Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 13

Capítulo 3: El Equipo Inferno Renace

-Pocos días antes de que Kamito y Rinslet salieran de la Academia…

Claire regresó a su tierra natal por sí misma, el antiguo territorio de Elstein.

“Padre y Madre están aquí, verdad…”

Frente a una pequeña casa a orillas del río, Claire apretó la mano contra su pecho, ajustando su respiración, tratando de calmarse.

Ya habían pasado cuatro años desde que se separó de sus padres. Hace cuatro años, debido a la traición de la «Reina de la Calamidad», los padres de Claire fueron despojados de su estado noble y arrojados a la Prisión Balsas de la capital imperial.

Debido a haber servido a la familia imperial Ordesia durante muchos años, no fueron tratados como otros convictos de crímenes pesados a pesar de ser encarcelados. Con sólo su libertad restringida, era un estado más parecido a arresto domiciliario.

Sin embargo, estos largos años de la vida en prisión, finalmente llegó a su fin recientemente. Durante el Blade Dance celebrado antes, el equipo del Imperio Ordesia había obtenido la victoria. Como líder del equipo ganador, Claire Rouge fue recompensada por el Imperio.

Naturalmente, el deseo de Claire era un perdón por sus padres.

El consejo del Imperio se dividió en gran medida sobre este asunto, de ahí su deseo recibió una respuesta oficial. Pero debido al mayor prestigio e influencia de la segunda princesa, las palabras de Fianna ahora tenían mayor peso y finalmente debajo de sus esfuerzos, los padres de Claire finalmente recuperaron su libertad.

Sin embargo, su título noble no fue restaurado y su castillo y tierras fueron tomadas por el Imperio. Todo lo que quedaba de la familia Elstein era un pequeño pedazo de tierra y esta casa.

En comparación con su antiguo castillo, esta era una casa muy modesta.

De pie en la puerta de la casa, Claire miró a su alrededor con nerviosismo.

Presionó el cristal espiritual en la puerta. Después de una breve espera, la puerta se abrió lentamente hacia el interior.

Dentro de la pequeña casa, los padres de Claire llegaron a la puerta para saludarla, vestida con ropa sencilla.

“Bienvenida a casa, Claire.”

“… Has crecido tanto ahora.”

“Padre Madre…”

Abrazando a sus padres con fuerza, Claire gritó en su corazón como una pequeña niña.

***

La cena esa noche consistió en patatas y estofado de tocino, pan de nueces, huevos cocidos y faisán asado hasta que su piel estuviera crujiente. El postre era la tarta de melocotón favorita de Claire.

No había ninguna necesidad de recordar el pasado sobre las antiguas comidas en el castillo Elstein. Aunque esta comida era muy simple, para Claire, la cocina de su madre era más deliciosa que nada en el mundo.

Sentados alrededor de la mesa en la sala, había demasiadas cosas de qué hablar después de haber sido separados por cuatro años.

La vida en la escuela preparatoria, la inscripción en la Academia Espiritual Areishia, la entrada al «Blade Dance», también de Kamito-

“Comer alimentos en conserva todo el tiempo no es bueno para tu salud.”

Su madre se lo recordó con cuidado y preocupación.

“H-He empezado a cocinar recientemente.”

Claire hinchó el pecho con orgullo.

“¿…En serio? En una carta anterior, incluso dijiste que había un chico que cocinaba para ti-”

“S-Sí, eso es-”

La mirada de Claire comenzó a pasearse y murmuró esas palabras.

“O tal vez, ¿quieres decir que estás cocinando en especial para ese chico Kamito?”

“¿…Hmm?”

Parecía que el Duque Elstein se dio cuenta de un tema sensible.

“D-De ninguna manera. ¿Por qué diablos iba yo a cocinar todo por él?”

Rubor rojo, Claire sacudió la cabeza vigorosamente.

“¿Es eso así…?”

“¡K-Kamito es sólo un esclavo… Y un compañero de equipo, esto es todo! De todos modos, dejando de lado eso-”

Claire tosió ligeramente, cambiando apresuradamente el tema.

“Conocí a Ren Ashbell en este reciente «Blade Dance».”

“… Ohoh, la chica que aplacó la ira del «Señor Elemental de Fuego».”

“Sí… La adoro mucho. Esta vez, por fin llegué a conocerla.”

Con gran fervor, Claire decía a sus padres sobre ella (él). No era la «más fuerte blade dancer» que ella idolatraba desde hace tres años, pero Ren Ashbell luchó junto a ella como una compañera de equipo.

“Ella (él) es más fuerte y más amable que nadie. Una personalidad muy galante”

Sólo cuando hablaba de Ren Ashbell era ella muy capaz de expresar los sentimientos en su corazón con honestidad y franqueza.

(¿Q-Qué debo hacer, estos sentimientos en mi corazón están surgiendo de repente sucesivamente…?)

En medio de la conversación, notando sus sentimientos hacia Kamito, el rostro de Claire empezó a calentarse.

Aun así, ella todavía seguía hablando sobre sus hazañas…

Estos sentimientos reprimidos durante mucho tiempo, fluían como un torrente.

(…Así que estos son mis verdaderos sentimientos ¿eh?)

Claire apretó con fuerza contra su pecho.

… Estos eran los verdaderos sentimientos que ella era incapaz de transmitir a la cara de Kamito.

Los sentimientos que ella siempre había mantenido enterrados en el fondo de su corazón desde su primer encuentro en el manantial en el Bosque Espiritual.

“Cuando yo estaba sola, ella (él) se acercó a mí…”

De hecho, Kamito siempre había permanecido al lado de Claire.

La protección de Claire.

“… Ella (él) es la persona que amo.”

Claire se sonrojó hasta las orejas.

“¿Es eso así-?”

Sonriendo, su madre acarició el cabello de Claire.

“…Has hecho muy buenos amigos, ya veo.”

“¡S-Sí!”

Después de la cena, Claire se fue a dormir, apretada en la misma cama con su madre.

Al igual que cuando era joven, Claire abrazó el brazo de su madre.

Ella había estado dudando si debía decirle a sus padres sobre su hermana. Pero si ella hacía eso, se trataría de la cuestión de los «Señores Elementales» enloqueciéndose. Sobre la «Oscuridad de Otro Mundo» carcomiendo a este mundo, la señor elemental del agua le había prohibido decírselo a cualquier otra persona.

(…Madre, yo sin duda traeré a Nee-sama de nuevo.)

En brazos de su madre, Claire preparó en secreto su determinación.

***

La Prisión Balsas era una prisión fortaleza situada en el lado norte de la capital imperial.

Todos los reclusos de esta prisión inexpugnable eran nobles de alto rango en el país o elementalistas que habían violado las leyes del Imperio. Por lo tanto, a diferencia de las cárceles ordinarias, múltiples capas de barreras para sellar la magia espiritual se erigieron aquí.

En el nivel más profundo de esta prisión, un lugar donde ni la más mínima luz se filtraba a través-

“Escuché que alguien arriba quedó perdonado. Que fastidio.”

La voz de un joven arrogante.

“Hey, piensas lo mismo, ¿no?”

Haciendo flexiones de brazos con una sola mano, el joven entabló conversación con su vecina reclusa.

“… No me importa. Sin importar qué, estoy en una sentencia de por vida.”

La mujer que respondió tenía ojos de color carmesí y el cabello de color verde jade.

Vivian Melosa. Una comerciante perteneciente a los «Asesinos» que se había infiltrado en la Ciudad Academia varios meses antes por vender sellos malditos a las estudiantes.

Condenada a la pena de muerte, finalmente logró evitar la muerte gracias a la ayuda de la «Bruja del Crepúsculo». Sin embargo, después de haber cometido crímenes atroces, ella probablemente nunca vería la luz del día otra vez.

“Yo fui demasiado tonta. Pensar que podía salirse con la mía haciendo cosas justo debajo de la nariz de la bruja-”

Al pensar sobre estas cosas, no podía dejar de apretar el puño con fuerza, produciendo ruidos chirriantes.

“… Hmph, deja de hacerme reír.”

El joven pasó a una parada de manos con un solo brazo.

“… Pero ciertamente escaparé de aquí.”

El brazo del joven sonriendo colgaba flojamente. Aunque las heridas habían cicatrizado, le era imposible pivotar una espada correctamente sin problemas.

“-Entonces voy a matar a ese chico. ”

Visible bajo la luz tenue era un rostro marcado con sellos.

Jio Inzagi. El antiguo asesino de la «Escuela de Instrucción» que fue encarcelado por el Imperio después de su derrota a manos de Kamito en la batalla en la mina abandonada de la Ciudad Academia. Con un brazo amputado y el poder de los Sellos Malditos perdidos, sólo las llamas del odio aún ardían violentamente, en el parpadeo de sus ojos.

“¡-Lo mataré, mataré, mataré, mataré!”

Estando de pie al revés, repitió esas palabras sin parar como una maldición. Pero ni siquiera podía recordar en absoluto cual era el objetivo de su venganza.

“Maldita sea esa maldita espíritu de oscuridad. No puedo creer que ella limpiara mi memoria-”

Todos los recuerdos relacionados con ese chico habían desaparecido por completo.

Mientras estaba siendo entregado a los Caballeros Imperiales, había lanzado un hechizo sobre él.

¿Para evitar que Jio busque venganza? O, para evitar problemas que surgan cuando Jio diga a los Caballeros Imperiales sobre ese chico-

“Definitivamente, voy a encontrarlo, al tipo que tomó mi brazo izquierdo…”

“…Es inútil. ¡Nadie puede escapar de esta prisión!”

“Mmm, ¿¡cómo va a saberlo si no lo intentas!?”

Jio saltó de su cama y lanzó un puñetazo en los bares de la celda.

“Oahhhhhhhh…. ¡Eso realmente duele!”

El sonido de los huesos de sus dedos rompiéndose parecía haber sonado. Las barras se habían reforzado mediante magia espiritual, no eran algo que un asesino de la «Escuela de Instrucción» podría romper con las manos vacías.

“… Oh, viendo tu estupidez me dan ganas de llorar.”

“¡…Cierra la boca!”

Escupiendo, se volteó hacia el otro lado.

“Oye, ¿y tú? He oído que eres más que alguien común.”

“…”

Pero sólo hubo silencio en el fondo de la celda sola envuelta en la oscuridad.

“… Tsk. Cada uno de ustedes es tan patético…”

Jio Inzagi se acostó con molestia. Justo en ese momento-

De repente, hubo sacudidas violentas, causando que incluso el nivel más profundo de la prisión temblara.

“¿¡…Q-Que está pasando!? ¿Es por mi golpe de ahora?”

Gritó Jio Inzagi. Justo en ese momento-

Crash.

Acompañado por un sonido ensordecedor, el techo de la prisión se desplomó.

“¿¡…Qué!?”

Jio miró con los ojos abiertos, sin poder hablar.

El techo colapsado. Polvo flotaba en el aire. En un pequeño montón de escombros, un monstruo gigante apareció.

Un cuerpo terriblemente enorme, piernas tan gruesas como pilares de la prisión, sangre color rojo que destellaba en la oscuridad-Una araña extremadamente grande.

“¿¡…Un espíritu militarizado!? ¿Por qué en este lugar?-”

“¡Un enemigo!” “I-Imposible…” “¿Cómo puede este lugar ser atacado?-¡uwahhhhhhh!”

Los soldados que custodiaban la cárcel gritaron lastimosamente uno tras otro. Que la región central de la capital imperial sea atacada, era totalmente impensable.

“Jajá, patéalos a todos lejos-«Ungoliant»”

La voz adorable de una chica resonó en la oscuridad subterránea. El espíritu araña gigante agitó sus ocho patas, enviando a las paredes circundantes y soldados a volar como hierba cortada, creando un desastre total.

“¡…! Esa chica…”

Jio recordó la apariencia de esta menuda chica.

Cabello gris atado en coletas a los lados de la cabeza. Los ojos azules tan claros como el hielo.

“¿¡Tú, no eres la número dos de la «Escuela de Instrucción» -Muir Alenstarl!?”

“¿…Hmm?”

Sentada en la cabeza de la araña, la niña miró hacia atrás, entrecerrando los ojos a Jio.

“¿…Tú eres Jio Inzagi? ¿Qué diablos estás haciendo aquí?”

“…Este tipo de cosas debe ser totalmente evidente. ¡Fui atrapado por esos malditos caballeros! Por cierto, ¿por qué estás aún aquí? No estás aquí para salvarme, ¿verdad?”

“¿…Eh?”

Muir Alenstarl se quedó totalmente sin habla.

“¿Por qué Muir salvaría a un pequeño pececillo como tú?”

“Qué… ¿pececillo?”

Jio golpeó furiosamente los barrotes de hierro pero, por supuesto, los barrotes se mantuvieron inmóviles.

“¡Hey, sácame en este momentos, «Monstruo»!”

En el instante en que él gritó a Muir-

La pata delantera de la araña gigante descendió ante los ojos de Jio.

La planta se dividió en dos. La frente de Jio estalló en sudor frío.

“No llames a Muir con ese nombre, o de lo contrario vas a sufrir la misma suerte que estas celdas destruidas.”

“-Muir, ignora a ese tipo. Continuar la destrucción.”

En medio de los gritos y gritos, otra chica saltó de la araña.

“Una vez que los «Números» lleguen, será problemático.”

“Hmph, Muir lo sabe, Lily-”

El espíritu militarizado en forma de araña arrojó una gran cantidad de seda, acabando con los soldados que custodiaban la cárcel. Después de haber bajado de la araña, Lily pasó junto a la celda de Jio, llegando delante de Vivan.

“Hey hey. ¡Deja de ignorarme, perra!”

“Cállate, falso Rey Demonio. Escoria como tú son completamente inútiles-”

La luz de un cristal espiritual brilló en Vivian, que estaba sentada en un rincón de la celda.

“-Comerciante de los «Asesinos», Vivian Melosa.”

“…”

“Debes sentirte honrada. La cardenal tiene expectativas de tu poder.”

“… Dame un respiro. Sólo déjame seguir aquí.”

Sentada allí, Vivian Melosa respondió vagamente. Al parecer, su miedo a la «Bruja del Crepúsculo» había aplastado por completo su mente.

“¿No quieres recuperar tu libertad?”

Diciendo eso-

“Si deseas permanecer aquí de esta manera, estás invitada. No tengo ninguna intención de forzarte-”

Un sonido de botas militares venía de las profundidades de la oscuridad.

Poco a poco apareciendo era una mujer con una máscara roja, vestida con uniforme militar de la Teocracia.

Vivian contuvo el aliento. Jio también fue sorprendido por su poderosa presencia.

Haciendo caso omiso de los dos, la mujer se acercó a la celda más lejana.

Para hacer frente a un recluso que había permanecido en silencio todo este tiempo, completamente imperturbable por la situación en cuestión.

“¡Hey, perra! No me ignores-”

Recuperando sus sentidos, Jio le gritó a la mujer.

“¿…Ahora qué?”

“Necesita poder ¿correcto?, Entonces llévame yo soy el sucesor del «Rey Demonio» de la «Escuela de Instrucción»-”

“¿Sucesor del «Rey Demonio», dices?”

La cardenal se detuvo y miró hacia atrás.

“… Sí. Soy el hombre más cercano a ese Rey Demonio-Salomón.”

Jio sonrió mientras hablaba.

Detrás de la máscara, esos ojos carmesí brillaron con una luz aguda.

“Divertido. Entonces permítanme tratar de usar ese poder.”

Ella señaló con el dedo hacia la celda de Jio. Generado a partir de las yemas de los dedos, llamas que al instante fundieron las barras de hierro que estaban protegidas por la magia espiritual.

“Hmph, muestra agradecimiento a la magnanimidad de la Cardenal, Jio Inzagi.” Lily miró de reojo a Jio.

Después de haber obtenido su libertad, Jio rápidamente salió corriendo de su celda, pero-

“¿…Agradecimiento? ¡Hoh, que desafortunado por usted, señorita de buen corazón!”

Con eso, él escapó en las profundidades de la oscuridad…

“Jio Inzagi, ¡bastardo!”

“Ignóralo. Simplemente deja que un personaje insignificante como él se vaya.” Diciéndole a la furiosa Lily, la cardenal se dirigió a esa celda.

Ella estaba de pie delante de la celda. La presencia en el interior pareció vacilar un poco.

“¿Qué tienes conmigo? Falsa Ren Ashbell.”

“Ah, ¿tú lo percibiste?”

Ella parecía un poco sorprendida.

“Me he enterado de la verdad.”

“Ya veo. Ahora que lo pienso, ya has luchado contra ella (él) antes.”

Las llamas en sus dedos iluminaron las celdas.

Brillante cabello rubio. Ojos azules claros. Una voluntad aún más potente emanaba desde el nivel más profundo de la prisión.

“Entonces voy a ser breve, gloriosa caballero. Necesito tu poder.”

“Ya estoy pagando mis pecados. ¿Crees que voy a hacer a lo que dices?” Mirando al recluso en la célula, la chica enmascarada suspiró. “Expiación ¿eh? Sin embargo, cuanto más actúas así, más te quiero.” “¿…De qué estás hablando?”

La cardenal se quitó la máscara para mostrar la otra parte de su verdadera apariencia. “-Estoy salvando este mundo.”