Tatoeba Last Dungeon Mae no Mura no Shōnen ga Joban no Machi de Kurasu Yō na Monogatari (NL)

Volumen 9

Capítulo 2: Un Sudoroso Desconcertado — Supongamos Que Un Jefe Se Da Cuenta De Que Su Personal Es Amigo Del Director General Y Del Director De Operaciones Del Cliente En La Presentación De Ventas

Parte 5

Parecía estar esperando a alguien y se volvió ansiosamente hacia ellos. “Llegas tarde, oh, eres solo tú”.

¿Por qué está tan nerviosa, coronel? ¿Hay mucha actividad sospechosa aquí?”

“Ah, no. Estoy buscando, pero tuve un compromiso previo aquí, así que…”

Claramente no quería hablar de eso, pero Lloyd felizmente preguntó de todos modos.

“¿Oh? ¿Con quién?”

“Eh, entonces…”

“Perdona la demora, Choline”.

Se volvieron hacia esta nueva voz y encontraron a Merthophan, vestido con una camiseta blanca y pantalones de lona como una persona normal.

“¡Coronel Merthophan!”

Pareció sorprendido de ver a Lloyd y Selen.

“Nos encontramos de nuevo, Lloyd. Pero, ¿qué clase de puesto es este?” Miró hacia el puesto de adivinación, perplejo.

Choline hizo una mueca y tuvo un furioso debate interno sobre si debía explicarse

“Erm, bueno…”, tartamudeó.

Pero Selen saltó delante de ella, dándole a su maestra una palmada amistosa en los hombros.

“¡Eh-heh-heh! Lo entiendo completamente, Coronel Choline. Como yo, buscas la adivinación.”

Ella articuló “romántico”, y Choline se sonrojó, asintiendo.

“¿Eso es obvio? Pero sí, básicamente el mismo objetivo que tú”.

“En efecto. Espero que nos declaren socios destinados y digan: ‘Bueno,

¡entonces tendrán que casarse!’ y hacer que él firme el certificado”.

Básicamente lavado de cerebro.

El plan de Choline había sido mucho más realista, así que le lanzó a Selen una mirada horrorizada y luego negó con la cabeza.

“La primera mitad es correcta de todos modos. Por supuesto, entonces el problema es… ¿y si nos dicen que somos una mala pareja?”

“¡No te preocupes! Tengo total confianza”. “Tienes confianza”.

Todos se pusieron en fila y entraron al interior de la tienda.

Era solo un simple letrero que decía ADIVINACIÓN afuera de la entrada de un salón de clases. El interior también se mantuvo prácticamente sin cambios, sin decoraciones extravagantes. Simplemente lo dividieron para manejar varios clientes a la vez, como una oficina o el mostrador de un banco.

A pesar de las particiones, se escucharon voces; la gente preguntaba sobre el amor, la pérdida de la virginidad o cómo pagar sus préstamos. Algunas… cosas bastante críticas aquí. Especialmente los dos últimos.

“Parece que no se trata solo de parejas”.

“Sí, el amor no es el único asunto que se aprovecha de la mente”, dijo Merthophan, sin entender el punto.

Choline suspiró. “Si tan solo supieras lo que se aprovechó de la mía”.

“Entonces compártelo conmigo. ¡Francamente, no tengo claro por qué estamos aquí!”

Mientras suspiraba de nuevo, llamaron a su número. Los cuatro se trasladaron juntos a una ventana.

Esta sección de la habitación tenía el aspecto de adivino; la mujer del mostrador tenía una capucha púrpura bordada y una bola de cristal frente a ella.

“Ustedes son mis próximos corderos perdidos—”

Hablaba en un estilo arcaico que definitivamente te ponía de humor para que te leyeran tu fortuna.

“Wow, ella debe ser buena. ¡Está vestida como Marie!”

“La decoración es una decepción, pero al menos el místico es un profesional.”

Sin embargo, Merthophan no era de los que dejaban que una vibra quedara intacta.

“Ah, eres el de la división de inteligencia—”

“Las ruedas del destino, ¡oh, ex-coronel Merthophan! ¡Ha pasado mucho tiempo!”

La vibración mística se disipó instantáneamente. Fue un asunto dirigido por militares; por supuesto, todos se conocían. La adivina se bajó la capucha para saludar y Merthophan le devolvió el gesto.

“¿Por qué es así?” Choline gimió.

“Oh, ¿el coronel Choline y dos cadetes? ¿Seguro que queréis ir todos juntos? No se vuelve más barato”.

“No es un problema. Aun así, nunca antes había estado en el puesto de su oficina. ¿Te vistes como corresponde, pero no decoras en consecuencia?”

“Sí, honestamente; estos conjuntos eran todo nuestro presupuesto. No queda nada para decorar…”

Lloyd y Selen hicieron muecas; este tipo de información tras bambalinas era mejor mantenerla en secreto.

Al ver esto, el adivino rápidamente los tranquilizó. “No es gran cosa”, dijo, definitivamente no es una frase utilizada por alguien propenso a decir “tú”.

“El trabajo de inteligencia significa que hacer lecturas en frío es una habilidad vital. El tipo de problemas que la gente lleva a los adivinos suele conducir con bastante facilidad a la respuesta correcta. Como tú, por ejemplo.”

Ella señaló a Lloyd, y él saltó. “¡¿Yo?!”

“Tienes problemas, ¿verdad? Déjame ver tu mano.”

Él se lo ofreció y ella lo tomó, mirándolo. Con un dedo en su pulso, lo miró a la cara.

“¿Eh…?”

“Amor… no, ¿salud? No… trabajo… ¡Aha! Eso es lo que te preocupa.” “¿Es este el tercer grado?”

Los detectores de mentiras medían pulsos, no los adivinos.

“Puede que no lo notes, pero tu pulso cambia. Podemos leer sus palmas, escuchar lo que tiene que decir y ayudarlo. Entonces, ¿cuál es tu preocupación laboral?”

“E-Estoy tratando de decidir a dónde ir después de la escuela”. Merthophan y Choline parecieron sorprendidos.

“¡Lloyd, todavía eres de primer año! Un poco pronto, ¿no?”

Se rascó la mejilla tímidamente. “Sí, sé que tengo tiempo para resolverlo. Pero vi lo duro que están trabajando los de segundo año y empecé a preocuparme”.

“Mmm.”

“Me alisté para ser un soldado como el de mi novela favorita, pero… esa no es realmente una carrera”.

“Incluso dentro del ejército hay roles tan dispares como ‘guardia real’ o ‘enlace diplomático’. Estoy seguro de que habrá gente haciendo cola para llevarte. ¡El trabajo de inteligencia paga bien! Lo recomiendo.”

La adivina se golpeó el pecho y su actuación se olvidó hace mucho tiempo. Eso es ciertamente cierto, Lloyd. ¡Mis planes ya están establecidos!”

“¿En serio? Eso es increíble, Selen”.

Él le dirigió una mirada de profundo respeto.

Todos los demás, incluso el adivino, inmediatamente asumieron que se refería a “la esposa de Lloyd”.

“Todo lo que realmente puedo decirte es que lo pienses largo y tendido”, dijo la adivina, haciendo rodar su bola de cristal por el escritorio. “Haz buen uso de tu tiempo y descubre qué tipo de soldado quieres ser. Hable con sus amigos, sus maestros y sus oficiales superiores, haga experiencias de prueba en diferentes lugares de trabajo: la experiencia lo es todo”.

Simplemente no había nada adivinatorio en esto ahora. Pero parecía ser lo que Lloyd necesitaba oír, y parecía muy agradecido.

“¡Muchas gracias! Me aseguraré de no arrepentirme de nada.”

Merthophan le dio una palmadita en la espalda. “¡Ese es el espíritu, Lloyd! No se trata de elegir el camino correcto, se trata de esforzarse para aprovechar al máximo el camino que ha elegido. Espero grandes cosas”.

“¡Sí, señor!” Lloyd respondió, súper optimista. “Tienes uno bueno ahí, ex-coronel”, se rio el adivino.

Merthophan pareció complacido. “Será un activo para el poderío del ejército y un sucesor viable para mí en las granjas de Kunlun”.

“Y volvemos a la agricultura”. Choline suspiró.

“¿Y para ustedes dos?” preguntó la adivina, volviéndose hacia ella. “¿Compatibilidad?”

“Mm… nah, olvídalo. Buen recordatorio de por qué lo amo y, como dijiste, tienes que esforzarte para que el camino que elijas funcione”.

“¿Mmm? ¿Qué fue eso, Choline?”

“! ¡Olvida que escuchaste algo! Gran idiota.”

“Eh-heh-heh, no necesito leer nada para saber que están hechos el uno para el otro”.

El adivino sonrió, pero justo cuando todo parecía llegar a una conclusión feliz…

“¡Quiero reafirmar mi propia posición! Exijo nuestra compatibilidad en números duros y fríos que puedo usar para silenciar a cualquier enemigo”.

Selen arruinó todo.

“Ah-ha-ha, ella también se destaca. De acuerdo, siéntate frente al cristal.”

Ella realmente estaba jugando a medias con esta cosa arcaica, pero Lloyd y Selen tomaron sus asientos.

“Rellena los campos necesarios aquí…sí, y allá…”

Murmurando, revisó los documentos, comparándolos… sin usar el cristal en absoluto…

“¿Esto es solo decorativo?”

“Básicamente. Lo llamamos adivinación, pero en realidad es solo el uso de los vastos recursos de creación de perfiles del departamento de inteligencia para descubrir a sus hijos y ver si trabajarán juntos, lo cual es mucho más preciso”.

“Dios, los espías pueden hacer cualquier cosa”, dijo Lloyd.

“¡Eh-heh-heh!” Selen se rio. “¡Este perfil sin duda demostrará que estamos hechos el uno para el otro al cien por cien! No, ciento veinte por ciento. ¿Y por qué detenerse allí? ¡Doscientos por ciento! ¡Duplica las mutuas! No puedo esperar.”

Lloyd parecía perdido, y Merthophan y Choline negaban con la cabeza. Mientras tanto, la adivina murmuraba para sí misma.

“… Sí, qué desastre”.

“………” Los oídos de Selen captaron eso, y quedó momentáneamente petrificada. Posiblemente fosilizado.

Luego su cabeza se volvió hacia la adivina con un chillido audible, ojos hundidos.

“…… ¿Escuché la palabra ‘desorden’ o mis oídos me engañan?” La adivina se rascó la ceja, perdida. “Uh… ¿prepárate?”

“¿Prepararme? Entonces, ¿nuestra compatibilidad es sorprendentemente buena? ¡Ya veo!”

Selen claramente no estaba preparada para aceptar malas noticias. La adivina se volvió hacia Merthophan en busca de orientación.

“Nos estamos quedando sin tiempo, así que acaba de una vez. No importa cuán desastrosos sean los resultados”.

Ella se quedó sin aliento ante la determinación en su voz… parecía menos un adivino que un juez a punto de pronunciar una sentencia.

“Escucha bien.”

“¡Oh, por supuesto!” dijo Lloyd, sin pensar mucho en ello.

Selen respiró hondo dos veces como un campeón de judo entrenando en una montaña y luego dijo: “Golpéame”. Claramente no fue así como te preparaste para un resultado desconocido. Ella sabía que estaba mal.

“Lloyd, Selen, su compatibilidad es…” “Sí…”

“Diez…” “¡¡Hahhhhhhhhhhhhh!!”

Eso solo llevó a Selen a agarrar el cristal y arrojarlo a la ventana.

Se oyó un estrépito cuando atravesó el cristal, aterrizó afuera, y un grito cuando golpeó a alguien en la calle. Cargos de agresión pendientes.

“¿Q-Qué está pasando, Selen?”

“Lo siento, Lloyd, pensé que había visto un tipo de insecto que no puedo tolerar”.

Su contundente cancelación del diálogo dejó a la adivina avergonzada. “¡Selen Hemein!”

“¡Maldita sea, Selen!”

“No te preocupes. Me disculpo por la brusquedad. Pero si veo otro insecto como ese, puedo terminar con mis manos envueltas alrededor del cráneo del adivino”.

Las amenazas brotaron de ella sin reservas. El objetivo de ellos se estremeció, a pesar de su rango de ventaja.

“¡No puedo esperar a escuchar los resultados! Escuché ‘diez’, pero estoy seguro de que no podría ser el diez por ciento. Simplemente hablaste mal.”

Choline se estremeció. “¿Quién intimida a un adivino por una buena respuesta?”

Era como si estuviera repitiendo un juego de teléfono.

“No importa el camino que elijo, sino el esfuerzo que pongo para que funcione. ¡Simplemente estoy siguiendo tu consejo!”

Una malinterpretación salvaje de la perogrullada bien intencionada de su superior. Los acosadores de Yandere seguramente ponen mucho esfuerzo en la dirección equivocada.

“Intentemos esto de nuevo”.

El adivino dirigió a Merthophan y Choline una mirada lastimera.

Choline le dirigió una mirada de seguir y mentir. La adivina asintió con la cabeza en avance rápido e hizo una demostración de volver a examinar sus hojas de cheques.

“Dios, mi error, me perdí esta parte por completo”. “¡Vaya, vaya! Eso lo explica. Eh-heh-heh.”

“Ah, y esta parte. Debería ser esto, ¿verdad?” “Eh-heh-heh. ¡Cierto! Mi error.”

“¿Te importa si finjo que tu cumpleaños es otra cosa?” “¡Adelante! Puede ser lo que quieras hoy”.

Selen estaba aprovechando al máximo su segunda oportunidad. Y las principales preguntas del adivino estaban ajustando las cosas para que su compatibilidad mejorara mucho.

Todos sus espías de espionaje se dedicaron a intentar localizar la respuesta correcta.

“Si el cumpleaños está aquí… y revertimos esto…”

Pocas cosas hablan más de la santidad de la vida humana que la voluntad de ajustar las fechas de nacimiento. Podrías hacer un documental completo sobre eso.

Y el resultado final…

“¡Okay! ¡Entiendo! Lloyd y Selen son… redoble de tambores, por favor…

¡cien por cien compatibles! Aplausos estruendosos”. “¡Vaya! no puedo creerlo ¡Tendremos que casarnos!”

El partido fue amañado.

Su alma gemela (LOL) Lloyd estaba ocupada arreglando la ventana que ella había roto, doblando las uñas rectas, fusionando madera con madera con la fuerza de su agarre, no como los humanos hacían carpintería.

“Eh, ¿Selen?” “¡Ohhhh, señor Lloyd!”

“Sé que tienes miedo de los insectos”, dijo, sonriendo. “Pero no puedes empezar a tirar y romper cosas”.

“Um, nuestra compatibilidad…”

“Recogí el cristal también y no vi a nadie en el suelo, así que ese grito debe haber sido mi imaginación. Pero, ¿y si hubieras golpeado a alguien y lo hubieras lastimado? Como líder de los de primer año, tengo que ser firme en estas cosas”.

“Um, cierto. Lo siento.”

“Y permíteme disculparme también con la adivina. Puedes recuperar esto.” Extendió el cristal, inclinando la cabeza. Selen y Vritra hicieron lo mismo. Choline y Merthophan se veían bastante orgullosos.

“Ciertamente ha crecido mucho desde que nos conocimos”.

“Sí. Obtuvo un poco de confianza, comenzando a tener una idea de su propia fuerza”.

Selen, sin embargo, parecía cabizbaja.

“Debería   haber  corregido  la   compatibilidad  de   una   manera menos destructiva. Me arrepiento de ello.”

Su futuro era alarmante y los dos oficiales mayores parecían preocupados.

Pero, ¿qué pasa con el hombre que gritó cuando recibió una paliza de cristal? Estaba acostado, a cierta distancia de la escena.

“¡Estaba completamente escondido! ¿Cómo podía haber sabido que yo estaba allí?”

Una vez más, era Zalko.

Para resumir rápidamente: había seguido a Lloyd hasta aquí suponiendo que sabía dónde estaba el verdadero rey, y el hombre con el que había compartido una conversación que parecía importante, Merthophan, se había unido a ellos. Habían escalonado sus llegadas, ¡en un puesto dirigido por un espía en servicio activo!

Estaba seguro ahora. Fuera lo que fuera lo que estaba ocurriendo allí, era información vital.

En modo completamente sigiloso, se arrastró hacia atrás, con la oreja pegada a la ventana, escuchando. A medida que el tono se volvía sombrío, echó un rápido vistazo al interior y el último ataque de Selen, Toma Una Pista de Lanzamiento de Cristal, lo golpeó justo en la cara.

“Ella debe haberme visto… e instantáneamente arrojó ese cristal. Pero ella no vino detrás de mí, ¿entonces eso fue simplemente una advertencia? No… ¿Me están dejando vagar libremente?”

Era solo la locura habitual de Selen, pero la paranoia era fuerte con este ladrón y estaba llevando todo al peor desenlace.

“¡No seré derrotado tan fácilmente, Azami! ¡Mi reputación como ladrón depende de ello! ¡Haré que este secuestro sea un éxito y cumpliré los objetivos de mi cliente!”

El ejército de Azami, sin saberlo, se había ganado rencor.

Furioso, Zalko presionó un poco de hielo en su frente, tratando de calmar el bulto.