Slayers (NL)

Volumen 10

Capítulo 2: Aunque No Quiero Actuar Secretamente…

Parte 1

-Bienvenida a mi castillo, señorita Lina Inverse. Te estaba esperando. –Dijo el hombre pelirrojo, haciendo que Gourry y yo reaccionásemos por fin.

-Por favor, entrad y sentaos. –El joven hombre se levantó de su asiento y nos invitó a sentarnos con un educado gesto.

-Esto… muchas gracias por invitarnos. –Dije yo mientras entrábamos en la estancia, un poco avergonzada.

-No hay de qué. –Respondió el hombre-. Es un gran honor para mi conocer a la famosa hechicera, la señorita Lina Inverse.

-… ¿Famosa? –Susurré mientras Gourry y yo nos sentábamos.

“Me puedo imaginar los horribles rumores que el señor feudal en funciones habrá oído sobre mí…”

El joven volvió a sentarse después de nosotros, y procedió a presentarse.

-Por favor permitidme que me presente. Yo soy Lavas Neksaria Langmayer, y soy el señor feudal en funciones del castillo de Welgis. Lord Krain, mi padre, está en cama, enfermo desde hace varias semanas, así que yo cargo con la responsabilidad del título ahora.

Mientras que él hablaba, Gourry no dejaba de mirar a los dos acompañantes del señor feudal en funciones. Supongo que Gourry estaba deseando saber la razón por la que Luke y Millina se encontraban allí.

Además, Luke parecía muy nervioso, y nos miraba a ambos. Pero su compañera, Millina, no mostraba ningún tipo de emoción en su cara, como siempre.

Me preguntaba si Lavas se estaba dando cuenta de que nos estábamos mirando los unos a los otros, pero continuaba hablando.

-Estoy interesado en la magia. No, para ser exactos, estoy interesado en las historias sobre la magia.

Por la puerta que había tras el señor feudal aparecieron varios camareros trayendo una sopa para cada uno, mientras Lavas seguía hablando.

-Colecciono historias de varios hechiceros y, hace poco, escuché un nombre en varias historias interesante. Tu nombre, señorita Lina Inverse.

-Pero todas esas historias deben ser horribles, ¿no? –Interrumpió Gourry.

“¡Oye, Gourry! ¿Por qué no te olvidas de esas historias igual que te olvidas de todo lo demás?”

Si no me encontrase en el comedor del señor feudal le habría dado una patada, pero el señor feudal tenía una sonrisa irónica en su cara.

-Ah… sí, hay muchos rumores horribles sobre la señorita Lina Inverse. Pero creo que cuanto mayores sean las hazañas que logre una persona, y cuanto más famosa sea, más fácilmente se convierte en la víctima de abusos por parte de los demás. Siempre pienso que un mal rumor sobre una persona, como mucho sólo la mitad puede ser verdad.

-Espero que no sea un problema para ti, pero he reunido varias historias sobre la famosa Lina Inverse. He oído historias sobre cómo estuviste envuelta en la lucha de poder en la Asociación de Hechiceros de Atlas y en la familia real del reino de Saillune. Oí que destruiste a un culto demoníaco en Kalmart, y que acabaste con Zuuma, el llamado “asesino de asesinos”. También escuché que tuviste relación con la destrucción de la capital del reino de Dills y en la caída de Sairaag. No sé cómo de certeras serán esas historias, pero no hay duda de que eres una de las mejores hechiceras.

“Mi… madre…”

En mi cabeza admiraba a ese hombre por haberme investigado con tanta precisión, mientras él continuaba hablando.

-Aún así, sé que un rumor es un rumor. Por lo que estoy deseando oír esas historias de tus propios labios mientras cenamos. Oh, siento estar hablando sin parar. Por favor toma la sopa antes de que se enfríe.- Dijo mientras cogía su cuchara.

***

-Estoy lleno.

Dijo Gourry con voz satisfecha. Estábamos de camino al hostal tras la cena con el señor feudal en funciones, en su castillo.

-… Me sorprende que comieses tanto. –Dije.

-¡Bueno, la mesa estaba llena de comida deliciosa! Así que la disfruté a consciencia. Pero tú no comiste apenas. ¿Te pasaba algo? ¿Te comiste las raciones de tres o cuatro personas en el hostal para calmar tu estómago antes de que fuésemos al castillo? Y no me dijiste nada, si es que no puedes soportar el hambre.

Suspiré profundamente y dije.

-Me has entendido mal. No he querido decir que me haya sorprendido la cantidad que has comido, pero… Ah, ya veo. Te has olvidado de que Lavas, el señor feudal en funciones, puede ser nuestro enemigo, ¿verdad?

-No lo he olvidado. Pero no nos ha hecho nada. Suspiré de nuevo.

-Bueno, me preocupaba que el señor feudal hubiera ordenado que envenenasen nuestra comida.

-¡Ostras!

Gritó Gourry antes de detenerse. Estaba muy sorprendido y me di cuenta de que era la primera vez que sopesaba la posibilidad de que le pudieran envenenar.

-¿Quieres decir que la comida que comí en el castillo estaba envenenada? –Dijo Gourry nervioso.

-No te preocupes, sólo es una posibilidad. Sabes que has comido un montón y estás perfectamente, así que me doy cuenta de que no estaban envenenados, supongo.

-¿Supones? Pero si lo sospechabas antes de que fuésemos al castillo, ¿por qué no me lo dijiste antes de la cena?

-¡¿Cómo iba a hacerlo?! ¡No hay pruebas de que el señor feudal esté en nuestra contra! ¿Cómo iba a decirte ‘Gourry, ten cuidado con la comida, podría estar envenenada’ sentados en la mesa del señor feudal?

Puede que pienses que hubiera sido mejor advertirle antes de ir al castillo… Lo admito, se me olvidó.

-Yo puedo saber si una comida está envenenada o no, saboreándola lentamente y con cuidado. Pero me es imposible si estoy comiendo con prisas.

-Ah, ya veo. Por eso sólo comiste un poquito.

-Sí, exactamente.

-Pero, entonces, ¿conoces el sabor de los venenos?

-Sí, eso es. Mi hermana mayor me lo enseñó con crueldad. Gourry se quedó en silencio ante mi respuesta, y entonces dijo.

-Bueno… me lo he estado preguntando desde hace tiempo, ¿cómo es tu hermana mayor?

-¡Por favor! ¡No me preguntes sobre ella!

-Y… ya veo. No te lo preguntaré más. –Dijo Gourry, que podía ver el miedo en mis ojos, antes de cerrar la boca sobre el tema.

Comencé a hablar sobre la invitación para cambiar de tema.

-De todos modos, el motivo de la invitación de esta noche es un misterio.

-Antes de que fuésemos al castillo hablamos sobre que el señor feudal en funciones podría ser nuestro enemigo, pero cuando nos reunimos con él, sólo quería escuchar tus heroicas aventuras.

-Tienes razón. Es posible que el señor feudal haya oído de mí por sus guardaespaldas, Luke y Millina. De todos modos, tengo dudas sobre si esos hombres de negro y el señor feudal estén relacionados. Una noche luchamos contra los hombres de negro, y al día siguiente el señor feudal nos invita al castillo. ¿Son coincidencias? No lo creo.

-Ya entiendo. Y hablando de Luke y Millina, me sorprendió verlos como guardaespaldas del señor feudal. Oye, Lina, ¿podemos suponer que el señor feudal no está del lado de esos hombres de negro porque ha contratado a Luke y Millina?

-… Hmmmm

Sopesé la cuestión de Gourry.

“En el incidente en Bezerd, Luke y Millina lucharon contra los hombres de negro con nosotros. Nuestro equipo y los hombres de negro peleaban para conseguir una espada mágica.

Ahora no hay razón para que Luke y Millina y los hombres de negro luchen entre ellos. Pero no es natural que un grupo contrate a alguien con el que acaba de pelear.”

-Da igual. Antes de nada tenemos que resolver el problema de la persona que nos está siguiendo. –Dije.

-Ya veo.

Gourry y yo nos miramos mientras caminábamos. Me había dado cuenta desde que dejamos el castillo de que una persona nos estaba siguiendo por la ciudad. Si la persona fuera amigo nuestro, nos hubiera dicho algo antes, pero esta persona había permanecido en silencio. Lo que significaba que era nuestro enemigo.

-¿Empezamos ya?

-Bueno… no quiero llevarle hasta nuestro hostal. –Respondí a Gourry antes de detenernos. No había ninguna casa ni tabernas. Era algo más tarde del anochecer, y la calle estaba vacía. Sólo la noche y el silencio llenaban el lugar.

Al ver que nos parábamos, el que nos seguía se detuvo por un momento, y entonces comenzó a andar hacia nosotros. Entonces…

Sentí un aire asesino al mismo tiempo que vi una luz en la oscuridad.

¡La luz se convirtió en una lanza de poder mágico que se dirigió directamente hacia nosotros!

Pero la lanza venía desde lejos y fue fácil para Gourry y para mí esquivarla, saltando cada uno hacia un lado.

– ¡¿…?!

De repente volví a sentir una presencia asesina junto a mí. Cogí la empuñadura de mi espada corta en mi cintura. ¡Ante mis ojos surgió una sombra negra de entre la oscuridad!

“… ¡No puede ser!”

¡CLANG!

Antes de que pudiera atacar con mi espada la sombra me atacó con la suya, y la empuñadura de mi espada corta apenas pudo detener el golpe.

“… ¡Guau, eso ha estado cerca!”

Tuve suerte de no recibir ningún golpe en mi estómago y de no perder los dedos.

Sabía que el que nos seguía había lanzado una lanza de poder mágico desde un lugar bastante alejado. ¡Era imposible que el mismo nombre se hubiese acercado a mi tan rápidamente!

“Entonces, ¿tenemos dos enemigos como anoche?”

-¡Lina!

Gritó Gourry antes de correr a interponerse entre mi atacante, un hombre de negro, y yo, sosteniendo su espada con sus dos manos.

¡CLANG!

Gourry lanzó un fuerte golpe a nuestro enemigo, y la espada de éste, pintada de negro, detuvo el golpe de Gourry.

El hombre de negro lanzó un hechizo a Gourry sin cambiar su postura. “¡No puede ser! ¿Cuándo recitó el hechizo?”

El hechizo no podía fallar al haberse lanzado desde tan cerca. Pero Gourry lo esquivó torciendo su cuerpo y su cintura, usando después ese movimiento para lanzar otro golpe.

Esta vez el hombre de negro no pudo pararlo, pero lo esquivó saltando hacia atrás. Mantenía cierta distancia con Gourry y, de repente, nos dio la espalda y se puso a

correr.

-¡Está huyendo! –Gritó Gourry.

-¡Qué va! – Grité mientras me puse a perseguir a nuestro enemigo-. ¡Quiere que lo persigamos, así que vamos tras él!

-¿Por qué tenemos que perseguirle? –Se quejó Gourry corriendo a mi lado.

-¿Qué por qué? Nos está llevando hacia una trampa, ¡así que nos libraremos de ella y descubriremos algunas pistas!

-¡Ah, vale!

Corrimos de noche por las calles, persiguiendo a la oscura sombra.

“… Pero estamos persiguiendo sólo a un hombre, yo pensaba que había dos.

¿Dónde estará el otro? ¿Habrá sido mi imaginación? ¿O será parte de la trampa? Cuando cojamos al tipo al que perseguimos, sabremos la respuesta.”

Al girar una esquina el hombre llegó a la puerta de un edificio, y entró en él.

-… Vaya, ¿esto es…?

Gourry y yo nos detuvimos al llegar a la pared. Era una de esas instalaciones militares secretas.

El edificio parecía una biblioteca o un museo, pero tenía muchos soldados protegiéndolo.

Pero…

En ese momento no había ni un guardia y la puerta estaba abierta.

-… Oye, Lina… – Dijo Gourry.

Me giré para mirar al edificio. Vi al hombre de negro de pie junto a la entrada del edificio, y mirándonos.

-Ya veo… quiere que entremos.- Dije.

-Y vamos a hacerlo, ¿verdad?

-¡Pues claro! –Dije, guiñando un ojo a Gourry.

Ambos comenzamos a correr hacia el hombre de negro, que esperó hasta ese momento para meterse dentro y perderse en la oscuridad.

-… Oye, ¡nos está retando! –Dijo Gourry.

-Sí, así es, porque tiene confianza en sus habilidades, en su trampa, o en ambas. Llegamos hasta la entrada sólo unos momentos después que nuestro enemigo.

Salía una tenue luz desde el interior por una pequeña apertura, pero no podía sentir si había alguien dentro.

“… Pero sé que el enemigo está ahí. Así que debe de estar oculto.”

Recité un hechizo y le di una señal a Gourry con mis ojos. Él sostenía su espada en las manos con cautela.

¡BANG!

Gourry pateó la puerta para abrirla.

… Pero…

-No hay nadie.

Dijo Gourry, tras mirar en el interior.

Siguiendo sus pasos, pude por fin ver el interior, había un enorme recibidor, redondo, y al otro lado había un pasillo, con escaleras hacia el piso de arriba a ambos lados del pasillo.

Había varios candelabros, que eran los que creaban la tenue luz de antes.

A primera vista no podíamos ver a nadie, pero… había dos estatuas de grifos en ambos lados de la entrada al pasillo.

Estaba claro que la estatua de la derecha estaba movida hacia un lado, y había un agujero en el suelo donde la estatua estaba antes. La tenue luz iluminaba unas escaleras en el agujero.

-Vaya, está claro que está invitándonos a seguirle. –Dijo Gourry.

-Entonces vayamos.   No   quiero   despreciar   una   invitación   tan   preparada.

–Respondí.

Decididos, cruzamos la entrada al pasillo, y bajamos por las escaleras. Al final de estas encontramos otro pasillo, simple y pintado de blanco.

Alguien había usado un hechizo Lighting en el techo,  porque el lugar estaba iluminado con una luz bastante artificial.

El pasillo era corto y había una puerta al final.

Estaba claro que había una trampa detrás de esa puerta, pero sabíamos que no podíamos echarnos atrás ahora.

Caminamos por el pasillo, y puse mi mano en el pomo. Abrí la puerta y un aire frío salió desde el otro lado y nos envolvió. Había una profunda oscuridad tras la puerta.

La luz del pasillo iluminó la habitación, y pudimos ver que había cosas en fila a ambos lados de la habitación.

-¡Lighting! –Lancé un hechizo para iluminar el lugar.

-… ¡Oh, Dios! –Grité sorprendida.

Había tubos de cristal en ambos lados de la habitación, tan altos que alcanzaban el techo. Había criaturas deformes en cada tubo, similares a humanos o a monstruos, flotando en un líquido.

-… Oye, Lina… ¿esas cosas son…? –Preguntó Gourry.

-Esto es un laboratorio de quimeras… un laboratorio muy grande.

Las filas de tubos de cristal eran tan largas que la luz mágica no podía mostrarnos el final. Probablemente había más de cien.

-Entonces, el hombre de negro nos estará esperando al final de la habitación, ¿verdad? –Dijo Gourry.

-Probablemente.

Inspeccioné los tubos de cristal. Estaban medio hundidos en las paredes, y no había sitio para que alguien se escondiese.

En mi mente comencé a suponer el plan del enemigo. Cuando nos hubiésemos acercado al centro del laboratorio, las quimeras saldrían de los tubos, tratando de atraparnos entre el hombre de negro y las quimeras. Así que comencé a pensar en un plan.

Recité un hechizo y caminamos por el estrecho espacio entre las filas de los tubos de cristal.

No tuvimos que ir muy lejos.

-… Volvemos a encontrarnos… La voz venía de detrás de nosotros.

– ¡¿…?!

Nos dimos la vuelta rápidamente, y vimos a una sombra oscura de pie junto a la puerta. La luz del pasillo marcaba su silueta.

Era el hombre de negro.

“… Pero no puedo decir si era exactamente el mismo enemigo al que seguimos hasta aquí. Está oculto en su ropa negra y no conocemos su cara.”

-¿Recuerdas mi voz? ¿Recuerdas mi nombre…? Zain. –Dijo el hombre de negro.

-¡¿Zain?!

Estaba tan sorprendida que olvidé que había formulado un hechizo.

-¿Quién es Zain?- Preguntó Gourry.

-¡Lo conocimos durante el incidente de Bezerd! ¡Era uno de esos hombres de negro! ¡Zain huyó durante la batalla final contra aquel monstruo! –Expliqué.

Zain era un luchador habilidoso, pero pudimos vencerle cuando luchamos contra él la última vez.

-Oí que te metiste en otro edificio la otra noche. Me sorprendí mucho cuando me dijeron que te habían visto. –Dijo Zain.

-… Entonces, ¿quieres decir que esta ciudad es vuestro cuartel general? –En el pasado ya había conseguido engañar a Zain para que soltara información, y decidí intentarlo de nuevo.

-No te diré ni sí ni no.

-Antes conseguía engañarte para que me dieras información, pero ahora no funciona. ¿Te has vuelto más listo?

-Di lo que quieras. –Respondió Zain como si no fuera con él el tema. “Este hombre no parece el mismo que aquella vez…”

-De todos modos, vais a morir aquí.

Tras esas palabras, pude sentir un aura asesina alrededor de Zain. Comencé a recitar un hechizo.

Al mismo tiempo…

¡PING! ¡PING! ¡PIIIING!

Los tubos de cristal entre Zain y nosotros, en ambos lados del laboratorio, comenzaron a crujir y a romperse de repente.

El “agua de la vida”, que nutría a las quimeras, comenzó a salir de las grietas, ocultando a Zain.

Al instante siguiente sentí un aura asesina a nuestra espalda.

– ¡¿…?!

Gourry blandió su espada y lanzó un golpe mientras se giraba.

¡CLANG!

¡El golpe de Gourry fue detenido por la espada de otro hombre de negro! “¡Sabía que tenía que haber otro!”

Pensé, hasta que oí la voz de Zain a mi espalda.

-… Bien hecho, como siempre.

Venía del enemigo que acababa de chocar su espada con la de Gourry. “… ¿Qué?”

Miré rápidamente hacia la puerta del laboratorio, y descubrí que no había nadie. “… ¡No puede ser!”

Aunque hubiese un pasaje secreto en este laboratorio, era imposible que alguien se pusiera a nuestra espalda tan rápidamente.

“¡Pero es momento de luchar, no de pensar!”

En ese momento las quimeras salieron de los tubos de cristal.

-¡Freeze Brid!

Lancé mi hechizo a la más cercana.

Este hechizo crea una esfera mágica que atrapa al objetivo en un bloque de hielo. Sabía que el espacio entre los tubos no era muy ancho, así que aunque sólo congelase a la quimera que iba delante, las otras no podrían seguir adelante hacia nosotros.

Pero…

Mi hechizo no pudo congelar al objetivo y se desvaneció.

“… ¿Es inútil? Ah, ¡ya entiendo! ¡La quimera tiene parte de demonio!” La quimera se acercó tanto que no tuve tiempo de lanzar un hechizo.

Saqué mi espada corta y la sostuve ante mí.

Para ser sincera, mi habilidad con la espada era excelente, pero no tenía ninguna fuerza contra un demonio. Si la quimera estaba compuesta de humano y demonio, era imposible para mí acabar con ella de un golpe.

Entonces…

¡GAOOOO!

¡La quimera me atacó con su brazo derecho!

Salté hacia delante y me agaché rápidamente, esperando que la quimera no supiese dónde me había metido.

¡ZANK!

¡Salté hacia arriba y atravesé su barbilla con mi espada corta!

¡GAOOOO!

La quimera gritó de dolor y forcejeó.

Rápidamente solté la empuñadura de mi espada, di un paso atrás y lancé el hechizo que estaba formulando mientras usaba la espada.

-¡Blast Ash!

¡BOOOM!

Una masa oscura envolvió a la quimera que forcejeaba y a otra detrás suyo, convirtiéndolas a ambas en una niebla oscura que desapareció poco después.

El hechizo era efectivo sólo contra seres vivos o las cosas con voluntad. Así que las cosas sin vida, como la pared de la habitación o mi espada corta, no sufrieron ningún daño.

Salté para coger la espada corta, que caía hacia el suelo, y me preparé para enfrentar a las demás quimeras.

El laboratorio estaba lleno de ellas, podía ver al menos una docena de ellas. Podría usar la misma técnica una y otra vez, pero era demasiado peligroso.

“Si pudiera usar un hechizo que las atravesara, como el Garv Flare, podría matarlas a todas con un golpe, pero el Garv Flare ya no se puede usar…”

Si Gourry no estuviera ocupado, podría dejar que se ocupase de las quimeras mientras yo me quedaba observando. No podía mirar hacia atrás para ver lo que hacía, pero podía oír el ruido de espadas chocando, lo que significaba que Gourry estaba peleando contra Zain.

Lo que significaba que me tocaba a mí encargarme de las quimeras.

“… Si un hechizo normal de congelación no funciona… ¡Sí, ya lo tengo!” Comencé a recitar otro hechizo mientras me enfrentaba a una cautelosa quimera.

¡GAOOOO!

La quimera de delante de decidió a atacar y corrió hacia mí, ¡pero ya era demasiado tarde!

-¡Dynast Breath!

Esta vez, mi hechizo atrapó completamente el cuerpo de la quimera en un bloque de hielo. El Dynast Breath crea hielo con el poder de la magia negra, que puede congelar a un mazoku. Incluso si la quimera tenía elementos demoníacos y tolerancia a la magia, este hechizo era efectivo.

Normalmente, el Dynast Breath congela al objetivo y entonces lo destruye en pedazos. Pero modifiqué el hechizo para que sólo congelase a la quimera. Cuando un hechicero comprende la teoría y composición de un hechizo correctamente, puede modificarlo como quiera.

“Vale. Esta quimera congelada impide que las otras se nos acerquen. ¡Así que voy a ayudar a Gourry a acabar con Zain!”

Comencé a recitar un hechizo y me giré.

¡CLANG! ¡CLANG! ¡CLANG!

Aún estaban luchando.

Gourry no le daba cuartel a Zain, pero Zain parecía estar a la par de Gourry.

“¡No puede ser! ¿Cómo puede un hombre volverse tan fuerte como Gourry en tan pocos meses? ¡Pero Zain cometió un error! ¡Ahora tiene que enfrentarse a Gourry y a mí a la vez!”

Me puse detrás de Gourry y lancé el hechizo que había recitado.

-¡Flare Arrow!

Mi hechizo creó una docena de flechas de fuego… ¡justo entre Zain y Gourry!