Oda Nobuna No Yobou (NL)

Volumen 3

Capitulo 5: Defensora de Kyo, Akechi Mitsuhide

Parte 2

La expresión de Mitsuhide cambió.

—“Escuela Houzouin”… Eso quiere decir que Danjo–dono viene del Templo Kofuku.

—Sí. Eso es correcto.

—Como seguidora del budismo, ¿Cómo pudiste destruir el Shogunato Ashikaga, quemar el gran Buda de Nara e incluso ahora obstruir el Tenka Fubu del clan Oda? ¡El budismo en tu corazón ha desaparecido!

—Lo que desapareció fue solo mi humanidad; desde que perdí a mi señor, Miyoshi Nagayoshi, he estado perdida en un estado de ensueño, no tengo idea de lo que está pasando.

• ¡¿No eres tú quien mató a Miyoshi Nagayoshi?! —Ante la pregunta de Mitsuhide, Hisahide respondió con una sonrisa seductora: —Eso es solo un rumor de gente perversa; en mi corazón, Nagayoshi–sama era como un hijo al que adoraba. Después de perderlo, mi pena me impulsó a quemar el gran Buda.

—Todo lo que he hecho ahora es solo una prueba para ver si Oda Nobuna–sama está calificada para ser mi nueva ama. Cuando una persona es acorralada, entonces se revela lo que realmente es… presenciaré tus verdaderas habilidades en un momento. Hehe…

—Yo creo en Nobuna–sama, por eso la sigo. ¡Por su sueño, incluso puedo apostar mi vida! ¡No hay manera de que alguien como tú, que ni siquiera puedes decir si estás soñando o no, pueda matarme!

—Hehe… No tiene sentido seguir peleando con palabras… Ven, empecemos la matanza. Permíteme ser tu guía y enviarte al mundo del caos.

En medio de la sangre, el fuego y los gritos de los soldados enfrentándose, Matsunaga Hisahide dio un paso adelante sin cambiar de expresión… y luego otro… acercándose hacia Mitsuhide.

Una línea de sudor bajó por la mejilla blanca de Mitsuhide.

Mirando a la mujer frente a ella, puede que no haya nadie mejor en términos de habilidades con la lanza.

—Contra la Escuela Houzouin, un arcabuz no tiene ninguna posibilidad. Permíteme utilizar mi espada en tu contra.

Mitsuhide tiró el arcabuz que yacía en sus manos.

A una distancia tan corta, los cañones o pistolas no tenían ningún sentido. Mientras tratara de recargar, la Jumonji Yari ya estaría profundamente enterrada en su garganta.

Mitsuhide sacó la espada larga en su cintura. La famosa espada, Akechi Koshirae. La obra del discípulo de Osafune Nagamitsu de Bizen, Koshirae.

Hisahide lamió sus labios con su larga lengua y dio otro paso hacia adelante… la distancia entre las dos se redujo aún más.

—Así que la espada finalmente salió de la vaina… Princesa distinguida y hermosa. Antes de embarcarte en tu viaje al inframundo, por favor declara tu nombre.

—Soy descendiente del clan Toki, Akechi Juubei Mitsuhide. Mi maestro de la espada es…

—Akechi, tan brillante como la luz y rebosante de inteligencia, qué buen nombre. Para ti, no hay nombre más apropiado; pero tu habilidad con la espada, ¿Qué tal es?

Hisahide se rio ligeramente y provocada por estas palabras, Mitsuhide se precipitó hacia ella con su espada baja.

—Aprendí mis habilidades con la espada de la Escuela Shinto Kashima, para no ser transmitida.

— ¡¿Ehh?!

Hisahide, quien había estado sujetando la Jumonji Yari en una postura agresiva, saltó hacia atrás por reflejo al oír eso.

Si no lo hubiera hecho, el corte de Mitsuhide sin duda hubiera dado en el blanco. Habría cortado las dos manos que sujetaban la lanza.

Si Mitsuhide no hubiera declarado su estilo honestamente, Hisahide habría perdido de inmediato.

—No hay ninguna duda, ese corte de ahora fue la habilidad final del estilo Shinto Kashima, “Ichi no Tachi”.

—Pensar que pudiste esquivar ese corte.

Sorprendida, Matsunaga Hisahide miró a su oponente seriamente por primera vez.

Dejando de lado su puntería, el estilo de espada que usaba podía igualarse con el Shogun demonio, Ashikaga Yoshiteru. Esta chica hermosa frente a ella…

Realmente era un genio milagroso, un regalo de los cielos para esta era Sengoku.

«Pensar que Oda Nobuna tenía a un guerrero tan hábil a su lado».

—El mundo es realmente muy grande… Nunca imaginé que me encontraría con una élite como tú. Con esto, las cosas serán mucho más interesantes.

Hisahide no pudo evitar sonreír al hablar.

—Hehe Ser capaz de luchar contra un héroe como tú, no puedo detener el deseo de matar en mi corazón… ¡Quiero ver qué tipo de expresión desesperada tendrás en el instante que veas por ti misma tus sueños destrozados!

• ¡Tonterías!

Un paso…

Un paso más…

Las dos estaban lo bastante cerca como para oír la respiración de la otra.

Los soldados de ambos ejércitos se olvidaron de la batalla temporalmente, ninguno se atrevió siquiera a respirar mientras observaban la confrontación entre la usuaria de lanza de estilo Houzouin y la valiente doncella guerrera.

El campo de batalla que estaba lleno de lamentos y gritos hace un momento se quedó en silencio en un instante.

Un paso…

Un paso más…

En esta batalla entre maestros, no había tal cosa como un punto muerto. El resultado del duelo se decidiría con el primer golpe.

La velocidad del golpe sería el factor decisivo.

La distancia entre ellas era tan corta que ya no había forma de esquivar. El perdedor…

Sin duda moriría.

Desde el punto de vista del sentido común, el “Ichi no Tachi” de Mitsuhide había sido visto por su oponente, así que se encontraba en una posición de desventaja; sin embargo, la razón por la que Ichi no Tachi es tan famosa se debe a su flexibilidad y adaptabilidad.

Nadie… ni siquiera Matsunaga Hisahide, podía ver completamente a través de la esencia de esta técnica final.

—…

—…

Ambas miraron a la otra fijamente y solo el sonido de su respiración resonó en la silenciosa oscuridad.

Y luego…

Las manos de ambas empezaron a actuar. En ese instante…

—Ah, sí, cierto. Hay algo que olvidé decirte…

Al igual que una polilla venenosa gigante batiendo sus alas tóxicas… Los labios carmesí de Hisahide comenzaron a moverse.

—Sugitani Zenjubou de los Koga tendió una emboscada en Omi para asesinar a Oda Nobuna. Como un asesino profesional, él nunca ha fallado. ¿Me pregunto si Nobuna–sama ya se encuentra en el infierno?

—… ¿Qué…Qué dices?

Extraño… parecía haber un aroma extraño alrededor… pero antes de que se diera cuenta…

Esas ominosas palabras atravesaron profundamente el corazón de Mitsuhide. La conciencia de Mitsuhide fue expulsada en un instante.

El propósito de su propia existencia fue destruido, destrozado en un solo instante.

« ¡¿Nobuna–sama, ella está…muerta?! Debido a que fue tras Sagara Yoshiharu…

¡¿Todo es…culpa mía?!».

Esforzándose para suprimir el impulso de gritar en voz alta, parecía que apenas estaba consciente.

Aunque fue solo un breve instante. Apareció una abertura en la postura de Mitsuhide.

Hisahide, quien observaba a Mitsuhide muy concentrada, no perdió esta gran oportunidad.

—… Hehe. Parece que estás bajo mi hechizo de aroma. En ese instante…

Confiada de su victoria, Hisahide levantó la Jumonji Yari y la hizo caer sobre Mitsuhide.

• ¡…No es bueno…!

La afilada cuchilla realizó un corte sin piedad hacia el suave cuello de Juubei Mitsuhide…

Sin embargo, Mitsuhide no perdió la vida.

• ¡¿Quién te dejaría salirte con la tuya?!

Entre Mitsuhide y Hisahide, una figura audaz se precipitó.

El corte de la Jumonji Yari fue bloqueado por una lanza larga.

Ante este repentino giro de los eventos, Hisahide no pudo evitar chasquear la lengua.

—Qué grosero. ¿Quién eres tú…?

• ¡Vice capitán del clan Oda, Sagara Yoshiharu!

—Intervenir en un duelo entre damas, qué despreciable.

• ¡Tú eres la despreciable! ¡¿Estabas engañando a Juubei con tus tonterías?!

—Oh, no estoy mintiendo. Nobuna–sama probablemente ya está muerta…

¿Por qué la Matsunaga Hisahide frente a él sabía sobre Zenjubou?, Yoshiharu no tenía tiempo para pensar en esa cuestión.

• ¡Todos! ¡Nuestro único propósito aquí es la cabeza de Imagawa Yoshimoto!

¡Maten a cualquiera que se entrometa!

Hisahide renunció al duelo y regresó a la caótica batalla.

Los soldados del ejército de Matsunaga volvieron a tomar sus lanzas y se precipitaron.

La batalla tomo su curso nuevamente.

—Esto no es bueno; si realmente luchamos, estaremos en desventaja. La diferencia en números es demasiado grande.

Debido a bloquear la Jumonji Yari, un rastro de sangre bajó por la mejilla de Yoshiharu.

• ¿Por qué estás aquí? —Mitsuhide se puso de pie tambaleándose y le preguntó a Yoshiharu.
• ¿Por qué…? Porque escuché que el Templo Kiyomizu está en un apuro… quiero decir, que está en peligro.
• ¡Maldito gorila! ¡Ahora no es el momento para que estés aquí! ¡Nobuna–sama está en la mira de Sugitani Zenjubou!

—Si hablas de Nobuna, ella ya está aquí.

• ¿Eh?

—En un principio, estaba listo para venir aquí solo y pedirle que volviera a Gifu para conseguir refuerzos, pero ella se negó; dijo que si hacía eso, no llegaría a tiempo. Parece que quiere salvarte ella misma sin importar qué.

• ¿Q-Qué está pasando?
• ¡Hablaremos más tarde, Juubei!

¡Bam!

Un rugido ensordecedor llegó desde el techo del salón principal del Templo Kiyomizu.

Fue el disparo de un arcabuz.

• ¡¿Nobuna–sama?! Era Oda Nobuna.

—… Ah… sí…

Ella seguía con vida. Y se encontraba ilesa.

Mitsuhide quería saber cómo había podido escapar, pero no podía pensar en esa cuestión.

Una energía ilimitada parecía salir de todo su cuerpo.

—Ufff… Lo hicimos, pero la diferencia en números es realmente preocupante. Esto no es bueno.

—Nobuna–sama. El que la situación esté de esta manera es todo por mí culpa. Por favor castígueme.

• ¡Podemos resolver eso después de que terminemos aquí, Juubei!

—… ¡Entendido!

—Resolveremos lo del concurso de especialidades la próxima vez. No mueras ahora, Akechi–si (shi).

Nobuna, quien había agarrado las pequeñas manos de Goemon para subir al techo, estaba disparando al enemigo con tres arcabuces como un espectáculo de circo, y la ninja estaba recargando sus armas a su lado tan rápidamente que sus manos parecían un borrón.

—… ¡Inuchiyo! ¡Hanbei!

Incluso Maeda Inuchiyo y Takenaka Hanbei que habían desaparecido hace tiempo estaban aquí.

Estas dos lolis se esforzaron para subirse al techo y luego asomaron sus cabezas detrás de Nobuna.

—… ¡Inuchiyo aquí! Tengo hambre…

• ¡Aunque es cierto que el takoyaki de miso es horrible, debemos derrotar a las tropas de Matsunaga primero!
• ¡Juubei! Por precipitarnos hasta aquí no tuvimos tiempo para volver a Gifu.

¡Aunque me da un poco de pena decirlo, nosotros cinco somos los únicos refuerzos!

• ¡Nobuna–sama!

—Por qué está aquí…—Mitsuhide murmuró, pero Nobuna solo se rio alegremente.

• ¡Juubei! ¡A partir de ahora, yo protegeré tu espalda, así que sigue adelante y libera tus habilidades! ¡Hoy es el día que el clan Akechi hará su marca en el mundo!

Sin embargo, la voz ominosa y seductora de Matsunaga Hisahide resonó de nuevo en los oídos de Mitsuhide.

Esto es un sueño. Todo es una ilusión. Solo estás soñando, lo que quieres soñar…

En cierto modo, el hechizo de fragancia de Hisahide es una forma de hipnosis que manipula los corazones de las personas.

—Sí… Esto… todo esto es una ilusión. Expulsé al Gorila y debido a mis horribles acciones, Nobuna–sama me odia. Maeda–dono y Takenaka–dono dejaron Kyo y me abandonaron… Por alguien egoísta como yo, Nobuna–sama nunca vendría al rescate con solo cinco personas. Yo, Juubei, solo estoy soñando, es una ilusión causada por la desesperación extrema…

Yoshiharu, que estaba a su lado luchando contra sus enemigos con una lanza larga, se volvió hacia Mitsuhide y le dio una fuerte bofetada.

• ¡Ouch! ¡¿P-P-Por qué me golpeaste?!

—En serio. ¡¿Juubei, por qué simplemente estás creyendo en una mentira tan evidente?! ¡Escucha, realmente fui capturado por Sugitani Zenjubou en Omi y luego fui usado como rehén para atraer a Nobuna!

—Y luego fuiste asesinado trágicamente, ¿no? ¡Así que ahora eres un fantasma, Gorila!

• ¡Te equivocas! ¡Inuchiyo y las demás nos rescataron a Nobuna y a mí en el último momento! ¡Esas tres no abandonaron Kyo por ti, salieron en busca de Nobuna porque no volvió!

—Lo haces sonar muy conveniente. ¡¿Cómo puede ser que tuvieran tanta suerte?!

• ¡¿Tengo alguna razón para mentirte?! ¡Inuchiyo estaba persiguiendo el olor de Nobuna, realmente nadie puede compararse con esa nariz de perro que tiene! ¡En cuanto a la bala que disparó Zenjubou, Hanbei–chan usó un talismán endurecido para bloquearla en el último momento! ¡Aunque Goemon tenía la intención de atrapar a Zenjubou, después de ver ilesa a Nobuna, él escapó diciendo “¡increíble, no me digan que Oda Nobuna fue bendecida por los dioses!” a pesar de que estuve atado a un poste durante todo ese tiempo y no tuve la oportunidad de actuar, en resumen, Nobuna no sufrió ninguna herida!
• ¡¿Aun así, cómo pueden precipitarse al Templo Kiyomizu con solo cinco personas en esta situación?! ¡Normalmente deberían encontrar refuerzos en el castillo Gifu y dejarme Kyo a mí…!
• ¡Ahh, cierto! Goemon se opuso a esto diciendo “¡Aunque es una molestia perder a Yoshimoto, siempre podremos encontrar otros candidatos a Shogun!”, pero Nobuna se opuso firmemente diciendo “Aunque Akechi Juubei Mitsuhide es un poco tacaña, ella es un sirviente importante que ha jurado cumplir mi sueño.

¡¿Cómo puedo darme por vencida así?!”, y también dijo, “¡Si algún día me sucede algo a mí, todo lo recibirá Juubei quien tiene el mejor estatus, talento y ambición!” En serio, esa chica, ella simplemente no puede endurecer su corazón en un momento tan crítico. ¡¿Qué clase de ama es esa?!

—… No… Cómo puede… Esto es un sueño…

Sí, esto es un sueño…es solo una ilusión…

el susurro ominoso del demonio Matsunaga Hisahide resonó de nuevo.

Debido a que era demasiado seria, esa sugerencia hipnótica fue increíblemente eficaz con Mitsuhide. El brillo en sus ojos desapareció gradualmente…

Ondeando su larga lanza, Yoshiharu siguió gritándole a Mitsuhide.

• ¡Es cierto que la vida es como un sueño! ¡Incluso yo he venido del futuro, por lo que no sé si realmente estoy viviendo en este mundo! Pero Juubei, el mundo ante tus ojos… ¡En el mundo que ves en este sueño, no estás sola! ¡Este es nuestro sueño! ¡Por favor escúchame, Juubei!…

Esa Nobuna siempre es muy dura con sus palabras, nunca es honesta, y siempre tiene una actitud ambigua. Realmente es alguien problemática.

Pero aunque nunca te lo dijo personalmente, en realidad ella te valora mucho.

Si hay alguien que realmente pueda entender ese sueño fugaz suyo en este mundo, aparte de mí que vine del futuro, solo puede ser otro genio de la misma época que Nobuna, tú, Juubei.

Pero después de todo yo no soy de este mundo. Así que no tengo el estatus para hablar. Así que si le sucede algo a esa chica, la única que puede reemplazarla eres tú…

Cuando Yoshiharu volvió en sí después de gritar con todas sus fuerzas, sus ojos ya estaban llenos de lágrimas.

• ¡No lo olvides! ¡Nunca lo olvides! Lo que este país, no ¡Lo que este mundo necesita, es a alguien como Nobuna! Yo vine del mundo 400 años en el futuro, así que mis palabras no pueden estar mal. Para este país, para su gente, incluso para el mundo, ella es alguien irremplazable. Por favor, Juubei. ¡Si sobrevives esto, pero alguna vez temes perder la dirección, piensa en este Templo Kiyomizu cubierto de sangre! ¡Graba en tu memoria la figura de Nobuna allí arriba disparando su arcabuz sin parar para salvarte…!

« ¿Por qué?».

¿Por qué el chico frente a ella la miraba con tanta intensidad y tristeza como si le estuviera rogando?

La Juubei Mitsuhide de ahora no podía entenderlo. Mitsuhide no lo sabía.

Después de que Nobuna rescató a Yoshiharu, él enterró en el fondo de su corazón la idea de “Juubei se rebelará un día, no deberíamos dejarla a su suerte ahora”, y decidió que nunca dejaría a Juubei Mitsuhide y Nobuna en manos del destino. Usaría sus propias manos para “cambiar la historia”.

En el “Incidente de Honnou–ji”, fue Akechi Juubei Mitsuhide quien atacó a su propio señor, Oda Nobuna, en el templo Honnou de Kyo, causando que Nobuna perdiera la vida en medio de las llamas rojas. Consciente completamente de esta historia, Yoshiharu se había decidido a usar sus propias manos para que ese triste futuro nunca volviera a suceder.

Pero Yoshiharu simplemente no sabía por qué Mitsuhide, quien admiraba tanto a Nobuna, se rebelaría.

No solo era Yoshiharu, nadie del siglo XXI fue capaz de determinar la razón exacta por la que Mitsuhide comenzó el “Incidente en Honnou–ji”.

Probablemente la propia Mitsuhide no lo sabía. Sin embargo, Mitsuhide entendía una cosa.

Sagara Yoshiharu no era del tipo que seguiría ciegamente a un amo.

Los sentimientos que tenía por Nobuna eran sin duda tan profundos como los de ella.

Sin embargo…

¿Exactamente por qué?

¿Por qué su pecho latía tan fuerte cuando miraba los ojos brillantes de Yoshiharu?

—Hehe… Pensé que Akechi–sama ya había caído bajo mi hechizo, pero parece que las palabras de este Saru–san contienen un poder mayor.

Sabiendo que ya no podía controlar a Mitsuhide, Hisahide finalmente ordenó un ataque total disparando flechas de fuego al salón principal que albergaba a Yoshimoto y Nobuna. En un instante, un gran incendio comenzó en el salón principal.

—Ahhh… Oda Nobuna–sama. Es todo gracias a que pudiste evitar el intento de asesinato de Zenjubou; ahora puedo presenciar tu verdadero yo con mis propios ojos… para ver si tienes las cualidades para ser el amo que seguiré de por vida.

Retirándose mientras combatían, Mitsuhide y Yoshiharu volvieron al salón principal.

• ¡Atreverse a ofrecer una recompensa por mi cabeza, tienes agallas, Matsunaga Danjo!

Mientras estaba en el techo mirando a la formación enemiga, Nobuna le señaló con los ojos a Inuchiyo y las demás que apoyaran a Mitsuhide y Yoshiharu.

• ¡Hachisuka Goemon, aquí!

Goemon apareció silenciosamente en el pasillo. Era aún más silenciosa que de costumbre, parecía que no quería morderse la lengua en esta situación.

• ¡Maeda Inuchiyo Toshiie, aquí!

Inuchiyo se bajó deslizándose cuidadosamente del techo sosteniendo su gran lanza y se unió a la batalla.

—… ¡Z-Z-Z-Zenki, Gouki, por favor!

Hanbei trató de bajar del techo medio temblando, pero finalmente se desplomó. Mientras lloraba, ella invocó a distintos Shikigami para tratar de ayudar.

Nadie sabía qué tipo de poderes poseían los Shikigami de Hanbei, pero al menos uno se reveló cuando de repente apareció una enorme formación hexagonal a través del patio que lanzó un torrente de agua para extinguir las llamas del templo.

Pero gracias a esto, Hanbei le había dado a Matsunaga Hisahide una razón para liberar su verdadero poder.

—Bueno, realmente no esperaba encontrarme con un onmyouji aquí. Parece que tendré que enfrentarme a ella con una fuerza igual.

Matsunaga Danjo Hisahide.

Una mujer conocida como la hechicera más fuerte. Para Yoshiharu y su grupo, era el peor enemigo posible.

… …

Frente a la oscuridad de la noche, mientras las flechas de fuego del ejército de Matsunaga luchaban contra los pilares de agua que los Shikigami invocaron, Hisahide voló hacia el pasillo del salón principal como si ignorara la gravedad.

Su objetivo era Takenaka Hanbei, quien sostenía firmemente sus talismanes incluso mientras tosía sin parar.

—Es una lástima que no pudiéramos encontrarnos antes. Tú debes ser el Dragón Oculto de Bodaisen de Mino, ¿verdad?

Al notar la ominosa aura demoníaca que Hisahide emitía, el pequeño cuerpo de Hanbei se estremeció mientras llamaba a Zenki y Gouki de vuelta a su lado.

—… Parece que… no eres una simple guerrera.

—Así es; aunque ahora soy budista y recibí el nombre de Matsunaga Hisahide, una vez fui una hechicera errante. Se podría decir que soy el némesis de los onmyouji.

—Hechiceros… personas que utilizan hechizos demoniacos diferentes al Qi Men Dun Jia, Shingon, y Vajrayana24, que son de otros países.

—Hehe… Al mirarte a ti, un Onmyouji que ha dominado este país desde el período Heian, apenas puedo controlarme. Solo porque no pueden entender los orígenes de nuestros hechizos, nos etiquetan como herejes, como demonios. Hemos sido discriminados como si fuéramos espíritus malvados.

24 Son corrientes religiosas e ideológicas, mas info Wiki-sama.