rompiéndote… pero paree que ya no hace falta preocuparse.

— El amor vuelve a las personas fuertes después de todo.

— No digas frases tan cliché papá…

— ¿Pero es la verdad cierto?

—…. Bueno es cierto.

Gracias a Mahiru había logrado enfrentarlos directamente, había alguien que lo apoyaba, “Es el poder del amor” no podía decir algo tan vergonzoso como eso, pero es cierto que la fuente de Amane para actuar era el sentimiento de amor.

— Jaja, en verdad estoy feliz porque Amane también encontrara a una buena persona, para mí fue Shihoko-san.

—…. Ah… si…

Mahiru quien escuchaba la conversación en silencio se encogió ruborizada, Shûto y Shihoko se le quedaron viendo con una sonrisa.

— Amane confía mucho en ti Mahiru-chan, aunque estoy un poco preocupado que solo se la pase siendo cuidado.

— Ah, no, yo… Amane-kun siempre me está cuidando, siempre me apoya.

Esa debería de ser su frase. Pero Mahiru solo decía lo que en verdad pensaba mientras veía a Amane.

— Entonces me alegro… Amane, apoya a Shiina-san y no solo dependas de ella.

— Lo sé, siempre está a mi lado, es evidente que siempre la apoyaré.

Aunque no se lo dijera tenía la intención de vivir siéndole de apoyo a Mahiru. No quería que pensaran en el cómo en una persona que les causa problemas a las personas que se le acercan ayudarle, es cierto que sin Mahiru Amane se convertiría en un inútil, pero no tenía la intención de volverse un inútil como humano. En esta ocasión Amane quería ser el que apoyara a Mahiru, le prestaría su hombro cuando pasara momentos difíciles, le tendería la mano.

Sus padres rezaron que fuera ella con quien caminara tomado de la mano, de seguro sería la mayor felicidad para Amane, no podría caminar aun lado de Mahiru solo con media determinación, y al verla a su lado pudo ver como se puso roja mientras temblaba, si la veía cerca de las lágrimas, posiblemente seria porque no podría estar más avergonzada, en el momento en que su mirada se topó con la de Amane la desvió, sin dudas estaba avergonzada, pero no es como si pudieran huir, así tomo su manó por debajo de la mesa, y después de parecer un poco sorprendida, ella también tomó su mano.

— Iyaa, que linda, si no fuera porque tengo que ir a trabajar la cuidaría con todo lo que tengo.

Shihoko mostró una gran sonrisa al ver da Mahiru, es tal y como ella lo dijo, si no fuera porque tiene que ir a trabajar de seguro se la pasaría todo el día con Mahiru.

— Váyanse a trabajar los dos de una vez.

— ¿Durante ese tiempo se la pasarán de acaramelados?

— Así es ¿algún problema?

Ya no importaba lo que le dijera, se iba a burlar, así que solo lo aceptó y notó como la mano de Mahiru temblaba, pero aun así no dejaba de tomarlo con fuerza. Posiblemente estaría feliz. Si fuera antes Amane lo negaría por completo, pero Shihoko se sorprendió de que al contrario, lo estaba admitiendo y después de eso sonrió con alegría…

— ¿Escuché bien?

— Cállate.

— Es algo bueno, parece que la primavera le llegó a Amane.

— Aunque ya es verano y hace calor.

— No quiero oír eso de ustedes que se la pasan como si estuvieran en su primavera todo el año.

Shihoko parecía divertirse mientras los felicitaba, y como a Mahiru no parecía molestarse terminó rindiéndose.

Sus padres salieron a trabajar, así que por ahora ambos se sentaron uno a un lado del otro sobe la cama de Amane. ¿Sería debido al lugar en el que se encontraban? A pesar de estar a la misma distancia de siempre Mahiru parecía más nerviosa que de costumbre, y al verla Amane terminó siendo consciente de eso de manera innecesaria, ambos tenían las mejillas enrojecidas, él también se sentía extraño.

— E… este… A… ¿Acaramelados?

Después de pasarla un rato repitiendo el verse mutuamente y desviando la mirada, Mahiru preguntó temerosamente, parece que le había llamado la atención esa palabra, y en cuanto lo dijo se puso aún más roja.

— ¿Nn? Ah, mis papás dijeron eso pero no hace falta que le busques mucho sentido, si me hubiera negado se hubieran burlado.

— E… eso puede ser cierto pero… es decir… ¿en verdad no estaremos acaramelados…?

— Ah, no, este… puede que quiera…

Es cierto que les había respondido así solo superficialmente, pero si Mahiru se lo permitía a Amane le gustaría estar “acaramelados” mientras pensaba “no es demasiado viniendo de mi” Mahiru asintió ligeramente “ah… si…”

Asintió con un gesto tímido mientras se enrojecía, al estar consciente de eso sonrió con amargura.

— Si no quieres la verdad no importa.

— No es eso, no es como si me desagradara, Si es Amane-kun, entonces… no importa como sea… lo haré.

— Ya veo.

— Pe. Pero… acaramelados… ¿Específicamente que….?

La pregunta de Mahiru invitó el silencio, antes ya habían platicado de algo parecido, mientras pensaba en eso dijo lo primero que se le vino a la mente.

—… Algo como besarnos.

— Algo como besarnos.

— ¿Algo como besarnos?

— ¿No solo versarnos?

— Ah, no, si hablamos más específicamente, abrazarnos, tomarnos de la mano…

siempre… lo hacemos…

Desde antes que salieran ya lo hacían pero ahora que salían estaban siendo conscientes de ello, y ahora que intentaban decir algo más específico realmente no sabría que decir, podría estar dentro del rango estar abrazados y besarse, pero no sabía si solo eso estaría bien, Estar demasiado juntos no era algo para hacer en la casa de sus padres, además para Amane quien quería cuidar de Mahiru con aprecio no quería que todo se perdiera solo por las acciones de un instante.

— ¿Qué deberíamos de hacer para estar más acaramelados?

—… ¿Por ahora nos juntamos más?

Se tranquilizó al saber que no era nada nuevo, pero aun así su corazón latía deprisa, ella asintió con un pequeño”… si”

Mahiru se acercó dudando un poco, y Amane extendió su mano como si la recibiera… y de esa manera llevo sus manos a la espalda y la parte de atrás de las piernas de Mahiru cargándola.

“Hyaa” se escuchó una linda reacción lo que lo hizo sonreír, mientras que sobre la cama Mahiru se encontraba sobre las piernas cruzadas de Amane.

— Así estoy bien.

—… Ah…si

— ¿No te gusta?

El cuerpo de Amane ya de por si parecía pequeño y delicado, movió la cabeza a los lados.

— E… eso no es… es solo… estando así… es como si Amane-kun me estuviera envolviendo.

— ¿Quieres que te envuelva?

Siguiendo las indicaciones lindas de Mahiru, Amane la rodeó con sus brazos, en ese momento Mahiru se puso completamente roja con lágrimas en los ojos, no tenía el derecho de decirlo pero Mahiru se ruborizaba con facilidad, se veía linda. Han pasado alrededor de dos meses desde que comenzaron a salir pero aun no estaba acostumbrada al contacto físico, en ese aspecto era nueva, pero era lo mismo para Amane, aunque su rostro no lo mostrara no cambiaba el hecho de que su corazón latía deprisa. Si en este momento Mahiru pusiera su oído en su pecho, de seguro de inmediato podría escuchar su corazón.

Era un poco vergonzoso que se diera cuenta que solo fingía mantenerse tranquilo, así que tocó la parte de atrás de su cabeza rezando que no lo escuchara. Se supone que el tacto no debería de ser la gran cosa, pero si a pesar de eso si su cuerpo tembló debió de ser por que ha de estar realmente nerviosa.

—… Solo te estoy abrazando.

— L… lo sé… mi corazón late deprisa… pero estoy feliz… me gusta que me abraces.

— Ya veo, puedo hacerlo siempre que lo desees.

Le susurró al huido y se vio claramente afectada, “en verdad que su debilidad son los oídos” sonrió un poco… y en cuando le acercó su aliento tembló aún más y se volteó de impulso, sus ojos estaban extrañamente húmedos, por lo que puede que se haya pasado.

—… Amane-kun.

— Perdón, perdón, fue sin querer.

— Solo porque me dan cosquillas…

“Eres cruel” hizo una mueca con los labios insatisfecha.

—… Hablaré del pasado que escuche hace poco de Amane-kun.

— Oh, eso sí sería un problema.

En el instante en que le dijo eso en el oído procuró no burlarse demasiado de ella. ¿Hasta dónde podría tocarla? ¿Cómo debería tocarla? No sabía esas cosas, así que intentó hacer algo sin dificultad, tomando su mano y poniendo la boca en la parte detrás de su cabeza, pero después de todo se sentía como si no fuera suficiente. A pesar de que se sentía completo al estar con ella, contrariamente allí se encontraba él preguntándose porque lo sentía insuficiente, honestamente estaba un poco intranquilo, quería tocar más a Mahiru, quería saborear más su suavidad, pensando en eso y en su cordura esto es lo máximo de contacto físico que podía hacer, así que después de todo se limitó a tocarla con gentileza. ¿Mahiru estaba avergonzada? Tenía incluso las orejas rojas.

(En serio que es linda)

A pesar de que era Mahiru quien iniciaba el contacto físico, últimamente era ella la que se ruborizaba antes era Amane el que se veía realmente afectado, pero ahora sentía como si las posiciones hubieran cambiado, Mahiru con movimientos contenidos tomó la mano de Amane cual si deseara ser tocada.

—…. Tu mano es muy grande.

— ¿Nn? Bueno, en general hay diferencia de estatura.

De manera general las partes de su cuerpo eran más grandes que las de ella, sus piernas en comparación eran más grandes y las palmas de su mano también, casi dos veces más grandes que las de Mahiru haciendo que sus manos se vieran más pequeñas.

— Me gusta tu mano Amane-kun… me gusta que me toques.

— Si dices eso te voy a tocar en serio.

Estaba consciente que fue una manera peligrosa de decirlo para su cordura, pero Mahiru no es como si pensara en lo que había pensado Amane, susurrando en voz baja “la verdad no me importa que me toques…” Que se descuidara de esa manera era inusualmente malo para él. Era linda diciendo cosas que un hombre no podría dejar escapar, y Amane llevó la mano al estómago de Mahiru mientras dejaba salir un suspiro. No le importó como Mahiru se movía cual si le dieran cosquillas, y con el dedo comenzó a acariciar lentamente alrededor de su ombligo. Tras estar al pendiente de ella dejó de mover su dedo.

— Si hago lo que me dices… ¿quiere decir que no importa que suba la mano desde donde estoy?

Aun no estaba ascendiendo, pero podría escalar facilmente, después de todo la mano de Amane era grande tal y como lo dijo Mahiru, de seguro podría envolverla con facilidad. Dijo aquello a propósito, y Mahiru se puso completamente roja como para pensar que podría emanar humo.

Mahiru al darse la vuelta tenia las mejillas rojas como un pulpo y Amane se rio sin importarle eso, pero no solo se reía, bajó a darle un beso en la mejilla.

— Está bien con esto para estar acaramelados.

— ..U… A… Amane-kun…

— Realmente no sé mucho de eso de estar acaramelados, pero cuando menos puedo tocarte de este modo.

Sería mucho pensar en aquella manera de tocarla cuando apenas han sido pareja por alrededor de dos meses, así que se contuvo, quería respetar las intenciones de Mahiru, pero se lo había dicho inconscientemente, así que se lo dijo una vez más para evitar que estuviera demasiado alerta.

— ¿Te había dicho antes que te dieras cuenta que soy un hombre verdad? Te voy a tocar en serio.

— U… pe… pero… Amane-kun, estas completamente rojo, ¿en serio podrías?

— Cállate.

Sabía que su rostro estaba rojo, también estaba consciente de que decía cosas vergonzosas, pero podría no entenderlo si no se lo dijera. Estaba preparado para ser rechazado, mientras sonreía con amargura, y Mahiru se dio la vuelta por completo abrazándolo con un ”gyuu” y Amane pudo sentir una sensación suave y un dulce aroma con fuerza.

—… Si en verdad quieres tocarme… es vergonzoso pero… te aceptaré.

Mahiru lo veía hacia arriba mientras susurraba con una voz tenue, ante esa atrevida y linda Mahiru que lo observaba, bien podría decirse que Amane se quedó en blanco.

Mahiru tenía una expresión de inseguridad, vergüenza y una pizca de expectativa mescladas ante la confianza que le tenía a Amane apoyando su cuerpo en él, seguramente tal y como lo dijo aceptaría cualquier cosa que Amane le hiciera, incluso si hipotéticamente él la derribara, de seguro lo recibiría con algo de vergüenza. Tanto así era el cariño y confianza que le mostraba con su actitud y expresiones. Ante Mahiru que le estaba ofreciendo todo la cabeza de Amane por fin comenzó a moverse un poco tarde, Movió su cuerpo, y lo primero que hizo fue besar a Mahiru.

“Nn” dejó salir un pequeño sonido, pero fue realmente cerca, mientras probaba la sensación de aquellos labios más suaves que los suyos abrazaba su suave y delgado cuerpo, no fue con la palma de sus manos la sintió con su cuerpo y después se alejó mientras observaba como Mahiru intentaba mover la boca con sus mejillas teñidas de rojo puso el rostro en su cuello.

—…. Así está bien.

Mientras procuraba no morderla, puso sus labios en la piel blanca del cuello de Mahiru, no había manera de que pudiera dejarle una marca, por lo que cuando mucho fue un beso, levantó la cabeza después de intentar desesperadamente detener su deseo sexual.

— Ara, Mahiru-chan, estas completamente roja ¿Qué sucede?

— N, no es nada…

A pesar de que trabajaban en lugares diferentes los padres de Amane llegaron al mismo tiempo, pero en cuanto vieron a Mahiru inclinaron la cabeza con extrañeza un poco preocupados. Mahiru se encontraba sentada en el sofá de la sala de estar con el rostro rojo, de seguro estaría así porque hasta hace un momento estaba besándose y tomando la mano de Amane, no es como si la hubiera atacado, pero desde el punto de vista de Mahiru aquello fue difícil de resistir, feliz y avergonzada, algo como eso, de cualquier manera le gustaría creer que era para estar felices pero…

— Amane, no me digas que…

— ¡Juro que solo no le puse una mano encima!

Cuando mucho fue al nivel de tocarse ligeramente y abrazarse, pero si superó por mucho la capacidad de Mahiru eso era solo porque era bastante primeriza. Amane tampoco podría hablar de los demás, aún era demasiado pronto para reponerse pero se había tranquilizado.

— “Solo” no le pusiste una mano encima… bueno, dijiste que estarían acaramelados.

— Fue algo saludable ¿no hay problema verdad?

— Déjame escucharlo todo.

— Cállate.

— Es injusto solo con Amane, yo también quiero estar acaramelada con Mahiru-chan.

— No, Mahiru es solo mía.

— Ara, maa.

Parecía que sería algo cansado una vez que Shihoko quería pedirle a Mahiru y ella parecencia feliz cuando Amane la rechazaba, pero aun diciendo eso era claro que no sería feliz si Shihoko monopolizara a Mahiru.

Mahiru se puso roja repitiendo en voz baja “Mahiru es solo mía” al verla así Shihoko insistió mas.

Shûto quien escuchaba la conversación a un lado terminó sonriendo

— ¿Entonces qué tal llevarnos bien como familia?

— ¿He?

— Vamos, ¿Shiina-san había dicho que quería que saliéramos todos juntos verdad?

Es cierto que les había dicho a los padres de Amane que quería que salieran todos juntos, pero no pensaba que fuera a mencionarlo en este momento, se quedó parpadeando con sus ojos color caramelo.

— Cuando volvamos a descansar Shiina-san y Amane aun estarán aquí, ¿salimos a alguna parte?

— ¡Es cierto! ¡Vamos a salir ya que estamos todos juntos!… ¿no quieren?

— E… ¡Eso no es…!

— Entonces está decidido, fufu, ¿A dónde podríamos ir?

Shûto preguntó en un tono alegre dirigiéndose a Shihoko mientras Mahiru algo temerosa solo podía encogerse, posiblemente se sentiría mal porque en verdad saldrían juntos tal y como se los pidió.

(…Bueno Mamá y papá también habían dicho que querían salir con Mahiru a alguna parte)

Era algo que le mencionaron a Amane, no había manera de que ellos pasaran el tiempo con alguien que les desagradara, para empezar en el instante en que la dejaron entrar en la casa era porque les había agradad mucho, no tenía sentido preocuparse por algo como salir a pasear juntos.

— Será mejor que te prepares, los dos te van a traer dando vueltas por un rato.

— No, es de agradecer y estoy feliz, nunca había salido con todos de esta manera…

¿Recordó a cuando era pequeña? Pudo ver un poco de soledad y tristeza en su fugaz sonrisa y su mirada, Shihoko como siempre continuaba son una sonrisa sentándose a un lado de Mahiru en el sofá, es decir, en el lugar opuesto a Amane, de esa manera la abrazó y acarició su cabeza.

— Mahiru-chan, ya eres parte de nuestra familia, así que puedes dejarte consentir todo lo que quieras.

— Incluso ya la cuidan mejor que a su propio hijo.

— Ara, ¿celoso?

— No, la verdad no importa si Mahiru está feliz.

Mahiru siendo abrazada por Shihoko sintió una vergüenza diferente a la de antes. Mahiru estaba feliz, incluso pensando que en un futuro podría llegar a llamarse también “Fujimiya” y por supuesto, para los padres de Amane era más que bien recibida. Aunque puede que haya mucho tacto, era un sentimiento complicado.

— Ya eres un adulto.

— ¿Me estás tomando por tonto?

— Claro que no, creo que has crecido como un hombre que desea que la persona que le gusta sea feliz.

— ¿Por qué dices algo tan evidente…?

— Fufu, son pocas las personas así, como se esperaba de nuestro hijo.

— Sí, sí.

De seguro no hay personas que odien que la persona que les gusta sea feliz, lo mejor es que sonría, si pudiera desear algo seria su felicidad, quería ser él quien la hiciera feliz, cuando mucho eso.

Amane volteó a ver a Mahiru quien se encogía avergonzada por el abrazo de Shihoko, y sus labios formaron una tranquila sonrisa.