Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 11

Epílogo: Serían Protegidos

-Esto está bien.

La chica murmuró para sí misma.

… Mientras volaba a través de la noche oscura.

… Al tiempo que recordaba la sensación final sobre sus labios cuando se separó de él en ese momento.

-Esto está bien… Con esto, puedo terminar mi misión.

Las lágrimas cayendo por sus mejillas se esparcieron en el viento.

Dentro de su corazón, ella estaba a punto de despertar.

La «Señor Elemental de Oscuridad» -Ren Ashdoll.

Su voluntad, corrompida por la oscuridad del otro mundo, sin duda iba a convertirlo en el «Rey Demonio».

Si eso llegara a pasar, entonces, toda la esperanza se perdería.

Los «Señores Elementales» serían devorados por la oscuridad del otro mundo por completo, provocando con ello el fin del mundo.

-Absolutamente no puedo permitir que eso ocurra.

Si él y el mundo donde él vivía serían protegidos-

***

Antes del amanecer, mientras que la luna todavía estaba visible-

El equipo de Kamito fue convocado para el ritual para obtener una audiencia.

Después de realizar un ritual de purificación a fondo, todo el mundo se había cambiado a sus nuevos uniformes marcados.

El uniforme de la Academia era una versión simplificada de la vestimenta espiritual. Como vestimenta de ritual, su clase no era particularmente alta, pero el uso de los trajes de combate utilizados en el «Blade Dance» en el ritual de reunión ya se había convertido en una costumbre.

Liderados por las cinco «Reinas», el grupo de Kamito llegó ante la puerta en las profundidades del Gran Santuario.

Conectando a la dimensión alternativa—la puerta del «Corredor Sin Fin».

Probablemente nerviosos, ninguno de ellos habló.

(… Esa puerta es exactamente la misma que recuerdo de hace tres años.)

Kamito murmuró para sí mismo mentalmente.

“-Por favor, pasen por esta puerta y caminen hacia adelante. Sin embargo, no tomen ningún desvío fuera del camino y no regresen. De lo contrario, el resultado final será que quedarán vagando por el «Corredor Sin Fin» para siempre.”

Después de asentir a las «Reinas», el grupo de Kamito cruzó la puerta.

-El corredor se extendía interminablemente.

Caminar sin parar a lo largo de este «Corredor Sin Fin» confundía el sentido de la distancia…

Llegaron a las puertas de la sala del trono.

Kamito se detuvo en sus pasos.

“Ya está bien ahora.”

“Sí, se trata de una dimensión alternativa aislada. Nadie puede espiar”.

Fianna asintió y estuvo de acuerdo.

Liberar a los «Señores Elementales» de la oscuridad del otro mundo que estaba más allá de este mundo.

Sin embargo, las cosas no eran tan sencillas.

Rubia Elstein había planeado usar el poder del «Rey Demonio» para destruir a los «Señores Elementales» junto con la oscuridad.

Sin embargo, una vez que los «Señores Elementales» fueran destruidos, «Astral Zero» e incluso el reino humano sufriría un golpe devastador.

Ese tipo de método no podía ser aceptado sin importar qué.

Además, si Kamito se basaba en el poder del «Rey Demonio» –

(…Su contaminación iba a convocar a esa oscuridad al mundo, ¿no?)

Por lo tanto, era necesario liberar a los «Señores Elementales» sin necesidad de utilizar el poder del «Rey Demonio».

La clave estaba en el avatar manifestado de la Señor Elemental de Agua, Iseria Seaward.

Si ella era capaz de despertar la cordura restante de los «Señores Elementales»-Determinaría su éxito.

Un plan arriesgado, como si caminaran en la cuerda floja.

En caso de fallar, más vidas se iban a perder, además de la de Kamito.

“Una verificación final. ¿Está realmente bien?”

“-No me hagas repetirlo, Kamito.”

Claire negó con la cabeza y afirmó con firmeza.

“Los caballeros no regresan ante una decisión tomada”.

“Mi decisión ya está hecha.”

“Yo también creo en ti, Kamito-kun.”

Ellis, Rinslet y Fianna todas asintieron respectivamente.

—Soy tu espada, tu deseo es mi orden.

—Kamito, nuestros destinos son como uno.

Tomadas en sus manos, las dos espadas respondieron.

“Lo tengo. Vamos-”

Con un gesto contundente, Kamito abrió la puerta de la sala del trono.

***

Una escalera gigante se presentó ante el grupo de Kamito.

Los tronos de la parte superior estaban rodeados por una luz deslumbrante e imposible de ver.

Kamito agarró la «Demon Slayer».

La liberación de todos los «Señores Elementales» no sería realista.

(-El objetivo es el «Señor Elemental de Fuego», Volcanicus.)

A pesar de estar en un estado de actividad actualmente suspendido, era en realidad el «Señor Elemental» que era el más dañado por la oscuridad.

En caso de que su locura estallara de nuevo, Volcanicus muy probablemente demandaría por Claire como un sacrificio de nuevo.

Liderados por Kamito, el «Equipo Scarlet» subió el gran escalera paso a paso.

Espadas invisibles se ocultaron en sus corazones.

A mitad de camino a lo largo de las escaleras del altar, el grupo de Kamito se arrodilló.

—Un muy excepcional blade dance el de todos ustedes.

Las voces de los «Señores Elementales» se escucharon por encima.

—Nosotros les otorgaremos un milagro sobrenatural para recompensar sus muy excelentes ofrendas.

— ¿Qué desean?

“Nosotros-”

Kamito lentamente levantó la vista.

Luego repitió el mismo «Deseo» de hace tres años.

“-Deseamos la muerte de los «Señores Elementales».”

En ese instante…

La oscuridad surgió a partir de la luz brillante en los tronos.

A diferencia de la reconfortante oscuridad de la noche-

Esta era una oscuridad sobrenatural que no se suponía que deba existir en este mundo. “¡Ese es el «Deseo» de los señores elementales-!”

Un gemido aterrorizado de Claire escapó de su garganta.

Una gran cantidad de oscuridad fluyó hacia fuera de los tronos, sumergiendo lentamente las escaleras como sangre fluyendo.

“¡-Ha comenzado. El asesinato de los «Señores Elementales»!”

Gritando al mismo tiempo, Kamito formó sus Elemental Waffen en sus manos y subió la gran escalera a la vez.

Durante los pocos segundos del milagro de los «Señores Elementales» debían corregir la paradoja de sus propias muertes…

Tenían que aprovechar esta oportunidad para ponerle fin a todo-!

“¡Sal, bestia de los colmillos de hielo -«Fenrir»!”

Detrás de él, Rinslet convocó a Fenrir.

El gigante lobo blanco saltó usando la fuerza tenaz de sus patas, alcanzando el lado de Kamito.

¡ROOAAR!

Fenrir aulló. De par en par sus fauces abiertas liberaron hielo y nieve.

No. Lo que salió no era más como una tormenta de nieve.

“¡«Señores elementales»! ¡Si sus mentes aún permanecen, escuchen mi voz-!” La tormenta de nieve soplaba y dispersaba ese cabello, de color del agua brillante Apareciendo de la boca de Fenrir, Iseria Seaward gritó. “¡Hazlo ahora… Mientras yo… Convoco su conciencia…!”

La oscuridad que se vertía al exterior se detuvo por un instante.

¿Fue porque la voz de Iseria llegó a la franja de la racionalidad que quedaba en los «Señores Elementales»-?

“¡Ohhhhhhhhh!”

La «Demon Slayer» y la «Espada Vorpal».

Blandiendo las dos espadas de la luz y la oscuridad, Kamito dio un salto.

Los tronos estaban cubiertos por la horrenda oscuridad de otro mundo.

Una llama ardiente estaba allí. Kamito definitivamente la vio.

Barriendo la oscuridad creciente, corrió en un suspiro.

“Despierte, «Señor Elemental de Fuego».”

Con un brillo blanco-plateado, la «Demon Slayer» cortó la oscuridad que ocupaba el trono.

La hoja de la espada sagrada, atravesó el fuego que ardía en la oscuridad--Oh niño de la oscuridad-

“¿¡…!?”

Justo en ese momento, la voz vino.

Tentando a Kamito a despertar como el «Rey Demonio», su voz.

(¿¡…Cómo puede esto… ser posible…!?)

Kamito se quedó estupefacto.

“¡…!”

En contra de su voluntad, su cuerpo se congeló en su postura con la «Demon Slayer» todavía extendida.

Incapaz de moverse. Era como si las palabras que sonaban en su cabeza lo estuvieran atando.

La hoja blanca-plateada para liberar al «Señor Elemental» aún no había alcanzado su objetivo.

El tiempo se detuvo.

-Oh «Rey Demonio»… Ve y libera la verdadera oscuridad-“¡… A-Ah, ahhhhhhhhhhhh!”

En el siguiente instante, la conciencia del Kamito fue tragada por la oscuridad de otro mundo.

***

(¿…Este lugar… es…?)

Kamito se hundía de forma continua en la oscuridad sin fondo.

Una oscuridad eterna y sin fronteras.

Incluso el brillo de la «Demon Slayer» había desaparecido al instante.

(¿…Esto es dentro de mi conciencia? O quizás-)

Su cuerpo estaba cayendo sin fin. Imposible de resistirse.

(A dónde voy-)

Incluso ese tipo de pregunta fue desapareciendo como el humo.

Su mente estaba siendo corroída. Incluso su pensamiento estaba a punto de abandonarlo.

Antes de eso, en las profundidades de la oscuridad-

Kamito vio eso.

(Qué… Eso es…)

Todo su cuerpo temblaba de miedo.

Dentro de esta oscuridad que no se suponía que debía existir en este mundo, algo estaba intranquilo.

No era espíritu ni humano.

Eran incontables-

(¿…Ángeles?)

Ese nombre apareció de repente en su mente.

Una existencia de cuentos de hadas que no existían en este mundo.

Eso era-

Un ejército de miles, decenas de miles, que se preparaban para salir de la oscuridad. (Esa es la verdadera forma de la desesperación que Rubia vio…) La peor predicción cruzó por su mente.

(…Si esas cosas entraran a «Astral Zero»-)

El mundo llegaría a su fin.

En ese momento-

“-No te preocupes, Kamito.”

Oyó una voz.

(¿…?)

Esta no era la voz de la contaminada «Ren Ashdoll».

La dueña de la voz estaba sonriendo delante de los ojos de Kamito.

“¿Res… tia…?”

La espada demoniaca que estaba agarrando con la mano izquierda y que desapareció sin que él se diera cuenta.

Extendió ambos brazos-

Y abrazó a Kamito que había estado cayendo sin parar.

***

La oscuridad infinita que devoraba a Kamito desapareció.

Cuando recobró los sentidos-

Kamito se encontró de pie ante el trono de los «Señores Elementales».

Ante sus ojos estaba el rostro de Restia, sonriendo como en un sueño.

Sus encantadores labios temblaban ligeramente.

“Señorita Espada Sagrada. Pido disculpas. Por dejarte esta misión.”

“¡…!”

La «Demon Slayer» estaba emitiendo un brillo deslumbrante.

Su hoja fría-

Había atravesado el pecho de Restia directamente.

“¿…Restia?”

Kamito miró con los ojos abiertos y murmuró con voz ronca.

“… POR… QUÉ…”

“Es muy sencillo…, Kamito…”

Respirando muy débilmente, Restia negó con la cabeza.

“Una vez que la voluntad de «Ren Ashdoll» es destruida, ya no te convertirás en el «Rey Demonio». Por lo tanto, yo esperaba ser matada al instante en que tu voluntad me controlara.”

“Por qué… lo hiciste…”

Desde el principio-

Desde el principio, ella ya había decidido hacer esto, ¿verdad?

Por sus propios esfuerzos por sí solos. Enviando personalmente la voluntad de «Ren Ashdoll» hasta la tumba.

Con los dedos temblando, ella lanzó la empuñadura de la espada apuñalada dentro de su cuerpo.

“-Un último adiós, Kamito.”

Las lágrimas corrían por sus mejillas.

“Señorita Espada Sagrada, por favor protege… bien a Kamito…”

“Restia… ¡RESTIAAAAAAAA!”

Al mismo tiempo en que la «Demon Slayer» perdió su brillo…

La figura de la chica espíritu de oscuridad desapareció.

-FIN DEL VOLUMEN 11-