Dungeon ni Deai wo Motomeru no wa Machigatteiru Darou ka (NL)

Volumen 17

Capítulo 3: Campo de Batalla

Parte 1

 

 

El sol se elevó.

En el cielo de la mañana donde aún quedaba oscuridad no se veía ninguna nube. Al parecer la lluvia había aclarado completamente.


Sin embargo, dentro de mi corazón aún continuaba nublado, es lo que pensé.

–¡Bell! ¡No estés perdiendo el tiempo! ¡Ven rápido!

–… Si.

Siendo llamado por el grupo del semihobbit, dejé de mirar el cielo desde arriba de la colina y seguí detrás de él. La sede de la <Familia Freya>, <Fólkvangr>.

El “patio” de su hogar que poseía un territorio que podría decirse que era el más grande entre todas las facciones pertenecientes a Orario, era adecuado representarlo como una planicie. El mar verde que rodeaba la mansión de pie sobre la colina en su centro, la planicie bañada por los rayos de la mañana humedecida por el rocío, estaba resplandeciendo hasta el punto de robarte los ojos.

Publicidad M-M1

Por las puertas y las cuatro murallas demasiado sólidas para llamarlas una cerca, no se podía ver en absoluto el paisaje del mundo exterior, por lo que aún no podía creer que este lugar estuviera dentro de la ciudad.

A partir de ahora, estaré luchando en un lugar así.

–¡No entiendo eso de que tus recuerdos estén en caos, pero no cambiare mi actitud hacia ti! ¡Justo como hasta ahora, en este “patio”, te daré tu “bautizo”!

El hombre semihobbit quien fue elegido para ser mi “acompañante”, Vanir-san, declaro con una voz seria mientras me daba la espalda.

La noche de ayer Freya-sama le comunicó a la <Familia> que yo me había vuelto extraño a causa de una

<Maldición>… al parecer. Debido a eso, Vanir-san, quien también era un Aventurero de Segunda Clase Lv. 4, vio una molestia para su vida diaria. Tal vez porque sabía mi situación, vino a mi habitación y me levanto por la fuerza, cargando una comida ligera en remplazo del desayuno que se alineo en la larga mesa del “espacio especialmente amplio”, y me hizo venir al “patio” junto con otros grupos.

Estaría bien si todo lo que ocurrió hasta ayer fuese un sueño, esa coerción no me dejaba hundirme en la esperanza o la ansiedad.

La escena donde cada uno tomaba un arma los hacia parecer justo como un ejército.

–¡El tú antes de perder sus recuerdos era un bastardo afortunado quien, a pesar de aparecer repentinamente, capto el interés de la Diosa! ¡Realmente no me caes bien, te odio! ¡Los otros también piensan lo mismo, así que no esperes que nos contengamos! … Dicho eso, ¿¡Por qué tus ojos parecen los de un conejo muerto!?

–L-Lo siento…

Cuando estaba mirando distraídamente al semihobbit que era más bajo que yo, este se enojó.

Nerviosamente me disculpe con Vanir-san quien volteo en mi dirección con el rostro rojo. Junto con las dudas que no podía eliminar…

… Era imposible que no recordara a Vanir-san.

Durante la cita con Syr-san durante el “Festival de la Diosa”, siento que había un grupo de semihobbit dentro de los miembros de la <Familia Freya> que nos estaba monitoreando y nos persiguieron hasta el barco.

Llegado a este punto, sin embargo, no tenía métodos para comprobarlo.

Publicidad M-M3

–¡Te lo explicare de una vez, los dependientes de la gloriosa Freya-sama, se matan mutuamente en este “jardín”! ¡Desde la mañana hasta que el sol se oculta, todos los días! ¡Los que se dirigen al Calabozo no están restringidos a eso, pero para decirlo con precisión, los que salen del “jardín” son pocos! ¡Es por eso que este lugar es llamado <Fólkvangr> (campo de batalla)!

Vanir-san dijo mientras señalaba el campo.

En cualquier caso, al parecer los miembros de la <Familia Freya> desde el Lv. 1 hasta el Lv. 4—excluyendo a los que no eran combatientes como los Sanadores—cada mañana salían al “jardín” y repetían una batalla real.

Era una historia famosa dentro de Orario, la cual acababa de ver directamente ayer con mis propios ojos. Por eso, no había nada por lo que saltar de sorpresa, sin embargo—

–… ¿Cuál es la señal para la batalla?

Nos sacan al exterior temprano por la mañana, nos hacen tomar un arma y nos fuerzan a prepararnos para la batalla.

Yo mismo no sabía que estaba haciendo.

¿No había algo mejor que debería hacer, algo en lo que estar pensando? Esa idea compulsiva golpeaba mi pecho, pero— si había algo que pudiera hacer, quiero que alguien me lo enseñe.

La herida tras ser negado por tantas personas no estaba curándose.

Incluso ahora con solo recordar los ojos de todos, y las palabras de Kami-sama, siento que podría quedarme petrificado.

¿Debería buscar la “causa por la que el mundo cambio” o debería aceptar que la “razón es que yo cambié”? Ya que las personas de que mis alrededores estaban apelaban abrumadoramente por la segunda, si lo admitiera descuidadamente, vendría a susurrarme al oído. Y entonces, todo lo que mi yo actual podía hacer era cubrir mis oídos ante ese susurro.

Publicidad G-M1



La sombría oscuridad que me estaba envolviendo, y mi conflicto—

–No hay nada como eso.

—Para bien o para mal fueron soplados lejos por los “guerreros”.

Dándose la vuelta, las cuchillas gemelas de Vanir-san se precipitaron hacia mi pecho.

–¿¡…!?

Mis instintos soltaron un grito y con la Daga que estaba en mi mano bloquee su ataque por reflejo.

Un doloroso golpe que adormeció hasta mis huesos. Si no me hubiera defendido, sin duda esa puñalada habría atravesado mi corazón.

De verdad.

¡¡Realmente intentan asesinarme!!

–¡En el momento en que te paras en el campo, en ese momento comienza la batalla! Como para afirmar esas palabras, los miembros de los alrededores, liberaron sus armas. El tono del campo de batalla reverberó.

El sonido de salvajes cortes y golpes cubrió mis tímpanos, y entonces ante esos horrendos gritos, todo mi cuerpo se estremeció.

Sin tiempo libre para sorprenderme ante el ´jardín” convirtiéndose en un crisol de combates, emule las acciones de los “guerreros” en los alrededores.

Después de todo, el semihobbit frente a mis ojos se precipito para cortarme con toda su fuerza.

–¡¡Debería habértelo dicho!! ¡¡Te daremos un “bautizo!!

–¿¡…!?

–¡Aquí es un campo de batalla! ¡Este es el lugar donde nacen los valientes guerreros que la Diosa desea! Más allá de las Espadas Gemelas y la Daga soltando chispas, Vanir-san rugió.

En un instante, el arma de mi oponente se sacudió, mandando a volar la Daga desde mi mano, como un rugido, su manejo de la espada creo un vendaval de cortes.

Contrariamente, mi cuerpo se había movido por su cuenta.

Desenvainando la Baselard que estaba en mi cintura, contrataqué combinando una desesperada defensa y evasión.

Haciéndome descartar a la fuerza las preocupaciones que estaba llevando y arrastrando fuera a mi yo Aventurero.

–¡¡Uoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!

Mientras era rodeado por gritos de guerra que sacudían el aire, inevitablemente me volví uno de los “guerreros”

Publicidad G-M2



La punta de su espada empujada hacia mí, la patada giratoria que parecía arrastrarse por el suelo, y la inconfundible “intención asesina” que albergaba en sus ojos. Mientras era abrumado por la actitud de Vanir-san que no era entrenamiento, reforzamiento o prueba, decididamente rechace la “muerte”.

Incluso el arma que se adaptaba a mi mano hasta el punto de sentirse extraño ya no tenía relación.

Oscilando alrededor mi mano junto con la cuchilla muchas veces, pisando desesperadamente con mis pies, luche con todas mis fuerzas.

No era un oponente con quien podría contenerme, no se me permitía dudar. Si lo enfrentara con sentimientos a medias—¡Seria mi fin!

–¡Tch!

–¡Haaaaaaaaaaaaaaa!

Eso era lo mismo para los miembros en todas las direcciones.

Tras ver a un par de hombre y mujer humanos intercambiando cortes justo a mi lado, detrás un guerrero Enano envió a volar a un Elfo de un golpe y en diagonal desde el otro lado un Beastman y una Amazona estaban empujando sus armas en un punto muerto. Si un ave volara por el cielo, seguramente se reflejaría en sus ojos la escena de una tumultuosa batalla.

Usando Magia y <Maldiciones> intentaban matar a sus compañeros que deberían pertenecer a la misma

<Familia>.

Las gotas de sangre danzaban. Alguien cayo.

El arma se separó de su mano.

Extrayendo esa Lanza que había caído o la Espada que había apuñalado, alguien se puso de pie mientras estaba manchado de sangre fresca alguien y continuó luchando.

Sin duda escuche el sonido de la sangre dejando mi rostro.

Esto es—

Lo estaba subestimando.

Mi percepción fue superficial.

El “matarse unos a otros seguramente es una metáfora”, en algún lugar de mi corazón estaba tratándolo a la ligera de esa manera.

¡En este violento espíritu de lucha, no había ninguna mentira!

Esto es—¡¡Un “campo de batalla”!!

Una cruel competencia interna donde seguramente habría personas muertas.

Lo necesario era la fuerza para no ser doblegado por nadie y un espíritu combativo.

¡Los que permanecían con vida eran solo aquellos que continuaban ganando, obteniendo las cualidades de un

<Einherjar>!

Contrario a mi quien fue tragado por el fervor del combate y sudaba profusamente, unas pequeñas flores se sacudían en una esquina de mi campo de visión.

Por más que eran pisoteadas, incluso cuando eran cortadas y manchadas de rojo las pequeñas flores florecían orgullosamente.

Recién ahora me daba cuenta de que este “jardín” que succionaba la sangre de los guerreros, era un robusto “campo”.

–¡No estés mirando en cualquier dirección!

–¿¡Tsu!?

Mi mejilla fue golpeada por el gran rugido de Vanir-san mientras estaba distraído con los alrededores.

Los ataques de espada que se habían repetido ininterrumpidamente rasgaron mi ropa de combate, las persecuciones que continuaban intentaron atravesarme mientras intentaba desesperadamente tomar distancia.

No tenía elección.

Instantáneamente empuje mi mano izquierda vacía.

–¡¡<Firebolt>!!

–“¿¡Gugaaa!?

El rugido que se filtró desde mi garganta creo un relámpago de llamas que golpeo directamente a Vanir-san. Use Magia.

¡No, me hicieron usarla!

¡Dejando de lado si eran monstruos, lanzar la Magia verdadera, no como una amenaza ante un oponente humano, era algo que no hice incluso durante el entrenamiento con Aizu-san!

Bañado por el relámpago de llamas que lo cubrió desde el abdomen hasta el pecho, el cuerpo de Vanir-san que soltaba humo desde su cuerpo, se tambaleó.

Pero, sus ojos me regresaron la mirada—y nuevamente comenzó a atacarme.

Era una Resistencia ridícula. No podía ni siquiera llamarlo “técnica y estrategia”. Era así incluso para aquellos que estaban luchando en los alrededores. Incluso si lo comparaba con un Aventurero del mismo Nivel o los miembros de otra facción, estaban muy por encima.

¡No podía creer que los que estaban aquí ni siquiera eran los líderes de la <Familia>!

–¿¡Guaaaaaaaaaaaaaaaaaaa————!?

Cuando pensé que un grito de renuncia brotó desde la boca de alguien diferente, los Aventureros que habían perdido a su compañero de batalla se precipitaron hacia aquí.

Las decenas, cientos y miles de espadas y cuchillas cruzándose se acercaron desde todas las direcciones—¡En un instante el flujo del tiempo se disolvió!

Mi sentido del tiempo se comprimió hasta el extremo y con la sangre corriendo por todo mi cuerpo, mis extremidades saltaron con impaciencia. Me arrojé a una “Battle Royal”2 diferente a las que tuve continuamente dentro del Calabozo. Solo podía hacer eso.

Luche.

Sobre que nadie me reconocía. Sobre lo que debería hacer.

Arrojando lejos esos pensamientos y tristeza, luche mientras me olvidaba de todo. Hasta que mi mente quedara en blanco, solo con el fin de no morir.

Determinadamente, continué luchando. Y entonces—

En el momento que la mañana termino y el sol se extendía en el centro del cielo. El que estaba de pie en el campo de los guerreros—era yo.

–¡Guuuu… mier, da…!

Comenzando por Vanir-san, los otros Aventureros arrodillados en el suelo, me lanzaron miradas de odio y resentimiento.

Comparado con ellos—especialmente con Vanir-san y los demás que también eran Lv. 4—no es que yo fuera más fuerte.

La razón por la que salí victorioso fue solo gracias al <Firebolt>.

Si repitiera muchas veces un “uno contra uno”, yo, quien solo llevo medio año como Aventurero, seguramente esta vez perdería por la diferencia en técnica. Sin embargo, esta era una batalla campal. En este campo de batalla eterno donde tras derrotar a alguien te enfrentarías a alguien diferente, los aliados o enemigos no tenían ninguna relación. Había la necesidad de soportar los golpes repentinos y los ataques desde todas las direcciones. Y, dentro de esa caótica batalla, yo, quien poseía el poder de fuego más rápido, tenía una ventaja mayor que la de cualquiera.

Si había alguien que apuntaba hacia mí, le regresaría el ataque.

Si múltiples personas venían a cortarme a la vez, las enviaba a volar.

2 Tipo de lucha que involucra varios participantes, comúnmente vista en la lucha libre o videojuegos del género que lleva el mismo nombre.

Si no podía derribarlos con un disparo, disparaba muchas veces.

Una Magia sin Canto que sobrepasaba incluso a un Canto súper corto, superaba incluso la velocidad de un

<Espadachín Mágico>. El <Firebolt>que no necesitaba un hechizo demostraba su efecto en una batalla caótica, sin siquiera planearlo me hicieron reconsiderar eso.

Y más que cualquier cosa… si comparamos la resistencia y la fortaleza, yo perdería habiendo continuado vagando por cuatro días y cuatro noches en los Pisos Profundos.

¿Eso realmente paso?—aplaste desesperadamente esa duda que resonó en mi pecho.

–Ha, ha, ha…… ¿¡Haaaaa…!?

Dicho eso, el desgaste de Mente era ridículo y también me dejó sin aliento.

Mientras estrechaba mis ojos mirando a través de Vanir-san y los demás, daba todo de mi para que mis rodillas no se doblaran.

—No podía luchar más.

Cuando pensé eso mientras respiraba con todas mis fuerzas—

–“ “ “ “Grandioso.” ” ” ”

Pude escuchar esas “cuatro voces”.

— ——

El tiempo se detuvo ante las voces que golpearon mi espalda.

–Te volviste un mínimo “usable” como Aventurero.

–Sin embargo, en el momento en que tus recuerdos se volvieron extraños, pensé en que ibas a hacer.

–Si es esto, podemos bailar, ¿No es así?

–Si, puede luchar.

En algún momento habían salido al “jardín”.

Cuatro Hobbits sosteniendo cuatro armas, estaban parados “preparados para la batalla” equipados con cascos de color arena.

–Mi fuerza es toda por el bien de la Diosa. En consecuencia, con el fin de honrar a la Diosa, quiero aún más fuerza.

Ajeno a mí, cuyo tiempo se había detenido, el Elfo Oscuro desenvaino su Espada Negra de su vaina.

–El tiempo es limitado. Asesinando a tu yo actual, lograremos que renazcas. Y finalmente, el Maestro.

Pisando el campo de hierba, aparecieron frente a mis ojos.

–El verdadero “bautizo” comienza ahora.

Yo (Bell Cranel), quien estaba sin palabras, fui rodeado por los Aventureros de Primera Clase más fuertes de la ciudad.

Mi instinto de Aventurero que hasta ahora se había estado consolidando para no morir—se quedó en silencio como si se rindiera completamente.

***

 

 

El atardecer.

A pesar de que ya no podía ver nada, lo supe solo por la luz roja que señalaba el ocaso. Podía sentir débilmente el ruido del viento.

La hierba se sacudía en mis oídos.

De alguna manera, parecía que estaba tirado sobre el campo.

¿Cuándo caí? Ya no lo recordaba.

Fui cortado.

Aplastado.

Y quemado.

Fui desgarrado por incontables “técnicas”, pulverizado por “tácticas” que no podría alcanzar y devastado por “Magia” que no podría igualar.

La espada del Elfo Oscuro corto mi ruta de escape, incluso cuando me defendí, mi arma fue cortada. Aun no comprendo por qué mis extremidades seguían conectadas todavía.

La coordinación infinita de los Hobbits al ejecutar el ataque y defensa guiaron mis movimientos y en el instante en que mostré una apertura, la Lanza Larga, el Gran Martillo, la Gran Hacha y la Gran Espada rompieron mi cuerpo desde cuatro direcciones.

El ataque relámpago del Elfo Blanco nos tragó a mí y mi relámpago de llamas que había disparado al instante, transformándome en un sucio pedazo de basura. La lluvia de relámpagos que no nunca aflojaba, erradicó no solo mi cuerpo, sino incluso mi mente—mi voluntad.

No había forma de resistirse. Fue demasiado abrumador.

Finalmente comprendí que tan cruel e irrazonable era el significado de “ser rodeado por Aventureros de Primera Clase”..

—          Ah.

Los fragmentos de un sonido que no podía llamarse siquiera un gemido se filtraron vergonzosamente.

Mis huesos estaban rotos, mi carne estaba cortada. mi ropa de combate ya no tenía partes que no fueran rojas.

No podía respirar, ni siquiera escupir sangre de manera correcta. A pesar de que la primera vez que recibí un ataque era caliente y doloroso hasta el punto de querer llorar, esta vez ya no sentía nada. Solo, frio, mucho frio.

¿Ahora estábamos en invierno?

Los sonidos de mis latidos se sentían distantes. Mi vida se terminaba. La “muerte” se acercaba.

Lo sé. Conocía este sentimiento.

La marcha desesperada en los Pisos Profundos. El oscuro final que saboree allí. Esta vez no había un Hada con la que abrazarme.

Flashbacks de mi vida se reprodujeron en mi mente. Pero era inútil. Ya no tenía el poder de reconocerlos.

Incluso la noción de que mi cuerpo estaba frio comenzaba a desaparecer, con mis parados abiertos, intente dejar de vivir.

–<Zeo Gullvieg>.


Justo después, la “luz de la curación” envolvió mi cuerpo, interceptando la “muerte” por la fuerza.

— ——¿¡Kaaaaaa!?

Mis latidos revivieron, mi respiración regreso, el torrente de vida que brotaba le dio un impacto a mi alma.

Mis parpados que estaban medio cerrados se abrieron de golpe y todo mi cuerpo salto como si me recorriera una corriente eléctrica, agonizando como un pez que fue lanzado a la tierra.

–¿¡H-Haaaaaaaaaa…!? ¿¡*Cough*, *Cough*… gahaa…!?

–Eso fue peligroso, ¿Sabes? Justo ahora realmente moriste..

Todo mi cuerpo se sacudía rítmicamente hasta el punto de sentir que me convertí en un corazón, haciendo que mis brazos y piernas convulsionaran vergonzosamente. Cuando estaba enterrando mis dedos en el suelo sin importarme que la tierra entrara en mis uñas, una voz despreocupada cayó sobre mi nuca.

Cuando levante mi rostro con mi campo de visión parpadeante, la responsable de revivirme—la Sanadora Heith-san levantaba su bastón en una mano.

–Todos los Aventureros de Primera Clase, por favor terminen por hoy. El daño a su cuerpo se curó, pero no tiene suficiente sangre. Bell ya no podrá moverse.

–Que miserable.

–¿Solo este nivel?

–¿Con que rostro piensas encarar a Freya-sama?

— —Pero, ya es casi el anochecer.

Ante su llamada, los cuatro Hobbits bajaron sus armas.

El tiempo límite era hasta que el sol desapareciera en el cielo del occidente. En los alrededores, la sed de batalla se había calmado y el sonido de los choques de espadas también se habían interrumpido. La batalla, terminó.

Termine sin ser asesinado. Olvidándome incluso de sentirme aliviado por eso, solo estaba atónito.

¿Cuántas veces, morí…?

Las “experiencias cercanas a la muerte” se repitieron.

En el momento en que mi corazón se detuvo, en el instante en que mi respiración se paró, fui “revivido” por los Elixires, la Magia de Curación, o incluso por la fuerza usando una Espada Mágica de relámpago. Mis extremidades llenas de abundantes heridas que fueron cortadas en mil pedazos y mis huesos que se llenaron de grietas en un instante se recuperaron completamente.

Si ponía atención, los que estaban tirados aparte de mi también fueron bañados por la luz de la curación y estaban recibiendo tratamiento del Herborista.

Colocando en el suelo mi mano temblorosa, levanté la mitad superior de mi cuerpo, y entonces finalmente lo noté.

Con respecto a los Sanadores— el extraño personal de Sanación que se dice que eran más difíciles de asegurar que los Magos—la <Familia Freya> estaba repleta de ellos como de Aventureros.

¿Este era la razón por el que podían “matarse unos a otros”?

¿La terrible competencia interna estaba siendo apoyada por sobresalientes Sanadores?

–Ya que también nos estamos fortaleciendo, si es una curación tres pasos antes de la resurrección podremos hacerlo.

Cuando estaba sentado en el suelo aun sin poder moverme, a mi lado Heith-san dijo lo que parecía una broma.

–Dicho eso, para hacer una curación hasta un paso de la resurrección tendría que ser la <Dea Saint>. También dijo eso.

Incluso a ella, cuya mitad de su rostro estaba ensombrecida al ser iluminada por la luz del ocaso, le dirigí una mirada de temor.

Tal vez malentendiendo mi mirada, Heith-san sonrió con indiferencia.

–Sip, puedes estar tranquilo. Hasta ahora, dentro de lo que he visto, eres el primero en ser lastimado y acorralado tan llamativamente. Tú, eres “especial”.

Ante esas palabras que no me daban ningún consuelo, palidecí una vez más. Morir y ser revivido.

Esto era… un <Einherjar>.

Nacidos en el <Fólkvangr>, los robustos dependientes de la Diosa.

–El final de alguien que pierde sus recuerdos, es un nuevo bautizo… para ser tu “primer día”, aguantaste bien.

Superando el “bautizo” del campo, los dos elfos que se alzaron a la primera clase intentaron pasar por mi lado.

Mientras Hogni-san con su Espada Negra en su vaina me daba unas palabras de elogio, el Maestro me miro fríamente.

–A partir de mañana seremos tus oponentes. Prepárate. Y entonces esta vez perdí toda esperanza.

¿Esto continuara a partir de ahora…?

¿Sin siquiera el tiempo libre para poder asustarme ante la soledad del mundo, debía enfrentarme a otra desesperación…?


Solo sabía que estaba aterrado y no podía huir.

–Vamos, Bell. No puedes levantarte, ¿Cierto?

Mirándome mientras estaba estupefacto, Heith-san extendió su mano y me hizo levantarme.

Mi cuerpo temblaba antiestéticamente a causa de la pérdida de sangre y aunque era recibido por su pecho envuelto en ropa blanca, no podía ni siquiera agonizar por la vergüenza.

Alfrigg-san y los demás, Vanir-san, y los otros Aventureros, todos se dirigían en la misma dirección.

Los que habían perdido la conciencia o no podían moverse eran agarrados de los brazos o las piernas, y también eran arrastrados hacia allí.

Excluyendo a los Aventureros de Primera Clase, todos, cargando sus cuerpos cubiertos de heridas, regresaban a la mansión en la cima de la colina.

La luz roja del anochecer, y las largas sombras de los muchos guerreros que se extendían en el mar de hierba. Ese paisaje crepuscular, como si se dirigieran a su última batalla, inevitablemente evocaba lastima y te hacía sentir escalofríos.

Las flores que florecían en el campo, bañadas por el viento, incluso ahora estaban sacudiéndose.

***

 

 

<Folkvangr> estaba rodeado por la luz azul de la luna.

Mientras que el campo que dio la bienvenida a la noche regresaba a la tranquilidad, la mansión, el palacio en la cima de la colina que evocaba a un templo, estaba lleno de luz y bullicio.

El lugar de origen era el <Sessrúmnir> en el primer piso.

En ese lugar se extendía una escena que parecía un banquete, contrastando completamente con momentos antes cuando se “mataban mutuamente”, extremando lo peligroso.

–¡Denme carne!

–¡Por aquí el licor!

–¡Los platos no son suficientes! ¡¡Con esto podremos luchar mañana!!

Había diez filas de largas mesas conectadas entre sí, y los muchos Aventureros sentados allí extendían sus manos hacia la comida que se alineaba, devorándola y vaciando sus copas. Esa era una guerra por la comida.

El día de los miembros de la <Familia Freya> que comenzaba desde la guerra al amanecer terminaba con una abundante cena.

Publicidad M-M4

Era una tradición de la <Familia> que los participantes de la batalla del campo devoraran con avidez la comida en el <Sessrúmnir>, regenerando sus cuerpos—o, mejor dicho, si no le ponían fin al día en este horrendo banquete, no podrían recuperar sus energías. Sin importa cuántas veces fueran bañados por la Magia Curativa, obviamente la comida era indispensable para sanar un cuerpo exhausto. En consecuencia, todos transformaban la comida en su propia sangre y carne con intensa concentración, y humedecían sus cuerpos con licor.

–Haa~ Hoy también comen bien, ¿No es así~? Aunque es lo de siempre. …… Alguien rempláceme ya.

En ese lado, quienes cocinaban sin descanso en la cocina eran Heith y los demás Sanadores, además del Herbolario.

Incluida la Curación que podría llamarse Resurrección, el manejo posterior al “bautizo” también era su trabajo. Dentro de una gigantesca olla, que podría considerarse como el caldero de una bruja, se cocinaba la carne de jabalí la cual el Herbolario mezcló con hierbas medicinales para fortalecer la fuerza física (definitivamente no era alguna clase de insinuación hacia el Capitán Ottar, en serio), y sacaron el aguamiel en el que se había mezclado leche de cabra y miel de abeja.

Ellas eran llamadas con el segundo sombre de <Andhrimnir>.3

Con respecto al origen de ese nombre, se murmuraban como si fuesen verdad cosas como: “es porque son doncellas que satisfacen a los guerreros que luchan”, y “por sus apariencias de espaldas, se puede ver a simple vista que a menudo trabajan demasiado después de todo”. Incluso dentro de ellas, Heith, quien era la más joven y capaz, estaba ejerciendo como el rostro de las <Andhrimnir>, Freya también tenía mucha confianza en ella y era famosa por a menudo tener una mirada de pez muerto. También había una anécdota suya de haber golpeado sin decir nada con su Báculo la nuca de un grupo de Dioses que discutían a carcajadas en cierto bar “¿Quién está más desgastada entre ella y <Perseo>?”.

También en este momento esparcía sal y variadas especias como si dijera, “dejemos que los Aventureros con fuertes estómagos coman incluso esto”.

3 Nombre del chef de los dioses nórdicos y los Einherjar.

–Quiero que regrese la legendaria Enana-san que dicen que manejaba sola esta cocina. Cosas como esas eran las conversaciones de Heith.

Batallas desde la mañana y en la noche se abría un banquete, las tradiciones de esta <Familia> no eran algo ordenado por Freya. Los miembros de generaciones pasadas, dependientes anteriores incluso a Ottar y los demás, las comenzaron por su propia cuenta y habían sido heredadas hasta nuestros días.

De cualquier manera, los no combatientes que llevaban la comida una después de otra, incluyendo a los que trabajan detrás de escena, y también las sirvientas que vestían delantales de buena cálida, estaban muy ocupados todos los días.

–Aquí, aquí, como estamos carentes de manos, yo les traje la comida. … Dicho eso, ¿Que les ocurre a ti y a los demás, Vanir-san? Parecen enojados.

Heith, quien llego hasta la mesa mientras serpenteaba entre ellas, inclino su pequeña cabeza.

Al mismo tiempo que la carne de jabalí y el aguamiel4 eran alienadas sobre la mesa, Vanir respondió mientras fruncia el ceño.

–… Podemos tolerar el pretender ser compañeros con ese mocoso. Es irritante, pero es fuerte. Hoy perdimos en el “jardín”. Reconozco que tiene la fuerza para llevar el nombre de <Einherjar>.

Sin embargo, diciendo eso, Vanir miro hacia el frente. Los otros miembros también lanzaron una mirada de odio en la misma dirección.

Allí había un asiento vacío.

Terminando de comer y beber por delante y entonces siendo llamado por la Diosa, era el asiento de un solo chico.

–¿¡Porque solo ese tipo monopoliza de esa manera el amor de la Diosa que siempre hemos querido…!? Esa era la representación de sus celos y resentimiento.

Heith se escogió de hombros y les anuncio con un rostro indiferente.

–Es simple. Él es “especial” para ella después de todo.

***

 

 

–Freya-sama.

Ante la voz que llamo su nombre, ella levanto la vista del libro que estaba leyendo. En su habitación en la parte más alta de su hogar.

4 Como dato estas son las mismas comidas servidas a los Einherjar en la mitología nórdica.

Vistiendo un fino vestido de noche negro, Freya, quien estaba sentada en el sofá, miró hacia la puerta.

–Bell vino.

–Déjalo pasar.

El rudo Ottar casi pareció escupir cuando llamo “Bell” al chico.

Mientras disimulaba su risa, cerro su libro y lo oculto debajo del cojín colocado en el sofá.

Y entonces, inconscientemente peino su largo cabello plateado con sus dedos un par de veces.

Aunque la persona misma lo negara con un “No es que particularmente lo estuviera esperando impacientemente”, le dio la bienvenida al chico mostrando una sonrisa que, si sus dependientes o cualquier persona la viera, sabría que estaba feliz.

–Bienvenido, Bell. Gracias por venir.

***

 

 

–Bienvenido, Bell. Gracias por venir.

Tras haber sido llevado por el Maestro desde la habitación especialmente grande hasta su habitación, Freya- sama me dio la bienvenida.

Me sentí impactado por la Diosa de la Belleza que intencionalmente se acercó hasta mí y tomo una de mis manos. No sabía si era consciente del interior de mi pecho que estaba estallando por lo terso de su piel como seda y su suave calidez, pero me invito hacia el centro de la habitación.

Con una mesa redonda simple en medio, ambos nos sentamos en el sofá y una silla con apoyabrazos respectivamente.

–Tu tez se ve mal, ¿Sabes? Me pregunto si recibiste un “bautizo” demasiado cruel.

–… Si. En el patio fui despedazado por el Maestro… por Hedin-san y los demás… no, luché muchas veces…

–¿Fue así? Siento llamarte cuando estás cansado.

Esta noche también estábamos los dos solos dentro de la habitación.

En la mística habitación azul donde brillaba la luz de la luna, intercambiábamos una conversación incoherente. Incluso ahora, no podía creer que esa Diosa de la Belleza estaba frente a mis propios ojos.

Como esperaba, esta situación estaba demasiado alejado de la realidad. Mientras sentía un marcado cansancio, aunque sabía que era maleducado, no pudiendo aceptar que mis propios recuerdos se habían vuelto extraños… intente “averiguarlo”.

–No puedo creer que había estado luchado violentas batallas como esa todos los días… fue aterrador y agotador.

–Fufu, así es, ¿No? Quizás perdiste tus recuerdos porque odiabas el bautizo.

–…

Pero, soltando esa sencilla broma, lo esquivo. Mostré una mueca complicada y me rendí.

Había olvidado que era algo imposible intentar encontrar lo que ocultaba un Dios. Como si viera algo gracioso, Freya-sama dejo escapar una pequeña risa al verme así.

–Entonces, justo como prometimos, ¿Me dejarías escuchar tu historia?

–¿De verdad, lo harás?

–Naturalmente. De no ser así, ¿Porque te llamaría?

La Diosa de la Belleza que estaba sentada en el sofá con las piernas cruzadas, me miró fijamente. Después de vacilar un momento, me resigné y comencé a hablar.

–Llegue solo a Orario. Era la primera vez que venía a una gran ciudad, en un principio estaba emocionado, pero… no me dejaron entrar a ninguna <Familia>… entonces, cuando me quede sin dinero y estaba vagando por la ciudad… Hestia-sama, me encontró.

Hablar de esta manera sobre mí mismo era raro, sin saber cómo hacerlo, elegí muchas veces mis palabras y hablé incómodamente. En el instante que en pronuncié “Hestia-sama” sentí un dolor en mi pecho.

Publicidad M-M2

–Hee~ el tú de ahora paso muchas dificultades para unirse a una <Familia>, ¿Eh? Después de eso, ¿Que paso? Freya-sama inclino su oído ante mi historia pareciendo profundamente interesada.

Sin negarla como una historia ociosa, ni burlarse como si fuera un simple sueño. Mejor dicho, si pensaba que era extraño, me interrumpía con preguntas y luego me instaba a continuar. Su voz de soprano cómoda de escuchar iba sacando mi historia, hasta el punto en que yo mismo me sentí desconcertado.

¿Esto era carisma? ¿O era su <Encanto> como Diosa de la Belleza? Quiero hablar por siempre con esta Diosa.

Tenía un “encanto mágico” difícil de resistir que me hacía pensar de esa manera.

–… Freya-sama. ¿Dónde, nos encontramos?

Sacudiendo mi cabeza dentro de mi corazón para no ser llevado alrededor por la nariz, intente preguntar también por el “Bell Cranel de la <Familia Freya>”.

–En la <Tumba de los Héroes>. Cuando me dirigí a dejar una ofrenda de flores junto con mis niños, llegaste al monumento. Allí, fue amor a primera vista.

–¿¡A-Amor a primera vista…!?

Ante esa frase que me hizo sonrojar, el tono de mi voz se alteró.

–Cundo te pregunte si querías ser mi dependiente, en pánico me dijiste “¿¡Está bien con alguien como yo!?” casi tambaleándote.

–¡…!

–Después de eso, al regresar a la base, palideciste cuando viste a Ottar, ¿Sabes? Sin embargo, incluso si quitamos eso, la “historia” de Freya-sama fue perfecta.

Si existiera “otro yo más” en un mundo diferente, realmente parecía una historia posible.

Aunque intente desesperadamente encontrar un “agujero”, no pude encontrarlo. No había nada sospechoso.

–Después exploraste el Calabozo. Antes de recibir el “bautismo”, ya que dijiste que querías ir por cualquier medio al Calabozo, hice que Hedin te llevara, pero… regresaste a mí con solo derrotar a un Goblin.

–¿¡—!?

–En ese momento me reí. Eras demasiado lindo y divertido después de todo.

Publicidad M-AB

Mirando a la Diosa que mostraba una sonrisa nostálgica como si añorara algo de esa época, quede impactado.

Ese era un episodio real que estaba incluso en mis recuerdos. La desagradable exhibición que hice frente a Hestia-sama.

¡Sin importar cuánto conocieran sobre mí, ese “regreso triunfal tras derrotar a un Goblin (el monstruo más débil)”, esa excentricidad que era casi como un <Irregular> del Calabozo era imposible de falsificar!

¡Freya-sama también solo pudo haberlo visto o escuchado…!

¡No le he contado a nadie sobre una historia tan vergonzosa como esa! ¡Las únicas que sabían, son Kami-sama y Eina-san…!

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

12 Comentarios
Mas Votados
Mas Recientes Mas Antiguos
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios