Ichiban Ushiro No Daimaou (NL)

Volumen 4

Capitulo 1: Alguien Está Apuntando A Alguien

Parte 1

Akuto despertó sintiéndose frustrado.

Honestamente, ¿por qué tengo que recordar algo así?

Él era bien parecido, pero tenía una mirada maliciosa en su rostro. Cuando fruncía el ceño, nadie quería estar cerca de él.

Sin embargo, no tenía que preocuparse de que alguien que no cociera bien viera su rostro. La Academia de Magia Constante estaba en unas vacaciones largas, por lo que quedaban pocas personas en los dormitorios. Akuto estaba solo donde había estado durmiendo, debajo de un árbol detrás del dormitorio. Miró hacia arriba y vio a las aves volando pacíficamente a través del cielo.

Este clima es tan agradable que siento que nada malo va a suceder. Debo ser una persona muy rebelde para recordar algo así en un momento alegre como este.

Akuto sonrió burlándose de sí mismo antes de escuchar una voz distante.

– ¡A-chaaan! Ahí estás.

Soga Keena corría hacia él con una gran sonrisa en su rostro. Esa era la expresión de alguien sin preocupaciones. Algunos mechones de pelo rojo sobre su cabeza se balanceaban de un lado a otro. Él nunca podía permanecer de mal humor al ver eso. Keena se dejó caer en el suelo al lado de Akuto.

No tenía que hacer, así que me dieron ganas de salir.

Ya veo.

Keena parecía como si quisiera decir algo, así que Akuto trató de sacárselo.

¿Qué pasa?

Um, bueno. ¿Sabes cuándo es tu cumpleaños, A-chan?

Bueno, fui un huérfano. El orfanato a menudo tenía que elegir uno al azar, así que tomaron el día en que fuimos abandonados. Para mí, fue el 25 de diciembre.

En cuanto dijo eso, Akuto recordó que Keena había sido huérfana también. Era un tema difícil para aquellos que no eran huérfanos, pero Keena respondió alegremente.

Ya veo. Yo no conozco el mío, así que decidí uno por mi cuenta.

Keena de repente comenzó a moverse con nerviosismo.

¿Qué pasa? – preguntó Akuto una vez más.

Um, cuando llegue mi cumpleaños, ¿lo celebrarás conmigo? – Keena sonrió tímidamente y dijo eso.

Por supuesto.

Cuando Akuto aceptó naturalmente, los hombros de Keena se relajaron con alivio.

Gracias a dios. Después de todo, es el cumpleaños que decidí por mi cuenta. Puedo perderme en mis propios pensamientos a veces, ¿no? Pensé que podrías sorprenderte mucho esta vez.

Ya me has sorprendido más que suficiente. De hecho, me sorprendiste bastante la primera vez que nos conocimos. – dijo Akuto encogiéndose de hombros.

¿Eh? No seas tan cruel.

Decidiste llamarte de repente mi observador.

Pero estaba muy sola antes de conocerte, A-chan. Y es cierto que te cuido…

¿Qué día es? – le preguntó Akuto.

¿Eh?

Tu cumpleaños.

– U-Um, va a ser pronto, pero te lo diré una vez que

llegue.

Pero entonces podría no estar contigo ese día.

Eso significa que tienes que estar conmigo todos los días, ¿no?

Veo que estás siendo egoísta de nuevo.

Akuto suspiró y Keena sacudió la cabeza como si quisiera sacudirse algo.

¡O-Oye, A-chan! ¡Este es realmente un buen clima! ¡Vamos a jugar!

Akuto simplemente no podía rechazarla. Podría haberlo hecho antes, pero había empezado a sentirse misteriosamente en paz al estar con Keena.

¿Jugar? Pero no soy muy bueno divirtiéndome. Aunque supongo que puedo jugar algún tipo de juego contigo. ¿Qué deberíamos hacer? – preguntó.

Keena respondió enérgicamente.

¡Vamos a tomar una siesta!

¿Eh? ¿Una siesta? Pero acabo de despertar de una…

Pero para cuando él dijo eso, Keena ya se había apoyado en él y cayó dormida.

En cierto modo, ella tiene algunos talentos increíbles.

Akuto decidió permanecer quieto para no despertar a Keena. Sacó su manual del estudiante y activó la función de biblioteca. Una pantalla de mana se proyectó delante de su pecho y comenzó a leer un libro en el que estaba interesado. Tenía la sensación de que podría ser capaz de aprender algo de un antiguo libro de estudios religiosos. Recibió algunas sugerencias para sus propios pensamientos del libro, pero no podía comprender cómo podía pensar como ese caballero.

Si pensar en ello solo hará que me sienta engreído, tal vez debería simplemente no pensar en ello. Al igual que Keena.

Akuto levantó la vista del libro y comenzó a jugar con el pelo de Keena mientras se balanceaba delante de su cara.

No, no. Ese no es un buen lugar para que una planta crezca. Un mejor lugar sería…

Mientras dormía, Keena murmuró algo sin sentido en un tono serio.

Akuto no tenía idea de por qué, pero tuvo la sensación de que un momento como este nunca volvería. Una premonición pareció adormecer el centro de su mente. Lo hizo sentirse como si se acercara un cambio y sintió nostalgia de hace solo cinco segundos.

Yo no le rezo a ningún dios, pero es casi como si tuviera una fe religiosa en Keena.

Suhara podría resumirse como un dios que valoraba el nacionalismo. Las fuerzas militares que protegen al país se dividían en dos grandes categorías: los caballeros y el ejército imperial. Sin embargo, solo se permitían seguidores Suhara en el segundo.

Suhara era apasionado por la protección de la ley, el linaje familiar, y el honor. Suhara también daba permiso de usar ataques mágicos poderosos a los que tomaban acciones valientes. Por eso los seguidores Suhara eran vistos generalmente como orientados a lo cortés y la familia, pero inflexibles y violentos.

La mayor posición entre los seguidores Suhara era el sumo sacerdote. El hombre que actualmente tenía la posición se llamaba Teruya Keizou. Él era el padre de Teruya Eiko, quien le había causado problemas a Akuto en el pasado. La familia Teruya realizaba principalmente trabajo de inteligencia. Durante los muchos años sin una guerra contra un enemigo externo, su poder solo había continuado creciendo. En el presente, habían logrado reunir la influencia necesaria para tomar la posición de la familia en control del ejército y la marina. Habían estado mucho tiempo en conflicto con la familia Hattori que protegía a miembros importantes del gobierno. Ninguno deseaba dejar que el otro tuviera la posición de sumo sacerdote. Sin embargo, se había decidido que la familia Hattori ya había obtenido suficiente honor en su servicio directo al emperador, por lo que la familia Teruya había ganado al final.

Teruya Keizou era un tipo raro de hombre que llevaba a cabo con orgullo y valentía acciones cobardes y malvadas. Los que habían sido llevados a la ruina por él acordaron en ese punto. Había robado y asesinado sin miedo, duda, o incluso embriagarse con el placer. Incluso después de convertirse en sumo sacerdote, había terminado directamente con la vida de personas más de una o dos veces.

En algún momento una sombra malvada había aparecido en su rostro. Todos podían sentirlo, pero su expresión real se había vuelto gentil y brillante con el paso de los años. Mientras Keizou ajustaba su postura sentado en la tela japonesa, era una existencia extraña que claramente era malvado pero solo podía ser visto como un santo.

Keizou actualmente tenía una expresión rara de preocupación. Sus ojos que normalmente parecían estar sonriendo, ahora emitían una fuerte luz hacia arriba.

Keizou estaba dentro del templo Suhara. Era un gran santuario en un bosque tranquilo fuera de la capital imperial. Un majestuoso santuario con techo de tejas podía verse más allá de la puerta torii. Dentro del santuario en sí, la persiana de bambú estaba abierta. Consagrado dentro estaba el dios árbol que contenía al dios. El dios árbol era un muñón del tamaño de un ser humano. Se encontraba de pie delante de Keizou, que estaba sentado sobre un mimbre tejido. El dios árbol era el dispositivo utilizado cuando un humano necesitaba contactar a Suhara. Nadie además de Keizou se encontraba actualmente dentro del santuario. Estaba hablando directamente con el dios.

¿Realmente este es el individuo? – preguntó Keizou con un tono analítico.

Dos sacerdotisas salieron de detrás del dios árbol. Poseían hermosos rostros idénticos. Se movieron a izquierda y derecha y se pararon delante de Keizou.

Esa es la decisión de Suhara.

Déjanos la decisión final a nosotros.

Ellas eran L’Isle-Adams. Existían para proporcionar asistencia cuando la conversación entre el dios y el humano no iba bien. Su posición oficial era la de obispo, que era más alto que el sumo sacerdote. Sin embargo, eso solo era en nombre. El sumo sacerdote era el único con la autoridad para cambiar el propio programa del dios. De hecho la posición de sumo sacerdote era mayor que la del dios.

Sin embargo, la situación era un poco diferente en el caso de Suhara.

– ¿Esto realmente es a quien vamos a asesinar? – preguntó Keizou una vez más.

Suhara ocasionalmente le informaba al sumo sacerdote si se confirmaba que una persona había cometido traición. El dios vigilaba las acciones de las personas a través del mana que llenaba la atmósfera. Si se obtenía evidencia de que alguien era un rebelde, el sumo sacerdote recibiría la evidencia y la ubicación del individuo.

Este sistema por supuesto fue mantenido en secreto del público y muchos de los altos funcionarios de gobierno que sabían de él eran críticos con ello. Sin embargo, esos funcionarios se vieron obligados a admitir que era eficaz. Permitió que cualquier rebelión contra el imperio fuera detenida antes de que llegara a una gran escala.

No se te ha dicho que asesines a este individuo.

Sin embargo, ya se ha confirmado la traición de la

persona.

Las sacerdotisas hablaron.

– Pero no he recibido ninguna evidencia.

Por eso Keizou estaba tan preocupado. Había recibido datos sobre la ubicación del presunto rebelde. Sin embargo, no había recibido ningún cargo específico o evidencia.

La evidencia no puede ser revelada.

Ni siquiera al sumo sacerdote.

Keizou era muy consciente de lo anormal que era este anuncio. Un sumo sacerdote por supuesto entendía que un dios no era nada más que un sistema.

¿Debería utilizar el código de cancelación?

Keizou se preocupó si debía usar su autoridad de sumo sacerdote. Si utilizaba el código de cancelación, sería capaz de reescribir el programa del dios. En la remota posibilidad de que algo hubiera ido mal con Suhara, él podría manejarlo.

Pero los sacerdotes probablemente me criticarían por negar la decisión del dios en base a mi propia voluntad. Y si se encuentra un error en el sistema ahora, significaría que los asesinatos anteriores fueron errores también.

El dios simplemente proporcionaba información de los rebeldes. Dependía del sumo sacerdote si serían asesinados o capturados. Y Keizou prefería el asesinato. Cuando solo había sido un sacerdote normal, había engañado a sus enemigos políticos para rebelarse y luego usó eso como evidencia para matarlos. Si los asesinatos previos fueran puestos en duda, fácilmente podría llevar a su caída.

Normalmente utilizaría una unidad especial del ejército, pero me quedaré con mis tropas personales para esto.

En ese caso, tomaré estos datos. Déjenme el resto a mí.

dijo Keizou.

Las sacerdotisas asintieron.

Por favor hazlo. Sin embargo…

Aunque seas el sumo sacerdote, cómo manejes estos datos podría considerarse una rebelión contra el imperio.

No olvides eso.

Mientras las sacerdotisas se turnaban para hablar, se dieron la vuelta.

¿Qué?

Ellas nunca habían hecho una amenaza así antes. De hecho, debería haber sido imposible que el sistema de un dios lo hiciera. La única posibilidad en que podía pensar era que el dios había ganado algo parecido al libre albedrío.

¿Qué fue esa amenaza? – preguntó Keizou, pero las dos sacerdotisas ya habían desaparecido detrás de Suhara. Y Suhara no dijo nada. – Como sea, solo tengo que matar al objetivo. Eso es lo que pensaba hacer de todos modos.

Después de ese anuncio a Suhara, Keizou se levantó.

¿Suhara está ganando una voluntad? No, no puede ser. Como sea, una vez que esto haya sido resuelto, puedo revelar el comportamiento extraño de Suhara a los sacerdotes como un asunto aparte. Esto es solo la vida de una sola chica. Terminará rápidamente.

Los datos flotaron ante los ojos de Keizou en una pantalla de mana. Lo movió para marcarlo como secreto. Los datos mostraron a una chica pelirroja con una enorme sonrisa en su rostro. Su nombre también se mostraba.

Soga Keena. Nunca he oído ese nombre antes, pero parece tener aproximadamente la misma edad que mi hija. Pobrecilla.

***

La familia Hattori tenía una relación antagónica con la familia Teruya. La hija mayor de esa familia, Hattori Junko, actualmente estaba seriamente preocupada.

¿Qué se supone que haga? Solo puedo pensar que esto es un problema que no puedo resolver…

Ella tenía su manual de estudiante que podía ser usado como un dispositivo de comunicaciones. Actualmente mostraba un mensaje de su familia. El asunto era: “Los preparativos para la entrevista de matrimonio están completos”.

Si ya han hecho los preparativos, significa que padre ya lo ha escuchado. No puedo retroceder ahora.

Junko estaba escondida en el bosque detrás de los dormitorios. Tenía una pantalla de mana colocada delante de