Hentai Ouji to Warawanai (NL)

Volumen 5

Capítulo 4: ¿Hay Algo Dentro Del Corazón De Yokodera-Kun…?

Parte 3

 

 

Paso mucho tiempo antes de que pudiera sacar al gatito borracho del interior de mi camiseta. No le hice nada a Tsutsukakushi. Les juro que no lo hice. Si la situación no es la apropiada, simplemente no hago nada, incluso si resulta conmigo tosiendo sangre. Soy demasiado caballero para hacerlo. Y estoy seguro que, de haber visto la escena con mayor detalle, habrían premiado mi fortaleza mental; ¡Algunos incluso me ascenderían a la posición de un santo patrono! ¡E imagino que Tsukiko-chan se convertiría en la sacerdotisa del Santuario de Yokodera!, ¡¡Ahí sí podría hacerla toda mía!!

De cualquier manera, volviendo a la historia, la fuerte brisa de la tarde hizo temblar las puertas corredizas. Agarré una manta que estaba tirada en el salón de banquetes y la puse sobre los hombros de Tsukiko-chan.


—Huh. Ustedes dos seguro que son cercanos… — Tsukasa-san dijo ente bostezos.

En su espalda cargaba al niño, que también parecía haberse quedado sin baterías. La ropa que había estado usando anteriormente se había desvanecido por completo, pero oh dios, se vio terriblemente lindo con ellas. Un vestido de una pieza, una falda, un pijama para niñas con huellas de gato, un bolero, una enagua… con la cara al rojo vivo, se había visto obligado a llevar todo tipo de atuendos mientras modelaba frente a un gran espejo. No puedo esperar a ver el tipo de pervertido en el que se convertirá.

—¿Te sientes mejor ahora?

—Mmm. Para empezar, nunca había bebido tanto en toda mi vida… —Mirando a la montaña de latas vacías, Tsukasa-san se encogió de hombros.

¿Entonces de dónde salieron todas esas latas vacías?


—Ya estoy llena… —Tsukiko-chan se frotó la barriga y gimió.

Tsukasa-san puso al niño a un lado de Tsukiko-chan, cubriéndolo también con una manta. Los dos se veían como un par de hermanitos y sus mejillas se enrojecieron levemente cuando empezaron a acurrucarse. Luego de todo el desastre previo, fue grato contemplar una escena tan afectuosa, y por la manera amable en la que acaricio la cabeza revuelta de Tsutsukakushi, diría que no guardaba rencores.

—…las chicas son geniales. Puedes jugar con su cabello de esta forma… —Ella cambió el peinado de Tsukiko-chan de una sola coleta a dos moños.

¡¿Qué diablos es esto?! ¡Es taaaaan adorable!

—…gracias por lo de antes.

—………

El susurro de Tsukasa-san llegó a Tsukiko-chan, y sus párpados temblaron.

Publicidad G-M2



—¿Qué quieres decir? —Pregunté en su lugar.

—Sobre lo que pasó en la puerta. Era como si mi propia hija se estuviera enojando conmigo.

—¿…no se supone que el deber de una madre es enojarse con sus hijos?

—Es solo que no estoy acostumbrada. En el jardín de niños recibí una reprimenda de mis superiores precisamente porque soy incapaz de tratar a los niños como si fueran mis propios hijos. Simplemente me falta algún tipo de experiencia… —Soltó un leve bufido.

Pero continuó cambiando hábilmente el peinado de Tsukiko-chan con sus delgados dedos blancos como la nieve. Cada vez que sus dedos pasaban por la cabeza de la chica, su boca se relajaba en algo mucho más cariñoso. La palma de Tsutsukakushi se movió suavemente a lo largo de la manta. Y probablemente de manera inconsciente, agarró el dobladillo de la ropa de su madre; la que ya no debería haber podido tocar—

Si… era solo la vista de una madre mimando a su hija cualquier día de la semana…

—…me hubiera encantado criar a mi propia hija…

Hablo añejamente en tiempo pasado. Con una voz que ya había renunciado a cualquier posibilidad. Tsutsukakushi también soltó su agarre en ese mismo instante…

—Bueno, ya es demasiado tarde.

—¿Por qué sigues diciendo cosas así, Tsukasa- san?

Ella conocía el sabor de aquella uva lejana. Pero a pesar de amar tanto a sus hijas, ni siquiera se molestó alcanzarla.

—¿…por qué no las buscaste? —Me sorprendí a mí mismo por lo irritada que estaba mi propia voz.

No puedo evitarlo cuando habla de esa manera justo en frente de Tsukiko-chan.

—…me equivoqué desde el principio.

—¿Sobre qué?

—Sobre mi decisión… —Tsukasa-san habló con frialdad. Como si hablar de eso fuera demasiado molesto. Escupía sus palabras con la pesadez de un suspiro, sin poner ninguna emoción en su voz.

—No puedo entender lo que quieres decir si eso es todo lo que vas a decir.

—Hoy estoy cansada. Es suficiente.

—No fisgoneé mucho ayer. No puedo contenerme más. Tiraré de la cola de tu disfraz hasta que me hables.

—¿…por qué mencionaste de nuevo el disfraz?

¿Por qué estás tan obsesionado con la cola?

—Porque la Ratona Tsukasa se me esta insinuando.

—¿Quién se te insinúa? Nunca lo hice. Ahora suenas como un pervertido.

—¡Guau! ¡La forma en que lo expresaste fue tan amable!

—…no estaba tratando de ser amable de ninguna manera. ¿Por qué estás tan acostumbrado a que te llamen pervertido? ¿Cómo has vivido tu vida hasta ahora? —Tsukasa-san se estremeció de disgusto y se frotó la cintura con la palma de la mano.

Esta Onee-sama está demasiado consciente de su cola. Combina perfectamente con mis gustos. Es casi demasiado perfecta. Como quisiera conquistarla aquí mismo con la determinación de ofrecerle el resto de mi vida.

Finalmente, el erizo dejó escapar un suspiro.

—Aquí tienes un ejemplo. Si tuvieras que elegir entre lo más importante para ti y algo que no puedes sacrificar sin importar qué, ¿Que elegirías? —Ella pregunto.

—No quiero elegir.

—Pero tienes que.

—No puedo.

—¿Y si alguien te obligara a decidir incluso si supieras que no puedes?

—Ejercería mi derecho cívico según la Ley de Normas Laborales26.

—No involucres al gobierno en esto…

—Entonces buscare a alguien que defienda mi caso.

—No quise decir que pudieras involucrar a organizaciones no gubernamentales…

—Di lo que quieras. Incluso si el mundo entero se vuelve en mi contra, nunca me harán elegir.

—No creo que las cosas lleguen tan lejos…

26 Según el artículo 1 de esta Ley, su objetivo es asegurar que “las condiciones de trabajo sean las que satisfagan las necesidades de los trabajadores que vivan una vida digna de los seres humanos”.

Tsukasa-san suspiró como si estuviera harta de mí.

Pero esos eran mis verdaderos sentimientos. Yo no quiero ni puedo elegir entre ellas. Entre la gatita que es lo más importante para mí y el cachorro que simplemente no puedo abandonar. Dar órdenes a las cosas a menudo genera un punto de vista más claro, pero a veces es imposible usar una lista de prioridades para tomar una decisión.

—Bueno, pensé que dirías eso —Después de respirar, Tsukasa-san negó con la cabeza —Sentí lo mismo que tú y tomé la decisión equivocada.

—¿Huh?

—Traté de quedarme con las dos. Mis hijas y mi herencia familiar. Me dispuse a arreglar el asunto. Elegí resolver mi problema con la herencia y también vivir feliz con mi familia. Intenté poner en orden algo que estaba perdido. Pero después de la enfermedad de mi esposo y la inundación, todo ha sido horrible… y aquí me vez ahora, sola, con solo una de esas dos cosas — Un calor lúgubre parpadeó dentro de los ojos de Tsukasa-san.

Incluso si usas el tiempo como medicina, algunas heridas nunca desaparecerán. No importa cuántos años pasen; como el problema estaba en su cabeza, le acechaba todos los días, desde que se levantaba hasta la hora de acostarse.

Así de enorme fue su lamento.

Sus ojos, que se parecían a la chica que mejor conocía, ahora se entrecerraron con tristeza.

—Debería haber elegido lo más importante desde el principio. No sé qué tipo de opciones tienes, pero te recomiendo que hagas lo mismo, rápido. Imagino que nunca te detuviste a pensar en lo mucho que te agradan, ¿Verdad?

—¡Las quiero como no tienes idea! ¡¡Que puedes saber tú!!

—Así es como funciona este juego. Te das cuenta de lo arrogante que fuiste al querer mantenerlo todo igual, te retuerces de agonía por la vergüenza y finalmente te la tragas para decidir. Sin la vergüenza que te permita decidir cuál te gusta más, nunca lo entenderías.

Toda vergüenza me ha sido arrebatada. Pero, de todos modos, ¿Qué hay de malo con eso? ¿Está diciendo que no poder sentir vergüenza todo el tiempo es malo, y tengo que arreglar eso si de verdad quiero tomar la decisión correcta?

—Hey dime —Los ojos tristes del erizo me miraban ¿Cuál es tu razón para vivir?


Me apuñaló en el corazón con una voz tranquila.

—¡Eso es–! ¡¡¿POR QUÉ NO MEJOR TE HACES ESA PREGUNTA TU MISMA, TSUKASA-SAN?!!

¡¿No puedo preguntarte exactamente lo mismo?! No importa cuán arrogante seas; no importa cuán problemático sea, ¡Tienes que cruzar esa línea de vergüenza que te hace retorcerte en agonía y luchar por tus hijas!

—Porque para mí ya es demasiado tarde.

—¡Nunca es tarde para hacer algo en esta vida!

—No lo entiendes… yo ya no tengo… tiempo——

Toda la luz desapareció de los ojos de Tsukasa-san y se cerraron abruptamente—

Su cuerpo colapsó al suelo. Su respiración comenzó a perder ritmo y el sudor se acumuló en su frente.

—¡¿Tsukasa-san!?

Toqué su frente—

…estaba muy caliente…

***

 

 

Escrito en una pequeña nota de papel al lado de su futon, se hallaba el número telefónico del consultorio médico en el que ella estaba registrada.

Publicidad G-M1



—Parece ser otro de sus ataques de pirexia — Aclaro el médico —No hay nada de qué preocuparse hoy. Aumentaré la dosis de su medicamento.

Eso fue todo lo que dijo luego del chequeo. Ni siquiera menciono si estaba mejorando o empeorando. Su trabajo terminó y se largó. Verlo me recordó a un conductor que solo se concentraba en conducir por una carretera recta. Todo lo que pudo hacer fue cambiar la velocidad cerca del final de la carretera, sin nunca cambiar de carril.

—…Tsu… shi… —Tsukasa-san estaba acostada en su futon, vestida con su disfraz, mientras deambulaba por el laberinto de los sueños.

Solamente palabras débiles; casi gemidos, escaparon de sus decaídos labios. Esto debe ser algo que ya venía sucediendo con bastante frecuencia.

Según el joven yo, ella incluso se toma un día libre cada semana de su trabajo en la guardería.

Publicidad M-M1

—Parece que algo de moho empezó a crecer en las pareces luego de la inundación hace un tiempo. Podría haberse ido, pero se quedó aquí todo este tiempo. Es porque ella no podía irse de la casa en la que había vivido con su familia… que las cosas solo resultaron así, o eso dijeron.

…no pregunté qué quiso decir con ‘resultaron

así’.

No se levantaba temprano por la mañana, siempre se acostaba de inmediato y trataba a todos como si fueran una molestia. Ya ni siquiera hablemos de todas las cosas a las que renuncio. ¿Fue todo porque las cosas ‘resultaron así’? ¿Se dio cuenta de que el tiempo que le quedaba no era suficiente, por lo que dejó de intentar recuperar a sus hijas?

Eso es demasiado idiota… y desgarrador.

***

 

 

Después de eso, un sentimiento de soledad cayó sobre el sobre el salón de banquetes. Mientras la habitación dividida en dos era gobernada por el silencio, el exterior se tiño de la solitaria oscuridad del atardecer.

Los dos idiotas que habían estado inconscientes antes se habían recuperado muy bien. Tsukiko-chan estaba comprando los materiales marcados en el recetario que nos dejó el doctor.

Cuando yo le dije que iría a comprarlos…

—Senpai, tienes que quedarte aquí. Por el bien de Tsukasa-san. Y también por el bien del joven Youto-kun.

—Pero… ¿Ese no era tu papel?

—No. Ni siquiera sabría qué tipo de cara debería

poner.

La pequeña gatita, que era buena fingiendo dormir, sonaba como si experimentara una mescla entre tristeza e ira, pero no podía hacer ninguna expresión. Es por eso que ella me inculcó esta responsabilidad… aunque no puedo evitar pensar que debimos haber cambiado papeles.

—Tsu… ko…

La enferma y el joven quejumbroso…

¿Qué se supone que debo decirles?

a pesar de que estoy a su lado… no puedo

hacer nada para ayudarla. Huh, lo mismo de siempre……

—El que murmuró esas palabras fui yo.

El otro yo.

—¿Eh?

Publicidad M-M3

—Solo soy un niño. No importa lo que haga, soy un niño. No puedo hacer nada —El joven Yokodera-kun se agarró las rodillas con fuerza.

—Tsu… sai… lo… lo siento… —Las palabras entrecortadas de Tsukasa-san llenaron el silencio entro sus oraciones.

Un hilo de lágrimas corrió por su mejilla. El niño trato de limpiarlas—

—Tsukushi… Tsukiko… donde… dónde…

Pero al escuchar esas palabras; esos nombres que no eran el suyo, el niño se detuvo. La fuerza que puso en sus manos mientras se agarraba a sí mismo se hizo más fuerte, y no intentó tocarla de nuevo.

Me di cuenta de que en realidad solo había una cosa que yo podía hacer por Tsukasa-san: traer a sus hijas aquí. Ellas tenían que verse. Eso tendría el mayor efecto para ambas partes—

Pero al mismo tiempo, expondría al joven a una dura y cruel realidad.

—…tal y como imagine, no puedo reemplazar a sus hijas.

—…………

Quería decirle que estaba equivocado, pero no pude. Todo lo que pude hacer fue contemplar la mirada triste del niño. Era la misma expresión que había visto anoche; una que no encajaba en absoluto con su edad. Su pelo todavía estaba atado con una cinta para el cabello. Se parecía mucho a un muñeco mal arreglado.

—Um, Onii-chan. Estaba realmente feliz en ese entonces.

—¿…cuando?

—Cuando Tsukushi-san se fue sin entrar a la casa. Deseaba que nunca volviera a venir —Su rostro joven estaba distorsionado por la culpa.

A diferencia de cómo solía rebosar de energía, se sentía como si estuviera dejando al descubierto las profundidades más insondables de su alma.

—A pesar de que vive tan lejos; a pesar de que ni siquiera tiene recueros con Tsukasa-san… todavía la llama ‘madre’. Es algo que ni yo mismo puedo atreverme a hacer. Es demasiado injusto. Esto incluso sucedió en un sueño mío… —El joven ya no se atrevía a alcanzar a Tsukasa-san con su mano.

Solo podía mirarla, apretando con fuerza sus propias rodillas. Sus pequeños puños temblaban.

—¿Por qué no soy lo suficientemente bueno? ¿Por qué Tsukasa-san todavía sueña con su hija? ¿Por qué, por qué, por qué…?

A pesar de que esos puños no podían estar dirigidos a nadie.

—…ajajajaja. Lo lamento. Estoy seguro de que Tsukasa-san se sentiría decepcionada si escuchara eso de mí. Soy todo menos un ‘niño bueno’…

—Está bien. Eso es normal.

—¡No lo es! ¡Dije que haría todo lo posible por Tsukasa-san, pero aquí me vez quejándome! Sé que no debería estar diciendo todas estas cosas. Pero es que en serio ¡Odio a esa niña…!

“El descontento es el primer paso en el progreso de un hombre”.

—¿…huh?

Yo era el más sorprendido por la forma en la que murmure esas palabras. Me miré a mí mismo a los ojos. Las palabras solo salieron como si las hubiera tenido listas desde hace mucho tiempo.

—…una persona llamada Oscar Wilde dijo eso. Es un genio capaz de desentrañar todas las cosas invisibles en este mundo. Él puede criticar honestamente los sentimientos honestos y las fachadas de las personas.

…sí, dioses en el cielo que me juzgan. Yo mismo soy consciente de que no estoy en condiciones de decir eso. Pero al menos permítanme actuar con un poco de calma frente a mi pasado. Después de todo, soy mayor que él.

Permítanme fingir que soy un adulto.

—El descontento y la insatisfacción te hacen crecer. Odias a la hija de Tsukasa-san, te quejas, te odias a ti mismo cada vez más y, sin embargo, sigues avanzando. De esa manera, tu–nosotros, podremos convertirnos en adultos.

Como si estuviera tratando de hacerme oír estas palabras; como si estuviera usando estas palabras para motivarme, seguí hablando. Miré directamente al rostro del joven Yokodera-kun.

—…expresar mis quejas… es algo bueno… —El niño parpadeó varias veces —Siento que no veré esas palabras en ningún libro de texto. Mi profesora podría enojarse conmigo si digo cosas así —Dio una opinión honesta, típica de un estudiante de primaria.

—B~Bueno, supongo que sí…

—…pero me gusta. El descontento es el primer paso… si —Murmuró el joven para sí mismo, repitiendo las palabras que le acababa de decir.

Todavía estaba agarrando sus propias rodillas, pero parecía que se había relajado un poco. Finalmente, se frotó los ojos y sonrió serenamente.

—¡Gracias, Wilde-Onii-chan! ¡Recordaré estas palabras para siempre!

—De nada… espera, no soy Wilde. En realidad, no soy tan elocuente.

—¡Entonces es un secreto entre nosotros dos! ¡Toyo Oscar T. Wilde Azukiella-onii-chan! —El joven me miró como si fuera una especie de superhéroe.

…bueno, esto está bien, supongo. Si su corazón continúa floreciendo a través del Wildismo, entonces puedo vivir con eso.

Con el tiempo, crecerá, retrocederá en el tiempo y le enseñará a su propio yo más joven las grandes palabras de Oscar Wilde. Y así el mundo continuara girando.

—De todos modos, ya regreso.

—¿A dónde vas, Onii-chan?

—Voy a traer a la hija de Tsukasa-san aquí. ¿Estás de acuerdo con eso?

Publicidad M-M2

—………….sí.

Se puso de pie, pero no me detuvo. Me quité la camiseta holgada y la deje tirada a un lado de Tsukasa-san. Me puse mi propia ropa y volví a ser el de siempre. Tengo que terminar lo que empecé. Si el hecho de que estuve en la Casa Tsutsukakushi causó algún tipo de influencia, entonces citare a la niña aquí una vez más.

Antes de partir, tengo que asegurar el paso.

—Cuida de Tsukasa-san, ¿De acuerdo?

—¡Déjamelo a mí! —El joven asintió con determinación y extendió su mano hacia Tsukasa-san.

Amablemente, seco sus lágrimas. Era tan pequeño, y, sin embargo, protegía a su Alicia como un caballero de brillante armadura.

***

 

 

Salí corriendo de la Casa Tsutsukakushi y me subí al autobús más cercano. Después de montarlo por un tiempo, me bajé en la rotonda frente a la estación de ferrocarril privada. Crucé el camino subterráneo hacia el distrito comercial y entre a un cierto edificio frente a la estación de tren, terminando algunos asuntos que tenía pendiente. Desde allí, salté a una cabina telefónica pública familiar.


Hojeando la guía telefónica, busqué el número del hotel. Después de hablar con la Onee-san en el mostrador de recepción, rápidamente me contó sobre la habitación donde se estaban quedando Tsukushi Tsutsukakushi y los demás.

—[¡Aquí la recepción! ¡Hemos recibido su llamado emergencia! Como soy una trabajadora a tiempo parcial actuando como mediadora, aun no es seguro si su persona importante le responderá. ¡Sin embargo, no pierda la esperanza!]

—……..

—[¿E~Eh? ¿F~Fui demasiado animada…?]

—Lo siento, pero tengo prisa. ¿Podrías conectarme con ellos?

—[…entiendo… sniff*~]

Estoy seguro de que era una buena persona, pero ya no tenía las células cerebrales ni el tiempo para seguirle el juego.

Aunque debo admitir que tiene la voz tranquilizadora de una Onee-san. Y dentro de lo que cabe, se ve que toma en serio su trabajo. Encajaría perfectamente narrando informes meteorológicos.

De cualquier manera, hice que me conectara con la habitación, y la voz que me saludó sonó demasiado familiar.

—[bastardo. ¿Cómo supiste que estaba aquí?]

—Buena intuición y un poco de suerte. ¿Supongo?

—[Hay una gran cantidad de otros hoteles como este en el distrito. No debería haber dejado ninguna pista]

—¿A quién le importa eso? ¿No dijiste que no creías ninguna de mis tonterías?

—[Urk…]

Incluso el sabio Rey no pudo evitar quedarse callada luego de eso. Tampoco es que mis cualidades detectivescas sean tan buenas. Los emigrantes de Italia que transitan por este distrito suelen hospedarse en este hotel. O al menos eso fue lo que cierta niña me dijo… la imagen de la alimaña espacial, bailando sobre una barandilla mientras sus coletas se mecían, me vino a la mente.

—¡Por eso es que primero debes ocuparte de tus propias cosas!

Estas fueron las palabras de Emi, quien era más fuerte e independiente que cualquiera de nosotros. La próxima vez que la vea seguro que acariciare su cabeza.

Pero primero tengo que ocuparme de mis cosas.

—Tsukushi Tsutsukakushi, tengo una solicitud que hacerte.

—[¿qué?]

—Quiero que veas a Tsukasa-san una vez más.

—[¡Dije que no quería volver a verla!]

—Por favor. Piensa en ello como si me pisaras la cara.

—[¡¿Qué ganaría exactamente con eso?!]

—¿De verdad quieres un final como este? ¡Porque verdaderamente no miento cuando digo que no tenemos tiempo!

—[…es una pena]

—¿Huh?

—[El tiempo para volver a casa se está cerrando. El coche ya ha sido llamado para que venga a buscarnos. Solo pasarán unos minutos más antes de que llegue]

—¡Si tenemos unos minutos, estará bien! ¡Estoy frente a la estación de tren y me dirijo hacia allí ahora mismo!

—[Idiota. ¿Sabes qué tan lejos está eso? No tienes un coche de carreras contigo, así que, ¿Cómo pretendes llegar a tiempo?]

—Es una pena.

—[¿Hm?]

—Temo decirte que mis piernas son bastante rápidas. Puedes culpar de eso a la negligencia de tu alma.

—[De nuevo con las ridículas mentiras…]

—¡De todos modos, solo espera en la entrada del hotel!

Publicidad M-AB

—[Hmph…]

Terminé la llamada y comencé a correr. Haciendo mi camino hacia el centro, andando rápido, las caras pasan, y estoy en el hotel. Las farolas de neón iluminaban mi camino en esta ciudad por la noche. El viento golpeando mi pecho y mis pies golpeando el asfalto se sintieron muy bien. Ahora mismo soy la locomotora humana Zátopek 27 . No perderé contra nadie en este momento.

La gente corre con los demás, por causa de los demás, viviendo para los demás. En este momento, el Yokodera-kun que había sido entrenado por Acero-san ahora estaba usando sus piernas entrenadas para

27 Un corredor de fondo checoslovaco que ganó 1052 medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Verano.

atrapar a la mini Acero-san. Una vez que alguien te salve, eventualmente salvarás a esa misma persona. No permitiré que nadie se quede infeliz. Ya sea que tenga vergüenza o no, esa es la única cosa en la que nunca me rendiré.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios