Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 11

Capítulo 9: La Última Noche

El cielo estaba brillante. La comitiva de Kamito regresó al castillo de «Ragna Ys».

Confiando a Iseria con Rinslet por ahora, Kamito regresó a su habitación.

Había una montaña de problemas que no tuvo más remedio que pensar.

Aun así, Kamito no pudo resistir la embestida de la somnolencia y se echó sobre la cama, poniéndose al día con el sueño perdido.

Realmente había pasado bastante tiempo desde la última vez que fue capaz de dormir tan profundamente.

…Varias horas más tarde, Kamito finalmente despertó de su siesta.

“Ah, mmm…”

“Huah…”

Cada vez que daba vueltas, podía escuchar sonidos lindos débilmente.

(Hmm, ¿un sueño…?)

Todavía medio dormido, Kamito ladeó la cabeza.

Parecía haber sensaciones suaves en ambos de sus brazos.

(¿Qué es esto? Se siente tan cómodo…)

Kamito distraídamente agarró lo que estaba delante de él.

Boing Boing. Boing Boing.

“… Mmm, Kami…to, eso es…”

“… Detén… eso, no…”

Tan pronto como se movió, una respiración débil pasó sobre su cuello.

(… Espera, ¿¡esto no es un sueño!?)

Kamito de repente abrió los ojos-

“Dios mío, ¿ya estás despierto?”

Restia lo miraba con picardía.

“¡R-Restia!”

El rostro de Kamito al instante se sintió caliente.

Estaba vestida sólo con ropa interior, acompañando a Kamito en la cama.

“¿¡Q-Qu, q-qué estás haciendo!?”

“Yo soy tu espíritu contratado, Kamito. ¿Compartir la misma cama no es natural?” Murmurando, apretó su seno modesto pero hinchado en su contra.

Su cabello negro cubría su rostro. El broche del hombro de su sostén se deshizo, viéndose especialmente seductora.

“Bueno, vamos a seguir durmiendo.”

“H-Hey…”

Ella entrelazó su delgado brazo alrededor del brazo de Kamito.

En este momento, el otro brazo estaba siendo fuertemente agarrado.

“¿…Eh?”

“Kamito, por favor deja a la espíritu de oscuridad.”

Palabras frías como el acero.

Cabello blanco-plateado brillante. Piel blanca como la nieve del color de la leche fresca.

Por otro lado, la espíritu espada con solo calcetines a la rodilla también lo acompañaba en la cama.

“¡E-Est…!”

“Kamito es mi amo.”

Est abrazó su brazo con fuerza. Su pequeño y lindo seno era presionado contra su brazo. “¡…Wah!”

“Santo cielo, señorita Espada Sagrada, usted debe ser la que deje a Kamito, ¿verdad?” Esta vez, Restia trajo a Kamito a su lado, apretando su brazo entre su escote. “¡…E-Espera!”

“Fufu, Kamito, tu cuerpo está rígido.”

“Kamito, conmigo como tu espada, ¿no es eso suficiente ya?”

Susurros dulces fueron entregados a sus oídos de ambos lados. Sus respiraciones exhaladas pasaban a través de su cuello.

(¡E-Esto es un sándwich de espíritus…!)

Esta frase surgió en su mente.

“Por aquí, Kamito.”

“Kamito, no caigas en la tentación.”

Boing. Boing Boing.

167

“¡N-No, esto no puede continuar…!”

De repente.

“Kamito, la celebración está a punto de empezar-”

La puerta de la habitación se abrió.

“¡…!”

Mientras apareciendo-

Eran Claire y las jóvenes, que se conmocionaron al momento en que abrieron la puerta.

“T-Tú, t-tú, ¿qué estás haciendo, Kamito?”

“Para hacer algo tan descarado en el castillo del «Instituto del Ritual Divino», que atrevido…”

“¡L-Los espíritus son tan astutos!”

“… Kamito-kun, no puedo tolerar esto”.

¡Estruendo estruendo estruendo estruendo estruendo estruendo estruendo estruendo …!

“N-No, esto es-

Abrazado por dos espíritus casi desnudos en la cama, Kamito trató de explicarse en vano.

***

Noche. Después de haberse puesto un traje, Kamito asistió a la fiesta de celebración de la victoria que tuvo lugar en el Gran Santuario.

Reunidos en el amplio salón estaban nobles de diferentes países, con entusiasmo conversando acerca del «Blade Dance».

Después del incidente anterior, Est había regresado a dormir en su forma de espada.

Kamito la apoyó contra una pared.

Después de todo, llevar una espada no era apropiado para un banquete. Pero si él la ponía allí, por lo menos que podía perderla de vista a lo largo de su tiempo allí.

Restia había desaparecido quién sabe a dónde. Oh, bueno, teniendo en cuenta lo intencional que siempre se comportaba, probablemente, regresaría pronto otra vez.

“El hombre elementalista del Equipo Scarlet…” “Al parecer derrotó a Ren Ashbell-sama-” “¿A pesar de que da poco de miedo, debemos ir saludarlo?” “D-De ninguna manera, una vez que te acercas, te esclavizará con sus cualidades demoníacas.” “Pero es un poco guapo…”

Las jóvenes de la nobleza charlaban sin parar mientras observaban a Kamito desde lejos.

Los miembros del equipo ganador eran los invitados de honor. Ser el centro de atención no podía ser evitado-

“V-Vamos, Kamito.”

“Oh está bien…”

Del brazo de Kamito, Claire pasó por las multitudes.

Su pecho ligeramente abultado estaba tocando su brazo, haciendo que su corazón se acelerara.

El vestido formal de Claire era sencillo pero muy hermoso.

Era un vestido sencillo con una rosa decorando el corpiño. El blanco puro de su color base ofrecía un excelente contraste entre el cabello carmesí de Claire y sus ojos rubíes.

(… Maldición ella es realmente linda cuando ella no está hablando.)

Kamito se sonrojó, volteando la mirada de la línea del cuello audazmente abierto.

Los participantes del «Blade Dance» se habían reunido el centro del gran salón.

Había algunas caras conocidas, pero en ninguna parte pudo encontrar al «Equipo Inferno».

Kamito estaba pensando que podía ser capaz de ver a Muir-

“Oh, ¿no es ese Kamito?”

En este momento, saludando sin reserva era-

“Ah, hola, Shao-”

Era Shao Fu de las «Cuatro Dioses». A pesar de estar en equipos contrarios, sus relaciones eran suficientes para conversar sin reservas.

Shao llevaba un traje tradicional del Imperio Quina con un atrevido diseño de alta hendidura.

“¿Todavía estás usando ropa de combate para una celebración?”

“Esto no ropa de comabte. Es un traje formal.”

Shao sonrió irónicamente y se encogió de hombros.

“L-Lo siento…”

“Oh, bueno, se parecen a lo que me pongo en el blade dance, por lo que calificarlo de ropa de combate no está mal. Sin embargo, la tela es un poco diferente.”

Dicho esto, Shao levantó el dobladillo de su falda para mostrar su pierna extendida.

“¡… L-Las chicas deberían prestar más atención en esa zona!”

Kamito frenéticamente le recordó.

“Las chicas… Pensar que es la primera vez que alguien se refirie a mí de esa manera.”

Shao murmuró con la cara toda roja en respuesta.

De repente-

“¡Muu, Shao! ¡Tráeme un poco de ese pastel de allí!”

Desde la distancia, se oyó la voz de una princesa imperial un poco familiar.

“Oh, Linfa-sama me está llamando. Así que, adiós, Kamito. Debes de visitar el Imperio Quina en el futuro, ven a visitar las residencias de las familias de las cuatro generales. Serás sin duda bienvenido.”

“Sí.”

Los dos se dieron la mano para decir adiós.

“¡… ~!”

Por alguna razón, Claire estaba mirando con tristeza a su lado.

“…Dios, ¿no eres muy cercano a esa Shao Fu?”

“Bueno, después de todo, ella es un buen oponente, digna de respeto.”

“…Hmph.”

Claire hizo un puchero con desagrado.

“¿Eso es realmente todo? Kazehaya Kamito-”

“¿…Eh?”

Kamito volteó la cabeza hacia la voz:

Sólo para encontrar a una dama noble en un vestido precioso de pie detrás de él.

“¿¡E-Eres Leonora!?”

“Hmm, que grosero. ¿Este atuendo es realmente tan ridículo?”

“N-No, no eso…!”

Kamito frenéticamente negó con la cabeza.

“Es sólo que estoy acostumbrado al uniforme militar de las Caballeros Dragón. Uh, es un poco sorprendente…”

Si él realmente tenía que dar su opinión sincera, Leonora en un vestido era tan hermosa que no podía dejar de suspirar.

Un corpiño decorado con cintas. Un vestido violeta de una sola pieza revelaba sus hombros, acentuando completamente las curvas de su excelente figura sin reserva.

En ese momento-

Kamito de repente se dio cuenta de algo.

“…Oye, ¿no estás usando eso ahora?”

“E-Espera un segundo, ¿¡qué clase de pregunta es esa!?”

Claire estaba completamente estupefacta.

“… No, dada esta rara ocasión, me puse la ropa interior que tu escogiste.”

Leonora se sonrojó cuando ella respondió.

“¿La ropa interior que escogí… s-significa el traje de baño?”

Probablemente, ella quería decir el traje de baño que llevaba en el «Festival Elemental del Agua » antes de la ronda final.

Kamito recordó que era un traje de baño que se podía usar como ropa interior también-

… Inexplicablemente, tan pronto como se dio cuenta de que llevaba un traje de baño bajo el vestido, comenzó a imaginar todo tipo de cosas extrañas.

“¡P-Por qué estás mirando mi cuerpo! ¡Pervertido, eres un pervertido!”

Leonora miró a Kamito como si fuera un insecto.

“T-Tú, t-tú, incluso Leonora también…”

Estruendo estruendo estruendo estruendo … el pelo de Claire se levantó como llamas.

“¡Espera, no saltes a conclusiones! Sólo quería darte las gracias.”

“¿…Gracias?”

Leonora inclinó la cabeza con sorpresa.

“En la «Catedral Perdida», ayudaste a Ellis y Rinslet.”

“Eso sólo era para devolverte el favor. No hay necesidad de agradecer.”

“Aun así, fuiste una gran ayuda. Gracias.”

Kamito extendió su mano

Entonces Leonora la sacudió sin dudarlo.

Su expresión se relajó.

“…Qué divertido.”

“¿Hmm?”

“Antes de encontrarme contigo, nunca podría haber imaginado que iba a darle la mano a un hombre.”

“Y-Ya veo…”

Su mirada directa hizo que su ritmo cardíaco se eleve.

“Espero con interés un futuro blade dance contigo otra vez.”

Dicho esto, Leonora giró en sus talones y se fue.

Al ver su figura majestuosa y galante, Kamito no podía dejar de mirar hipnotizado-

“¿En serio, qué estás embobado? Vamos.”

Entonces, Claire decisivamente lo arrastró lejos.

***

Las ofrendas a los «Señores Elementales» fueron consagradas en las profundidades del gran salón. Un altar se estableció allí con las cinco «Reinas» que realizaban una danza solemne actualmente.

“Una oportunidad de ver el espectáculo de danza de las «Reinas» es muy valiosa. Kamito, debes prestar atención y ver con cuidado.”

“Sí. Reicha es muy bonita también.”

Bailando en frente de las llamas, Reicha parecía completamente diferente de cuando ella estaba hablando con el grupo de Kamito.

Kamito exclamó en serio mientras observaba.

“¡… ~P-Pensar que las comerías con la mirada a las Reinas con unos ojos tan indecentes, que pervertido!”

“¡F-Fuiste la que me pidió que vea!”

“¡No te pedí que veas con obsesión!”

Terminó haciendo que Claire se ponga de mal humor y haga un puchero.

En ese momento.

“¡Onii-sama!”

Alguien abrazó a Kamito desde atrás.

“M-Mireille…”

Abrazándolo estaba Mireille en un lindo vestido de una sola pieza.

La tercera hija de la familia Laurenfrost miraba a Kamito con profundos ojos azules preciosos.

“Onii-sama, trajiste de vuelta a «Fenrir» de Onee-sama, ¿verdad? ¡Gracias!” Ella lo abrazó con fuerza de nuevo.

“No, salvar a «Fenrir» fue gracias a la resolución de Rinslet.” Kamito sonrió irónicamente y ligeramente acarició su cabello rubio. Acariciar, acariciar.

“… Hua, Onii-sama es realmente…”

Mireille cerró parcialmente sus ojos con comodidad.

“O-Ooh~…”

La voz disgustada de Claire se podía oír desde su lado.

Después-

“En serio, Mireille, porque corriste por aquí.”

Rinslet se apresuró en su vestido formal.

“Rinslet… Que hermosa.”

Kamito no pudo evitar exclamar.

Rinslet llevaba un vestido azul con un diseño maduro exponiendo sus hombros.

Su deslumbrante cabello rubio brillaba como las estrellas brillantes en el cielo nocturno. “¿¡Q-Qué estás diciendo, Kamito-san!?”

Su rostro instantáneamente se tornó de un rojo intenso, Rinslet parecía que iba a emitir vapor.

“Fufu, esto es genial, Onee-sama. Y aquí estaba Onee-sama, hablando de Onii-sama sin parar desde que regresó a la habitación esta mañana-¡Kyah!”

En ese momento, la maid Milla apareció sin previo aviso y tiró de Mireille lejos de Kamito.

“Que molesta, Milla es tan dura. Pero tienes que saber que cuando Milla tiende la cama de Onii-sama, ella huele las sábanas… Mugugu.”

“Mireille, necesita una educación estricta.”

“Mugugu… Muu~”

La ahogada Mireille fue arrastrada a un lugar desconocido. “… Milla se ha convertido en toda una maid competente.” Kamito asintió por un tiempo, muy impresionado. “Dime, ¿dónde está Carol?”

Entonces se dio cuenta de que la maid de Rinslet faltaba.

“Carol se quedó en la sala. Junto con Iseria-sama.”

“… ¿En serio? Si dices que esta con Carol, siento que tengo que preocuparme.” Kamito comenzó a preocuparse y a murmurar. “… Ahhh, libre al fin.”

En este momento, Fianna se acercó con una expresión demacrada. “Gracias por su trabajo duro. Lo siento por darte esta tarea tan molesta.”

“No te preocupes por ello. Sólo me recompensarás con galletas ‘La Parfait’.”

“… Sí, lo tengo.”

Claire se encogió de hombros.

Fianna había ido hacia donde los nobles y personalidades del Imperio Ordesia se reunieron con el fin de darles la bienvenida, como representante del equipo.

Esto se suponía que era el trabajo de la líder del equipo, Claire, pero había muchos nobles que la veían con desdén como la hermana de la «Reina de la Calamidad». Por lo tanto, Fianna de la familia imperial fue en su lugar.

La encargada de esta responsabilidad, Fianna estaba vestida con un vestido extravagante cosido con hilos de plata.

Ella tenía una pulsera de plata en su delgado brazo. En su cabeza era una tiara con gemas.

“La forma en que te es realmente como la de una verdadera princesa.”

“Yo soy una verdadera princesa en principio. Dime, ¿estabas tratando de alabarme?”

Al pulsar con el dedo a su mejilla, la princesa inclinó la cabeza.

“… Hmm, K-Kamito, estás aquí.”

Esta vez, Ellis apareció.

Llevaba un vestido negro que audazmente exponía su espalda.

Combinado con su cabello suelto, ella emanaba incluso aires más maduros de los habituales.

Tan pronto como se encontró con la mirada de Kamito, Ellis movió sus ojos lejos de la vergüenza.

… De alguna manera, la forma en que actuaba sentía un poco extraña.

“Ellis, ¿qué te pasa?”

Ella bajó la mirada y jugueteó con sus dedos torpemente.

(El abuelo de Ellis… es el Duque Fahrengart, ¿no?)

Él era el jefe de la familia Fahrengart además de ser el asesor militar más importante del Imperio.

Un exaltado noble que mandaba a los Caballeros del Imperio Ordesia.

“¿Podría ser que el Duque Fahrengart no está satisfecho con la victoria?”

“U-Um, no, pero…”

Ellis tartamudeó.

“Al ver tu rendimiento en el «Blade Dance», el abuelo te ve como, eh, un p-pretendiente para un contrato matrimonial…”

Su voz se hizo más y más pequeña… La última parte fue prácticamente inaudible. “¿…Hmm?”

Kamito animó a sus oídos por la sorpresa.

-En ese momento.

“¿¡…!?”

Sintió un dolor agudo en el sello en su mano izquierda.

“Kamito, ¿qué pasa?”

“… Lo siento, me voy fuera por un poco de aire.”

“¿Eh? E-Espera…”

“¡Voy a volver pronto!”

Separándose de Claire y las chicas, Kamito se deslizó entre la multitud y desapareció en un abrir y cerrar de ojos.

***

Como si fuera guiado por el dolor en su mano izquierda

Kamito se acercó a la terraza exterior del Gran Santuario.

El aire frío de la noche rozó su rostro suavemente.

No había nadie en la terraza.

(… Una barrera para alejar a la gente eh.)

Guiado por su mano izquierda, fue directamente a la terraza.

De repente, en la barandilla-

Un ángel con alas negras en un vestido del color de la oscuridad descendió ligeramente. “Lo siento por llamarte en medio de la celebración, Kamito.”

“No, yo estaba pensando en tomar un poco de aire fresco en realidad.”

Kamito se apoyó en la barandilla.

“¿Está bien que te presentes en este tipo de lugar?”

Los «Sagrados Caballeros Espirituales» dirigidos por Luminaris estaban dentro del Gran Santuario. Desde que tenían como objetivo a Restia, aparecer aquí podría ser peligroso.

“No hay problema. El Santo Reino de Lugia no puede hacer su movimiento en un lugar densamente abarrotado como este.”

“Es verdad.”

“Además, si algo me pasa, tú me protegerás, Kamito.” Restia bajó de la barandilla y se acercó al rostro de Kamito. Entonces-

“Kamito, ¿has llegado a una conclusión?”

“…”

¿Qué conclusión? -Él no soltó esta pregunta.

“Muy pronto, vas a tener una audiencia.”

“…Lo sé.”

La respuesta ya estaba decidida.

Suponiendo que las palabras de Iseria Seaward sean ciertas-

La destrucción algún día llegaría al mundo a menos que los «Señores Elementales» sean liberados de esa oscuridad.

Sin embargo, era cierto que todavía no podía disipar su confusión.

(…Tengo miedo.)

Miedo de perder algo valioso de nuevo.

(… No soy tan fuerte como Rubia Elstein.)

Él no tenía la voluntad de renunciar a todo por el futuro del continente.

“… Es preocupante. ¿Será que el poder del «Rey Demonio» despertará de nuevo?”

El poder del «Rey Demonio» fue suprimido por la «Reina de la Oscuridad», Claire, por el momento.

Pero Rubia había dicho que el poder del «Rey Demonio» no se había desvanecido.

Tentado por la voz «Ren Ashdoll» de nuevo, Kamito podría terminar perdiendo su razón.

“-No te preocupes. Me tienes aquí.”

Restia puso su mano sobre la vacilante mano de Kamito.

“Kamito, no importa la decisión que tomes, me quedaré contigo, Kamito.”

Sus tristes ojos de color de la oscuridad miraron a Kamito.

“-Entonces, debes tomar una decisión de la que no te arrepentirás.”

“¡…!”

Besándolo suavemente en la mejilla, ella se fue.

“… Adiós.”

Dejando plumas negras bajo el cielo de la noche, la espíritu de oscuridad se fue volando.

“… Restia.”

La luna estaba oscurecida por las nubes.

-El momento de tomar una decisión se acercaba.

***

(… Una decisión de la que no me arrepienta, eh.) En el camino de vuelta desde la terraza-“Kamito… Oye, Kamito.” “¿Hmm?”

De pronto encontró su cuello agarrado por detrás.

“… Cielos, ¿dónde fuiste?”

Era Claire… Al parecer, ella vino a buscarlo.

“Lo siento…”

“Estabas hablando con la espíritu de oscuridad, ¿no?”

Dicho esto, ella miró hacia la terraza.

Como era de esperar de la hermana menor de una «Reina», sus sentidos eran muy agudos.

“Si, tienes razón.”

“…”

Después de admitirlo honestamente, Claire hizo un puchero ligeramente.

“Hey, Kamito-”

De repente, ella acercó su rostro.

“¿Q-Qué…?”

Recordando el beso de hace un momento, Kamito vaciló hasta cierto punto. “Yo no tengo una pareja. ¿Vamos a bailar?”

“Te ves muy linda cuando no hablas. Estoy seguro de que podrías encontrar un par de compañeros-”

“No hay nadie con quien quiera bailar, idiota. P-Pero… S-Si eres tú, supongo que está bien.”

Levantó la vista cuando ella murmuró.

“… Entonces estoy muy honrado.”

“E-Está bien, dirige el baile.”

Claire tomó las dos manos de Kamito y apoyó su menudo cuerpo cerca de él.

El corazón de Kamito latía sin control. Debido a su altura, captó una visión superior de su pecho ligeramente abultado debajo del vestido.

“Yo no conozco pasos de baile apropiados.”

Volteando la mirada, Kamito puso una mano en la cintura.

“Está bien, voy a dirigirlo entonces.”

“Bueno…”

Claire se hizo cargo de la tarea de dirigir el baile sin ninguna queja.

Como era de esperar de la hija de una familia noble. Sus pasos de baile eran bastante impecables.

A través del contacto con la piel, se transmitían sensaciones de calor corporal y la flexibilidad de un cuerpo femenino.

Kamito encontró difícil no sentirse consciente de ello.

En ese momento-

“Kamito, escúchame-”

Claire le susurró al oído.

“Sobre ese asunto… ya he tomado mi decisión.”

“¿…Es así?”

Kamito asintió levemente.

“Nee-sama intentó salvar el futuro del continente por su cuenta. Aunque su método estaba mal… quiero heredar la voluntad de Nee-sama.”

“… Si fallas, perderás tu vida.”

“Lo sé.”

Claire asintió con una expresión seria.

Se detuvieron en una esquina del gran salón.

“Pero ya está decidido.”

Ella le soltó la mano ligeramente y volteó la cabeza.

Por ahí –

Estaba el trío de Fianna, Ellis y Rinslet.

Todo el mundo asintió con una expresión de determinación.

“Todos…”

“-Vamos a liberar a los «Señores Elementales» y salvar el continente.”

Claire declaró sin vacilar.

(… Sí. Mis compañeros de equipo. Esta es la forma en que son.)

Kamito sonrió con ironía.

Serias, orgullosas, magníficas, muy deslumbrantes.

Eran unas muy atractivas-chicas.

No podía dejar de sentirse orgulloso de haber luchado juntos a ellas en el «Blade Dance».

Frente a ellas, Kamito-

“Sí.”

Él hizo una leve inclinación de cabeza.

Tomó -su decisión.