Choppiri Toshiue demo Kanojo ni Shitekuremasu ka? (NL)

Volumen 4

Capitulo 6: La Princesa Va Al Festival De Ve

Parte 2

“Haa, haa… L-Lo siento… Me siento un poco mal. No puedo soportarlo más…” respondió ella con voz débil, y el miedo y la ansiedad se apoderaron de mí.

“Tomemos un descanso. Hay un lugar para sentarse allí. O debería buscar una carpa de auxilios…”

En pánico, comencé a pensar frenéticamente… Pero Orihara-san me agarró fuertemente la mano.

“Momota-kun… Por aquí…”

“¿Eh?”

“Por favor…”

No sabía qué hacer, y ella me cogió la mano y caminó entre la multitud en dirección contraria a la del escenario.

Fuimos a un lugar desierto… Eventualmente terminamos en el bosque cerca del templo. Caminamos por entre los árboles hasta salir a un pequeño espacio abierto, donde nos detuvimos.

No había ni un alma alrededor.

Los sonidos de los tambores y las luces del festival se desvanecieron en un instante… “¿Eh? E-Este…”

“…Lo siento, lo siento mucho, Momota-kun…”

Solo la luz de la luna que se filtraba a través de las ramas de los árboles iluminaba este oscuro lugar.

Entré en pánico y Orihara-san se volvió hacia mí.

Y respirando pesadamente y con la cara ardiente, dijo:

“Quítame la yukata.”

Se me cortó la respiración.

El festival de verano. En el bosque, lejos de la gente. Solo nosotros dos… Solo había una conjetura que podía sacar de esto y mi cara se calentó de repente.

“¿Q-Qué estás diciendo, Orihara-san?”

“L-Lo siento… S-Sé que lo que estoy diciendo es extraño… ¡Pero no puedo soportarlo más…!”

Se me acercó con una voz muy desesperada.

Sus ojos húmedos no dejaron de mirarme.

“¡Por favor, Momota-kun…!”

“P-Pero… que la primera vez sea en un lugar así…”

“…¿Eh? ¿Primera vez…? Bueno, supongo que es tu primera vez quitando una yukata.” “C-Creo que es una pena negarse, a pesar de todo lo que estás haciendo, pero me

gustaría que la primera vez sea en un lugar memorable…”

“¿Eh? ¿Eh? ¿D-De qué estás hablando?” Orihara-san me miró sin comprender. “…Momota-kun, ¿no estás malinterpretando algo?”

“¿M-Malinterpretando? ¿Eh…? ¿Q-Qué? Este… Era una invitación, ¿no? Para hacer ‘eso’…”

“¡¿Hacer eso…?! ¡N-No, te equivocas!” Orihara-san se sonrojó y comenzó a sacudir la cabeza. “¡¿C-C-Cómo llegaste a esa conclusión?!”

“¡¿Ehh?! Pero… tú me pediste que te quitara la ropa.”

“Eso es… porque el obi está muy apretado y me costaba respirar, ¡por eso te pedí que me lo quitaras!” Ella gritó desesperadamente y luego habló más tranquila. “Bueno, este… No estoy segura porque esta es la primera vez que me visto así, pero cuando vistes una yukata o un kimono, cómo decirlo… se supone que debes aplastarte el pecho.”

“¿Aplastar el pecho?”

“Te hace ver más hermosa de esa manera. Por otro lado, se ve feo si el pecho se realza por sobre el obi. Y como el mío es grande… m-mi hermana me dijo que las mujeres con grandes pechos no se ven hermosas a menos que los aplasten…”

Cuando dirigí mi mirada hacia su pecho… me di cuenta de que hoy su pecho se veía más discreto. Las dos colinas, que siempre causaban una fuerte impresión, parecían más planas ahora.

“Me puse una toalla en el estómago y mi hermana se esforzó mucho para aplanarme… Pero me envolvió tan fuertemente que me sentía muy agobiada…”

“¿Es por eso que respirabas con dificultad?”

“…Sí. Honestamente, fue un poco incómodo desde el principio”, dijo apologéticamente con los ojos bajos. “Intenté aflojarla en el baño antes, pero estaba tan apretada que no pude hacerlo yo misma… Es por eso que quiero que me ayudes.”

“…Y-Ya veo. Estaba seguro de que era… No, bueno.”

No terminé de hablar, pero ya era demasiado tarde, y Orihara-san frunció los labios enrojecida.

“C-Cielos. ¿Por qué pensaste en una cosa tan pervertida?”

“L-Lo siento… Pero no creo que sea culpa mía. Después de todo… me llevaste a un lugar desierto y me pediste que te desnudara con una voz muy sexy…”

“¡¿~~?! ¡M-Mi voz no era sexy! Solo… era débil porque tenía dificultad para respirar…” Finalmente entendí lo que estaba pasando.

Pero Orihara-san estaba pasando por un momento difícil ahora. No había tiempo para avergonzarse. Reprimí la vergüenza y extendí mi mano hacia su yukata.

“Este… ¿Qué hago ahora?”

“A-Agarra el nudo del obi. Y tira de él con todas tus fuerzas.”

“Agarrar esto y tirar de él, ¿cierto?”

“Sí… Por favor. Ya después puedo encargarme del resto…”

Los dos pasamos unos minutos batallando con la tarea desconocida.

Tomé el obi y removí el nudo y el velcro, y ahora ya no había nada que la oprimiera.

Cayendo suavemente.

La yukata… se desató.

La tela blanca se abrió como una puerta doble.

“Nhn… Haa…” Liberada de la presión en su pecho, Orihara-san dejó escapar un suspiro caliente.

Cuando la yukata fue desatada, la toalla que había estado usando para envolver su cintura cayó al suelo… Y con ella una tela blanca.

Era un vendaje.

Debe haberlo usado para aplastar su pecho.

Y como cayó, significa…

“Haa… Ah, qué bien se siente…”

“……”

Después de una larga y profunda bocanada, Orihara-san parecía aliviada y extasiada. Y yo me congelé justo en frente de ella.

Pude ver todo.

Con el vendaje caído, no había nada más que la ocultara. Debajo de la yukata abierta, se podía ver su sensual figura. Boing… Boing…

Sus pesados pechos se balancearon al ritmo de su respiración irregular. Los enormes pechos completamente expuestos estaban húmedos de sudor.

Y no solo sus pechos. Su cintura delgada y sus muslos carnosos… Todo su cuerpo era tan estimulante que me sentí abrumado por su grandiosidad y belleza.

Y el olor.

Debido al intenso calor, un olor agridulce se desprendió de debajo de la yukata. Por supuesto, no era un olor desagradable. Era el agradable aroma de Orihara-san de siempre… Solo que esta vez era mucho más fuerte.

Tragué saliva.

Debido a la proximidad de su cuerpo desnudo, mi vista y olfato se volvieron locos. El exquisito aroma de un cuerpo maduro derritió mi razón y estimularon mis instintos…

“¿……? ¿Q-Qué pasa, Momota-kun? ¿Dónde estás mirando?—¡Kyaaa!”

Entendiendo finalmente su terrible posición, Orihara-san gritó fuertemente y cerró el frente de su yukata.

“E-Ehh… ¡¿P-Por qué sucedió esto?! Ah… S-Se cayó el vendaje… U-Uuh~.” Cerró el frente de su yukata apresuradamente y se dio la vuelta.

“Uuh… L-Lo siento, por mostrarte una apariencia tan embarazosa… A-Aunque podrías haberme dicho y no quedarte mirando”, dijo avergonzada… Pero casi ni la escuché.

Mi corazón latía increíblemente rápido.

Sentí un hormigueo detrás de los ojos. La imagen de su cuerpo desnudo quemada en mi retina y el olor instalado en mi nariz hicieron que mi cerebro se entumeciera. Mis pensamientos se embotaron gradualmente y mi conciencia se desvaneció.

Sentí algo.

Sentí como si algo se hubiera liberado dentro de mí.

Y cuando me di cuenta.

Yo—

“…¿Momota-kun? Qué… ¡Kyaa!”

En el momento en que Orihara-san miró hacia atrás, preguntándose por qué no había respondido…

La rodeé con mis brazos por detrás y la abracé.

Fuertemente.

Con todas mis fuerzas.

Y forzosamente.

Abracé su delicada espalda con mis brazos.

“¿E-Eh…? ¿M-Momota-kun…?”

Ignorando su perplejidad, estiré mi mano.

La metí debajo de su yukata y… la toqué.

Sin permiso, agarré bruscamente sus pechos desnudos.

“…Ah.”

Su cuerpo se estremeció en mis brazos. Pero no me detuve. Sucumbiendo al instinto, manoseé sus pechos.

Los pechos de la primera mujer que toqué en mi vida eran muy grandes y suaves. Mis dedos se enterraron en ellos debido a su rica elasticidad. Quería poder tocarlos para siempre. La voluptuosa sensación en las palmas de mis manos casi hizo que mi cerebro se derritiera.

“¡Orihara-san…!”

Disfrutando de la sensación de su suave piel, pronuncié su nombre. El nombre de la persona que amo, la persona que amo más que nada.

Sí…

De hecho, siempre quise hacer esto.

Me moría por tocarlos.

No podía contener el deseo.

Desde que empezamos a salir, he soñado con esto muchas veces. En mis sueños, Orihara-san era lasciva y agresiva, y yo asertivo y valiente, nos quitábamos todo y degustábamos del cuerpo del otro.

Pero en la realidad… no podía hacer eso.

Mi primera novia es hermosa, encantadora, dulce y preciosa… Por eso quiero apreciarla.

Realmente quiero apreciarla.

Pensé que no debía ensuciarla ni sucumbir a mis sucios deseos.

Ella es una mujer adulta exitosa que trabaja en una gran empresa… y yo solo un colegial que no está a su altura.

Por eso al menos… quería ser un buen novio.

No tengo ni dinero ni estatus, no tengo nada, pero al menos quería ser un novio respetable. Quería ser un gran príncipe. Puede sonar demasiado descarado, pero quería ser un novio del que pudiera estar orgullosa. Para que todos a su alrededor digan “qué novio tan maravilloso”—

No.

Quizás sea solo una excusa después de todo.

En realidad… tenía miedo.

Tenía miedo de que ella me odiara.

Tenía miedo de ensuciarla con mis sucios deseos.

Tenía miedo… de lastimar a mi querida novia.

Por eso intenté esconder desesperadamente todas mis facetas más desagradables. Al igual que la máscara que llevaba puesta escondía la mitad de mi cara… Yo escondí

todo lo malo de mi corazón y solo mostré lo bueno.

Pero ahora.

Mi máscara… se desprendió.

Mi racionalidad y orgullo desaparecieron, y mis deseos y estímulos movieron mi cuerpo. Una mano impulsada por los instintos continuó manoseando su pecho una y otra vez—

“…tente.”

Orihara-san, que estaba en mis brazos, giró la cabeza y me miró.

“Detente… Momota-kun, me duele…”

“……”

En ese momento.

El calor abandonó mi cuerpo, como si me hubieran tirado un balde de agua fría. Mi cerebro, que parecía anestesiado, despertó repentinamente de su parálisis.

Mi novia… me miró con ojos asustados.

Su rostro estaba distorsionado por el miedo y su cuerpo temblaba ligeramente.

Ella estaba asustada de mí…

”A… Ah… L-Lo siento… Yo…”

Quité mis manos de su cuerpo y retrocedí una gran distancia. Sin embargo, mis piernas se enredaron y caí de nalgas. “…¡Lo siento! ¡Lo siento mucho! Yo… yo…”

Me disculpé de rodillas con las manos en el suelo y la cabeza abajo.

No tenía la fuerza para levantar la cabeza.

Tenía miedo… de mirar su cara.

Frotando la cabeza contra el suelo, seguí disculpándome.

Esto es terrible.

Me pasé de la raya.

¡¿Qué hice?!

Perdí el control y la abracé a la fuerza… Y manoseé bruscamente su pecho sin permiso.

Soy una escoria.

No hace mucho tiempo…

Poco después de nuestra cita en el acuario, Orihara-san me dijo:

“Puedes tocar mis pechos.”

Ella me dio permiso para tocar sus pechos.

Pero rechacé su oferta.

Intenté verme bien y me negué.

—Intentaré tocarte los pechos más tranquilamente cuando el estado de ánimo sea mejor.

Algo así.

Dije algo genial y me negué.

Pero… ¿qué acabo de hacer?

El momento no fue el apropiado y fui muy brusco.

De hecho, en lugar de leer la atmósfera, solo sucumbí a mis deseos y la toqué a la fuerza, lo que es mucho peor…

“…Lo siento…”

Me sentía patético, despreciable y lamentable, y lágrimas comenzaron a fluir de mis ojos. Apreté la dura tierra en la palma de mi mano con un intenso odio hacia mí mismo.

“…Momota-kun.”

Aunque su voz sonó por encima de mí, no pude levantar la cabeza.

“…Orihara-san, lo siento, yo… de verdad…”

Aunque sabía que no tenía derecho a pedir perdón, no sabía qué hacer excepto disculparme.

Qué vergonzoso.

Soy tan patético.

Solo quiero desaparecer…

Estaba a punto de ser aplastado por la culpa y la miseria, cuando de repente:

“¿Eh…?”

Suave.

Algo suave me envolvió.

Dos manos envolvieron mi cabeza y me abrazaron fuertemente.

Mi cara… se hundió en su escote.

Ella nunca ató su yukata, así que mi cara se presionó contra su pecho expuesto. Casi aplastado por la culpa, fui envuelto suavemente por su dulce olor y su suave piel sudorosa…

“Qué… ¿O-Orihara-san?”

“Está bien.”

Su voz fue muy gentil.

Nervioso, levanté la cabeza… Y me encontré con su mirada.

“No sigas disculpándote. Como dije, todo está bien”, me miró con ojos apacibles, como los de una madre. No había ira o miedo, solo bondad y calidez.

“¿N-No estás enojada?”

“No. No estoy enojada.”

“……”

“Mentira. En realidad, estoy un poco enojada”, dijo, con una ligera irritación en su voz. “Después de todo… me asustaste mucho. De repente, agarraste mis p-pechos… a la fuerza y muy brusco… Me dolió un poco.”

“…L-Lo siento, yo…”

No pude decir nada y Orihara-san continuó, vacilante: “Este… ¿N-No pudiste controlarte cuando viste mis pechos?” “Bueno, este… N-No.”

“Ya veo… No se puede hacer nada entonces. Te perdono”, dijo, llanamente.

Fue sorprendentemente llana.

“…¿Eh? D-De ninguna manera… No puedes simplemente perdonarme así nomás—” “Te perdono”, repitió. “Simplemente mi novio acaba de tocarme los pechos un poco.” Su voz era suave y cálida, como si hubiera aceptado plenamente mi estupidez e

inmadurez.

Me quedé sin palabras y ella continuó.

“¿Sabes? Cuando me tocaste forzosamente hace un momento, estaba muy sorprendida y un poco asustada… Pero también… estaba un poco contenta.”

“¿Eh…?”

“Ah. Este, ¡n-no en un sentido extraño! Cómo decirlo… Me alegré de que me desearas por voluntad propia…”

“……”

“Siempre estás tratándome con cariño, ¿no? Piensas más en mí que en ti mismo. Por supuesto, me alegra que seas tan amable y sincero, y por eso te quiero mucho… Pero, este, me gustaría que fueras un poco más egoísta.”

“Egoísta…”

“Por eso me alegré. Porque me deseaste por tu propia conveniencia y tu propio deseo.” “……”

“¡P-Pero eso no significa que quiero que repitas lo que hiciste antes! No… Solo quiero conocerte desde diferentes ángulos”, dijo Orihara-san, como eligiendo las palabras correctas. “No solo al amable y genial Momota-kun… También quiero ver tu otro lado que no es amable y genial. Quiero que me muestres tu lado que no es un ‘buen novio’. Después de todo, yo… soy tu novia. Nada podría hacerme más feliz que conocer al Momota-kun que nadie más conoce.”

“Orihara-san…”

“… Ah, jajaja. Se siente como si yo fuera la egoísta. Parece como si quisiera acapararte solo para mí.”

Ella egoístamente le pidió a su novio que se volviera egoísta.

Ciertamente era egoísta. Ella quería ser la única en conocer el lado de su novio que otros no conocen…

Pero puede que ese sea el deseo que todos tienen cuando se enamoran.

Ahh…

Me pregunto por qué no me di cuenta.

Quería ser un novio en el que pudiera confiar.

Quería ser un novio maduro y tolerante. No quería que ella se forzara tanto delante de mí. Quería ser aquel con quien ella pudiera estar tranquila y cómoda.

En ese caso…

No sería de extrañar que Orihara-san tuviera las mismas emociones y los mismos deseos.

Quería que me relajara y fuera honesto.

Quería que fuera egoísta y consentido…

“Déjame consentirte, Momota-kun”, dijo Orihara-san, abrazándome con su gran pecho. “Incluso si cometes errores o me muestras un mal lado tuyo, te aceptaré. Te aceptaré, te abrazaré… y te consentiré.”

“……”

“A-Aunque bueno… Desafortunadamente, no tengo mucha tolerancia ni instintos maternales.”

“…Eso no es cierto.” Mientras se burlaba de sí misma, sacudí la cabeza. “Siento tus instintos maternales ahora mismo.”

“¿Eh? ¿E-En serio? ¿Aparecieron ahora?” dijo sorprendida. No parecía ser consciente de la calidez con la que me estaba abrazando.

Y tal vez… las cosas eran justo al revés.

La razón por la que Orihara-san no pudo mostrar sus instintos maternales tan bien no fue solo por ella, sino también por mi culpa.

Porque me esforcé tanto en ser un “buen novio” y escondí mis defectos.

Me negué a mostrar mis debilidades.

Pensé que sería una vergüenza… que me consintieran.

Pero al final, tal vanidad y orgullo puede que no fuera más que mi propia complacencia.

Debido al hecho de que no confiaba en mí mismo, no creía en mi novia.

Debido a que no quería que me consintieran, Orihara-san no pudo mostrar sus instintos maternales hasta ahora.

Mi novia realmente es amable y tierna, es tan tolerante y maternal que disipa todos mis defectos y errores…

Era la mejor novia mayor que podía tener.

Los fuegos artificiales comenzaron antes de que me diera cuenta.

Las flores de pólvora florecieron con un fuerte ruido en el estrecho cielo que se asomaba entre los árboles.

Los dos nos esforzamos para arreglar la yukata y salir del bosque… Y los fuegos artificiales ya estaban acercándose a su clímax.

Naturalmente, los lugares donde se podían ver bien los fuegos artificiales ya estaban abarrotados de gente.

Así que tuvimos que pararnos en el borde del templo, donde parte de la vista estaba oculta por la estructura y los grandes árboles.

“…Lo siento, todo es por mi culpa.”

“Olvídalo. No te disculpes.” Incliné la cabeza y ella habló con picardía. “Esto también es agradable.”

Y los dos miramos al cielo.

Justo antes del final del espectáculo, un gran número de fuegos artificiales se encendieron uno tras otro. El cielo nocturno se llenó de luces brillantes. Los fuegos artificiales florecieron en el estrecho cielo entre las ramas y el edificio.

“Wow… Es hermoso.”

“Es verdad.”

Los dos disfrutamos de los fuegos artificiales casi inobservables.

De repente recordé las palabras de Kana.

—Apreciar algo es bastante difícil.

Finalmente entendí el significado de sus palabras. Aunque no me gustó la idea de que no pude entenderlo hasta que experimenté esta situación tan fea.

Quería atesorar a Orihara-san a mi manera.

Intenté tratar a mi querida novia con cuidado.

Pero… era como mantener un juguete en una caja.

Tenía tanto miedo de lastimarla que dudé incluso en tocarla.

No.

Al final, era mi egoísmo. Mi egoísmo y mi autoprotección. No tenía miedo de lastimarla, sino de lastimarme a mí mismo.

Y por supuesto.

No creí que estuviera equivocado.

No creí que estuviera mal intentar ser un “buen novio”.

Pero… al menos un poco.

Tal vez debería dejar que me consienta al menos un poco.

Después de todo, “dejar consentirse” es definitivamente sinónimo de “creer”. Si ella es capaz de aceptarme, yo puedo “creer” en ella…

“…Hime.”

***

Me sobresalté.

Yo misma me sorprendí por mi reacción.

“¿E-Eh…? ¿T-Te refieres a mí?”

Cuando volví a preguntar, Momota-kun se rascó vergonzosamente la mejilla y asintió. “¿P-Por qué… por mi nombre?”

“Lo siento. Solo quería llamarte así. Bueno… Para ser honesto, siempre he querido llamarte por tu nombre.”

“……”

“Me pediste que fuera más egoísta hace un rato, así que…” Al final, su voz era confusa y difícil de escuchar. No, realmente dije eso.

Se lo dije, pero no esperaba que fuera tan egoísta tan pronto… “…Lo siento. Por llamarte sin ningún honorífico.” “No, está bien…”

¿Qué hago?

Mi cara estaba sorprendentemente caliente. Me había sorprendido mucho que me llamara por mi nombre.

Y cuando me di cuenta:

“O-Otra vez…” dije.

“¿Eh…?”

“Quiero que me vuelvas a llamar por mi nombre… ¿No quieres?” Momota-kun se sorprendió al principio y luego me miró directamente. Parecía un poco avergonzado, pero no apartó la vista… “Hime.”

“¡~~!”

¿Qué es esto? ¿Qué es esto, qué es esto? No puedo creer lo rápido que está latiendo mi corazón solo porque me llamó por mi nombre.

Ser llamada por mi nombre por mi novio más joven hizo que mi corazón saltara de mi pecho.

Después de todo, tenía un complejo por mi nombre, pero ahora anhelaba escucharlo… “K-Kaoru-kun”, dije también.

Me decidí y lo dije.

El nombre de mi novio.

El nombre de la persona que amo que siempre he querido pronunciar…

Momota-kun pareció un poco sorprendido, pero inmediatamente sonrió.

Fue una sonrisa ligeramente avergonzada, pero gentil.

“Hime…”

“…Kaoru-kun.”

Nos llamamos por nuestros nombres, nos miramos e inmediatamente nos sonreímos. “Pfft, jaja. De alguna manera, se siente raro.” “Jajaja… Sí, todavía no me acostumbro.”

“¿Cómo deberíamos llamarnos a partir de ahora?”

“Hmm. Por ahora… continuemos con nuestros apellidos. Es un poco embarazoso después de todo.”

Era vergonzoso llamarlo por su nombre, y sobre todo, era vergonzoso que me llamara por el mío.

No era bueno para mi corazón. Si me llamara “Hime” en medio de la ciudad, mi corazón latiría de manera anormal.

“De acuerdo. Entonces dejémoslo como antes.” “Sí.”

“Pero… te llamaré de nuevo por tu nombre si se presenta el momento.” “…S-Sí.”

Oh. Está siendo algo directo.

¿Es este el Momota-kun egoísta?

El verdadero Momota-kun, el que no contiene sus deseos…

“…Fufu.”

“¿Qué pasa?”

“No, es un poco gracioso. Ya hemos hecho muchas cosas… Nos hemos tomado de las manos, nos hemos besamos… M-Me tocaste los pechos.”

“……”

“Y sin embargo, es un poco gracioso que nos cueste trabajo llamarnos por nuestros nombres.”

“De hecho, y el orden no pudo ser más extraño”, dijo Momota-kun, sonriendo. “Pero eso no importa, porque… No hay un orden correcto en el amor.”

“…Sí. Es verdad.”

No hay un orden correcto en el amor.

Avergonzarse por ser llamada por mi nombre después de habernos besado y que tocara mis pechos no es extraño… Bueno, puede ser un poco extraño, pero no es algo malo.

Así como tener una relación física antes de salir con alguien, no tiene por qué ser algo deshonesto.

Todas las parejas se mueven de manera diferente.

“…Ah. Los fuegos artificiales han terminado”, dijo Momota-kun, mirando hacia el cielo. Cuando miré hacia arriba, ya no había más fuegos artificiales en el cielo de verano, solo

estrellas brillando débilmente. Una emisión anunciando el final de los fuegos artificiales también se escuchó a lo lejos.

“No puede ser… L-Lo siento. Porque empecé a decir cosas extrañas, nos perdimos la mejor parte…”

“Está bien, no te preocupes. Todo comenzó originalmente por mi culpa.”

Además, continuó Momota-kun.

En un tono ligeramente ferviente.

“Estaba viendo algo más hermoso que los fuegos artificiales.”

“¿Eh? ¿Qué quieres decir?” No entendí el significado, así que volví a preguntar.

Momota-kun dejó caer sus hombros.

“…¿Cómo es que no lo entiendes?”

“E-Este… Ah. ¡¿Podría ser que estabas hablando de mí?!” dije, comprendiendo

tardíamente el significado, y Momota-kun se cubrió la cara avergonzado con una mano.

“U-Uwaa… L-Lo siento, a pesar de que dijiste cosas tan románticas, yo…” “…Es muy propio de ti, Orihara-san.” “E-Eh… ¿Qué significa eso…?”

Mientras hablábamos, se escuchó un mensaje en la distancia anunciando el final del festival de verano.

Nuestro primer festival de verano estuvo lleno de dificultades y percances, y fue problemático hasta el final.

Pero.

También sentí que nuestros corazones se acercaron un poco más.