Utsuro No Hako To Zero No Maria (NL)

Volumen 6

Capitulo 1: Perforacion A Los Quince

Parte 1

Escena 4: Perforación a los Quince 1/3

ORILLA DEL RÍO — ATARDECER

Un ancho río, visto desde el aire, está brillando en la luz de la tarde. Dos estudiantes de secundaria en su último año, DAIYA y KOKONE, destacan en el resplandor carmesí del ocaso. Caminan de la mano mientras miran hacia adelante.

KOKONE (MONÓLOGO)

Daiya y yo hemos estado juntos desde que puedo recordar.

DAIYA aprieta su mano.

KOKONE (MONÓLOGO)

Está presente en todos mis recuerdos.

Ella suelta su mano.

KOKONE (MONÓLOGO)

La única forma de no quedarnos en el pasado es separarme de él.

HABITACIÓN DE KOKONE — 17:00, HACE UN AÑO Y MEDIO

Los dos están sentados en la cama de KOKONE, todavía vistiendo sus uniformes de la escuela.

KOKONE

Mm… ahh…

DAIYA separa sus labios de los de ella. KOKONE está usando anteojos, y su cabello es negro azabache. Ella baja su mirada, avergonzada.

KOKONE (MONÓLOGO)

Es gracias a Haru-kun que mi relación con Daiya finalmente cambió. Sólo después de verme junto a Haru-kun Daiya se volvió consciente de sus sentimientos y me pidió que saliéramos. Pero en mi honesta opinión, le tomó demasiado tiempo llegar hasta aquí.

DAIYA entrelaza sus dedos con los de ella y comienza a acariciar el cabello de KOKONE con su mano libre. Su amable sonrisa encanta a KOKONE y ella presiona su cabeza contra el pecho de él.

KOKONE (MONÓLOGO)

Después de todo, siempre he estado enamorada de él, desde que jugábamos a la casita cuando niños. Estaba perfectamente consciente de mis propios sentimientos, y de los de él, a pesar de que él no se había dado cuenta aún.

DAIYA pone su brazo alrededor de KOKONE.

KOKONE (MONÓLOGO)

Antes de salir con Daiya, le dije a Rino que siempre lo había amado. Me lanzó una mirada suspicaz y me preguntó si eso era un amor romántico, pero yo definitivamente creía que sí. Al menos en mis recuerdos, siempre me he sentido así. Siempre he esperado que él correspondiese mis sentimientos.

La cámara retrocede para mostrar un plano completo de la habitación de KOKONE. El ambiente está silenciado. Alrededor hay esparcidos objetos café y blanco como su escritorio, un sistema de alta fidelidad y juguetes de peluche.

KOKONE (MONÓLOGO)

Mi habitación está saturada de Daiya. Cuando escucho canciones de amor, su rostro aparece en mi mente, y cuando leo un manga de romance, me identifico con los sentimientos de la protagonista hasta el punto de derramar lágrimas, a veces. A veces escribo “Oomine Kokone” en mi cuaderno cuando estudio, y me sonrío a mí misma. En esta

habitación siempre estuve pensando en Daiya.

DAIYA

Kokone.

KOKONE

¿Mmm?

KOKONE (MONÓLOGO)

Sólo hace poco, Daiya ha comenzado a llamarme por mi nombre de pila. Nunca olvidaré la primera vez que sucedió. Oh, su rostro rojo como un tomate ha sido marcado para siempre en mi memoria, desde ese entonces cuando fracasó miserablemente en decir mi nombre de pila de forma afable.

DAIYA

Te amo, Kokone. Siempre lo haré.

KOKONE

Mm. Te creo.

DAIYA sonríe alegremente como un chico inocente.

KOKONE sonríe en respuesta.

KOKONE (MONÓLOGO)

Realmente le creo, desde el fondo de mi corazón. No porque esté cegada por mi amor, sino porque puedo sentir que debe estar diciendo la verdad.

KOKONE pasa su dedo por los labios de DAIYA.

KOKONE (MONÓLOGO)

Renunciaría a todo por su felicidad.

ORILLA DEL RÍO — ATARDECER

KOKONE entra al río sin sacarse sus zapatillas.

KOKONE (MONÓLOGO)

Mi mundo era cálido. Cálido como el cuerpo de Daiya. Ese mundo amable en el que vivía brillaba ligeramente, tal como en una película francesa que vi una vez, y me hacía sentir como si estuviese rodeada de la felicidad más pura.

Paso a paso, KOKONE se adentra más en el río carmesí.

KOKONE (MONÓLOGO)

Pero estaba equivocada. No me di cuenta que otras personas no vivían en el mundo cálido en el que yo habitaba. No sabía que el mundo que otros veían podía ser frío, manchado, o violento, y que al entrar en contacto con los mundos de esas personas también—

Algo de basura flotando río abajo toca el cuerpo empapado de KOKONE.

KOKONE (MONÓLOGO)

Mancharía mi propio mundo.

DAIYA la sigue rápidamente hacia el río.

KOKONE (MONÓLOGO)

Daiya… no te ates a ti mismo con tu promesa de amarme para siempre. Para mí, tu felicidad es más importante que la mía. Haré lo que sea por ti, así que—

Es abrazada por un igualmente empapado DAIYA.

DAIYA

Kokone, no te preocupes. Me quedaré contigo.

KOKONE tirita con su húmedo abrazo.

KOKONE

Estás helado.

DAIY la suelta rápidamente.

KOKONE (MONÓLOGO)

Si evito que seas feliz, haré que sea más fácil para ti el dejarme, ¿está bien?

◇◇◇ Hoshino Kazuki – 11/09 VIE 22:15 ◇◇◇

Deberíamos evitar a los 【sirvientes】 de Daiya.

Aunque todavía no sabíamos qué hacer, abandonamos el paso inferior para evitar cruzarnos con algún 【sirviente】. Sería una mala idea quedarse más tiempo allí.

No tuvimos más opción que dejar abandonada a Iroha-san. Claro que no queríamos, pero la sangre artificial nos habría hecho lucir demasiado sospechosos si la llevábamos a casa; además, perderíamos tiempo valioso. Me lamenté por eso, pero le tocaría esperar dos horas hasta que pudiésemos poner un fin a esta batalla.

Haruaki dice repentina y nerviosamente, – …… Ehm, Hoshii,

no estoy seguro si debería decirte esto, pero…

¿Mm? ¿Qué ocurre?

¡Tienes una mirada jodidamente aterradora! Apuesto a que estás realmente enojado con Daiyan, ¿verdad? Dejar abandonada a esa senpai también tiene sentido, pero fuiste totalmente frío cuando lo hiciste…

¿Eh?

¿Lo fui?

No me di cuenta… pero supongo que es verdad. En este momento definitivamente algo no está bien conmigo, considerando que acabo de llamar a Daiya “bastardo ciego” en silencio.

Supongo que es normal que te enfurezcas ya que te robó a Maria-chan, pero si no te calmas, podrías perder terreno, ¿no?

Sí.

Cálmate, Kazuki. Cálmate y piensa en una forma de recuperar a Maria.

Y, para ser honesto, todavía quiero ayudar a Daiyan… aunque sé que no será fácil.

A decir verdad, el ayudar a Daiya se había escapado totalmente de mi mente. Estaba ignorando todo excepto a Maria.

… Sí.

Por supuesto que también quiero salvar a Daiya de ser posible, pero si ahora mismo pienso en Maria, no puedo evitar enojarme con él. No puedo evitar pensar que una lástima barata como esa sólo se interpondría en mi camino,

Por otro lado, si evito pensar en Daiya, quizás acabe derrotado. Pero, sí… será mejor que piense en algo ahora, en algo que me permita olvidar mi enojo. Y eso es—, – …… Kokone.

Así es.

En ese caso, lo primero que viene a mi mente es Kirino Kokone.

***

Hace dos días, en la tarde del 9 de Septiembre, Kokone me invitó a su habitación.

Era la primera vez que la había visto. La habitación estaba impregnada de colores oscuros y lucía con un estilo superficial. Sin embargo, también causaba una impresión extraña en mí. De cierta forma, la habitación parecía carente de coherencia y su estilo parecía falso; una habitación como esa realmente no combina con Kokone. Pude sentir una especie de obligación artificial por su parte que la condujo a vivir en una habitación así.

Bueno, no puedo evitar pensar de ese modo, sabiendo lo que sé sobre Kokone.

Esa habitación representa su transformación.

Y existe para—olvidar a Daiya.

… Ya no tienes que ocultarlo. Cuéntame qué le sucedió a Daiya.

Kokone ha decidido abandonar su negación de Daiya, y enfrentarlo, en lugar de eso.

Lo primero que pensé al oír eso fue:

Gracias a Dios.

Había planeado contarle sobre Daiya de todos modos. No… No tenía otra opción. Ignorar a Kokone o dejarla en la ignorancia en una pelea contra Daiya hubiese sido imposible.

Por lo que estaba agradecido de que se hubiese decidido y preparado a sí misma por cuenta propia. Después de todo, las cosas que tenía que contarle eran temas tristes de los cuales hubiese preferido guardar silencio.

—El error que Daiya cometió en el pasado.

—El dolor que Daiya está sufriendo en el presente.

—El trágico fin que le espera a Daiya en el futuro.

Ese conocimiento seguramente causaría que se culpase a sí misma.

Ese conocimiento seguramente la entristecería.

Ese conocimiento seguramente se mantendría atormentándola.

Pero, no obstante, le conté.

Le conté todo sobre Daiya.

Ese día, Kokone perdió su voz.

Cuando acabé mi explicación, se quedó mirando la pared detrás de mí de una forma completamente perpleja.

Ya que todo lo que hacía era respirar rítmicamente sin mostrar ninguna otra reacción, la dejé por el momento.

Al día siguiente, me invitó a su habitación una vez más. Cuando nos saludamos, noté que sus párpados estaban hinchados, pero aparte de eso, lucía como siempre.

Pero una vez que cerró la puerta de su habitación, inmediatamente comenzó a desabrocharse su blusa.

Todo fue tan repentino que no pude reaccionar apropiadamente. Debería haber apartado la mirada, pero sólo me quedé allí, atónito.

Mientras mantenía una mirada inexpresiva, acabó de quitarse todo lo la parte arriba de su cuerpo, excepto su sostén. Luego se dio vuelta y me mostró su espalda.

– ¡Mira!

Casi pregunto qué se suponía que tenía que mirar.

Pero me di cuenta solo.

Primero, noté la “marca” bajo el broche de sus sostén.

Era una cicatriz de quemadura, probablemente infligida con un cigarrillo presionado contra su piel. Y no solamente una vez; había tantas marcas lúgubres y violentas por toda su espalda, que parecía como si alguien hubiese vaciado un enorme montón de basura sobre un campo de nieve pura y blanca.

Y todas esas marcas de quemaduras formaban frases hirientes; tan obscenas que te sería complicado hallarlas incluso en los baños públicos más sucios de todos.

———

Aplastados.

Mis sentimientos fueron aplastados.

Esas marcas tuvieron un enorme impacto.

Uh… uh…

Las lágrimas comenzaron a brotar, desatadas, bajando por mis mejillas.

Pensamientos como “Pobre Kokone, debe haber dolido, nunca desaparecerán por completo, deben haber terminado por eso” sólo aparecieron después. En ese momento, mi única respuesta posible ante la visión de esas marcas, fue estallar en lágrimas.

Kokone se volteó para encararme. Ignorando mis desbordantes lágrimas, dijo alegremente:

Qué suertudo eres, Kazu-kun, ¿no? ¡Lograste ver a una atractiva chica con copa E en ropa interior!

Mientras bromeaba como siempre, Kokone estaba… llorando.

Así, nuestra conversación continuó mientras ambos sollozábamos.

Una amiga de la infancia llamada Rino me hizo esto -, dijo Kokone mientras se abotonaba su blusa. – Como sabes, Daiya tenía buena pinta y calificaciones soberbias; en ese entonces era muy popular—al punto de que algunas personas lo llamaban “el príncipe” de nuestra escuela, de hecho. No siempre fue huraño y no solía usar el cabello teñido plateado y aros. Oh, yo era una pareja tan poco apropiada para él. Lucía realmente apagada, con mi cabello negro totalmente sin estilo y unos feos y enormes anteojos. Era una chica bastante sencilla y común a la antigua. ¡Definitivamente te reirías si te mostrara una foto! … Aunque yo no puedo reírme.

Sacudo mi cabeza.