Kore Wa Zombie Desu Ka?  (NL)

Volumen 7

Capitulo 3: Un Martini Para La Mesa Ocho

Parte 2

 

 

Bueno, ciertamente, Saras no parecía ser del tipo al que le gustan los peluches.

“Bueno, lo siento. Entonces, ¿por qué estabas mirándolo?”


“… Um, e-eso es… Bueno… Mmm… ¿Quizás también sería un regalo adecuado?”

“¿Ese pollo? No me parece muy lindo.”

“¿No lo es?… Ya veo. ¿No me encuentras linda tampoco…?”

“En lugar de linda, diría que eres hermosa. Así que no lo negaré.”

“¿Hm? ¿Qué está pasando aquí?”

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Mihara se acercó. Mihara era una chica de secundaria, por lo que probablemente tenía un buen sentido de lo que era y no era lindo. Le mostré el pollo y le pregunté al respecto.

“Hm, me parece muy lindo.”

Ella estuvo de acuerdo con Saras. Bueno, está bien, tal vez lo era…

“Pero estamos aquí para encontrar un búho de peluche.”

“Sí. Eso es verdad.” Saras parecía un poco reacia cuando dejó ese estante atrás.

Ahora que estaba solo con Mihara, traté de entablar una conversación.

“Mihara, parece que sabes mucho sobre este tipo de cosas.”

“Hmm, bueno, no creo que sepa mucho…”

Se acabó la conversación. Ahora que lo pensaba, no había muchas cosas de las que pudiera hablar con Mihara.

De todos modos, casi nunca estaba solo con ella, ya que Tomonori u Orito solían estar allí. Incluso si estuviera solo con ella, no habría mucho de qué hablar entre alguien del equipo de baloncesto, y alguien que no formaba parte de ningún equipo.

“Ah, solo iré a preguntarle a un empleado.”

Maldita sea, mientras pensaba en todo esto, Mihara se fue.

No creo que me odiara ni nada… Pero supongo que tuve la sensación de que no éramos muy unidos.

Bueno, también supongo que un zombi como yo, nunca podría acercarse casualmente a un empleado de la tienda y hablar con él.

Mihara corrió hacia mí con una sonrisa en su rostro.

“¡No tienen búhos cornudos, dijo!”

‘¡¿Por qué diablos estabas sonriendo entonces?!’ Quería responderle eso, pero Mihara siguió sonriendo y continuó.

“Pero también me habló de un lugar que podría tenerlos:”

¡Bien hecho, mi lady! Rápidamente recorrí la tienda, reuniendo a todos de nuevo.

Mientras hacía eso, noté a Saras una vez más parada frente al pollo.

Parecía muy interesada en él, así que tomé un pollo del estante.

“Te lo compraré.”

“¿Hm? Haces que parezca que quiero que me lo compres.” “¿No es así? Quieres este animal de peluche, ¿o no?”

“No… No me importa para nada. Dáselo a una de las mantenidas de tu casa. Este es … un buen trabajo “.

“Pero todavía no te he comprado un regalo de Navidad.”

“El solo hecho de estar juntos así es suficiente para hacerme sumamente feliz.”

Sinceramente, estaba feliz de escuchar eso, pero definitivamente también quería regalarle algo.

Bueno, sí a Haruna no le gustaba, siempre podría dárselo a Yuu, supongo. Traje el pollo a la caja registradora.

***

 

 

Después de eso, tuvimos que pasar por tres tiendas antes de encontrar finalmente al búho cornudo. Realmente no esperaba que tomara tanto tiempo; para ese momento ya eran las 9 de la noche. Siento que deberíamos compensar al exhausto Orito de alguna manera, terminamos yendo a un restaurante de sushi en cinta transportadora.

“Sabía que visitaríamos un restaurante de sushi, pero ¿qué es este lugar? ¿Uno de esos restaurantes de ‘sushi rotativo’?”

Saras era tan ‘de la alta sociedad’, que probablemente siempre comía en famosos restaurantes de sushi, por lo que parecía que este era su primer viaje a un sushi con cinta transportadora. Qué burgués de su parte.

Nos llevaron adentro y los seis nos sentamos en un banco largo.

Hiramatsu y yo estábamos sentados del lado de la cinta transportadora, lo que significa que probablemente seríamos los responsables de quitar los platos de la cinta transportadora.

“Hoshigawa-san, ¿es esta tu primera vez en un restaurante así? Vaya, no lo hubiera adivinado.”

Mihara, que estaba sentada a mi lado, bromeó un poco con Saras.

“No creo que sea tan sorprendente.”

Junto a Saras, Orito se sentó junto al pasillo y dejó todas las bolsas que llevaba en el suelo con un suspiro. Realmente parecía cansado.

“Parece que solo come en restaurantes caros…”

Había una pizca de celos en la voz de Mihara. Saras soltó una pequeña risa.

“No voy a negar eso, pero puedo comer cualquier cosa. Incluso la hierba salvaje que crece junto a la carretera.”

“Ah, hicimos un entrenamiento así, ¿no? Ser empujado al desierto y decirle que sobreviva con solo un cuchillo.”

Tomonori tenía su habitual expresión feliz mientras recordaba el pasado.

Espera, ¿eso realmente estuvo bien? Hablar de su entrenamiento ninja sin importarle quienes podían escucharla.

“Mentirosa. No hay estudiante en el mundo que vaya y haga cosas raras de entrenamiento de guerra como esa.”

Mihara y Orito se rieron.

“¡Estoy hablando enserio! Soy muy buena en juegos de supervivencia como ese. Cierto, Saras-… Erm, Hoshigawa.”

“¿Quién sabe? No me mires.”

Saras probablemente no quería que ninguna persona normal supiera que ella era una ninja, así que rápidamente barrió la declaración de Tomonori debajo de la alfombra.

“Entonces, ¿qué estamos comiendo?”

Saras intentó cambiar de tema.

“Bueno, primero, pásame el murasaki.”

“¿Murasaki?”

Orito parecía realmente alarmado. Yo tampoco tenía idea de qué estaban hablando.

“… Ella está hablando de la salsa de soja.”

Hiramatsu parecía entender. Ah, entonces estábamos usando jerga especializada en sushi.

Ugh, es tan difícil de entender…

“Oh. Pensé que habías visto a un asesino de demonios o algo así. En serio me asustaste con eso.”

Decidí no preguntarle con qué estaba confundiendo las cosas y le pasé la salsa de soja a Saras.8

“Entonces, si estamos en un sushi giratorio, ¿qué gira exactamente?”

“Ah, ya ves, aquí está esta cinta transportadora que recorre todo el restaurante, y los platos giran alrededor.”

“¿Platos?” Saras inclinó la cabeza hacia un lado, luciendo un poco dubitativa.

“Ah, verás, en los restaurantes de sushi normales, la comida viene en tablones de madera, ¿no es así?”

Tomonori movía las manos de un lado a otro, tratando de imitar las tablas de madera geta que encontraría en los restaurantes de sushi al estilo Edo.

“De todos modos, solo espera. El sushi vendrá rodando…”

¿Hm?

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“Rodando…”

“No va a venir.”

La cinta transportadora simplemente giró tristemente, sin sushi encima. ¿Cuál era el significado de esto? Quizás debería llamar a un camarero.

“Ah, Aikawa. Por ahí.”

Tomonori me tocó el hombro. Parecía que se había dado cuenta de algo.

Seguí su ejemplo y me levanté, mirando bien hacia el otro lado de la cinta transportadora.

Y luego, rápidamente me bajé. En el otro lado estaba…

“¡Vamos, vamos, más más más! ¡No creas que puedes llenar mi barriga de genio con eso!”

Una chica con un ahoge que rebotaba estaba sentada del otro lado. Necesitaba una lección de modales…

“Haruna, por favor, quédate quieta.”

Una chica con cola de caballo la amonestó, casi como una madre. Junto a ella estaba sentada una chica de cabello plateado que vestía una armadura de placas.

De hecho, las mantenidas de mi casa estaban allí. Habían terminado de trabajar en el manuscrito, por lo que probablemente habían decidido ir de compras a Harajuku, donde se reunían los jóvenes de Tokio, y ahora estaban aquí disfrutando de una comida sofisticada.

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Esto estaba mal. Haruna todavía creía en Santa Claus, así que no podía dejar que viera los regalos de Navidad que habíamos comprado.

“¡Hagamos un pedido!”

Tomonori se inclinó hacia adelante y apretó el botón de llamada en el intercomunicador. Muchos restaurantes de sushi rotativos recientes te permiten ordenar usando un panel táctil, pero parece que aquí ordenaste directamente usando el intercomunicador.

“¿Qué te gustaría pedir?” Una voz vino del intercomunicador.

“¡Chawan mushi, por favor!”

Tomonori gritó en voz alta. Oye, no hagas tanto ruido. Se darán cuenta de que estamos aquí.

Todos pidieron lo que querían y, después de unos minutos, lo que pedimos comenzó a rodar hacia nosotros en la cinta transportadora.

El mensaje ‘su pedido está en el plato amarillo’ pronto se mostrará en la pantalla de nuestro intercomunicador.

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El plato amarillo de la cinta transportadora también tenía un letrero de ‘reservado’ pegado.

Ya veo. Entonces ese plato contenía la comida que habíamos pedido.

“Hm, esto me recuerda bastante al Nagare soumen9.”

Saras murmuró eso. Era la primera vez que veía un sushi giratorio en funcionamiento. Y sí, ahora que lo pienso, admitiré que tal vez este tipo de sistema se basó en Nagare soumen.

Haruna no había arrebatado nuestro pedido, posiblemente porque Sera estaba allí para detenerla.

No está bien. No podía dejar de pensar en lo que estaba pasando al otro lado de la cinta transportadora.

Oh, Haruna parecía haber pulsado el botón de llamada.

“¿Qué te gustaría pedir?”

“Un Martini para la mesa ocho.”

¡¿Martini?! ¡¿Qué demonios?! ¡¿En qué tipo de bar se suponía que estábamos?!

Un camarero se acercó a nuestra mesa, sosteniendo algo.

“Esto es de los clientes de allí.”

¡¿Estábamos en la mesa ocho?! Mierda, parece que nos descubrieron por completo.

Pero, también éramos todos estudiantes de secundaria, así que rechacé el Martini.

“Orito. Solo trata de mantener escondido al animal de peluche del búho cornudo. Le daré eso a Haruna a nombre de Santa más tarde.”

Pero no parecía que Orito me estuviera escuchando.

Me deslicé debajo de la mesa y metí la mano en una de las bolsas de papel a los pies de Orito. Encontré la bolsa de plástico con la lechuza dentro y la metí tan profundamente en la bolsa como pude.

La bolsa de papel se hinchó. Pero al menos así, nadie debería poder averiguar qué había dentro. Ugh, las cosas que tengo que hacer…

Cuando levanté la cabeza, vi muslos, muslos, muslos frente a mí.

Tragué saliva y miré los hermosos muslos frente a mí que se asomaban por las faldas de las chicas.

Saras descruzó y volvió a cruzar las piernas en el orden opuesto. Podría jurar que acabo de ver sus bragas allí.

Pensar que había un paraíso así esperándome aquí mismo…

“Mmm, entonces Haruna-sensei todavía cree en Santa Claus.”

“Fufu… Ella también… tiene su lado lindo.”

Sus rodillas se movieron. Esto estaba mal. Muy muy mal.

Me voy a convertir en un completo pervertido aquí abajo.

Poniendo una expresión inocente en mi rostro, me retiré del cielo que existía debajo de la mesa.

Mihara, que era una amante de las cosas lindas, miró con amor a Haruna al otro lado de la cinta transportadora.

“Ya veo. Es por eso que Aikawa estaba buscando desesperadamente un animal de peluche.”

Deja de sonreírme así.

“¡No te atrevas a dejar que la Maestra descubra que eres Santa! ¡Será mejor que la hagas feliz!”

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Deja de hablar como si fueras un pescador de mediana edad demasiado considerado. ¡Haruna te va a escuchar!

“El sushi… parece que viene.”

“¡Oh! ¡Aikawa! ¡Apurate, apurate!”

Sí, sí. Instigados por Tomonori, tanto Hiramatsu como yo comenzamos a tomar sushi de la cinta transportadora y colocarlo sobre la mesa.

“¡¿Este es ese lugar, verdad?! ¡¿El lugar de sushi donde puedes pedir cualquier cosa?!”

Tomonori rápidamente comenzó a comer su atún, que había rociado con el aderezo que había traído.

“Sí, lo es. Estamos en el ‘Divertidamente raro sushi giratorio’. No se aceptan devoluciones.”

¿Divertidamente raro sushi giratorio? ¿Qué demonios fue eso? Ah, supongo que al igual que el Martini que habíamos comprado hace un rato, ¿podrías pedir cosas realmente raras aquí?

“… Yo… quería venir aquí… al menos una vez… Tal vez… ¿deberíamos pedir algo raro?”

“Vamos a probarlos para ver si realmente lo tienen todo.”

Mihara e Hiramatsu se sonrieron mutuamente. Mientras tanto, Orito se quedó allí sentado, todavía exhausto y llenándose las mejillas de sushi.

Podríamos haber estado rodeados de chicas guapas, pero eran las chicas de siempre, por lo que probablemente no era demasiado emocionante para Orito. Definitivamente no hay nada por lo que preocuparse.

Tampoco parecía darse cuenta de que Haruna y las demás estaban aquí. Bueno, si le mencionaba que Sera estaba aquí, probablemente volvería a su antiguo yo, pero no había nada en el mundo más molesto que su antiguo yo, así que me lo guardé.

“Ohh, el ootoro está muy rico…” Mihara dejó escapar un suspiro.

“Sí… está… delicioso…”

Hiramatsu sonrió, su sonrisa estaba parcialmente cubierta por su mano, la cual estaba usando para cubrir cortésmente sus labios mientras masticaba. Sin embargo, cuando vi esa sonrisa, supe que había valido la pena venir.

Me serví un poco de té mientras echaba un vistazo al menú. Realmente me impresionó la cantidad de coberturas de sushi que tenían para ofrecer aquí.

Sin embargo, el ingrediente que más me llamó la atención fue la ‘berenjena wasabi’.

Supuse que sería sushi cubierto con berenjena en escabeche… Pero había una carita sonriente impresa al lado del elemento del menú. Esa marca significaba que el artículo era apto para niños y no tenía wasabi.

Berenjena wasabi sin wasabi… ¡¿Qué diablos se suponía que era?! Bueno, no, entendí lo que querían decir. Probablemente había algo de sabor a wasabi en la berenjena en escabeche, pero no había nada de wasabi en el arroz de sushi.

… ¿Pero era realmente necesario que mantuvieran el wasabi fuera del arroz? Quiero decir, la maldita berenjena ya tenía sabor a wasabi…

“¡Pidamos más! ¡Más, más!”

Tomonori se inclinó hacia adelante y apretó el botón del intercomunicador. Tenía los pechos más grandes de todos en nuestra mesa, y se movían mientras ella se movía. Vi a Orito animarse un poco al verlos.

“¿Qué te gustaría pedir?”

“Un melón.” dijo Tomonori.

“Paella.” Mihara hizo una petición completamente irrazonable.

“Lo siento, pero tengo que preguntar. ¿La berenjena de wasabi sin berenjena es realmente buena?”

Le pregunté eso al intercomunicador, con una pequeña sonrisa en mi rostro.

“……” Sin respuesta.

“Bueno, olvídalo. Umm… Una croqueta de crema, por favor:”

Esperaba algún tipo de reacción, pero supongo que no debería haberla esperado. Las personas que establecían el menú probablemente eran diferentes de las personas que trabajaban en el intercomunicador.

Pero estoy bastante seguro de que un lugar de sushi no tendría paella. Pensé eso, pero…

Un poco de paella llegó rodando casualmente por la cinta transportadora. Supongo que realmente podrían poner cualquier cosa que quisiéramos en sushi.10 “Ahahaha, la paella realmente vino.”

Mihara realmente se veía feliz. No había mucha paella, pero definitivamente había paella.

Y, por supuesto, el melón también bajó por la cinta. Tomonori no perdió el tiempo en mojarlo con el vendaje.

Pero mi croqueta de crema nunca llegó… En cambio, recibí una orden de berenjena con wasabi.

“Aikawa trató de pasarse de listo, así que, por supuesto, esto sucedería.” Mihara se río entre dientes y señaló la berenjena wasabi.

Lamenté haber dicho algo extraño por el intercomunicador y agarré el plato de berenjena wasabi y lo coloqué sobre la mesa.

Al otro lado del cinturón, la mesa de Haruna presionó el intercomunicador.

“¿Qué te gustaría pedir?”

“Ballena, cangrejo de Shanghai y fuagrás.”

Haruna también estaba siendo bastante irracional, pero todo lo que pidió se le pasó por la cinta transportadora, haciendo que me entristeciera aún más mi berenjena wasabi.

“¡Pidamos más cosas! ¡Más cosas!”

Tomonori parecía que se estaba divirtiendo muchísimo cuando se inclinó hacia adelante y presionó el botón del intercomunicador.

“¿Hicimos un pedido de engawa de cola amarilla?” Mihara parecía desconcertada por la solicitud de Saras.

“¿Engawa? ¿No es eso una platija?”

“Engawa se refiere a la cabeza de un pez. No se limita a la platija.” “Oh.” La idiota de Tomonori parecía impresionada por esa revelación. “¿Eso sería todo?”

Sin demora un momento, también hice un pedido.

“Tomaré un rollo de atún, por favor.”

Pedí algo normal. Realmente no quería llenarme solo con berenjena wasabi. “¡Curry! ¡Quiero un poco de curry!”

Bueno, si servían paella, probablemente también servían curry.

Pronto, un rollo de curry envuelto en algas y un plato de engawa de aspecto extraño llegaron en la cinta.

Y luego, había otro plato de berenjena wasabi… Maldita sea, creo que realmente cabreé al chef.

“¡Un elefante indio para la mesa ocho!”

La voz de Haruna resonó en el restaurante. Tal vez me estaba pidiendo cosas por lástima … pero ¿un elefante indio?…

“Entonces, ¿cómo fue tu primera experiencia con sushi giratorio? Bastante buena, ¿verdad?”

Mihara puso los codos sobre la mesa y miró a Saras.

“Ciertamente no fue insatisfactorio.”

Una respuesta típica de Saras, pero Mihara no parecía feliz con ella.

“Cuando lo pones así, el resto de los que estamos aquí despotricando y delirando sobre la comida parecemos idiotas.”

“No es verdad. Todos tienen comida que les gusta. No te lo voy a negar.”

“Y lo que es más importante, deje de dejar que el morado penetre en el arroz.”

“¿Eh? ¿Qué demonios significa eso? ¡Tiene que haber una forma más normal de decir eso!”

“Oye, oye, Kanami. No te enojes tanto… Divirtámonos todos, ¿de acuerdo?”

Tomonori intentó calmar a Mihara.

“Pero… pero…”

El ambiente comenzó a tensarse cuando llegó un camarero.

“Esto es de la mesa de allá.”

Y puso un plato de berenjena wasabi frente a nosotros. Probablemente no pudieron encontrar un elefante indio… Sí, eso debe haber sido todo.

Mi estado de ánimo comenzó a hundirse tanto como el de Orito. Probablemente mi cara también se estaba poniendo rígida.

“E-En realidad… creo que sensei también… quería comer sushi… nos dijo eso antes del descanso.”

Por ‘sensei’, probablemente estaba hablando al Barón Demonio.

“Pero también dijo que había olvidado que su médico le había ordenado que no comiera sushi.”

Agregué a la historia de Hiramatsu.

Estaba tratando de acabar con la atmósfera tensa que Mihara y Saras habían comenzado a crear alrededor de nuestra mesa.

“¿El maestro de encargado de la clase C? ¿A dónde fue tu otro maestro de aula de todos modos?”

Tomonori también saltó a la conversación.

Nuestro otro maestro de aula era Kurisu Takeshi. Ahora era la chica mágica más fuerte y probablemente estaba en algún lugar bebiendo sake. Tal vez incluso estaba de vuelta en la casa de Nene-san en este momento.

“Me gusta… ese maestro también…”

Hiramatsu comenzó a comer la berenjena de wasabi con tristeza. Probablemente había adivinado que yo no quería comerla.

“Ah, no era muy emocionante ni nada, pero la clase siempre transcurría sin problemas.”

Mihara todavía no se veía muy feliz mientras comía su paella. No parecía que estuviera planeando pedir sushi.

“Realmente no se destacaba mucho, pero fue un buen maestro.”

Orito agregó su opinión, a pesar de que todavía miraba hacia abajo.

Saras y yo solo escuchamos sus palabras en silencio.

Después de todo, sabíamos que teníamos que acabar con Chris.

Tomonori también conocía la verdadera situación, pero…

“Ese sensei me ayudó a mejorar mis calificaciones, ¿sabes? Él era realmente muy bueno en la enseñanza.”

Tomonori asintió un par de veces. Bueno, había escuchado que incluso en Virie, Chris le había enseñado a la maestra de Haruna, Dai-sensei. Por lo tanto, no es de extrañar que sea buena enseñando.

Tomonori… Ella consideraba a Chris y Kurisu Takeshi como dos personas separadas, ¿no es así?

Puede ser porque era una idiota… O tal vez solo estaba siendo discreta.

Todo el mundo empezó a hablar más y más sobre Chris.

Saras y yo realmente no pudimos unirnos a la conversación, solo comimos nuestro sushi mientras de vez en cuando decíamos una palabra o dos de acuerdo.

“… Aikawa-kun… ¿no… te agradaba Kurisu-sensei?”

Hiramatsu se disculpó cuando me preguntó eso. Sacudí la cabeza y respondí instantáneamente.

“No me gustaba el sensei que habíamos llamado Kurisu.”

“¿Qué pasa con esa forma de decirlo? Aikawa, ¿tú también lo estás haciendo? ¿Tienes algo que decirnos?”

Tonterías. Parece que había traído la ira de Mihara sobre mí.

“Un rollo de atún para la mesa ocho.”


Haruna una vez más hizo un pedido para nosotros, sonando casi como si estuviera jugando o algo así.

Pero quería comerme un rollito de atún… Haruna, bien hecho.

“Uh, quiero decir… bueno, supongo que soy tímido. Es vergonzoso decir que te gusta alguien. Esta chica de aquí también, estoy seguro de que realmente piensa que todo esto es delicioso.”

Señalé a Saras con el pulgar y traté de darle una excusa.

“No, realmente no es muy delicioso. Sin embargo, tampoco es insatisfactorio.”

Ugh, demasiado honesta, Saras, eres demasiado honesta. La honestidad puede llevarte a todo tipo de problemas, ¿sabías?

“¿Qué pasa con el engawa de cola amarilla? Tú eres quien lo ordenó.”

“Bueno, principalmente estaba probando su afirmación de que podíamos pedir cualquier cosa. El sabor en sí era… regular.”

“Tae-chan, ¿qué hay de ti? Todo es realmente delicioso, ¿verdad?”

“… Sí… yo… creo que todo está muy bien…”

“Como era de esperar, una chica de clase alta como tú no comprende los gustos de los plebeyos.”

Saras parecía resignada cuando comenzó a comer un trozo de jengibre en escabeche.

Teníamos que tratar de lidiar con esto con cautela aquí… Tan cautelosamente como el jengibre que estaba comiendo Saras. Ja ja.

“Tenemos que tratar de lidiar con esto con cautela aquí… ¡con tanta cautela como el jengibre que está comiendo! ¡Ja ja!”

Escuché el juego de palabras corriendo por mi cabeza salir de la boca de Tomonori, y sostuve mi cabeza con dolor.

¿Estaba en serio al mismo nivel que esa idiota?

“El jengibre es delicioso.”

Al ver a Saras comer el jengibre, Mihara también probó un trozo.

“¿En realidad? No es insatisfactorio, supongo, pero ¿es realmente tan delicioso?”

Mihara le dio a Saras una mirada de satisfacción. Saras frunció el ceño y se puso rígido.

Parecía que estas dos simplemente no se iban a llevar bien.

Nos acercamos al inicio de una guerra total, cuando…

“Esto es de la mesa de allá.”

El camarero puso un plato de berenjena wasabi frente a mí.

Caí más profundamente en la depresión.

***

 

 

Después de llenarme la barriga con esos horribles trozos de berenjena wasabi, dejé el restaurante de sushi con los demás y nos dirigimos hacia la estación de Harajuku. Caminamos por Meijidoori, que estaba bañada por el espíritu de la navidad, incluso los semáforos parecían parte de la decoración navideña. Me detuve cuando me encontré con Sera y Yuu.

“Ayumu.” La hermosa voz de Sera me llamó. Su voz era hermosa… pero también daba miedo.

“¿Qué pasa?”

Vi a las chicas caminar frente a mí y le respondí a Sera sin volverme a mirarla a los ojos.

“Yuki-chan, eso estuvo muy bueno, ¿no?”

“¡Si! ¡Vamos de nuevo!”

“…… El sushi es un placer raro… y eso lo hace aún más delicioso…”

Mihara, Tomonori e Hiramatsu caminaban felices como grupo, mientras que Saras las seguía silenciosamente detrás, y junto a ella estaba Orito, cojeando y lamentándose.

Orito parecía realmente muerto. Casi como un zombi.

“Bueno, tu cara es asquerosa, así que no me importa si no me miras, pero… exactamente ¿por qué no nos saludaste en el restaurante?”

“¿Dónde está Haruna?”

La chica de cabello plateado frente a mí de repente se deslizó a mi lado.

Ayumu no parecía querer prestarnos atención, así que se fue a casa. = “¡Ugh, oniichan! ¡¡Ponnos más atención!!”

¿E-esa era su forma de decirnos que quería atención?

“Bueno, hubo algunos problemas en nuestra mesa, y había otra razón por la que no quería molestar demasiado a Haruna.”

“Ciertamente tienes bastante equipaje allí. ¿Es esa la razón de la que estás hablando?” “Sí… Es justo eso. Es porque… Haruna todavía cree en Santa.”

“Ya veo. Así que no querías que se diera cuenta de que le habías comprado un regalo.”

Ella entendió todo eso por lo poco que le dije. Los vampiros ninjas eran definitivamente maestros de la percepción.

“Ah, también compramos cosas para ustedes dos. Solo elige algo que te guste.”

Hay tantos regalos. No estoy seguro de cuál elegir.

“Hay mucha gente rodeando a este zombi, por lo que probablemente planea distribuir lo que no elegimos a todos los demás.”

Bueno, sí, eso es lo que planeaba hacer.

“Creo que… Haruna tenía muchas ganas de ver la nieve.”

Miré hacia el cielo nocturno. No parecía que fuera a caer nieve.

El cielo de Tokio estaba desprovisto de estrellas incluso en esta época del año. Casi no tenía brillo, probablemente por todas las luces que nos rodeaban.

Si no fuera por ese cielo, no me habría dado cuenta.

Había alguien en el techo de un edificio. Si ese alguien no hubiera estado usando un traje blanco, probablemente no me habría dado cuenta.

Ese alguien estaba en lo alto de un edificio de nueve pisos… No, eran diez pisos.

Era… Chris. No pude ver su rostro, pero pude ver que se estaba agarrando a algo.

¿Qué era eso? No parecía una botella de sake…

Su rostro rápidamente se escondió en la sombra del techo, casi como si no quisiera que la viéramos.

“¿Pasa algo malo?”

“¿Hm? Ahh, uhh…”

Sera me llamó, pero realmente no supe cómo responderle. Pero entonces, vi los bonitos ojos jade de Sera sangrar de color carmesí, y su rostro se puso rígido por la sorpresa.

“E-eso es…”

Bueno, no me sorprendió que se diera cuenta. “Sí, es Chris”, quise responder, pero antes de que pudiera…

“… una bomba mágica”, murmuró. Parpadeé un par de veces y miré a Sera a la cara cuando la escuché decir eso.

¿Bomba mágica?… ¿Se refería a los artículos que hizo Dai-sensei? Dai-sensei, la maestra de aula de Haruna y también de la que Chris quería vengarse… hizo estas bombas mágicas que podían volar todo en un radio de un kilómetro. Una vez, una de esas bombas me había reducido a polvo fino…

Miré a Chris de nuevo.

Realmente no pude verla bien. Pero Sera era un vampiro ninja. Su vista probablemente era mejor que la mía, y también recordé algo que Chris había dicho antes.

“Oh, oh. Además, Chris encontró algo sumamente interesante.”

“Boom. Y luego se riega por todos lados.”

Era posible que se hubiera referido a una de las bombas mágicas de Dai-sensei.

Pero no podíamos dejar que ella activara una de esas cosas.

“¡Hey, todos ustedes!” Le grité al grupo que se alejaba cada vez más de mí.

“¿Qué pasa, Aikawa?”

Probablemente me veía bastante serio, ya que Tomonori me miró con expresión preocupada.

“Acabo de recordar que tengo que hacer algo, lo siento. No me hagan caso y sigue adelante.”.

Las cejas de Saras se movieron. ¿Lo averiguó?

“Aikawa de repente se levanta y desaparece muy seguido. También se fue con Haruna-sensei la otra vez.”

Mihara habló con la cabeza mostrando su resignación. Oye, deberías intentar ser un zombi también. Honestamente, los problemas nunca terminan.

“Está bien… entonces… nos vemos en la escuela.”

Hiramatsu dejó que una pequeña risa saliera de su boca y me despidió. Se llevó a Mihara y Orito con ella y se dirigió a la estación de Harajuku.

Tomonori y Saras se quedaron allí, quietos.

“Yuki-chaaan. Vamos.”

“E-está bien. Umm, Aikawa…”

“Solo ve. Llévalos a casa sanos y salvos lo más rápido posible, ¿de acuerdo?”

“Pero… yo estoy… Yo… con Aikawa…”

Parecía que quería decir algo, pero no podía. Saras levantó la mano, impidiendo que Tomonori siguiera hablando. Habiendo perdido su oportunidad de hablar, Tomonori me miró con tristeza antes de correr hacia Mihara y los demás.

“Darling, ¿hay algo que pueda hacer?”

“¿Puedes evacuar a toda la gente normal?”

“… ¿Evacuar…?”

“Sí, estamos lidiando con una bomba mágica.”

Saras entendió completamente la situación después de escucharme decir esas dos palabras y me asintió con firmeza.

“Pero que sea justo en un lugar así, en un momento así, hace las cosas bastante difíciles. Lo más probable es que sea imposible llevar a todas estas personas a un lugar seguro.”

Eso era cierto. Si intentara evacuar a las personas durante la Navidad en Tokio, probablemente terminaría causando pánico.

Chris probablemente eligió deliberadamente esta fecha solo por eso.

“Excusas. Los vampiros ninjas existimos con el único propósito de proteger a las personas. Así que nos las arreglaremos.”

“Gracias. Por supuesto, planeo detenerla, pero… en caso de que falle…”

“Sí. Cuenta conmigo.”

“Y tú conmigo. Sera, ven. Mientras ella todavía no se da cuenta de nuestra presencia.”

Si esa bomba mágica explota, entonces no conocía otra forma de defenderme de ella que no fuera la técnica ‘Impulso del Colmillo Dragón del Dios del Trueno’ de Dragón de Sera.

¿Qué hay de mí?

“Yuu, tú también deberías salir de aquí. No podrás hacer mucho si te aferras a esto.”

Le pasé las bolsas de papel que estaba sosteniendo. Pero todavía no quería que Haruna encontrara el búho de peluche, así que decidí quedarme con una de las bolsas.

Quiero decir, si fuera solo una bolsa, entonces podría tirarla a algún lado cuando tuviera que pelear.

Empecé a entrar en el edificio, queriendo subir al techo en silencio para no llamar la atención, pero Sera me agarró por el cuello como si estuviera atrapando un gato y luego pateó al asfalto.

Las parejas en el camino que nos rodeaban miraron hacia arriba, estupefactas ante como, una belleza con cola de caballo, y un estudiante de secundaria volaban por los aires.

“¡Oye, Sera! ¡La gente nos mira raro ahora!”

“Deberíamos actuar rápidamente aquí. No te preocupes, no hay mucha gente normal que entienda lo que está viendo.”

Después de aterrizar en el techo, Chris nos vio y nos sonrió.

“Es oniichan y sus amigas. Siempre te apareces en un buen momento. Es casi demasiado conveniente.”

“Conocemos a alguien con el poder de cambiar el destino y provocar eventos como este.”

Sera miró a Yuu. Pero eso fue solo por un momento, y al momento siguiente, sus ojos carmesí volvieron a mirar a Chris. Chris sostenía un reloj despertador.

Nadie camina al azar con un despertador. Esa era definitivamente la bomba mágica.

El manto negro de Sera la envolvió mientras me miraba a la cara.

Sus ojos me decían ‘solo deberíamos apuntar a esa bomba mágica.’

Si estoy de acuerdo. Nuestra primera prioridad aquí no era derrotar a Chris.

“¿Qué están haciendo exactamente por aquí? O más bien, ¿qué están tratando de hacer?”

“¿Hm? La forma en que dices eso… es casi como si supieras qué es esto.”

Chris arrojó el despertador al aire unas cuantas veces. Sentí que mi corazón se aceleraba, preguntándome cuándo explotaría ese reloj, mientras que Chris parecía disfrutar de la expresión de preocupación en mi rostro

“¡Kyaha! ¡Entonces Oniichan sabe qué es esto! Chris quería usar esta bomba y hacer un

gran boom que matara a mucha gente, pero en realidad no hay tanta gente por aquí… Mmm… ¿Qué debería hacer Chris…?”

Chris comenzó a decir algunas cosas horribles como si no fueran nada.

“¿Qué esperas lograr exactamente con eso?”

“Si sucede algo horrible, puedo fingir que fue culpa de Ariel. Y luego la Reina debería ir y ahorrarme el trabajo de matar a Ariel.”

Quien había creado estas bombas mágicas había sido Ariel… En otras palabras, Dai-sensei. El Rey de la Noche la había obligado a hacerlas, pero es cierto que Chris podría culpar a Dai-sensei… Así que no podíamos quedarnos al margen y dejarla cometer un acto de terrorismo desenfrenado…

“Ah bien. Empecemos por el cachorro.”

¿Cachorro? Chris se dio la vuelta, todavía sonriendo.

Ella estaba mirando a… Shibuya. ¡Espera, no se refería a Hachiko, ¿o sí?!

Aunque era Navidad, Shibuya siempre estaba llena de gente. Se puede llegar yendo un poco al sur por Meijidoori. Estaba bastante cerca. Probablemente le tomaría a una chica mágica o a un vampiro ninja solo unos minutos llegar allí.

Chris se echó a correr. Sus lindos zapatos sonaban contra la azotea mientras despegaba en el aire.

“¡Sera!” Como si respondiera directamente a mi voz, Sera también comenzó a correr. Tenía espadas de hojas en ambas manos.

Cuando se trataba de velocidad, nadie en el universo podía compararse con Sera.

“Aquí voy. ¡Hiken, Tsubamegaeshi!”

“¡Ahaha! ¡Rápida, bastante rápida!”


Chris esquivó la espada de Sera con extrema facilidad. Si fuera a mi, ya me habrían quitado un brazo…

Otro y otro ataque. Sera corrió junto a Chris mientras le enviaba ataque tras ataque.

Sera no logró dejar ni una sola marca en Chris, pero al menos la ralentizó bastante.

Las alcancé a las dos y me lancé hacia Chris como un gato, apuntando a su brazo derecho.

Ella también me esquivó ágilmente, y me encontré a punto de hacer un salto bungee inalámbrico desde el edificio cuando Sera me agarró.

“Ayumu, esto no es bueno.”

“¿Hm? ¿Qué pasó?”

“Ella ya ha pulsado el botón de detonación del dispositivo. La bomba probablemente explotará después de unos cinco minutos.”

¡¿En serio?! Sentí un escalofrío recorrer mi espalda. Una sensación de náuseas comenzó a formarse en la boca de mi estómago.

Esa náusea repentina fue casi aplastante.

Sera y yo atacamos desesperadamente a Chris, pero ella esquivaba fácilmente todo lo que le lanzamos.

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También intenté agitar la bolsa con el animal de peluche en el aire, pero ninguno de mis ataques aterrizó.

Un espectador podría decir que parecía que estábamos jugando juntos.

La espada de Sera pasó a centímetros del cabello de Chris.

“¡Guau! Te volviste más rápida, ¿no? ¡Lástima que todavía sea demasiado lenta para Chris!”

Sera hizo una mueca, como si estuviera masticando algo amargo. Ella continuó atacando.

El minutero del despertador siguió moviéndose.

Esto empeoraba cada vez más. ¿No había nada que pudiéramos hacer? El frío y mis nervios hacían que fuera más difícil pensar.

No podía hacer nada más que bailar y saltar sobre Chris. Actuaba como un daimyo con los ojos vendados que perseguía a una chica, con ambas manos delante de él.

Chris saltó del tejado a un puente peatonal. La estación de Shibuya ya estaba a la vista.

Sera también saltó hacia el puente y yo la seguí.

¡Krchh! Tenía demasiada prisa y sentí que se me torcía el tobillo, ¡pero ahora no era el momento de caer!

¡Hyahh!… ¡Hyahhh! Me di la vuelta y traté de minimizar el impacto en mi cuerpo. Sin embargo, también quería desesperadamente tomar represalias contra Chris, así que le tiré la bolsa que sostenía.

Chris se río burlonamente de mí y lo esquivó.

“¡Colmillo del Dragón, Estocada del Dios del Trueno!”

¡Noooo! ¡No grites eso! ¡No hagas que la persona a la que se le ocurrió ese nombre se sienta más avergonzada!

En ese momento ocurrió un milagro.

La bolsa de papel que volaba por el aire se detuvo de repente.

Sera también se detuvo, en medio de su golpe de espada.

El rayo proveniente de su espada también parecía estar congelado en el aire.

También me detuve. Mi cuerpo estaba sobre una de mis rodillas con ambas manos extendidas frente a mí.

La única persona que aún podía moverse era Chris. Sus ojos se abrieron en estado de shock y dejó escapar un pequeño ‘Ah’.

Chris se movía basándose en lo que esperaba que fueran los movimientos de su oponente. Ahora que había sucedido algo completamente inesperado y arruinó su tiempo, no pudo evitar que el rayo de Sera disparara directamente a través de la bomba mágica.

Esta era… La técnica para detener el tiempo que había aprendido el otro día.

Ya veo, así que inconscientemente hice lo necesario para activar esa técnica.

Sin embargo, había fallado. Chris todavía podía moverse… y yo no.

“¿Hm? Ya no se mueve… Oh, esta cosa es débil contra la electricidad, ¿no es así? ¡Ugh! ¡Oniichan, eres tan malo! ¡Chris te va a matar!”

Casi podía ver el vapor saliendo de la cabeza de Chris mientras empujaba el cuerpo congelado de Sera fuera del camino.

Boing.

Los increíbles senos de Sera encajan perfectamente en la palma de mis manos.

Tan suave… Oh Dios, tan suaves…

Si pudiera mover los dedos aprovecharía al máximo esta situación, pero…

“Ni te imaginas los bellos fuegos artificiales que podríamos haber hecho estallar…”

No podía moverme. No podía mover un músculo.

Chris señaló con su mano derecha hacia nosotros.

Esto estaba mal. Ella nos iba a matar. Pero justo cuando pensaba eso…

“¡Te tengo!”

Otra chica con un manto negro apareció detrás de Chris. Al igual que la primera vez que conocí a esa chica… Sostenía un plato de tonkotsu ramen.

Era Tomonori. ¿Tomonori? ¿No se suponía que te habías ido a casa con Mihara y los demás?

Chris saltó por el costado del puente peatonal, tratando de evadir el ramen.

Todavía tenía una sonrisa atrevida en su rostro, pero luego se dio cuenta de que un poco del caldo tonkotsu le había manchado la manga.

“¡Ahh, esto es de lo peor! Chris ya no quiere jugar. ¡Se va a casa!”

Las manchas se apreciaban muy bien en su ropa blanca. Su estado de ánimo probablemente hizo un giro de ciento ochenta grados al ver esa mancha en su atuendo favorito.

Chris desapareció y dejé escapar un suspiro de alivio. Quería agradecer a Tomonori por salvarnos, pero no pude hacer que mi boca se moviera.

Además, Sera me estaba enviando una mirada feroz. ‘¿Cuánto tiempo planeas acariciar mis pechos, pequeño trapo podrido?’ sus ojos me decían.

Bueno… Quiero decir, que no sabía exactamente cómo cancelar esta técnica.

Después de que finalmente recuperamos nuestra libertad y me golpearon la cara, me acerqué y recogí la bomba mágica que Chris había dejado casualmente hace unos momentos.

El ‘Colmillo del Dragón, Estocada del Dios del Trueno’ de Sera había roto completamente el reloj, así que habíamos logrado salvar el día de alguna manera, pero Chris probablemente iba a intentar algo como esto nuevamente. Ugh.

“Tomonori, gracias. En serio nos salvaste.”

“… Me cansé un poco de que Aikawa me salvara todo el tiempo, ¿sabes? Así que quería ayudar a Aikawa hoy mismo. Quiero decir… Es Navidad.”

Tomonori se sonrojó un poco, mientras que Sera soltó una pequeña risa.

¿Qué diablos pasaba con esta incomodidad en el aire?

Me di la vuelta, con ganas de salir corriendo, y vi la bolsa de papel con la lechuza de peluche de Haruna en ella.

… Fue carbonizada.

Vi una bolsa de papel que se había quemado hasta quedar crujiente.

Tímidamente saqué el animal de peluche de la bolsa y vi que el ataque de Sera había hecho agujeros a la lechuza.

“Ah, ese… ese es el regalo de Navidad de la Maestra, ¿no?”

“Supongo que es un poco tarde para decir esto, pero probablemente no debería haber traído esto.”

Me rasqué la cabeza y solté un gran suspiro.

Mi suspiro se volvió blanco frente a mí y se disolvió en el aire.

“¿Podríamos volver y comprar otro?”

“No, ya están cerrados. Si tan solo pudiera hacer que nevara… Sería el mejor regalo que podría darle.”

Miré hacia el cielo navideño. No mostró signos de que fuera a nevar.

¿Qué debo hacer ahora? Quizás Dios podría hacerme un favor aquí y hacer que nieve…

… Espera.

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¿Había algo que pudiera usar en lugar de nieve? Podría tomar algo como algodón y hacer que pareciera que estaba nevando para Haruna…

Pero ¿exactamente dónde esperaba obtener tanto algodón en este momento?

Oh espera. Sí, definitivamente había un montón de algodón allí.

Si intentara esto ahora, podría perder el último tren de regreso a casa, pero…

Regresé a la casa de Nene-san para tratar de hacer realidad mi último y desesperado plan.

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