Megami no Yuusha wo Taosu Gesu na Houhou (LN)

Volumen 4

Capítulo 1: Aventura En La Naturaleza Con La Diva Demonio: ¿¡Quiénes Son Esas Misteriosas Orejas Largas Que Viven En El Bosque Secreto?!

Parte: 4

 

 

Era tan temprano que el sol aún no había salido. Soplaba una fresca brisa otoñal. Once héroes se reunieron frente al bosque Cemetarium. Había todo tipo de héroes, desde un joven guerrero empuñando su espada hasta un experimentado usuario de la magia. Sus diferentes edades y apariencias los convertían en un grupo variopinto. El único denominador común era que cada uno de ellos era un hombre poderoso.

“¡Guau! No puedo soportarlo. Vamos a poner en marcha este espectáculo”, le dijo uno de los héroes al dueño.

Publicidad G-AR



“Tranquilo. No es divertido jugar con las damitas cuando aún están medio dormidas”.

“Ja-ja-ja, no te equivocas”.

Los hombres soltaron sonoras carcajadas y empezaron a estirarse preparándose para el reto que se avecinaba. El grupo de Shinichi los observaba desde detrás de una roca a poca distancia.

“Parecen realmente preparados para salir”, observó Arian con expectativa.

  • Uh-huh…”, dijo Shinichi, con la frente arrugada. “¿No es raro emocionarse tanto por una pelea perdida?”

“¿Lo es? Imagino que Su Alteza se alegraría mucho de una batalla así”. Celes inclino la cabeza.


“Eso es sólo un problema con tus estándares”, replicó Shinichi.

Incluso entre aquellos con músculos por cerebro, el Rey Demonio y su esposa eran probablemente los únicos tan obsesionados con la batalla que, cuando no tenían un oponente igual de fuerte para desafiarlos, se aburrían de la victoria hasta el punto de empezar a esperar la derrota.

“Creo que a la mayoría de la gente no le gusta realmente luchar ──sino la sensación de ganar. Prefieren la gloria de la victoria a la derrota, ¿no?”

“No hay nada malo en lo que dices, pero no estoy segura de estar de acuerdo…”, dijo Arian con una extraña expresión en su rostro. Como espadachina, podía entender que alguien esperara una batalla acalorada.

“Y si el dueño ha estado luchando con ellos durante más de diez años, se desvía de lo normal. Es prácticamente un adicto a la batalla”, afirmó Celes.

“Supongo que eso es cierto. Pero los otros chicos parecen casi demasiado emocionados…” La cara de Shinichi decía que no estaba del todo convencido.

Pero no había ningún problema real si los héroes ayudaban a mostrar la fuerza de sus oponentes. Mientras Shinichi observaba a los hombres, el sol empezó a asomarse por el horizonte.

El dueño encaró el bosque y rugió. “¡Vengan, elfos! ¡Muéstrense! O prenderemos fuego a su querido bosque”.

Su voz resonó en los árboles. De las sombras del profundo bosque salieron tres jóvenes. Cada una de ellas tenía una piel de porcelana y un cabello dorado que brillaba. Sus miembros eran tan largos y esbeltos como los de una modelo, y sus rostros eran tan perfectos que podrían haber sido cincelados por un maestro artista. Y, por supuesto, sus largas orejas terminaban en puntas afiladas.

“¡Los elfos están aquí!”

Los hombres soltaron un grito, estallando de excitación reprimida, corrierron hacia los guardianes del bosque que los habían golpeado muchas veces.

“””¡Oh, por favor! ¡Maltratanos hasta la muerte!”””

Y entonces los hombres pusieron sus fetiches masoquistas en plena exhibición al mundo.

“…¿Qué?”

Mientras el grupo de Shinichi perdía toda capacidad de formar palabras, las elfas se enfrentaron a los hombres, lanzando cada una un hechizo mágico con pura repugnancia en sus ojos.

“¡No se acerquen, humanos! ¡Flame Blast!”

Las tres elfas invocaron tres enormes pilares de fuego, engullendo a tres de los hombres que se precipitaban hacia ellas.

Pero mientras sus cuerpos eran incinerados por la explosión, los hombres lanzaron gritos de éxtasis.

“¡Gracias!”

“¡Uf, tu amor es tan caliente!”

“…Ew”, se asqueo involuntariamente Celes, con la mirada helada.

Pero si los hombres hubieran podido escuchar su insulto, lo habrían tomado como la guinda del pastel.

“¡Hoy será el día en que por fin me des una patada con tu dulce pie!”

“¡No te acerques a mí, pervertido! ¡Suffocate!”

“¡El paraíso es recibir una bofetada después de chupar tus largas orejas!”

“¡Prefiero morir! ¡Ice Javelin!”

Incluso cuando sus hombres fueron asesinados, los pervertidos no mostraron ningún miedo, corriendo hacia el fuego para ser eliminados por los elfos. Sólo el dueño logró alcanzar a uno de ellos. Después de todo, la única razón por la que se ejercitó fue para saborear este dolor durante más tiempo. Esquivó el torbellino de ataques con sus músculos de acero.

“Durante diez años, no he anhelado otra cosa que esas largas orejas. Por fin podré cumplir mis deseos… ¡Adelante! ¡Perfora mi pecho con esas orejas puntiagudas!”

“””¡Qué asqueroso ──!””” gritaron todas las que estaban cerca de Shinichi cuando el dueño abrió los brazos de par en par, lanzándose hacia delante para abrazar al elfo más cercano.

Con un grácil agache, ella logró evitar su abrazo, saltando hacia atrás con una patada de salto mortal reforzada por la magia.

“¡Piérdete, basura humana!” Duro como el acero, su delgado pie apuntó al centro de su ingle.

“—¡¡¡!!!” Dejó escapar un aullido insonoro mientras salía despedido hacia el cielo, con un aspecto positivamente extasiado.

Cuando se estrelló en el suelo sobre su cabeza, respiró tranquilamente, aunque debía de sentir un inmenso dolor. Entonces su cuerpo se vio envuelto en una misteriosa luz antes de desaparecer.

“¡Geez! ¡Todos los humanos son la escoria de la sociedad!” escupió un elfo frente al bosque después de que todos los héroes hubieran desaparecido.

Incluso Shinichi y los demás no pudieron pensar en una buena réplica.

“¿Todos los héroes son unos pervertidos…?”, preguntó vacilante.

“Bueno, estaba ese obispo que amaba a las menores de edad, el Santo que está loco, la Santa Madre que prácticamente saliva por el romance entre dos chicos…

Y ahora tenemos a los pervertidos masoquistas con fetiches de elfos. Ella tiene razón. Todos son basura humana”, dijo Celes.

“¡Y-Y-Yo no soy un pervertida!” exclamó Arian, pero Shinichi no estaba del todo seguro. Después de todo, ella le había hecho lamer las escamas de su cuello, lo que se acercaba bastante a la perversión.

Detrás de él estaba Rino, con cara de confusión. “Oye, Shinichi. ¿Por qué esos héroes parecían contentos de ser asesinados?”

“Um, veamos … Hay algunos bichos raros en el mundo a quienes les gusta ser lastimados por las personas que aman …”, comenzó, logrando encadenar una oración. ¿Qué tan incómodo fue tener que explicarle el BDSM1 a una chica inocente?

Rino inclinó la cabeza hacia un lado y luego pellizcó suavemente el brazo de Shinichi entre sus pequeños dedos.

“¿Eso hizo que te gustara?”

Publicidad M-M2

“Uh…” Shinichi se sintió acalorado cuando Rino lo miró, pareciendo más madura que de costumbre.

Rápidamente se recompuso, sonriendo en respuesta y acariciando su cabeza suavemente.

“No tienes que hacer eso cuando ya te amo2“.

“¿De verdad? Yay!” exclamo ella, saltando de alegría sin ningún rastro de la flirteo del momento anterior.

Shinichi se sintió aliviado cuando Celes silenciosamente le dio una patada en el culo.

“¡Yow!”

“¿Te gusta lo que se sientes? Idiota asqueroso”.

“¡¿Qué quieres que haga?! ¿Darte las gracias?”

  • SB: esclavitud y disciplina, dominio y sumisión (bondage and discipline, dominance and submission)
  • SB: No tengo el raw asi que no se si le dice te amo(ai) o te quiero(suki) y si no saben cual es la diferencia pues ai es mas profundo que suki ya que el suki se usa cuando dicen te quiero y casi no dicen ai porque como dije es mas profundo/pesado/intimo decirlo en lugar de suki

“¡Si eso te hace feliz, entonces yo──!” comenzó Arian.

“¡Para! ¡Tus patadas no son una broma!” gritó Shinichi, escabulléndose de ella mientras se alejaba de su pierna. Odiaba que la superaran.

Estaban armando tal bullicio que cualquiera se habría dado cuenta de ellos, aunque no tuvieran las orejas largas.

“¡Ustedes, por ahí! ¡Salgan! ¡Dejen de esconderse!” llegó la voz enfadada de uno de los elfos. Gritó que, de lo contrario, haría explotar la roca tras la que se escondían.

Shinichi dejó escapar una sonora carcajada. “Je-je-je. Supongo que nos has encontrado”.

“Oh, ahórranos tus intentos de parecer genial”, dijo Celes mientras salían.

Por un momento, los elfos se sintieron confundidos por la composición de su grupo. Al fin y al cabo, era raro ver a un chico acompañado de tres chicas, pero sus rostros se enrojecieron rápidamente.

Uno de ellos les gritó enfadado. “Apuesto a que eres otro de esos pervertidos jadeantes, ¿eh? Diciendo que quieres lamernos de arriba abajo. Los voy a matar“.

“Cálmate. No me gustan tanto las orejas de elfo”, respondió Shinichi.

……Pinch. Celes se pellizcó la piel de su espalda.

Si no estuvieran en esta situación, probablemente habría aclarado── “No es que no me gusten las orejas de los elfos”── pero dada la gravedad de sus circunstancias, fingió no darse cuenta.

La elfa principal cerró los puños. “¡Como sea! Siguen siendo unos miserables que planean destruir nuestra tumba. ¡Los voy a matar!”.

“Sólo eres capaz de pensar en dos opciones, ¿eh?” Shinichi soltó un suspiro, mirando a la elfa que era linda, pero psicópata.

Dicho esto, sus reacciones no estaban fuera de lugar, dadas sus desafortunadas interacciones con los humanos hasta ahora.

“Permíteme aclarar las cosas. No somos como esos pervertidos. Hemos venido a hablar”, dijo Shinichi.

“”¿A hablar? “”, murmuraron los dos elfos de atrás, cautelosos pero interesados en Shinichi. Parecía diferente a los héroes.

Pero su líder lo reprendió, resoplando. “Hmph. ¿Crees que nos vamos a creer cualquier cosa que diga un humano?”.

“Oh, no seas así. Si fueran tan amables de prestar sus magníficos oídos y escuchar la humilde petición de un desdichado humano, les estaría más que agradecido”.

Shinichi trató de engatusarlos.

“¡Supongo que sí, si lo pones así!” La líder parecía haberse sentido halagada, abriendo los puños.

Eso fue fácil, pensó Shinichi, ofreciendo la caja de madera que había preparado antes.

“Espero que puedas aceptar esto como una pequeña disculpa por las molestias que han causado esos pervertidos”.

“¿Una ofrenda? Qué civilizado”, dijo el elfo principal con altivez, aceptando la caja y quitando la tapa. En su interior había una hogaza de pan con corteza dorada, que desprendía el dulce y agrio aroma de las uvas. “¿Qué es?”

Publicidad G-M3



“Un pastel hecho con las mundialmente famosas pasas y mermelada de uva de Uverse”.

El día anterior había hecho una muestra para Arian, Celes y Rino. Podía sentirlas conteniendo la baba detrás de él. Era, a todas luces, delicioso.

La cara del elfo se torció de asco al verlo. “Bien. ¿Pero cómo sé que no lleva algún afrodisíaco? Como en las novelas eróticas”.

“¡Yo nunca lo haría! Y espera──¿hay novelas eróticas en este mundo? ¡¿Y tú admites haberlas leído?!”

“¡O-o-o-obviamente no! Es imposible que una elfa culta lea burdas tonterías”.


Sus mejillas enrojecieron.

Sus dos compañeras se miraron. Sus miradas lo decían todo: estaba llegando a la pubertad, y ninguna negación podría ocultar la evidente verdad.

“De todos modos, pruébalo. Si descubres que está drogado, puedes darnos una paliza. Además, ¿no deberías ser capaz de usar un simple hechizo de desintoxicación?” señaló Shinichi.

“¡Obviamente!”, dijo ella, oliendo con recelo el pastel antes de cogerlo y darle un mordisco. Masticó en silencio durante un rato antes de asentir, aparentemente impresionada por ello.

“Huh. Los bárbaros no son malos cocineros”, observó con sinceridad, y entregó el pastel restante a sus dos amigos, que lo devoraron con gusto.

Pero no parecían tan asombrados por su sabor. Celes, Arian y Rino se quedaron boquiabiertas.

“¡Ridículo! ¡¿Cómo pudieron devorar ese pastel … ?! ” exclamó Celes.

“No puedo creerlo…”, añadió Rino.

“Deberían saborearlo más”, advirtió Arian.

Los dos demonios temblaron de miedo. Incluso Arian las miró con envidia, temiendo que las elfas estuvieran desperdiciando el manjar.


La elfa principal vio las reacciones de las chicas e hinchó su pequeño pecho con jactancia. “¿Haciendo un gran alboroto por esta mierda? Los humanos son tan groseros”.

“Oh, eso es vergonzoso”. Shinichi le mostró una sonrisa tranquilizadora, pero estaba repasando las posibilidades en su mente.

Ya sabía que los demonios tienen el peor gusto. Pero ese pastel estaba tan bueno que hasta Arian pensó que era una delicia. ¿Tal vez estos elfos tienen paladares realmente refinados?

Era extraño pensar que un pequeño asentamiento de un centenar de elfos sin capacidad de comercio desarrollara un gusto por lo gourmet3.

Y dijo que tenían “novelas”.

Incluso en este universo alternativo, las novelas eran una cosa que existía desde la antigüedad. Pero con los hechizos de para copiar, no había necesidad de una buena imprenta que pudiera manejar grandes cantidades de copias, lo que hacía que las novelas fueran difíciles de conseguir.

La lectura era un lujo al que sólo podían acceder las clases altas de las grandes metrópolis. No era algo que los campesinos de las pequeñas aldeas pudieran disfrutar fácilmente. Los índices de alfabetización en las ciudades estaban bien, pero no se podía decir lo mismo de los pueblos. Las masas nunca aprendían a leer o escribir, sino que optaban por disfrutar de los relatos orales de un juglar de paso. Esta era la principal razón por la que los juglares podían influir en la gente.

  • SB: El otro día me entere que gourmet significa el arte del buen comer y beber por eso el que solo sepa bien la comida no es suficiente también es importante la cantidad asi que a mi parecer el termino gourmet esta mal usado

Basándome en sus reacciones, creo que es seguro asumir que la lectura es un derecho básico para los elfos, e incluso pueden darse el gusto de leer novelas.

Esto también fue extraño. Tendría sentido que los desarrollos culturales abundaran en las ciudades, pero este era un pequeño asentamiento escondido en lo profundo del bosque.

¿Qué saben ellos de tecnología── y ciencia?

Empezaba a sentir la necesidad de ser más precavido. No se sintió así cuando los vio defenderse de once poderosos héroes sin sudar, pero ocultó sus nuevas emociones con una sonrisa.

“¿Por qué no nos presentamos de una vez? Me llamo Shinichi Sotoyama”.

“¡Ha! ¿Crees que un digno elfo daría su nombre a un humano grosero?”, escupió su líder.

“Díselo tú, Clarissa”, le instó una de sus amigas.

“Vaya, Clarissa, eres un ejemplo para todos los elfos”, añadió la otra.

“¡Cállate! No se lo digas”, espetó Clarissa a las amigas que la habían traicionado.

“¿Todos los elfos tienen muerte cerebral?”, preguntó Shinichi telepáticamente.

“No tengo ni idea”, respondió Celes, desviando la mirada. Parecía que ella también sabía que podía ser tonta a veces.

“Vayamos al grano. Si aceptas nuestra propuesta, haremos algo con esos héroes pervertidos”, dijo Shinichi.

Publicidad G-M3



“¡¿En serio?!”, gritó Clarissa, mordiendo el cebo que Shinichi le tendía.

“Encerio. Será difícil que consiga que las cosas se acaben para siempre, pero podría darte un pequeño respiro ── al menos por unos meses”.

Por el momento, la Santa Madre tenía básicamente las riendas de toda la iglesia.

Publicidad M-M1

Si ella daba la orden, sería fácil reducir el número de ataques a una vez al mes.

Si los fetichistas de elfos se revelarán, la iglesia podría arrastrar sus cuerpos al lejano oeste. Como héroes inmortales, obviamente resucitarían en la iglesia más cercana, pero tardarían meses en viajar de vuelta desde el extremo más lejano del continente. Y si realmente se diera el caso, Shinichi podría encontrar algunos sádicos elfos oscuros en el mundo de los demonios y hacer que los héroes se obsesionaran con ellos.

“Si aprovechas esos meses para reubicarte, no volverás a ser atacado por los héroes”, sugirió Shinichi.

Las cejas de Clarissa se alzaron. “¿Disculpe? ¡¿Por qué tendríamos que huir de los burdos humanos?! ”

“Incluso con la magia, es difícil mover todas nuestras casas y granjas…”, añadió una de sus compañeras.

“Además, no podemos abandonar la tumba”, terminó la otra.

“Ya veo. Está claro que esa no es una opción” dijo Shinichi, retrocediendo, aunque estaba molesto por dentro-.

Sería fácil para nosotros investigar la Tumba de los Elfos si simplemente salieran de su pueblo…

No había forma de que ese truco funcionara. Después de todo, los elfos habían soportado los ataques de los héroes durante más de doscientos años sin abandonar nunca las ruinas.

Pero el hecho de que valoren tanto ese lugar hace que quiera comprobarlo.

Esta era la única pista que habían logrado encontrar sobre la Diosa Elazonia. No había forma de que dejara escapar eso.

“En ese caso, no voy a sugerir que se trasladen. ¿Qué tal si pasas un tiempo con nosotros y nos defendemos de los héroes?”

“O sea… ¡que piensas emborracharnos para dormir con nosotras, ¿eh?! ¡Eres un absoluto asqueroso!”, gritó Clarissa.

Megami no Yuusha Volumen 4 Capitulo 1 Parte 4 Novela Ligera

 

Publicidad M-M5

“¿Es otra pepita de sabiduría de tus novelas eróticas favoritas?”

“¡D-D-Dije que no las leo!”

Ver a Clarissa ponerse tan nerviosa hizo que Shinichi quisiera intimidarla más, pero logró controlarse.

“Lo que quiero decir es que podríamos intercambiar libros y comida hasta charlar con una taza de té. Básicamente, quiero que nos hagamos amigos”.

Basándose en su conversación, no tenía motivos para creer que los elfos les permitirían ver la tumba si se lo pedían de inmediato. Por eso planeaba dar pequeños pasos para mejorar sus relaciones antes de revelar su verdadero objetivo.

No tengo mucho tiempo que perder, pero podría meter la pata si me precipito. Además, existe la posibilidad de que encuentre la información que necesito escuchando sus historias.

Si pudiera conseguir que le contaran información sobre la Diosa no necesitaría poner un pie en su sagrada tumba. Ese era su proceso de pensamiento detrás de esta sugerencia ──eso era lo más pacífico──pero Clarissa no hizo ningún intento de ocultar su ceño.

“¿Disculpa? Un humano nunca podría estar en igualdad de condiciones y hacerse amigo nuestro. Quiero decir, míranos──somos hermosos, dignos, fuertes. ¡Deberías saber cuál es tu lugar!”.

“Eres tan extremista que casi es honesto”.

“¿Qué eres, un masoquista?” le espetó Celes.

Pero ella miraba fijamente a los elfos, con una vena palpitando furiosamente en su sien.

Cuando echó un vistazo, vio a Arian con cara de descontento y los labios fruncidos. Incluso Rino parecía incómoda. Pero Shinichi estaba más confundido que enfadado.

Sí, son mejores en la magia que los humanos. Claro, son hermosos. Su cultura también parece más refinada. Entiendo por qué son arrogantes, pero esto…

Clarissa estaba innecesariamente enfadada, ladrando como un pequeño Pomerania4 enfrentado a un perro más grande.

¿Tiene miedo de los humanos? No, ese no puede ser el caso. Seguro que…

Shinichi reconstruyó la razón detrás de este sentimiento de extrañeza como un rompecabezas, decidiendo cambiar de táctica y pasar a la ofensiva.

“¿Te parece bien?”

“¿Con qué?”, preguntó Clarissa.

“¿Realmente estás de acuerdo con destruir tu única oportunidad de salvar a tu pueblo de la destrucción?”, respondió, dejando de lado por completo su actitud humilde de antes.

Optó por un tono más contundente. No hubiera sido de extrañar que los arrogantes elfos se enfadaran y le lanzaran algún hechizo de ataque, pero ──.

“¡¿D-D-De qué estáis hablando?!”, tartamudeó Clarissa, mostrando claramente su agitación. Los dos elfos que estaban detrás de ella abrieron mucho los ojos sorprendidos, intercambiando miradas incómodas.

“Tengo razón, ¿no es así?” Shinichi tenía una sonrisa malvada, adivinando por sus reacciones que estaba en lo cierto.

“Ummmm… ¿Puedes explicarlo?” preguntó Rino. No entendía muy bien lo que quería decir.

Shinichi explicó en voz baja: “Básicamente, su aldea corre el riesgo de ser destruida porque no tienen suficientes hombres5“.

“¡¿Qué?!”

“¡Tsk…!”

Arian, Celes y Rino se quedaron atónitas, pero las caras de los elfos se torcieron de frustración.

  • SB: Busquen en Google xD pero debo decir que odio a esta clase de perros
  • SB: Solo puedo pensar en querer vivir en ese lugar para siempre y de ser posible morir por sunusnu

Shinichi no necesitaba más confirmación; con mirar su reacción era suficiente.

“La pregunta me vino primero cuando las vi a todas defenderse de los pervertidos fue: ¿Por qué no estaban luchando los elfos masculinos?”

El dueño y los demás héroes se habían olvidado por completo de su objetivo principal de destruir la Tumba de los Elfos. En su lugar, seguían atacando a los elfos de forma periodica para forcejear con hermosas mujeres elfas. Los elfos eran conscientes de ello desde hacía tiempo. No había otra razón para desviarse de su camino para enviar a las chicas, sabiendo que les incomodaría.

“¿Tal vez les preocupaba que los pervertidos mataran a los elfos varones en un ataque de ira?”, preguntó Celes, pensando que eso era cierto.

“No diré que no es una posibilidad”, respondió Shinichi con una sonrisa amarga.

La única razón por la que los héroes se precipitaron a la batalla sin cambiar su estrategia fue porque les gustaba ser maltratados por las elfas. Si los elfos varones fueran enviados al frente, los héroes se volverían más astutos con sus métodos──tendiendo trampas, planeando ataques sorpresa o aprovechando los puntos débiles, lo que los convertiría en enemigos peligrosos. En ese caso, tendría sentido que los elfos enviasen a las chicas, sabiendo que los héroes no serían tan duros con ellas. Pero si los elfos fuesen tan dignos como Clarissa les hacía parecer, no correrían el riesgo de enviar a sus chicas, sabiendo que había una posibilidad entre un millón de que fuesen capturadas y atormentadas por los humanos a la manera de las novelas eróticas.


“Y sin embargo, el grupo de hermosas chicas de Clarissa fue enviado a luchar contra los héroes. ¿Por qué? Porque apenas hay hombres. Sería un problema si uno se resbalara y muriera”, explicó Shinichi.

“¡Uuugh…!” Clarissa rechinó los dientes ── de una forma impropia de una orgullosa elfa.

La suposición de Shinichi parecía ser acertada.

“¿Pero qué causó esta discrepancia?” preguntó Arian con franqueza.

Shinichi pensó mientras respondía con cuidado. “Podría ser simplemente una tendencia. Los niños y las niñas suelen nacer al mismo ritmo, pero el nacimiento de un niño no garantiza que el siguiente bebé vaya a ser una niña”.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios